Durante las cuatro semanas siguientes taeyeon y tiffany cayeron en una simple rutina asentándose finalmente en las vidas de cada una, la distancia física entre ellas aparentemente inexistente, el tiempo pasando rápidamente sin mucha dificultad. Las preocupaciones iniciales de tiffany sobre taeyeon volviendo a rehabilitación dejándola de nuevo fueron rápidamente reprimidas y las preocupaciones que había tenido sobre sentirse vulnerable sin su novia fueron pronto disipadas en el fino aire. Si era posible, tiffany y taeyeon hablaban más a menudo y más íntimamente ahora que ya no estaban juntas todo el tiempo, la ausencia de su respectiva otra chica haciendo que sus corazones se encariñaran más la una por la otra, exactamente como el viejo dicho decía. Tiffany se encontró con que con taeyeon lejos ahora tenían más cosas de las que hablar y discutir. Sus conversaciones que antes siempre habían sido fáciles ahora saliendo sin esfuerzo y nunca se dejaban nada por decirse; el dialogo que compartían sin pausa ni siquiera para un respiro. Tiffany y taeyeon hablaban de cualquier cosa y nada importaba durante sus largas y detalladas interacciones; tiffany poniendo al día a taeyeon con todo el cotilleo que se había perdido en la escuela y la chica menor contándole sus sesiones de terapia y su día entero, a cambio.

Tiffany y taeyeon estaban constantemente en contacto mientras los días se convertían en semanas y se enviaban mensajes frecuentemente durante el día, desvergonzadamente coqueteando la una con la otra a través de mensajes SMS, taeyeon incluso siguiendo su promesa y mandándole a tiffany una selfie semidesnuda, la imagen de su novia enviada, con el pecho desnudo, ahora quemándole permanentemente su memoria y guardada en su teléfono, donde podía admirarla cuando deseara. Una vez que los días de escuela terminaron, tiffany y taeyeon tenían programadas regularmente conversaciones de Skype que normalmente duraban desde que tiffany llegaba a casa hasta que se iba a dormir, y a veces, continuaban incluso después. En más de una ocasión, tiffany se había despertado la mañana siguiente encontrando la ventana aún abierta en su portátil mientras estaba apoyado en la almohada al lado de su cabeza, Jasper acurrucado en el edredón a su lado mientras reconocía la figura de taeyeon durmiendo en la pantalla, su cara escondida debajo de su enredado, fino y oscuro pelo, la chica menor habiéndose quedado dormida mientras hablaban.

Cuando taeyeon y tiffany no estaban interactuando mediante la tecnología, estaban pasando tiempo juntas cara a cara; taeyeon volviendo a casa casi cada fin de semana desde el día siguiente a San Valentín y tiffany llevando al resto de las chicas a verla cada miércoles después de la escuela para hacer su habitual noche de chicas, que incluía la comida normal, películas y diversión. La única cosa nueva de sus tardes de miércoles era Jasper, quien, el director del centro de rehabilitación había permitido amablemente que tiffany lo llevara con ella cuando la visitara, para el deleite de taeyeon, quien tiffany pensó, permanecería tan adorable como siempre que estaba con él.

El diecisiete cumpleaños de taeyeon había sido y había pasado, el día relativamente tranquilo cuando el acontecimiento llegó, la joven fuera en rehabilitación habiendo recibido sus regalos de tiffany y de sus padres en forma de Jasper, casi un mes por adelantado. Los padres de taeyeon la habían sacado para llevarla a cenar la noche de su cumpleaños, tiffany y yeri acompañándoles, sin embargo, dos días antes de su cumpleaños, el sábado uno de Marzo, taeyeon había vuelto a casa de rehabilitación para el fin de semana y había sido sorprendida al encontrarse a sus padres haciendo una barbacoa en su honor, el resto de las chicas y sus familias todos presentes para celebrarla con ella. La madre y el padre de taeyeon particularmente emocionales ese día, ambos difícilmente siendo capaces de creer que su hija había sobrevivido nueve meses desde el accidente para poder cumplir otro año, su felicidad con ella mientras continuaba recuperándose, ambas físicamente y emocionalmente, abrumándoles en múltiples ocasiones a lo largo de la fiesta informal.

Ahora un jueves, un mes después, se estaba acercando una vez más el fin de semana y tiffany estaba tumbada con su estómago presionado contra el edredón de su cama, sus deberes extendidos delante de ella, un bolígrafo en su mano mientras tomaba algunas notas en un cuaderno a su derecha. Jasper tumbado tranquilamente en la parte de atrás de sus piernas mientras escribía y tiffany podía sentir la lenta subida y caída de su pecho tanto como sus adormiladas extremidades moviéndose contra ella mientras él soñaba.

