[Narrador]

La pelinegra estaba preocupada, el día anterior había sido el partido de visitante del equipo de basquetbol junto con las porristas, pero a causa de un problema en su casa, no había podido ir. La atormentaba saber qué había pasado en su ausencia, no sospechaba de infidelidades por parte de su novia, pero sí tenía miedo de lo que la castaña pudiera hacerle, es decir, desde que Ailee entrara al círculo, esas dos parecían más cómodas la una con la otra.

- Hay que llenar unos formularios en internet para hacer la reserva - Dijo Nana sacando un pequeño portátil de su bolso.

Taeyeon no les estaba prestando mucha atención, no paraba de preguntarse por qué seguía sentada con esa partida de tontos como si ella fuera uno de ellos ¿O lo era? Estaba en su estúpido círculo ¿qué más prueba que eso? A veces se sentía patética, como en ese momento y sin embargo, no se movía de su lugar. Ailee se pegó más a ella como queriendo llamar su atención.

- ¿Iremos? - Preguntó Ailee no muy convencida.

- Si tú quieres - Respondió acariciándole el mentón.

- Tenemos que ir todos, hay que cumplir un cupo - Demandó Lizzy.

Al otro lado de la mesa, flanqueada por Nichkhun y Wooyoung, Tiffany jugaba con la comida en silencio, la castaña se limitaba a escuchar, sonaba interesante, aunque muy terrorífico.

- ¿Y cómo funciona eso? - Curioseó Taecyeon mordisqueando una manzana.

- Se hace la reserva por internet, cada uno de nosotros debe responder una pequeña encuesta que será analizada por unos estudiantes de psiquiatría, el 31 iremos al parque de diversiones y ellos habrán creado todo un ambiente para asustarnos a todos con lo que más miedo nos da, es parte de la tesis de unos estudiantes, ellos alquilaron el parque de diversiones - Explicó Nana - Seremos como conejillos de indias, pero al menos, será un Halloween inolvidable - Afirmó.

Tiffany procuró no mostrarse alarmada, tal vez se veía muy dura por fuera, pero era propensa a los sustos. Aquella vez en el cementerio con Ailee tuvo que hacer mucho esfuerzo para calmarse y aunque Ailee no lo notó, la forma tan amena como se comportaba era el resultado de su intento por no demostrar miedo. De repente, notó que todos la miraban, al parecer era hora de hablar.

- Sí, supongo, se han esforzado mucho en convencernos, no sería mala idea ir, después de eso podemos ir a la fiesta de Nichkhun - Declaró.

- Ese es el problema - Susurró Nana.

Nichkhun levantó una ceja con molestia.

- Llamamos para reservar, el único cupo que quedaba era a media noche - Reveló con algo de temor.

- Entonces iremos después de la fiesta ¿cuál es el problema? - Rectificó la abeja reina.

- ¿Después? ¿Piensas que la fiesta se acabara a las 11? - Cuestionó Wooyoung con un tono que molestó a Tiffany.

Taeyeon intentó no sonreír, si había algo que le alegraba el día era que alguno de los zánganos de esa mesa se revelara.

- Sí - La castaña no vaciló.

Wooyoung miró a Nichkhun suplicante.

- Nos llevaremos el licor con nosotros - Se limitó a comentar el basquetbolista.

Satisfecha, Tiffany regresó a jugar con su comida.

Las arpías continuaron con su descripción de la actividad hasta, finalmente, convencer a todos. Esa noche, todos llenarían el “formulario” tan honestamente como les fuera posible. Sentadas frente al computador, Ailee, Taeyeon y Tiffany no sabían qué responder. Más la tercera que las dos anteriores.

Animal al que le tiene fobia: Nunca había pensado en eso, puso mariposas, porque cada que veía una muy grande y negra se quedaba paralizada pensando que podría pegársele en el rostro. ¿Qué era lo que más te asustaba de pequeña? Su hermana, lo borró apenas lo escribió, ser violada, también lo borró, la soledad, miró hacia otro lado cuando le dio enter. ¿Cree en fantasmas, espíritus, seres del más allá? De alguna forma, sabía que parte de Michelle estaba en su interior, pero eso no era nada sobrenatural y mejor escribió que tal vez existían, pero que ella nunca había visto uno. Situación sentimental: Amarrada a un tipo con problemas de bipolaridad, lo borró y respondió que tenía novio. ¿Su pareja se encuentra dentro del grupo? Desafortunadamente, pensó, sí, sólo afirmó, para evitar complicaciones. Hobbies: Ser porrista, se sorprendió al darse cuenta que no sabía si le gustaba hacer otras cosas. ¿En qué considera que es bueno? Manipular a las personas, no vaciló, a ver si eso le daba algunos puntos en el juego del terror. ¿En qué considera que es malo? Expresar sentimientos, prefirió no meditar mucho sobre eso. Del grupo ¿quiénes serían sus más cercanos? Permaneció varios minutos golpeando la mesa con las uñas antes de responder, Taecyeon y Taeyeon, habían dicho honestidad ¿no? Y así con muchas otras… Ailee también se enredó con algunas preguntas, sobre todo la de la situación sentimental, contestó que muy enamorada, pero sin poder confiar por completo en esa persona. Taeyeon, por su parte, respondió que se sentía bien con la persona que estaba, pero que tenía malos hábitos que la podían lastimar.

La siguiente tarea para la noche de Halloween, era ver una película de terror por cada uno de los participantes. Nana y Lizzy no podían ocultar lo bien que se sentían dirigiendo las cosas en lugar de Tiffany.

- Podemos ver las películas en mi casa - Anunció Tiffany.

- Mejor vamos a la de Ailee - Replicó Taeyeon.

Recordaba los efectos de sonido que la porrista líder tenía en casa y no estaba dispuesta a someter a Ailee a eso. La aludida le restó importancia.

- Ustedes decidan - Declaró.

Si Taecyeon no tuviera un poco de tacto, habría dejado caer la quijada, como todos los demás.

- Entonces en mi casa - Dijo el presidente de los estudiantes para desviar la atención.

Los otros dos hombres de la mesa aceptaron de inmediato, era mejor evitar una pelea entre las chicas. Después de clase y para sorpresa de Taeyeon, todos se fueron a una tienda de películas para seleccionar las mejores, seguía sin comprender por qué andaba con ellos. Los ocho se pararon frente a la sección de terror para, cada uno, elegir una película de terror.

- No podemos verlas todas juntas - Comentó Ailee mientras salían de la tienda procurando no demostrar el miedo en la voz.

- Tenemos dos semanas - Acordó Tiffany, también fingiendo indiferencia.

Taeyeon las miró confundida, de nuevo y como no pasaba hacía meses, las veía muy similares, sabía que Ailee era miedosa, pero ¿Tiffany? Escondió la sonrisa cuando pensó en asustarla mientras veían las películas.

- Mi casa sigue disponible para cualquier día - Dijo Taecyeon.

