+Bien - YoonYul

Colección de One-Shots & Drabbles - Random Couples.

Yoona miraba fijamente la pared color amarillo hacia unos cuantos minutos ya. Apenas su pecho se movía confirmando que estaba viva (al menos por ahora); parecía una estatua.
Este era uno de esos momentos que deseaba compartir con su ex-novia Yuri.

— ¿Por qué estás tan lejos, y al mismo tiempo tan cerca, amor? — suspiró, sintiéndose vacía y miserable sin el cariño y la comprensión de su amada.
Tomó las llaves y las guardó en un bolsillo de su jean. Subió las escaleras del edificio una por una, con lentitud, retrasando su encuentro. La quería, la deseaba, la necesitaba, sobre todo, no podía vivir sin ella. Y estar tan cerca geográficamente la estaba matando por dentro. Le costaba unos pocos esfuerzos subirse al elevador, marcar el piso seis, dos más que el de ella, y suplicar su perdón.
Se detuvo frente a la puerta, dudosa. Tal vez es mejor no hacerlo, se dijo. Pero no podia convencer a su lado que extrañaba con locura a la morena. Rozó la puerta con la punta de los dedos varias veces hasta que lo hizo. Tres veces golpeó la dura superficie de madera. Luego, se hizo el silencio. Hubo una especie de vacío por unos segundos. Yoona pensó en irse, ya que nadie contestaba.
Hasta que la puerta se abrió.
— Mira Yoona... — No, no era Yuri, era Hyoyeon, su mejor amiga. Estaba maquillada llamativamente, sostenía un bajo y su expresión era suave. — Estamos practicando con la banda, y Yuri está demasiado triste. Me pidió que viniera por ella. Por favor, no vuelvas. Tengo el mensaje, debo decirte que, desafortunadamente, estas puertas ya no están abiertas para ti. Esto no era parte del mensaje, pero...te deseo lo mejor. Espero volver a verte algún día, Yoona. Ten una buena noche — dijo todo de corrido. Sin esperar la respuesta.
La puerta se cerró, dejando a una débil Yoona con ojos llorosos. Su cuerpo temblaba y no podía controlarlo. Su mente vagaba por pensamientos muy turbios, así que no lo hubiera logrado ni intentándolo.
¿Era ese verdaderamente el final? Si no lo era, realmente lo parecía. No puede ser este el final, pensaba Yoona, no despues de todo.
Ciertamente la ruptura fue su culpa. En cierto punto, aunque Yuri también tenía parte de ella.
En un principio se habían mudado al mismo edificio para poder así tener una semi-convivencia. Ellas querían vivir juntas, claro que sí, pero los padres sobreprotectores de Yoona no lo hubieran permitido. Con suerte, mucha suerte, habían aceptado su relación, no lo echarían todo a perder por una pregutna desafortunada. Los padres de Yoona visitaban muy a menudo el departamento de su hija, siempre de sorpresa. No solo para visitarle y preguntarle como estaba su vida, sino para corroborar que no estuviera en nada raro ni sospechoso.
Era ideal para Yuri, también, puesto que como tenía una banda de rock, Black Pearl's, podía practicar allí debido a la amplitud del lugar. Nadie se quejaba, ya que las muy pocas personas que estaban en el edificio eran personas jóvenes, justo como ellas dos, que no solo no se molestaban, sino que hasta disfrutaban de la música, este grupo de cuatro mujeres eran muy bellas y talentosas y se habían ganado el cariño de todos allí.
— Yuri... - suspiró.
Le gustaría a Yoona poder desarrollar el poder de traspasar paredes y puertas por solo ese instante, así ni la madera ni Hyoyeon podían ser una barrera en el encuentro con su amada.
Sintió su ánimo decaer un poco más. Quizás hubiera sido mejor quedarse viendo la pared amarilla de su monótona habitación. Quizás nunca debería haberlo intentado, y así, conservar ese último retazo de esperanza que albergabaarrow-10x10.png, al menos, hasta hace cinco minutos.
