Así que Fany  era realmente lindo y estaba fastidiada por eso. Porque si él hubiese sido feo, podría haberle recriminado a soo  lo que sea, pero claro, no podía. Miré a siwon que parecía igual de fastidiado que yo y cuando sintió mi mirada formuló un 'lo siento' con sus labios. Asentí y desvié mi mirada a soo  que hablaba animadamente con fany.

Estúpida soo.

Estaba comenzando a creer que en vez de una amiga, ella era una enemiga. Bien, probablemente estaba exagerando. Pero no importaba. Yo no quería conocer chicos. Yo ya había conocido chicos. Yo ya había conocido a un chico. Y no salía de mi cabeza ni por un segundo, y más cuando andaba desaparecido.

Al parecer, soo  sintió mi mirada fulminante, porque desvió sus ojos de Fany  hacia mí mientras reía. Negué con mi cabeza mostrándole cuánto desaprobaba lo que había hecho y su sonrisa se borró.

 - ¿Y por qué vinieron a jeonju? - Sabía que hasta nichkhun había notado el momento tenso y había preguntado eso para salvar el culo de todo el restaurante porque lo más probable era que con la furia que tenía hacia soo  por hacer esto, la agarrara por los pelos en cualquier instante.

- Es una larga historia... Pero principalmente transfirieron a nuestros padres a una empresa que quedaba más cerca de aquí que de seul. Así qué aquí estamos... -

Soo  sonrió con tristeza y sabía que no le gustaba mentir acerca de nuestra historia enfrente de siwon, que a pesar de todo estaba siendo sincero con nosotras. A mí tampoco me gustaba, pero no había otra opción.

- ¿Y qué tal la escuela fany? - Gire mi cabeza hacia nik. Estaba mirándome muyvfijamente y tenía esa típica sonrisa que estaba acostumbrada a ver en siwon, pero no en él.

- Bien, supongo. - Sabía que estaba siendo una total perra y que tenía que ser cortés por obligación, porque él se estaba portando malditamente bien conmigo. Pero no podía evitar sentirme enojada y frustrada por todo lo que soo  había hecho.

Tal vez exageraba, pero ella sabía cuánto odiaba que me arregle citas. Y sabía que no estaba interesada en nadie. Y sabía también, que cada vez que hacia esto me hacía sentir como una solterona estúpida y necesitada, y estaba segura que el chi con el que tuviera la cita pensaba que estaba tan necesitada que creía que podía acostarse conmigo, así de fácil.

Está bien, nik  no tenía cara de 'Don Juan' pero que se yo.

- Creo que necesito ir al baño. fany, ¿me acompañas? - Sus dientes estaban apretados y su mirada era muy intencionada, sabía lo que quería decir.

"Ve al baño. AHORA

-No gracias, así estoy bien. - sonreí lo más falso que pude y ella emitió una pequeña risita.

- fany, te necesito en el baño, es una emergencia.

- No creo que sea nada que no puedas resolver sola soo. - Ella me pateó por debajo de la mesa y emití un pequeño grito ahogado. Noté que nik ocultaba su risa y siwon fulminaba con la mirada a soo.

- Baño. Ahora. - Por fin dijo las palabras que estaban en su mente y se paró sin decir más nada, yo hice lo mismo. Tenía ganas de gritarle un par de cosas que no eran propias para que escuche el restaurante entero.

Camine detrás de ella pero a unos cuantos pasos de distancia.

- ¿Puedes decirme cuál es tu maldito problema? - Cerré la puerta del baño y me giré a soo  que estaba muy enojada y con el ceño fruncido.

- ¿Lo preguntas en serio? - Fruncí más mi ceño y ella se cruzó de brazos indignada.

¿En serio soo? ¿Harás esto ahora?

- Sí, es en serio. - Abrí mis ojos con incredulidad. No puedo creerlo. - Bien, sí, te arme una cita a ciegas. ¿Y qué? El chico es lindo y muy simpático y para colmo, es hermano de siwon. Hemos fantaseado desde pequeñas con esto fany, no lo arruines.

- ¿Arruinarlo? ¿Yo arruinarlo? - Ella asintió con la cabeza. - La única que está arruinando todo aquí, eres tú. Sabes que odio que me arregles citas. Sabes que yo puedo encontrarme a mis propios chicos. Sabes que ahora parezco una chiquilla idiota y necesitada soo. Sí, tal vez nik es simpático y lindo, pero ahora acabo de perder todas las ganas de conocerlo por tu culpa. No necesito a un chico soo. Estoy bien así. - Tomé una gran respiración y la miré muy fijamente. Ella desvió sus ojos hacia el suelo.