Acordaron que las dividirían en tres días y que las verían los tres días, valga la redundancia, antes de Halloween. La semana continuó con normalidad, sin embargo, hubo algo que empezó a llamar mucho la atención de Tiffany y fue cierta mirada que captó en los ojos de su prima cuando hablaba con Ailee, también notó que los celos de Taeyeon se habían apaciguado ¿Estaría actuando?

Ese día, cuando sonó el timbre de final de clases, la castaña esperó a que todos se marcharan para hablar con Jessica.

- Ailee te gusta - Dijo recargada contra el marco de la puerta.

La aludida no se sorprendió y continuó recogiendo sus libros.

- Pero, eso ya lo sabías ¿no? - Comentó.

- Te gusta mucho - Aclaró.

Jessica empezó a borrar las anotaciones que había en el pizarrón.

- No me muero de amor por ella, si es lo que te preocupa - Replicó, aún sin mirarla.

- Lo sé, pero conociéndote, te la quieres llevar a la cama.

Jessica le clavó los ojos, aunque ella fuera algo mayor que Tiffany, le tenía cierto respeto. Tiffany podía ser todo y hacer de todo, pero no dejaba de ser un poco aterradora.

- ¿Y qué con eso? ¿Por qué no debería hacerlo? - Retó.

“Porque es la novia de Ángel”, pensó Tiffany, pero ese no sería argumento para su caprichosa prima.

- ¿En serio crees que Ailee se iría a la cama contigo? - Cuestionó con tono irónico.

La profesora se ofendió, ella llevaba a la cama a quien quisiera y cuando quisiera.

- No tiene que ser en una cama, puede ser en un baño, en el almacén del gimnasio sobre una de las colchonetas, en este salón y sobre esta mesa - Respondió saboreándose los labios.

Hwang sonrió. Se veía reflejada en su prima.

- Quiero que lo dejes - Ordenó sin disimulo.

- ¿Quieres que lo deje? - La voz de Jessica subió una octava.

- Sí - Afirmó sin vacilar.

Hubo un breve duelo de miradas.

- Aún no me das una buena razón - Se encogió de hombros y recogió sus libros.

Para cuando ambas salieron del salón, los pasillos ya estaban vacíos.

- Es la novia de Taeyeon - Soltó apenas unos pasos después.

- ¡Sabía que se trataba de eso! - Exclamó la modelo, triunfante.

Derrotada, Tiffany mantuvo la cabeza en alto, sólo por dignidad.

- No quiero que te aproveches de la inocencia de Ailee.

- Entonces sabes que caerá.

- Hay muchas más tontas como ella en este lugar ¿tiene que ser con ella precisamente?

- Sabes que no es cierto, por algo tu Taeyeon está con ella.

La castaña tomó aire.

- No es “mi Taeyeon” - Replicó con suavidad.

Jessica se carcajeó.

- Vamos, sé que puedes hacerlo mejor - Retó - Tal vez me pida que la folle como Taeyeon, así como tú me lo pediste - Atacó.

Eso fue bajo hasta para Jessica.

Tiffany lo meditó ¿Qué podía hacer para detenerla? Sabía, por experiencia, que era prácticamente imposible resistirse a su prima y Ailee que no era muy diestra en el asunto, caería fácilmente. Bien podría dejarla, que Taeyeon la terminara y ella quedar como la santa salvadora. Sí, claro… como si Taeyeon fuera a caer en eso.

- Vale, haz lo que quieras, como la zorra que eres - Declaró apresurando el paso.

Hasta ella misma se sorprendió de lo que acababa de hacer, se había puesto en contra de su prima por Ailee, corrección, por Taeyeon.

Jessica la fulminó con la mirada, si algo le molestaba era que la llamaran de esa manera.

- Como si tú no lo fueras - Replicó con rabia.

- Al menos yo lo sé disimular - Defendió sin detenerse.

Debía tener fiebre o algo así, pensó Tiffany de camino a su casa ¿Cómo se le ocurría retar a Jessica? Si antes pensaba que lo haría, ahora lo tenía confirmado, más importante todavía ¿por qué se preocupaba tanto por esa relación? ¿Quién la nombró guardiana de esas dos? Dio una vuelta larga en el carro mientras lo meditaba.

Al llegar a casa, encontró a Ailee sentada en la entrada esperándola.

- Debe ser una broma… - Susurró bajándose del carro - ¿Qué haces aquí? - Cuestionó.

A medida que se acercaba, podía notar que tenía los ojos hinchados y rojos ¿Estaría llorando?

- Me voy del país - Reveló con la voz quebrada.

El pecho de la castaña se contrajo por los sentimientos encontrados.

- Pasa - Fue lo único que se le ocurrió responder.

Abrió la puerta y se hizo a un lado para dejarla entrar. Ailee avanzó directo a la cocina ¿Ahora era la confidente? Tiffany Hwang ¿a qué punto has caído? meditó con nostalgia. Rebuscó en la nevera algo que sirviera, encontró medio litro de helado y lo puso frente a Ailee con una cuchara, era lo mejor que podía hacer por ella.

- ¿Por qué te vas? - Preguntó, finalmente, después de unos cinco minutos.

- Mi padre consiguió un empleo en California, nos vamos después de Halloween - Contestó.

Luego, se metió una cucharada de helado.

- ¿Cuánto después? - Curioseó.

- El 2 de noviembre.

La castaña procuraba no mirar a la otra, mentalmente, se estaba haciendo un lio, no sabía si alegrarse por la noticia y usar eso en su favor para regresar con Taeyeon o sentirse terriblemente mal porque sabía a la perfección la manera como la pelinegra tomaría la noticia. Un momento ¿regresar? Rápidamente quito eso en su cabeza, nada de regresar con Taeyeon, por más que se muriera de… ¿amor? Ella había decidido alejarla por su propio bien.

- ¿Por qué me cuentas esto? - Cuestiono.

- No supe a quién más decírselo - Confesó sin parar de comer el helado.

- ¿Y qué quieres que haga? - Porque era obvio que no sólo la buscaba para desahogarse.

Igual que todos los demás, la buscaban porque sabían que ella encontraría una solución.

- Hay un amigo de mi padre que puede dar reversa a esto - Dijo, ahora enterrando la cuchara en el helado.

A la castaña sólo le tomó un segundo captar la idea.

- ¿Quieres que mi padre despida al tuyo? - Inquirió, para asegurarse.

- Es lo único que se me ocurre…

- ¿Te das cuenta que me pides arruinar algo que tu papá consiguió, por algo que tú quieres?

- Estoy consciente de eso.

- No parece.

Guardaron silencio por unos segundos.

- ¿Lo harás? - Presionó Ailee.

- No hablo con mi padre desde… - Lo meditó antes de decirlo - Desde que Taeyeon nos encontró juntos - Mintió.

- ¡Mentirosa! ¿Cómo sobrevives, entonces? - Reclamó la otra.

- Él deposita el dinero en una cuenta, no tiene que llamarme para eso - Era cierto.

