-23.

Just my type (Jiminjeong + Purinz)

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Minjeong caminaba por los pasillos de la escuela con la cabeza en otro lugar. No podía dejar de pensar en la carta, en las coincidencias y en las consecuencias. Sabía que era un pueblo pequeño y que por alguna u otra razón todos se conocían, pero jamás pensó que su mamá había estado relacionada directamente no solo con la tía de Karina, sino que toda su familia tenía una historia con la de ella.

Vio a Karina al final del pasillo y su cuerpo se dio la media vuelta tan rápidamente que el gesto no pasó desapercibido para la porrista.

Esa mañana había salido más tarde a propósito y le había escrito para que no espere por ella porque se había quedado dormida. El tiempo extra en realidad lo había ocupado para volver a leer la carta de Jessica.

—Hola tú. —Al darse vuelta, se encontró con Yunjin, quien iba caminando en dirección a Karina. —Siento que no te veo hace mil años. —Su amiga envolvió su brazo al de ella y la arrastró a caminar por el pasillo. Por suerte Karina ya no estaba a la vista.

Yunjin comenzó a desahogarse casi inmediatamente con todo lo que estaba pasando en su casa. Yuri había venido de visita para la famosa cena con Jay. El chico había causado una muy buena impresión en las dos y cómo no, explicaba Yunjin, si Jay era probablemente el joven más educado y gentil de toda la escuela.

El asunto había provocado en ella el efecto contrario al buscado. Yunjin estaba ahogada en culpa porque sus mamás estaban siendo convencidas de que ella estaba feliz saliendo con un chico que no era más que una pantalla para ayudar a su amigo.

—Y como si eso fuera poco. —Yunjin se paró en seco, obligando a Minjeong a hacer lo mismo. —Mamá iba a estar acá solo por el fin de semana ¡Pero todavía no se va!

—¿Yuri sigue en Naevis? —La sorpresa fue compartida por ambas. Las dos sabían muy bien que Yuri estaba prácticamente casada a su trabajo y que por ningún motivo se perdería un día en la oficina.

—¡Sí! —Yunjin parecía casi alterada de compartir aquella información. —Y no entiendo nada, porque te juro que no me quiero ilusionar, sería tonto hacerlo porque yo misma las escuché discutir por tantos meses ¿Pero por qué otro motivo mamá se quedaría acá? Si fuera por firmar el divorcio lo podrían hacer a distancia.

Minjeong lo entendió de inmediato, Yunjin no se quería ilusionar, pero ya lo había hecho. No podía criticarla porque sabía que si estuviera en su posición ella estaría incluso más ilusionada.

—¿Quieres que intente averiguar algo? —Probablemente alguna de sus mamás estaría al tanto de lo que estaba ocurriendo entre Yoona y Yuri

—Por favor.

Minjeong la abrazó de inmediato para asegurarle de esa forma que todo estaría bien y que la tenía ahí para cualquier cosa que llegue a necesitar. No pudo evitar pensar nuevamente en la carta y en todo lo que estaba sucediendo ¿Qué le diría Yunjin? ¿La aliviarían sus consejos? Prefirió creer que no, porque hablarlo podría significar una traición muy grande a Karina.

Entraron a la sala de clases y Minjeong se sentó al lado de NingNing, evitando nuevamente hacer contacto visual con Karina, aunque no fue nada de fácil.

Por suerte la clase fue lo suficientemente interesante como para poder mantenerla ocupada por varios minutos. Todo hasta que sintió que su compañera de asiento se acercó para poder hablarle.

—Ayer conseguí la confirmación. —Le susurró, como si todo fuese un gran secreto, pero que Minjeong no comprendió del todo. —Del viaje.

Minjeong finalmente comprendió, el viaje escolar, el que Yizhuo llevaba planificando hace un largo tiempo para lograr conseguir tiempo a solas con la mejor amiga de Jimin. La idea seguía siendo una locura y no entendía cómo su amiga podía estar tan obsesionada con la japonesa como para seguir intentando estar con ella pese a sus constantes rechazos.

—¿Confirmación de qué?

Las dos se alejaron un poco cuando el profesor las miró con regaño y después de algunos minutos, Yizhuo se volvió a acercar.

