Capitulo 46

Compras nocturnas

Yuri estaba sentada en el suelo de su nuevo apartamento. Lo único que se había molestado en desempaquetar era su teléfono, que descansaba a unos centímetros de ella.

Ante ella estaba el guion de Summer's End, abrió por una de las secciones que estaba teniendo problema memorizando. El apartamento estaba oscuro salvo un par de velas encendidas en el suelo delante de ella. Las cajas formaban varios pilares en lo que, eventualmente, se convertiría en la sala de estar. Eso es, si Yuri decidía quedarse el apartamento tras que la película terminase de filmarse. De otra forma, probablemente no se molestaría en desempaquetar nada. Sacaría las cosas en base a su necesidad.

Durante la última hora y media, Yuri había estado intentando concentrarse en el guion, pero todo en lo que podía pensar era en Yoona. Su conversación no había durado mucho tiempo. Sooyoung había vuelto, agitando el número de Jeremy como una bandera de victoria.

Poco después, el resto del casting había llegado y Jessica los había reunido.

Yuri bizqueó ante las palabras en la página, intentando desesperadamente sacarle sentido a algo. Pero nada tenía ya sentido.

El timbre del teléfono sacó a Yuri de su estupor. "¿Hola?" saludó. Desde su desliz con Yoona, Yuri había decidido que contestar al teléfono como 'Kwon' no era una idea muy brillante. No a menos que esperase que Yoona creyera que Yuri siempre estaba al teléfono con su limpiapiscinas.

"¿Cómo está tratándote la Gran Manzana?"

Yuri sonrió al oír la voz de Siwon. Detestaba admitirlo, pero se sentía sola sin él.

"Bueno, ya me conoces, fiestas cada noche."

Siwon se rio. "Lamento interrumpir," le chinchó. "¿Me perdí algo? ¿Besaste a más chicas lindas?"

"Hubo la ocasional lesbiana perdida aquí y allá," respondió Yuri. "Pero, por la mayor parte, he logrado comportarme."

"Si sólo fuese verdad."

"¿Lo de comportarme?"

"No. Las ocasionales lesbianas perdidas," aclaró Siwon. "¿Y qué has estado realmente haciendo?"

Yuri miró el guion en el suelo. Además de intentar memorizarlo sin éxito, no había hecho mucho. "Lo usual," dijo. "Pero, um…" Incapaz de encontrar una forma suave de Introducir el tema, decidió soltarlo. "Hoy conocí a Yoona."

Hubo una leve pausa del lado de Siwon, seguido por, "¿Cómo dices?"

"Sooyoung la trajo al set," explicó Yuri. "Y después nos dejó solas mientras se fue a coquetear con el ayudante de director."

"¿Y…?"

"Hablamos de Harry Potter."

"¿Es todo? ¿Le dijiste que eres—"

"Sí, ya," Yuri interrumpió. "No puedo soltar algo así."

Siwon suspiró. "¿No crees que el Destino está intentando decirte algo?"

"Sí," concordó Yuri. "Está diciéndome que Internet es un lugar horrible para conocer mujeres."

"O a veces el lugar perfecto."

A Yuri le gustaba más su propia interpretación del Destino. La de Siwon era… complicada. "Da igual," es lo que dijo finalmente.

Siwon captó la indirecta. "Así que… ¿Harry Potter? Sé que eres un poco nueva en esto,

Yuri, pero si necesitas que te enseñe mejores frases de ligue, obedeceré contento." "En realidad, probablemente las necesite," dijo Yuri sin humor en su voz. "La directora quiere que salgamos a investigar la vida lesbiana."

Risa fue la contestación inicial. Seguida poco después por, "¿Exactamente qué tipo de investigación?"

"No la que estás pensando," contestó Yuri. Se detuvo a considerar lo que Jessica había dicho antes. "Algo sobre ponerse en su lugar."

Siwon se rio disimuladamente. "Estoy seguro que te será realmente difícil."

Yuri se encogió de hombros ante el comentario. "Sabes qué, realmente no tengo ni idea.

Estoy tan aislada del resto del mundo que no podría empezar a decirte cómo es ser lesbiana." "Claro que puedes," discutió Siwon. "Bueno, una lesbiana famosa, al menos."

"No soy una lesbiana famosa."

"Sí, lo eres. Sólo que no lo saben."

Yuri agitó la cabeza. "¿Y qué crees que debo hacer? ¿Ir a la biblioteca y leer al respecto? ¿Ir a un club o algo así? ¿Ambos?" Consideró sus propias preguntas. "Probablemente deba hacer lo de la biblioteca ya que la película transcurre en los años veinte. No creo que un bar lesbiano me ayudara con la caracterización."

"Debieras ir de todas formas."

"¿Por qué?"

"Porque lo deseas," contestó Siwon.

Yuri giró los ojos al cielo. "Como que no estaría mañana en las noticias: 'De ángel a super bollera… la completa historia de la transformación de Yuri Kwon'."

Siwon empezó a reírse histéricamente. Logró formar las palabras 'Super bollera' antes de ser consumido por la risa una vez más.

"Vale, buenas noches, Siwon," empezó Yuri. Cuando nada salvo risa le respondió, dijo, "Te llamo luego." Entonces pulsó la desconexión del teléfono.

Su atención volvió al ordenador portátil que todavía descansaba en su maletín. Había evitado su correo electrónico todo el día, pero había estado comiéndole la curiosidad. ¿Qué tendría Yoona que decir sobre conocerla? ¿Siquiera quería saberlo? ¿Siquiera escribió hoy Yoona? Se quedó mirando la bolsa de cuero negra, dividida entre no querer saber y no querer esperar otro segundo para averiguarlo. Al final, la curiosidad mató al gato.

Arrastró el objeto hasta donde estaba sentada y esperó que se iniciase. El correo que había estado temiendo y anticipando se titulaba: 'No te creerás el día que he tenido…'

"Apuesto que sí," le dijo Yuri a la pantalla del ordenador. Tras un momento, hizo doble clic.

Querida Yul,

Sooyoung me convenció para ir con ella al set de la película esta mañana. Realmente no quería ir. Por supuesto, tampoco podía negárselo. Necesito trabajar en mi asertividad. ;)

Sin embargo, fui. Bla, bla, aburrido viaje en tren. Llegamos allí y ¿adivinas quién estaba sentada en una esquina leyendo Harry Potter? ¡Yuri Kwon! De algún modo, a Sooyoung se le metió en la cabeza que hablar con Yuri Kwon era buena idea. No pude convencerla de que no. Así que me arrastró. ¡Entonces! Tuvo el valor de dejarme sola. Podría matarla.

