Capítulo 86: Supermassive black hole / Weapon

Se acercó lentamente por detrás y apartando un poco de cabello de su hombro, besó su cuello y con sus labios pescó el lóbulo de su oreja y sonrió al escucharla reír muy bajito y gemir. Un escalofrío recorrió su cuerpo y la abrazó, mostrándole a su vez, el plato con galletas de chispas de chocolate y el vaso de leche. 

-¿Ya se durmió?-preguntó Taeyeon, volteando un poco y agarrando una galleta para comérsela.

-Sí…está profundamente dormido-respondió Tiffany.

-¿Segura? No vaya a sucederle como a ti…

-Estoy muy segura. Seth me ha ayudado y por si acaso, se ha quedado a su lado a dormir…por si despierta y eso-explicó y bebió un sorbo de la leche-¿Tú cómo estás? Pensé que una vez terminada la cena, irías a dormir de inmediato.

-Estaba esperándote-le dio un beso en los labios-Mira qué lindo se ve todo con la luna ahí ¿No te parece que es hermoso?-preguntó, feliz. 

Tiffany la miró a ella y suspirando profundamente, sonrió-Sí, eres realmente hermosa.

Taeyeon volteó al escucharla y se sonrojó inmensamente, Tiffany no pudo notarlo mucho porque todo estaba oscuro y solamente eran iluminadas parcialmente por la luz de la luna. La morena cerró un poco el espacio y besó con suavidad sus labios, quedándose sin aire por un breve segundo. Sonrió y Tiffany la abrazó. 

-Gracias por…el brindis en honor a mi papá-agradeció Taeyeon, sintiendo un nudo en la garganta-Fue muy lindo lo que dijiste.

Tiffany sonrió.

-Me alegra que te haya gustado. Es porque te amo.

No sabía cómo expresarlo, pero siempre sentía ese torrente de sangre correrle por las venas cada vez que ella le decía que la amaba, le emocionaba demasiado y siempre que recordaba cuando la conoció en aquel baño de hombres del aeropuerto y cómo era de cortante y seria, no podía evitar sentir ganas de reírse de nerviosismo y felicidad; porque si alguien le hubiera dicho que esa Tiffany y la que estaba besándola como si fuera a acabarse el mundo eran la misma, también se reiría. 

-Tiffany…los chicos…

-Están dormidos…no se van a despertar-susurró, besando su vientre. Miró hacia arriba a Taeyeon con el deseo enmarcando sus ojos-Puedes estar segura. 

De cualquier modo, amaba a esas dos Tiffany, porque juntas son lo que siempre soñó.
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No había aceptado que le llevaran en camilla a ningún lugar, menos que intentaran ponerle un collarín en el cuello. Sí, le dolía como el demonio, pero estaba harto de tener que usar muletas, férulas, vendas y siempre parecer una momia lisiada. Había perdido la cuenta de cuántas veces había estado en una clínica u hospital y las razones eran muchas como para ponerse a enumerarlas.

Salió con mucho cuidado de la ducha, no queriendo mover la cabeza ni un centímetro y cuidando de no resbalar con el suelo mojado. Vio que en los bancos estaba sentado Minhyuk, todo sucio por el barro y tenía los ojos brillantes como si fuera a ponerse a llorar. 
Se vieron unos segundos y luego apartó la mirada para buscar su ropa en el locker asignado.

-¿Qué haces aquí?-preguntó Minho, revolviendo las cosas en su bolso y buscando sus bóxers para ponérselos-Pensé que estarías buscando tu trofeo o lo que sea que hayas ganado.

-2 pasajes a Ibiza y un Mercedes-Benz C300-respondió Minhyuk, apesadumbrado.

-Felicidades-dijo Minho, sonriendo y acercándose para darle la mano. Minhyuk lo miró, dudoso, en su mirada no parecía haber rencor ni enojo. Le dio la mano, sintiendo sacudidas en el estómago al sentir su piel y negó, bajando el rostro para que no viera las lágrimas que parecía que se aproximarían.

-No lo acepté-murmuró Minhyuk, compungido y haciendo un esfuerzo porque no se le quebrara la voz.

-¡¿Qué?!-exclamó Minho, sorprendido-¡¿Por qué?! 

-¡Tú debiste ganar! ¡Ese premio era tuyo y yo no lo merecía!

-¡Pero qué cosas dices! ¡Tú ganaste, tú te llevas el premio! ¿Quién ha visto que el que llega de último gane el premio final?-preguntó Minho, incrédulo.