- Por favor… - Empezó a llorar - Sé que puedes lograr que yo me quede - Rodeó la mesa y se plantó frente a la castaña.

Hwang quiso alejarse, no le gustaba que la gente llorara cerca de ella, le molestaba. Estaba a punto de bajarse de la silla cuando Ailee la tomó de las manos.

- Sé que quieres lo mejor para Taeyeon, hazlo por ella - Rogó en medio de lágrimas.

Y si no hubiera dicho eso, tal vez la castaña le habría ayudado.

- No puedo hacer nada - Repitió.

¿Por qué lo hacía? ¿No era mejor para ella que Ailee se fuera? Sí, claro, como si Taeyeon fuera a correr a sus brazos apenas Ailee desapareciera.

- Claro que puedes, tú puedes hacerlo todo y esto no es la excepción - Ailee estaba desesperada.

Sus padres la habían recogido esa tarde apenas saliera de la escuela para darle la noticia que ellos consideraban le encantaría. Se despidió de Taeyeon y se metió al carro. Fueron a comer a un restaurante fino y ordenaron champagne, sólo hasta que le dijeron entendió el porqué de la celebración, el nuevo cargo de su padre implicaba mejor sueldo, casi el triple de lo que ganaba actualmente, incluía también cupo garantizado para su hija en una de las mejores universidades de California. Era lo mejor que le podía pasar a su familia, salvo por un pequeño problema: ella no quería separarse de Taeyeon, por primera vez, sus padres no le prestaron atención en sus reclamos y le ordenaron callar, indignada se marchó del restaurante y fue directo a la casa de la única persona que conocía que podía dar marcha atrás a todo: Tiffany Hwang.

- No voy a pedirle un favor de esos a mi padre, si le dieron el empleo al tuyo es porque se lo merece ¿no crees? - La castaña sabía que hablaba con una pared.

- Pero no quiero irme… - Lloraba, pero no era real.

Ailee, más que tristeza, sentía rabia.

- No seas caprichosa - Replicó Tiffany.

- ¡Te conviene! - Explotó empujándola.

Si no fuera porque estaba buscando la forma de alejarse, la castaña se habría caído de la silla en lugar de quedar de pie.

- ¡¿Qué te pasa?! - Exclamó.

- ¡Quieres que me vaya para quedarte con Taeyeon! - Reprendió Ailee.

- ¿Acaso eres descerebrada?

- ¡Admítelo! ¡Te alegra que me vaya!

¿Cuánta gente bipolar tenía a su alrededor? Pensó Tiffany.

- ¡¿Gracias a quién estás con tu novia?! - Le recordó.

Ailee calló.

- Gracias a mí estás con ella y si se me da la gana que se separen ¡lo harán! ¿Está claro? - Eso no era lo que iba a decir, precisamente.

Ailee apretó los puños.

- Si te quedas perfecto, pero si te vas, no voy a detenerte, es así de sencillo - Declaró.

- Fui una estúpida al pensar que me ayudarías - Murmuró Ailee.

- Tienes la razón en eso…

Furiosa, Ailee se limpió las lágrimas y se marchó.

[…]

Como era obvio, a la semana siguiente, los ánimos entre las dos estaban tensos, fue evidente para Taeyeon que algo había pasado a sus espaldas entre Ailee y Tiffany, no sabía si alegrarse o preocuparse. Y entonces, algo pasó y ese fue el inicio del final de una relación.

Wooyoung, el miércoles antes de Halloween, no asistió a la escuela, a nadie le hacía mayor falta hasta que Nichkhun reveló la razón: Durante el entrenamiento el día anterior, Wooyoung había chocado con Taecyeon, el segundo cayó sentado y no se hizo mayor daño, pero el primero, apoyó mal uno de sus pies y al caer lo dobló bruscamente, tenía la pierna enyesada por un esguince que tardaría 15 días en curarse, es decir, no asistiría a ninguno de los planes que harían para Halloween.

- ¡No puede ser posible! - Exclamó Nana.

- ¿Qué pasa? - Preguntó Taeyeon molesta por el tono agudo del grito.

- Si Wooyoung no está, nos falta alguien para cumplir el cupo en el parque de diversiones - Explicó.

Ailee ocultó, bebiendo de su soda, la sonrisa que le produjo esa reacción.

- Podemos invitar a alguien más - Dijo Lizzy para calmar a su novia.

- ¿A quién?

- Jessica podría ir - Soltó Ailee con descuido.

Los ojos de toda la mesa se posaron en ella.

- Es tu prima, seguramente se nos unirá, Tiffany - Comentó Taecyeon.

La castaña fulminó con la mirada a Ailee.

- Supongo - Accedió - Ahí viene, invítenla - Agregó cuando la mencionada cruzó la puerta de la cafetería.

Taecyeon, casi al instante, se puso de pie y fue hacia ella.

- Hermosa profesora de alemán ¿cómo se encuentra hoy? - Preguntó caminando a su paso.

Jessica le regaló su mejor sonrisa.

- Muy bien ¿y tú qué tal? - Inquirió desfilando con una bandeja en las manos.

- Ahora que gozo de su espectacular compañía, mucho mejor - Respondió.

Desde la mesa, todos observaban el espectáculo.

- ¿Qué necesitas Taecyeon? - Curioseó ella sin caer en la trampa de los halagos.

- Más bien, quiero hacerle una invitación - Aclaró él.

- Sabes que está prohibido…

- No es una cita, saldremos todos juntos - Señaló la mesa.

- ¿Salir a dónde?

- Es como una “casa del terror”, pero en un parque de diversiones.

La castaña lo pensó.

- Suena divertido, cuenten conmigo - Anunció alejándose.

Tiffany blanqueó los ojos con fastidio.

Siguiendo las órdenes de Nana, Jessica llenó el formulario que había en internet y los días siguientes, vio con ellos las películas de terror que habían seleccionado.

[…]

Era sábado y finalmente llegó Halloween.

La casa de Nichkhun estaba decorada como un viejo castillo. Había telarañas en las esquinas, muebles antiguos, candelabros en las paredes, momias, armaduras antiguas, zombis, etc. Nichkhun, al igual que Tiffany, provenía de una familia adinerada, su padre era Tailandés y su madre China, vivía a las afueras de la ciudad en una especie de casa-hacienda bastante grande, lo suficiente como para invitar a media escuela.

Taeyeon se disfrazó de beisbolista.

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Nichkhun se disfrazó del famoso Lestat de Lioncourt.

(http://vignette1.wikia.nocookie.net/vampirechroncles/images/1/13/Lestat_from_The_Vampire_Chronicles.jpg/revision/latest?cb=20140812033615)

Taecyeon se disfrazó de Enrique VIII.

(https://lh4.googleusercontent.com/-npXQUK_LNs4/TYY7ys2_c9I/AAAAAAAAAp0/jjlGacfXiog/s1600/tudors_410_0038.jpg)

 Nana se disfrazó de la novia de Roger Rabbit.

