-Yo igual TE AMO- escucho decir a tae y eso solo me hace sonreír más y volverla a besar.

-Tiff, ten fe en mí, nunca te fallare, siempre estaré a tu lado, te lo prometo- dijo tae al separarnos del beso y tratando de quitar el agua de mi rostro.

-No tengo ni la menor duda en ti mi tae- conteste acostándome en su pecho y sentir el agua fluir por nuestro cuerpos, tae solo me abrazo con más fuerza.

-Hay que ir a casa, no quiero que te de gripe- dijo tae  separándome un poco de ella.

-Un ratito más y nos vamos, lo prometo- dije acomodándome nuevamente en su pecho.

Estuvimos así unos 15 minutos más hasta que empezaron los relámpagos y decidimos que esa fue la señal para ir a casa. Llegamos a casa se tae  y está completamente vacía, Sergio debe estar en el trabajo y bueno es el único que vive aquí aparte de tae, subimos rápidamente a la habitación de ella y nos damos cuenta de lo anegado que hemos dejado el cuarto y todo el trayecto a él, nos miramos y solo se nos ocurre reírnos sin parar.

-tae, déjame te ayudo a limpiar- dije aun riendo.

-No, ya te dije que te metas a bañar, estar mojada te hará mal- dijo tae desde abajo.

-Bueno, ¿me prestas ropa?- dije desde la puerta de su cuarto.

-Sabes que sí, agarra lo que te guste de mi armario- dijo tae subiendo las escaleras.

-Está bien, no tardo para que tú te bañes, tampoco quiero que te enfermes, eres demasiada dramática cuando te da gripe- dije riendo y metiéndome a la ducha.

-No soy dramática, que me sienta mal y tú no me entiendas y tampoco mi padre es una cuestión demasiado diferente tú lo sabes- dijo  en son de defenderse a ella misma.

-Lo que tú digas tae, lo que tú digas- dije riendo y dejando correr el agua mientras me desvisto.

Me tome mi tiempo para calentarme, dejando correr el agua caliente por todo mi cuerpo, después de unos minutos, salí de la ducha y veo a tae sentada esperándome, seguía completamente mojada, no entiendo porque no se ha quitado ni siquiera la ropa mojada, es más terca que yo.

-Listo, al agua patita, te vas a enfermar- dije levantando a tae de la silla y ciento que está completamente helada, la voy a matar, se debió  quitar la ropa.

-Sí, tengo mucho frio- dijo tae metiéndose a la ducha, abrí las llaves y la metí bajo el chorro de agua caliente y poniéndole un par de toallas a su alcance.

-¿Estarás bien sola?- dije antes de salir del baño.

-Sí, solo me voy a bañar- dijo tae irónicamente, me sonrió y yo le sonreír.

Salí del baño y me tire en su cama, encontré unos papeles debajo de la almohada, eran una investigación que tenemos de tarea para entregar en unos días, lo cual me recuerda que no lo he hecho, reviso la información, cuando veo a tae salir de su baño envuelta en toallas y sale vapor del baño, ama el agua caliente, más a veces siento que exagera un poco, me rio y veo como camina tímidamente a su armario, agarrar su ropa y antes de meterse a su baño me sonríe y guiña un ojo, yo solo pude reír igual que ella.

-Listo, ya estamos bañadas y cambiadas- dice tae acomodándose a un lado mío.

-Sí, necesitábamos ese baño, solo a nosotras se nos ocurre estar afuera bajo la lluvia- dije riendo mientras San me envuelve con sus brazos y siento su cálido pecho.

-No te quejes fue demasiado romántico- dijo tae riendo y besando mi cabeza.

-Fue perfecto- conteste aferrada a la blusa de tae.

-Amor…- dijo tae separándome un poco de ella  y sonriéndome.

-¿Qué pasa tae?- dije un poco desconcertada, no sé qué me quera preguntar.

-¿Te das cuentas que nos hemos saltado todo el cole?- dijo riendo.