—Aeri y yo estaremos en la misma cabaña.

Yoon había logrado cambiar las asignaciones, pero ahora Yizhuo había visto los lugares finales, contenta de saber que definitivamente pasaría esos días en la misma cabaña que Giselle.

—Tú estarás con Yunjin, Jimin y Chaewon.

—¿Cómo?

Yizhuo volvió a repetir el nombre de sus compañeras de cabaña, creyendo creer que si lo volvía a decir entonces existiría algún error.

No había ningún error, en menos de una semana iba a estar compartiendo una pequeña cabaña junto a la chica con la que tenía una relación oculta y dos chicas que no se dirigían la palabra porque las cosas entre ellas habían salido terriblemente mal, no podía ser peor.

—¿No se puede volver a cambiar eso?

No perdía nada de preguntar, ella misma estaba dispuesta a escabullirse en la casa de Aeri para cambiar los nombres en los papeles.

—No, los profesores a cargo del viaje ya están al tanto de todo, es información oficial.

Ya estaba, lo único que le quedaba ahora era prepararse mentalmente para hacer de esos días algo normal y no estresarse por nada (o al menos intentarlo) Seguramente Yunjin igual lo iba a encontrar un poco molesto o incómodo porque sabía que desde su última conversación, ella y Chaewon no habían vuelto a cruzar palabra.

Cuando la clase terminó, Minjeong todavía parecía estar perdida en sus pensamientos e incluso en el entrenamiento no había dado lo máximo. El entrenador Park la apartó en un momento para preguntarle qué estaba pasando, recién ahí fue que sé dio cuenta de lo molesta que estaba con toda la situación.

—No sé qué es lo que tienes en tu cabeza, Kim. —Le regañó el entrenador, quien generalmente era un hombre de pocas palabras. —Pero aquí, en el campo de juego, eres tú y tus compañeras. Ocupa este momento para dejar de pensar en todo lo demás y la alegría que sientas te recordará que tal vez los problemas no son tan grandes como creíamos. Si en un partido falla una, todas salen perjudicadas, Kim.

¿Eran sus problemas tan grandes? En realidad no, estaba segura de que todo tenía solución, pero el problema es que las cosas no dependían exclusivamente de ella. Minjeong siempre ha estado dispuesta a poner de su parte. Era Karina la que tenía que despojarse de todos sus prejuicios, era ella la que tenía que salir del closet con Yunjin, era ella la que tenía que terminar con Jeno y también la que podía aclarar todo lo que pasó entre las dos familias muchos años atrás.

Era la falta de control lo que la tenía tan ahogada y las palabras de su entrenador le hacían eco nuevamente. Si fallaba una, fallaba toda la cadena. Detestaba tener sus propios sentimientos dependiendo de otra persona. Y lo peor, es que amaba a esa persona y no podía odiarla.

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La idea de llegar a su casa y encontrar a sus mamás compartiendo era algo muy lejano desde que se habían mudado. Es por eso que cuando entró y las encontró conversando sentadas muy cercanas en el sofá y compartiendo una taza de café no pudo ocultar su sorpresa.

—Jin ¿Quieres compartir un café con nosotras? —Yoona se veía tan relajada y preguntó con tanta naturalidad que a Yunjin le costó responder sin tartamudear un poco.

Aceptó el café y se sentó en un sofá individual, quedándose frente a Yuri mientras Yoona le preparaba su café.

—¿No tienes que trabajar?

Yuri intentó no sentirse ofendida por la pregunta y quiso creer que su hija en realidad estaba preocupada.

—Hoy en día se pueden hacer muchas cosas a distancia. —Es decir, Yuri seguía trabajando. —Y además, estoy intentando delegar.

Las dos soltaron risas similares después de esa frase, Yunjin se enterneció también porque no ponía en duda que su mamá lo estaba intentando lo único que no lograba comprender del todo era el motivo por el cual había decidido hacerlo. Quizá, si hubiera intentado “delegar” hace un tiempo atrás, muchas cosas se habrían evitado.

—¿Por qué estás aquí?

Yuri sabía la profundidad que tenía la pregunta. No era para responder un simple “estoy aquí, contigo, tomándome un café” porque lo que de verdad quería saber su hija era si estaba acompañándolas para una visita o si estaba ahí para que las cosas tomen un rumbo distinto al que había tenido los últimos meses.