(http://i.dailymail.co.uk/i/pix/2015/11/01/05/2E0052EF00000578-3298724-image-a-179_1446355717460.jpg)

 Lizzy de Cleopatra.

(https://encrypted-tbn1.gstatic.com/images?q=tbn:ANd9GcRzJTpjol1dcSSVDwqpf5tcrbN3dgSBksoYBaOSMRseWds68w2j)

Jessica era una dama de los 20’s.

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Ailee era un duende.

(http://www.lacasadelasfiestas.com/11158-thickbox_default/disfraz-de-irlandesa.jpg)

Tiffany la Duquesa de Devonshire.

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El Dj ambientó la llegada de los invitados con Nox Arcana y cuando Nichkhun le dio la indicación de que empezara, inició con algo de Korn. Todos los licores que había en la mesa fueron teñidos de rojo y las comidas eran ojos de goma, arañas de chocolate, colas de rata con sabor a limón, sangría de frutos rojos, dedos de malvavisco, muffings de cerebros, gelatina de fresa con ojos o dedos de goma dulce por dentro. Los “sirvientes” estaban disfrazados de zombis con maquillaje de película.

A las 11, el grupo se reunió en la habitación de Nichkhun.

- Podemos regresar después - Dijo Taecyeon para tranquilizar a Nichkhun, a quien no le parecía justo terminar la fiesta tan temprano.

- Tu chofer nos puede esperar a la salida del parque ¿cuánto podríamos demorarnos? - Propuso la reina.

- Sí, suena bien - Acordó Taecyeon.

Llegaron al parque de diversiones en la limosina y encontraron un grupo que acababa de salir. Eran tres chicas y cinco chicos. Las primeras iban llorando y los otros algo nerviosos, los universitarios que habían planeado todo, intentaban calmarlos.

- ¡No entren! - Gritó una de las chicas escapando de los brazos de sus amigas.

Corrió hacia los recién llegados y se pegó de Tiffany. La castaña la miró con desprecio.

- Lo sentimos, sigue un poco conmocionada - Explicó una de las amigas arrastrándola lejos.

- ¡Esto se ve interesante! - Exclamó Nana sonriendo grande.

Los demás se miraron algo consternados por lo que acababa de pasar, pero igualmente la siguieron cuando caminó hacia la taquilla. Lizzy y ella hablaron con los encargados que buscaron sus nombres en una lista para confirmar su asistencia.

Al entrar, escucharon una discusión entre dos de los encargados.

- Hay que cancelar esto - Reclamaba uno.

- No tienen que saberlo - Replicó el otro bajando la voz.

Aun así, se les podía escuchar.

- Hay un asesino suelto, probablemente dentro del parque ¿y no tienen que saberlo? - Ironizó.

Todos se miraron los unos a los otros confundidos.

- No es seguro que esté dentro del parque, la policía dijo que era una posibilidad.

- Tan posible como que haya cientos de lugares para esconderse y que seamos lo más cercano a la cárcel.

- ¿Por qué alguien que acaba de escapar asesinaría tan rápido?

- ¿Porque si alguien lo ve y lo reconoce puede denunciarlo a la policía?

Tiffany tosió ligeramente para llamar la atención de quienes discutían.

- ¿Algo que debamos saber? - Preguntó con las manos en la cintura.

El chico que les acababa de abrir la puerta, intervino.

- La policía nos llamó para informar que un asesino había escapado de la cárcel hace dos días y que era muy posible que se ocultara dentro del parque, porque es grande y hay muchos lugares para esconderse - Explicó sonriendo nervioso - Pero, hasta el momento, ningún grupo ha tenido problemas - Agregó mirando a los otros.

Jessica notó el gesto, pero le restó importancia.

- Sigan por aquí, les indicaremos qué deben hacer - Pidió el que estaba a favor de ignorar a la policía.

Avanzaron hasta la tienda de recuerdos y les hizo señas de que se sentaran un momento. Exhaustas, las que tenían tacones se los quitaron.

- Hay algo que no me da buena espina ¿vieron a esa chica cuando llegamos? - Comentó Nichkhun mientras esperaban al encargado.

- Prueba que la pasaremos muy bien - Dijo Nana.

No iba a permitir que alguien dañara su momento de gloria. El tipo regresó con linternas para todos, una a una las fue entregando mientras hablaba.

- El juego es muy sencillo, deben recorrer el parque siguiendo únicamente las flechas fluorescentes que hay en el piso, no deben desviarse pues no podremos monitorearlos si lo hacen y no respondemos por lo que les pase - Explicó señalando las flechas que se veían a unos cuantos metros - Hay sorpresas en diferentes lugares del parque, procuren no atacar a los actores ni salir corriendo fuera del camino de flechas ¿está claro? - Finalizó levantando las cejas.

Todos asintieron.

- ¿Todos están tomados? - Preguntó.

Ailee pensó en negarlo, pero al notar que todos los demás admitían estar tomados prefirió no decir nada para no ser el hazmerreír del grupo.

- Pueden empezar, nos vemos en una hora - Dijo marchándose.

Apenas lo perdieron de vista, todas las luces del parque se apagaron, tanto las atracciones como el alumbrado, dejándolos en la completa oscuridad.

- Genial, tendré que ponerme los tacones si no quiero pisar un vidrio - Se quejó Tiffany.

Sin levantarse de la silla, se acomodó los tacones. Taecyeon prendió su linterna y alumbró a Nichkhun.

- Saca ya el licor, no vamos a andar por ahí medio sobrios - Reclamó.

Nichkhun se arrodilló para apoyar la maleta en el suelo.

- Chicas ¿qué quieren beber? - Curioseó.

Taecyeon las iluminó con su linterna.

- Dame lo que sea, pero que esté fuerte - Pidió Jessica estirando la mano.

Recibió whiskey.

- Nosotras queremos vodka ¿tienes? - Preguntó Nana hablando en nombre de Lizzy también.

- No quiero beber mucho más, cuando me antoje le robaré un poco a alguien - Se excusó Ailee.

- Yo paso - Dijo Taeyeon.

- Tequila para mí, mi amor - Respondió Tiffany.

El tono que usó la castaña llamó la atención de Taeyeon, casi le pareció que estaba despechada. Se sintió culpable, aunque sólo un poco, seguramente ese beso la había afectado más de lo que admitía.

Después de la respectiva entrega de licor, el grupo inició el recorrido en medio de la oscuridad, sólo las flechas fluorescentes los guiaban y no alumbraban lo suficiente como para darles una idea de dónde se encontraban, debían usar las linternas para eso.

Cuando giraron a la derecha, quién sabe dónde, Taeyeon se retrasó un poco con su novia.

- No sabía que habías tomado - Comentó, fingiendo que no le importaba.

- Sí, fue poco antes de que llegaras, ya sabes cómo es Taecyeon - Mintió.

