Capítulo 9: ¿Un buen día?

Bajó las escaleras con cuidado, tal parecía que nadie había despertado, pero se dio cuenta que se equivocaba cuando entró a la cocina y vio a Tiffany, vestida con una camisa manga corta blanca y un short, sentada en el mesón, tomando café y leyendo el periódico. Se hubiera quedado mirándola un buen rato, pero en ese momento entró María y la vio. 

-¿Desea una taza de café, Señorita Kim?-preguntó María, con una sonrisa

Taeyeon no contestó, porque en ese momento vio a Tiffany voltear, mirarla un segundo y al otro sonreírle. Aquella sonrisa le movió entero el piso a la morena, casi le bajó las medias aunque no tuviera unas puestas en ese momento y le hizo sonreír también.

-Buenos días, Taeyeon -saludó Tiffany. 

-Buenos días-susurró Taeyeon, acercándose.

-Siéntate. No le contestaste a María si querías café-dijo Tiffany, dejando el periódico a un lado por un momento. 

-Ah, sí. Café está bien-aceptó Taeyeon, agarrando la taza que le alcanzaba María. 

-¿Y tú?-preguntó Tiffany, mirándola fijamente. Parecía que quería leerle la mente a Taeyeon. 

-¿Yo qué?-preguntó Taeyeon, sin entender.

-Dijiste que el café está bien.-explicó- ¿Y tú? ¿Estás bien?-preguntó. 

-Sí, claro. Gracias por dejar que me quede aquí.

-Cuando gustes-respondió Tifffany, volviendo la atención a la lectura del periódico. 

Taeyeon se le quedó mirando un rato, pensando-“¿Cómo no se da cuenta que me gusta? Noah se dio cuenta y sólo es un niño” –siguió pensando así, un rato, hasta que vio que Tiffany volteó y la miró interrogativamente. Taeyeon apartó la mirada, pero sabía que de todas formas ella lo había notado.

-¿Ocurre algo?-preguntó la pelirroja.

-No.

-Me estabas mirando. ¿Deseas algo?-insistió.

“Sí, besarte”

-No-volvió a negar, enrojeciendo y tomando un poco de café.

-Alex debe estar por despertar, si por él es quien querías preguntar.

“¡No es Alex, joder!” 

-No era eso, pero gracias por decirme-

-Entonces dime lo que quieres. Me estabas mirando y sé que algo querías pedirme.

“Si sigues, no respondo” 

-No te estaba mirando.

-Sí, lo hacías. ¿Quieres comer algo?

“Comerte la boca de un…tranquila, Taeyeon, tranquila” 

-No tengo hambre.

-No puedo entenderte-admitió Tiffany, confundida.

“Ni yo tampoco entiendo cómo me aguanto”

-En serio, Tiffany, no quiero nada. Estoy bien así. Gracias-respondió Taeyeon, atreviéndose a mirarla para que la pelirroja se calmara y dejara de preguntarle cosas. No quería hacer algo de lo que luego pudiera arrepentirse. Tiffany la miró también y pareció convencerse, aunque aún así le parecía que había algo más que no le decía. 

-Está bien. Yo voy a…

-Señorita Ste…

-Tiffany, María, Tiffany… ¿Qué pasó?-preguntó la pelirroja, mirando a la señora. 

-La llama el joven Jongwook-respondió María, entregándole el teléfono a Tiffany.

-Gracias, María…Buenos días, Jong…

Taeyeon tomó su taza ya vacía y fue al fregadero para lavarlo, mientras Tiffany hablaba por teléfono.

-…Me parece genial, pero no sé, Jong. Hace tiempo que no practico…lo tengo guardado en un baúl en mi habitación…no estoy segura que pueda…está bien, me descubriste, si puedo, pero…lo que sea, Jong, luego hablamos…chau…

Tiffany colgó y sonrió de inmediato, Taeyeon notó que en su mirada había un brillo especial, parecía como si le hubieran anunciado que la navidad llegaría pronto.

-Llevo mucho tiempo sin…-Tiffany se detuvo al ver la mirada de confusión de Taeyeon y supo que no sabía de lo que hablaba.-Yo solía practicar equitación, dejé de hacerlo cuando el trabajo comenzó a hacerse cada vez más pesado-explicó 

-Suena interesante-dijo Taeyeon, con una sonrisa-¿Te gusta mucho?

-Sí. Papá me llevaba cuando era pequeña, ahí me empezó a gustar y comencé a asistir a clases junto con Jongwook, a quien también le gusta. Me…me calmaba mucho cuando…me sentía triste y…

-¿Te sientes triste ahora?-preguntó Taeyeon, sin pensarlo, clavando su mirada en los ojos de Tiffany.

-No, no, ¿Por qué habría de sentirme triste? Estoy…bien-replicó Tiffany, como intentando convencerse a sí misma de eso que decía.

-Pues no parece, si te sientes triste deberías ir-dijo Taeyeon.

-¿Qué sabes tú?-preguntó, Tiffany, a la defensiva.

-No lo sé, dímelo tú. Tú eres a la única a la que veo aquí que cuando escuchó esa proposición de ir a hacer algo que le gusta, puso cara como si le hubieran anunciado que se adelantaba navidad.

-¿Ahora también lees las expresiones faciales de las personas?-preguntó Tiffany, sarcásticamente. 

-Sólo las tuyas y tú rostro me dice que quieres ir, pero que te da miedo-dijo Taeyeon, saliendo de la cocina, pero la voz de Tiffany la detuvo.

