The One (Fanfic) Capitulo 20: PESADILLA

POV | Taeyeon

Sentí que había dormido toda una eternidad cuando la puerta de la habitación sonó, no quise abrir los ojos y enfrentarme con el día.

–¡Taeyeon! ––Era mi hermano.

–¿Uhm? ––Arrugué la  cara ladeando el rostro para verlo.

–¡Oh, gracias a Dios! ¡Vamos! ¡Arriba! ––Lucía alterado, más de lo normal y estaba tomando varias prendas de vestir del armario de Seohyun para meterlas en un bolso que traía consigo, allí  me preocupé.

–¿Qué pasó? ––Levanté mi torso rascándome el ojo derecho.

–Taeyeon, puedo explicarte que pasó cuando vayamos en camino. ––Me observó con tal seriedad que me hizo tragar saliva.

–Okay, está bien. ––Lancé una mirada al pesado cuerpo de Tiffany y suspiré. –Supongo que te dejaré acá.

–¡Taeyeon!

–¡Okay! ¡Okay! ––Me levanté y luego de ponerme presentable salí de la habitación con él. –¿Vas a decirme que está pasando? ––Pregunté antes de toparnos con la salida.

–Escucha, sé que no te gustan esta clase de noticias cuando no están completas, y si te lo digo ahora comenzaras a hacer preguntas que responderé con un montón de ‘No lo sé s’ ¿Me entiendes? Así que prefiero que guardes silencio hasta que lleguemos allí y puedas hacer todo el escándalo que quieras después. ––Habló tan deprisa y con tan severa expresión que supe que aquello no se trataba de algo mínimo, algo extraño pasó y no era bueno.

Subí al auto en silencio como me lo pidió y aceleramos, cuando noté el rumbo que estábamos tomando el corazón subió hasta mi garganta, la frente de Ji woong acumulaba gotas de sudor como si hubiese corrido a una maratón y ahora yo comenzaba a sentirme ansiosa.

Oh, no.

Nos detuvimos en el hospital de seoul y mi corazón se detuvo.

–Ji woong, ¿Qué pasa? ––La lancé una consternada mirada.

–Entra, yo aparcaré el auto. ––Fue todo lo que pudo decirme y entonces me bajé dando pasos indecisos hasta la recepción. A mi derecha me topé con el irritado rostro de Jessica y junto a ella se encontraba Kyuhyun, Heechul y Hangeng.

Tragué saliva.

 –¿Alguien me puede decir que está ocurriendo? ––Pisé el borde del control y esperaba respuestas.

–Es Seohyun. ––Kyuhyun bajó la mirada y a mi mente vino lo peor.

–¿Qué pasó con ella? ––Detallé los rostros de todos.

–Taeyeon, tenemos miedo de contarte porque siento que querrás matar a alguien así que primero debes prometer que…

–¡Prometer una mierda! ¡Me dicen ahora mismo que está pasando o buscaré a alguien que lo haga! ––Intervine a las palabras de Jessica y Heechul se levantó pareciendo ser el único que me diría lo que estaba pasando.

–Seohyun sufrió un ataque al corazón.

Perdí todo el color de mi piel al igual que el balance de mi cuerpo por unos segundos.

–Q-Que… ––Me tomé la cabeza, sentí desvariar.

–Taeyeon, está muy delicada. Aún están buscando la raíz de lo que pudo haber causado eso… Así que estamos esperando. No podemos culpar a nadie ni mucho menos matar a nadie, solo podemos esperar.

Mi cerebro aún no procesaba sus palabras, pensé que en cualquier momento caería tendida al suelo.

–¿Taeyeon? ––Escuché la voz de mi hermano asomarse por mi espalda y sostenerme cuando sentí que me caería hacia atrás. –Hey, Hey… ¿Estás bien? ¿Qué pasa?

–¿D-Donde está ella? ––Retomé la compostura y parpadee repetidas veces.

–¿Taeyeon, estás bien? ––Heechul me lanzó una preocupada mirada.

–¿Dónde está ella? ––Volví a preguntar con un mejor tono de voz.

–La están atendiendo, esperan a los resultados de su análisis de sangre… Ah, y quieren ponerse en contacto con sus padres, por la magnitud del asunto.

–Bien. ––Caminé hasta la recepción en busca de información sobre el doctor que atendía a Seohyun manteniendo el control solo porque no podía perder la cabeza en ese momento, al menos, no podía perderla más.

Luego de dar los datos necesarios regresé en silencio a la sala y me cubrí la cara con las manos pensando en las mil y un posibilidades en las que a mi compañera de cuarto podría haberle dado un ataque al corazón. Me torturé por unos 40 minutos hasta que un sujeto vestido de blanco entró en la habitación y todas las miradas se posaron sobre él.

–De acuerdo, esta información se supone que debe dársele a los parientes de la paciente, pero luego de ponernos en contacto con sus padres. ––Hizo una pausa. –Quienes están fuera de Corea, nos autorizaron hacerles llegar la información.

Me levanté y sentí como todos se alteraron.

 –Basta de prólogos, Doctor. Suéltelo ya. ¿Se va a morir? ¿Ha muerto? ¡Dígalo! ––Estaba perdiendo la cordura.

–¡Taeyeon! ––Exclamó Jessica.

–Ah, les sugeriría que mantuvieran la calma.

–¡Hable de una buena vez por favor! ––Exclamé.

–Los ataques cardíacos son causados por distintas causas, pero la principal se conoce como la obstrucción de las arterias que conectan al corazón, creemos que la paciente experimentó alguna clase de actividad física excesiva que pudo haber generado un coagulo de sangre en alguna de sus arterias coronarias paralizándole el normal funcionamiento del órgano vital. ––El médico comenzó a escupir su mierda y yo sentí que explotaría.

