Capítulo 24: "- ¿Confías en mí?"

taeyeon kim ( taeny, vampiros)

Dejé mi bolso encima de la mesa y suspiré.

Estaba cansada. Recién volvíamos del bar de bill  y había sido un día duro. Bastante, para ser sincera.

Taeyeon y sus declaraciones eran la primera cosa que aparecía en mi mente. Sus dibujos, el hecho de que ella no podía dejar de pensar en mí, ni yo en ella, sin contar que la gente hoy en el bar había aumentado más que en las últimas semanas y mis piernas no daban más.

- ¿Quieres algo de beber? Papá y mamá no van a volver hasta muy tarde. Si quieres puedes quedarte a comer. - Sooyoung le habló a Siwon que nos había traído luego de nuestra jornada de trabajo. No me molestaba que se quedara a comer, ya que significaba que pedirían pizza y no tendría que comer sus horribles fideos pasados y chiclosos.

- No creo que alguien tenga algún problema con eso... Déjame llamar a mi padre para avisarle. - Siwon sacó su teléfono y marcó un número mientras Soo se acercaba a mí.

- ¿Pizza? -

Obviamente sí. ¿Qué clase de pregunta era esa?

- Por supuesto, voy a cambiarme. No tengan o mientras no estoy. - Vi a las mejillas de Soo tomar color mientras me alejaba riendo.

Era divertido molestarla. Aunque un día de estos (Y estaba segura que pasaría) recibiría una buena cachetada si algo de lo que le decía no le gustaba y ella no estaba de humor como para procesarlo en forma de broma.

Abrí la puerta de mi habitación y un repentino frío recorrió todo mi cuerpo.

¿Por qué hacía tanto frío de repente?

Sobé mis brazos en busca de un poco de calor y divisé la ventana abierta.

Lo más probable es que Sooyoung haya entrado a tomar algo de mi armario y como siempre, en un intento de hacer que su cuerpo de adolescente calentón y lleno de hormonas se enfríe, abrió la ventana y la dejó así.

Dios, odiaba que hicieran eso.

La ventana o la puerta abierta, eran mi némesis. Tal vez nunca odie a nadie como odio a las personas que dejan mi puerta o mi ventana abierta. ¿Es que acaso no se dan cuenta que estamos en pleno invierno y yo soy una persona muy friolenta?

Agh, ya me puse de mal humor.

Tiré de mi bufanda. Como usualmente, no quería salir de mi cuello, lo cual me llevó a un pequeño momento de desesperación en el que pensé que iba a dejar esa bufanda en mi cuello para siempre porque no salía o iba a ahorcarme con ella en un intento desesperado de quitármela. Claro que, segundos después de sacar todas esas conjeturas, la bufanda se desenrosco de mi cuello fácilmente.

Me quité la campera y fui a tomar mi pijama rosa del armario mientras maldecía a Sooyoung por dejar que el frío se estacionara en toda mi habitación. Me saqué el uniforme de camarera y lo tiré en la pila de ropa para lavar. Rápidamente me puse el pijama.

Me daba vergüenza que Choi Siwon me viera con estas pintas, pero mierda que me importaba muy poco. Era Siwon. Prácticamente el novio oficial de Sooyoung, casi mi cuñado, por problemas de genética mí no-hermano, y sabía que él no iba a sacarme una foto y no iba a mostrársela a nadie, así que me importaba muy, muy, muy, muy poco que Siwon me viera así. En serio.

- Linda. - Salté en mi lugar al escuchar la voz de Taeyeon detrás de mí.

Sí, era ella. Ya podía reconocerla donde sea.

- ¿Qué diablos haces aquí? - Me di la vuelta encarándola mientras una mano iba a mi pecho instintivamente, que subía y bajaba demasiado rápido.

- Tú me dijiste 'hablamos más tarde' así que supuse, que 'más tarde' significaba a las... - miró su reloj - 7:42 pm. En tu habitación. ¿Acaso hice mal?