-Shhh, será nuestro pequeño secreto- dije riendo y volviéndome a acomodar.

-Seguro, cualquier cosa si llega mi padre, diremos que nos retiraron antes por la  lluvia ¿va?-dijo tae abrazándome y riendo.

-¿Harás que le mienta a mi suegro?- conteste igualmente riendo.

-Si lo dices así, suena feo, prefiero el término, “no decir la verdad”- dijo tae seria.

-Lo que digas amor- dije riendo y alzándome para besar ligeramente sus perfectos labios.

-Tiff, bajemos por algo de comer, muero de hambre- dijo tae alejándome un poco de ella y sonriéndome para luego mirarme a los ojos como siempre lo hace.

-Claro, amor ¿crees que nos traerán comida si pedimos?- dije buscando en mi celular el nombre de una pizzería cerca de la casa de tae.

-No lo sé, no perdemos nada con intentar- contestó tae sentándose en la cama.

-Bueno… lo averiguaremos en unos momentos- dije marcando el número.

-De champiñones, con orillas de queso y mucho ajo- dijo tae completamente alucinada.

-Está bien, pero sin el ajo, sabes que no me gusta- dije mientras esperaba ser atendida.

-Bueno, pero son con quesito y champiñones- dijo tirándose en la cama de tal qué forma que su cabeza quedo en mis piernas y yo se la acariciaba dulcemente.

-¿Si?... bueno… hola, sí que tal… ¿quería saber si me podrían traer una pizza?... está cerca menos de dos cuadras… ¿enserio?... excelente… una grande con champiñones y orilla de queso… ¿por qué no?, a mi novia le gusta… si, espere se la paso para que den la dirección- dije cediendo el teléfono a tae y escuchando como le da la dirección.

-Si bueno gracias… si no hay problema, 30 minutos excelentes- dijo tae colgando el teléfono.

-Listo, la comida viene en camino- dije abrazando a tae y besándola.

-¿Amor le dijiste al chico que tienes novia?- dijo tae riendo en el abrazo.

-Creo que sí, es curioso, no lo pensé solo lo dije por decir, aparte, no me puedes reprochar, eres una novia extremadamente linda- dije volviéndola a besar.

-¿Más linda que Suzy?- dijo tae poniendo una cara de fuchi al mencionarla.

-Bueno… si nos ponemos a comparar…- dije entre risas.

-¡TIFF!- dijo tae dándome un codazo, yo solo reí como maniática.

-No es cierto linda, es broma, claro que eres más linda que ellas, eres preciosa, no te llega ni a los talones… es más ¿quién es Suzy?- dije riendo y besándola como loca.

-Así me gusta- dijo tae asintiendo con la cabeza y con una cara demasiada loca.

-Eres una celosa de lo peor, no lo puedo creer- dije riendo y dejando de besarla.

-No soy celosa, es solo que no quiero a nadie cerca de ti a una distancia menor de 1 metro de tu espacio personal… y a Suzy  o cualquier chica linda a 5 metros- dijo tae con una mirada seria.

-¿5 metros?, tae estas exagerando… es mi amiga, no la voy a saludar a 5 metros de distancia- dije riendo y tirando a loca a tae y viendo como ella me ve raro.

-Bueno, 4 metros y diga que le fue bien- dijo tae  acercándose para besarme.

-Eso lo veremos Kim- dije riendo y también besándola.

-Te amo mi amor- dijo tae en el beso, yo sonreí en el beso, es tan lindo escucharla decir eso.

-Yo igual te amo- conteste en el beso.

Estuvimos besándonos y regalándonos caricias hasta que llego la pizza, bajamos corriendo ya que ambas morimos de hambre y en especial tae  que no ha desayunado, pagamos y le dimos propina extra al chavo, pobre se ha dado una mojada por nosotras, o bueno por su trabajo, decidimos comer abajo ya que nos dio demasiada pereza volver a subir todo, solo baje nuestros teléfonos y unas mantas para luego acostarnos un rato en el sillón.

