The One (Fanfic) Capitulo 45: ¿QUE ACABO DE PASAR? 

POV | Jessica

Todos estaban bebiendo a excepción de mí. Nunca pensé que me cuidarían tanto solo por la noticia nueva. Me sentí bien con respecto a Donghae abrazándome y diciéndome que todo estaría bien, que podríamos tener el bebé, que estaba feliz. Pero nadie me preguntaba por lo que yo quería. Yo no quería ningún bebé. Yo quería mi vida tal y como estaba.

–¿Jessica? ––Donghae puso su mano sobre la mía y le dediqué una mirada. –¿Estás bien? Luces distante.

–Estoy algo cansada. ––Mentí con una sonrisa artificial.

–¿Quieres ir a DaeJeon? Déjame llevarte.

–Sí, creo que estaría bien que vaya a DaeJeon.

–Me quedaré contigo y le haré cariñitos a esa pancita. ––Amplió una sonrisa y sentí ganas de vomitar de nuevo.

–No, ¿Sabes qué? ––Subí las cejas. –Quisiera estar sola hoy, por esta noche. ¿Vale?

–Oh. ––Su rostro se apagó un poco pero no me interesó. Quería estar sola. Quería estar jodidamente sola.

–Ya vengo. Iré a ver a Taeyeon. ––Me levanté con la misma sonrisa falsa y caminé entre las personas hasta salir del The Zone.

Oh… Mierda.

Allí estaba Taeyeon y Tiffany, a la distancia bajo la lluvia. Era una escena así increíble de ver.

Mierda, ¿Qué hago?

¡Grítales!

¡No!

Ahm… Mejor me voy.

Di un giro sobre mis talones y de frente me topé con el rostro de Yuri.

–¿No es adorable?

Maldita sea.

–¿Qué estás haciendo acá? ––De inmediato me tensé.

–Mi vuelo sale mañana. Yo solo estaba pensando en venir y beber algo… Olvidarme de esta noche. ––Dijo, estaba algo ebria.

–Ya. ––Hice una mueca. –¿Te sientes bien?

–Estoy un poco nostálgica. La chica que más he amado está allá… Besándose con la que más odio.

¿Besándose?

Llevé mi mirada hacia ellas y entonces ambas ladearon el rostro hacia nosotras. Se sintieron atrapadas fuera de base, pero por alguna razón las sentí reír.

–Déjalas, te lo pido por favor. ––Volví mi mirada a la morena a mi lado.

–Yo no puedo hacerles nada, ya. ––Subió los hombros y se empinó la cerveza. –Yo ni siquiera tengo nada que hacer acá. ––Su voz sonó extraña, no entendí del todo sus palabras.

–Okay, sé que es extraño que diga esto pero… Déjame ayudarte. ¿Vale? ––Di un paso hacia ella y la sostuve entre mis brazos.

–¿Qué haces? ––Sentí a Taeyeon hablarme a mi costado luego de escucharla trotar hacia mí.

–¡Enamoradas! ––Exclamó Yuri mientras las lagrimas se deslizaban por sus ojos.

–Joder, Ayúdame. ––Le lancé una mirada al mojado cuerpo de Taeyeon quien se aproximó casi obligada.

–¿Qué diablos haces, Jessica? ––El tono de Taeyeon me estresó un poco.

–Solo, sostenla. Que no puedo sola.

–¿Qué pretendes hacer con ella?

–La llevaremos a DaeJeon.

–¡No! ¡No! Yo.. Yo sigo consciente. ––Levantó el índice la más alta con ambos ojos cerrados.

–Oh si, demasiado consciente.

–Tengo una idea. ––La mojada peliroja habló a mi diagonal y me tuve que contener para no

lanzarle una miradita de ‘sé lo que hiciste’

–¿De qué se trata? ––Acabé preguntando con una sonrisa oculta.

–Quizás sea un poco arriesgado pero… Es lo mejor.

Le lancé una mirada al estúpido rostro de Taeyeon que miraba a Tiffany como si hubiese dicho ‘mariposas y flores’ y acabé asintiendo.

–Vale, llevémosla.

*

POV | Taeyeon

Pedimos un taxi para Jessica y Yuri. Me sentí algo inquieta pero a la vez estaba contenta. Tiffany iba conmigo en la motocicleta guiando al taxista en dirección a una casa.

–¿Estás segura que no hay problema con llevarlas allí? ––Ladee mi rostro para preguntarle.

–No… No lo hay.

La voz de Tiffany sonaba diferente, se sentía diferente. La manera en la que me rodeaba la cintura. Me sentí protegida, por primera vez. Me sentí protegida por ella.

–Cruza acá. ––Ordenó y obedecí con la más amplia sonrisa.

Cuando llegamos a la casa me sentí abrumada por el tamaño.

–Wow, imponente.

–Mis padres no están acá. ––Dijo ella y subí las cejas.

–¿Es tu casa?

–Sí, pero por favor no me veas así. ––Acortó nuestra distancia y puso sus manos en mi rostro.

–¿Juniel está acá?

–Sí, está abajo. Decidió dormir en el sótano.

–Okay, eso es extraño.

–Le asusta el resto de la casa. No creo que note que entramos.

Sonreí unos instantes y ella me sonrió de vuelta.