¿Por qué estaba sonriendo? ESTO ERA UNA LOCURA.

De repente, recordé que la puerta y la ventana seguían cerradas y... ¿Ella cuando había entrado?

- ¿Cuánto tiempo llevas aquí? - Ella sonrió y se encogió de hombros.

Maldición.

- El suficiente como para decir que eres MUY linda. - Mis mejillas se calentaron y era lo más estúpido del mundo, pero me había ruborizado como una estúpida niña de cinco años.

Alguien por favor, cálmeme inmediatamente.

- ¿Cómo entraste? - Lo mejor era cambiar de tema, ya que tomando en cuenta la manera de ser de Taeyeon (La cual seguía siendo una completa sorpresa para mí) ella podía seguir con el tema por lo menos más de una hora o tal vez terminar enojada conmigo por ponerme un pijama en mi habitación.

Sí, podía pasar.

- Por la ventana. Creo que deberías comenzar a cerrarla con candado o algo así, un asesino podría entrar. - Ella se tiró en mi cama mientras hablaba y tomo mi peluche de Hello Kitty.

- Pues en este momento acaba de entrar una, además yo siempre cierro la ventana, tú la fuerzas. - Ella juntó las cejas, mientras me acercaba.

- Yo no soy una asesina - Lo había dicho demasiado seria, y me había dado cuenta que no le había gustado para nada.

Está bien, había metido la pata.

- Como digas, ahora te tienes que ir. Inmediatamente. - Tiré de su brazo intentando que ella se levantara de mi cama porque mierda, Siwon estaba aquí. ¿Acaso él no tenía un súper poder de perro que lo olía todo? Taeyeon se tenía que ir ya. - Tienes que sacarte la maldita costumbre de entrar a mi habitación por la ventana, ¿qué pasaría si algún día estoy desnuda? - Bueno, tal vez eso no tendría que haberlo dicho.

- Tal vez, y sólo por casualidad, yo también entraría desnuda a tu habitación... - Genial, ahora tenía la imagen de Taeyeon desnuda en mi cabeza.

Linda y dulce imagen de Taeyeon desnuda.

- ¿Estás pensando en mí desnuda, verdad?

¿Qué? ¿¡Qué!? ¿¡QUÉ!?

- No. Por supuesto que no. ¿Qué estás diciendo? ¿Por qué estaría pensando en ti? No. Absolutamente no. Basta. Vete. - Ella se levantó mientras reía y tapé su boca instantáneamente. Sentí sus afilados dientes morder mi mano y la quite de su rostro al instante. Maldije por lo bajo, intentando que no se escuchara.

- Me mordiste. - Le dije en cuanto dejé mi pequeño teatro y junté las cejas. Ella caminó hacia mí sonriendo.

- ¿Qué te puedo decir? Soy una vampiro. Me encanta morder. - ¿Esto tenía un doble sentido? ¿Algo ertido tal vez? Bueno, que alguien me lo explique, porque su sonrisa está dándome demasiado en qué pensar.

- Te tienes que ir. AHORA. - Soné menos firme de lo que quería, pero de todas maneras, mi punto estaba dicho.- Siwon está aquí. ¿Y sabes lo que pasará si Sooyoung se entera? Mi cabeza va a estallar si escucho otro grito que salga de su boca... - Un grito se escuchó fuera de mi habitación y supuse que había sido Soo, porque bueno, Siwon no tenía pinta de gritar como mujer.

- ¡Lo siento mucho Sooyoung! Yo no quis... - era la voz de Siwon.

- Está bien, no importa. De todas maneras tenía que cambiarme y poner a lavar el uniforme, está... - Y luego las voces se volvían menos claras, pero podía adivinar que Taeyeon estaba escuchando todo.

