Volver a casa

Lo que me gusta de ti (Adaptación TaeNy)
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Capítulo 81: Volver a casa

Un toquecito en el hombro, pero no le prestó atención, vino otro y otro más y tuvo que rendirse y quitarse de la cabeza la almohada y las sábanas. Miró a su alrededor y luego al origen de que ahora estuviera despierta, bostezó un poco y sonrió.

-Hey, amigo… ¿Qué pasa?-preguntó, mirando a Noah.

-Es ese niño, Tiffany-dijo el chico, muy fastidiado-No me deja dormir y no hace más que moverse en la cama de abajo y hablar y hablar dormido, le lancé una almohada para que se callara y se quedara quieto, pero no me hace caso. ¡Me está volviendo loco!

Frunció el ceño y rápidamente se incorporó, colocándose las pantuflas y la bata para salir de su habitación, seguida de cerca por Noah.

Entró a la habitación del chico, donde ahora compartía con Seth y se acercó a la cama de abajo donde estaba durmiendo el niño. 

Efectivamente, estaba moviéndose y murmuraba cosas ininteligibles, se arrodilló y tomó la mano del niño; notando como temblaba y al tocar su frente sintió que ardía en fiebre, tocó las sábanas y su pijama y estaba sudando. Eso hizo que le saltara el corazón de la angustia.

-Seth…cielo…-lo llamó, acariciando su mejilla caliente-cariño, ¿Me escuchas?... Seth…

-Le escuché hace rato hablar de un tal Charlie-murmuró Noah, a su lado-¿Llamo a nana para que venga? ¿Traigo el termómetro?-preguntó.

-No, no molestes a María. Debe estar cansada. Trae del escaparate que está al lado de la nevera, unas aspirinas infantiles, el termómetro y un vaso de agua-pidió Tiffany, tomando en brazos al tembloroso Seth-Me lo llevaré a mi habitación. 

-Rony…hay que salvarlo…Charlie no…no...no..Rony…yo te voy a buscar…

El cortísimo trayecto le hizo notar que realmente estaba empapado en sudor y que la fiebre era bastante alta que le hacía delirar y temblar. Lo recostó en su cama y corrió hacia el baño para buscar una toalla, la cual mojó con agua y sentándose al lado del chico, se la colocó en la frente. 

-Niña Tiffany…

Volteó y vio a la nana entrar a la habitación con un termómetro y una caja de aspirinas infantiles. A su lado estaba Noah también. 

-Noah, te dije que no molestaras a…

-No, escuché unos ruidos en la cocina y cuando fui a averiguar, vi al niño Noah y me dijo que estaba buscando un termómetro y unas aspirinas que usted le había pedido-intervino la nana, acercándose y colocando las cosas encima de la mesita.

-Sí, Tiffany, la próxima vez no me acuses-repuso Noah, cruzándose de brazos.

-Lo siento, de verdad-se disculpó la pelirroja, dándole una sonrisa-Si quieres, puedes ir a dormir…

-No, no, yo me quiero quedar a cuidarlo contigo, Tiffany-dijo Noah, sentándose en la otra esquina de la cama.

-Pensé que tenías sueño-dijo Tiffany, acomodándole la toalla de la frente a Seth.

-Tenía, pero prefiero quedarme a cuidar contigo a pa…Seth.

Tiffany notó la corrección que había hecho su hermano y le pareció saber a qué se refería. La nana le pasó un pequeño comprimido de aspirina infantil y el vaso de agua, mientras que con cuidado intentó despertar al chiquillo convaleciente, que ya había dejado de temblar y poco a poco se iba calmando. 
Vio a Seth abrir los ojos muy despacio y al ver a Tiffany, sonrió.

-Tiffany…

-Hey…tienes fiebre-susurró la pelirroja, acariciando su cabello-Necesitas tomarte esto para que se te quite. 

El chico miró hacia el vaso y luego miró a su alrededor, como si estuviera perdido y buscando a alguien. Se incorporó lentamente y asió el vaso que le entregaba la pelirroja, al igual que la pequeñísima pastilla y llevándosela a la boca, bebió del vaso; con su mirada siempre fija ahora en Noah, quien tampoco rompía la conexión. 

