cap 76

El Infierno de Taeyeon
 

Washington, D. C.

Esa tarde, Kitty Wilde llamó a la puerta de la oficina de su padre en la casa familiar de Georgetown.

Robert, el director de campaña de su padre, lo había ido a buscar y le había ordenado que volviera a casa inmediatamente.

No tenía ni idea de qué podía ser tan urgente. Aquella mañana se había despedido de April traspasar un fin de semana tranquilo pero muy activo ualmente. El fin de semana siguiente tenía previsto sorprenderla volando a Durham. Pronto acabaría el semestre y la ayudaría a trasladar sus cosas y su vida al apartamento de Washington, a su lado, donde tenía que estar.

—Adelante —dijo el senador.

Kitty abrió la puerta y se acercó a la silla situada frente al escritorio de su padre.

—No te molestes en sentarte. Esto no nos llevará mucho tiempo —lo interrumpió el hombre, malhumorado y seco como siempre—. ¿Has visto esto? —Dejó caer un montón de fotografías, que se desparramaron por la mesa.

Kitty miró la foto que le quedaba más cerca. Cogiéndola, la examinó y palideció inmediatamente.

— ¿Y bien? ¿Las habías visto antes? —repitió su padre, iracundo, elevando el tono de voz y dando un sonoro puñetazo en la mesa.

—No. —Kitty volvió a dejar la foto en la mesa, lentamente, mientras un escalofrío de miedo le recorría la espalda.

—Eres tú, ¿no?

—Ah...

— ¡No me mientas! ¿Eres tú?

—Sí. —Kitty sintió una opresión en el pecho que le dificultaba respirar.

— ¿Sacaste tú las fotos?

—No, papá, te lo juro. No tengo ni idea de quién las hizo.

Su padre maldijo en voz alta.

—Éstas son copias. ¿Tienes idea de cómo han llegado a mis manos?

Ella negó con la cabeza.

—Me las ha dado el senador Hudson. Alguien le envió los originales a tu novia. Ella se lo contó a su padre, quien hizo copias y me las envió.

La opresión del pecho de Kitty empeoró.

— ¿April las ha visto?

—Sí. Se puso histérica. Su madre ha tenido que ir a Durham para estar con ella. Ha tenido que llevarla al hospital.

— ¿A qué hospital? ¿Cómo se encuentra?

— ¡Céntrate en el problema, chica, por el amor de Dios! ¿Tienes idea de lo que esto significa para la campaña?

Kitty apretó los puños.

— ¿No puedes olvidarte de la campaña ni por un minuto? ¿Sabes si April hizo alguna tontería? ¿En qué hospital está?

—Tenemos suerte de que los Hudson no estén interesados en hacernos chantaje. Lo único que quieren es que te alejes de su hija y la dejes en paz. La boda se ha cancelado, obviamente. Mañana harán el anuncio oficial.

Kitty se sacó el móvil del bolsillo y marcó una tecla. Se llevó el teléfono al oído, pero poco después un mensaje grabado le hizo saber que ese número ya no estaba en servicio.

—Papá, puedo explicarlo. Déjame que hable con April. No es lo que ella piensa.

— ¡Ni se te ocurra! —Bramó su padre—. Robert ha reconocido a la chica que sale en las fotos. Era una becaria que aún estaba en el instituto y que hizo prácticas en mi oficina. ¿Es que no te das cuenta del daño que has causado? ¿Cómo has podido ser tan imbécil?

—Pero de esto hace un año. La fecha está mal. Te juro que a April le he sido fiel. La amo.

— ¿La amas? —Se burló su padre—. Pero no dejaste a tu puta pelirroja.

Kitty dio un paso adelante.

—No es verdad. Rompí con ella. Lo digo en serio, papá. April es distinta a las demás.

El senador movió la mano en el aire como si estuviera espantando una mosca.