- ¿Esto es por ese chica? - Su voz era un susurro, pero pude escucharla.

- ¿De qué estás hablando?

- ¿Esto es por ese chica? ¿kim?

Bien. Esto no tenía nada que ver con taeyeon. Bueno, tal vez un poco. Pero no entendía por qué lo traía a colación en este momento.

- ¿De qué diablos estás hablando? - Fruncí mis cejas y ella levantó sus ojos hacia mi rostro.

- Vamos fany, no soy idiota. Sé que ese chico te ha estado volviendo loca. Esa taeyeon... No dejas de hablar de élla, y hasta te has hecho amiga de sus hermanas.

Dios, ¿Por qué tenía que sacar este tema que no tenía nada que ver en este instante?

- soo, esto no tiene nada que ver con taeyeon. Tiene que ver con que tú intentas conseguirme un chico cuando yo no necesito uno. Tiene que ver con que no me consultaras al traerme a una cita. Tiene que ver con que ahora, en este instante, siwon y nik  están pasando un muy mal momento, porque tú sólo pensaste en ti y en lo lindo que sería que yo saliera con el hermano de tu novio...

- No lo hice por mí fany, lo hice por ti. - Cerré mi boca al instante, lo que vendría iba a estar bueno, lo presentía. - Estas tan enfocada en ese chico y todo lo que hace que ni siquiera te das cuenta que estoy haciendo esto por ti. Quiero que estés bien en esta nueva vida que estamos comenzando a transitar las dos, y ese chico sólo va a traerte problemas. Escucha lo que estoy diciendo fany, escúchame una vez.

- ¿Te das cuenta que todo lo que estás diciendo no tiene sentido? - Ya no quería discutir, no tenía sentido discutir con ella poniendo esos argumentos idiotas. Conocí a taeyeon  hace dos meses, y sólo le hable tres. No lo conocía y ella tampoco. ¿Cómo estaba tan segura que iría mal? ¿Y qué sabía ella sobre lo que sentía hacia taeyeon? -

¿Sabes qué? Olvídalo. Salgamos. Nos están esperando. - Ella asintió. – Sólo promete que no lo harás nunca más soo. Prométemelo.

- Lo prometo. -Susurró. Salimos del baño y caminamos de nuevo hacia nuestra mesa. Apenas nos vieron, siwon y nik se callaron.

- ¿De qué hablaban? – soo  sonrió forzadamente y yo me senté en mi silla.

- De nada importante. - siwon tomó su tenedor y metió un pedazo de la comida en su boca.

Guau, estaba tan frustrada que ni siquiera había notado que mi pasta había llegado. ¿Qué te sucede fany? ¡ES COMIDA!

Tomé un poco de lo que había en mi plato y me deleité ante el sabor. Dios, que bueno estaba esto.

- Esto esta genial. - Se escapó de mis labios junto con un suspiro de placer.

Estas a punto de tener un o.

- No tanto como esto. - Giré mi cabeza hacia nik. Estaba comiendo una cosa rara que tenía muchas otras cosas raras encima. Puse cara de asco. Nadie se mete con mi pasta.

- No te creo. - De su garganta salió una carcajada ante mi cara de asco.

- Compruébalo tú misma. - Tomó un poco de lo que sea que estaba en su plato con su tenedor y lo tendió hacia mis labios.

Dios esto tenía un olor espantoso.

- Vamos, prometo que te gustara. - Cerré mis ojos y abrí la boca.

Tú puedes fany, tú puedes.

Sentí esa cosa pegajosa y al mismo tiempo crujiente en mi boca y mastiqué sólo un poco. nik rió ante mi cara de asco.

Bueno, no estaba tan malo como pensaba. Tenía un gusto salado y dulce a la vez...

¿Quién lo diría?

Lo tragué y abrí los ojos. Todos en la mesa estaban mirándome.

- ¿Qué tal? – nik tenía esa hermosa sonrisa en su rostro. Sus ojos brillaban un poco y un par de hoyuelos se formaron en sus mejillas.

Oh Dios.

- Está muy bueno... - Sabía que la única que entendía el doble sentido era yo, pero no pude evitar sentir el calor en mis mejillas. - Pero me quedo con la pasta.

Siempre me quedaba con la pasta.