- ¿Entiendes? Te tienes que ir. – La empuje un poco, pero ella no se movió de su lugar. Tenía su cabeza atenta en lo que estaba pasando afuera. Escuché unos pasos por el pasillo y me puse más nerviosa mientras la empujaba más fuerte. - Vete. - Sus ojos volaron directamente a los míos llenos de un brillo malicioso que no me gustaba para nada. Tomó mis brazos haciendo que dejase de empujarla.

- ¿Tiffany confías en mí?

Sí.

- No.

- Haces bien. – Ella me tiró contra el colchón y se recostó encima mío haciendo que nuestros rostros quedarán a unos pocos centímetros. Apoyó su peso en sus manos y sus piernas que me encarcelaban en contra de la cama, mis manos fueron a parar a sus hombros, y no sabía si era para evitar que ella se acercara o para sentir su suave piel alrededor de mis dedos. Los elefantes volvían a mi estómago y sentía como mi aliento caliente caía en su dulce rostro que me miraba con una sonrisa plantada en su cara que me encantaba, aunque odiara admitirlo, pero era la verdad.

- ¿¡Podrían explicarme que mierda están haciendo ustedes dos!? - Sentí el portazo de la puerta y luego de unos segundos en los que seguí mirando la sonrisa de autosuficiencia de Taeyeon, me di cuenta que alguien había entrado. Y ese 'alguien' había sido Siwon. Y luego me di más cuenta de que él estaba enojado y yo y ella no estábamos en una posición fácil de explicar.

- ¿No te enseñaron a no interrumpir los momentos de las personas?-  La empujé mientras intentaba levantarme pero me fue imposible.

- Te juro que no es nada de lo que te estás imaginando. - Volví a intentar sacármela de encima o hasta tirarla de la cama pero no era posible. Y pasar por  entre sus piernas... No era recomendable. - Sooyoung me pregunto si quería pizza y le dije que sí, y me vine a cambiar y de la nada ella apareció aquí y... - me interrumpió.

- ¿Tú estabas desnuda y esa lesbiana loca apareció de repente? - parecía enojado pero petrificado al mismo tiempo por la situación.

- Si soy Lesbiana o no, no te incumbe. - Dijo Taeyeon sonriendo- Además que pasaría si te digo que la vi como Dios la trajo al mundo-

 ¿Qué acabas de decir Taeyeon?.

- Claro que no, es mentira. Yo estaba en pijama. Pi-ja-ma. Y ella se coló por la ventana y luego escuchamos un grito y no sé cómo terminamos así, pero ya me cansé. Sal de encima de mí. - Taeyeon suspiro mientras le daba un empujón sacándola de mi espacio personal. Me levanté de la cama y miré a Siwon.

- Sentí tu asqueroso olor y tuve que tirarle la bebida encima a Sooyoung para ver que no te estuvieras “comiendo” a la hermana de mi novia... - Ella sonrió.

- Me la comería con mucho gusto. - Siwon juntó sus cejas.

- Eres una puerca desagradable lesbi... - interrumpí.

- Estoy aquí. Basta. Ella sólo lo hace para molestarte. - Taeyeon rio.

- Fany, todo lo que hago, lo hago porque yo quiero hacerlo. Molestar al idiota culo de perro, es un extra que nunca estoy dispuesta a perder. - Luego de esas estúpidas palabras comenzaron una serie de gritos en susurros que me estaban poniendo de los nervios. Tomé la mochila que tenía la ropa que me había puesto hoy del colegio y caminé hasta la puerta.

- Cuando terminen de resolver sus estúpidos problemas de criaturas anormales y subnormales, llámenme. Mientras tanto, no me molesten... Y yo les diría que se apuren, porque Sooyoung, no va a tardar mucho. - Salí de la habitación sin dejar que se repartieran la culpa. Me cambié en el baño lo más rápido que alguna vez lo había hecho y tomé mis llaves para salir del departamento.

 

 

(...)

 

Estaba enojada.

Muy enojada.