—Es demasiado tarde. Ella ya no quiere saber nada de ti. Y no me extraña. La chica de las fotos tenía diecisiete años y trabajaba para mí. Te acostaste con ella y la incitaste a beber y a consumir drogas. ¡Y todo está registrado en esas jodidas fotos! —Barrió la superficie de la mesa con el brazo, lanzándolo todo por los aires: fotos, bolígrafos y papeles.

—Papá, te juro que puedo arreglarlo. Déjame hablar con April.

—No. —El senador se levantó, fulminando a su hijo con la mirada—. Los Hudson quieren que la dejes en paz y eso es exactamente lo que vas a hacer.

—Pero, papá, yo...

— ¡Haz lo que te mandan por una vez en la vida! —vociferó el hombre.

Kitty agarró un jinete de bronce que había sobre la mesa y lo lanzó contra la pared.

— ¡Eres tú el que nunca me escuchas! —exclamó—. Te pasas la puta vida gritando y dando órdenes, pero nunca escuchas. Así que jódete. Que se joda la campaña y la familia. Lo único que me ha importado en la vida es April y no pienso perderla.

Con esas palabras, salió del despacho dando un portazo.

Sentado en la comisaría de Durham, Kitty pensaba que era una amarga ironía.

(Ya que, a diferencia de tiffany, Kitty no conocía el auténtico significado de la palabra «ironía».)

Había intentado hablar con April en repetidas ocasiones, pero sin éxito. Le había enviado flores y cartas, pero se las habían devuelto todas sin abrir. Le escribió emails, pero ella le bloqueó el acceso a su cuenta.

Luego probó a esperarla a la puerta de su casa, pero lo único que consiguió fue que la arrestaran.

Ahora estaba sentada en una comisaría de policía, esperando enterarse de si habían interpuesto cargos contra ella No tenía abogado y sabía que esta vez no podía contar con la ayuda de su padre.

Su último arresto —tras el asalto a taeyeon— había sido merecido. La furia se había adueñado de ella y había querido hacerla sufrir. Pero con April había actuado movido por el amor. Su única esperanza en esos momentos era aceptar el arresto y declararse culpable. Tal vez más adelante pudiese arreglarlas cosas. Tal vez April o su madre, que era una mujer amable y compasiva, le concedieran cinco minutos para explicarse.

No sabía quién le había hecho esas fotos. No le había contado a Natalie ese encuentro, aunque ella había estado en esa habitación de hotel otras veces. Tal vez había contratado a alguien para que la espiara.

Pero estaba convencido de que había sido Natalie la que se las había enviado a April era la única que ganaba algo rompiendo el compromiso de Kitty De un solo golpe, lo había perjudicado a ella, a April y a la campaña de su padre. Y la conocía. Era una zorra vengativa, muy capaz de hacer algo así.

Así que, mientras esperaba a que pasara el tiempo para volver a acercarse a April y hacer las paces con ella, le haría una visita a Natalie en Sacramento.

 

Con estas ideas en la cabeza, Kitty esperaba que le comunicaran su destino legal no tenía ni idea de que Jack hwang estaba sentado en su oscuro Olds mobile a la puerta de la comisaría, pensando en su sobrina embarazada y sonriendo.

 

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Comments

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Karly34 #1
No te encuentro en wattpad :;(
yeye_AlcTae #2
Yo igual tengo un hueco enorme apartir del capitulo 25 no se que paso ahí :cc
Jeesica27
#3
Chapter 25: Holaaaaa, oye quería decirte que desde el capitulo 25 la historia tiene un hueco increíble y no sale los capitulos donde Tae y Phany fueron a Florencia y así
Un saludo, me quiero terminar esta historia para ver la pelicula xd
Cass_Addiction19 #4
<3
natovida #5
Chapter 142: Gracias por la historia! Espero que la proxima sea de misterio o algo asi
gea_ly
#6
Por mi parte no me e saltado ningún capitulo ,li volvi a revisar y lo llevo bien
natovida #7
Chapter 36: Tengo huecos en la historia
natovida #8
Chapter 33: Quien putas es Paulina??? Me perdi!!!
diamond09
#9
Chapter 29: Por alguna razón siento q nos saltamos capítulos... ??? o asi va la historia?