Yuri se alejó de la puerta sobre la que estaba apoyada poniéndose así sobre sus pies, caminado por el suelo hasta taeyeon, con un paso intimidatorio cada vez.
 

“¿Cuándo volviste a la ciudad?” preguntó yuri con interés mientras se paraba delante de taeyeon, ignorando todas las reglas reconocidas sobre el apropiado espacio personal poniéndose casi encima de la chica menor. “Pensé que tus padres te habían mandado fuera a vivir con otros locos en rehabilitación.”
 

“No estoy loca,” informó taeyeon a yuri, moviéndose un poco hacia atrás para dejar algo de distancia entre ella y la otra chica, “y no estoy de vuelta. Solo estoy…de visita.” Terminó tímidamente.
 

“Oh, ¿no estás loca?” preguntó yuri, riéndose malévolamente. “¿En serio?” cuestionó, dando un paso más hacia taeyeon de nuevo para que así tuviera que dar un paso hacia atrás para evitar el contacto físico con la rubia. “La última vez que te vi terminé teniendo una reconstrucción facial no planificada.” Le recordó a taeyeon, “¿o te has olvidado completamente de eso?”
 

“Escucha yuri,” dijo taeyeon, poniendo sus manos en alto delante de ella en un intento de mantener algo de distancia entre ellas. “Estoy realmente arrepentida de lo que pasó y debería haberme disculpado por lo que hice entonces pero, no he tenido la oportunidad porque he estado fuera,” le dijo a la otra chica sinceramente. “No debería haberte golpeado nunca,” reconoció avergonzada. “Fue un error y sé que no puedo deshacerlo, que no puedo cambiar el pasado entre nosotras, pero, sinceramente, me siento muy culpable sobre eso y probablemente será algo de lo que me arrepienta el resto de mi vida.”
 

 

 

“Definitivamente lo lamentarás,” le dijo yuri agresivamente, caminando de nuevo hacia ella y forzando a taeyeon a ir hacia atrás contra la pared del baño estando así atrapada. “Me rompiste la jodida nariz,” le informó enfadada. “Además me hiciste una jodida fractura orbital. ¿Sabes lo dolorosas que son?”
 

“Bueno, tu cara rompió mi mano si eso te hace sentir mejor sobre lo que pasó,” respondió taeyeon, levantando su mano derecha con énfasis mientras intentaba aportar un poco de humor en un intento de apaciguar la situación.
 

“Preferiría romperte la cara,” dijo yuri a través de sus dientes apretados, su resentimiento palpable mientras se echaba hacia adelante, presionando a taeyeon más contra la pared. “¿Qué es lo que dicen?” preguntó retóricamente. “Oh sí, ojo por ojo.” estableció. “Parece que encaja, ¿no crees?” cuestionó amenazadoramente “Después de que tu casi me dejaras ciega sería algo poético producirte el mismo castigo a ti.”
 

“Lo siento,” se disculpó taeyeon otra vez, encogiéndose contra la pared que tenía detrás. “No quería…yo…” vaciló, pensando por un momento, “fue un accidente.”
 

“¿Fue un accidente?” se rió yuri sin amabilidad de nuevo. “Tú eres un jodido accidente,” le dijo a taeyeon, su tono malévolo. “Se supone que no deberías estar en este puto lugar. Deberías estar jodidamente muerta de todos modos. Eres un error taeyeon, una gran cósmica y jodida cagada.” Soltó maliciosamente. “¿Alguna vez te has preguntado por qué acabas terminando de vuelta en el hospital?” le preguntó yuri. “Es la forma en la que el universo está intentando borrar este puto error.”
 

“Eso no es…” empezó taeyeon pero yuri la cortó, forzándola contra la pared con la palma de su mano mientras la empujaba con fuerza contra el hombro de la morena.
 

 

“No puedes mentir a la muerte y no esperar que vuelva y te muerda el culo,” espetó yuri fuertemente. “El destino tiene su plan para ti taeyeon y tú lo jodiste, tanto como has jodido todo lo demás que has hecho con tu tiempo extra que de alguna manera te ha sido garantizado siendo lo suficiente afortunada.”
 

 

 

Yuri movió su mano en el hombro de taeyeon hacia su cuello, apretando la piel ahí dolorosamente entre sus dedos y haciendo que la chica menor hiciera una mueca.
 

“No puedo creer alguna vez pensara que había tenido sentimientos por ti,” siseó yuri práctiamente, soltando su agarre del trapecio de taeyeon y extendiendo su mano como si fuera a golpearla en la cara, parándose cerca y disfrutando del miedo de taeyeon, la morena haciendo una mueca en respuesta al estímulo. “¿Quién coño querría estar contigo?” le preguntó yuri y taeyeon suprimió el impulso de decir, ‘tiffany’. “Eres jodidamente patética, mírate.” La rubia dijo vehementemente. “No eres tan jodidamente dura cuando no tienes el elemento de sorpresa de tu lado ¿no?”
 

“No quiero pelearme contigo,” le dijo taeyeon a yuri, moviéndose contra la pared. “Por favor, siento lo que pasó pero…”
 

“No me importa una mierda lo que quieras,” interrumpió yuri fuertemente. “Quiero que pagues por lo que me hiciste y no me voy a ir de aquí hasta que lo hagas.”
 

Taeyeon intentó hacer un movimiento hacia la puerta y moverse hacia un lado de yuri para pasarla, pero, la rubia la agarró de la muñeca fuertemente y la volvió a empujar contra la pared con fuerza.
 

 

“Joder, no te vas a ir aún,” le dijo enfadada. “Yo no me pude ir cuando tu perdiste tu mierda y proyectaste tu propio odio hacia mi cara.”
 

Taeyeon levantó una ceja en respuesta al comentario, su propio enfado creciendo ante la incapacidad de yuri para aceptar cualquier responsabilidad de lo que pasó entre ellas en la biblioteca aquel fatídico día.
 

