Capítulo 32 (Los amores de Taeyeon)

Friends with Benefits (Taeny)

[Narrador]

Tres personas marcaron la vida de Taeyeon y no era como si tuviera muchos años.

El primero fue un hombre, se llamaba Baek Hyun. Lo conoció cuando tenía 15 años y se podría decir que se enamoró de él. El chico tenía entre 5 y 6 años más que ella y trabajaba donde ella realizaba su servicio social. Fue una tarde lluviosa cuando ella se había quedado haciendo archivo sola, todos los de la oficina donde ella realizaba su servicio estaban en el último piso del edificio celebrando el cumpleaños del jefe cuando, de repente, unos papeles crujieron detrás de ella.

- ¡Ups! Lo siento - Dijo el chico.

Taeyeon no se dio cuenta de que sonaba muy sobreactuado porque su físico la acababa de aturdir. Baek Hyun tenía una presencia más bien vampírica, tenia 1.74 de estatura, un poco pálido, de ojos obscuros, cabello un poco largo, liso y negro, era de contextura promedio, pero con músculos marcados y era el hijo del jefe aunque no lo aparentaba.

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Taeyeon evitó sonrojarse y le dio la espalda para poder respirar.

- ¿Estás sola? - Preguntó él.

- Sí señor - Contestó ella.

Lo había visto de lejos muchas veces, sabía quién era, pero nada más.

- No me digas señor, me haces sentir viejo - Replicó acercándose sin importarle que estaba pisando papelería de contabilidad, ni que ella estaba arreglando dicha papelería.

Nerviosa, Taeyeon se puso de pie de inmediato y trató de fingir que empezaba a guardar cosas en una caja. En varias ocasiones el joven pasaba cerca y le guiñaba un ojo o le sonreía, claro que para ella todo era su imaginación él era mayor que ella, iba en la universidad, era el hijo del jefe, además de que era bastante adinerado ¿Por qué habría de fijarse en una clase media como ella que todavía iba a la escuela?

- Que bueno que no estás en la fiesta de arriba - Baek Hyun parecía desentendido de que ella no lo mirara y casi ni le hablara - Es muy aburrida, todos unos ancianos lamiéndole las botas a mi papá para un ascenso o un aumento - Se recargó contra el archivero que estaba justo a un lado del que ella estaba guardando.

La pelinegra asintió esforzándose por no sonrojarse. Ella sabía, como muchos, que en ese lugar se metían muchos a tener relaciones ¡Cuántas veces no los escuchó! ¿Es que acaso se olvidaban de que ella trabajaba allí o no les importaba?

- Es el cumpleaños de mi padre, pero sé que ayer fue el tuyo y te traje un regalo - Anunció el chico.

Taeyeon lo miró muy sorprendida.

- Lo vi en la cartelera, no te estoy espiando ni nada por el estilo - Aclaró.

Sí, la cartelera, pensó ella, el pedazo de papel donde se anotaban las fechas de cumpleaños de todos para “recordarlas”. Como haciendo un acto de magia, sacó una  rosa roja de su manga y se la entregó, las mejillas de Taeyeon tomaron el mismo color que la flor.

- Gra… gracias - Tartamudeó bajando la cabeza.

Lo cierto era que Baek Hyun le gustaba mucho, aunque estuviera fuera de su alcance ¿Lo estaba realmente? No lo vio más durante una semana y eso la decepcionó, el único día que pasó por la oficina parecía que no la recordaba y cruzó a su lado sin mirarla, pero aun así, conservó la flor.

El sábado, que salió temprano de su servicio, se iba a encontrar con unos amigos cuando Baek Hyun se le apareció.

- ¿A dónde vas tan sola? - Curioseó disparándole una de sus mejores sonrisas.

Taeyeon casi se derrite.

- Este… iba a… encontrarme con… alguien - Le costaba hablar claro cuando la miraba de esa forma.

No estaba acostumbrada a esas miradas, ni siquiera estaba acostumbrada a que los hombres la trataran de esa manera, siempre eran sus amigos y nada más.

- ¿Tu novio? - Inquirió él levantando una ceja.

- ¡No! - Exclamó ella.

Ya sabía que le gustaban las mujeres y los hombres, lo descubrió cuando todavía era muy pequeña, pero nunca tuvo ni un novio ni una novia. Baek Hyun se carcajeó. Si Taeyeon hubiera conocido a Tiffany en esa época habría notado que el pelinegro se burlaba de ella y no de su respuesta, pero sólo hasta ese momento mientras le contaba todo a Ailee cayó en cuenta y se lamentó internamente por haber llorado tanto por ese chico.