-¿Necesita algo más, niña Tiffany?-preguntó la nana.

-No, María, gracias. Puedes ir a dormir-respondió Tiffany.

Seth le entregó el vaso a Tiffany y se recostó en la cama de nuevo, mirando ahora hacia el techo. La pelirroja notó que parecía aturdido o que no parecía él mismo, no sabía decir si era por la fiebre, por el sueño o por algo más.

Noah se removió a su lado y se acercó a Seth, mirándolo con curiosidad. El pequeño de ojos marrones lo notó y le sonrió con afabilidad, para luego señalar un rincón a su lado.

-¿Quieres ponerte a mi lado, Noah?-preguntó él. Noah lo observó detenidamente, como pensativo, luego de unos segundos sonrió y se acostó a su lado. 

Tiffany recordó en ese momento el detalle que tenía su padre cuando todos sus hijos llegaban y asaltaban la cama donde estaban él y su madre viendo la televisión y les sonreía, a la vez que los invitaba a colocarse a su lado para ver una película. 

Noah solía ser el más unido a Charles y el que siempre discutía por ponerse al lado de él. El padre lo resolvía diciéndole “¿Quieres ponerte a mi lado, Noah?” y el pequeño pelirrojo de 4 años sonreía triunfador. 

Vio que poco a poco se iban quedando dormidos y se acostó a su lado, cobijándolos antes y dándole un beso a cada uno en la frente.

Ya podría en la mañana preguntarle a Seth, qué era lo que había pasado con Rony y Charlie. Sabía que ahora él no recordaba.
………………………………………………………………………………………………………

Colgó con la desilusión en su corazón y recostó la cabeza de la ventanilla, mirando los demás autos pasar afuera. Sólo habían estado un par de horas en Budapest, Hungría para una presentación y de ahí se fueron de una vez en avión, un viaje de unas 3 horas, hacia Atenas, Grecia; donde estaban ahora.

Repasó en su mente los compromisos que tenía ese día: una pequeña firma de autógrafos en una tienda de discos, una sesión de fotos, una reunión con su club de fans, el soundcheck y finalmente la presentación en el Great American Music Hall. No era mucho, pero sabía que sería igual de agotador y le dejaría unas enormes ojeras al día siguiente, por lo que los maquilladores tendrían que batallar para disimularlas. 

Lo único que la aliviaba en cierto modo, era que estaban en Atenas y por ende sentía que no estaba demasiado lejos de Seúl, aún así no dejaba de pensar en lo mucho que le gustaría estar en ese momento con Tiffany y despertar a su lado, quedarse velando sus sueños y acariciarla lentamente mientras lo hacía.

-¡Taeyeon!-la llamó Heechul-Regresa a la realidad, hemos llegado. 

Miró hacia afuera y efectivamente vio que la van ya se había detenido y que ya los demás salían, a la vez que Kwang y Leeteuk la esperaban para escoltarla. 
Salió con cuidado y se dio cuenta que estaban en un estacionamiento, por lo que por primera vez, no tenía que cuidarse de que la rasguñaran los fans histéricos por tocarla o llamarla. 

-Tenemos a partir de ahora…1 hora para que vayamos a comer, antes de llegar a la tienda de discos-dijo Heechul, viendo su reloj-Por favor, no se separen y Taeyeon…-la morena lo miró-Por amor a Dios, quita esa cara, porque asustarás a tus fans. Sonríe.

Taeyeon esbozó una enorme y fingida sonrisa que se borró cuando su manager dio media vuelta y pudo sacarle la lengua a sus espaldas. Escuchó una risita y al voltear, se fijó que había sido Leeteuk, quien al verse descubierto por la morena se sonrojó y apartó la mirada, fingiendo que tosía y con mucha seriedad, mientras se arreglaba y sacudía varias pelusas inexistentes en su traje negro. 

