hola queridos lectores, solo quiero preguntarles su opinion. que les parece que el fanfic The One que originalmente esta en YulSic lo adapte a TaeNy. abria cambio de personajes y todo eso. quiero su opinio, asi que. que dicen? les gustaria?  Capítulo 94

Pov Taeyeon

A Seohyun le han salido los ovarios desde la noche en que intentó agredirme. Ha hecho un buen berrinche en el aeropuerto cuando me ha visto junto a las cintas de recogida de equipajes. Esperaba a su madre. YeJi ha accedido a que fuera a recoger a su hija, tal vez porque no le apetecía ir después de la fiesta de Yesung, tal vez porque le doy pena. No estoy segura. Pero me alegro.

Por su parte, Seohyun está enojadísima. Dice que soy la chica más idiota que ha conocido, y al principio ni siquiera quería subir al coche conmigo. He tardado veinte minutos en convencer a mi encantadora hermanastra de que volver a casa en mi compañía es mejor que caminar sesenta kilómetros en plena noche.

Tras un largo silencio, retomo la conversación que habíamos iniciado en la terminal.

—Seohyun, aquí me tienes, y necesito que me digas lo que debería hacer. Estoy hecha un lío y no me decido por una cosa o la otra.

—¿Qué es cada cosa? —pregunta.

—No sé si volver a Jeonju para asegurarme de que Tiffany tiene la vida que se merece, o si ir a casa de Sooyoung y matarla.

—Y ¿qué pinta Tiffany en eso último?

La miro y me encojo de hombros.

—Después de matarla, obligaría a Tiffany venir conmigo.

—Ése es el problema. Crees que puedes conseguir que haga todo lo que quieres. Estás así precisamente por eso.

—No me he explicado bien. Quería decir... —Sé que está en lo cierto, y no me molesto en acabar la frase—. Pero está con Sooyoung. ¿Cómo demonios ha acabado con Sooyoung? Es que veo rojo sólo de pensarlo —gruño, y me froto las sienes.

—Será mejor que conduzca yo —repone.

Seohyun es como un grano en el culo.

—Taeyeon, se quedó a dormir en su casa el viernes y pasó el sábado con ella.

De repente lo veo todo negro.

—¿Qué? Entonces... ¿está saliendo... con ella?

Seohyun garabatea en el cristal.

—No lo sé..., pero sé que cuando hablé con Tiffany el sábado me dijo que se había reído por primera vez desde que la abandonaste.

Venga ya.

—Pero si ni siquiera la conoce. —No me puedo creer que esto esté pasando.

—No quiero ser una tonta, pero no puedes ignorar la ironía que tenemos entre manos: estabas obsesionada con que estuviera con alguien como ella, pero acaba saliendo con alguien exactamente igual que tú.

—No se parece a mí en nada —le digo e intento concentrarme en la carretera para no echarme a llorar delante de ella.

No abro la boca durante el resto del trayecto.

—Y ¿ha llorado? —pregunto cuando lo dejo en la puerta.

Seohyun me mira con incredulidad.

—Sí. Una semana entera sin parar. —Luego menea la cabeza—. Oye, no tienes ni idea de lo que le has hecho y tampoco te importa. Sigues pensando sólo en ti misma.

—¿Cómo puedes decir eso, si lo he hecho por ella? Me he alejado de ella para que pueda pasar página. No la merezco, tú misma me lo dijiste, ¿te acuerdas?

—Me acuerdo, y no he cambiado de opinión. Pero también creo que es ella quien debería decidir qué es lo que merece —dice con un bufido antes de bajar del coche.

 

 

CL le da una calada al porro y lo mira fijamente.

—Hacía tiempo que no me fumaba uno. Yoona ya no viene casi nunca. Se pasa el día entre las piernas de Jessica.

—Ya... —musito.