Así que no tenía opción salvo hablar con la única actriz que he detestado desde el primer día. ¿Y sabes qué es lo raro? Como que ya no la detesto. Me dijo que leyera Pride and Prejudice ¿lo has leído? ¿Cómo me involucro con mujeres que siempre están diciéndome que lea algo? Debe ser un don. :)

Vale, así que ahora que la he visto de cerca y personal ¿Realmente cuánto te pareces a ella? ;) Es mi sutil manera de pedirte una foto. :)

Voy a mi próximo tema de conversación. Al parecer, la directora de Sooyoung quiere que los personajes principales salgan y experimenten el estilo de vida lesbiano así que, por supuesto, Sooyoung me lleva con ella. Quiere ir a ¿Cat Mix? Algo así. Estoy bastante segura que tenía algo que ver con un gato. Espero que no fuera esa otra palabra.

Estoy un poco asustada. Pero, hey, si descubro lindas lesbianas me aseguraré de darles tu número. ;) Es broma. Estoy bastante segura que me matarías si lo hiciese.

¿Realmente no te gusta nadie? Venga, Yul, confiesa. :)

No le he dicho a Seung Gi que voy a un bar lesbiano. Estoy bastante segura que no lo aprobaría, no obstante. Creo que es lo único que no me gusta de él parece un poco homofóbico. Ni siquiera he podido hablarle de Leeteuk todavía. No es buena señal, ¿verdad? Hm. Bueno, quizá pueda atraerle al lado de mentes abiertas. Merece la pena intentarlo.

Vale, tengo que prepararme. ¿Qué lleva una a esas cosas? Uf. Hora de excavar en el lado oscuro del armario. Aunque aún tengo tiempo Sooyoung no quiere llegar allí hasta medianoche o así. Creo que la oigo despedazando su armario. Debo ir a ayudar antes de que rompa algo

Deséame suerte esta noche. :)

Cariños, Yoona

Yuri se quedó mirando el mensaje que acababa de leer, insegura de cómo sentirse sobre las palabras en la pantalla. Inadvertidamente, miró la hora en la esquina inferior derecha de la pantalla. Eran las 11:20. "No," dijo, bastante firmemente. "No voy a hacer lo que acabo de pensar hacer."

Se encontró ojeando de nuevo la hora. Bastante contra su voluntad, su mente empezó a calcular la cantidad de tiempo que le costaría llegar al destino deseado. "No voy," resolvió.

"Es una idea encantadora, pero no. Complicaciones. Montones de complicaciones. ¡Cantidades monumentales de complicaciones!" Suspiró. "Y otra vez estoy hablando sola." Yuri miró por el oscuro, silencioso, vacío y, sobre todo, deprimente apartamento. Resignada a otra noche de soledad, cerró el ordenador portátil y agarró el guion. "Me concentraré."

"Bueno," empezó Yoona a la defensiva, "tendré veintiuno en tres días." Se apoyó contra la pared del establecimiento del que acababa de ser rechazada. Sooyoung asintió. "Regresaremos para tu cumpleaños," decidió.

"Nada como ir a un bar lesbiano en mi vigésimo primer cumpleaños," comentó Yoona secamente, aunque realmente no le importaba. No realmente. De hecho, se sentía defraudada por no haber podido entrar. O más bien, que ella no pudiera entrar. Sooyoung había cumplido veintiuno el mes anterior.

Sooyoung echó una mirada alrededor. "Bueno, ¿qué quieres hacer ahora?" preguntó. Yoona se encogió de hombros. "¿Por qué no entras un rato?" le sugirió. "Es tu misión de investigación. Me quedaré por aquí."

"¿Fuera?" Sooyoung preguntó indecisamente. Miró alrededor. "Es peligroso."

Yoona se acercó a la puerta. "Estoy segura que si grito montones de lesbianas vendrán en mi ayuda y socorro," bromeó. Indicó de nuevo al bar. "Te esperaré. De todas formas, traje un bloc de bocetos. No me aburriré."

Sooyoung frunció el ceño, no gustándole particularmente la idea. "Realmente no es gran cosa si regresamos en unos días," dijo.

"Sí, pero para entonces la película estará en pleno jaleo, tendrás menos tiempo para tal excursión," discutió Yoona. "Además, ya hemos llegado hasta aquí. Igual podrías aprovecharlo."

Sooyoung dudó, pero no discutió. "Bueno," dijo tras un momento. "Pero te quedas justo en la puerta y, si ves algo raro, te vas derecha dentro." Levantó la vista al luminoso. "No me puedo creer que esté haciendo esto." "Es por una buena causa," le aseguró Yoona.

Sooyoung asintió, animada por esas palabras. "Actuar, sí." Volvió a mirar alrededor. Como para asegurarse que no había nadie sospechoso cerca, o nadie que reconociera, Yoona no estaba segura. "Vale, voy a entrar." "Creí que era salir?" Yoona sonrió.

"Ja, ja," contestó Sooyoung, alcanzando la puerta. "Probablemente fliparé en cinco minutos. No tardaré, lo prometo."

Yoona le agitó la mano. "Diviértete."

Sooyoung desapareció dentro. Aburrida y sola, Yoona apoyó la cabeza contra la pared detrás de ella y miró la noche ruidosa. Había un montón de gente fuera; la mayoría parecía estar bebida. Se aseguró de quedarse junto a la puerta, sólo por si acaso. Aunque nadie le prestaba mucha atención y se sentía agradecida por ello.

Era verdad que había traído un pequeño bloc de bocetos con ella. Nunca se sabía cuándo podrías necesitarlo. Tras unos minutos, decidió que se moriría de aburrimiento si no empezaba a dibujar algo. Así que sacó el pequeño cuaderno y empezó a dibujar. Dudaba que las lesbianas retuvieran la atención de Sooyoung demasiado tiempo.

Yuri se maldijo mientras salía de su apartamento. Y mientras iba al vestíbulo. Y bajaba en el ascensor. Se maldijo mientras iba a la boca de metro. Y en el metro. Y aún estaba maldiciéndose cuando divisó el bar.

Sólo voy a pasar por delante, decidió. Sólo salí a pasear. Es una noche agradable. Nada malo hay en dar un paseo.

Yuri estaba a punto de cruzar la calle cuando descubrió la figura sentada a unos metros. Así que, se paralizó en cambio. Date la vuelta. No te ha visto. Regresa al apartamento y métete en agua fría. De hecho, métete en el congelador y quédate allí.

Pero por supuesto, no se escuchó. Probablemente porque su corazón estaba martillando tan fuerte que no podía oír nada. Complicaciones, complicaciones, coreó su lado más lógico. La lógica no estaba con ella esa tarde, desafortunadamente. Había una parte mucho más controladora animándole a pensar algo que decir.

Billón y medio de posibilidades atravesaron la mente de Yuri mientras atravesaba la calle. Ciudad pequeña. A todas partes que vaya, allí estás. ¿Estás acosándome? Todo idioteces. Pero bueno, claramente soy idiota.

A un metro de Yoona, Yuri se detuvo. Estaba casi allí y no tenía nada que decir. Quizá podía fingir no notar a Yoona y pasar de largo. Y si ella no te nota, ¿entonces qué? ¿Vas darte la vuelta y pasar una y otra vez hasta que lo haga?

Probablemente.

Estoy demente. Estoy totalmente demente.