-¿Miedo? Tienes que estar bromeando, yo no tengo miedo.

-¿Entonces por qué no vas?-indagó Taeyeon, volteando de nuevo para verla.

-Porque no quiero.

-Tienes miedo-afirmó Taeyeon, con una sonrisita. 

-No tengo miedo. No quiero ir, es muy diferente a tener miedo.

-Tienes miedo-repitió Taeyeon, todavía con la sonrisita. Tiffany comenzaba a sonreír, pero ni ella misma sabía por qué. 

-No tengo miedo, Kim.

-Si no tienes, irás y le dirás a tu amigo que te tome fotos y me las enseñarás luego.

-No quiero ir y no tengo miedo.

En ese momento Taeyeon lo recordó. Lo recordó y decidió probar a ver si funcionaba. No tenía nada que perder. Así que lo hizo. 

-No hagas eso, Taeyeon, no va a funcionar conmigo.-pidió Tiffany, viendo como Taeyeon le hacía pucheros y ponía ojitos de perrito abandonado

-Anda Tiffany, di que sí, sé que quieres ir-suplicó Taeyeon, volviendo a hacer pucheros. 

-No quiero…no… ¡Argh ESTÁ BIEN!-se rindió la pelirroja, haciendo un gesto de fastidio. Taeyeon agradeció mentalmente a Noah. 

-Bueno, entonces ya sabes, te vas a tomar fotos y me las mostrarás-dijo Taeyeon, sonriendo. 

-No tomaré fotos-declaró Tiffany.

-¡Era un trato!-replicó Taeyeon, incrédula.

-Yo no hice ningún trato en ningún momento contigo-repuso Tiffany, sin mirarla y lavando su taza de café. 

-¿Entonces como me demostrarás que no tuviste miedo de ir?

-Yo no tengo que demostrarte nada. Pero igual sabrás que fui-explicó Tiffany, con una voz de suficiencia. 

-¿Cómo?

-Tú irás conmigo.

-¡¿Qué?!

-----------------------------------------------------

Apenas estacionó y allí estaba Jongwook esperando. Vestía unos pantalones de montar blancos. Una chaqueta roja, unas grandes botas negras y en su cabeza llevaba un casco negro. Al ver a Tiffany, sonrió y la saludó con un abrazo, luego se acercó a Taeyeon y le dio la mano, notando que llevaba unos guantes blancos. 

-¿Y bien? ¿Te decidiste?-preguntó Jong, con un tono burlón-Hoy te haré papilla, Hwang. 

Taeyeon vio a Tiffany lanzar una sonrisita casi cínica y alzó las cejas.

-Ya veremos, Choi. No cantes victoria-repuso Tiffany. Jongwook soltó una risita y señaló hacia un punto cerca de un establo, luego le guiñó un ojo a Tiffany y se fue caminando en sentido opuesto a donde había señalado. 

-Vamos-apremió Tiffany. La pelirroja llevaba un gran bolso negro y un casco bajo el brazo.

Llegaron a donde les había señalado Jongwook. Tiffany le dijo a Taeyeon que esperara un momento, porque iría a cambiarse.

Taeyeon aprovechó la ausencia de la pelirroja para observar a su alrededor. Todo estaba cubierto de tierra y donde se encontraba era un gran establo, excepto que no había animales.

Salió un momento para mirar encima de una cerca y vio lo que era donde se hacían las prácticas. Había altos obstáculos, algunos de acero y otros de madera, pintados de rojo y blanco. 

Se dio cuenta que había pocas personas practicando. Estaba una chica un poco alejada, saltando un obstáculo con su caballo, un chico quien en ese momento se bajaba del caballo y lo llevaba hacia otro establo más alejado y un niño como de la edad de Mike, saltando también obstáculos. 

-¿Qué te parece?

Taeyeon volteó bruscamente por el susto, pero enseguida la boca se le abrió de sorpresa. Tiffany iba vestida similar a Jongwook, excepto que ella se veía muchísimo mejor. El pantalón de montar blanco era casi ceñido, la chaqueta era negra en lugar de roja y el casco lo tenía todavía bajo el brazo, porque en ese instante intentaba ponerse los guantes. 

-¡Hey! Taeyeon, Te pregunté ¿Qué te parece?-repitió Tiffany, con una sonrisita. 

-Ahh…te ves muy bien-murmuró Taeyeon, volviendo en sí y sonriendo también. 

-¿En serio?-preguntó Tiffany, con gesto de confusión y luego encogió los hombros y sonrió-Bueno, gracias, pero yo te preguntaba por las instalaciones del club.

Taeyeon pidió internamente que la tragara la tierra en ese momento, ¿Qué mala costumbre era esa la de los hermanos Hwang de no hacer preguntas correctamente y especificar lo que quieren decir?. 

-Oh, sí, están muy bien.-dijo finalmente, Taeyeon. 

-Aquí venía con mi padre los fines de semana y la pasábamos…

-¡Stephanie Hwang! ¡Qué sorpresa tenerte por aquí!

Un hombre de cabello castaño, uno que Taeyeon reconoció como el que estaba hacía un rato llevando su caballo al establo se acercó y miraba a Tiffany con una sonrisa, que la pelirroja no respondió. 

-Ryu, ¿Cómo estás?-saludó Tiffany, con poco entusiasmo. Taeyeon notó que parecía caerle mal.