- Quiero invitarte a tomar algo - Indicó él.

Taeyeon buscó a su alrededor por si veía a sus amigos.

- ¿Algo como qué? - Cuestionó dudosa.

- ¿Un café? ¿Una gaseosa? ¿Una malteada? Lo que quieras, yo invito - Respondió mirándola desde su altura que, por esa época, superaba la de ella por mucho.

- Vale - Aceptó sonrojándose.

Mientras caminaban ella procuraba mantener una distancia prudente ¿Y si el jefe salía y los veía? No podía darse el lujo de perder las horas de servicio que ya llevaba pues tendría que empezar de nuevo en otro lugar.

- ¿Qué te pareció mi regalo? - Inició él mirándola.

- Me gustó mucho - Confesó.

La voz de Baek Hyun también la descolocaba, era del tipo de voz que desearías que te susurrara “te amo” antes de dormir. El pelinegro se carcajeó de nuevo, el tipo realmente disfrutaba verla así de embobada y no precisamente de un modo romántico.

- Quería darte otra, pero los días que estuve en la empresa no pude acercarme ¿si sabías que mi padre me está “entrenando” para que sea su reemplazo en unos años? - Comentó mirando el cielo con las manos en los bolsillos de su chaqueta de cuero.

- He escuchado algo - Respondió ella sin poder despegar los ojos del chico que la acompañaba.

La luz del sol le aclaraba un poco más la piel, sus ojos brillaban y su cuerpo, uno que ella deseaba con toda su alma ver sin ropa, desde su altura se veía más fuerte que nunca.

- ¿Vas al gimnasio? - Se aventuró a preguntar.

Baek Hyun la miró, por un segundo, con violencia, no le gustaba que la gente notara su vanidad, aunque era más que evidente.

- ¿Tienes novio? - Inquirió él.

La tomó de repente de la mano y la pegó a su cuerpo, a Taeyeon se le olvidó lo que acababa de preguntar.

- No…

¡Que estúpida se ve! Pensó él.

- Perfecto - Susurró mientras se inclinaba y la besaba.

No era el primer beso de la chica, pero sí el único que le hizo sentir mariposas en el estómago, duró cerca de cinco segundos, pero a pesar de eso le supo a gloria.

- Que bueno - Corrigió Baek Hyun cayendo en cuenta de que se estaba confiando mucho sin saber que tan tonta era la niña frente a él.

El romance continuó durante varias semanas, siendo siempre el cuarto de archivos su lugar de encuentro para besarse hasta el cansancio, sólo eso, besarse, porque Taeyeon no quería tener relaciones tan rápido. Sin embargo, con el tiempo, Baek Hyun empezó a cansarse de ese jueguito, quería o y Taeyeon no se lo daba, cosa que le molestaba pues le hacía pensar que no tenía suficiente control sobre ella como con todas las demás que habían caído.

Un día, la asistente de contabilidad, una castaña de ojos verdes, los vio en el archivo cuando ya el pelinegro había logrado despojar a Taeyeon de su blusa y su sostén.

- Vete - Ordenó él como si la intrusa fuera un animal.

Ella le levantó el rostro y lo miró con furia.

- Tienes cinco segundos para irte, Baek Hyun o te armaré un escándalo de los mil demonios - Amenazó la chica.

El chico le respondió la mirada con rabia, pero casi inmediatamente sonrió de medio lado, se giró y empezó a vestir a una Taeyeon paralizada.

- Luego seguimos con esto, mi amor - Le susurró mientras le abotonaba la blusa.

Se marchó con expresión triunfal dejando solas a las dos mujeres, la castaña cerró la puerta tras ella y su expresión cambió por una de preocupación. Taeyeon estaba aterrada, tenía miedo de que la echaran por seducir al hijo del jefe, miedo de perder todas sus horas sociales que eran obligatorias para graduarse y que si no cumplía ahora tendría que repetirlas el otro año, pero más que todo, estaba preocupada porque Baek Hyun tuviera problemas por culpa de ella.

- No sabes lo que haces, Taeyeon - Inició la mujer.

- Creo que sí lo sé - Respondió ella.

No iba a permitir que la castaña arruinara la vida de Baek Hyun.

- Yo también estuve con él un tiempo, sólo te está usando - Confesó.

- Entonces lo haces por celos - Replicó.

Se sentía rara hablando de esa manera, pero no podía evitarlo.

- Despierta niña ¿por qué crees que siempre se encierra aquí contigo? ¿Cuántas crees que no pasamos por lo mismo en este mismo lugar? - Reprochó la mayor cruzándose de brazos.