Tiffany estaba intentando memorizar el papel del páncreas en la producción de la insulina para su clase de biología del siguiente lunes cuando vio la ventana de Skype abrirse en su portátil a su izquierda, acompañado por al ahora familiar tono de llamada del programa. Tiffany sonrió para sí misma mientras movía sus deberes a un lado durante un momento y se estiraba ansiosa para poner el portátil delante de ella. Aceptó la llamada de taeyeon rápidamente, la chica menos apareciendo en la pantalla casi al instante que lo hizo, sus pies sobresaliendo por encima de su cabeza en la pantalla mientras estaba tumbada en la cama, mirando a la cámara.

“Hola,” saludó taeyeon con entusiasmo, lanzándole un beso a tiffany, su mano haciendo un gesto hacia la pantalla brevemente antes de saludarla con facilidad.

“Hola tae,” contestó tiffany, fingiendo que cogía el beso y lanzándole uno de vuelta a su novia. “Te has retrasado un poco hoy,” señaló, mirando al reloj de la parte derecha de la pantalla de su portátil. “¿Va todo bien?” preguntó preocupadamente, taeyeon ni una sola vez se había retrasado a sus llamadas de Skype organizadas. “Incluso empecé con algo de deberes mientras te esperaba.” añadió, cogiendo el cuaderno y sosteniéndolo delante del pantalla para que lo viera.

“Lo siento,” se disculpó taeyeon, una amplia sonrisa en su cara. “Estaba en terapia y la sesión se alargó un poco.”

“¿Por qué?” preguntó interesadamente tiffany. “¿Qué ha pasado? ¿Estás bien?”

“Sí,” contestó taeyeon, la sonrisa colosal aún en su cara. “Estoy más que definitivamente bien” respondió. “De hecho, esta fue probablemente la mejor sesión que he tenido desde que he estado aquí,” divulgó, un destello malévolo en sus ojos.

“Estoy realmente encantada tae,” le dijo tiffany sinceramente. “Siempre me gusta cuando has tenido una buena sesión. Sé que un par de las últimas que tuviste la semana pasada no fueron del todo bien.”

“Sí, pero eso fue la semana pasada,” respondió alegremente taeyeon, quitándose un mechón de pelo de sus ojos que había estado obstruyendo su vista. “Esta es una nueva semana, una semana mejor.”

“Vale,” se rió entretenida tiffany, sintiendo que taeyeon no le estaba contando todo. “¿Qué pasa contigo?”

“Estoy emocionada porque mañana voy a casa,” dijo emocionadamente taeyeon, levantando sus puños delante de ella.

“Eso lo sé tae,” contestó divertida tiffany. “Vas a casa cada viernes…”

“No,” interceptó señaladamente taeyeon. “Voy a casa tiffany,” dijo otra vez, su tono significativo. “Permanentemente.” Añadió cuando tiffany parecía no entender lo que estaba diciendo.

“Espera,” dijo tiffany, la comprensión aterrizando en ella. “Quieres decir, ¿para siempre?” preguntó, una sonrisa esperanzadora apareciendo en la esquina de su boca.

“Para siempre,” confirmó taeyeon y la cara de tiffany se rompió en una sonrisa que iba a juego con la de la chica menor en la pantalla que tenía delante.

“¿En serio?” preguntó acercándose un poco poniéndose sobre sus hombros, intentando contener su emoción. “¿Cuándo pasó eso?” preguntó, su voz elevándose alegremente.

“Justo ahora,” le informó taeyeon. “Mi terapeuta ha dicho que lo he estado haciendo realmente bien y que tengo todas las estrategias que necesito para enfrentarme a las cosas ahora así que,” dijo, pausándose un momento, “dijo que debería ser capaz de tener solo un par de sesiones de terapia a la semana y que puedo tenerlas en casa con mi terapeuta de siempre en vez de con ella.” Reveló amablemente. “Dijo que no tenía que quedarme aquí más…”

“Entonces, ¿eso es todo?” tiffany preguntó encantada, sin querer que taeyeon terminara, su anticipación sacando lo mejor de ella.

“Bueno, tengo que volver una vez al mes para las citas de revisión pero, asumiendo que todo siga yendo bien entonces, sí, eso es todo tiffany. Ha terminado.” contestó.