Cayó en la cuenta de lo mal que se veía cuando una vecina, la única que compartía el piso seis con Yuri aunque habían cuatro departamentos, le preguntó si se encontraba bien.
— Cariño, te ves muy pálida. ¿Seguro estás bien? Puedo avisarle a Yuri si quieres —
Claro, nadie todavía sabía de su ruptura, a excepción de sus amigas.
— No...no, no, estoy bien, iré a mi departamento — intentó hacer una sonrisa, las cuales tan bellas parecían ser, aunque casi fue una mueca torcida — Gracias, Fei — hizo una pequeña reverencia y escapó hacia su hogar.
Por poco llegó sana a su departamento, había tropezado con casi todos los escalones, bajó corriendo, y salteó algunos, pero finalmente estaba allí de nuevo.
Tomó carrera y se lanzó en su cama. Cayó, por un segundo pareció estar completamente sobria, mas rápidamente volvió a sentirse débil y mareada, Estaba sufriendo, estaba rota por dentro. Cuando le sonrió a Fei, cuando intentó curvar sus labios y falló miserablemente, supo que estaba destruída, por completo. Se sentía como un trozo de cristal que había impactado contra el duro pavimento, en mil pedazos, pero solo quien la había tirado podría reunirlos todos y hacer que sea uno de nuevo. Necesitaba a Yuri, quería que fuera y le dijera que solo era un malentendido, que quería estar de nuevo con ella y ser la pareja feliz y enamorada que eran.
Comenzó a sollozar, hasta que se convirtió en un río de lágrimas, en un llanto descontrolado, llegó a gritar y a lanzar unas cuantas fotos con marcos de cristal a la pared, provocando que se rompieran. Esa era ella.
De tanto sufrir, se quedó dormida, cayó en un sueño liviano, pero seguía viendo la imagen de Yuri. Yoona no sabía si catalogarlo como una pesadilla o un sueño dulce...agridulce. Para cuando despertó, una media hora había pasado. La música de la banda de Yuri se escuchaba como un leve murmullo, pero podía reconocerla muy bien. Ah, tanto tiempo había presenciado sus ensayos...hasta sabía las letras de sus canciones; Yuri le había invitado a cantar una, un dúo; mas lo rechazó porque era demasiado tímida para eso.
No recordaba haber escuchado la música antes esa noche, seguían practiando, así que supuso que poco tiempo había tomado su siesta. Pero le hizo bien, ahora sabía que iba a verla a Yuri sea como sea.
Tomó su celular, marcó su número, lo sabía de memoria, mas no hubo respuesta. Supuso Yoona que no lo escuchaba, eso quería creer, no se dejó desanimar.
Tocar la puerta tampoco era una opción. Primero, porque no le abririan y, segundo, tal vez no escucharan. Usaban una habitación como sala de ensayo, justo la más alejada al pasillo y a la puerta de entrada. La habitación que da justo a...la ventana.
Si estuviera en un programa animado, una lamparita se encendería sobre su cabeza. Ciertamente, era una idea muy alocada, pero era la única que si podía realizar. Inevitablemente tenía que abrirle, y ahí hablarían sobre todo. Quizás la aceptara de nuevo.
No era muy valiente, pero lo haría, por ella haría todo. Lo meditó unos segundos más, mas sabía que, no debería hacerlo puesto que solo la frenaría.
Casi arrancó las botas de sus pies, dejándolos completamente desnudos para tener un mejor agarre. Se secó el sudor de las manos y sacó su abrigo de su cuerpo. Quedando solo en un pantalón simple y una blusa ajustada a su cuerpo. Estaba lista.
Trepó, impulsandose del piso, quedandose parada y con equilibrio sorprendente sobre el marco de la ventana. Dio un pequeño salto hacia una especie de escalón, que era solo decoración externa del edicio; era bastante ancho, así que no tuvo que hacer gran esfuerzo para mantenerse en pie. Sintió una corriente de frío al dejar que sus dedos toquen el duro material.