No le parecía justo que una niña como Taeyeon estuviera pasando por lo mismo que ella, que la secretaria, la recepcionista, la anterior chica de archivo, la hija de la señora de los tintos y continua la lista…

- Conmigo es diferente - Susurró la menor, algo le decía que debía escuchar a la chica.

- Con todas “fue diferente” - Puntualizó haciendo comillas con sus dedos.

Taeyeon quiso replicar, pero se quedó sin argumentos, así que bajó la cabeza y miró hacia un punto indefinido.

- No cometas el error de acostarte con él, estás muy pequeña, sólo terminarás muy lastimada, te mereces algo mejor, Baek Hyun es una basura, por favor hazme caso - Pidió y luego se marchó.

La pelinegra se quedó muy confundida y retomó sus labores, tantas escapadas con el pelinegro habían hecho que su trabajo se atrasara y se acumulara en dos torres de papel más altas que ella, decidió concentrarse en eso sin darse cuenta que el día transcurrió y que ya todos se habían ido, sólo quedaban tres personas: el vigilante, que por obvias razones no podía irse hasta que su reemplazo llegara, el contador porque era final de mes y debía cuadrar nómina y Baek Hyun.

Tomó sus cosas y fue hasta la cafetería para sacar un jugo de la maquina antes de irse, pero se encontró con el pelinegro tomando un café.

- ¡Que sorpresa! - Exclamó Baek Hyun cuando la vio.

Sólo hasta cuando repetía la historia, Taeyeon se daba cuenta de cómo Baek Hyun era una forma menos evolucionada de Tiffany.

- ¿Qué haces aquí? - Preguntó todavía confundida por los comentarios de la chica.

- Es mi empresa ¿recuerdas? - Hasta eso le sonó chocante a Taeyeon.

- Lo siento, sólo preguntaba - Replicó dándose la vuelta para irse.

Casi alcanza la puerta, pero el pelinegro se paró frente a ella y le cerró el paso.

- Dejamos algo inconcluso hoy - Declaró besándola.

A Taeyeon le parecía curioso como los besos de Baek Hyun le hacían olvidar el mundo, eso tenía que ser amor ¿no? Sentía las mariposas en el estómago, le temblaban las piernas, una sensación extraña se apoderaba de su vientre, se ponía nerviosa y no pensaba claro, eran todos los síntomas que “sus amigas” le decían que sentían cuando estaban enamoradas.

Baek Hyun la tomó por la cintura y sin mucho esfuerzo la levantó y la sentó sobre una de las mesas.

- Eres tan hermosa - Le susurró acomodándole el cabello detrás de las orejas para besarle el cuello.

La pelinegra no comprendía del todo lo que pasaba, sólo sabía que esas atenciones le gustaban mucho. Las manos del chico se metieron por debajo de la falda de su uniforme de la empresa y le introdujo uno de sus dedos haciéndola gritar. Nunca había sentido eso, un dolor-placer extraño, además de ese dedo dentro de ella moviéndose como si quisiera abrir espacio, con la otra mano le quitó la blusa y el sostén de un solo movimiento, para empezar a morder sus delicados pezones.

Taeyeon no sabía cómo sentirse, pero algo le decía que lo que hacía no estaba bien, sobre todo porque las palabras de la castaña seguían dándole vueltas en la cabeza. Baek Hyun estaba tan endurecido que le dolía, hacía mucho tiempo que no se acostaba con una niña virgen, mucho menos una tan hermosa y estúpida como Taeyeon ¿Esa niña no se hablaba con nadie de la oficina? Había sido muy fácil conquistarla, una flor, unas palabras dulces, unos cuantos besos y ya la tenía a sus pies ¡Ojalá estuviera arrodillada a sus pies en ese momento lamiéndole el miembro hasta que él se viniera en su boca! No soportándolo más, sacó su dedo y con brusquedad la acostó en la fría mesa de metal, aprovechando lo desubicada que se encontraba, le levantó la falda y le quitó las bragas de un tirón, desabrochó su pantalón con las manos sudándole de afán y tomó su miembro entre las manos, la miró desde su lugar, tan indefensa, acostada con los senos hacia los lados y los pezones endurecidos, con la frente perlada de sudor y todo el cuerpo temblándole. Quería follársela mil veces esa noche. La pelinegra estaba empezando a disfrutar de la situación hasta que Baek Hyun la tiró contra la mesa, de repente el terror le subió por la espalda y ella, por un segundo, observó la escena como una espectadora y no como la protagonista. El pelinegro se burlaba de ella, se le notaba en la cara, no la miraba con amor sino con autosuficiencia, con desprecio y cuando este le abrió las piernas para penetrarla, Taeyeon cerró las piernas de golpe y rodó hacia un lado hasta caer de la mesa, desnuda se alejó hasta pegar su espalda contra la pared, con lo rápido que se movió sólo alcanzó a tomar su blusa y con ella cubrirse un poco.