-Hey, Tae…

-Kangta…

-¿Dormiste encima del televisor?-preguntó Hyunsuk, uniéndoseles al igual que Jinho a su lado-Porque te traes una cara…

-JA JA, graciosos, sólo…estoy algo cansada, es todo-respondió Taeyeon, caminando lentamente.

-Últimamente estás muy cansada. Creo que Heechul te está explotando mucho. Cuando comiencen las vacaciones deberás reponerte bastante-intervino Jinho, pasando su brazo por el hombro de la morena.

-Supongo…

-¿A dónde vas a propósito?-preguntó Kangta-Seguro Tiffany y tú tienen algo planeado ¿No?

Entraron al ascensor, mientras Heechul iba hablando por su celular y cuadrando con los demás guardaespaldas que esperaban a la entrada del restaurante para que nadie accediera mientras ellos comían.

-Pues no sé, tenía pensado Bariloche, Argentina con Tiffany, pero…no hemos hablado nada, por lo que tendré que esperar a que estemos juntas, por si ella tiene pensado otra cosa-respondió Taeyeon, después de pensarlo un rato.

Entraron a un local bastante grande y que estaba vacío, pero afuera estaban unos 6 guardaespaldas más que vigilaban todo, le perturbó un poco este hecho porque era como si estuvieran protegiendo al Presidente de Seúl, en lugar de una simple humana y mortal como ella misma se sentía. 
Ocupó uno de los asientos cerca de una esquina donde había una pequeña fuente de piedra y que al sacar agua, era bastante relajante el sonido. 

-¿Qué van a ordenar?-preguntó el mesero, fijándose en Taeyeon especialmente. 

-Una cama con bastantes almohadas, por favor-pidió Taeyeon, sin pensar.

Todos en la mesa rieron, incluso pudo ver como Leeteuk, que estaba en la mesa de enfrente con Kwang, se había tapado la boca con la mano para que no se viera que reía. El mesero también había reído, pero más disimuladamente, el único que no sonrió siquiera fue Heechul.

-Estás de una graciosidad hoy-dijo él, sarcásticamente. 

-Gracias, es un halago-siseó Taeyeon, agriamente.

-Una Coca-Cola para mí, por favor-pidió Hyunsuk.

-Y para mí-pidieron Jinho y Kangta a la vez. 

-Un Redbull-pidió Heechul-¿Y tú, Taeyeon?

Taeyeon miró la lista de bebidas en el menú sin saber qué tomar, pero para disimular pidió lo primero que se le cruzó a la vista. 

-Un…batido de chocolate, con crema, chispas de chocolate, una barquillita de esas de pirulín, una cereza encima y la sombrillita, gracias-pidió, entregándole el menú al mesero, quien rápidamente escribió todo en su libreta.

-Enseguida está-dijo el mesero.

La morena se fijó que Kwang y Leeteuk no habían pedido nada y estaban en la mesa de enfrente, hablando muy bajito entre ellos. Miró a Heechul y a los chicos que estaban muy entretenidos hablando y se levantó para acercarse a sus guardaespaldas. 

-Hey…-saludó-¿No van a pedir nada ustedes?

-No, Tae, estamos llenos-dijo Kwang, tocándose el estómago.

-¿De qué? ¿De aire?-preguntó Taeyeon, sarcásticamente y alzando una ceja.

Kwang sonrió brevemente, pero Leeteuk casi se ahoga de la risa. Taeyeon miró inquisitivamente a Kwang, como preguntándole con la mirada qué era lo que le ocurría al chico, el enorme guardaespaldas se encogió de hombros y no dijo nada. Al componerse Leeteuk y darse cuenta que Taeyeon y Kwang no habían reído y en lugar de ello lo miraban como si estuviera trastocado, se puso serio y carraspeó ligeramente, enrojeciendo. 

-Lo siento…he…recordado un chiste-dijo Leeteuk, bajando el rostro un poco para que no lo vieran. 

-Sí, vale…ya nosotros comimos, Tae-dijo Kwang-Antes de salir del hotel.