—Estoy aquí porque quiero estar con ustedes. —La respuesta no solo incluía el querer acompañar a su hija y ser la madre que se merecía, sino también incluía a su esposa, la mujer a la que juró amar por el resto de su vida y que había perdido por su propia negligencia. —No te estoy prometiendo nada y quiero que sepas que esto no pasa por tus manos, pero te prometo que nunca más les voy a hacer falta.

Esto no pasa por tus manos, se repitió en su cabeza. Yunjin quería confiar, porque realmente lo que más deseaba era sentir un poco de lo que sentía antes, que su familia vuelva a ser lo que era antes, pese a saber que lo que se había quebrado había sido muy grande y no sería fácil repararlo.

—Sé que no pasa por mí, para empezar yo jamás interferí en lo que pasaba entre ustedes. —Yunjin bajó la voz porque no quería que Yoona las escuche. —Pero no te olvides de que todo lo que pasó antes y lo que pueda pasar ahora me afecta directamente.

Su intención no era cargar a su mamá con malas vibras, pero no podía evitar tener sus aprensiones porque los últimos meses ya habían sido muy difíciles y no estaba segura de poder pasar por algo similar y soportarlo.

—Y tampoco te aproveches de la bondad de mamá.

Justo a tiempo llegó Yoona, quien alcanzó a escuchar eso y luego de entregar el café a su hija, las observó para saber qué era lo que estaba pasando entre ellas, sobre todo porque podía notar un poco de tensión en el ambiente. Ninguna se atrevía a hablar y Yoona dirigió su mirada específicamente a Yuri.

—Estábamos conversando, no es nada importante. —La respuesta de su mamá disgustó a Yunjin, quien rápidamente se levantó del sofá, agradeció el café, pero se excusó para tomarlo en su habitación.

Yoona la siguió con la mirada, sabiendo que la situación ya estaba afectando a Yunjin. Sabía que debía poner todo en una balanza y finalmente decidir si valía o no la pena intentar darle una nueva oportunidad a su esposa.

La porrista llegó a su habitación y se sentó sobre su cama, bebiendo su café para intentar centrarse en otra cosa. No quería ser ella la boicoteadora de una futura reconciliación entre sus mamás, pero sin desearlo y después de todo lo ocurrido, había sido imposible para ella no tomar un lado. Ella y Yoona habían pasado muchas cosas juntas, la mayoría de ellas tristes y quien había provocado eso era Yuri.

Yoona siempre le dijo que nada de lo que ocurría era su culpa. Los matrimonios se desgastan, las parejas se distancian y a veces es necesario separarse un tiempo, son demasiadas las cosas que pueden afectar a una pareja, pero lo importante para Yoona siempre fue la seguridad de su hija.

Mucho se demoró en comprender todo lo que le afectaba escuchar los gritos en la noche, las cenas en silencio y las miradas de enojo que se dirigieron frente a una muy joven Yunjin.

Tarde o no, ella había sido la que decidió sacarla de ese ambiente difícil y devolverle un hogar tranquilo.

Yunjin reconocía eso y por lo mismo estaba segura de que ella no iba a aguantar que Yuri intente volver sin realmente hacer algún cambio sincero. Las cosas podían salir muy bien o terriblemente mal.

Sonó su puerta y rodó los ojos porque no quería conversar con ninguna de las dos, pero de todas formas soltó un desganado “Está abierto” inicialmente esperaba encontrarse con Yuri o Yoona, pero frente a ella apareció Seohyun. —Tu mamá me dijo que estabas aquí. —Avanzó y cerró la puerta, sabía que se refería a Yoona porque en esos pocos días ya había notado que Yuri y Seohyun casi no se dirigían la palabra. —¿Estás bien? Noté la cosa un poco tensa allá abajo, me tuve que escapar.

Yunjin rió y bebió un poco de su café. —Está todo bien, es solo que me cuesta confiar un poco en mi mamá. —Era su dura realidad, porque por más que quisiera que las cosas vuelvan a ser como antes, sabía que podía ilusionarse y sentir la decepción nuevamente. —No quiero que me duela de nuevo, pero por sobre todo no quiero que le haga daño a mamá.