-¡Fuiste el segundo! ¡Pero tú ibas ganando y después te pasé yo! ¡Te hice caer de la moto y eso es trampa!

-A ver, chico, ni siquiera me rozaste-repuso Minho, confundido-Está bien…me pasaste tan rápido que yo me confundí y me pasé el obstáculo. Yo me caí de la moto por mi propia cuenta, no sé qué haces culpándote. 

-No es…

-Y te digo que eres idiota por rechazar un premio así. Nadie en su sano juicio lo haría. Nadie-espetó, colocándose la camisa-Pero bueno…puedes sentirte especial y único por hacerlo.

Se hizo un silencio bastante incómodo en opinión de Minhyuk, que no hacía más que restregarse las manos y pasárselas por el pelo. Veía a Minho de soslayo, poniéndose sus zapatos y luego echarse su maldito perfume Azzaro que le volvía loco. 

-Entonces acéptalo tú-dijo de pronto y sin pensar.

-¿Qué cosa?-preguntó Minho, poniéndose su gorra con la visera hacia atrás.

-El premio…acéptalo tú, ya que dices que nadie en su sano juicio lo rechazaría-dijo Minhyuk, encogiéndose de hombros-Como yo soy el único loco que lo rechaza, anda y cógelo tú. Han de estar esperando que salgas para que lo reclames. 

Minho frunció el ceño y soltó una risita, divertido.

-Eres muy gracioso. Tal como Ahyeon, ha de ser de familia eso…

-Te estoy hablando en serio-dijo Minhyuk, sin reírse y mirándolo fijamente-Yo no quiero el premio, entonces te lo doy a ti porque tú te lo mereces…

-A ver, parece que lo de Albert Einstein se te voló en algún momento, porque eso ni la física lo respalda...ganaste las eliminatorias y pasas a la final, en esa ganaste también y te llevas el premio, así de simple. Si lo rechazas, se lo dan al segundo y obviamente yo no participé en esa, así que…

-Yo gané y recibí el premio, pero solamente para dártelo a ti-explicó Minhyuk-No lo merezco, porque te tumbé de la moto…

-Te dije que…

-Sé lo que dijiste-interrumpió-Pero como yo soy un idiota que rechaza los premios, quiero dártelo a ti. Es lo que corresponde por…hacer lo que hice. 

Minho lo miró atentamente y cogiendo su bolso, negó.

-Lo siento, pero no voy a aceptar algo que no me corresponde…

-Pero…

-Tú te lo ganaste, tú te lo quedas. No hay más que hablar y se acabó. Punto. 

Vio que se iba y Minhyuk corrió a atravesarse en la puerta para detenerlo. 

-Escucha…

-No lo quiero y además no lo necesito, Minhyuk. Ya he estado en Ibiza anteriormente y tengo un auto, ¿Para qué querría otro?

-El Mercedes es nuevo.

-¿Y con eso qué? Yo no como con marcas y menos si es nuevo. Me importa poco si el que tengo ahora es de segunda mano, lo que quiero es que funcione y lo hace perfectamente bien, es todo lo que necesito-replicó Minho, azorado-Gracias, en serio, te lo agradezco; pero si tú eres insistente, yo lo soy más e insisto…No aceptaré tu premio de ninguna manera. Quédatelo o véndelo, lo que quieras. 

Pasó por su lado y caminó hacia las escaleras para subir, pero la voz de Minhyuk lo detuvo de nuevo.

-Entonces ya somos dos los idiotas que rechazamos premios de ese calibre-dijo él, cruzándose de brazos.

Minho sonrió.

-No. Tú eres idiota por rechazar lo que te ganas. Yo no he rechazado nada que sea mío.

-Bueno, está bien. Te seguiré la corriente…-los dos rieron a la misma vez-Ya veré qué hago con esos pasajes y el auto, porque la verdad es que a mí tampoco me importan las marcas de autos. Sólo que tengan bastante velocidad y eso.

-Buen punto. Lo mismo pienso yo.

-Siento mucho…lo de tu cuello y eso.

-Ya he pasado cosas peores. Sobreviviré-dijo Minho, restándole importancia. 

-Claro…estoy seguro y…uh… aunque sea… ¿Aceptarías ir a casa de mis padres…para la cena atrasada de navidad?-preguntó Minhyuk, muy nervioso-Es que…realmente me sentiría mejor si sé que no pasarás la noche solo.