“¿Es eso lo que piensas?” preguntó taeyeon, su voz con más confianza y menos tímida que antes, impulsada por su enfado. “¿Que te golpeé como una forma de enfrentarme a mis propios sentimientos reprimidos?” continuó, una ligera risa escapándose de sus labios.
 

“¿Por qué demonios sino me ibas a golpear?” preguntó, “A menos que de verdad seas una completa psicópata.” Comentó secamente yuri.
 

“No sé yuri,” dijo taeyeon poniéndose recta. “A lo mejor tenía algo que ver con el hecho de que metiste tu jodida lengua hasta mi garganta sin mi permiso.” Le informó francamente. “O a lo mejor porque básicamente insinuaste que era una puta auto obsesionada que saldría con cualquiera que le prestara la mínima atención.” continuó, dando un paso hacia adelante poniéndose sobre el suelo. “Incluso puede que tenga que ver algo con el hecho de que tu mentiste sobre lo que pasó entre nosotras a tiffany. ¿Acaso has considerado eso?”
 

“Oh por favor,” se burló yuri. “No finjas que no estabas coqueteando conmigo en la biblioteca taeyeon,” siguió. “Querías que te besara y cuando tiffany te encontró entraste en pánico.”
 

“¿Crees que estaba coqueteando contigo?” le preguntó taeyeon, riéndose ante el pensamiento. “Demonios, no puedo coquetear ni para salvar mi vida.”
 

 

“Me podías haber engañado,” le dijo yuri. “Estás olvidando que te vi encenderte con tiffany justo aquí en este mismo restaurante. No eres tan inocente como piensas taeyeon.”
 

“tiffany es diferente,” contestó taeyeon. “Amo a tiffany, pero, a ti no te quiero yuri. Ni siquiera me gustas para ser sincera. No has hecho nada más que darme dolores de cabeza desde la primera vez que te conocí y confía en mí,” dijo intencionadamente, haciendo una pausa para el efecto. “Puedo categóricamente decirte que nunca pensé coquetear contigo. A penas puedo soportar estar cerca de ti más de cinco minutos.”
 

 

“Vigila tu boca,” respondió yuri furiosamente. “¿Te estás olvidado de que te salvé tu puta vida una vez? No es que me tuviera que haber molestado, como lo hice,” terminó, mirando a taeyeon de arriba a abajo significativamente.
 

 

“No me salvaste la vida,” dijo en desacuerdo taeyeon divertida ante la ideología de yuri. “Fuiste y trajiste a la enfermera de la escuela. Apenas fue heroico. Tiffany ha salvado mi vida, pero, ¿tú? No, ni siquiera te has acercado a ello.”
 

 

“Entonces ¿Por qué me lo agradeciste después?” le preguntó irritada yuri.
 

“Estaba siendo amable,” contestó sinceramente taeyeon, “porque me ayudaste yuri, pero, no me salvaste la vida.” Le informó. “Eres más ilusa de lo que yo soy si crees eso.”
 

“Eres una jodida puta,” expresó yuri. “La gente cree que eres tan dulce e inocente, pero no lo eres,” divulgó. “Todos sienten lastima por ti porque eres prácticamente una discapacitada. Tú literalmente me pegaste una buena y no te castigaron por ello porque tienes una puta lesión cerebral. ¿Qué puta excusa es esa? Sabías lo que estabas haciendo. Deberías haber sido expulsada por lo que me hiciste y a cambio te dieron una suspensión de dos semanas en la escuela… ¿cómo es eso justo?”
 

“¿Crees que tenía alguna idea de lo que estaba haciendo cuando te golpee?” le preguntó incrédula taeyeon. “No soy una persona violenta…”
 

 

+

 

 

 

“Eso no es verdad,” intercedió yuri. “Estaba allí cuando golpeaste a la Señorita boa en la cara y explotaste con David en la cafetería. Eres violenta; es solo que tienes una muy buena excusa para justificar tus acciones si lo necesitas.”
 

“Si hubieras escuchado algo de lo que he dicho entonces sabrías que no estoy intentando excusarme por lo que he hecho,” dijo taeyeon negando con la cabeza incrédulamente, “ya te he dicho que siento lo que pasó. Acepto que cometí un error, pero, la realidad es que tengo un problema con mi lóbulo frontal desde el accidente,” dijo taeyeon moviendo su cabeza. “No puedo controlar mis emociones más que un niño petulante a veces.”
 

“¿En serio?” le preguntó yuri sin creérselo. “¿De verdad esperas que me crea esa mierda?”
 

“Vale, deja que te lo explique de una forma en la que me entiendas,” le dijo taeyeon, suspirando con frustración. “Un coche sólido de metal golpeó con cabeza a más de 80 kilómetros por hora y de algún modo,” dijo sarcásticamente, “consiguió dañarme una gran parte de mi cerebro donde hizo un surco hasta mi cráneo.” Explicó. “Entonces, mi cerebro no funcionad como el tuyo yuri; no me frena de hacer cosas estúpidas como golpear a la gente cuando estoy estresada o emocional. No tengo auto control, soy impulsiva, así que, si la gente me ataca, o me amenaza entonces reaccionaré sin pensar ni un solo momento en las consecuencias.” Se pausó por un momento mientras yuri la miraba de cerca, la cara de la rubia traicionando a su cara sin tener ninguna pista de lo que estaba pensando. “Soy como un perro,” aclaró taeyeon, arrepintiéndose de la elección en la comparación cuando vio una sonrisa en la cara de yuri en respuesta. “S le tientas, te hace daño o te empuja, te morderá la jodida mano.” Dijo francamente. “Son solo tolerantes hasta un punto y si les sacas de quicio mejor estate preparado para enfrentarte con su ira porque una vez que hayas dado la vuelta a ese interruptor todo el control consciente se ha ido y solo actuará por impulsos.”
 