Seohyun lo entendía perfectamente. Dentro de esas noches eternas en las que se quedaba conversando con Yoona ella misma le había contado lo sobre protectoraque Yunjin era con ella y lo cercanas que se habían vuelto después de su separación.

—A veces es importante confiar un poco, ellas son adultas y podrán darse cuenta si vale o no la pena volver a esforzarse. Lamentablemente, el dolor es parte del proceso.

Yunjin hizo una mueca de no estar tan convencida y calentó sus manos alrededor de su tazón.

—Hagamos algo para animarte. —Se ofreció. —Tiffany me va a llevar a ver unas casas ¿Te gustaría ayudarme a escoger?

—¿Para qué vas a buscar una casa? ¿Ya no te quieres quedar con nosotras?

La presencia de Seohyun en la casa era algo que le ofrecía un confort indescriptible. La dentista era casi como una amiga para ella, obviamente existía una diferencia obvia en edad y en etapas de la vida, pero la mujer la escuchaba siempre y la apoyaba como nadie.

—No digas tonterías. —Le reprochó. —Me encanta estar con ustedes y han sido increíblemente amables conmigo, pero no me puedo quedar aquí por tanto tiempo, ya me quedé más de lo que tenía pensado.

Seohyun no quería agregar el hecho de que la presencia de Yuri la incomodaba, le pareció innecesario en ese momento.

—Además, el pueblo no es tan grande y estoy segura de que me irás a visitar.

—Por supuesto.

Yunjin la abrazó y Seohyun la mantuvo en sus brazos por unos segundos. —Me cambio el uniforme y te acompaño.

Unos minutos después las dos se encontraban saliendo de casa, Yunjin dio una breve explicación a sus mamás sobre lo que haría, pero no se dio el tiempo de escuchar ningún tipo de indicación o consejo.

Tiffany las estaba esperando en un barrio que Yunjin no conocía. Las casas se veían bastante nuevas y de estilo moderno.

—La construcción de las casas finalizó hace cerca de un año, pero aún hay casas disponibles porque no convenció a los residentes debido a su tamaño. —Tiffany las guio al interior de la casa, Yunjin notó como a la mamá de su amiga le cambiaba la personalidad cuando se ponía en modo corredora de propiedades. —Para una sola persona es bastante cómoda. —Tiffany continuó relatando los detalles de la construcción, materiales, cantidad de habitaciones y muchas más cosas que las impresionó por su capacidad de recordar tanto.

—La verdad es que me gusta. —Las tres se encontraban en la pequeña cocina, Seohyun se tomó su tiempo. —Es casi perfecta, pero creo que preferiría algo un poco más espacioso.

—No te dejaré ir hasta que encuentres la casa completamente perfecta.

Tiffany las llevó a una segunda casa, la cual era mucho más grande y espaciosa, no era tan moderna, pero tenía un estilo clásico que con una buena decoración podría ser perfecta.

—No me gusta la piscina. —Yunjin quiso protestar ¡¿Quién no quiere tener una piscina?! Pensó, pero luego recordó que ella no era la que viviría ahí. —No tengo tiempo de limpiarla, tampoco quiero gente que trabaje en la casa y preferiría un patio para tener un jardín.

Tiffany parecía un poco decepcionada al igual que Yunjin, creía que la casa era perfecta. El cliente siempre tiene la razón, recordó y fueron a la tercera casa.

Seohyun no se demoró mucho en aceptar que esa era la casa que quería. Al igual que la primera, tenía un estilo moderno, estaba ubicada en un buen vecindario, la cantidad de habitaciones y baños era la justa y si bien el patio no era muy grande, era del tamaño perfecto para tener un pequeño jardín.

—Me he decidido, compraré la casa. —Tiffany levantó los brazos en forma de victoria y Yunjin estaba contenta también porque la casa quedaba cerca de su casa y además también le pareció la más linda de las tres.

—En unos días arreglaré todos los papeles y podemos concretar la compra. —Tiffany continuó explicando algunos detalles del proceso y respondió todas las dudas que surgieron. Yunjin no dejó de pensar en lo genial que era Tiffany trabajando y lo buena que era.