–¿Qué?

–Nada, es solo que eres brillante.

–¿Lo soy?

–Eres más que eso. ––La apreté contra mí y nos abrazamos unos segundos hasta que el taxista tocó la bocina y pisé la realidad.

Joder.

Ayudamos a Yuri a salir. Estaba hablando mucho, pero nada muy escandaloso.

–Okay, ¿esta fue tu idea? ––Jessica habló irritada y yo me ocupé del cuerpo de Yuri.

–Abran ustedes dos, yo la llevo a ella. ––Ordené y Jessica obedeció arrastrando los pies.

Tomé el pesado cuerpo de Yuri en mis brazos y la cargué como si fuese un bebé, pisotee a paso lento hasta la entrada de la imponente casa y al poco tiempo la posé sobre el sofá del living.

–Está un poco mojada. ––Hablé y Jessica me lanzó una mirada. La conocía bien.

–Yo me quedaré con ella.

–¿Estás segura? ––Subí las cejas.

–Sí, ustedes dos… Mejor vayan a quitarse esa ropa y a, secarse. Si pueden.

Tensé la mandíbula, el comentario fue totalmente inapropiado pero no podía enojarme.

No tenía espacio para ese sentimiento dentro de mí.

–La cocina está al final de ese corredor. ––Tiffany señaló. –Puedes comer lo que quieras, solo no hagas mucho ruido. ¿Vale? Mi hermana no sabe que estamos acá. Podría despertarse y usar la escopeta y… Mejor no.

Los ojos de Jessica casi escapan de su cabeza.

–Bromeo, es broma. ––Tiffany acabó sonriendo y por alguna razón eso me pareció y.

Corrimos subiendo por las escaleras como dos adolescentes huyendo de la policía. Nuestras ropas empapadas. Pegadas a nuestros cuerpos. La acorralé al pasillo repetidas veces plasmándole besos sobre los labios, en ocasiones nuestros dientes chocaron pero eso solo generaba más risas.

–Shh. Es aquí. ––Ella puso su índice sobre mis labios cuando el jugueteo hasta la habitación cesó y ambas ingresamos en un gigantesco cuarto.

–Wow. ––Me quedé congelada unos pocos segundos. La cama era inmensa. Las cortinas y decoración, era ridículo.

–Que no te asuste, no murió nadie acá. ––Tiffany me robó una sonrisa mientras cerraba las cortinas y entonces, por primera vez en toda mi vida. Mi pecho se sacudió dentro de mí.

Hubo un silencio entre nosotras. Tiffany se acomodó a mi frente y respiró profundo mientras con sus delgados dedos comenzaba a retirar botón por botón la ajustada y húmeda blusa que llevaba.

Tragué saliva, solo me quedé mirándola. Aún pensaba que se trataba de un sueño. Aún creí que estaba soñando. La poca luz de la lámpara, daba perfecto contra su cuerpo. Cuando la prenda tocó el suelo me sentí seca.

POV | Tiffany

Estaba temblando, estaba muriéndome del miedo. No supe qué diablos había pasado conmigo. Quizás era la felicidad que estaba abrumándome. Quizás era que por fin había perdido la cabeza. Quizás simplemente, era ella.

Los ojos de Taeyeon sobre mi semi-desnuda piel. Solo sentir que me observaba me erizaba entera, sentí que se levantaron cabellos en zonas en las que ni sabía que tenía. Todo eso, solo con sentirla mirándome.

Dio un paso hacia mí y sentí perder la concentración. Retrocedí y pegué mi espalda en la pared trasera. Bajé mis manos hasta el borde de mi ajustado jean y le lancé una mirada.

Mis ojos más grandes que nunca, Taeyeon se aproximó hasta mí y acorraló mi cuerpo con sus brazos. Me contraje una vez sus labios tocaron mi cuello. Mis rodillas estaban perdiendo el equilibrio. Yo estaba perdiendo la razón.

Las manos de Taeyeon se posaron en mi cintura mientras su lengua tocaba mi piel con suavidad. Mordí mi labio, tenía el jadeo en la punta de la boca. Me aferré a su cuerpo y tomé con ambas manos su rostro. Sus húmedos labios se posaron contra los míos y me dejé invadir por esa sensación. Por esa magnífica y excitante sensación.

Me giró, besó mi espalda y desvarié cerrando los ojos. Se deslizó por mi cuerpo y me retiró el jean con las manos. Levanté ambos pies para terminarlo de retirar y entonces volvió a subir por mi piel dibujando una línea con su lengua hasta mi nuca. Ahora sus dígitos, suaves y a la vez carnosos me acariciaban la piel de la cintura. Me ericé entera, estaba volviéndome loca. Aparté mi cabello hacia un costado y ladee el rostro para verla, sus ojos nunca estuvieron más brillantes. Mi respiración nunca estuvo tan agitada.

–¿Estás bien? ––Susurró detrás de mi oreja y sonreí.

–Perfecta.

Pude usar cualquier otra palabra para describirme. Pero no podía pensar. Estaba perfecta, pero a la vez impaciente y asustada.

Me giré y volví a sentir con la espalda, la fría la pared. Tímidamente pasé mis dedos hasta tocarle el borde de la ajustada blusa a Taeyeon. Bajó la mirada a mis accio