“Eso es una jodida mierda,” respondió yuri cuando taeyeon había terminado y vio que estaba ahora completamente cansada de su conversación e hizo un movimiento de pasar alrededor de yuri de nuevo. “¿Dónde coño crees que vas?” le preguntó yuri, agarrando el antebrazo de taeyeon y tirando de él fuertemente para pararla en sus intenciones.
 

“No necesito justificarme delante de ti,” le dijo taeyeon. “Me disculpé por lo que pasó y he aceptado mi responsabilidad por mi parte en ello. No tenemos nada más que decirnos,” le informó a yuri, haciendo un movimiento para salir del baño otra vez.
 

 

“De ninguna manera hemos terminado aquí,” dijo en desacuerdo yuri enfadada, su mano tirando de antebrazo de taeyeon dolorosamente.
 

“Déjame ir,” le instruyó taeyeon, su voz baja mientras su mano izquierda intentaba soltar los dedos de yuri alrededor de su bicep.
 

Cuando yuri no soltó su agarre del brazo de taeyeon, la chica menor pisó con su tacón en el pie de yuri violentamente, provocando una satisfactoria maldición de la boca de la otra chica.
 

 

“Joder,” soltó yuri, agarrando la muñeca izquierda de taeyeon mientras intentaba irse de ella de nuevo. La retorció violentamente en su agarre, su fuerza excediendo mucho la del brazo dañado de la morena. “Tú pequeña puta,” farfulló, intentando retomar el control de la situación de nuevo.
 

“Mierda,” maldijo taeyeon, lágrimas saliendo de sus ojos mientras yuri giraba su brazo izquierdo más, un afilado dolor extendiéndose en su antebrazo, su cuerpo al completo contorsionándose en un intento de soltar su muñeca del agarre.
 

“Oh,” dijo yuri con una mirada vengativa en su cara al darse cuenta de que podía explotar una de las debilidades de taeyeon en compensación por el crédito que le debía la chica menor. “Eso duele ¿verdad?” preguntó, girando más la muñeca de taeyeon e inclinándose sobre ella.
 

La rodilla izquierda de taeyeon se dobló mientras intentaba compensar la posición rara de su brazo y una cara de desprecio apareció en yuri ante esa visión.
 

“Joder,” maldijo taeyeon, mordiéndose fuerte el labio inferior y haciéndose sangre mientras intentaba sofocar el doloroso sollozo que quería salir.
 

“¿Qué tal si en vez de un ojo por ojo simplemente rompo tu jodida muñeca a cambio?” preguntó yuri con desdén, aplicando presión a la extremidad de nuevo y causando que taeyeon llorara del dolor.
 

“¿Qué tal si la dejar irse antes de que te rompa tus putas piernas?” la advirtió tiffany, habiendo ido al baño en busca de taeyeon, preocupada porque se había ausentado demasiado tiempo.
 

“Oh que te jodan tiffany,” contestó yuri, evidentemente sin estar preocupada por la amenaza e incrementando su torsión en la muñeca de taeyeon, la chica menor cayendo en sus rodillas más que dolorida. “Esto es entre taeyeon y yo. No tengo problemas contigo además de tu cuestionable elección de novia.”
 

“He dicho que la dejes irse,” le dijo tiffany enfadada, empujando fuerte a la rubia por un costado y dejándola sin equilibrio.
 

Yuri miró a tiffany con una expresión sorprendida en su cara, como si no hubiera esperado que la morena fuera en realidad a tocarla, aún menos a empujarla.
 

“¿Qué coño tiffany?” preguntó yuri; su mano aun firmemente alrededor de la muñeca de taeyeon, su agarre sin relajarse. “¿Eres estúpida? Te mataré si me tocas otra vez.”
 

“Joder. Pruébalo. ” la retó tiffany, empujando a yuri con fuerza después de cada palabra hasta que completamente perdió su posición y tuvo que soltar la muñeca de taeyeon para estabilizarse contra la pared para prevenir caerse completamente.
 

Tiffany se agachó y cogió la mano derecha de taeyeon amablemente, ayudando a su novia a ponerse de nuevo sobre sus pies. Tiffany vio a yuri abalanzarse contra taeyeon por el rabillo del ojo, la rubia indignada ante su llegada y por la falta de restitución de taeyeon a cambio de las heridas que había tenido en su cara por las manos de la chica menor.
 

“¡Ni se te ocurra pensar en tocarla!” la advirtió tiffany furiosamente y extendió su brazo golpeando a yuri contra la pared fuerte, dejándola sin aire. “Lo digo en serio yuri, ni se te ocurra ponerme a prueba…”
 

Inmovilizó a yuri ahí durante un momento con su mano pero taeyeon extendió su mano rápidamente, intentando hacer que soltase a la otra chica.
 

 

“tiffany, solo vámonos,” dijo taeyeon ansiosamente, preocupada por la mirada enfurecida en la cara de su novia, preocupara de que pudiera meterse en algún problema si hacía algo para seriamente herir a yuri. “No merece la pena. No seas estúpida, ¿por favor?” suplicó. “No dejes que se interponga entre nosotras otra vez. Mira lo que pasó la última vez que una de nosotras la golpeó…” dijo mientras se apagaba su voz y tiffany se giraba para mirar a taeyeon, dándose cuenta de la expresión llena de pánico de su cara.
 

Bajó su mano de donde la tenía presionada fuerte contra el pecho de yuri y se giró de cara a taeyeon, extendiendo su mano para tomar su mano derecha para así poder irse.
 

“Puta zorra,” murmuró yuri sin aliento echándose para adelante intentando tirar a taeyeon al suelo a pesar de la advertencia de tiffany.
 