-Umm… ¿Y cómo está tu madre? No te había preguntado…

-Ah, está mucho mejor, gracias a Dios-contestó Kwang, sonriendo-Mi hermana se ha tomado unos días y la está cuidando ahora. 

-Eso es genial, qué bueno que esté bien-dijo Taeyeon, muy sincera. 

-Aquí tiene, Señorita Kim-dijo el mesero, colocando enfrente de ella un vaso alto de batido de chocolate con todos los aditivos que había pedido. 

-Gracias…

Miró el vaso y con solo verlo y detallarlo, se sintió llena. Probó un poco y sabía bastante bien, pero sabía que no se lo bebería todo, así que lo dejó hasta la mitad y lo dejó en el medio de la mesa.

-Si alguno de ustedes se lo quiere beber, ahí lo tienen-dijo Taeyeon.

Un rugido se escuchó por todo el local y al fijarse en la puerta, estaban los de seguridad lidiando con unos fanáticos que ya habían descubierto que Kim Taeyeon estaba ahí comiendo.

Ella al verlos, les saludó con la mano y una sonrisa, provocando de inmediato una ola de chillidos y gritos.

-¿Cómo descubrieron que estabas aquí?-preguntó Hyunsuk a Taeyeon, desde la otra mesa.

-Magia-repuso Kangta, mientras le lanzaba un beso a una chica que gritaba su nombre como loca.

Taeyeon vio que Heechul le hacía una seña a Kwang para que saliera a ayudar a sostener a las personas que empujaban por entrar y éste salió diligentemente a colaborar.

Poco a poco notaron que la situación se estaba volviendo insostenible, porque la gente empujaba con mucha fuerza y sólo había 7 guardaespaldas. Leeteuk iba a levantarse para acudir en ayuda, pero Heechul lo hizo primero y lo sostuvo.

-No, ya vamos a salir de todas formas-dijo él-De haber sabido que este sitio era con vista transparente no habría venido.

-Intentaremos cerrar, señor Heechul, para que coma tranquilo-intervino el gerente del restaurante.

-No, no, muchas gracias. Aquí tiene…-dijo Heechul, entregándole un dinero-Quédese con el cambio. Nosotros tenemos que irnos ya. 

-¿Vamos saliendo primero?-preguntó Jinho-Por la puerta trasera, digo.

-Sí, sí, ahí hay otros guardaespaldas. Tengan cuidado.

Los chicos salieron corriendo y los gritos de las personas se hicieron más intensos, al igual que su manera de empujar. 

-Salgan ustedes ahora. Protege bien a Taeyeon, Leeteuk, por favor-pidió Heechul, acercándose a la puerta.

Leeteuk tomó por el brazo a Taeyeon y la condujo por la puerta trasera, a la vez que un rugido mucho más estruendoso se escuchó y supieron que los fans habían logrado tumbar la valla de seguridad de los guardaespaldas. Leeteuk cerró la puerta y corrió detrás de Taeyeon, ya iban a salir hacia el ascensor para bajar directamente al estacionamiento, pero vieron que 2 personas entraron de frente y al ver a Taeyeon, gritaron como locos y antes que Leeteuk pudiera sostenerlos, rodearon a la morena para pedirle un autógrafo.

-¡Por favor, Taeyeon! ¡Un autógrafo! ¡Sólo uno, hemos estado siguiéndote por todos los lugares en los que has estado desde que comenzaste el tour!-dijo la chica, muy desesperada y con lágrimas en los ojos.

-¡Somos tus más grandes admiradores, Taeyeon! ¡Por favor! ¡Por favor! ¡Por favor!

-Eso mismo les pido yo, chicos, por favor-intervino Leeteuk, colocándose en el medio entre los fans y la morena-Taeyeon tiene que salir ahora. Ella firmará luego en la tienda de discos. 

-No te preocupes, Leeteuk, yo les firmo-dijo Taeyeon, apartando con cuidado al joven guardaespaldas

-¿Estás segura?-preguntó él, preocupado-Heechul…

-Que se joda Heechul... ¿Dónde firmo, chicos?