Caminó con cautela, pegándose bien a la pared. Nunca le tuvo miedo a las alturas, y eso le corría a favor y facilitaba su cometido. Daba pasado cortos pero seguros, no arriesgaría a morirse, por el simple hecho de que Yuri no estaría allí. Parecía una espía, como la protagonista de la seria que ellas veían juntas, eso la hizo sonreír.
Estaba tan sumida en ese recuerdo feliz, que un paso en falso la devolvió a la realidad, ya estaba en el borde. Un sentimiento de vacío se apoderó de su estómago y tragó con fuerza. Eso había estado tan cerca, podría haber caído si no caía en la cuenta a tiempo.
Ahora venía la parte más complicada y que no se detuvo a pensar. ¿Cómo subiría? Estaba en el cuarto piso y necesitaba llegar al to, lo más rápido posible. Aprovechando que las paredes externas eran de ladrillo, colocó sus dedos entre los huecos y se impulsó; agradeció, por primera vez, ser tan delgada, facilitaba en mucho su trabajo. Al comprobar que podía hacerlo, prosiguió, seguramente. Debía darse prisa, para que nadie la viera ni alertara a la policia o a alguien más, pero no podía correr el riesgo de caer.
Cómo subió un piso, subió dos. Yoona no podía creer lo ágil y elástica que resultó ser, no confiaba mucho en su complicada travesía. Caminó hasta al lado de la ventana. Su corazón latía fuertemente contra su pecho, su respiración estaba más acelerada. Se apoyó bien contra la pared y sintió temblar tras ella debido al alto volumen de la música. Ahora si podía escuchar la armoniosa voz de Yuri cantar, y Yoona cantaba junto a ella. Era la canción de Black Pearl's favorita de ambas, parecía cantarla con una pasión y dolor que dejó paralizada a Yoona.
Además ¿Qué iba a decirle? No parecía tan buena idea aparecer ahora.
Sin pensarlo un segundo más, se acercó y apoyó los dedos contra la ventana, para sostenerse mejor, ya que no había tanto lugar para hacer equilibrio.
Vió a Yuri y no podía respirar, era mucho más hermosa de lo que recordaba, pero todavía no le había visto debido a que cantaba con los ojos cerrados.
Subo que la canción había terminado debido a que el vidrio bajo las yemas de sus dedos ya no temblaba. Hyoyeon la vió y abrió bien grandes sus ojos, no podía creerlo, abrió sus ojos en shock. Levantó su brazo lentamente, señanándola con el dedo índice.
— ¿Qué pasa, Hyo? — escuchó a su ex novia decir. Su vista siguió el curso del dedo de su amiga y Yuri posó sus ojos en ella.
Se llevó las manos a la boca y dejó escapar un grito. Abrió los ojos aún más grandes que su amiga, en sorpresa y horror.  Se acercó rápidamente a la ventana y la abrió con inseguridad.
Yoona sonrió, pero, al no tener más apoyo, se tambaleó hacia atrás. Su sonrisa se desvaneció y la ocupó una expresión de horror; sin embargo, Yuri la tomó bien del brazo y la ayudó a entrar a su habitación.
Las demás integrantes de la banda se alejaron para darles un momento de privacidad.
— ¿¡Qué haces!? ¿Por qué hiciste eso? — gritó Yuri, realmente enfadada — Podrías...¡Podrías haber caído y muerto y...! — se acercó y abrazó fuertemente a su ex novia, para reterla allí, como si pudiera irse o esfumarse — Me alegro que estés bien —
Se separó al recordar que ellas ya no eran la pareja que solían ser.
— Yo quería...quería verte, no, necesitaba verte — se encogió de hombros — Hyoyeon dijo que la puerta de tu departamento ya no estaba abierta para mí, pero nunca mencionó nada de la ventana, así que supuse que podía, y que ibas a abrirme — tragó saliva y miró hacia otro lado, para no conectar sus ojos con los de Yuri y echarse a llorar como niña pequeña ahí mismo.
— Yoona...no era necesario que lo hicieras — suspiró, pero se sintió aliviada al saber que no era la única que extrañaba.