Tiffany se giró en sus talones rápidamente, sintiendo el ataque, y cortó el corto intento de yuri mientras agarraba el sweater de la rubia en sus manos durante un momento, haciendo que diera vueltas y soltándola después de un momento para así ir volando hasta la papelera que estaba en la esquina de la habitación, su cuerpo cayendo al suelo en lo alto del recipiente de metal con un fuerte golpe.
 

“Joder,” gruñó yuri y tiffany caminó hacia ella, agachándose para encontrarse con su mirada mientras intentaba recomponerse mientras aún estaba tumbada en una pila de basura.
 

“Si vuelves a tocar a taeyeon otra vez,” dijo tiffany, su voz lenta y amenazadora, “te juro por Dios que tendrás más que solo una jodida nariz rota yuri,” terminó, levantándose y cogiendo la mano derecha de taeyeon en la suya de nuevo.
 

“¿Qué demonios siquiera ves en ella?” preguntó yuri, limpiándose la basura de su regazo con una mano. “Es jodidamente patética,” dijo yuri intentando provocar a tiffany. “Ni siquiera debería estar aquí, debería estar muerta.” continuó. “Si ella simplemente hubiera muerto como se suponía que tenía que hacer, entonces estarías conmigo en vez de con ella, lo sabes ¿verdad?”
 

“¿Sabes lo que es patético yuri?” le contó tiffany, el nivel de su voz elevándose mientras se giraba para mirar a la chica que estaba luchando por ponerse sobre sus pies. “Tú.” Le dijo simplemente. “Tú eres patética y no saldría contigo ni aunque fueras la última persona viviente en este planeta. Taeyeon merece diez veces más la pena que tú.” continuó. “Tú eres una pobre excusa para un ser humano.” Estableció tiffany. “A pesar de las lesiones de taeyeon ella es aún más compasiva, se preocupa más y es más inteligente de lo que eres o de lo que podrías llegar a esperar ser. Por qué coño no te miras en el espejo y obtienes algo de perspectiva antes de seguir llamando a otra gente patéticos.”
 

Con eso, tiffany se giró y dirigió a taeyeon hasta la puerta del baño, dejando a yuri mirando cómo se iban, la irritación extendiéndose por su cara cuando taeyeon se giró para mirar sobre su hombro a la rubia, una pequeña sonrisa en sus labios ante las palabras de defensa de tiffany.
 

“Espera, ¿no nos íbamos?” preguntó taeyeon sorprendida cuando tiffany la llevó de nuevo hasta su mesa, los refrescos que habían pedido sobre la mesa esperándolas.
 

“No, no nos vamos,” contestó tiffany, guiando a taeyeon hasta el sitio vacío y deslizándose a su lado. “Le prometí a mi novia que le conseguiría algo para comer y no hay forma en el infierno de que vaya a dejar a yuri kwon impedirme que lo consiga.”
 

Taeyeon sonrió a tiffany quien, sentada en su lado izquierdo, cogió su brazo para examinarlo con cuidado.
 

 

“¿Estás bien?” preguntó preocupada tiffany, dándose cuenta de cómo estaba empezando a hincharse un poco la muñeca de taeyeon e imaginando el moratón que le saldría ahí mañana.
 

“Es probablemente solo una torcedura,” contestó taeyeon, haciendo una mueca con el cuidadoso roce de tiffany, su piel tensa.
 

“Deberías ponerte algo de hielo,” sugirió tiffany, esperando a que ayudara a reducir la inflamación.
 

“Deberías poner tus labios en ella,” contrarrestó taeyeon, un color rojo extendiéndose por sus mejillas al darse cuenta de lo que había dicho.
 

Tiffany sonrió ampliamente con la vergüenza de su novia pero la consintió, levantando el antebrazo izquierdo de taeyeon hasta sus labios y dejando un suave y amable beso en la piel con afecto. Tiffany escuchó la puerta cerrarse en la dirección del baño y ambas, taeyeon y ella miraron hacia el ruido, sus labios aun presionados contra la piel de taeyeon mientras miraban como yuri se iba rápidamente del restaurante, sin pararse a mirar en su dirección ni una vez, la amiga que había llegado con una mirada confusa durante un momento, antes de precipitadamente seguirla.
 

“Gracias por venir a mi rescate,” le dijo taeyeon a tiffany agradecida, inclinando su cabeza contra el hombro de su novia mientras tiffany acariciaba la parte de atrás de su pequeña mano con su pulgar suavemente. “De verdad pensé que me iba a romper la muñeca…o peor.” admitió.
 

“De nada,” respondió tiffany, besando lo alto de la cabeza de taeyeon ligeramente con sus labios. “Estaba preocupada por ti.” Le dijo. “Llevabas allí mucho tiempo, pensé que a lo mejor habías tenido un ataque.”
 

“Creo que un ataque habría sido preferente a encontrarme con yuri,” respondió taeyeon, haciendo una mueca.
 

 

“No sé eso,” musitó tiffany, haciendo una mueca. “No me gustaría otra visita a la unidad de cuidados intensivos nada pronto y al menos con yuri no había oportunidad de que esto pasara.”
 

“No diría que no había oportunidad de que pasara,” contestó pensativamente taeyeon. “Quiero decir, si me hubiera empujado y me hubiera golpeado en la cabeza contra algo duro o hubiera aterrizado de forma rara podría haberme apagado las luces.”
 

“Vale, no digas cosas como esa,” dijo tiffany envolviendo su brazo alrededor de los hombros de taeyeon como protección y acercando a la chica menor en su costado. “De verdad que preferiría tener esa posibilidad, gracias.”
 

“Eres mi héroe,” dijo taeyeon, acurrucándose en el costado de tiffany y moviendo su muñeca izquierda para presionarla contra el vaso frío de su refresco encima de la mesa que tenían delante, haciendo caso del consejo que le había dado antes su novia.
 