Yoona escogió ese momento para levantar la vista de lo que fuera que estaba haciendo. Dibujando, según parecía. Los ojos avellana inspeccionaron su alrededor hasta que, finalmente, aterrizaron en Yuri. El reconocimiento fue lento, pero una vez registrado, fue reemplazado al instante por sorpresa. Y algo más que Yuri no pudo descifrar.

Yuri cerró el hueco entre ellos. Levantó la mirada hasta el rótulo sobre el bar y le sonrió a Yoona. "¿Vienes aquí a menudo?" Una frase que Siwon apreciaría.

Evidentemente, Yoona fue cogida con la guardia baja. Pero dijo, "Sooyoung está intentando ponerse en contacto con su lado lésbico."

"¿Por qué estás aquí fuera?" preguntó Yuri.

Yoona se encogió de hombros. "No tengo veintiuno," contestó.

Al instante Yuri recordó que el cumpleaños de Yoona estaba acercándose. En realidad no se había olvidado; jamás podría olvidarse. Aún así, el hecho de no haber encontrado un regalo apropiado estaba molestándole cantidad. "Ya veo," dijo.

"¿También ibas a entrar?" preguntó Yoona tras un momento.

Yuri debatió cómo contestar la pregunta. La verdad era que sólo deseaba estar dondequiera estuviera Yoona. Pero no podía admitir eso. "Me gusta más aquí fuera," dijo finalmente.

Yoona pareció un poco desconcertada pero no siguió la línea de interrogatorio. "Sooyoung debería salir en cualquier momento," dijo. "Ha estado dentro más de media hora o así. Dudo que esté mucho más."

Yuri frunció el ceño ligeramente. No le gustaba la idea de Yoona sentada fuera todo ese tiempo. Sola, nada menos. "¿Aburrida?" preguntó.

"No realmente," contestó Yoona y alzó un pequeño bloc de bocetos para énfasis.

"Eres artista," dijo Yuri. No era una pregunta porque ya sabía la respuesta.

Yoona asintió ligeramente. "Algo así," contestó.

"¿Puedo mirar?" Yuri indicó al bloc. No tenía idea de dónde venía todo este valor, pero se imaginó que era mucho más productivo que sentarse babeando y balbuceando incoherentemente.

Yoona dudó un instante, pero lo entregó. Yuri se aseguró que sus dedos no se tocaran. "No es mucho," dijo Yoona, claramente avergonzada por la perspectiva de tener a Yuri Kwon mirando sus dibujos. "Son sólo garabatos, realmente."

Yuri intentó no sonreír ante el nerviosismo de Yoona. Si tan sólo pudiera oír lo rápido que late mi corazón. Miró el cuaderno en sus manos y lo abrió por la primera página. Uau. Página tras página le cortaba la respiración. "Eres asombrosa," se encontró diciendo. Levantó la vista y se encontró con sorprendidos ojos avellana. "Quiero decir, el arte es realmente asombroso. Eres muy talentosa."

"Gracias," respondió Yoona, una sonrisita asomando en la comisura de sus labios. La puerta sobre ellas se abrió y al instante Yoona levantó la mirada. Pero no era Sooyoung. Dos mujeres salieron riéndose histéricamente de alguna broma privada. Fueron calle abajo, sin lanzar una mirada en dirección de Yoona y Yuri.

"¿No deberías estar ahí investigando?" preguntó Yoona tras un momento.

Yuri miró la puerta, después se encogió de hombros. "No me van mucho los bares," contestó. "Está atestado y lleno de humo y…" No sabía explicar que no quería ser cogida en un bar gay, a menos que Yoona estuviera en él. En lugar de continuar, se encogió de hombros de nuevo.

Yoona asintió muzamente.

Su conversación en punto muerto, Yuri se tomó un momento para echar una mirada por la ajetreada calle de Nueva York. Aunque la gente casi constantemente pasaba, nadie parecía saber o importarle quién era ella. Quizá sólo no querían ser cogidos mirando demasiado cuidadosamente el edificio delante del que se sentaba.

"¿Te sientas a menudo fuera de bares en los que no piensas entrar?" preguntó Yoona.

Yuri sonrió. "He de decir que es la primera vez," contestó. "¿Y tú?"

Yoona le sonrió. "También es la primera."

Yuri decidió justo allí y entonces que si un billón y medio de cámaras de telediarios aparecían delante de ella y fuese sacada del armario ante el mundo, la sonrisa de Yoona merecía las consecuencias que seguirían. Estoy tan jodida.

"¿Puedo preguntar por qué estás aquí?" preguntó Yoona su tono ligero y nada ofensivo.

"Quiero decir, yo tengo una buena excusa…"

"Me sentía sola y quería alguien con quien hablar," contestó Yuri. En breve, es precisamente lo que la trajo allí. En más de una forma.

Yoona se rió. "¿Tú te sentías sola?"

Yuri se quedó mirando a Yoona con curiosidad. Se preguntó qué pensaba Yoona que hacía ella todo el día. "¿Alguna vez has estado rodeada de un montón de gente… y, aún así, sentido totalmente sola?"

La pregunta cogió a Yoona una vez más con la guardia baja. Los ojos avellana contemplaron a Yuri en una forma como nunca antes. Le hizo preguntarse a Yuri qué estaba pensando Yoona. "¿Así es cómo te sientes?" preguntó Yoona, en lugar de contestar a la pregunta.

"De vez en cuando," Yuri contestó, aunque siempre era una respuesta más cierta.

Yoona estaba a punto de responder cuando una chica llegó hasta ellas. Estaba a punto de entrar en el bar cuando prestó atención a Yuri.

Mierda.

"Oh, Dios mío," chilló la chica. "¿¿Eres Yuri Kwon??"

Yuri tuvo miedo de que la chica empezara a hiperventilarse. Sonrió. "En persona," contestó.

"Sabía que eras gay, ¡lo sabía!" gritó la chica. "¿Puedo tener tu autógrafo? ¿Puedo invitarte a una copa? ¿Quieres bailar?"

Yuri no sabía por dónde empezar. "Realmente no bebo y no me gusta mucho bailar. Pero puedes tener ese autógrafo si lo quieres."

"¡Diablos, sí!" gritó la chica. Empezó a hurgar frenéticamente en su bolso. "Tengo un boli por alguna parte." Finalmente encontró un rotulador Sharpie y se lo dio a Yuri. Un segundo después, se levantó la camisa para exponer sus pechos. "Pues firma el izquierdo." Yuri se mordió el labio. Nunca antes le habían pedido que hiciera eso. Cuidadosamente, asegurándose de no tocar ninguna área vital, garabateó su firma en el pecho izquierdo de la chica. "Aquí tienes," dijo, cerrando el rotulador y devolviéndolo.

"¿Estás segura que no quieres una copa?" En ese momento pareció notar la presencia de Yoona. Una sonrisa sagaz le siguió. "Oh, ya veo." Le guiñó a Yuri. "Gracias por el autógrafo."