La muchacha le enseñó sus zapatos converse y le pidió que le firmara en la punta de éstos, al igual que en el CD. El chico le pidió que le firmara una guitarra que llevaba y en su frente también; luego cada uno le entregó un regalo a la morena que consistió en un peluche y un disco de Sigur Rós de parte del chico, que le hizo sonreír al recordar a Tiffany. 

-Gracias, en serio-murmuró Taeyeon, con una gran sonrisa-Muchas gracias.

-Apúrate, Tae…-pidió Leeteuk, desesperado.

Otro rugido y luego los gritos de Heechul que venía corriendo hacia ellos. Leeteuk iba a coger por el brazo a la morena para poder llevársela de ahí, pero la chica cogió desprevenida a Taeyeon y tomándola por el rostro, le estampó un enorme beso en la boca, al mismo tiempo que la mordió hasta hacerla gemir de dolor.

Leeteuk apartó a la fanática loca y tomando en brazos con gran agilidad a Taeyeon, se la llevó corriendo de ahí, a la vez que Heechul entró en ese instante tras ellos. Seguidamente venía una turba de fans gritando. 

Taeyeon apenas podía ver a su alrededor, porque Leeteuk corría bastante rápido. El labio lo sentía adolorido y quiso llorar, por lo que unas pequeñas lágrimas salieron por las esquina de sus ojos.
Su guardaespaldas la introdujo con rapidez en la van, donde ya todos esperaban para irse de ahí. El auto se encendió y arrancaron a toda velocidad, en el momento justo que los fans alocados se estrellaron en la van y comenzaron a golpearla, pidiendo ver a Taeyeon.

-Joder…-gimió Taeyeon, tapándose la boca.

-Déjame ver eso-pidió Hyunsuk, quitándole la mano para poder mirar-¡Demonios!, ¿Qué te pasó? ¿Te querían chupar la sangre o qué?

-Una fan loca que me pidió un autógrafo-musitó Taeyeon, apenas moviendo los labios.

-¡¿Y así te agradece?! ¡De verdad que es una psicópata!-replicó Jinho, asqueado-tendrá complejo de vampiro o qué se yo qué cosa…

-¡¿Qué demonios estabas haciendo tú, Leeteuk?!-reclamó Heechul, cabreándose-¡Te dije que la cuidaras!

-¡Lo sé, lo sé, lo siento! Ha sido mi culpa, fui muy lento…

-Heechul, por favor…-murmuró Taeyeon, fastidiada-Fue negligencia de mi parte…

-¡No digas que fue negligencia tuya! ¡Le pedí, le exigí a este estúpido que debía mantenerte bien! ¡Mira lo que te ha pasado ahora!

-¡¿Qué?! ¡Cállate la boca, Heechul! ¡No sabes cómo ocurrieron las cosas!

-Taeyeon, por favor, no te preocupes…déjalo así, tiene razón…

Taeyeon miró a Leeteuk, incrédula y después a Heechul.

-¡Esto fue culpa mía! ¡¿Vale?! ¡Yo fui la que decidió darles esos autógrafos a esos chicos! ¡Así que la culpa y el regaño son para mí!

-Tae…

-¡Cierra la boca, Leeteuk!-espetó Taeyeon, enojada-¡Yo me detuve a darles los autógrafos y es responsabilidad mía lo que me haya pasado, así que tú también cállate, Heechul! ¡No quiero escucharte más!

Un intenso y enorme silencio se vació alrededor de ellos, Taeyeon se cubrió de nuevo la boca con la mano y miró por la ventana, intentando calmarse de la bronca que tenía y el dolor que sentía.
Dieron una vuelta por alrededor de 20 minutos, muy cerca del sitio donde se firmarían los autógrafos. Heechul había propuesto cancelarlo, pero Taeyeon se negó rotundamente diciendo que podría controlarlo. Al estacionar, ya no estaban los fanáticos histéricos y al parecer ya estaban arriba esperando. Heechul y todos los demás salieron de la van, pero cuando iba a hacerlo ella, Leeteuk la detuvo, sonrojándose. 