—Vamos a la casa a cenar, yo invito para celebrar.

Seohyun y Yunjin se miraron por un segundo y sabían que iban a aceptar.

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Minjeong había cumplido su objetivo de ignorar a Karina por el resto de la jornada. Llegó a su casa y sintió un alivio al estar resguardada por la comodidad de su hogar.

Apenas entró se encontró con Tiffany, quien parecía más arreglada que lo habitual.

—¿Para dónde tan guapa?

La pregunta hizo reír a su mamá porque la pregunta de Minjeong tenía dos propósitos: halagar y sacar información. Su esposa había tenido que viajar temprano a Seúl con su suegro para realizar algunos exámenes, por lo que obviamente no estaba así de arreglada para salir con su esposa.

—Voy a salir con Seohyun, le voy a mostrar algunas casas.

—Que te vaya muy bien, ojalá vendas tu primera casa en Corea.

Tiffany besó la mejilla de su hija, sabía que Minjeong lo decía con total sinceridad. No fue fácil para ella dejar de trabajar, y aunque sea una amiga, se sentía como en los viejos tiempos.

Minjeong se quedó sola, únicamente con Jieun quien se ofreció a prepararle una merienda que ella no pudo rechazar. Se sentó a comer sola su sandwich de queso con el jugo natural, Jieun siempre estaba llenándola de comida y no se podía quejar.

La conversación con su entrenador la había dejado un poco intranquila porque no le gustaba fallar a su equipo y su propio entrenador había notado una baja en su juego, entonces el resto también podría hacerlo. Sabía que no sería fácil, pero estaba decidida a dejar su vida personal fuera de la cancha.

Tomó su teléfono y de inmediato vio todos los mensajes que tenía de Karina. Probablemente, no había sido muy sutil para ignorarla en la escuela, así que ignorarla también en los mensajes y llamadas sería la gota que derrame el vaso.

[Karina] ¿Nos vemos después de la clase de biología?

[Karina] ¿No puedes?

[Karina] ¿A qué hora termina tú entrenamiento? Podríamos volvernos juntas.

[Karina] ¿Olvidaste tu teléfono en casa?

[Karina] Jeno se ofreció a caminar conmigo ¿Puedes venir a mi casa en la noche?

[Karina] Kim Minjeong!!!!!!

Esos eran algunos de los mensajes que había recibido durante la mañana y que con mucho esfuerzo había ignorado. Intentó escribir varias veces, pero luego no se decidía a enviarlos porque quería poner alguna excusa, pero no quería mentir.

Estaba en ese momento de indecisión cuando la campaña cambió y mostró que estaba recibiendo una llamada de la porrista. Definitivamente no podía ignorarla ya, se dio unos segundos para relajarse y finalmente contestó.

—¡Kim Minjeong!

—Yoo Jimin.

Supuso que si agregaba un poco de humor las cosas no serían tan tensas.

—¿Dónde estuviste en todo el día? Te escribí un montón de mensajes y en la escuela ni me miraste.

—La escuela estuvo ajetreada. —No era mentira. —Las chicas tenían mucho que hablar, incluso Yunjin. —No era mentira. —El entrenamiento estuvo difícil. —No era mentira. —Y todavía estoy un poco triste por lo del otro día. —Tampoco era mentira.

Karina sabía a lo que se exponía con su pregunta porque era más que obvio que Minjeong la estaba ignorando, también tenía una idea de la posible respuesta y hasta ahora no se había equivocado.

—¿Podemos conversar de esto en persona? Podrías venir a mi casa.

Winter se levantó y miró por la ventana, el auto de la mamá de Karina estaba ahí y definitivamente no quería ver a la mujer.

—¿Por qué no vienes acá? Estoy sola.

—¿Estás segura?

Todo el miedo que pudiera tenerle Minjeong a Krystal era casi insignificante al terror que Karina le tenía a Tiffany.

—Sí, tenemos tiempo de sobra.

Pocos minutos después, Karina estaba en su porche delantero y Minjeong la hizo pasar. Le dijo que mejor conversen en su habitación porque de no ser así, Jieun estaría constantemente preguntándoles si necesitaban algo.

Eran pocas las veces en que Karina había estado ahí, pero incluso así era un lugar que se le hacía muy familiar. Cada esquina de esa habitación tenía la escencia de Winter y eso le otorgaba una seguridad única.