"De nada," contestó Yuri, sintiéndose profundamente avergonzada. No quería que la chica le dijese a la gente que Yoona era su novia. Yoona no necesitaba ese tipo de publicidad. Tomó la mano de la chica y tiró suavemente de ella hacia abajo. En la oreja, le susurró, "Realmente apreciaría si mantuviese esto callado. Sólo entre nosotras." La soltó y esbozó la sonrisa más dulce que pudo encontrar.

La chica se ruborizó de un rojo intenso. "Lo tienes. Sin problema." Le sonrió a Yoona y desapareció en el bar.

Yuri sabía que debería irse de allí. Pero no quería levantarse. De algún modo, nada parecía tan importante como estar cerca de Yoona. "Lamento eso," se disculpó rápidamente.

"No necesitas que corran rumores sobre ti."

"Probablemente está allí dentro diciéndole al mundo que eres lesbiana y, ¿te preocupan los rumores sobre mí?" preguntó Yoona.

Yuri miró fijamente en los ojos de Yoona y dijo muy seriamente, "Estoy acostumbrada a los rumores sobre mí. No me gusta cuando corren sobre gente que…" Se detuvo. "… conozco." No podrá creerse que casi dijo amo. ¿Qué estaba pensando?

Yoona se notó la pausa. Se quedó mirando a Yuri con curiosidad. "Ya veo," dijo. "Gracias," agregó tras un momento. "Aunque estoy segura que el que yo sea gay no causaría un enorme escándalo." Se detuvo a reconsiderarlo. "Excepto en mi casa."

Yuri sonrió ligeramente. Se preguntó qué pasaría en la casa de Yoona si Yoona resultara ser homoual. No es como si jamás fuera a pasar, Yuri se recordó rápidamente. De hecho, tenía que recordárselo frecuentemente. "Bueno, aún no he sido centro de un buen escándalo, así que supongo que ya es hora."

Yoona la miró curiosamente, como si insegura de cómo tomarse el comentario. Al final, dijo, "Me pregunto qué retiene a Sooyoung."

Como reflejo, Yuri miró a a la puerta. No podía ver dentro. "¿Quieres que vaya a ver?" se ofreció.

"Realmente ardes por crear ese escándalo, ¿verdad?" bromeó Yoona.

Yuri se rio ligeramente. "Sólo no te quiero sentada aquí toda sola."

"Estás tú," señaló Yoona. Entonces agregó, "¿A menos que te esté reteniendo de algo?" "No. No tengo nada más que hacer." Tristemente, era verdad. A menos que contase las páginas y páginas de diálogo que aún tenía que memorizar. Pero, aparte de eso… Antes que Yoona tuviera oportunidad de responder, la puerta se abrió y, esta vez, era Sooyoung saliendo. En realidad, era tropezando. Yuri se incorporó justo a tiempo de impedirle caerse.

Yoona le levantó en seguida. "¿Estás bien?" Se aproximó a su mejor amiga y fue asaltada al instante por el olor a alcohol. "¿Has estado bebiendo?"

Era una pregunta estúpida porque Sooyoung estaba claramente borracha. "Esta lesbiana me desafió a un juego de beber," Sooyoung contestó, su discurso espurreado. "Había otra exhibiéndose ante todos. Dice que Yuri Kwon le firmó las tetas… Oh, eh, Yuri." Finalmente pareció notar a la actriz cuyos brazos estaban alrededor de su cintura .

"Hola, Soo," Yuri saludó, no del todo segura de qué hacer en la situación.

Sooyoung miró a Yuri un largo momento. "Sabes, te pareces a alguien," dijo. Se volvió a Yoona. "¿No se parece a alguien?"

Yoona tomó el brazo de Sooyoung y se lo echó por el hombro, intentando quitarle parte del peso a Yuri. "Venga, vamos a casa."

"Te ayudaré," se ofreció Yuri. Quería asegurarse que ambas llegaban bien a casa.

Además, no estaba del todo segura que Yoona pudiera manejar a Sooyoung sola.

Yoona empezó a discutir, pero al instante comprendió que sin la ayuda de Yuri le costaría una eternidad llegar a casa. "Vale," cedió finalmente. "Pero realmente no tienes que hacerlo," agregó, sintiéndose incómoda.

"Lo sé," Yui dijo. "Quiero hacerlo." Y quería. De ninguna manera dejaría sola a Yoona. Fueron calle abajo. "¿Cuánto has tomado de beber?" preguntó.

"Oh… un sillón de esas… cositas," contestó Sooyoung, su mano formando lo que parecía ser un círculo. "Amenazó con pedirme salir en una cita si no lo hacía." Yuri arqueó una ceja.

"Un simple no habría bastado," dijo Yoona, un poco duramente.

"No lo sé," discutió Sooyoung. "Las lesbianas podrían tener reglas diferentes." Se quedó mirando a Yuri. "¿De veras le firmaste las tetas?"

"Sólo la izquierda," contestó Yuri. Miró rápidamente a Yoona y vio lo que parecía ser una sonrisa.

"YUL!!!," dijo de repente Sooyoung.

Las cabezas de Yuri y Yoona giraron bruscamente al mismo tiempo.

"Es a quién te pareces," Sooyoung continuó. "Pero no te preocupes, tu voz es más y. Aunque la suya es material de operadora de o telefónico…"

Yuri estaba demasiado preocupada por la reacción de Yoona para concentrarse en la propia.

Oyó vagamente las palabras operadora de o telefónico. Yuri no podía decir lo que Yoona estaba pensando; su cara permanecía impasible. Cohibida y un poco más que petrificada, Yuri permaneció callada.

No le importaba porque Sooyoung estaba hablando a una tormenta. " … quería que la sobase y yo era como, 'Tía, no soy gay'. Y ella era como, '¿Entonces qué estás haciendo aquí?' Y yo era como, 'Investigación sobre mi personaje'. Eso realmente la impresionó. Podría haberme dado un revolcón esta noche…"

Yoona estaba agitando la cabeza y mirando al cielo a la vez. Yuri lo encontró increíblemente adorable. Se dio cuenta que estaba mirando fijamente y desvió la vista, pero no antes de notar lo bellísima que estaba Yoona. Yuri hizo lo mejor para concentrarse en la acera o en las tiendas por el camino. Si miraba a Yoona, no estaba segura de poder desviar la mirada.

Yoona estaba furiosa con Sooyoung. ¿Cómo pudo emborracharse? Nunca se emborrachaba. Bueno, había habido un par de veces, pero… ¿por qué esta noche? Si Yuri no se hubiera presentado, Yoona habrían estado allí fuera sola.

Estaba empezando, podía sentirlo. Sooyoung estaba empezando a olvidarse de ella. El pensamiento golpeó a Yoona dolorosamente.

Echó una mirada a su amiga, que llevaba hablando sin parar ya un rato. Entonces su mirada aterrizó en la famosa actriz ni medio metro de ella. ¿Cómo diablos pasó esto? Yoona estudió el aspecto de intensidad en la cara de Yuri, parecía estar particularmente concentrada en el cemento. Yoona se preguntó qué estaba pensando. Probablemente preguntándose cómo diablos acabó acompañándonos a casa.