- ¡¿Qué pasa?! - Preguntó él con la erección en las manos.

- Si no me dices que me amas, no haré nada - Amenazó ella.

Baek Hyun bufó y luego se rio, más bien, se carcajeó, como Tiffany cuando alguien decía una estupidez con intención de “amenazarla”.

- No seas tonta niña, ven aquí y terminemos con esto de una vez - Ordenó él.

A Taeyeon se le aguaron los ojos cuando confirmó que las palabras de la castaña eran ciertas. El hijo del jefe la miró con furia, pero se dio cuenta que ya no iba a conseguir lo que quería, se vistió y se fue sin decirle nada. La pelinegra se quedó sola y empezó a llorar, al principio se culpó, por no darle o a Baek Hyun, pero poco a poco, fue recapacitando de qué se enamoró de un completo idiota que sólo quería usarla.

Esa parte de la historia no le gustaba a Ailee, aunque no lo dijera en voz alta, ella no creía en la biualidad, para ella era lo uno o lo otro, pero no ambos, así de sencillo. Sin embargo, pudo notar en el rostro de su novia que de verdad le gustaba el tal Baek Hyun y que se enamoró en esas pocas semanas que estuvo con él, pero la siguiente parte de la historia le iba a gustar menos…

Casi dos años habían pasado desde lo sucedido con Baek Hyun y Taeyeon ya lo había superado por completo, el pelinegro ya era un personaje sin importancia en su vida. Hasta que conoció a Tiffany. Ya la conocía, estudiaban juntas desde hacía muchos años y salvo un campamento donde la castaña le dio un beso, su actitud de reina siempre fue la misma, luego entendería por qué.

El día que Tiffany decidió acosarla no estaba de buen humor, la secretaria de la escuela le había ordenado que fuera al lugar donde realizó su servicio social para solicitar un certificado que nunca entregó, sin muchas ganas había ido y para su gran desgracia, se encontró con Baek Hyun y “su futura esposa”, más que irse para atrás por la noticia, sintió como si el ácido de su estómago se quejara por las mariposas que alguna vez sintió. Así que estaba de malgenio y la líder de las porristas había decidido que ella sería su juguete.

Durante todas las clases que tuvieron juntas podía sentir ese par de ojos dorados en su nuca. Luego vino lo de “las clases privadas de matemáticas”, nunca olvidaría el momento en que la vio desnuda buscando qué ponerse, tampoco se sacaría de la cabeza, por más que lo intentara, el primer beso que se dieron en la cocina, Tiffany sobre el fregadero amarrándola con sus piernas y segundos después, sobre la barra, cómo se besaron y luego le mordió los pezones demostrándole que era una completa novata en el arte del o. Desde un principio, antes de ir siquiera a su casa, Taeyeon reconoció que tenía curiosidad de saber quién era la porrista, un segundo después de besarla quería saberlo TODO de ella, la pelinegra debía reconocer que esa forma maquiavélica de vida que Tiffany llevaba, donde todo parecía sacado de alguna película rara, era una vida perfecta para una persona muy imperfecta.

Mientras hablaba, la pelinegra no podía evitar sonreír al recordar tantas cosas y aunque sabía que Ailee estaba frente a ella, no pensaba disimular. La primera vez que se sentó con ella en la cafetería, con la cocinera pidiéndoles la orden, las mesas elegantes, ya ni siquiera podía recordar cómo era el resto del comedor, luego vino la prueba para entrar al círculo cuando casi mata a la señorita Park de un susto ¿Qué sería de la vida de esa mujer? Nunca más se apareció en la escuela y a la semana ya tenían un reemplazo, tampoco volvió a ver el dichoso collar que robo.