Pronto, el silencio se hizo tan pesado que sólo se escuchaban los tacones de las mujeres y la respiración de los hombres.

- No tienen miedo ¿verdad? - Preguntó Nichkhun.

Nadie, salvo Tiffany, había notado que él guiaba el grupo en medio de la oscuridad.

- ¿Por qué lo tendríamos? Sólo es un juego - Excusó Ailee.

- ¿Y si nos encontramos con el tipo del que estaban hablando cuando llegamos? - Retó Nana, sólo por torear el miedo de Ailee.

- Si estuviera aquí el grupo anterior a nosotros habría salido incompleto - Analizó Taeyeon.

Guardaron silencio, tenía sentido, aunque sólo consiguió aterrar más a su novia.

De repente, el carrusel empezó a moverse.

- ¡¿Qué carajo?! - Gritó Jessica.

Más que por la atracción que empezó a moverse, aparentemente, de la nada, fue el grito de la maestra lo que hizo que todos dieran un salto.

- ¿Tienes que gritar así? - Preguntó Tiffany con el corazón en la garganta, pero como siempre, disimulándolo con el tono de la voz.

Taeyeon rio por lo bajo.

- Sigamos - Ordenó Nichkhun.

A los pocos pasos, encontraron un pasillo a su derecha, las flechas no pasaban por ahí, pero al final de este, que era muy estrecho y sin luz, se podían ver más flechas.

- Las flechas rodean este pasillo - Dijo Taecyeon.

- Deberíamos pasar por aquí y ahorrarnos tiempo - Comentó Jessica.

- Se supone que no debemos salirnos del camino - Recordó Ailee con una sonrisa nerviosa.

- Mira, las flechas voltean ahí, seguramente sólo daremos la vuelta, si pasamos por aquí será más rápido - Insistió Lizzy.

Tiffany que había preferido dejarle el liderazgo a su novio, no estaba pendiente de la conversación. Entonces, ante el silencio del grupo, se animó a hablar.

- Vale, yo lo atravieso, así les demuestro que no pasará nada, es sólo un juego ¿recuerdan? - Declaró.

No esperó respuesta, sujetó su vestido, que no era pequeño y lo sostuvo para poder atravesar. El pasillo en cuestión sólo permitía el paso de una persona a la vez, la castaña aunque lo disimulaba, estaba bastante nerviosa, no era temerosa de la oscuridad, pero desde que iniciaran el recorrido, sentía que alguien los observaba y eso no podía ser bueno. Avanzó tratando de no hacer ruido con los tacones y cuidando de que el vestido no se enredara en nada, no se atrevía a mirar atrás, tal vez porque pensaba que ya no habría nadie o porque, si lo hacía, alguien la sorprendería a la salida. Si algo pasaba ¿para cuál lado correría? ¿Qué era más seguro? ¿Darse la vuelta y regresar o ir hacia adelante? Dependía del lado por el cual fuera atacada, el corazón se le aceleró, ya no podía escuchar sus pasos, sólo el golpeteo en su pecho, sudaba frio ¿era tan largo el pasillo? No lo parecía cuando entró ¿En qué momento se le ocurrió meterse por ahí? La salida estaba cerca, podía ver las flechas fluorescentes con más claridad. Estaba cansada ¿Cuánto había caminado? Estaba completamente sola cuando alcanzó el final, apenas puso uno de sus pies fuera de ese pasillo que nunca había visto de todas las veces que fue a ese parque de diversiones, extrañamente exhausta, cayó de rodillas buscando aire.

- ¿Mi amor? ¿Estás bien? - Preguntó Nichkhun desde el otro lado.

Lo escuchaba muy lejos.

- Sí, estoy bien - Mintió poniéndose de pie - Pasen todos en fila - Ordenó mientras se arreglaba el vestido.

Por el rabillo del ojo vio que algo se movía a unos cuantos metros, los pelos se le pusieron de punta, con toda su alma deseó que fuera alguien contratado por los tontos que habían preparado el show y no alguien o algo más. El grupo, después de observar cómo la porrista alcanzaba el otro extremo, se animaron a pasar. Los basquetbolistas fueron primero, seguidos por las arpías, Taeyeon, Ailee y por último Jessica.

- Creo que me voy a quedar atascado - Se quejó Nichkhun, cuyos anchos hombros apenas cabían.

- Somos dos - Dijo Taecyeon.

Afuera, Tiffany seguía escuchando pasos a su alrededor, interiormente se maldecía por ser tan cobarde, si tan sólo los demás lo supieran no sería la “arpía reina”. Entonces, justo detrás, cayó algo con fuerza, la castaña gritó del susto y se giró para averiguar qué era. Gritó aún más fuerte cuando vio una cabeza que rodaba hacia sus pies, los demás, que iban a la mitad del pasillo se detuvieron un segundo y al siguiente empezaron a correr. La porrista respiraba con dificultad y hacía todo lo posible por controlar los temblores de su cuerpo.

- ¿Qué pasó? - Preguntó el basquetbolista llegando a su lado.

Tiffany ya había notado que la cabeza era falsa, pero apenas y podía escuchar lo que le decían pues el palpitar en su pecho la mantenía aturdida.

- No es nada - Respondió señalando el truco con un movimiento de barbilla.

Taecyeon se inclinó y tomó la supuesta cabeza para analizarla.

- Genial - Dijo observando el trabajo en arte.

Ailee que fue la última en salir del atajo, también gritó cuando vio la cabeza, sólo que ella se alcanzó a cubrir la boca.

- Tranquila, es falsa - Reveló Taeyeon.

- ¡Que injusto! Quiero que me asusten a mí - Se quejó Nana.

- Sigamos, si queremos regresar a la fiesta debemos recorrer el parque completo - Anunció Lizzy.

Todos retomaron el paso siguiendo las flechas, pero de repente, Ailee se detuvo de golpe.

- ¿Estás bien, amor? - Curioseó Taeyeon.

Los demás se detuvieron para saber qué le pasaba.

- ¿Dónde está Jessica? - Preguntó.

No hubo respuesta detrás de ella.

- Jessica, deja de jugar - Reclamó Tiffany.

La maestra no respondió, pero sonaban unos pasos sin ritmo a lo lejos.

- No se ve nada salvo las flechas, tal vez se cayó cuando salimos del atajo y se lastimó un pie - Dedujo Taecyeon.

Nichkhun, sacó su linterna y la encendió hacia la oscuridad, un chico, a un lado del camino de flechas, se detuvo por la luz. Miraba hacia el piso y tenía la ropa sucia y rota.

- ¿Quién eres? - El basquetbolista se puso frente a los demás.

Cuando levantó el rostro, todos vieron cómo los ojos y la boca se le alargaban, al mismo por los altavoces del parque sono una especie de grito gutural. Aterrada Ailee se soltó de Taeyeon y empezó a correr llamando la atención de todos.

- ¡Ailee! - Exclamó Nana.