 

“Tú eres el mío,” contestó tiffany, inclinando su cabeza contra la de taeyeon. “Apuesto a que tú intentaste irte y ser la persona mayor ¿verdad?” preguntó y taeyeon asintió con su cabeza en respuesta.
 

 

“Es sorprendentemente duro hacer eso pero cuando alguien tiene tu muñeca en lo que solo puede ser descrito como un apretón de muerte,” señaló taeyeon, levantando su mano izquierda y flexionando sus dedos experimentalmente, las articulaciones sintiéndose rígidas y doloridas.
 

“Podías simplemente haberla golpeado, sabes,” le dijo tiffany, “no tenías que irte.”
 

 

“Lo sé,” contestó taeyeon, levantando su cabeza mientras el camarero llegó con su comida y la puso en la mesa delante de ellas, “pero estoy intentando esta cosa nueva donde no actúo sin pensar ante las situaciones y termino enviada a rehabilitación,” explicó, levantando su dedo para parar a tiffany quien iba a decir algo en respuesta. “Estoy intentando no ignorarlos tampoco.” Continuó y tiffany sonrió ante la admisión. “Entonces he intentado enfrentarme a ello.” Le informó taeyeon. “Es una vergüenza que yuri sea aparentemente incluso más psicópata de lo que yo lo soy, imagínate.”
 

 

 

“Bueno, estoy orgullosa de ti tae,” dijo tiffany, cogiendo el plato de alitas y deslizándolo entre las dos.
 

“Estarás más orgullosa de mi cuando te patee el culo en el reto de las alitas,” contestó taeyeon juguetonamente, dándole a tiffany una mirada retadora.
 

“En tus sueños kim,” se rió tiffany, dividiendo las alitas entre ellas igualmente. “He estado practicando mientras has estado fuera.” Mintió. “No hay manera en la que vayas a ganarme.”
 

Taeyeon lo hizo.
 

“¿Acaso tienes papilas gustativas?” preguntó tiffany incrédula mientras bebía sin parar lo que le quedaba del refresco en un intento de enfriar su boca que sentía como si estuviera en llamas de las alitas. “¿Cómo demonios consigues comer tantas? Parece que he corrido 30 millas en un día caluroso sudando demasiado.”
 

 

“No sé,” contestó taeyeon, riéndose de tiffany quien estaba abanicándose la cara con el menú. “Llámalo talento si quieres…”
 

“No,” interrumpió Lauren entretenida.
 

“Algunas personas pueden dibujar, otras pueden bailar, ¿yo?” preguntó pausándose durante un momento. “Puedo comer grandes proporciones de comida picante cuando nadie más puede.”
 

 

“Eres una idiota,” le dijo tiffany, inclinándose para besarla en los labios durante un momento, feliz con la presencia de taeyeon.
 

 

“Siempre me llamas eso,” se rió taeyeon.
 

“Es porque es verdad,” estableció simplemente tiffany, cogiendo el último trozo de pizza ofreciéndoselo a taeyeon.
 

Taeyeon lo cogió amablemente y empezó a burlarse en bajo, tiffany observándola, un brazo apoyado en lo alto del asiento que compartían detrás de los hombros de la chica menor.
 

“Sabes,” empezó taeyeon tímidamente, lamiendo sus dedos mientras terminaba el último trozo de pizza y giró su cabeza para mirar a tiffany. “Eres un poco caliente cuando estás enfadada.” Le informó a tiffany quien sonrió en respuesta al inesperado piropo.
 

 

“¿Lo soy?” preguntó tiffany, su sonrisa ampliándose ante la repentina timidez de taeyeon.
 

“Sí,” contestó taeyeon, ladeando su cara un poco para poner sus labios delante de tiffany. “Lo eres.”
 

“Hmm…” gimió tiffany, sus ojos perdiéndose en las órbitas de color chocolate de taeyeon. “Bueno, en ese caso a lo mejor tenemos que pasar el rato alrededor de yuri mucho más cuando estés de vuelta en casa.” Dijo pensativamente.
 

“O ¿a lo mejor podemos pasar el rato en tu habitación?” sugirió taeyeon. “Preferiría no tener que ver a yuri a menos que de verdad no se pueda evitar.”
 

“¿Quieres que pasemos el rato en mi habitación?” le preguntó tiffany, levantando una ceja agradablemente mientras consideraba la propuesta y taeyeon asintió en respuesta. “¿Exactamente qué te gustaría hacer mientras estamos allí arriba?” le preguntó tiffany seductoramente y taeyeon se acercó más en el costado de su novia.
 

“Bueno,” dijo, dando un suave beso justo debajo de la mandíbula de tiffany. “Tengo unas cuantas ideas así que a lo mejor podemos trabajar sobre todas ellas.”
 

“¿Te importaría darme una pista?” le preguntó tiffany juguetonamente y taeyeon se movió en su asiento, presionando sus labios contra los de su novia y abriendo su boca de buena gana cuando tiffany sondeó la entrada con su lengua.
 

 

Tiffany gimió en la boca de taeyeon mientras la mano derecha de la chica menor acariciaba delicadamente su costado y tiffany extendió su mano para amablemente acariciar el lado del cuello de taeyeon.
 

“Realmente he echado de menos esto,” suspiró tiffany cuando se separaron y taeyeon sonrió antes de besarla brevemente en los labios. Taeyeon se quedó cerca de la cara de su novia, su pulgar amablemente trazando el suave contorno de la boca de tiffany.
 

“Yo también,” dijo de acuerdo taeyeon, ladeando su cabeza para besar de nuevo a tiffany, disfrutando el corto momento de contacto.
 