Yoona desvió la vista tras un instante, asustado de ser cogida mirando fijamente. La verdad era que no creía que a Yuri le molestase acompañarlas. ¿Pero por qué? Yoona no lo entendía. Los famosos no van por ahí así. No aparecían de la nada y se sentaban a conversar. Había algo muy raro en esta situación que Yoona no podía precisar.

El comentario de Sooyoung resurgió y Yoona se encontró frunciendo el ceño. ¿Yuri se parecía a Yul? Un poco, era verdad. Pero la voz de Yul era diferente. No parecía tan… mesurada. Había levedad en ella. La voz de Yuri siempre parecía tan… contenida. Como si la actriz tuviera miedo de hablar, miedo de decir algo mal.

Arriesgó otro vistazo a Yuri y se encontró mirando su par de ojos. Rápidamente desvió la mirada, avergonzada y no completamente segura de por qué. De hecho, no estaba segura de nada acerca de Yuri Kwon. Era tan… tan… indescriptible. Era la única palabra en la que Yoona podía pensar. Aunque, la palabra 'hermosa' también le venía a la mente. Era una belleza extraña. Del tipo que te hacía desear quedarte mirando durante horas.

¿Durante horas? De repente Yoona frunció el ceño ante la dirección en la que sus pensamientos se dirigían. No, decidió tras un momento. 'Durante horas' era una estimación bastante certera. Yuri Kwon era innegablemente bellísima. No era sorprendente que estuviera en portada de mil revistas. No era sorprendente que cobrara millones de dólares sólo por ser vista en televisión. La gente no podía tener bastante de ella.

Yoona hizo lo mejor por no mirar a Yuri. Lo último que necesitaba era que la actriz pensara que estaba mirándola fijamente. Probablemente creerá que la reverencio o algo así. Por alguna razón, Yoona quería aferrarse a la idea de que Yuri Kwon era una zorra estirada.

Bastante inconscientemente, Yoona escamoteó otra mirada. Afortunadamente, Yuri estaba de nuevo concentrada en la acera.

Un enigma. Es lo que Yoona decidió era Yuri Kwon. Porque, a pesar del hecho que Yoona deseaba detestar a la actriz, no podía. Hasta ahora, Yuri no había sido nada salvo simpática… y divertida y… quizá incluso un poco encantadora. Pero, había algo más que Yoona no podía comprender.

Antes de que tuviera oportunidad de pensarlo más, su edificio de apartamentos vino a la vista. "Es el próximo," dijo en beneficio de Yuri. Yoona miró a la actriz para ver si podía descifrar una reacción. Estaba segura que Yuri  estaba acostumbrada a localizaciones más exóticas. Probablemente le parece un verdadero vertedero. Pero si la famosa actriz estaba disgustada por el edificio, hizo un buen trabajo ocultándolo.

"No estoy sintiendo muy guay," anunció Sooyoung. De hecho, parecía algo verde.

Yoona rezó por que llegaran al apartamento antes que Sooyoung vomitase. Su mejor amiga nunca se perdonaría si le vomitaba encima a Yuri Kwon. "Casi estamos allí," le aseguró. Una vez dentro del edificio, se dirigieron al ascensor. En la subida, Yoona recordó que Sooyoung tenía las llaves del apartamento. "¿Dónde están las llaves?" "Bolsillo," contestó Sooyoung, pareciendo más bien enferma.

"¿Cuál?"

"Izquierdo."

Era en el lado de Yuri. Yoona miró a Yuri. "¿Te importaría?" preguntó, sintiéndose increíblemente avergonzada por toda la situación.

Yuri pareció vacilante, pero cumplió. Cuando las puertas del ascensor se abrieron, Yoona tenía las llaves en la mano. Eran sólo unos metros hasta su apartamento. Logró abrir la puerta justo a tiempo de ver a Sooyoung volar centro. Segundos después, la puerta del baño se cerró de golpe.

Sola con Yuri una vez más, Yoona buscó algo que decir. "Gracias," dijo finalmente.

Los ojos de Yuri vagaron suavemente a los de ella. "De nada." Yuri  indicó la dirección en que había ido Sooyoung. "¿Estará bien?"

La mirada de Yoona siguió la línea de vista de Yuri. "Sí," dijo. "Estoy segura que estará bien. Normalmente no se emborracha así," se encontró diciendo. Por alguna razón no quería que Yuri pensase que era un hábito de Sooyoung.

Hubo una breve pausa en la que Yoona se preguntó si Yuri quería quedarse o irse. Cuando la actriz no hizo movimiento para salir, Yoona cerró la puerta del apartamento. "¿Te gustaría algo de beber?" ofreció, esperando tener algo que darle a Yuri.

"Claro," aceptó Yuri.

Yoona fue al frigorífico. "¿Qué te gustaría?" preguntó, no del todo segura de tener muchas opciones.

"Agua Evian con dos gotas de limón recién exprimido," contestó Yuri.

Yoona se quedó mirando el casi vacío frigorífico y después a la actriz. Risueños ojos azules la miraban y Yoona se dio cuenta que Yuri estaba bromeando. "¿Te gustaría con un mono paragüitas?" preguntó, relajándose ligeramente.

"Que sea azul," contestó Yuri, pareciendo aliviada de que Yoona no hubiera malentendido su broma. Fue a donde estaba Yoona y se asomó al frigorífico. "En realidad, de repente tengo antojo por… eso, justo ahí." Apuntó.

"¿Estás segura?" Yoona preguntó, sacando el recipiente del frigo.

"Afirmativo," contestó Yuri. "¿Qué es?"

Yoona olió el contenido y arrugó la cara. "Ni idea."

Yuri se rio. "Bebida misteriosa… mi favorita."

Y si mueres, seguro que tendré problemas."

"Na, no me echarán de menos," Yuri contestó, devolviendo su atención al frigo. Yoona miró a Yuri un largo momento, realmente no pensando nada en particular. El hecho que Yuri Kwon estuviera en su cocina mirando pensativamente el contenido de su frigorífico le resultaba particularmente divertido a Yoona. Extravagante… pero divirtiendo. "Lamento no tener mucho," se disculpó.

Yuri se encogió de hombros y cerró el frigo. "En realidad, tienes más que yo. Aún no me he molestado en comprar comestibles."

"¿Cómo es eso?" preguntó Yoona. De repente recordó que había una caja de refresco en el armario. Se arrodilló para sacar una lata. "¿Pepsi vale?"

"Sí, gracias," contestó Yuri. "Oh, y um, porque no he tenido tiempo."

"¿No puedes contratar a alguien que compre comestibles para ti?" preguntó Yoona. Llenó una taza con hielo y le entregó todo a Yuri. "Siéntate si quieres."

Yuri abrió la lata de refresco y lo vertió en la taza. "Supongo que podría," dijo, sentándose a la mesa. "Pero me sentiría realmente mal y perezosa pidiéndole a alguien que lo hiciera." Tomó un sorbo. "¿Por qué? ¿Quieres comprar mis comestibles?"