Entonces, el chico aprovechó para acercarse a Nichkhun y arrebatarle la linterna dejándolos en la oscuridad, los gritos sonaron nuevamente, lo que les impidió escuchar qué pasaba. Taeyeon intentó correr detrás de su novia, pero un brazo la detuvo. Nana, que procuraba mantener la calma a pesar del ruido, gritó cuando sintió que la mano de Lizzy era arrebatada de la suya con violencia. Taecyeon intentaba ver algo, pero era como si el sonido no le permitiera abrir los ojos, medio minuto más tarde, el ruido se detuvo. Rápidamente, Taecyeon sacó su linterna.

- ¿Están todos bien? - La movió para iluminarlos a todos.

Nichkhun, Lizzy y Ailee no estaban.

- Nichkhun estaba a mi lado - Dijo Tiffany.

Sacó su linterna y la encendió hacia la oscuridad, no alumbraba mucho.

- ¡¿Por qué no me dejaste ir tras Ailee?! - Reclamó la pelinegra acercándose a Tiffany para empujarla.

- ¿Qué te pasa? Ni siquiera te he tocado - Defendió la porrista.

- ¡Me cogiste del brazo!

- Tuviste que acercarte para empujarme ¿cómo te voy a jalar si estoy a 3 metros de ti?

- Tiene razón - Secundó Nana.

Taeyeon se giró para calcular la distancia y se dio cuenta que tenía razón.

- Lizzy estaba tomada de mi mano y de repente se soltó - Comentó la arpía.

- Nichkhun estaba a mi lado, casi lo podía escuchar gritar - Declaró Tiffany.

- Voy a buscar a Ailee - Anunció Taeyeon.

- ¡Espera! No debemos salirnos del camino - Reclamó Nana.

- No me importa.

Apenas dio dos pasos, los altavoces sonaron como si hubiera interferencia en ellos.

- Sus amigos están al final del recorrido, deben llegar hasta el final - Anunció una voz.

La comunicación se cerró.

- ¡Genial! - Se quejó Taeyeon - Sigamos con este tonto juego - Ordenó empezando a caminar siguiendo las flechas.

A falta de réplica por parte de la castaña, los otros dos accedieron a dejarla que fuera la nueva “líder”. A los pocos minutos de camino, encontraron una hoja de papel en el piso. Tiffany la recogió.

- Es un artículo de periódico - Dijo.

Con su linterna lo iluminó para que los demás pudieran verlo.

- ¿Qué dice? - Preguntó Taecyeon.

- Dice que hace años hubo un accidente en la montaña rusa, todos los que estaban en ella murieron - Respondió según el encabezado.

- Creo recordar esa noticia - Comentó Nana.

- Vale, hay fantasmas ¿podemos seguir? - Reclamó Taeyeon.

3 pares de ojos la miraron con rabia, estaba acabando con el ambiente.

- Sigamos - Declaró.

A los pocos metros lograron ver la montaña rusa, sus vigas eran blancas, así que captaban algo de luz de las flechas, curiosamente, esa era la parte del parque que más “luz” tenía, caminaron a su lado según las flechas indicaban hasta que, de repente, el tren se empezó a mover. Nana dio un salto por el chirrido del metal y Taecyeon la recibió en sus brazos.

- Me aburro - Se quejó Taeyeon.

- No seas tan molesta, haces que el juego pierda gracia - Se quejó Tiffany.

- Sólo quiero encontrar a Ailee e irme.

- Lárgate entonces.

Hubo un cruce de miradas fuerte entre las dos. Uno que sólo notó Taecyeon, pues Nana estaba concentrada en algo que le parecía ver por encima del hombro del chico.

- Mejor nos calmamos ¿les parece? - Sugirió. Soltó a Nana y se puso en medio de las otras dos - No hay necesidad de pelear - Agregó.

Ignorándolos, Nana avanzó hacia lo que le parecía ver en la oscuridad, nadie la detuvo y un segundo después de que desapareció en la oscuridad, los gritos ensordecedores volvieron a sonar por los altavoces, haciendo lo posible por soportar el sonido, Taecyeon prendió la linterna y se fue tras Nana, la linterna se apagó poco después, al igual que el ruido. Tiffany y Taeyeon quedaron en la completa oscuridad, las dos solas.

- Tiene que ser un chiste - Murmuró la pelinegra.

De todas las parejas que podían dejar para el final, ellas eran las elegidas. La castaña, ignorando lo que acababa de escuchar, abrió su botella de tequila y bebió hasta la mitad haciendo caso omiso al ardor en su garganta y su estómago. Taeyeon la observó en silencio.

- ¿Qué haces? - Preguntó.

- Tomando valentía para aguantar esto hasta el final contigo - Respondió.

De inmediato, se tambaleó, nunca fue buena tomando tequila, si había un licor por el que tenía debilidad, era ese.

- Nada que hacer, sigamos - Suspiró Taeyeon.

Mientras las ex amantes recorrían el parque, algunas veces saltando del susto cuando alguno de los actores se aparecía, Ailee y Jessica esperaban en el castillo del terror. Según los organizadores, la primera no tendría estómago para soportar el recorrido y la segunda se aburriría en poco tiempo, por ser la mayor, así que le evitarían el problema. A la castaña la habían sacado del atajo antes de que lograra salir mientras alguien distraía a los demás. A Ailee, cuando salió corriendo, uno de los actores la desmayó con un poco de cloroformo y la llevó hasta el castillo. Nichkhun había sido desmayado también con cloroformo y lo llevaron al otro lado del parque para que hiciera otro recorrido, más tarde, cuando capturaran a Taecyeon, lo llevaron con Nichkhun. Lizzy fue arrebatada de la mano de Nana y llevada a la sección del parque que era como un mini zoológico, allí ella y su novia tendrían un espectáculo de terror privado.

- ¿Qué se supone que esperamos aquí? - Preguntó Ailee aún medio aturdida por el cloroformo.

- Es el final del recorrido, así que los demás no creo que tarden - Respondió Jessica.

Estaban en la zona tipo cementerio del castillo, había niebla generada por hielo seco en agua en algunas de las tumbas falsas, esqueletos abrazando sus lápidas, música de Nox Arcana de fondo y unas cuantas manos zombis que salían de la tierra cuando alguien pasaba por los sensores de movimiento que había en el camino. La castaña se sentó sobre una de las lápidas cruzando las piernas. Abrió su botella de whiskey, que hasta el momento no había tocado y bebió unos tragos.

Ailee desde el suelo cruzó las piernas y observó el lugar.

- ¿Y los demás? - Curioseó.

- No lo sé.

- ¿No te dijeron nada más cuando te trajeron aquí?

- Sólo que fuera paciente.

- ¿Cuánto tiempo estuve inconsciente?

- No lo sé, como media hora, creo.

La castaña estiró el brazo para ofrecerle whiskey a la otra.

- No, gracias, el licor y yo no nos llevamos bien - Dijo.