“Eres tan preciosa,” elogió tiffany a taeyeon, recorriendo con su mano los mechones oscuros de pelo y mirándola de arriba a abajo. “Creo que de verdad me olvidé de lo preciosa que eras.” Musitó tiffany. “Es como si, supiera que eras preciosa, increíble, maravillosa,” la halagó, “pero, mi recuerdo de ti era como mirar a través de cristales sucios, defectuosos e inexactos. Ahora estás aquí de nuevo y es como si finalmente los hubiera limpiado y la imagen es fresca y clara.”
 

“tiffany me estas mirando como si estuviera aquí sentada desnuda,” observó taeyeon, riéndose un poco de la manera en la que su novia la estaba mirando fijamente tan descaradamente.
 

“No estaba pensando en ti desnuda,” contestó tiffany, levantando su ceja significativamente.
 

“Bien,” contestó taeyeon riéndose para sí misma.
 

“Pero ahora sí.” Le dijo malévolamente tiffany.
 

 

“¡tiffany!” la regañó juguetonamente taeyeon y tiffany se rió ante la reacción de su novia.
 

“¿Qué?” preguntó. “¡Te lo has tragado! Además, han pasado seis semanas desde que te vi desnuda, no puedes culparme por pensar en ello…mi memoria es todo lo que tengo para seguir adelante en este momento.”
 

“Bueno si tienes suerte a lo mejor te mandaré luego una selfie desnuda,” la atormentó ligeramente taeyeon, disfrutando de la manera en la que la mandíbula de tiffany cayó en respuesta a su comentario.
 

“¿Qué?” le preguntó tiffany, tragando saliva con dificultad.
 

“Me has escuchado,” contestó taeyeon, sentándose mejor, una sonrisa en su cara.
 

“¿Por qué esperar hasta luego?” preguntó tiffany, intentando recuperar la compostura devolviéndole a taeyeon su coqueteo sin vergüenza.
 

“¿Qué quiere decir?” preguntó taeyeon, confusa.
 

 

“¿Por qué no te levantas la camiseta y me destellas ahora?” sugirió tiffany con una mirada retadora en la cara.
 

“¿No crees que lo haré?” cuestionó taeyeon, levantando una ceja rebeldemente.
 

 

 

“no hay manera en la que me vayas a destellas en medio del restaurante,” le dijo medio segura tiffany.
 

“¿No?” dijo taeyeon su tono levantándose mientras lo decía.
 

Tiffany entrecerró sus ojos como si estuviera intentando sobre pesar si taeyeon estaba bromeando o no, pero su pregunta fue pronto contestada cuando la chica menor llevó sus manos hacia abajo levantándose el dobladillo de su sweater y su camiseta, exponiendo su suave, tonificado estómago y el sujetador morado que llevaba puesto. Lo sostuvo ahí durante un minuto y la boca de tiffany cayó de nuevo ante el atrevimiento de taeyeon, completamente sorprendida.
 

“Considera eso un adelanto,” dijo simplemente taeyeon, bajando su ropa cubriéndose de nuevo y echando un rápido vistazo por el restaurante para asegurarse de que nadie la había visto antes de mirar de nuevo a tiffany quien había estado aturdida en silencio. “Estás babeando,” se rió taeyeon.
 

 

Se inclinó hacia adelante y cogió la cara de tiffany en sus manos, besándola delicadamente en los labios.
 

“Quiero postre,” le dijo taeyeon y tiffany se lamió sus labios, mirando a taeyeon sugerentemente.
 

“Yo también,” dijo de acuerdo mordiéndose el labio inferior, la esquina de la boca de taeyeon convirtiéndose en una medio sonrisa ante sus palabras.
 

 

“No, quiero decir, quiero un helado,” le informó taeyeon seriamente y tiffany se inclinó y la besó rápidamente.
 

“Bien,” concedió. “Te compraré un helado.”
 

“Eres tan buena novia.” Comentó taeyeon y tiffany sonrió, besándola de nuevo.
 

Una vez terminaron el postre, tiffany condujo a taeyeon de vuelta a casa, tomando la ruta menos directa que pudo encontrar, desesperada por prolongar su cita lo más posible. Desafortunadamente, como siempre, el tiempo pasa a pesar del deseo de la persona para que pare y tiffany se encontró a sí misma sentada en su coche fuera de la casa de taeyeon con su novia, ninguna de ellas hablando, ambas sabiendo que debían enfrentar la realidad de estar separadas una vez más.
 

“Entonces,” dijo tiffany mientras miraba al parabrisas que tenía delante. “¿Vas a estar aquí mañana por la noche?” preguntó tentativamente. “A lo mejor puedo verte antes de que vuelvas al centro de tratamiento…”
 

“No, mis padres me llevarán directamente después de la declaración,” compartió taeyeon con ella tristemente. “Tengo que estar de vuelta para una sesión con mi terapeuta,” explicó. “Ella cree que probablemente la necesitaré después de…bueno…ya sabes.”
 

 

Tiffany miró hacia arriba para ver la mirada nerviosa en los ojos de taeyeon, que estaban centrados en sus manos que tenía en el regazo y extendió la suya para coger la mano izquierda de taeyeon con cuidado, el moratón del asalto de yuri de antes empezando a aparecer en su piel.
 

 

 

 

“Buena suerte mañana,” dijo sinceramente tiffany, acariciando la parte de atrás de la mano de taeyeon con su pulgar tranquilizadoramente durante un momento antes de manipular los pequeños dedos como de costumbre. “Irá bien, lo verás. Es solo una formalidad. No tienes que preocuparte por nada.”
 

 

“¿Te llamaré después de la escuela?” taeyeon preguntó vacilantemente. “Para contarte…”
 

“No, no me cuentes nada de eso, no a menos que tú quieras,” dijo tiffany consoladoramente, acariciando la mano de su novia en la suya. “Solo, dime qué tal estar ¿vale?” preguntó. “Eso es por lo que más me preocupo.”
 