–¡Escúcheme ahora usted! ––Le tomé de la bata y lo aproximé hasta mi rostro. –¿Tengo pinta de haber ido a la escuela de medicina? ¿Uh?

–Señorita. ––El médico abrió los ojos como platos y todos a mi espalda se levantaron para detenerme.

–¡Va a decirme, en castellano! ¡¿Qué tiene Seohyun?! ¡Va a decírmelo! ¿Me entendió?

–¡Taeyeon! ––Me apartaron de él y éste se estiró la ropa haciendo señas a un par de guardias que se acercaban de prisa a sus espaldas.

–Bien, su amiga en efecto sufrió un ataque cardíaco. Y según los análisis de sangre lo causó una sustancia conocida como dietilamida de ácido lisérgico. ––Volví a fulminarlo con una aplastante mirada y lo sentí temblar. –A-Ah, mejor conocida como LSD.

–¡¿Qué?! ––Todos hablaron al unísono con muecas en sus caras.

–¿Seohyun fue drogada? ––Habló Kyuhyun. –Imposible, ella no consume nada… Mucho menos esa clase de alucinógenos.

–Pues alguien debió dársela, dijiste que minutos antes de que se desmayara estaba comportándose extraño. ¿No? ––Habló el médico y yo por fin estuve sin palabras en mi boca.

–Sí, estábamos bailando normal, ella no bebió nada más desde su último trago y había sido hace casi 1 hora.

–Los efectos suelen aparecer entre 30 y 60 minutos luego de ingerida la sustancia.

–Ella comenzó a estar muy contenta, aunque inestable. Yo pensé que solo se trataba del alcohol o la emoción, luego su rostro pareció estar alterado, empezó a temblar y lo siguiente fue verla tendida en el suelo sin respiración. ––El muchacho estaba pálido.

–Si bueno, haya sido como haya sido. Hemos localizado esa sustancia en su sistema. Y tomando en cuenta sus palabras, al parecer era la primera vez que la joven consumía algún tipo de estupefacientes. Sin embargo la causa de un ataque al corazón de este calibre debe provenir de algo más. ––Allí todos volvimos a guardar silencio. –Y es que en ella reside un problema que puede venir de familia, es propensa a tener ataques al corazón y la droga solo le alteró lo suficiente como para que eso ocurriera.

Maldita sea.

El doctor se alejó de nosotros dejándonos en calma con sus últimas palabras y todos nos miramos las expresiones completamente aterrados.

–¿Quién diablos pudo haber hecho algo así de enfermo? ––Preguntó Hangeng.

–No tengo idea, y es que estuvo conmigo toda la noche. ––Kyuhyun habló.

–¿Estás seguro de eso? ––Jessica se cruzó de brazos.

–Si, por supuesto… Digo, el único momento en el cual nos separábamos era cuando necesitaba ir al baño.

–¡Allí está! ––Jessica chasqueo los dedos. –¡El baño!

–¿Qué?

–Alguien en el baño tuvo que poner el LSD en su bebida.

–Sé quien fue. ––Hablé casi en un hilo de voz y todas las miradas se posaron en mi cara.

–¿Lo sabes? ––Preguntaron casi todos a la vez.

–Es esa chica, castaña… Una vez Seohyun estaba peleando con ella en el cuarto y, ella dijo que se vengaría.

–¿Castaña? ––Kyuhyun perdió de nuevo el color de su rostro y cuando observé a Jessica pareció desvariar también.

–La conocen. ––Afirmé entrecerrando los ojos.

–Sooyoung. ––Dijo Jessica.

–¿Sooyoung? ¿Quién jodida madres es Sooyoung? ––Arrugué la cara.

–Mi hermana. ––Kyuhyun habló y todos quedamos fuera de base.

*

Salimos a paso rápido del hospital y yo no dejaba de discutir con Jessica al respecto.

–¡Conocías a esa puta! ¡¿Cómo no pudiste informarnos de algo?!

–¡Por Dios! ¡No la creí capaz de hacer nada tan drástico como esto!

–¿¡Ah no!? ¿¡Y tuviste que esperar a que casi asesinara a Seohyun para reaccionar?!

–¡Taeyeon! ––Se detuvo cerca del auto de Ji woong. –¡Esto no es mi culpa! ¡¿Entiendes?!

–Tú me llevaras hasta tu habitación y me enseñaras a esa tal ‘Sooyoung’ y lo harás ahora mismo.

–No.

–¡Jessica! ––Le tomé del brazo.

–¡No! ¿Quieres que vaya a visitarte en la cárcel después de eso, también? ¡Podrías matarla! Nunca sabes cómo sacarle información a las personas, ¡nunca lo has sabido!

–¡No! ¡Tú eres la que nunca ha sabido cómo lidiar con esas personas! ¡Esa clase de gente no habla! ¡Nunca lo hace! ¡Amenos que se le presione!

–¿Con una pala contra sus dientes? ¡¿Estas demente?!

–¡No pensaba llevar una pala, Por Dios!

–Oh seamos realistas. ¡Claro que sí!

–¡Okay es suficiente! ––Ji woong apareció detrás de nosotras. –Nadie va a matar a nadie con una pala. Hay que ser más inteligente y hablar con algún experto que pueda poner en su lugar a esa chica. Y no… No serás tu Taeyeon.

Hubo una pausa.

–Bien, ¿Cuál es tu idea entonces? ––Me crucé de brazos.

–Bueno, pues tenemos dos opciones. Thauros, o Zeta