“Oh Dios mío,” dijo tiffany, esforzándose por quedarse en la cama, el impulso de saltar y dar patadas en el aire de celebración demasiado fuerte para suprimirlo. “Cariño,” dijo con efecto, “¡Eso es increíble!”

“Lo sé ¿verdad?” preguntó taeyeon sonriendo de oreja a oreja. “Estaba empezando a preocuparme de que este día no llegara y tuviera que estar aquí encerrada para siempre.”

“Pero eso no va a pasar,” le recordó tiffany. “Estarás en casa mañana,” dijo felizmente, “de vuelta aquí conmigo y con Jasper…” dijo, recordando al pequeño cachorro y dándose cuenta de su presencia sobre la parte de atrás de sus piernas. “Hey,” le medio susurró, girándose y cogiendo al pequeño perro con cuidado, Jasper abriendo sus ojos cansado y bostezando mientras lo hacía. “Jasper, mira quien es,” le animó, poniéndolo delante del portátil en la cama. “Es mamá,” dijo señalando la pantalla. “Mira Jasper, mira… ¿quién es esa?” preguntó mientras Jasper empezaba a moverse por el colchón hacia el cabecero de la cama. “Hey tae llámale.” La animó y taeyeon hizo lo que le dijo.

“Jasper,” taeyeon llamó tiernamente. “Hey, Jasper,” dijo, “ven aquí chico.”

Tiffany se giró para mirar al cachorro que había dejado de hacer lo que estaba haciendo, su cabeza ladeada hacia un lado, reconociendo la voz de su propietaria pero confundido de donde venía.

“Está escuchando,” compartió tiffany con taeyeon amablemente. “Llámalo otra vez,” dijo y taeyeon obedeció una vez más, la cola del pequeño perro moviéndose con entusiasmo ante el sonido de su voz mientras se tumbaba en la cama al lado de tiffany, pensando que había sido ella la que le había llamado.

“Creo que le gustas más que yo,” comentó taeyeon riéndose un poco, un pequeño indicio de celos en su voz.

“No,” la tranquilizó tiffany, “literalmente no ha dejado de suspirar por ti cuando lo dejamos el domingo por la noche.” Le dijo sinceramente. “Cree que yo le he llamado eso es todo, ¿verdad Jasper?” preguntó, acariciándole detrás de la oreja. “Llámale de nuevo ahora que está aquí.” Sugirió.

Taeyeon hizo lo que le dijo y Jasper miró a tiffany un momento con su cabeza ladeada, antes de girarse en busca de la voz de nuevo, obviamente dándose cuenta de que, de hecho, no era ella la responsable de haberle llamado. Finalmente, Jasper vio a taeyeon en la pantalla y empezó a trepar por el teclado hacia ella, su cola moviéndose con energía mientras taeyeon le decía hola con la mano.

“Hey pequeño,” dijo taeyeon, su tono aniñado, como si estuviera dirigiéndose a un niño. “Te veré mañana ¿vale?”

“Ves,” señaló tiffany. “Reconoce tu voz tae,” la aseguró.

“Parece más grande,” comentó taeyeon riéndose animadamente. “¿Ha crecido?” preguntó.

“No, él solo…él…” empezó, pausándose mientras intentaba quitarle de delante de la pantalla. “Parece que está más grande porque está cerca de la cámara.” Dijo tiffany, cogiendo a Jasper en sus manos y moviéndolo junto a ella mientras se ponía contra el cabecero de la cama, llevando con ella el portátil para ponerlo sobre sus rodillas.

Puso a Jasper en su regazo mirando hacia la cámara y le acaricio hasta que se quedó quieto.

“Ves, aún tiene el mismo tamaño que cuando le viste ayer,” le dijo a taeyeon, tiffany habiendo llevado a Jasper al centro de tratamiento con el resto de las chicas para su visita nocturna de los miércoles.

“¿Estás segura?” preguntó, su cara moviéndose hacia la pantalla, intentando conseguir mejor percepción.

“Estoy segura tae,” se rió ligeramente tiffany. “Lo verás cuando estés en casa mañana. Está casi exactamente igual que hace veinticuatro horas.”

“No te burles de mí,” la regañó juguetonamente taeyeon. “Le echo de menos.”

“Bueno, él también te echa de menos. Los dos lo hacemos.” Le dijo tiffany.

Taeyeon físicamente movió su mano más cerca de la pantalla en un intento de alcanzar la de tiffany, completamente olvidando que estaban totalmente en dos sitios diferentes.