Recordó que desde un principio la imaginaba con cola y cuernos de demonio adornada con un trinche y que en su cabeza no hacía más que llamarla loca ¿Cuándo dejó de hacerlo? ¡Y cómo olvidar el o en el gimnasio! Taeyeon se reía a carcajadas mientras le contaba todo a una Ailee con cara de póker, la pelinegra fue ordenando en su mente todos los cambios en las actitudes de sus compañeros desde el momento en que llego a la escuela en ese BMW convertible negro un martes por la mañana, o la primera y única vez que probó la cocaína,Tiffany nunca más le insistió en hacerlo de nuevo. Después paso el o en la limosina mientras unos matones golpeaban a los punks de la escuela. Sus trucos de humo y espejos para hacerle creer a los demás que era una bruja, la “orgia” y las fotografías, el viaje un día que decidieron no ir a la escuela y la castaña había fingido ser una novia. Le conto la vez que dejo a Tiffany muy caliente en el baño de mujeres después de que ella la dejara muy antojada sobre los lavamanos, las promesas que le hizo ese mismo día en la noche en las cuales le juraba que nunca la dejaría por Ailee. Le conto sobre la confusión que sentía por ambas, esa fiesta de máscaras donde las había confundido y no sabía qué hacer, ni con quién quedarse, salvo con ambas o sólo con una. Taeyeon estaba hecha un lio mientras hablaba, no podía parar, ni siquiera cuando los ojos de Ailee estaban aguados, tantas cosas que habían pasado… ¿acaso algún recuerdo de Tiffany era normal?

Taeyeon tuvo que reconocerle a Ailee, sin reír y mirándola directamente a los ojos, que sólo le fue fiel durante un mes porque no podía controlar esa necesidad extraña de acostarse con la castaña, no sabía cómo explicarle que el hecho de que ella no le hubiera dado o no tenía nada que ver, que era algo que venía de antes, que su cuerpo temblaba de deseo apenas Tiffany se le insinuaba, que cuando sus dedos estaban dentro de ella podía tocar el cielo, que le dolió como nunca haberla visto con su padre teniendo relaciones, que estaba ahí, confesándole todo, porque quería una oportunidad para redimirse, para dejar de ser el monstruo lujurioso manipulador que la porrista había creado a punta de o, drogas, “magia” y poder. Ailee estaba sentada frente a ella con los puños muy apretados sobre sus rodillas haciendo un gran esfuerzo porque las innumerables lágrimas que llenaban sus ojos no cayeran por sus mejillas, quería la verdad, lo reconocía, pero tampoco le gustó conocerla tan literal, literal porque ella ya la conocía, una cosa era saber y otra que le confirmaran.

Taeyeon se arrodilló y le tomó las manos.

- Yo sé que no importa cuántas veces te pida perdón, pero quiero estar contigo, no deseo ser más esa persona que Tiffany creó, no soy yo, sólo contigo me comporto sincera e incluso eso lo arruiné por su influencia - Suplicó empezando a llorar.

Ailee se quedó paralizada, no soportaría ser lastimada nuevamente.

- Por favor Ailee, te lo ruego, saques del mundo de Tiffany, no quiero estar en él más tiempo - Rogó escondiendo su rostro en el regazo de su novia.

Esta vez lo decía en serio, no era producto de los tragos ni de los nervios como en la mascarada, en esta ocasión Taeyeon, de verdad deseaba lo que pedía. Porque justo cuando vio la expresión de Tiffany mientras tenía o con su padre, cuando discutió con ella, se dio cuenta que era la misma expresión de Baek Hyun y no estaba dispuesta a entregarle su corazón a alguien que no lo merecería.

 

¿Cómo vieron los desamores de Tae? Obviamente la tercera persona es Ailee, bueno eso me imagino yo jajaja… XD Lamento la tardanza, pero tuve que salir, pero obviamente no los iba dejar sin otro capítulo más, esto ya se va aponer mucho más interesante, nos vemos mañana!!! (^u^)/

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Comments

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czankx #1
Chapter 53: Oh my god!! I've read a lot of Taeny stories and this was beyond no doubt the best! I know it's just an adaptation but any stories became more interesting when the characters became Taeny.. Damn, this wasn't your typical "Friends with Benefits" the entire stpry was a roller coaster, I admit Tiffany's life is so crazy they're all young and I can't believe how Tiffany can achieve those things in her young mind.. This story mad me skip a few hours of sleep and skip works hahaha, how I wish there's another story of the original author and then be adapted to Taeny again, I wanted to read it
yoonalim__ #2
Chapter 6: lo siento, no leí la escena caliente jeje
yoonalim__ #3
Chapter 5: la locura de tiffany esta mas alla de los limites!!!
yoonalim__ #4
Chapter 4: ¿Quieres seguir a Taeyeon?
yoonalim__ #5
Chapter 3: Me pregunto qué prueba inicial le dará a Taeyeon.
yoonalim__ #6
Chapter 2: Todavía estoy un poco confundido por la historia!!!
yoonalim__ #7
Chapter 1: Así que esta es idea de Tiffany, entonces, ¿quién se enamorará primero?
Camilanga
#8
Chapter 53: Me terminé el fanfic en 1 día y medio osea hasta ahora el mejor fanfic taeny que leí
Skyth06
#9
Chapter 53: Joder épico es genial!!