El tiempo ha pasado de manera tan rápida que no he podido sentir su paso, las terapias han terminado y a pesar de ello decidí no volver a Corea. Durante los últimos días he recordado algunas cosas que viví antes de mi entrada al hospital psiquiátrico.

-¿En qué tanto piensas?- escucho decir a la enfermera.

-En nada.-

-No te creo, vamos dime.-

-Pienso en que las acciones que he hecho han tenido el efecto contrario de lo que deseaba, solo eso.-

¿Lo dices por Fanny o por qué?-

-Por todos, no solo ella, también por mis hermanas y hermanos, incuso mis amigos y abuelos.-

-Entiendo ¿por qué no hablas con todos y arreglas las cosas?-

-No creo que quieran hablar.-

-Intentarlo es algo que necesitas hacer.-

Sin más que decir la enfermera sale de la sala en la cual paso la mayor parte del día, solo planeo y reviso los proyectos que la empresa hace día a día, para no tener problemas con las piernas salgo a caminar por la torre Ifel con la tonta esperanza de que un día veré a Phany.

-Buen día señor Cho, necesito un boleto de regreso a Corea.-

-Claro señorita Kim, ¿para qué día?-

-Para dentro de 6 horas no me interesa si es primera clase o turista.-

-Entiendo le llamare en cuanto lo compre.-

-Perfecto, una cosa más prepara mi habitación en la mansión Kim.-

-Por supuesto ¿la principal?-

-No, la que mis abuelos prepararon para mí y quiero que las demás estén también listas necesito que la familia y accionistas estén reunidos en la empresa para una semana antes de navidad.-

-Por supuesto señorita como usted diga, ¿necesita algo más?-

-Sí, que seas tú personalmente quien le informe a Tiffany y a mi hermano que tienen que ir y sin escusas, en caso de que pregunten el motivo de esta reunión es para reelegir al nuevo presidente de la compañía y es necesario que estén ahí.-

-¿Elegirá a alguien más?-

-Sí lo hare, señor Cho quiero que sea el vicepresidente y que pase tiempo con su familia por mi culpa no ha podido hacerlo.-

-No tiene por qué disculparse.-

-Bueno, te dejo espero tu llamada para confirmar mi vuelo.-

-Hasta pronto señorita.-

En cuanto termine la llamada sentí un remolino dentro de mí, que inicia en mi estómago y sube hasta mi cabeza, me recuesto en la cama tratando de suavizar la enorme cantidad de emociones encontradas.

-Este no es momento de ponerte mal Kim Taeyeon, tienes que preparar tus cosas, recuerda que aunque sea una junta tú ya no volverás a Paris.- me digo tratando de relajarme, aunque sea un poco para poder preparar mi maleta y documentos.

En el momento que logre calmarme, me dispuse a empacar y así pasaron varias horas hasta que mi teléfono sonó, era el señor Cho indicando que mi vuelo saldría en dos horas y que un chofer de la empresa me recogería, así como informarme que los accionistas en el extranjero ya han sido puestos al tanto de la situación y que estarán llegando en estos días a la empresa. Eso me alegro mucho, ya que podré ver a mi familia y amigos de nuevo, así como a Fanny, aunque quizás no hablemos de nosotras o de algo que no se refiera a las acciones que tiene en GSE, aun así me siento emocionada por verla.

Los minutos continuaron hasta que llegó la hora de abordar el avión, hora solo debo esperar a llegar a casa y arreglar las cosas. El vuelo fue tranquilo o eso creo ya que dormí todo el tiempo, cuando desperté solo faltaban veinte minutos para aterrizar.

-Bienvenida de regreso señorita Kim, es un gusto tenerla de vuelta después de tanto tiempo.- me dice un chofer con el cual solo he viajado un par de veces, es increíble que me enviaran a alguien que no conozco bien, pero ya no importa.

-Gracias, valla por mis cosas y quiero ir directamente a la mansión me encuentro agotada por el viaje.- le digo en tono serio, no lo conozco como al señor Do.

-Como ordene.-

Tal cual cumplió mis órdenes, llegamos a la mansión donde las sirvientas y mayordomo me recibieron feliz o eso parece, sinceramente no me importa ya que sé que nunca les agrado que viviera sola.

-¿Desea algo de comer señorita Taeyeon?-

-Por el momento no, solo dormiré, no quiero que nadie me moleste, si llega alguno de mis familiares, que se instale pero que no se atrevan a interrumpir mi descanso, una cosa más si el señor Cho llama pasen la llamada directamente a mi línea privada.-

-Como ordene.-

-Ah cierto, necesito que preparen un buen menú para esta navidad y antes de iniciar con ello quiero que me muestre al menos tres ideas para la cena, necesito que sea ideal para la familia Kim y sus amigos más cercanos, y que le digan al señor Cho que prepare las invitaciones, ¿entendido?-

-Sí señorita, tendré todo listo para cuando lo necesite.-

-Perfecto.- durante la plática pude notar su “cariño” por mi seguía igual, aun así debe obedecer siendo la heredera de los Kim.