-Taeyeon, yo…lamento mucho todo esto. Debí…era mi deber preservar tu bienestar y…

-Cállate, Leeteuk. Te dije que estaba todo bien…

-No-negó Leeteuk, con firmeza-Heechul tiene razón…

-Leeteuk…

-Por favor, acepta mis disculpas…-suplicó-Por favor…

Se atrevió a mirar a sus ojos llenos de arrepentimiento y supo que si no le decía que sí aceptaba, no se quedaría tranquilo.

-Está bien, las acepto-respondió Taeyeon, buscando bajarse de la van, pero Leeteuk volvió a detenerla tomándola por el brazo, pero enseguida la soltó.

-Lo siento…sólo quería…darte esto-dijo él, sacando de su bolsillo un paquete nuevo de pañuelos. La abrió, sacó uno y se lo entregó-Son absolutamente nuevos y antisépticos, no los había abierto así que puedes estar segura que no está sucio. 

-¿Para qué es…?

-Para que te lo pongas en el…labio-dijo él-Luego cuando termine esto, seguro Heechul te llevará a revisarte eso, se te puede infectar.

-Espero que no…

-¡Demonios, Taeyeon! ¡Apúrate!-reclamó Heechul, histérico del otro lado de la van. 

-Gracias-murmuró Taeyeon, sonriendo-Mejor vamos.

-Sí.

………………………………………………………………………………………………………

Salió del baño y se fijó que Seth y Noah seguían durmiendo o por lo menos eso fue lo que creyó, porque cuando abrió la puerta de su armario para buscar algo qué ponerse, la voz de Seth le habló fuerte y claro.

-¿Cómo he llegado aquí?

Tiffany salió del armario y miró al chico que ya estaba sentado en la cama y viendo a su alrededor, parecía perdido.

-Has tenido fiebre anoche y has estado delirando. Te traje acá para vigilarte-contestó Tiffany, acercándose a él y tocando su frente-¿Cómo te sientes?

-Como si me hubieran golpeado-respondió el niño, malhumorado-Me siento mal.

Tiffany sabía que no se refería a mal físico, tomó sus manos y las sintió muy frías, así que lo abrazó y él comenzó a llorar. La pelirroja lo sostuvo lo mejor que pudo para que se calmara, le dolía escucharlo llorar y hacía que le creciera un enorme nudo en la garganta.

-Todo estará bien, hijo-susurró, suavemente-pero quiero que me digas qué es lo que soñaste anoche. Necesito que me lo digas ¿Entiendes?-pidió, ahora tomándolo por el rostro para que él la viera y secándole las lágrimas.

-Vi a Rony…-musitó, volviéndosele a llenar los ojos de lágrimas-quiero saber dónde está. 

………………..

-¡Myungsoo! ¡Por fin! ¿Cómo estás?...qué bien, yo también, pero te llamo porque necesito que me averigües en alguno de los hospitales de Roma, Italia si hay algún chico con las descripciones que te voy a dar…Sí, un chico, como de unos 12 ó 13 años…ajá…tiene el cabello muy corto y oscuro…blanco… ¡Sí, sé que hay muchos con esa descripción, pero por favor, inténtalo!... ¿Su nombre? Es Rony, pero no creo que lleve identificación…Puede estar herido, que lo hayan encontrado en la calle y que lo hayan ingresado… Sí… Muchas Gracias, Myungsoo, llámame si lo encuentras…por favor, gracias.

Colgó y vio a su asistente para enfrente, quien le entregó los respectivos documentos para firmar de todos los días y salió sin decir ninguna palabra. Tiffany tomó su celular de nuevo y volvió a intentar llamar a Taeyeon, tal como había estado haciendo desde que saliera de la casa y ella no contestara. Sabía que debía estar ocupada, pero necesitaba hablar con ella.
Esperó los tonos y de pronto, su voz, la trajo a la realidad.

-Tiffany, amor, estaba pensando en ti justo ahora-dijo Taeyeon, emocionada. 