-¿Te doy lástima?-bromeó Minho, frunciendo el ceño para fingir estar ofendido.

-¡No! Nada para nada, es sólo…

-Vale, tranquilo, sólo bromeaba. Ya entendí-dijo Minho-Está bien…iré con ustedes, pero luego me iré al hotel. 

-Perfecto.

-Te esperaré para que te duches y te cambies el uniforme.

Minhyuk sonrió y entró al vestuario, mientras que Minho bajó las escaleras que quedaban y se sentó en el último peldaño a esperarlo. Sintió su celular vibrar en el morral y lo sacó rápidamente, era un mensaje de Rob.

Su corazón latió sin freno y por un rato dudó si leerlo o dejarlo para después, pero la curiosidad lo venció y leyó. 

“Hola, sólo era para desearte una Feliz Navidad” 

Era bastante irónico el momento, sobre todo porque no estaba siendo feliz justo ahora que no estaba a su lado y menos cuando había planeado durante meses, pasarla junto a él. De cualquier forma sabía que Rob no lo decía con intención de molestarlo.

Escuchó la ducha funcionar, señal de que Minhyuk debía estarse bañando ya y miró de nuevo la pantalla, pensando si contestar o no.
….

Las vibraciones del celular se sintieron en su estómago y abriendo los ojos muy pesadamente, cogió una bocanada profunda de aire, pero ésta pareció no funcionar porque fue insuficiente y un silbido en su pecho le volvía a recordar que él no estaba para ayudarle a recuperar el aliento. 

Tomó el celular, presionó el botón para leer el nuevo mensaje y volvió a buscar el aire que le faltaba por el asma. Fue algo borroso, pero se podía leer un “Feliz Navidad para ti también, Rob” 

Sonrió, inhaló por enésima vez de su broncodilatador y sus ojos se cerraron por el sueño. 
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Era muy placentero escucharla tararear una canción mientras permanecía abrazada a su cuerpo y estaban enredadas entre aquellas sábanas, sintió que la besaba en la frente y sonrió, abrazándola con más fuerza; a la vez que continuó acariciando sus brazos con los dedos. 

-I don’t want to miss a thing.

Taeyeon sonrió al escucharla y bajó la mirada para descubrir a Tiffany observándola con sus hermosos ojos marrones. Con dos de sus dedos atrapó su nariz y la presionó juguetonamente, haciéndola reír.

-¡Qué lista que es mi niña!-exclamó, sujetándola, protectora y rodando sobre si misma para quedar encima de ella-Qué inteligente es mi novia.

Se miraron por un buen rato, sin parpadear y sólo sonriéndose como si fuera la primera vez, pero fueron interrumpidas cuando se escucharon unos gritos y unas risas. Taeyeon se apartó para ocultarse y Tiffany se sentó para taparse con la sábana hasta el cuello; sabiendo lo que ocurriría después. 
Tal como habían previsto, la puerta se abrió de un solo golpe y por ella entró Noah, riéndose, saltó sobre la cama y abrazó a la pelirroja y también a Taeyeon. Ambas rieron y por la puerta vieron entrar seguidamente a Seth y a Mike, sonrientes también.

-¡Vengan a ver lo que me trajo Santa! ¡No sean flojas! ¡Levántense!-gritó Noah, agarrándolas por los brazos para que se pararan, pero sin éxito.

-Bueno, bueno, Noah, ya vamos a ver, pero espérate…

-¡Apúrense!-volvió a gritar y de un mismo salto bajó de la cama y corrió hacia afuera de la habitación-¡El que llegue de último es un huevo podrido! 

-¡Buenos días y Feliz Navidad!-gritó Seth a las chicas y corrió tras Noah.

-Ustedes…no están preparadas para salir ¿Cierto?-preguntó Mike, con una sonrisita pícara a las chicas. 

-Tengo un hermano muy inteligente-aseguró Tiffany, sonriéndole al chico. Mike rió y salió de la habitación-¡Feliz Navidad! 

-¡Para ustedes no es necesario desearlo, si ya se nota!-gritó Mike.

Ambas rieron y una vez que estuvieron nuevamente solas, Tiffany saltó de la cama tal como había hecho Noah minutos antes y corrió al baño. Taeyeon aprovechó para ponerle el pestillo a la puerta e ir al baño también, encontrando a la pelirroja cepillándose los dientes mientras se miraba al espejo. 
La cogió por la cintura y le lanzó un beso mirándola igualmente por el espejo.