Bebo un trago de cerveza y echo un vistazo al apartamento de mierda. No sé por qué he venido, pero tampoco sabía adónde ir. No pienso volver a mi apartamento esta noche. No me puedo creer que Tiffany esté con Sooyoung. En serio. «Pero ¿qué coño...?»

Seohyin no ha querido llamar a Tiffany para pedirle que volviera a casa de mi padre. He intentado convencerla de todas las maneras posibles. Es una idiota.

Aun así, he de confesar que admiro su lealtad, aunque no cuando se interpone en mi camino. Seohyun dice que debería permitirle a Tiffany decidir si quiere estar conmigo o no, pero ya sé cuál sería su decisión. O eso creía.

Sooyoung me tenía bien engañada. Ha ido a recogerla y ha pasado casi todo el fin de semana con ella.

—¿A ti qué te pasa? —me pregunta CL echándome el humo del porro a la cara.

—Nada.

—He de decir que me ha sorprendido encontrarte en mi puerta esta noche después de lo que pasó la última vez que nos vimos —me recuerda.

—Ya sabes por qué he venido.

—¿Lo sé? —Está disfrutando.

—Tiffany y Sooyoung. Sé que estás enterada.

—¿Tiffany? ¿Tiffany Hwang y Choi Sooyoung? —Sonríe—. Cuéntame.

Más le vale borrar esa estúpida sonrisa de su cara.

Le doy la callada por respuesta y se encoge de hombros.

—No sé nada, de verdad. —Le da otra calada al porro y pequeños copos de papel caen en su regazo. No se da ni cuenta.

—Tú nunca dices la verdad. —Me bebo otro trago.

—Falso. ¿Dices que están follando? —Enarca una ceja.

Casi me atraganto con la pregunta.

—Cuidado con lo que dices. ¿Las has visto juntas? —Inspirar, espirar... Despacio.

—No, no sé nada de ellas. —CL deja el porro en el cenicero—. Creía que estaba saliendo con una chica de instituto.

Miro la pila de ropa sucia que hay en una esquina de la habitación.

—Eso creía yo también.

—¿Te ha dejado por Sooyoung?

—No te burles, que no estoy de humor.

—Te presentas aquí con un montón de preguntas. No me burlo —dice con desdén.

—He oído que pasaron juntos el viernes, y quería saber quién más había por allí.

—No lo sé. Tampoco estuve con ellas. Pero ¿Ustedes dos no vivían juntas? —replica. Se quita sus gafas de aspirante a moderno y las deja encima de la mesa.

—Sí. ¿Por qué te crees que estoy tan enojada con Sooyoung?

—Bueno, ya sabes cómo es desde que tú...

—Lo sé.

Odio a CL. A más no poder. Y a Sooyoung. ¿Qué le costaba a Tiffany haber elegido a Dara? Joder, nunca pensé que me parecería bien que Tiffany saliera con Dara.

Pongo los ojos en blanco y lucho contra el impulso de partirle la crisma a CL contra la mesita de café. Así no voy a llegar a ninguna parte. El alcohol y la rabia no ayudan.

—¿Segura que no sabes nada? Porque, si descubro lo contrario, te mataré y lo sabes —la amenazo muy en serio.

—Sí, amiga, todas sabemos lo psicótica que te pones cuando se trata de esa chica. No seas tan idiota.

—Estás avisada —le digo, y pone los ojos en blanco.

¿Cómo es que me hice amiga suya? Es un montón de mierda y debería haber puesto fin a nuestra supuesta amistad con una buena paliza.

CL se levanta y se estira.

—Me voy a la cama. Son las cuatro. Puedes echarte en el sofá.

—No, ya me iba —digo caminando hacia la puerta.Son las cuatro de la mañana y en la calle hace mucho frío. No voy a poder pegar ojo sabiendo que está con Sooyoung.

En su apartamento... ¿Y si la toca? ¿Y si se ha pasado todo el fin de semana poniéndole las manos encima?

¿Se lo follaría por despecho?

No, la conozco bien. Estoy hablando de una chica que todavía se ruboriza cuando le bajo las