— ¡Si lo era! Si que lo era...necesito explicártelo todo, porque quiero que volvamos a estar juntas, necesito que seamos la pareja que fuimos, por favor, escúchame —
— Habla —
— Bien...recuerdas que terminamos porque me reprochaste que no me tomaba esto en serio...¿no? Bueno, lo hago, realmente. Hablé con mis padres, ellos te aceptan, Yuri; es solo que se imaginaban algo...distinto para mí, pero yo ya no estoy dispuesta a dejarme manejar por ellos nunca más. —
Yuri quiso sonreír y decirle que estaba bien, sin embargo quería seguir escuchando su testimonio. — Bien
— Que lástima que me hayas dejado para que yo pueda tomar esta decisión...te hablo en serio, vuelve conmigo, por favor. No hay ninguna cosa o ninguna otra persona que ame más en el mundo, tu lo eres todo. Por favor. Cuando Hyoyeon me dijo que ya no era bienvenida en tu hogar, mi corazón se rompió, y las esperanzas que conservaban se debilitaron —
— Te amo a ti, completamente, pero yo ya no quiero sentir que sobro, que siempre estoy segunda en tu vida; quiero dejar de sentir que no puedes arriesgar nada por amor a miedo que te regañen tus padres después — — Lo sé, créeme cuando te digo que he meditado y tomado una decisión respecto a eso, no quiero estar separada de ti; lo único que hice desde que terminamos fue observar la amarilla pared de la habitación. Mi vida es descolorida y aburrida sin ti, sin tu amor. Perdóname, por favor —
Yuri sonrió, mostrando todos sus dientes. Las palabras de la menor le alegraron el corazón y le regresaron la risa que había perdido durante los días que ya no eran pareja. El peso de su estómago se alivianó y por fin pudo suspirar en felicidad.
— Está bien, Yoona. Te creo, te perdono...¿Quieres volver conmigo? ¿Aceptarías? —
— Trepé dos pisos para esto...no voy a decir " no " —
— Cierto...eso no era necesario en absoluto —
Rieron, como solían hacerlo, ahora eran felices. Yoona se sintió perfectamente bien por primera vez en bastante tiempo. Se algró de haber recuperado a su amada, de haberle dicho la verdad. Ahora tendría que lidiar con sus padres pero, como le había dicho a la morena, había tomado una decisión y no estaba dispuesta a deshacerla por cobardía; apostaría todo por amor, daría todo por su relación, no permitiría que la mayor se alejara de ella una vez más, ni un solo segundo.
—  Te amo —
Yoona enrolló sus brazos alrededor del cuello de Yuri. Ambas extrañaban esa cercanía, ese calor mutuo que se daban. El amor entre ellas se podía sentir a kilómetros, estaban demasiado enamoradas. La menor se acercó tímidamente y terminó tocando los labios de su novia.
¡Ah! Pero lo que ambas extrañaban era lo mágico de sus besos dulces, sus labios de azúcar, esa sensación que recorría los cuerpos de ambas que les indicaban que esa persona era su amor verdadero.
Yoona se creyó loca al pensar que podría haber perdido eso.
— No puedo creer que terminé contigo —  susurró Yuri al oído de su (ahora) novia — Eres simplemente demasiado especial como para dejarte ir así de fácil —
Yoona sonrió tiernamente.
— No puedo creer que provoqué una discusión, en serio lo lamento tanto...—
—  Sh, ya no te preocupes por eso, Yoong, ya pasó todo, ahora estamos juntas de nuevo ¿Si? —
—  Debería colgarme de los edificios más seguido — bromeó.
— No, por favor, no sabes todo lo que pensé cuando te ví allí —
— ¿Si? ¿Qué pensaste? —
—  Que estabas definitivamente loca — Yoona rió — Pero, también me sentí feliz y aliviada por saber que no era la única que extrañaba. — la menor plantó un beso en su mejilla izquierda — Y cuando casi caíste... —  Yoona tragó fuerte al recordar la sensación en su estómago en ese momento —  Pensé que probablemente debería tirarme tras ti...por suerte, pude tomarte y aquí estás — sonrió.