“Whoops,” dijo taeyeon, sus mejillas poniéndose rojas avergonzada mientras su mano se golpeaba contra la pantalla. “Siempre me olvido de que no estoy allí.”

“Todavía no,” le dijo tiffany y taeyeon sonrió, aun con la cara roja por su error.

“Entonces, mañana…” empezó taeyeon sugerentemente, intentando recomponer la compostura imponiendo su dominancia de nuevo. “Estaré allí…”

“Sí,” contestó tiffany, casi sabiendo a donde iba esta conversación por la sonrisa de la cara de taeyeon.

“Y, bueno, tú estarás ahí…” continuó taeyeon, provocadoramente.

“Estaré,” dijo de acuerdo tiffany, su sonrisa ampliándose con las palabras de su novia. “¿Por qué? ¿Querías hacer algo?” preguntó, haciéndose la tonta.

“No sé,” dijo taeyeon haciéndose la recatada. “¿Y tú?”

“¿Podríamos ir a Jimmy’s a cenar?” le sugirió tiffany, a propósito cambiando de tema para irritarla. “Podría llamar a las chicas y hacer una celebración.”

“En realidad tenía algo más en mente,” se rió taeyeon, aunque eso no fuera a pasar no se oponía a la cena con las chicas.

“Oh sí,” dijo tiffany, intentando que taeyeon lo dijera, que fuera la primera en romper su desafío. “¿En qué estabas pensando exactamente?” preguntó.

“Ya sabes en lo que estaba pensando tae,” contestó taeyeon, mordiéndose el labio inferior y tiffany sonrió entretenida con la obvia dificultad de su novia por mantener el dominio de sí misma, el repentino desliz de su apodo evidente.

“Voy a tener que oírte decirlo,” le informó tiffany maliciosamente mientras se divertía viendo a taeyeon retorcerse.

“Jaspers está ahí,” le recordó taeyeon, similarmente a como tiffany le usaba normalmente como escaparse en esos momentos. “Tiene pequeñas orejas.”

“Ha visto cosas peores de lo que posiblemente puedas decir,” se rió tiffany en alto. “¿O no te acuerdas tae? Creo que fuiste tú quien instigaste lo que pasó aquella noche, a pesar de que él estaba allí.”

“Oh, claro,” dijo taeyeon, fingiendo recordarlo y chascando los dedos de su mano derecha dramáticamente, “Me había olvidado de eso.”

“Ouch,” dijo tiffany, fingiendo ser mortalmente ofendida por las palabras de taeyeon. “¿Yo estaba tan memorable entonces?” preguntó.

La esquina de la boca de taeyeon se volvió una sonrisa mientras tiffany repentinamente pensaba en algo.

“En realidad,” dijo, su ceño fruncido pensativamente. “Supongo que no fue tan memorable ¿eh tae?”

“Eres mala,” le dijo taeyeon, “pero, sí, supongo que eso es verdad considerando que tú estabas allí y yo aquí.” reconoció.

“Sabes, aún no me has dicho exactamente qué quieres hacer mañana por la noche,” repitió tiffany,puede que tenga que hacer otros planes…”

“No hay forma de que hagas eso,” le dijo Camila con confianza.

“A lo mejor tendré una oferta mejor,” bromeó tiffany y taeyeon hizo un puchero, haciendo que tiffany alejara los ojos de la pantalla rápidamente. “Eso no es justo,” dijo tiffany y taeyeon se rió.

“Lo sé, pero es tan efectivo,” contestó entretenida. “Además es tu turno para decirlo. No el mío.” dijo. “Entonces, no voy a decirlo.”

“Te doy dos minutos antes de que prácticamente me estés suplicando,” le devolvió tiffany, levantando su vista una vez más, dispuesta a ganar a taeyeon en su propio juego. “Tienes cero fuerza de voluntad tae.”

“Eso no es verdad,” dijo taeyeon ofendida. “¿Recuerdas aquella vez donde pensé que no sería capaz de terminarme aquellas tres pizzas familiares por mi cuenta?” recordó. “Luché en ese reto y te probé que estabas equivocada.”

“tae, y casi vomitas porque habías comido demasiado y después físicamente no te pudiste mover como, hasta después de dos horas.” Dijo tiffany, poniéndose un mechón de pelo detrás de la oreja.

“Mira tiffany,” dijo taeyeon, yendo directa al asunto. “Simplemente sácanos a ambas de la miseria y dilo…después podemos seguir hablando de otras cosas.”

“No voy a hacerlo tae,” le dijo decisivamente tiffany. “Deberías saber lo cabezota que puedo ser.”