Aunque no era del todo mentira, lo hacía por el repentino vacío que sintió en el vientre cuando se descubrió mirando las largas piernas de Jessica. Para la maestra, ese breve escaneo no pasó desapercibido.

Taeyeon y Tiffany llegaron al castillo de los espejos, las flechas llegaban a la entrada y reaparecían a la salida.

- Hay que entrar - Declaró la pelinegra.

- Podemos no hacerlo - Acordó la castaña.

- ¿No te quejabas de que le quitaba la gracia al juego?

- Bien…

La pelinegra le extendió la mano a la otra. Encontró una mirada de confusión.

- Estás borracha, no vaya a ser que te pierdas o te estrelles contra uno de los espejos y termines lastimada - Excusó.

Era cierto, lo hacía por eso. Pensó en hacerse la digna, pero no le encontró sentido, recibió el gesto con disimulada incomodidad. Pocas luces estaban encendidas dentro del lugar y un extraño frio había empañado algunos de los espejos dificultando la salida.

- Nunca fui buena para los laberintos - Comentó Tiffany.

Tambaleaba un poco por el exceso de licor.

- ¿Tenías que beber tanto? Ahora tendré que arrastrarte hasta el final - Se quejó Taeyeon.

- Pues déjame aquí y ya, vete a buscar a tu noviecita - Medio la empujó, pero por la fuerza mal calculada, fue ella quien retrocedió. Afortunadamente, acababan de llegar a un pasillo más o menos largo, así que sólo cayó sentada sin romper nada.

- Cálmate - Reclamó la pelinegra ayudándola a poner de pie - ¿No quieres encontrar a tu novio y salir de aquí?

Un segundo más tarde, se dio cuenta de lo errada de su pregunta.

- Por mí, que se muera - Respondió tambaleándose para seguir el camino.

Dio dos pasos y se detuvo.

- ¿Por qué fuiste con Ailee? - Preguntó.

Taeyeon se sorprendió al punto de jurar que la había escuchado como si estuviera completamente sobria.

- ¿Por qué preguntas eso?

- Tengo la duda.

Se giró para encararla, pero tuvo que apoyarse en uno de los espejos para no caer.

- Estás borracha, no sabes lo que dices - Taeyeon avanzó como queriendo ignorarla, pero Tiffany le cerró el paso.

- Sólo responde - Demandó.

La castaña no estaba sobria como la otra sospechaba, de hecho, estaba lo suficientemente ebria como para iniciar esa conversación, porque sólo ebria podía sacar lo que tenía guardado en lo más profundo de su alma.

- Sabes por qué lo hice - Se limitó a decir.

- Sí, esa parte es mi culpa, pero ¿cuál fue la otra razón? - Insistió.

Sabía que esa parte era la más importante, aun así quería conocer la versión de la pelinegra.

Taeyeon lo meditó.

- Perdía mi tiempo contigo, acordamos que sólo seriamos “amigas con derechos” ¿recuerdas? Muchas veces me pusiste en claro que no había nada más - Sólo hasta que terminó de hablar se dio cuenta que había subido el tono de la voz.

- Yo te dije que quería dejarlo todo por ti - Susurró.

La pelinegra levantó las cejas sorprendida.

- ¿Y cuándo fue ese gran suceso que no me di cuenta?

- El día que llegó Ailee.

Dio media vuelta y continuó su camino. Taeyeon aturdida permaneció inmóvil por unos segundos, no recordaba nada de eso ¿cuánto tiempo había pasado?

- ¡Espera! ¡Yo no recuerdo que me dijeras eso! - La alcanzó corriendo, pero chocó con ella cuando esta se quedó paralizada y soltó la botella de tequila que se estrelló en el piso derramando todo el licor - ¿Qué pa…? - No pudo terminar la frase.

Estaban en la parte central de la casa, es decir, donde se forma una especie de círculo y los espejos se reflejan unos a otros de manera infinita. Esto habría sido irrelevante de no ser por la niña pequeña que estaba sentada en el piso con las piernas cruzadas, permanecía inmóvil mirando el suelo, el cabello castaño le cubría el rostro y sus ropas sucias parecían estar mojadas, la niña no se reflejaba en ninguno de los espejos. Ninguna de las dos se pudo mover del susto y tampoco sabían hacia qué dirección moverse, Tiffany que intentaba calcular si era obra del tequila o pura casualidad, casi estaba segura de que esa niña era Michelle, no lo podía asegurar, puesto que no recordaba qué ropa llevaba su hermana el día que murió, pero ese cabello le parecía inconfundible. Taeyeon, por el contrario, logró calmarse rápidamente, tomó a la castaña de la mano y la arrastró alrededor de la niña tanteando los espejos en busca del reflejo falso que les daría la salida, lo encontró justo detrás de la pequeña.

- Vamos Tiffany - Ordenó jalándola.

La castaña hizo caso sin replicar, para cuando Taeyeon volvió a mirar, la niña ya no estaba y un escalofrío le recorrió la espalda como un viento frio que las siguió hasta la salida de la casa de espejos.

En el castillo del terror, Jessica, cada vez más ebria, sentía que no podría controlar sus instintos mucho más tiempo.

- ¿Cuánto llevas con tu novia? - Le preguntó a Ailee.

Ailee no supo si debía contar el tiempo que Taeyeon le fue infiel con Tiffany o no.

- Unos meses - Se limitó a responder.

- ¿Y nunca le has sido infiel? - Inquirió.

La menor tragó saliva procurando no mirar las piernas de la otra.

- No, nunca - Contestó ladeando la cabeza hacia una de las tumbas falsas.

Notando los nervios, la castaña se acercó a la otra hasta sentarse a su lado.

- ¿Por qué sigues con Taeyeon? Si ella está enamorada de mi prima - Curioseó.

Sabía que era un truco muy sucio el que estaba usando, pero se moría de ganas por tener ese cuerpo en su poder.

Ailee apretó la mandíbula.

- ¿Sabías que se besaron detrás del estacionamiento el día que hicimos el lavado de carros? - Comentó.

El pecado de Ailee era pensar que Jessica era su amiga y no su cazadora.

- ¿Lo ves? - Con delicadeza, la tomó de la barbilla y con suavidad la hizo mirarla - Esas dos no te respetan - Susurró con sus labios muy cerca.

Los ojos de Ailee se llenaron de lágrimas. Un segundo más tarde, Jessica la besaba. Algo, no supo qué, se activó en ella al contacto con esos deliciosos labios, la maestra no tenía planeado que el momento fuera romántico y empezó a desnudar con urgencia. Ailee se dejó hacer, se sentía profundamente traicionada por Taeyeon, mucho más que la primera vez, en esta ocasión había confiado en ella, casi por completo y la pelinegra la lastimó, de nuevo. Pronto se escuchó gemir, sentía que las mejillas le ardían y que la piel le reaccionaba con cada toque, la castaña disfrutaba del manjar que bajo ella se revolcaba en placer, Jessica comenzó a acariciar sus piernas y luego casi arrancó su cinturón para poder quitarle el vestido, sus pechos saltaron cuando quedaron libres, dándole la oportunidad de morderle los pezones. Ailee no paraba de gemir, cada vez más fuerte, con cada toque que percibía.