—Entonces de verdad me estabas ignorando.

Karina caminaba tranquilamente dentro de la habitación, prestando atención a los cuadros y libros que había por ahí.

—No me tuve que esforzar mucho, fue un día de locos.

—No me gustó no estar contigo.

Minjeong no respondió nada y Karina sintió amargura.

—Estoy pensando en pedirle a Jeno que nos tomemos un tiempo.

—¿Por qué?

—¿No es eso obvio?

—¿Por qué pedirle un tiempo y no terminar de una vez por todas?

Minjeong sonaba verdaderamente molesta por el todo de voz que ocupó y es que a la futbolista no le hacía sentido lo que Karina quería hacer.

Karina iba a responder, pero Minjeong todavía no había terminado.

—¿Crees que sería tan estúpida como para ir detrás de ti de inmediato? ¿Te da miedo terminar con Jeno y que al otro día yo te tome de la mano frente a todos?

—Un poco. —Karina se avergonzó de sus propias palabras y pensamientos. —Pero es que tengo miedo. —Se defendió, al ver la expresión de decepción que tenía Minjeong.

—Pensé que me conocías un poco mejor. —Las conclusiones de Karina había sido una tremenda decepción. —Todo este tiempo he aceptado verte a escondidas, he aceptado mentirle a las personas que más quiero y he hecho todo lo posible para que verte con otra persona no me mate cada vez. Y sé que no me pediste nada de eso porque fue casi como un acuerdo silencioso que demostraba todo el amor que siento por ti ¿Pero qué has hecho tú por mí? ¿Pensar en pedirle un tiempo a Jeno?

A esas alturas Karina ya tenía el rostro lleno de lágrimas. —Creo que estás siendo un poco injusta. —Jimin batalló para sacar las palabras y no ahogarse. A ti siempre te han querido tal cual eres, tus mamás siempre se han amado y para ti las cosas son normales ¿Alguna vez te has sentido rechazada por tu propia familia? ¿Sabes lo que es no gustarle a nadie? Desde el primer día en que nos conocimos me has visto como una chica falsa que inventó una imagen de la chica perfecta para poder encajar, pero ¿Te has preguntado qué fue lo que me llevó a eso? Estás obsesionada con destruir todo lo que yo he creado para protegerme, perdóname si no ha sido fácil ni rápido. Si tanto te molesta que no pueda solucionar las cosas rápidamente ¿Por qué te gusto? ¿Por qué me amas? ¿Porque soy guapa? Entonces no eres ni un poco mejor que Jeno.

—No digas eso.

Por primera vez Minjeong se daba cuenta de que tal vez estaba siendo un poco injusta con Karina, se había enfocado tanto en lo que ella quería de la relación que había dejado de lado la historia de Karina. Algo tan secreto y doloroso que ni siquiera se había atrevido a hablar con ella.

Minjeong se sentó a su lado y limpió las lágrimas de la mayor, cuidando de hacerlo con la máxima suavidad porque jamás la había visto tan vulnerable y delicada como en ese momento.

—Ojalá pudiera amarte de la forma en que mereces, de la forma en que siento que quiero amarte y que todos mis miedos desaparezcan. Todos los días me duele no poder hacerlo y termino odiándome ¿por qué no puede ser más fácil?

Jimin se abrazó a ella y su cuerpo se sentía tan delgado y liviano que obligó a Minjeong a abrazarla con más fuerza, como necesitando que se quede en su vida y que no se le escape.

—Lo vamos a solucionar. —Le susurró a su oído mientras Karina escondía su rostro en el pecho de la futbolista, negando con movimientos que ella sentía sobre su ropa. —Sí, vamos a encontrar la forma y nos tomaremos todo el tiempo que necesitemos.

—No es justo, yo quiero que seas feliz.

Minjeong tomó las mejillas de Karina y levantó su rostro para que pudieran verse directamente a los ojos. Ambas veían en la otra tristeza e ilusión, pero por sobre todo mucho amor.

—Mi felicidad es contigo. —Lo dijo con tanta seguridad que encendió un calor en el pecho de Karina que le recorrió todo el cuerpo y le alivió muchos miedos. —Hay algo entre tú y yo que no puede ser dejado de lado y yo creo que las dos lo sabemos.