“Oh, vamos.” Se quejó taeyeon, desesperada por no ser la que estallaba de nuevo. “Siempre lo digo yo.”

“Eso es porque solo tienes una cosa en mente,” le recordó tiffany.

“Por favor tiffany,” le suplicó prácticamente taeyeon a su novia. “Hazlo por mí. Me quieres ¿verdad?”

“Sabes que lo hago,” contestó tiffany, riéndose con los intentos de taeyeon intentando cambiar de táctica, “pero es demasiado divertido terminar con esto tan fácilmente.”

“Ugh,” gruñó taeyeon, frunciendo el ceño. “Vale, si quieres oírle decirlo, entonces lo que tengo en realidad en la mente nos involucra a mí, a ti y una gran falta de ropa.”

“¿nos vamos a nadar?” bromeó tiffany taeyeon puso los ojos en blanco, dándose cuenta de que su novia iba a hacer que lo dijera directamente.

“Mañana por la noche quiero tener o contigo.” Respondió taeyeon, gruñona. “Ahí, ¿estás feliz ahora?”

“Oh, vale.” Dijo tiffany como si acabara de entender las insinuaciones de taeyeon. “¿Cómo exactamente propones que hagamos eso?” preguntó tiffany, disfrutando del estado de humor de taeyeon, la forma adorable en la que su nariz de encogía molesta. “Tus padres estarán en casa así que tu casa queda fuera de esta pregunta…”

“No había pensado en los detalles pero, han pasado diez semanas desde que estuvimos juntas en condiciones y ¿no crees que mañana sería la oportunidad perfecta para celebrar nosotras nuestra reunión física, con, bueno, una reunión física?” divagó, levantado una ceja sugerentemente.

“No podría pensar en nada más que me gustaría estar haciendo mañana por la tarde,” finalmente admitió tiffany, haciendo a taeyeon sonreír ampliamente, “Entonces, supongo que es una buena cosa que tenga la casa para mí sola ¿no?”

“¿En serio?” preguntó taeyeon. “¿Dónde va a estar todo el mundo?”

“Fuera,” dijo tiffany simplemente, sonriendo.

“¿Dónde?” cuestionó taeyeon, cambiando su peso sobre los codos, evidentemente cansándose después de estar mucho tiempo en la misma postura.

“¿Importa?” se rió tiffany.

“Supongo que no,” contestó taeyeon, riéndose. “Solo estaba preguntando, eso es todo.”

“Bueno, yo también me estaba preguntando algo,” dijo tiffany y taeyeon ladeó su cabeza hacia un lado con interés, esperando que su novia continuara.

“¿Qué?” preguntó taeyeon mientras miraba a tiffany mirándola fijamente a través de la pantalla, acariciando a Jasper cariñosamente mientras dormía en su regazo.

“¿Me estaba preguntando si recibiste mi mensaje?” preguntó tiffany, su mano izquierda reapareciendo en la imagen de donde había estado puesta fuera de la vista.

“No, que…” empezó taeyeon, su cabeza girándose hacia la derecha mientras el tono de mensaje de su teléfono se oía a través de su conexión. Se movió de la cama, levantándose para dejar a tiffany mirando a la ahora casi vacía pantalla, el arrugado edredón de taeyeon y la almohada eran las únicas cosas visibles contra la pared beige.

Tiffany esperó pacientemente a que taeyeon volviera, su ceño frunciéndose confundida cuando no lo hizo.

“¿tae?” llamó tiffany preocupada. “¿Estás bien?” preguntó, inclinándose un poco como si eso fuera a ayudarla a tener una mejor visión de la habitación y, como resultado de su novia. “¿tae cariño?”

Aún taeyeon no había vuelto a la cama y tiffany sintió que su corazón se caía en su pecho. Puso a Jasper en la cama a su lado y cogió el portátil, girándolo un poco en el ángulo, intentado ver qué estaba pasando, pero, dolorosamente incapaz de cambiar la posición del ordenador del otro lado de la llamada.

“Jesús tae me estás asustando,” dijo preocupadamente tiffany. “¿Estás bien? ¿Cariño?”

Tiffany extendió la mano para coger el móvil, preparada para llamar al centro de rehabilitación, preocupada por la larga ausencia de taeyeon, especialmente después de haber presenciado a su novia teniendo un ataque vía Skype hace un par de semanas, la chica menor convulsionando violentamente en la cama mientras ella miraba, virtualmente inútil, desde su habitación.