 

Se pausó por un momento para mirar de nuevo a la casa de taeyeon.
 

“Debería acompañarte a tu puerta,” reconoció a regañadientes, saliendo del coche y caminando alrededor del otro lado del coche para ayudar a salir a su novia.
 

Tiffany sostuvo la mano de taeyeon mientras iban de camino hacia la puerta frontal llegando a pararse en el porche delante de la puerta de taeyeon. Se pararon juntas, tiffany mirando a taeyeon, su mano aún envuelta protectoramente alrededor de la de su novia, ninguna de ellas encontrándose con la mirada de la otra, ambas sin estar dispuestas a decir adiós.
 

 

 

“No quiero ir dentro,” habló taeyeon después de que unos minutos de silencio pasaran y tiffany levantó sus ojos para mirar a la chica menor, su corazón ya doliendo por el pensamiento de dejarla ir de nuevo.
 

“Yo tampoco quiero que vayas dentro,” admitió tiffany, una triste sonrisa apareciendo en sus labios.
 

“Vale, entonces nos quedaremos las dos aquí,” dijo taeyeon con un sentido de finalidad para su voz.
 

“Excepto porque tengo escuela,” le recordó tiffany, “y está oscureciendo tae.”
 

Taeyeon movió su mano libre con desdén, como si la oscuridad no fuera nada a lo que temer.
 

“He vivido en la oscuridad demasiado que prácticamente es como bañarse en una luz del sol gloriosa.” dijo. “Pero la escuela es básicamente el Monte Everest…ni idea de cómo vamos a afrontar ese pequeño problema.”
 

“tae,” dijo tiffany, su tono implorando, conociendo a su novia muy bien. “No bromees porque no quieres enfrentarte a esto.” La castigó amablemente. “Vas a ir dentro y después te irás de vuelta a rehabilitación.”
 

“Estoy empezando a pensar que volver no es tan buena idea. Quiero decir, ellos no te sirven pizza en el comedor y la compañía no se acerca a lo buena que es aquí,” informó taeyeon a tiffany, su tono aún suave, ignorando las palabras de su novia o el reflejo de recurrir al humor demasiado fuerte para controlar.
 

 

“Te pueden mandar la pizza,” sugirió como ayuda tiffany, “y la compañía puede que no sea tan buena pero te ayuda más que yo.”
 

“Eres una aguafiestas,” protestó taeyeon y tiffany extendió su mano para acariciar la mejilla de taeyeon con la yema de su pulgar.
 

“Me llamarás mañana,” estableció simplemente tiffany, “y podemos hacer Skype si quieres porque no creo que pueda pasar un día sin verte, especialmente no después de seis semanas estando separadas.”
 

 

“Estaré esperando en mi ordenador,” le dijo taeyeon y tiffany sonrió.
 

“No es que vayamos a estar separadas para siempre ¿no?” preguntó retóricamente tiffany. “Te veré el viernes Friday; el día de San Valentín.” Dijo moviendo su mano para trazar ligeramente con los dedos de su mano la cicatriz de encima de la ceja de taeyeon. “Son solo un par de días hasta entonces. Eso es todo. Dos días y acabamos de sobrevivirá cuarenta y uno sin contacto.” La tranquilizó. “Tienes razón; esto será más fácil en comparación.”
 

Tiffany quitó un mechón de pelo fuera de los ojos de taeyeon antes de acariciar su frente suavemente.
 

“Necesitas volver…” empezó.
 

 

“Querías que me quedara antes,” le recordó taeyeon. “No querías que me fuera.”
 

 

“Lo que quiera es irrelevante,” le dijo sinceramente tiffany. “Lo que es mejor para ti es todo lo que importa y tienes que volver tae. Sabes eso porque fuiste la persona que me convenció de que era la cosa correcta para hacer.”
 

“Te odio ahora mismo,” dijo taeyeon juguetonamente. “Supuestamente tienes que intentar persuadirme para que me quede.”
 

“Vale, bien,” respondió tiffany, sonriendo ampliamente con el intento de taeyeon de evitar la situación. “No te puedes ir tae,” dijo intentando sonar abatida, pero luchando con su diversión. “Tienes que quedarte aquí conmigo. No puedo vivir sin ti. Me moriré literalmente si me dejas otra vez. ¿Quién me va a mandar selfies desnuda y me va a destellar inapropiadamente en restaurantes si tú estás encerrada en rehabilitación? Soy como Campanilla…pero, en vez de necesitar un aplauso para vivir, necesito tu desnudez tae…realmente la necesito” terminó, medio bromeando, muchos de sus comentarios basados sólidamente en algún hecho o ficción.
 

“Tu Oscar está llegando,” le dijo taeyeon entretenida, su estado de ánimo iluminado un poco.
 

“Pero en serio tae,” dijo tiffany, cogiendo las dos manos de su novia en las suyas mientras estaban mirándose. “Eso no es un adiós, es solo…buenas noches.” estableció, inclinándose hacia adelante para besar a taeyeon débilmente en los labios.
 

“Esto no parece un buenas noches,” comentó taeyeon y tiffany podía ver las lágrimas formándose en los ojos de su novia.
 

“Lo es,” la tranquilizó tiffany. “Voy a ir a verte el viernes y celebraremos el día de San Valentín juntas,” reiteró, poniendo una sonrisa en su cara. “Son solo dos días…” repitió inclinando su frente contra la de taeyeon, una de sus manos apoyándose en la parte de atrás del cuello de taeyeon. “Eso es todo.”
 

 

 

“¿Te volverás a poner el colgante?” preguntó taeyeon, cerrando sus ojos, desesperadamente buscando una señal física de que las cosas estaban resueltas entre ellas.
 

“No me lo voy a volver a quitar nunca,” le prometió tiffany, silenciosamente rezando po que una de las chicas lo hubiera cogido y guardado a salvo.
 