Quería que un camión apareciera de la nada y se llevara por encima a Taeyeon y a Siwon y luego los tirara diez metros sobre el suelo, y si eso no era suficiente que, tal vez, les pasara unas quinientas veces por encima, si había tiempo.

Había caminado hasta el bar de Yunho porque claramente no sabía a qué otro lugar ir. Definitivamente iba a necesitar que alguien me diera un tour para presentarme el lugar en el que vivía, porque habían pasado cuatro meses y no sabía en dónde estaba mi trasero.

Abrí la puerta y me senté en la barra. Esto era insoportable. Todo este lío entre los lobos (de los cuales no sabía nada) y los vampiros (de los cuales tampoco sabía mucho) me estaba volviendo loca y sabía que iba a terminar por revolear algo en el aire, y por supuesto, luego de su trayecto, caería en mi frente. Porque soy conocida mundialmente por la chica con más mala suerte en todo el universo o tal vez, galaxia. Toda esa mierda de los mundos... Nunca lo había entendido.

Sólo quería que Yunho se acercara a mí y me diera alguno de sus increíbles consejos o palabras que me hicieran sentir mejor así podría volver a casa y tendría la tolerancia de soportar a cualquiera que se acercara a mí a más de un metro.

- ¿Qué te sirvo? - Subí mi vista a una apuesta chica que me miraba expectante.

- Yo... Es que... ¿Dónde está Yunho? - bien, parecía una retrasada. Pero basta, ya estaba cansada de toda la gente de este pueblo.

Pero ella... Parecía diferente. Como si la conociera de algún otro lugar. Como si de verdad supiera quién era. Me resultaba familiar. Su cabello oscuro, sus ojos de un color poco definido (o al menos, yo no podía definirlo) y su cuerpo malditamente y. Su  aspecto fuerte pero femenino a la vez, los rasgos de su cara eran hermosos lo cual la convertían en una modelo de revista y su graciosa y tierna nariz me daban ganas de morderla.

Sí, canibalismo.

Vi sus labios moviéndose y deduje que ella estaba hablando. Me ordené a mí misma que debía escucharla y no parecer tan tarada como en realidad era.

- Perdón, ¿qué? - Dije dejando que mis ojos se perdieran en la sonrisa que acababa de crear su cara. Dejó el trapo y el vaso que estaba secando en la mesa y me miró, fijamente.

¿Cafés? ¿Negros? ¿Miel? No lo sé, son lindos y punto.

- bill  tuvo un problema y tuvo que irse, lo estoy cubriendo hasta que el bar cierre, ¿qué te sirvo? - Asentí como estúpida.

- ¿Agua? No. Espera... Licuado de frutilla. Sí, de frutilla. Me encanta. - Ella asintió y se fue de la barra para preparar lo que había pedido.

Saqué mi mochila de mis hombros y suspiré cansada.

Que maldito feo día.

 

(...)

 

Casi toda la gente se había ido del bar. Sólo quedábamos yo, un hombre que se había dormido en una de las mesas, una pareja que no paraba de succionarse la cara y toquetearse y una vieja que estaba gritando y llorando mientras bebía de su botella de cerveza.

Lo siento anciana, pero si sigues gritando así, él no sólo va a hacerte cornuda con la vecina, con su secretaria y con tu mejor amiga también. Ya cálmate.

Las meseras estaban limpiando y subiendo las sillas a las mesas, algunas luces estaban apagadas y yo seguía pensando, sentada como una estúpida. El licuado de frutillas ya se había ido a parar a mi estómago, pero jugar con la pajilla que estaba dentro del vaso era lo más entretenido que encontraba en este momento.

Suspiré una vez más mientras decidía que ya era demasiado tarde, sin contar que prácticamente me habían echado diez veces del lugar. Tomé mi mochila y la colgué de mis hombros. Caminé hasta la puerta y salí.

Wow, no recordaba que todo estuviera tan oscuro.