Tiffany había llamado al centro de rehabilitación casi inmediatamente cuando pasó y habían mandado a alguien para ir a ver a taeyeon al momento, cerrando el portátil de su novia y dejando a tiffany sin saber qué pasó después. Pero con suerte, taeyeon había vuelto de nuevo después de solo unos minutos, un poco desorientada pero relativamente sin nada más que preocuparse. Había sido revisada por el médico del centro sin tener que llevarla al hospital, pero tiffany había estado paralizada con miedo, el recuerdo del último ataque de taeyeon y la consecuente estancia en la unidad de cuidados intensivos se repetía en su mente.

“Joder tae, di algo,” suplicó tiffany, su mano apretando el móvil ansiosamente. “¿Estás bien?”

“No,” se escuchó la voz de taeyeon y tiffany soltó un largo suspiro, sin darse cuenta ni siquiera de que lo había estado conteniendo. “Creo que me acabas de matar,” dijo, su pequeño cuerpo reapareciendo en la pantalla mientras se tumbaba en la cama otra vez.

“Me has dado un susto de muerte,” maldijo tiffany, su preocupación manifestándose en enfado.

“Lo siento,” se disculpó taeyeon sinceramente, dándose cuenta de la evidente angustia de tiffany, mordiéndose su labio inferior arrepentida.

“Pensé que habías tenido otro ataque o algo,” admitió tiffany, el tono duro de su voz casi desapareciendo por completo mientras estudiaba de cerca a su novia, sus miedos descansando tan solo al mirarla como había hecho hace unos momentos.

“Lo siento de verdad tiffany,” dijo arrepentida taeyeon, poniéndose más cerca de la cámara y bajando su cara en frente de esta. “Estoy bien, de verdad.” La tranquilizó. “¿Ves?”

“¿Estás segura?” preguntó tiffany necesitando la confirmación verbal de taeyeon antes de estar completamente satisfecha.

“Sí,” contestó. “Estoy bien cariño.” Le aseguró. “Solo estaba luchando para formular un pensamiento coherente porque cierta persona me ha mandado una foto desnuda y casi me mata.” Le informó sonriendo ampliamente. “Quiero decir, deberías verla. Esta persona es caliente, como, ella debería ser una supermodelo, es tan atractiva…”

“¿Te ha mandado yeri otra selfie desnuda?” bromeó tiffany, permitiéndose a sí misma relajarse finalmente con las formas juguetonas de taeyeon. “Ya hablé con ella de lo inapropiado que es eso.” Dijo con una sonrisa apareciendo en sus labios. “Tú eres mi novia, no la suya.”

“Lo sé pero, ¿qué puedo decir?” contestó taeyeon, continuando con la farsa y echándose atrás alejándose de la cámara un poco. “Soy propiedad premium. Todo el mundo quiere salir conmigo. Tienes competición dura hwang…”

“A lo mejor,” musitó tiffany pensativamente, siguiendo con ello, “pero yo tengo algo que ellos no tienen.” Informó a taeyeon.

“Oh sí y ¿qué es?” preguntó taeyeon.

“Jasper,” contestó tiffany, cogiendo al cachorro y poniéndolo de nuevo en su regazo, el pequeño perro lamiendo la parte de atrás de su mano con entusiasmo.

“Es un argumento irresistible,” contestó taeyeon, riéndose ligeramente.

“Entonces, ¿crees que yeri es caliente?” preguntó tiffany en broma.

“Sí,” dijo taeyeon, levantando su teléfono y moviéndolo delante de la pantalla para que tiffany lo viera. “Te enseñaría la foto pero es algo privado. Lo siento.”

“¿Se parece a esta?” preguntó tiffany, levantando su propio teléfono hacia la webcam y mostrando la foto que se había hecho hace casi una semana y que nunca había mandado, sintiéndose poco segura.

“Huh,” dijo taeyeon, mirando entre las dos fotos. “Ahora que lo dices… la que yeri me mandó se parece a esa.” señaló, entrecerrando sus ojos dramáticamente. “¿También te ha mandado una? ¿A qué juego está jugando? Esto no está para nada bien. Pensé que yo era la única persona a la que amaba. Nos íbamos a casar y a tener juntas hijos gigantes y descoordinados.”

“tae,” se quejó tiffany, intentando que su novia se pusiera seria por un segundo. “Sinceramente, quiero decir, está bien…”

“¿Estás de broma?” preguntó taeyeon besando la pantalla del móvil con adoración, sintiendo la inseguridad de tiffany. “Eres increíble tiffany, por favor no sientas vergüenza o inseguridad…”

“¿En serio?” preguntó tiffany y taeyeon asintió con su cabeza en respuesta.