-Y yo que pensaba que me habías olvidado, ¿Cómo te trata Grecia?-preguntó Tiffany, sonriendo, abriendo la carpeta y comenzando a firmar cada uno.

-Muchos fans locos e histéricos, estoy en una de firmar autógrafos ahora ¿Quieres escucharlos?

-Vale, vale, a ver…

“¡Chicos, estoy hablando con mi novia Tiffany, mándenle saludos!”-gritó Taeyeon y de pronto un rugido se escuchó al fondo, al igual que varios pitidos y aplausos. Tiffany comenzó a reírse al imaginarse aquello. 

-¿Los escuchaste?-preguntó Taeyeon, poniéndose al celular de nuevo.

-Sí, ha de estar eso bien lleno-dijo Tiffany, sorprendida.

-La cola da vuelta en la esquina, así que supongo que aquí estaré por unas 2 horas más. Ya me duele la mano.

-¡2 horas!-exclamó la pelirroja, escandalizada-Debes decirle a Heechul que te de un descanso. Te puede dar el síndrome del túnel carpiano. 

-Tantas cosas que me pueden dar ahora…

-¿A qué te refieres?

-Una fan loca…le dí un autógrafo cuando estaba saliendo de un restaurante y me ha pillado desprevenida al morderme-contestó Taeyeon, pesadamente. 

-¡¿Qué?!-replicó Tiffany, molestándose-Pero… ¿Por qué? ¿Estás bien?-preguntó, preocupada.

-No sé por qué, estaría loca. Y estoy bien, no te preocupes…sólo el labio adolorido, pero es…

-¡Y en el labio! ¡Te mordió en el labio! ¡¿Quién se ha creído?!

-Tranquilízate, Tiffany. Fue algo mi culpa, por entretenerme dándole el autógrafo y no salir corriendo cuando Leeteuk me pidió que lo hiciera-repuso Taeyeon.

-Tus fans de Atenas han de tener complejo de vampiro-murmuró Tiffany.

-Eso mismo dijo Jinho, pero…hay una sola persona que me gusta que me muerda-susurró Taeyeon, muy bajito. Tiffany sabía que en ese momento estaba sonriendo.

-¿Ah sí? Lo dices como si son muchas personas las que lo han hecho-la quiso picar Tiffany.

-Fany, tú sabes que eres la única…y bueno, la fan esa psicópata, pero ella no cuenta.

-Entonces…soy la única.

-Exacto. 

-Joder…mejor paremos aquí, porque me voy a poner caliente y me voy a disgustar, porque no te tendré aquí para apagarme.

-¡Eres una cobarde!-protestó Taeyeon, envuelta en risas.

-Cobarde no, solamente me aseguro que mi malhumor no afecte luego a otras personas, estoy intentando controlarme ¿Sabes?

-Te amo.

-Yo también, cielo. Te amo y te extraño.

-Tiffany…

-Hay algo que no te he dicho y es que anoche Seth tuvo fiebre-cortó Tiffany.

-¡¿Qué?! ¡¿Y está bien?!

-Sí, sí, logré controlársela a tiempo, pero estaba ardiendo, Tae…incluso deliraba.

-¿Cómo tú?

-¿Cómo yo qué?

-Nada, nada ¿Y qué decía?

-Su amigo Rony, parece que soñó algo con él y le afectó mucho. Siento…siento que algo le pasó a ese chico y ahora mismo he llamado a Myungsoo para que me averigüe en algún hospital de Roma.

-Puede haber sido sólo un mal sueño, Tiffany…

-Lo sé, pero algo me dice que no es sólo eso, preferiría averiguar y equivocarme que a ese chico no le pasó nada y sólo fue una pesadilla de Seth, que no averiguar y luego enterarme que algo le pasó y no presté atención.

-Te entiendo…

-Y Tae…hay otra cosa…

-¿Más cosas? A ver… ¿Qué pasa?

-Voy a tener que irme por unos 4 ó 5 días a Caracas, Venezuela.