Yoona sonrió, pero no tuvo oportunidad de responder porque Sooyoung escogió ese momento para entrar en la cocina.

"Cama," dijo Sooyoung y apuntó hacia su cuarto. "'Noches." Sin otra palabra, se dirigió en la dirección indicada.

Yoona miró por un segundo, después agitó la cabeza. "Estoy segura que mañana será unas castañuelas."

Yuri sonrió. "Buena suerte." Se detuvo un momento. "¿Estás cansada?" preguntó, pareciendo casi tímida.

Yoona se quedó mirando a Yuri, insegura de qué estaba preguntando la actriz. "No realmente," contestó finalmente. "¿Por qué?"

"¿Quieres ir a comprar comestibles?"

Yoona miró la hora en el microondass. Eran casi las dos de la mañana. "¿Ahora?" preguntó. "Claro. Algo tiene que estar abierto," dijo Yuri.

Algo estaba efectivamente abierto. Terminaron comprando comida en una tiendecita cerca del apartamento de Yuri Kwon aún no podía creer haber tenido las agallas de pedirle a Yoona ir a comprar comida con ella. Más aún incluso, no podía creer que de hecho Yoona hubiera aceptado la idea. ¿Quién iba de compras a las 2am? Al parecer unos cuantos, porque no eran los únicos allí.

"¿Jif o Skippy?" preguntó Yoona, sosteniendo los dos tipos de mantequilla de cacahuete disponibles.

"Jif," Yuri contestó en seguida, volviéndose a mirar la selección de cereales. "Me alegra que estés aquí para mostrarme cuales son los esenciales Yoona sonrió. "Bueno, todos han de tener mantequilla de cacahuete. Es como una ley. De hecho, es una ley. Leí al respecto en uno de los libros de Taecyeon." Yuri respingó ante el sonido de su nombre.

"Mi ex-novio," explicó Yoona, ignorante de la reacción de Yuri. "Está estudiando leyes en Harvard."

Lo dice con tal orgullo, además. Pero el dolor era obvio en los ojos de Yoona. "Que afortunado," dijo Yuri, su atención en las cajas de cereales. "Es una decisión difícil." Yoona asintió. "Honey Nut Cheerios," dijo, sosteniendo la caja de cereales.

"¿Es lo que te gusta?" preguntó Yuri. Por alguna razón estaba tomando nota de las preferencias de Yoona. No sabía por qué. No quería pensar en el por qué.

"Y Cap'n Crunch Berries." Yoona también alcanzó por esa caja.

Yuri sonrió. "Muy nutritivo," dijo, agarrando ambas cajas. "Les daré un intento."

"¿Nunca los has tomado antes?"

"Soy más del tipo Kashi Go Lean," respondió Yuri.

"¿Tipo qué?"

Yuri buscó alrededor y finalmente encontró el cereal de su preferencia. Apuntó el frontal de la caja. "¿Ves? Alto en proteína y fibra."

Yuri le cogió la caja y la inspeccionó. Arrugando la nariz, dijo, "Asco."

"Saludable," aclaró Yuri, recuperando la caja. Puso los cereales Kashi en su cesta, junto con los Cap'n Crunch's Crunch Berries y los Honey Nut Cheerios. "¿Qué más necesito?" "¿Leche?" sugirió Yoona.

Yuri fue detrás de ella. Era divertido que a Yuri no pudiera impórtale menos lo que compraba en tanto Yoona estuviera con ella.

"¿Quieres desnatada?" preguntó Yoona. "Estando tan preocupada por la salud. ¿Estás a dieta?"

"¿Dieta?" preguntó Yuri. "No particularmente. ¿Por qué?"

Yoona se encogió de hombros, poniendo el cartón de leche en el cesto. "¿No estáis todas a dieta?"

"No soy una supermodelo," contestó Yuri "Pero, de hecho, la prefiero desnatada." "Asco," Yoona contestó una vez más.

Yuri se sonrió. "Quisqui, quisqui." Siguió a Yoona por el pasillo y agarró algunos artículos de comida al azar que podría querer después. "Debiera coger pasta. Puedo tenerla de cena mañana."

Yoona se la quedó mirando. "¿Tienes un buen cocinero?" "¿Perdón?" preguntó Yuri, desconcertada.

"Alguien que cocina para ti." aclaró Yoona. "¿Tienes uno de esos?"

Yuri sonrió. "Soy perfectamente capaz de cocina para mí, gracias," contestó. "¿Qué crees que hago todo el día? ¿Sentarme mientras mis esclavos me abanican y alimentan con uvas?" "¿No?" Yoona preguntó, una leve sonrisa en su cara. "He visto esos programas de Lifestyles of the Rich and Famous."

Yuri sonrió y tomó un par de paquetes de tallarines del estante. "Bueno, probablemente no me verás por allí. Si tuviera cocinero, se morirían de aburrimiento. Raramente estoy en casa."

"¿Fiestas de famosos?" adivinó Yoona.

"Odio las fiestas," dijo Yuri.

Yoona agitó la cabeza. "¿Lo sabe tu club de fans?" preguntó. "No iría revelando tu estilo de vida en la televisión pública si fuera tú."

Los ojos de Yuri se entrecerraron ligeramente. "¿Es tu sutil manera de llamarme aburrida?" "¿Estaba siendo sutil?" Yoona preguntó, una sonrisita en sus labios.

Yuri sonrió, asombrada de que Yoona estuviera hablándole así. Está insultándome de plano y me encanta. "Consideraré tu consejo, gracias," dijo tras un momento. Miró su selección de comestibles. "Creo que estamos bien." Se dirigió hacia la máquina registradora.

Yoona siguió ejemplo.

El hombre detrás del mostrador apenas le echó un vistazo mientras le facturaba a Yuri. Adoro Nueva York, pensó Yuri. Nadie me nota nunca. Él le dio el total, ella le dio el dinero. Y por la puerta salieron. "¿Dónde vives?" preguntó Yoona.

"A un bloque por allí," Yuri indicó con su barbilla. Sus manos estaban ocupadas con bolsas. "Gracias por venir conmigo."

"De nada," contestó Yoona. Ella llevaba la otra la mitad de los comestibles. "No pasa cada día que una persona famosa me pida le acompañe a comprar comestibles."

Una persona famosa, Yuri pensó, sintiéndose deprimida de repente. Nunca me verá como otra cosa. No es que esperara una reacción diferente. Era sólo… un asco. "Bueno, oí que Brad Pitt estaba por aquí," se encontró diciendo. "Quizá mañana te llevará a comprar zapatos."

Yoona se rio. "Veremos," contestó.

Se hizo un silencio que no era tan incómodo como los anteriores. Unos minutos después, Yuri indicó su edificio de apartamentos.

"Uau," musitó Yoona, levantando la vista. "Debe costar una fortuna."

Yuri no contestó, sintiéndose avergonzada. Llevó a Yoona por el edificio y al ascensor. Esperaba que Yoona no la creyese una completa estirada. Se quedó mirando los números en el ascensor mientras buscaba algo que decir. "Mi ayudante lo escogió por mí," dijo y se dio cuenta que no sonaba nada mejor.