Ambas sentían eso. Era tan fuerte la conexión que aunque las dificultades sean enormes, creían que tenían que seguir batallando para poder estar juntas. Si las dos estaban en la misma sintonía, entonces el resto no importaba.

Jimin estaba aterrada de no cumplir las expectativas y Minjeong no podía tolerar el perderla, ninguna de las dos sabía si lo que hacían era lo correcto, pero estaban seguras de que se necesitaban más de lo que todo lo demás pudiera significar.

El beso que vino después fue como un acuerdo en que ambas estaban dispuestas a resistir y soportar todo lo que les viniera, a conversar y entenderse mejor, a soportar todos los golpes sin importar lo fuerte que sean.

El golpe de la puerta fue lo único que las separó y así ambas veían en el rostro de Yunjin la sorpresa y decepción de verlas juntas de esa forma.

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N/A: Nos vemos hasta la próxima semana, mil disculpas TT POR CIERTO ¿VIERON LOS TEASER?

¿Les gustó el capítulo? Nuevamente gracias por todo el cariño que dejan. 

 

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Comments

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JavrritJuiget
#1
Chapter 39: Por favor, puede escribir un capítulo separado sobre cómo Tiffany logró la reciprocidad de Taeyeon 🥺🥺
Jinja_ninja #2
Chapter 39: Wait what happening.minjeing didn't shiw up? Must have a good reason.
UndefinedCharacter
#3
Chapter 39: Chapter 39: 😨😨😨
What happened?
The beginning was full of celebration of victory, of love...
Minjeong finally admitting to her mother about her feelings for Karina...
And Karina telling her mother of her plans after graduating...
Although Yunjin is going through something...
And they were supposed to talk...
😨😨😨
UndefinedCharacter
#4
Chapter 38: 😮😯😲😳
So this is Yuri and Yoona's secret they're hiding from Yunjin...
It's a good thing some of the misunderstandings were addressed and cleared...
That was a rollercoaster of emotions!
I'm glad Yunjin and Chaewon are official, and she even told her parents...
And her plan after graduating....
Minjeong and Jimin next? 🥹
Oh, were nearing the end? 🥺
JavrritJuiget
#5
Chapter 38: Fcking fabulous story ㅠㅠ
JavrritJuiget
#6
Chapter 37: Oh… amazing chapter!!!

I hope I can see more also Taeny’s story
UndefinedCharacter
#7
Chapter 37: Yuri and Yoona... 🫣😅
Yunjin did a lot of good in this chapter, despite what happened to her... Which I think is essential for a lot of realizations...
Being honest with everyone, especially her parents and profess her love for Chaewon.
And then her telling Minjeong to not settle for less and that she loves her too.
Her parents realized what she may be going through.
And then having that honest talk with Karina and vice versa...
I love their turning points.
Congratulations on your new work! ❤️
tamynl
#8
Chapter 37: Pobre Yunjin todo lo que le paso, por suerte pudo hablar con su mama. Espero que Karina pueda hablar con Minjeong talvez la ayude con todo el lio que tiene ensima.
Gracias por actualizar!
UndefinedCharacter
#9
Chapter 36: I'm liking Yunjin more... Maybe because she kinda know what she wanted, although the thing with her parents have not been sorted out(?). But her straightforwardness on telling what's on her mind, of Jimin taking the blow on the break she asked of her boyfriend, and Minjeong being distracted, affected and disappointed.
I wonder what Jimin has decided though. I think them finding Jessica is an eye opener for her, for a lot of things.
Awww... Mr. Kim.... 🥺
UndefinedCharacter
#10
Chapter 35: Yunjin's plan is so cute! 😁
I do hope the team wins!
Poor Minjeong... That's a hard thing to decide... When that something she's holding on to stay is unsure... 😢
I think Karina's conversation with Yeseo would make an impact on her, especially her nonchalance about her mom dating a woman, and other things...
The realization of Karina on what if on parallel world Taeyeon and Jessica didn't stop dating, then maybe there will be no Winter...
Awww, the sister finally reunited! 🥹
Great chapter!
Thanks for updating!😉