“Si estuviera ahí te besaría ahora,” le dijo taeyeon a tiffany, su cara arrugándose mientras llegaba a una decisión. “En realidad,” dijo, sentándose mejor, su pero sobre sus codos mientras se inclinaba y plantaba un suave beso contra la cámara de su portátil. “Ahí,” dijo, sonriendo ampliamente.

“Eres tan idiota,” se rió tiffany y taeyeon besó la cámara de nuevo en respuesta haciendo que su novia se riera más.

“No puedo creer que te sientas insegura con esta foto,” le dijo seriamente taeyeon. “Eres probablemente la persona más preciosa que he visto nunca.” Compartió con ella sinceramente.

“Nunca me crees cuando yo te digo eso.” Comentó tiffany. “¿Por qué debería creerte? ¿Cuál es la diferencia?” preguntó con interés.

“La diferencia es que yo no soy tan perfecta como tú…” empezó taeyeon.

“Amo tus cicatrices tae,” le dijo a sabiendas tiffany, interrumpiéndola. “Deberías amarlas también. Son un recuerdo de todo por lo que has pasado y todo a lo que has sobrevivido. Deberías celebrarlas.”

“No creo que nunca las vaya a amar.” Admitió taeyeon. “Pero, creo que estoy empezando a aceptarlas más y esa es la cosa más importante.” Le informó. “Pero tú…no tienes nada por lo que sentirte insegura. Eres maravillosa tiffany,” declaró taeyeon, extendiendo su mano hacia adelante en un intento de acariciar la frente de tiffany tranquilizadoramente. “De hecho, si estuviera contigo ahora mismo no creo que siguiéramos hablando de esto.” Dijo sugerentemente. “A lo mejor la única forma para demostrarte lo mucho que me atraes es enseñándotelo…” dijo mientras su voz se apagaba.

“Bueno, tenemos mañana para eso.” Se rió tiffany y taeyeon levantó una ceja seductoramente.

“O…” dijo con un destello pícaro en los ojos, sonriendo ligeramente. “Podemos…ya sabes…”

“Oh no,” contestó tiffany, mirando hacia la puerta preocupada con el pensamiento. “Mis padres están abajo.”

“No te pararon la última vez,” la recordó taeyeon.

“Eran las doce de la noche,” contestó divertida tiffany. “Nadie iba a entrar en mi habitación sin avisar pero ahora pueden hacerlo. Cómo explicaría yo sentada aquí… ¿ya sabes?” preguntó. “¿Haciendo eso?”

“Diles que eres una adolescente enamorada,” sugirió inútilmente taeyeon. “Que tu novia está lejos y que es la única manera para nosotras de estar juntas hasta que esté en casa.”

“¿Quieres que viva hasta mañana?” preguntó tiffany. “Creo que preferiría morir antes que explicar la situación.”

“Morir está sobrevalorado,” dijo taeyeon y tiffany sonrió; encantada de escuchar esas palabras en la boca de su novia. “Además, no te escuché quejarte esa vez que lo intentamos,” le recordó taeyeon. “De hecho, parecía que te lo estabas pasando bien.”

“Fue definitivamente….” dijo, pausándose por un momento para pensar en la palabra correcta para describir el experimento suyo y de taeyeon. “Interesante.” admitió, poniéndose roja con el recuerdo.

“Tienes que admitir que fue algo excitante,” la animó taeyeon y un lado de la boca de tiffany se convirtió en una media sonrisa.

“No estoy negando eso.” Dijo sinceramente tiffany.

“Pero solo lo hicimos una vez.” Señaló taeyeon sintiéndose un poco perpleja. “¿Por qué fue eso?”

“Seguías quedándote dormida mientras hablábamos y nunca volvimos a tener la oportunidad,” se rió ampliamente tiffany con el recuerdo de todas las veces que había estado tumbada en la cama, metida en las conversaciones con taeyeon, solo para encontrar que la otra chica se había dormido delante de sus ojos.

“Estaba cansada.” Se quejó haciendo un puchero taeyeon. “Tengo un montón de sueño que recuperar ¿recuerdas? Tengo pesadillas.”

“Ni una vez me he despertado porque hayas estado gritando al otro lado del portátil.” Le informó tiffany.