-Ahora sí pareces Santa Claus, pero femenina y muy hot-dijo, mientras se metía a la ducha y cerraba la puerta corrediza de vidrio. 

-Bu fefibas bi fefoña Glaufv-dijo Tiffany, con el montón de espuma en la boca y riéndose. Taeyeon rió y la miró como si se hubiera vuelto loca.

-¿Qué dijiste?-preguntó Taeyeon, mojándose con el agua que caía sobre su cabeza.

Tiffany rió también y escupió la espuma en el lavamanos, se lavó un poco con agua y volvió a escupir, finalmente se secó con una toalla.

-Dije que…-abrió la puerta corrediza de la ducha y se introdujo en el jacuzzi-Tú serías…-la abrazó-Mi señora Claus. 

La puso contra la pared de la regadera, sintiendo el agua correr por su cuerpo y rozando la piel mojada de Taeyeon contra la suya. Quería aumentar la fricción, la euforia que le causaba que la tocara y la acariciara donde más le causaba placer, donde más la enloquecía. Se confundía tanto y le gustaba que repitiera una y otra vez la misma frase, el mismo “Te amo” en su oído en su cuello, en todas partes como si de un mantra se tratara. 

Cerró los ojos, el dedo pulgar de ella se introdujo en su boca y por más que lo intentó. El torrente de placer y locura le oscureció la razón.

-¡TAEYEOOOOOOON! – Había llegado al clímax.
….

Levantaron la mirada al escuchar aquel alarido de Tiffany y Noah frunció el ceño.

-Demonios…-murmuró Mike, para sí mismo y revisando su nueva laptop que le había “regalado” Santa Claus.

-Seguramente están discutiendo, iré a ver qué sucede…

-¡NO!-gritaron Seth y Mike a la vez y cogiéndolo por los hombros lo obligaron a sentarse de nuevo en el suelo.

-No te preocupes, Noah, hermanito…Ha de ser una araña que vio Tiffany, sabes cómo es ella de aracnofóbica-dijo Mike, sonriéndole y entregándole de nuevo su Nintendo DS Lite nuevo-Toma, está genial.

-Taeyeon se encargará de ello-aseguró Seth, también con una sonrisa nerviosa.

-¡TAEYEOOOOON, JODEEEEEEEEER!

-¿Están seguros?-preguntó Noah, preocupado por los gritos-Es que no quiero que le pase nada a Tiffany. 

-No le pasará nada. Taeyeon la cuida muy bien. Ahora sigue viendo tus regalos ¿Vale?

Noah asintió y agarró su stylus para comenzar a jugar.
….

-Oye…Tiffany…

-No hables con la boca llena, Noah-advirtió Samuel.

Noah terminó de masticar su panqueque con dulce de leche y bebió un poco de su bebida achocolatada, se limpió la boca con una servilleta y miró a Tiffany que estaba mordiendo un pedazo de tostada.

-Tiffany, ¿Lograste deshacerte de la araña?-preguntó el chico, muy inocentemente. 

Mike se atragantó con su bebida y comenzó a toser desesperadamente, Leah que estaba a su lado le dio golpecitos en la espalda para que se calmara y Taeyeon le pasó un vaso de agua. 

-¿De qué araña hablas?-preguntó Tiffany, confundida y mirando a Mike bebiendo grandes sorbos de agua.

-La araña…esa que estaba en tu habitación…-se detuvo un instante al ver a Seth haciéndole muecas con la mano y la cara para que se callara, pero no comprendió-Gritabas como loca llamando a Taeyeon…

Taeyeon que había estado bebiendo un jugo de naranja, al comprender de qué hablaba el chico, expulsó por la nariz y la boca toda la bebida y ésta cayó en el rostro de Alex, haciendo que todos comenzaran a reírse. 

-¡Joder! ¡¿Qué demonios tienes contra mí ahora?!-gritó Alex, molesto y agarrando una servilleta. 

-¡Lo siento, Alex! ¡Esta vez de verdad si fue sin querer queriendo!-exclamó Taeyeon, azorada.

-Tiffany…-llamó Noah.

-Uhh…sí, la araña…-murmuró Tiffany, sonrojada y ayudando a Taeyeon a limpiarse al igual que a Alex-Sí, Noah, Taeyeon me ayudó a sacar a la araña, cielo. Todo estuvo bien al final. 