-Sí, pan con ajo y queso… lo amo- dijo tae abriendo el plato de hielo seco con papel aluminio.

-Sé que te encanta y bueno, solo promete comer una mentita antes de besarme- dije riendo ya que no soporto el ajo, con eso me matas, lo odio.

-No creo que sea necesario, lo comeré primero y con la pizza se perderá el sabor, ya lo verá-dijo dándome un último beso antes de darle una gran mordida a su pan.

-Eso espero- dije riendo y abriendo la caja de pizza y deleitándome con su aroma.

Devoramos casi toda la pizza y ahora estamos tiradas en el sillón, envueltas en una enorme manta de lana, la tarde es gris, lluviosa y fría, no puedo pedir otro escenario más romántico que este, tae está concentrada jugando con un mechón de mi pelo y haciéndome cosquillas, la beso para que se calme ya que no soy fanática de las cosquillas y nos perdemos en ese beso.

-Buenas tardes señoritas- escuchamos decir a alguien detrás de nosotras, lo que hace que nos separemos un tanto brusco de nuestro beso, volteamos y vemos a Sergio sonriente.

Taeyeon…

Vemos a mi padre en la puerta con su impermeable y sombrilla, está demasiado sonriente, sé que ya había dicho que se lo iba a decir, pero me ha tomado por sorpresa, bajo la mirada y veo a Tiff completamente colorada, creo que es un momento incómodo para ella.

-Papá… hola… bueno, creo que no hay mucho que explicar- dije con algo de nervios.

-Sí, me di cuenta… ¿Cuándo ha pasado?- dijo mi padre tomando asiento en el sillón de enfrente.

-El día que te fuiste a California con Hayeon- conteste sonriendo al momento de recordar.

-¿Y porque no me lo habían contado antes?- dijo en tono de ofendido.

-No lo sé, solo queríamos que se dé solo, aunque para ser sincera ya tenía planeado decírtelo está tarde- dije tomando la mano de Tiff que solo esta callada y observándome a mí y a mi papá.

-Ya veo… Tiff ¿quieres a mi hija?- pregunto mi padre dirigiéndose a ella.

-Claro que si Sergio, la amo, y le aseguro que nada le pasara- dijo Tiff en seguidas.

-Pues dejando eso en claro… y viendo que tú también la quieres, solo les puedo decir que tiene mi aprobación si les sirve de algo, las apoyare como lo he hecho hasta ahora… Tiff, eres como una hija para mí, pero solo te digo que cuides a mi hija y la ames mucho, ambas se lo merecen- dijo mi papa levantándose del sillón y dirigiéndose a nosotras.

-De eso no te preocupes Sergio, la cuidare con mi vida de ser necesario- dijo Tiff  levantándose y dándole una abrazo a mi padre, el cual me hizo la seña de que me les uniera y yo no lo dude.

-Se siente el amor- dijo mi papa en el abrazo, a lo cual nosotras solo pudimos reír.

-Bueno chicas las dejos, estoy muerto… ¿tae  qué hay de cenar?- dijo mi padre con cara de hambriento y dirigiéndose a la cocina.

-Te separamos un poco de pizza y pan con ajo, están el en refri- dije señalando la nevera.

-Pizza y pan frío… perfecto- dijo mi padre riendo.

-Las dejo, compórtense, en especial tu tae- dijo subiendo las escaleras.

-Lo que tú digas papa- dije riendo y volviendo a acomodar en el sillón.

-Bueno mi padre lo sabe, solo queda decírselo al tuyo- dije riendo.

-Buena broma, nos mata… me mata- dijo Tiff  irónicamente y colocándose en mis piernas.

-Si estás conmigo nada te pasara, te lo aseguro- dije abrazándola y besándola.

-Lo sé y no sabes la alegría que me da escucharlo…- dijo Tiff  también besándome.