"Ah," dijo Yoona. "Así que tienes un secuaz."

"Yo no llamaría secuaz a Taeyeon," contestó Yuri, sintiendo un poco defensiva de su notan-amiga-pero-en absoluto-secuaz. "Me ayuda a mantenerme organizada. A veces las cosas se ponen un poco frenéticas. Y es realmente una buena persona…" Decidió callarse.

"Lo siento," dijo Yoona tras un momento. "No quise insultarte."

Yuri miró en los ojos avellana. "No me siento insultada."

La incomodidad volvió a plena potencia y de repente Yuri se sintió incómoda. Podía ver que Yoona también se sentía incómoda, lo que ponía aún más a Yuri.

Las puertas del ascensor se abrieron y Yuri salió. El suyo era el único apartamento de la planta, así que alcanzar la puerta era sólo cuestión de dar un par de pasos. Sacó sus llaves y dejó entrar a Yoona.

Yoona miró alrededor al instante que entró. "¿Lo decoraste tú misma?" preguntó.

Yuri se apercibió de las columnas de cajas diseminadas por todas partes y sonrió.

"¿Bromeas? Le pagué una fortuna a un decorador." Empezó a ir a la cocina.

"Bien mereció el dinero," bromeó Yoona, siguiendo a la actriz. "Me gusta todo el motivo en cartón." Depositó las bolsas que llevaba sobre el poyete y retrocedió, mirando por la cocina.

"¿Cuánto llevas viviendo aquí?"

Yuri miró alrededor, preguntándose qué veía Yoona — qué pensaba de esto, de ella. "Sólo unos días," contestó finalmente. "En realidad aún no me siento como en casa."

"Desempaquetar podría ayudar," sugirió Yoona, sus ojos avellana regresando a los de Yuri.

"Sólo una idea."

"La tendré presente," respondió Yuri, combatiendo el impulso se quedarse mirando en los ojos de Yoona. No estaba segura de volver a encontrar su voz si se daba a la tentación. "¿Te gustaría algo de beber? Tengo—" empezó repasar las bolsas "— leche, Mountain Dew caliente, zumo de uva caliente y agua caliente." Levantó la vista a la expectativa. Yoona agitó la cabeza. "Debiera irme." Le echó un vistazo al microondas. Le parpadeaba las 12:00. Así que miró su reloj en cambio. Eran casi las tres treinta de la mañana. "Te llevaré en coche," contestó Yuri en seguida. "Tan sólo permíteme guardar estas cosas."

Yoona frunció el ceño. "Realmente no tienes que hacerlo."

"Bueno, creo que la leche se agriará si no lo hago," contestó Yuri, guiñándole a Yoona antes de meter el cartón en el frigo.

Yoona abrió la boca para responder. La cerró. Entonces la abrió de nuevo. "No tienes que llevarme a casa," logró decir finalmente. "No me importa el paseo."

Yuri dejó de guardar los comestibles lo suficiente para mirar el techo pensativamente. "Sí, pero si algo te pasara sería una publicidad horrible por mí." Sonrió de nuevo. "Además, no podría dormir sabiendo que estabas yendo a casa sola. Tendría que pedirte que hicieras algo totalmente bochornoso como llámame al instante que llegases allí… y, bueno, eso me haría quedar por tonta. Así que, compláceme."

Yoona se quedó mirando a Yuri Kwon un momento muy largo. "Vale," cedió. "No querría ser causa de tu insomnio."

Si tan sólo supieras. Yuri sonrió y volvió a guardar comestibles. Una vez hecho, encaró a su invitada. "Gracias por hacer esto conmigo," dijo. "Sé que fue una extraña petición." Yoona ofreció una sonrisita. "Estoy empezando a pensar que cosas raras es lo único que puedo esperar de ti," dijo.

"Me lo tomaré como un cumplido," Yuri se rió. Tomó las llaves de su automóvil e indicó hacia la puerta delantera. "¿Lista?"

Yoona asintió. "Si insistes."

Yoona se pellizcó el brazo en el ascensor mientras bajaba. Realmente no creía estar soñando, pero por momentos parecía como la única explicación. Los eventos de esa noche desafiaban completamente las leyes de… algo. No se le ocurría una que se aplicase a la situación en que estaba. Quizá tendría que darle nombre ella misma. Pero, por alguna razón, estaba teniendo problemas concentrándose.

El hecho que Yuri Kwon estaba apoyada contra la pared del ascensor, pareciendo como si todo fuera perfectamente normal, estaba distrayendo particularmente a Yoona. Se sentía como el dibujo en el periódico del domingo: ¿Qué objeto no encaja en esta imagen? Casi podía imaginar un gran bolígrafo rojo apareciendo de la nada y trazando un gran círculo alrededor de ella. O quizá, dibujando un círculo alrededor de todo el ascensor. O sólo de Yuri. No importaba porque, en cualquier forma que lo mirases, algo estaba fuera de lugar.

Yoona decidió que era ella quién estaba fuera de lugar porque el elegante ascensor, con los adornos en oro alrededor de los botones, ciertamente no iba con ella. Yuri Kwon, por otro lado, parecía perfectamente en casa. La actriz probablemente estaba acostumbrada a los adornos en oro. Su vida entera probablemente estaba perfilada en oro.

Cuando las puertas del ascensor se abrieron, Yoona salió primera. El recibidor estaba guardado por un hombre de uniforme azul sentado detrás de un gran escritorio jaspeado. Inclinó el borde de su sombrero mientras pasaban.

"Tenga cuidado ahí fuera, Srta. Kwoni," dijo el hombre.

Yuri dio una leve inclinación. "Gracias, Terry," contestó. "Ten buena noche." Yoona encontraba raro… y extrañamente fascinante… la manera en que Yuri  tuteaba a un hombre que no podía haber conocido más que unos días. Así que decidió comentarlo.

"¿Generalmente te haces amiga tan rápidamente de tus porteros?"

"¿Terry?" Yuri preguntó, sosteniendo la puerta abierta para que Yoona pasase. "No es mi portero." Indicó al hombre uniformado apoyado contra una de las otras puertas de cristal. El hombre estaba roncando suavemente. "Ése es mi portero." Parecía divertida por esto. "Terry es uno de mis guardaespaldas. Aunque está disfrazado. Le gusta mezclarse."

Yoona intentó no concentrarse en la implicación de que había más de uno. "¿Entonces no debería estar siguiéndote?" preguntó.

"Na," Yuri contestó y fue acera abajo. "Realmente no soy tan paranoica." Entonces se detuvo de repente y encaró a Yoona, que también se detuvo. "En realidad, no es toda la verdad," admitió. "La verdad es que a mi madre le gusta saber todo que me pasa y mi mudanza a Nueva York le dio la excusa perfecta para endosarme uno de sus espías." "No lo entiendo," dijo Yoona, porque realmente no lo entendía.

