-¡Así que se trataba de esto! - dijo una voz a lo lejos...

Al escuchar esa frase empuje a Jinyoung contra el sillón. Me levante de la silla en la que seguía sentada y voltee al lugar de donde provenía esa voz. Baro se encontraba parado debajo del umbral de la puerta, nos miraba con decepción y movía la cabeza de un lado a otro en señal de desaprobación.

-¡No es lo que parece! –me apresure a decir.

-A mí no me tienes que dar explicaciones – Dijo Baro muy molesto, después dio la media vuelta y se introdujo de nuevo por la puerta.

-¡No espera! – le grite, sin embargo no recibí ninguna respuesta, después volví mi cabeza para ver a Jinyoung que se encontraba de espaldas contra el sillón con una mueca de alegría.

-¡Tranquila, fue solo un beso! ¡Muy dulce por cierto! – Decía Jinyoung mientras pasaba su dedo índice por su boca.

-¡Eres un idiota! ¡Para mí no solo fue un beso, fue el primero! – le grite lo más fuerte que pude, después me restregué la palma de la mano sobre los labios para tratar de quitar los rastros de aquel beso.

-¡Ohhh, ohhh! Yo, yo lo siento - Comenzó a decir Jinyoung incorporándose y acercándose a mí. Me tomo de los hombros con ambas manos y me abrazo, después agrego –No lo hubiera hecho si hubiera sabido esto antes, pero eres muy linda como para dejar pasar la oportunidad.

¡Suéltame! – Me separe de él y me encamine hacia la puerta, después le dije enérgicamente – ¡No quiero que se vuelva a repetir! Lo digo en serio –Inicie a bajar por las escaleras mientras las ideas se acumulaban en mi cabeza.

-Estoy realmente enojada, ¿Cómo permití que pasara esto? ¿Alguna vez le envié señales equivocadas?, ¡No! No es mi culpa. Ni siquiera había pensado en la posibilidad de tener una relación de ese tipo con alguno de ellos… Pero con Gongchan casi… ¡No! ¿Qué estás pensando? – Pensaba mientras bajaba a reunirme con los demás.

Cuando entre en el departamento la mirada inquisitiva de Baro se posó sobre mí, yo solo lo mire con nerviosismo y sonreí. En seguida entro Jinyoung con una expresión de felicidad que iluminaba toda la habitación. Gongchan se acercó a Jinyoung mucho más tranquilo que cuando yo había salido de esa habitación.

-¡Discúlpame Jinyoung! Pienso que exagere y pensé mal de ti y tus intenciones, además sé que no hice lo que tú me habías pedido. ¿Estamos bien? –Dijo Gongchan avergonzado.

-¡Claro, no hay problema alguno! ¡Ya lo olvide por completo! –dijo Jinyoung dándole un abrazo a Gongchan.

Baro miro fríamente a Jinyoung pero este lo evadió. Por mi parte yo continuaba sin entender completamente lo que había pasado, pues solo conocía la mitad de lo ocurrido.

La reunión prosiguió, o mejor dicho dio inicio. El ambiente que reinaba ahora era cordial y armonioso. El resto de la velada trate de ignorar a Jinyoung sin lograrlo, mientras Baro me asesinaba con la mirada. Sandeul y CNU fueron los primeros en retirase a descansar mientras el resto de nosotros permanecíamos jugando cartas sentados sobre la alfombra de la sala.

-¡Chicos! – Dije mirando mi reloj que marcaba las dos cuarenta y dos de la madrugada – Ya me debo ir, es muy tarde.

-Yo te acompaño – dijo en seguida Gongchan.

-¡No! – Dijo rotundamente Baro – Esta vez seré yo quien la acompañe a casa.

Me puse de pie, y comencé a tomar mi abrigo y a colocar mi bufanda alrededor del cuello. Baro se adelantó para preparar el coche. Jinyoung se acercó para despedirse y solo trate de ignóralo, pero no pude, me acerque a él y lo abracé.

-¡No quiero que se repita! ¿Ok? Te considero un buen amigo y nada más. – Le susurre mientras lo abrazaba fuertemente.

-Lo entiendo – dijo al sepáranos mientras se borraba la sonrisa de su rostro – Ve con cuidado.

Mientras Jinyoung se retiraba a una de las habitaciones, Gongchan se puso de pie y tomo una pequeña caja, después camino hacia mí.

-¿Recuerdas lo que decía la nota? – Pregunto sin esperar respuesta, me tomo de la mano y me condujo al pasillo, comenzamos a bajar las escaleras sin soltarnos las manos, mi corazón se disparó cuando sentí el tacto de Gongchan sobre mi mano, no supe cómo llegamos a la planta baja, pues yo estaba fascinada mirando la espalda de Gongchan que bajaba paso a paso por eso cinco pisos.

Al llegar al lobby del edificio, encontramos al Guardia dormido, Gongchan me soltó de la mano e hizo una seña de silencio con el dedo índice sobre sus labios, después comenzó a caminar de puntillas y yo lo seguí. Al salir del edificio miramos hacia ambos lados en busca del auto que me llevaría a casa pero aun no aparecía.

-Aún hay tiempo –se dijo Gongchan, se paró justamente frente a mí y me dijo - ¿Sabes por qué me moleste con Jinyoung?

-¿Qué? -Díje asombrada, luego añadí – Pienso que sí.

-Entonces ya no es necesario explicártelo. ¡Toma! –Me dijo Gongchan ofreciéndome aquella caja - ¡Ábrela!

Al abrirla allí estaba mi cámara fotográfica, sonreí cual niño que recibe el regalo anhelado en su cumpleaños.

-¡Gracias! – le dije e impulsivamente lo abracé. Sus brazos comenzaron a rodearme, en seguida pude sentir el dulce aroma a vainilla y canela que desprendía su cuerpo. El acaricio mi cabello suavemente con una mano. Después de un momento sentí la aceleración de mi corazón una vez más, pose mi barbilla sobre su hombro e involuntariamente comencé a besar delicadamente el cuello de Gongchan...