Taeyeon movió su cabeza hacia atrás y extendió sus manos para acariciar con los dedos de ambas la cara de tiffany acomodándose en sus mejillas.
 

“Tengo miedo,” admitió taeyeon.
 

 

“Te lo dije,” dijo tiffany, poniendo sus manos en las muñecas de taeyeon. “Estarás bien mañana…”
 

“No,” aclaró taeyeon. “No tengo miedo de lo de mañana. Tengo miedo de que arruinemos esto de alguna manera.”
 

“Aún podemos,” reconoció realísticamente tiffany, “pero, solo hay una forma de averiguarlo ¿no?”
 

“Te quiero,” le dijo sinceramente taeyeon, besando sus labios una y otra vez hasta que tiffany sostuvo las manos de taeyeon y movió su cabeza hacia atrás para mirarla.
 

“Lo sé,” la tranquilizó tiffany y vio romperse la sonrisa de taeyeon, una lágrima deslizándose por su mejilla en desesperación para demostrarse a sí misma y a la chica más alta sus sentimientos. “Sé que lo haces,” la tranquilizó tiffany.
 

“Solo…si nunca crees en nada que te diga, simplemente sigue creyendo en eso.” Suplicó taeyeon y tiffany la besó, un profundo, significativo beso que expresó todo lo que quería decir en la forma más simple que supo.
 

“No tienes que decírmelo,” la informó tiffany, “porque lo sé tae.” repitió, besándola suavemente en la frente, justo sobre la cicatriz. “Tanto como tú sabes que te quiero.” Musitó contra la piel de taeyeon, sus brazos extendiéndose para envolverlos alrededor del cuerpo de la chica menos y abrazándola fuertemente.
 

Sintió que las manos de taeyeon envolvían su cintura, una apretando la parte de atrás de su sweater con un sentido de urgencia que parecía fuera de lugar.
 

 

“Te tengo preparado un gran regalo de San Valentín,” dijo taeyeon contra el pecho de tiffany, su voz ahogada contra el tejido del sweater.
 

“¿Puedo comerlo?” preguntó tiffany y taeyeon negó con la cabeza.
 

 

“No,” contestó taeyeon. “¿Quieres saber lo que es?” preguntó.
 

 

 

“No,” se rió tiffany, besando a la otra chica en lo alto de su cabeza. “Nada de spoilers tae. Sorpréndeme.”
 

 

“Necesito ir dentro,” dijo taeyeon, dando un paso hacia atrás de tiffany ligeramente y encontrándose con su mirada significativamente. “Cuando más esté aquí fuera menos querré irme y ya está siendo bastante duro para verlo algo atractivo.”
 

 

“Entonces diré buenas noches,” le dijo tiffany, besándola tiernamente en los labios, sonriendo en el beso cuando sintió la mano de taeyeon acariciar su espalda suavemente.
 

“Buenas noches,” suspiró taeyeon cuando se separaron y tiffany quitó un mechón de pelo de los ojos de su novia.
 

“Buenas noches tae,” dijo tiffany, dando un paso atrás y girándose hacia el coche, sus manos aun entrelazadas.
 

Tiffany sintió resistencia de parte de taeyeon cuando intentó soltar su mano y antes de saberlo, la había dado la vuelta en el sitio, y los brazos de la chica menor estaban alrededor de su cuello, sus labios presionados contra los suyos mientras la besaba profundamente, su lengua vagando en su boca.
 

“Buenas noches,” suspiró taeyeon, soltando a la sorprendida tiffany y girándose para abrir la puerta, desapareciendo dentro sin una segunda mirada de vuelta.
 

Tiffany puso sus dedos en su boca, aún en shock, una ligera sonrisa saliendo en sus labios antes de finalmente ir de camino hasta su coche sentándose en el asiento del conductor. Se puso el cinturón y encendió el motor, cuando iba a irse vio su móvil, que había arrojado en el asiento del pasajero a su lado, encendiéndose.
 

Extendió la mano y cogió el aparato en su mano, abriendo el mensaje, una gran sonrisa dibujándose en su cara mientras lo leía:
 

 

“¿Creías que esto era una selfie desnuda? Eres una ertida. N siquiera sé por qué me gustas.”
 

Tiffany miró hacia la ventana de la habitación de taeyeon donde la luz estaba encendida y vio a su novia y vio cómo su novia le miraba con una sonrisa en su cara. Señaló algo en su mano y tiffany vio la pantalla de su teléfono encenderse de nuevo.
 

“Estaba bromeando, ya te echo de menos. Te quiero…..ertida.”
 

Tiffany sonrió mientras leía el mensaje y miró de nuevo hacia taeyeon quien había abierto su ventana y estaba apoyada sobre sus codos en el marco de esta. Le lanzó un beso a tiffany y la morena hizo como que lo cogía antes de hacer el símbolo de un corazón con sus manos. Taeyeon sonrió ante el gesto y rápidamente miró de arriba a abajo en la carretera, poniéndose recta de nuevo. Extendió sus manos hasta el dobladillo de su camiseta y la levantó apresuradamente, revelando su ahora desnudo pecho, aparentemente habiéndose quitado el sujetador. Tiffany se rió, admirando las vistas.
 

Taeyeon bajó su camiseta y le sacó la lengua a tiffany antes de volver su atención al teléfono. La pantalla de tiffany se iluminó una vez más unos segundos más tarde.
 

“Recuerda que eso es solo un adelanto.”
 

Tiffany volvió a mirar hacia taeyeon y pensó que vio a su novia elevar su ceja sugerentemente antes de cerrar la ventana y decir adiós, lanzándole a tiffany un último beso antes de cerrar las cortinas y desaparecer.
 

“Idiota,” le mandó un mensaje tiffany pero sabía tan bien como taeyeon, que lo que realmente significaba era “Yo también te quiero.”