Chaerin se estiró y apoyó la cabeza contra la pared. Estaba cansada. Emocionalmente agotada. Miró su reloj. Había estado con Dara más de una hora. Trató de imaginar todo lo que le había sucedido. Se preguntó si algún día le diría. Cerró los ojos, con los dedos frotando ligeramente a través de la pulsera que Dara le había dado, y se imaginó a Dara como cuando habían estado en el barco, el sol brillaba en su rostro, una sonrisa se formaba en su rostro mientras miraba a los peces de Chaerin. Sí, así es como quería pensar de Dara. No atada a cuatro esquinas de una cama a merced de cinco hombres.

-Perdone ¿Detective Lee?

Chaerin abrió los ojos. Donghae estaba de pie junto a su silla.

-Donghae.

-¿Dónde está?

-Está ahí. -Dijo Chaerin, señalando a la puerta cerrada.

-¿Está bien?

Chaerin asintió.

-Parecía que sí.

¿Fue violada...?

-No.

Apretó los puños.

-Quiero matar a esos hijos de puta. -Gruñó.

-Es demasiado tarde para eso.

-¿Qué pasó? Bom dijo que fue secuestrada de tu puerto deportivo. -Dijo.

-Sí.

-¿Cómo pudiste permitir que esto sucediera? -Preguntó.

Chaerin entrecerró los ojos, atravesándolo con una mirada que hizo a Donghae dar un paso atrás.

-¿Dejar que suceda? -Repitió en voz baja. -Hice todo lo posible para encontrarla.

Él pasó sus manos por su cabello limpio. De hecho, estaba impecablemente vestido. No había duda de que se había tomado el tiempo suficiente para una ducha. Que increíble.

-Lo siento, es sólo que me da miedo. -Dijo. -Desde que se trasladó a Homicidios, ha sido un problema tras otro.

-¿Problema? Ella es un policía. Esto es lo que hacemos.

-Ella ha estado atrapada en un túnel, ha recibido disparos, ha estado mezclada en esa redada de drogas y ahora esto. Y sigue volviendo a ti. -Él espetó.

La respuesta  de Chaerin se vio truncada  cuando una enfermera abrió la puerta.

La enfermera sonrió y asintió hacia Chaerin.

-Ella está bien. Está preguntando por ti.

-Espera. Yo soy su prometido. Tengo que verla. -Dijo Donghae, caminando hacia la enfermera.

¿Prometido? Chaerin suspiró.

-Lo siento, señor. Ella sólo me pidió que enviara a la Detective Lee.

-¿Podrías decirle que estoy aquí? Estoy seguro de que querrá verme.

-Por supuesto.

Ella mantuvo la puerta abierta para Chaerin, la siguió al interior y luego cerró la puerta con firmeza en el rostro de Donghae.

-Hola. -Dijo Chaerin.

Ella  fue recibida  con una sonrisa  vacilante,  Dara dio unas palmaditas en la cama para que ella se acercara. Estaba con la parte superior cubierta por la sabana, todavía con los pantalones que Chaerin le había dado.

-Gracias por quedarte. Sé que ha sido una noche muy larga.

-No pensaba dejarte. -Dijo Chaerin honestamente mientras se sentaba en el borde de la cama.

-¿Detective Park? Hay un caballero afuera. Dice que es su prometido. -Dijo la enfermera.

-Donghae. -Murmuró Dara. -¿Cómo se enteró de esto?

-Yo... utilice tu celular y llame a Bom. Pensé que te gustaría que alguien lo supiera. -Dijo Chaerin.

Dara asintió.

-Dile que espere un segundo.

-Probablemente debería irme. -Dijo Chaerin -Estoy segura que preferirías tenerlo aquí.

-Prefiero que te quedes, Chaerin. Me dijeron que puedo volver a casa, pero...

Ella no quería estar sola. Pero tampoco podía hacer frente a Donghae en este momento.

-Está bien. ¿Quieres  que te lleve a casa...? Me puedo quedar contigo esta noche. -Ofreció Chaerin. -O tal vez Donghae quiera acompañarte…

Dara se acercó y tomó la mano de Chaerin. Se la veía pálida. Se veía más cansada de lo que Dara la había visto nunca.

-Yo quiero que tú te quedes conmigo. -Dijo en voz baja. -¿Por favor?

Chaerin asintió.

-¿Por qué no vas a que alguien te mire la herida de la cabeza? No puedo creer que has estado aquí todo este tiempo y no tomaste una enfermera.

-Tomar una enfermera ¿eh?

Dara sonrió.

-¿Sabes lo que quiero decir?

-Está bien. -Se puso de pie, y luego bajó la mirada hacia sus manos entrelazadas. Ella le dio un apretón. -¿Está todo bien...contigo?

-Solo algunas contusiones.

Chaerin se acercó y rozó la mejilla de Dara. Estaba hinchada.

-Lo siento, Dara… Si hubiera escuchado a Yang… Si hubiera estado más alerta. –Chaerin cerró su puño con fuerza.

-No es tu culpa. Era... trabajo. -Dijo. -Tengo que verlo de esa manera, Chaerin. Al igual que cuando te dispararon. Fue trabajo.

-¿Te han citado con un psicólogo?

-Sí. Me habló brevemente el doctor John. Voy a verle en un par de días.

-Bien.

-Ve a que alguien te eche un vistazo a esa herida, Chaerin. Y envía a Donghae ¿de acuerdo? Para acabar de una vez con esto.

-Sí. Voy a estar esperando afuera cuando estés lista para salir.

Dara respiró hondo, y luego soltó la mano de Chaerin.

-Gracias por estar aquí.

-Es la única manera de estar segura en conseguir mi ropa de vuelta. -Bromeó Chaerin.

Chaerin se detuvo en la puerta, mirando hacia atrás. Dara la miró a los ojos durante un largo rato. Luego Chaerin asintió y abrió la puerta. Donghae estaba esperando.

-Ella va a hablar contigo ahora. -Dijo Chaerin.

-Gracias, detective, pero puedo manejarlo desde aquí. Sé que debe estar cansada.

-Lo que tú digas. Voy a estar...

Donghae cerró la puerta en respuesta, pasando al lado de Dara.

-Dara,  Dios, mírate. -Dijo juntando las manos, llevándoselas a los labios. -Podrías haber sido herida.

-¿Herida? Estoy herida, Donghae. -Dijo en voz baja.

-Sabes lo que quiero decir, Dara. Ellos podrían haberte matado.

-Sí, ese era el plan. Gracias a Dios Chaerin me encontró a tiempo.

-Quiero la transferencia de Homicidios. Después de esto, dudo que alguien pudiera negarse