Cada vez que taeyeon se había quedado dormida, su portátil estaba apoyado en la mesilla al lado de su cama, tiffany había puesto el suyo en la almohada a su lado, imaginando que estaban durmiendo juntas. Disfrutaba viendo dormir a taeyeon, el tono relajado de sus facciones, lo alegre que parecía la cara de su novia haciéndola feliz de una manera que ni siquiera sabía que fuera posible. Si taeyeon parecía tranquila, tiffany automáticamente sentía una serenidad cayendo sobre ella en respuesta. Era como si su estado de humor directamente estuviera relacionado con el de taeyeon. Si su novia estaba nerviosa, ella también lo estaba. So estaba estresada, tiffany lo sentía también. Si estaba calmada, tiffany instantáneamente se sentía tranquila también.

“Sabes que duermo mejor cuando tú estás ahí,” le dijo sinceramente taeyeon. “¿No es por eso por lo que dejamos de decir ‘Buenas noches’ por decir de alguna manera?” preguntó.

Después de que taeyeon se quedara dormida unas cuantas veces, tiffany y ella habían dejado de cerrar sesión por las noches, en ese caso dejando la conversación de Skype abierta hasta que se despertaban a la mañana siguiente.

“En parte,” contestó tiffany. “Mayormente porque disfruto viéndote dormir. Encuentro reconfortante saber que estás bien.”

“Quiero dormir a tu lado siempre,” la informó taeyeon. “¿Crees que tendrías un problema con eso?” preguntó.

“No,” contestó riéndose tiffany con las palabras de taeyeon. “De hecho, no puedo esperar a que seamos capaces de pasar los fines de semana descansando acurrucadas juntas en la cama, solo levantándonos para comer y beber.”

“Probablemente voy a necesitar hacer pis también en algún momento,” dijo riéndose taeyeon.

“Vale, entonces nos levantaremos solo para comer, beber y hacer pis.” Se rió tiffany, “Pero eso es todo.”

“¿Qué pasa si tenemos que dejar salir a Jasper?” preguntó lógicamente taeyeon.

“Le pondremos una puerta para perros.” Contestó tiffany prácticamente. “De esa forma puede salir él solo.”

“Es una vergüenza que no podamos hacer eso este fin de semana.” Dijo taeyeon arrepentida. “Creo que suena como una buena manera de pasar el día.”

“Lo haremos un día.” La tranquilizó tiffany. “Podremos hacerlo tanto que probablemente te acabarás cansando después de un tiempo.”

“No creo que me pueda cansar nunca de estar contigo tiffany.” Dijo taeyeon.

“Entonces…” empezó tiffany pero fue interrumpida por un golpe en la puerta, la cabeza de su madre apareciendo después de un segundo.

“La cena está lista,” le dijo a tiffany, quien se giró para mirar en dirección de la interrupción.

“Vale mamá,” dijo tiffany, volviendo a mirar a taeyeon quien estaba poniendo una cara triste en la pantalla.

“Hola taeyeon,” dijo en alto sunwa, una sonrisa en su cara mientras se giraba y desaparecía detrás de la puerta de nuevo, cerrándola suavemente detrás de ella.

“¡Hola!” gritó taeyeon, diciendo hola con la mano a la pantalla con entusiasmo a pesar de que la madre de tiffany no podía verla.

“Se ha ido tae,” le informó tiffany a su novia entretenida.

“Oh,” dijo taeyeon riéndose. “Whoops.”

“Me tengo que ir,” le dijo tiffany disculpándose. “No tardaré demasiado,” dijo.

“Estaré aquí,” le dijo taeyeon, cogiendo el libro que estaba leyendo recientemente; ‘The Old Man and the Sea’ poniéndolo delante de la pantalla. “Leeré hasta que vuelvas.”

“Vale,” dijo tiffany, dejando a Jasper en la cama delante del portátil y lanzándole un beso a taeyeon, tocando la pantalla con sus dedos mientras la chica menor arrugaba su nariz en respuesta al gesto. “Nos vemos en un minuto.”

“Adiós,” dijo taeyeon, abriendo el libro y mirando a la página donde lo había dejado. “Vale Jasper,” escuchó tiffany decir a taeyeon hacia el cachorro quien estaba tumbado para dormir en la cama. “¿Dónde estábamos?” preguntó y tiffany sonrió para sí misma, parándose en la puerta un minuto. “Ah, sí,” dijo, ‘Si los otros me oyen hablando en alto pensarán que estoy loca. Pero como no lo estoy, no me importa…’

Tiffany sonrió ante la ironía de las palabras antes de girarse ir hacia las escaleras, dejando a taeyeon como siempre lo hacía, leyéndole a Jasper, quien escuchaba atento, mientras ella cenaba con su familia.