Yuri empezó a caminar de nuevo. "Venga. Debemos llevarte a casa." Esta vez, su voz parecía triste y un poco distante. Yoona captó de inmediato el cambio de tono y se preguntó la causa. Tras un momento, Yuri habló de nuevo. "Mi madre teme que haga algo escandaloso. Tiene tendencia a contratar gente para seguirme para que, en el raro caso de que me meta en problemas, ella pueda cortarlo por lo sano antes de que llegue a los medios de comunicación." Yuri se encogió de hombros. "Está un pelín… demente."

Yoona se sentía dudosa. "¿Tu propia madre te espía?"

"Bueno," Yuri empezó, con una ersa sonrisa que Yoona estaba empezando a gustarle.

"Cree que me espía. Pero estuve de acuerdo en doblar lo que mi madre estuviera pagándoles.

Así que, en cambio, le envían informes falsos. Escriben asombrosa ficción sobre mi vida." Se rió de un distante recuerdo, entonces se encogió de hombros y miró a Yoona.

"Ocasionalmente le pido a uno de ellos, como Terry, que vigile cosas fuera de lugar. Normalmente cuando viajo a un lugar al que no estoy acostumbrada o cuando me mudo a una nueva localización. Los acosadores pueden volverse molestos."

"Parece… complicado," comentó Yoona. No podía identificarse, obviamente, pero se sentía un poco mal por que Yuri tuviera que pasar por tanto problema sólo por existir. Supongo que es el precio que pagas…

Yuri se detuvo de repente ante un Rav4 blanco. Le costó a Yoona un momento comprender que era el automóvil de Yuri. Había estado esperando algo diferente. Un Ferrari o un Porsche… incluso una limousine. "¿Tienes debilidad por los Rav4 blancos o algo así?" preguntó mientras entraba en el asiento del pasajero.

"Na, no es el coche que normalmente conduzco," contestó Yuri. "Es alquilado." "Ah," expresó Yoona. Probablemente no quería tener su Ferrari estacionado en mitad de Nueva York.

"El mío es azul," explicó Yuri.

Yoona fue cogida con la guardia baja. "¿Perdón?"

Yuri la miró de reojo y giró la ignición. "Mi Rav4 es azul."

"Ah," fue lo único que Yoona pudo pensar decir. De repente no podía esperar a llegar a su apartamento. Estar con Yuri Kwon era agotador. La actriz tenía la mente de Yoona en un torbellino de confusión y sentimientos mezclados. Deseaba comprender a Yuri pero, cuanto más lo intentaba, más confundida se volvía. Y estaba demasiado cansada para seguir intentándolo.

Al menos por esa noche.

El tráfico era horrible, incluso a las cuatro de la mañana. Parpadeantes luces rojas y azules más adelante anunciaban algún tipo de accidente. Yoona estaba segura de que Yuri lamentaba la oferta de llevarla a casa. "Podrías dejarme por aquí," sugirió, queriendo sacar a la actriz del compromiso. "Puedo caminar desde aquí."

Yuri asintió. "Lo haré," dijo y Yoona se encontró extrañamente defraudada. "En tu puerta delantera," añadió la actriz un momento después.

Yoona se sintió secretamente aliviada, especialmente cuando un momento después empezó a llover. Lo último que quería era una repetición de la noche de graduación. Caminar a casa bajo la lluvia no había sido nada divertido. Aunque la situación era diferente. Muy diferente. No es como si Yuri Kwon fuera a intentar seducirla con velas y una habitación de hotel.

Fue en ese momento que Yoona comprendió cuan cansada debía estar.

Le robó una mirada a la actriz, que parecía ocupada buscando algo en el asiento de atrás. Un momento después, Yuri dejó caer un objeto negro en el regazo de Yoona. Yoona lo reconoció como un portaCDs. "¿Ahora me sobornas con música?" preguntó. Yuri  se rio y Yoona no pudo evitar sonreír ante el sonido. "Escoge lo que quieras escuchar," dijo Yuri.

Yoona bajó la cremallera de la carpeta y lo abrió por la primera hoja. Tenía la sensación de que a Yuri le gustaba mantener las cosas organizadas porque todo estaba en orden alfabético. Repasó los nombres de los artistas. "¿Ani Difranco?" preguntó, levantando la vista. Sooyoung la escuchaba.

"Me gustan sus letras," contestó Yuri. "Muy poéticas."

"Realmente nunca me ha entrado," tuvo que admitir Yoona, volviendo a los CDs en su regazo. Hojeó las páginas. Yuri escuchaba de todo. De Alanis Morissette a Metallica, a Schubert, a SWV, a John Michael Montgomery… la lista seguía. "Miss Saigon es excelente," se encontró comentando. "Sooyoung lo escucha mucho. Y Phantom y Cats… todos esos." Encontró que Yuri los tenía todos.

Eventualmente, tras avanzar dos pulgadas enteras en el tráfico, Yoona se quedó con un CD no identificado. "¿Qué es este?" preguntó.

Yuri le echó una mirada y se encogió de hombros. "Siw—Um, mi amigo me lo grabó," dijo, pareciendo momentáneamente sonrojada. "¿Es tu elección?"

"Seguro," Yoona contestó, figurándose que no podía hacer daño. Entregó el CD y sintió rozar su dedo contra el de Yuri el más breve de los segundos. "Espero que no sea country," se encontró diciendo, intentando ignorar la extraña sensación de hormigueo en el punto que sus dedos se habían tocado. Me estoy volviendo demasiado cosquillosa, decidió.

"No eres fan, me lo tomo," Yuri contestó, metiendo el CD en el lector. "Podría haber una canción country perdida aquí o allá, te lo advierto. Tengo gustos variados."

A Yoona no le importaba realmente, porque tenía más curiosidad por el tipo de canciones que Yuri Kwon había escogido reunir. Era como una pista; una pista musical.

Un momento después, una canción que Yoona no reconoció lleno el automóvil.

"No es country," Yuri anunció. "Tienes suerte."

Yoona se encontró sonriendo. "¿Qué es?"

"''," contestó Yuri . "Avril Lavigne. Es mi tema, creo."

https://www.youtube.com/watch?v=ywD-H5lh_xw

Yoona intentó deducir lo que eso significaba escuchando las letras. Pero era más una canción de amor que otra cosa. Se preguntó brevemente en quién pensaba Yuri cuando escuchaba esta canción. "¿Tienes novio?" se encontró preguntando. (Quien sabe en quien pensará, de seguro en Siwon XD)

"No podría estar más soltera," Yuri contestó, echándole una mirada.

Interesante. Yoona decidió disfrutar la canción, porque comprender a Yuri iba a ser un largo proyecto.

Y, por alguna razón, se sentía interesada en el desafío.

Hola a todos, después de un tiempo aquí les traigo actualizaciones, mismas que serán subidas a partir de ahora cada semana, el motivo es que en el lugar actual donde trabajo no hay internet T.T es una tortura total…. Gracias por el apoyo y la espera. 

Tengan una linda semana, nos leemos la proxima :)

P.D creo que Yuri debe de agradecerle a Sooyoung y su mala resistencia al alcohol por darle una oportunidad xD