-¿Cuándo?-preguntó Taeyeon, bruscamente.

-Uhm…Yo creo que…

-Tiffany…

-El mismo día que tú regresas-soltó Tiffany, pesadamente.

-¡Tiffany! ¡¿No nos vamos a ver?! ¿No puede ser otro día?-protestó la morena, alarmada-¡No sabes cuánto deseo que llegue el viernes para poder estar contigo y ahora tú me dices que no nos vamos a ver! ¡No es justo!

-Tae, es que necesito…

-¡Y yo te necesito a ti, joder! ¡Nunca dejas de trabajar! ¡Nunca descansas! ¡Seguro que es un proyecto de trabajo de esos que tienes tú! 

-Uh…no…quiero decir, sí…no, no…puedo decirte… ¡Sólo serán 4 días, Tae!

-¡5 como máximo, dijiste! ¡Si los sumamos con estos que tengo ahora son 10! ¡10 días sin verte, Tiffany!

-Lo siento, Tae-susurró la pelirroja, con tristeza-De verdad, perdóname, pero esto es muy importante para mí, es muy…

-¿Más importante que estar juntas y con Seth, tus hermanos…?-preguntó Taeyeon, molesta.

-Te has pasado, Tae, sabes que no es así. Yo…

-¿Y no puedo ir contigo?

-Sería mejor que te quedaras. Seth podría necesitarte…

-¡Y a ti también te necesita siempre! ¿Sabes qué, Tiffany? Déjalo así, me duele demasiado la mano y voy a descansar…

-Tae, escúchame…

-Luego hablamos.

Taeyeon colgó sin dejarle decir más nada. Se quedó mirando el aparato y lo dejó encima del escritorio, comenzando a sentirse pésima. Habría deseado decirle el por qué tenía que irse, pero no podía, por lo menos no en ese momento.

Pensando que quizá luego hablarían con más calma, buscó el número del abogado Nathan Allen para hablarle sobre el testamento, pero al comenzar a marcar, a su oficina entró Jong y él le hizo una seña para que colgara de inmediato, lo cual hizo.

-¿Qué pasa?-preguntó Tiffany, algo enojada.

Jong se sentó en la silla y frunció el ceño ante aquella muestra de fastidio de la pelirroja.

-Eso mismo podría preguntarte yo-dijo, dejando unas carpetas encima del escritorio.

-Lo siento, es que…he discutido con Taeyeon-comentó, entristecida-Se ha enojado porque no nos veremos el viernes como ella había creído.

-Umm…era una reacción predecible, creo que puedo comprenderla.

Tiffany lo fulminó con la mirada y arrugando un papel, se lo arrojó a la cara.

-Sabes muy bien por qué lo hago-replicó, ofendida-No es como si a mí me gustara la idea de verla una semana más tarde, pero…es algo que es necesario…para que todo salga bien y como quiero. 

-Vale, tienes razón, pero ¿No crees que estás exagerando un poco? ¿Precipitándote de más? Eso será hasta Enero y tú…

-Y yo no quiero preocuparme durante todo diciembre, por lo que podría salir mal. Quiero tenerlo todo listo y que cuando sea enero, todo esté bien. Nada más ¿Es tan

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Comments

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ignacia12 #1
Chapter 111: Me gusto mucho la historia es genial.
yoonalim__ #2
Chapter 6: Sejauh ini blm ada perkembangan
yoonalim__ #3
Chapter 5: Apakah alex undang taeyeon juga
yoonalim__ #4
Chapter 4: Adik tiffany selusin apa
yoonalim__ #5
Chapter 3: Taeyeon lu baru ngeliat tiffany sudah langsung jatuh cinta
yoonalim__ #6
Chapter 2: Tiffany bertabrakan dengan Tae
yoonalim__ #7
Chapter 1: Oke
yoonalim__ #8
Sepertinya menarik
ana2381 #9
Lo he leído más de una vez. Es mi favorito, encabeza la lista.?
lizbsol
#10
Chapter 111: Estupendo, brillante no se que mas decir