- No quiero disfrutar sola - Susurró apenas con voluntad.

Con algo de torpeza, logró quitarle el vestido a Jessica, esta no llevaba sostén, pero sus pechos eran perfectos y Ailee los lamió con temor.

- ¡Más! ¡No pares! - Gimió Jessica cuando Ailee mordió y lamio sus pezones.

Excitada, la castaña acostó a Ailee bajo su cuerpo, le mordió en el cuello y mientras bajaba fue besándola suavemente hasta llegar a su entrepierna que, por encima de la ropa interior, acarició con sus dedos. Ailee se estremeció y sintió como su o se humedecía, lentamente, la mayor deslizó la prenda hasta sacarla por completo y observó a la menor.

- ¿Quieres que lo haga? - Preguntó, sólo para escucharla suplicar.

- Hazlo - Pidió Ailee.

La profesora se puso a la altura de la estudiante para besarla al mismo tiempo que sus dedos bajaban haciendo una línea recta desde su cuello hasta su entre pierna, apenas sintió el contacto en su o, Ailee se encorvó hacia atrás y gimió, Jessica empezó a mover sus dedos con suavidad y muy lento, no tuvo que esforzarse por encontrar su punto de excitación, puesto que tenía años de experiencia y esa lentitud empezaba a volver loca a la menor que cada vez más perdía el control de su cadera.

- ¡Más rápido! ¡No pares! - Gimió retorciéndose de placer.

La castaña sonrió grande y empezó a mover sus dedos cada vez más rápido, Ailee respiraba con fuerza y gemía al mismo tiempo, con la mano libre, Jessica masajeaba los pezones.

Lo que ninguna de las dos sospechaba era que, en ese preciso instante Tiffany y Taeyeon entraban al castillo.

- Conozco este castillo de memoria - Declaró la pelinegra.

La castaña seguía muda después de lo sucedido en la casa de los espejos, no por miedo, puesto que este ya lo había superado, sino por la imprudencia de su pregunta. Avanzaron rápidamente por el castillo ya sin sorprenderse por nada, no sólo Taeyeon conocía ese lugar de memoria.

- ¿En serio me dijiste que querías dejarlo todo por mí? - Preguntó Taeyeon.

Tomó a Tiffany del brazo y la obligó a detenerse, estaban en la sección del castillo que ambientaba una cárcel y dentro de una celda estaba un preso que era electrocutado en la silla eléctrica.

- Sí, pero no me escuchaste - Se mordió la lengua por no poder evitar responder.

- ¿Por qué me lo dices hasta ahora?

- Estás con Ailee ¿qué caso tiene?

Guardaron silencio cuando la silla eléctrica se encendió y el supuesto preso gritó de dolor, era un robot.

- Las cosas han cambiado - Dijo Taeyeon.

- Lo sé, estás enamorada de ella, no me lo tienes que restregar en la cara - Replicó Tiffany.

La pelinegra se le acercó hasta acorralarla contra las barras de otra celda donde el cuerpo de un preso yacía ahorcado con un cinturón.

- ¿Qué haces? - Cuestionó la castaña alterada por la cercanía de la otra.

- Yo… - Ella tampoco sabía lo que hacía - He cambiado mucho gracias a ti - Dijo con su rostro muy cerca.

- No creo que eso sea bueno - Interrumpió la castaña.

- Creo que ya no sé si es malo - Declaró la pelinegra.

Los rostros de ambas se fueron acercando, era la misma situación que en el lavado de carros, Tiffany no tenía voluntad para detenerse, el tequila no se lo permitía y Taeyeon no entendía por qué lo hacía. Entonces, justo cuando sus labios estaban a punto de tocarse, sonó una especie de grito.

- ¡Debe ser Ailee! - Como saliendo de un trance, Taeyeon empezó a caminar en dirección al sonido.

La porrista tuvo ganas de llorar cuando se vio sola, pero se contuvo y la siguió, pasaron a la siguiente sala, una especie de carnicería humana con cuerpos colgados por todas partes, cuchillos ensangrentados y trozos de extremidades regados sobre una mesa. Se supone que en esa sala había un actor disfrazado de carnicero con una sierra que se les acerca a los niños para asustarlos.

Allí, los gritos empezaron a tomar otro sentido.

- No creo que sea Ailee - Dijo Tiffany alcanzando el paso de la otra.

- Suena como…

- Deben ser las arpías que están aprovechando para echarse un polvo - Mintió.

De inmediato, cuando escuchó un segundo gemido, reconoció a su prima, no supo qué hacer para que Taeyeon no entrara a la siguiente sala ¿Con quién más estaría su prima? ¿Quién más le interesaba en ese grupo? Tiffany no era de las personas que rezaban, pero en ese momento, deseó tener la fe suficiente para hacerlo y pedir que, en realidad, sí fueran las arpías.

Taeyeon, curiosa, siguió avanzando hasta alcanzar la entrada de la siguiente sala.

- Deberíamos irnos - Sugirió la castaña. Era débil, en el interior, tal vez no tan profundamente, deseaba que Taeyeon viera eso. Aun así, la sujetó del brazo para detenerla - Vamos, no queremos ver a esas dos - Insistió.

- Las flechas acaban ahí adelante, es el final - Declaró señalando las flechas que brillaban bajo la falsa niebla.

Sin esfuerzo, se liberó del agarre de la castaña y avanzó. Tiffany la siguió de cerca con el corazón en la garganta, se había esforzado mucho por evitarle dolor a su Taeyeon y justo en ese momento, deseaba con toda su alma que le doliera en lo más profundo de su corazón, porque así le dolía a ella cada vez que la veía con Ailee.

Ailee, minutos antes, había metido sus dedos dentro de Jessica y ambas se masturbaban la una a la otra sin perder el ritmo.

- ¡Ya casi llego! - Gimió la castaña.

Ailee se mordió los labios y unos segundos después, ambas sintieron que unos latigazos les recorrían la espalda de abajo hacia arriba y algo les explotaba en el vientre.

Taeyeon y Tiffany estaban a sólo 2 metros de ellas cuando llegaron al o, la mayor se lamió el líquido tibio de los dedos mientras su cuerpo retomaba el control después del clímax.

Ailee abrió los ojos y se paralizó al reconocer dos siluetas detrás de Jessica.

¿Cómo ven? (¬w¬) Sé que en este momento están matando a Ailee mentalmente, a esto me refería cuando les dije que la iban a odiar más de lo que ya lo hacían… Bueno, este fue un regalo, porque fue capitulo largo, pensé en dividirlo, pero ¿para qué quitarle lo emocionante?

Mañana nos vemos, espero hayan disfrutado del capítulo, no olviden comentar, para que mañana suba varios capítulos, buenas noches, madrugadas, días o tardes… (°u°)/