-¿Y de qué tamaño era?-preguntó Samuel, mirando a las chicas, pero cuando estas le dirigieron una mirada de “Cierra la boca”, sonrió y comenzó a jugar con su comida-Entiendo…debió ser…-miró a Mike que le hacía señales con las manos-Mejor me callo.

Noah frunció el ceño y comenzó a pensar que algo pasaba, porque todos estaban riéndose entre dientes y Tiffany y Taeyeon intentaban no mirarse entre sí ni a ninguna parte. Alex se había levantado para ir al baño y limpiarse.

-¿Se puede saber qué les pasa?-preguntó, molestándose y cruzándose de brazos.

-Nada, cariño. Sólo que estamos emocionados por ir a esquiar-respondió Tiffany, esquiva.

-Alguien que me pase la sal, por favor-pidió Leah.

La respuesta no le convenció mucho.
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El timbre sonaba y sonaba insistentemente, gruñó, muy molesto y cogiendo una de las almohadas la lanzó hacia un lado.

-¡Rob! ¡Está sonando el puto timbre!-gritó, dándose la vuelta; éste volvió a sonar nuevamente y eso lo hizo enfurecer-¡Rob! ¡El timbre está…!

Al voltear hacia la izquierda y ver la cama vacía, todo le dio vueltas y vueltas, recordó con pesadumbre que Rob no estaba con él. Se tapó la cara con las manos y poco a poco comenzó a sentir el cuello terriblemente adolorido, al igual que la cabeza parecía que le estallaría. Gimió y el timbre volvió a sonar. 

-¡YA VOY! Joder…

Se levantó y cogiendo un pantalón del suelo, se lo colocó y salió hacia el recibidor. El timbre nuevamente sonó cuando abría la puerta y vio a Jongwook con un celular en la mano; él al verlo, colgó y lo guardó en su bolsillo.

-Te iba a llamar. Pensé que te habría pasado algo-dijo Jongwook, muy serio.

Minho asintió y se hizo a un lado para dejarlo pasar. Jong entró y miró a su alrededor, volteó y quedó enfrente de Minho, le entregó un periódico y él le agradeció con una sonrisa.

-¿Cómo supiste que me hospedo aquí?-preguntó Minho, sentándose en el mueble e invitando a Jong a hacer lo mismo. 

-Me lo dijiste anoche en casa de Ahyeon-contestó Jong. Minho bostezó-¿Recuerdas?

-Umm no, no recuerdo…

Jong bufó.

-Es natural si bebiste como si jamás lo hubieras hecho. Whisky, vodka, tequila, champagne, vino, sangría…

-¿Qué más?

-Creo que eso fue todo.

Minho se recostó en el mueble, cerró los ojos y agarrando un cojín, lo abrazó.

-¿Hice cosas raras?-preguntó, sin saber si le importaba de verdad conocer la respuesta.

-Mmm pues no, en realidad…en comparación con aquella vez que Tiffany y tú se emborracharon y casi se montan un show encima del auto de una pareja de viejitos en el estacionamiento de mi casa…pues no, estuviste bastante tranquilo-dijo Jong. Minho rió bajito-Saliste al jardín de los Seo y vomitaste encima de la parrillera, abrazaste al papá de Ahyeon y Minhyuk y le dijiste que sería lindo verlo vestido de Santa Claus…-Minho volvió a reír-Ehh…repetiste y repetiste el nombre de Rob mientras abrazabas a Minhyuk y le acariciabas la mejilla, hasta que…te quedaste dormido sobre sus piernas. 

-Joder…pobre chico-murmuró Minho, cansado-Seguro ahora me odia porque le arruiné su nochebuena.

Jong comenzó a reírse y negó.

-Pues…yo diría que se le veía muy a gusto cuando lo abrazabas-repuso Jong, divertido-Sólo se incomodó bastante porque nombrabas a Rob. 

-Mmm…qué mal…le pediré disculpas…

Se quedaron callados por unos segundos, mientras Jong observaba a Minho y esperaba que abriera los ojos y se levantara, pero cuando lo escuchó dar un suave ronquido, rodó los ojos al saber que se había quedado dormido.

Se levantó y colocándose enfrente de él, le comenzó a dar golpecitos en el brazo.

-Minho…Minho…Minho, hombre, despiértese… ¡MINHO! 

Minho le lanzó el cojín a la cara y gruñó.