Sólo había un par de luces de faroles que alumbraban mi camino. Y si no hubiera investigado antes de venir a este pueblo que aquí sólo pasaba un robo al año, jamás hubiera salido de noche.

- Hey tú... - me giré en mis pies y divisé en la oscuridad a la chica que me había atendido en la barra. No sabía por qué, pero escalofríos habían recorrido todo mi cuerpo. - ¿Vas a irte sola? - Asentí con la cabeza, ella acomodo su cabello nerviosa. - Mira, es muy tarde y no creo que sea seguro que...

- Estoy bien, no va a sucederme nada. - Intenté sonreír para tranquilizarla.

- Si quieres puedo llevarte. No tengo problema. - Negué con la cabeza y ella juntó las cejas. - En serio. No tengo problema. - Parecía que estaba perdiendo su paciencia... No lo sé.

- Ni siquiera sé tu nombre.

- hyuna, tú eres Tiffany.

¿Porque ella sabía? Maldita sea.

- Está en tu mochila. - La señaló y miré hacia allí, confirmando que ella tenía razón.

- De todas maneras, estoy bien, en serio. Vivo aquí, cerca. - Mentí un poco. Tal vez no tan cerca. Ella subió su gloriosa cabeza y miró detrás de mí. Yo hice lo mismo con mis cejas juntas preguntándome quién podría estar allí.

No había nadie. Volví mi vista hacia ella otra vez y para cuando me di cuenta, ella había entrado al auto y se había ido como alma que llevaba al viento.

Que chica más rara...

Un sonido de la calle me desconcertó e hizo que me voltee a ver qué era lo que sucedía.

Un auto, o mejor dicho, un Mercedes Benz, gigante y completamente negro estaba parado frente a mí. Sentí terror por unos treinta segundos en los que pensé que iban a secuestrarme, hasta que la ventanilla del lado del conductor se bajó y vi perfectamente la cara de Taeyeon alumbrada por las luces de la calle y las del interior del auto.

Su ceño estaba fruncido, y la forma en la que ella apretaba el volante con su mano me indicaba que estaba MUY enojada, y no sabía por qué.

- Sube. - Su voz me indignó un poco, porque obviamente no era un perro al que le podían dar instrucciones y yo tendría que obedecerlas. Generalmente, hubiese reprochado algo, le hubiese gritado como lo hago con Soo o tal vez hubiese sacado mi zapatilla y se la hubiese revoleado por la cabeza. Pero no. Simplemente pensé que no quería verla más enojada, caminé hasta el auto, abrí la puerta del copiloto y entré. Luego de segundos de abrir la puerta, ella arrancó a toda velocidad sin darme ni siquiera tiempo para saludarla.

Y con las ganas que tenía de poner mis labios sobre su piel.

 

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Comments

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dafnytae
#1
Chapter 57: Como vas con la segunda temporada? (>_<)
2597611 #2
Chapter 57: Yeahhh!! Porfin
Itaenylove
#3
Chapter 57: siiiiiii
por fin
Skyth06
#4
Chapter 57: Antes q nada feliz año, mis mejores deseos, y púes sii segunda temporada :3!!
mv007842 #5
Chapter 57: Hola que este año sea de mucho excito y que dios te bendiga y que bueno que ya vas a actualizar la segunda temporada de esta historia actualiza chau
rafayola
#6
Chapter 57: HOLAAA y un MUY felíz año te deseo lo mejor :D y pues claro a apoyarlas, en cuanto a la segunda temporada espero con ansias <3
Taeny16 #7
Chapter 56: No quería leer este capítulo :( pero lo leí porque soy una maldita masoquista
rafayola
#8
Chapter 56: No puedo con el último capítulo, me destrozó muchas gracias por la adaptación espero con ansias la segunda temporada
Taeny16 #9
Chapter 53: Este Fic es genial, me encanta, lo estaba leyendo antes pero la autora no lo actualizó más. Me encanta❤ Pero tengo miedo de leer el final :(