— Eres muy romántica ¿Sabías?
— ¿Yo? Tu fuiste la que subió dos pisos por... —
— Nada se compara al impacto de tus palabras —
Yoona sintió su corazón saltando de alegría, era real, allí estaba Yuri  y era suya, nuevamente. Ahora podían seguir su vida, ser felices juntas.
— ¿Sabes? Estaba pensando...creo que podríamos buscar una gran casa, con un jardín lleno de plantas y flores, me gustaría dedicarme a cuidarlas una por una. Aunque...la flor más bella siempre serás tú — Yuri se ruborizó ante las palabras de Yoona, la menor solo rió — Creo que también quiero una fuente...y que la casa sea blanca, muy blanca, pero que adentro sea una explosión de color y.. —
—  Espera, tus padres no dejan que convivas conmigo —
—  Pero te prometí que mis padres ya no serían una barrera en nuestra relación. Tu quieres vivir conmigo y así será, porque yo también quiero. Además, ví una casa a solo unos kilometros de aquí, apartada de la ciudad, que es realmente hermosa. Y no pude evitar pensar en nostras comaprtiendo y armando nuestra vida allí —
— ¿Ah, si? Bueno, veremos esa casa que quieres, claro que sí. La idea de la convivencia me emociona tanto que ya no puedo esperar. Sin embargo, la banda... —
—  Pensé en eso, Yul. Sé que es muy importante para tí y hay allí un salón hermoso y más amplio que podrías usarlo para ensayar con Black Pearl's. —
Yuri sonrió ante la idea de un hogar para ellas dos, en el que podían hacer lo que quieran cuando quieran, sin temor a ser escuchadas por vecinos molestos o padres desafortunados. Como deseaba eso...
— El precio es un poco elevado, pero debido a que nuestros padres están en buena posición económica supongo que nos ayudarán, sino, haré muchas horas extras, y la compraremos, porque...¡Realmente adoro esa casa! —
La morena se alegró por el entusiasmo de la menor.
—  Si, amor. Haremos lo posible para conseguirla —
Yoona abrazó a su novia, fuertemente. Ese mismo día pero varias horas antes, había pensado que quizás nunca volvería a hacerlo, así que ahora sentía el doble cada textura, la del jean oscuro, la del sweater rojo...y el perfume natural de su piel. Sintió que estaba en un verdadero sueño.
Como amaba a aquella mujer.

 

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Comments

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DollySweet
#1
Chapter 71: Mi jeti feeling ...
jessjung_dew
#2
Chapter 71: esto fue triste........ aunque mucho de lo que dices es verdad........ Jessica trse gano una guerra que no busco con todos esos "sones" tratando de desaparecerla pero ella no se ha dfueejado , ja es mas sigue adelante y mas fuerte que nunca. Yo siento mucho orgullo de tenerla como bias, porque a pesar de todo, ella nunca ha bajado la cabeza. XD
gbrujndl #3
Chapter 70: YuraxMinah, YunaxHyejeong, MinaxSeolhyun, Jeti, SoyeonxQri, Moon HyunaxTiffany, Jungli
DollySweet
#4
Chapter 70: Que tiernas estaré esperando el jungli ♥
Y con las couples cualquiera donde este sica!☆
DollySweet
#5
Chapter 68: No pues! ! Así nada mas? TT. TT
TaeSeoSica
#6
Chapter 68: ¿Puede haber una segunda parte?;;;;
L_ight_ #7
Chapter 68: Pero si está genial. El sentimiento me llegó.
Just_Vicky-Jung
#8
Chapter 68: La verdad es que fue corto, pero... rayos! Casi se me sale una lagrimilla traviesa... T.T
NamiTK
#9
Chapter 68: Me ha deprimido :(
DollySweet
#10
Chapter 67: Ese yoonyul! :D ya para que buscar que se casen de una vez no? ! e.e
Me dio risa tus advertencias ja ja ja