Al llegar a mi habitación y verla exactamente igual que hace cuatro años me hace pensar que no he vivido nada difícil ni cruel, que cada uno de los problemas fueran solo un sueño. Cansada y deseosa de mi estrés desapareciera con un buen tiempo durmiendo, ya con la pijama puesta y mis cosas aun en las maletas me recosté y espere que el sueño llegara.

No sé cuánto dormí pero el ruido del teléfono privado me ha despertado, espero y sea algo importante, como para que me despierten.

-¿Quién habla?- digo con sueño muy evidente en mi tono de voz.

-Lamento despertarte pero quería decirte que la junta inicia en cuatro horas y necesito que llegues antes.-

-Claro, estaré ahí en una hora.-

-Entendido y una cosa más Tiffany se ha negado en quedarse en el hotel para los accionistas, ella junto con su hermano Tae Hee se quedaran en el departamento de él.-

-Lo imaginaba, gracias por todo señor Cho.-

-Es mi trabajo.-

Al terminar la llamada veo el reloj solo para notar que he dormido por más de 20 horas, casi un día, realmente me siento cansada de todo en este momento, al menos espero que lo que hare hoy y el resto de las festividades sea lo suficiente para dedicarme a mí y mi vida.

El entrar a la empresa con ropa sencilla una gorra, lentes oscuros y un cubre bocas muchos de los empleados no me reconocieron y fácil el llegar al elevador.

-Disculpe, pero no puede entrar sin autorización.- dice un guardia deteniéndome en la puerta del ascensor.

-¿Por qué no? Es mi empresa.- respondo, descubriendo mi rostro.

-¡Señorita Kim! Lamento no haberla reconocido.-

-No se preocupe, solo no haga escándalo de mi presencia me siento cansada como para tolerar sus constantes preguntas.-

-Entendido.- en cuanto entro al elevador cubro de nuevo mi rostro y suspiro.

-Veo que realmente no deseas que te molesten.- escucho decir a alguien detrás de mí.

-¿Jessica?- la veo para detrás de mí vistiendo un traje muy hermoso y elegante en tono rojo cereza, tacones del mismo tono y su maquillaje la hacía ver aún más hermosa de lo que ya es.

-Hola Tae, mucho tiempo sin vernos.-

-Lo sé, ¿Cómo has estado?-

-Bien, algo ocupada pero bien, y ¿tu?-

-Mejor, ya puedo dejar la cama y las terapias terminaron hace poco.-

-Ya veo.-

-Jess, ¿sabes cómo ha estado Tiff?-

-Ella bien, llego hace seis horas.-

-Ah ok.-

-Dime Tae ¿Cuándo dejaras de arruinar las cosas con Fanny y arreglaran las cosas?-

-Veo que esas palabras son muy comunes de escuchar últimamente.-

-¿En verdad? Sera porque realmente deberías dejar de jugar a ser Dios y vivir al día.- sin dejarme responder sale del cubículo ya que este llego al piso 15, en cuanto a la oficina presidencial estaba aún más arriba.

Sus palabras en aquel tono me dejaron pensando que realmente debo de hacer algo para poder recuperar a Fanny y la confianza de mi familia, además poder vivir tranquila y no intentar de salvar a todo el mundo.

-Buen día Tae, veo que aún tiene sueño.- escucho decir en el momento que salgo del ascensor.

-Así es señor Cho, mi cuerpo se siente cansado todo el tiempo, pero eso se debe a que mis sentimientos se han agotado de sobrevivir.-

-Lo imagino.- mientras platicamos vamos en dirección a la oficina.

-Dime ¿Quiénes será los que asistirán a la junta?-

-Sera su familia, Los Lee, Jung, Choi, Byun, Kwon, Park y Hwang, así como los representantes de los accionistas de Level, UMG, Sheraton y los representantes de los accionistas extranjeros y menores.-

-En otras palabras todos.-

-Exacto.-

-Perfecto, quiero que al terminar la junta se entreguen a mi familia y los cercanos las invitaciones.-

-Así se hará, por cierto ¿Quién será el nuevo presidente de la compañía?-

-Ya lo vera, confié en mi será alguien que es capaz de ser el presidente y tener en buen estado todo, hasta que llegue el momento de que tome el poder.-