-¡Hermano, no hagas eso! ¡Me duele hasta la neurona de Jennifer Aniston!-exclamó él, molesto y caminando hacia su habitación. Jong lo siguió.

-Ni siquiera tienes epilepsia, así que no hables de esa neurona-repuso Jong-Levántate, mira que tenemos que hablar seriamente.

-¿De qué?

Jong se sentó en la cama a su lado y le dio un pequeño golpe en el hombro.

-¿Qué te crees tú? ¿Superman?-preguntó él-¿Cómo demonios se te ocurre irte de Seúl sin decir nada a nadie y luego aparecer aquí en Busan en una carrera de Supercross? ¡Tenías preocupados a Rob y a Tiffany! 

-Si hay algo de lo que estoy cansado es que piensen que soy un niño al que hay que cuidar-replicó Minho, masajeándose la frente con los dedos-Además…si me fui es para no molestar a Rob. No sé que tienen que estar haciendo él y la pelirroja preocupándose por nada. 

-Ellos pensaban que te podía haber pasado algo… ¡Y mira que sí te pasó! 

-Vale, vale, pero fue un accidente. Cualquiera puede caerse de una moto.

-Cualquiera que sea lo bastante vulnerable a ese tipo de cosas y a ti te caen los problemas como la lluvia. Volaste por los aires y por un momento se pensó que estabas muerto, porque te diste durísimo.

Minho rió con sarcasmo.

-Eso mismo se pensó cuando estuve en coma y mírame ahora aquí-dijo, haciendo un esfuerzo por levantarse-Tal vez soy…no sé…una especie de reencarnación de algún Dios muy poderoso…uno griego, mejor dicho. Zeus, pero joven y y.

-Claaaaaro y ahora hablemos de eso que dijiste anoche de que te ligaste a un tipo en los vestuarios…

-¿Yo dije eso?

-Sí y Minhyuk lo corroboró con una cara de pesar tremenda. 

-Ah bueno, sólo un tipo que vio que estoy buenísimo y…-sonrió, travieso-Él tampoco estaba nada mal ¿Eh?, pero…salimos a donde no nos molestaran y…estuvo bastante bien para pasar el rato. Fin de la historia. 

-¿Recuerdas cómo se llama?-preguntó Jongwook.

-¿Importa?

-Joder…me recuerdas a alguien, pero no logro saber exactamente a quien.

Minho comenzó a reírse, agarró una toalla del clóset, se la colocó alrededor del cuello, cogió un shampoo, un jabón y se metió al baño. 

-¡Tal vez yo era tu papá en tu vida pasada!-gritó y cerró la puerta rápidamente. 

-Pfft…ojalá que no.
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Una bola de nieve se estrelló en su cara y la hizo tambalear un poco, pero cuando divisó a la culpable, riéndose unos metros más allá, sonrió malévolamente y se agachó para hacer una bola de nieve también. 

Leah al verla, salió corriendo y Taeyeon la iba a perseguir, pero la detuvieron por el brazo y se fijó que era Tiffany.

-Hey…

-Sí, hey… ¿Qué pensabas hacer? ¿No recuerdas que…?

-¡Ay, Tiffany! No comiences ¿Sí?-protestó Taeyeon, con voz cansina-No me va a pasar nada y…joder ¡Cálmate! ¡No hagas eso, mamá!

Tiffany le terminó de colocar bien el pasamontañas y poniéndole bien la bufanda, la haló hacia ella y le dio un beso. Taeyeon casi pudo reírse al sentir que sus labios estaban helados por el frío y le hicieron cosquillas, Tiffany se apartó y rió también.

-¿Qué?

-Tú me abrigas a mí y la que tiene frío eres tú-susurró Taeyeon, con voz profunda en su oído. 

-¿No tienes frío?

-Uhh no, si te la pasas besándome así, seguramente terminaré con combustión…

-¿Ah sí?

-Sí…

-Pues a ver ¿Qué te parece esto, Señorita Combustión?

La iba a besar de nuevo, pero Taeyeon sintió que le halaban de su chaqueta hacia abajo y vio a dos chicos de la edad de Noah y Seth, con unos cuadernos y bolígrafos en las manos.

-¿Nos firmás un autógrafo, Taeyeon?-preguntó el que parecía más pequeño de los dos. 

-Por supuesto, amigo, ¿Cuál es tu nombre?-dijo Taeyeon, con una sonrisa, poniéndose en cuclillas y cogiéndole el cuaderno al niño.

-Agustín-dijo el chi