Capítulo 2.

Tiros al Blancos rojos.

Okay, había dicho que no era amante del dinero, de hecho, no lo soy actualmente, ¿bien?.

Pero ahora, es un momento en donde el dinero se me es un poco necesario, a diferencia de mi abuelo, en sí gasto, compro tonterías en lo que va de la semana, creo que el dormitorio que compartimos Sakura, y yo, está lleno de tantos regalos que mi abuelo, junto a mi obsesión con las cosas inutiles, aumentan.

¡Estoy viendo un pony de pelpa, con un color de arcoirís en sus patas!

Okay, necesito comprarlo ya. Tal vez me sea necesario más adelante...o quizás, a Sakura, no sé...¿tal vez para limpiar su baba de la almohada?.

Hmm, ni sé para que me servirá comprar ese pony de pelpa...pero, es lindo, tierno, y con una mirada que te dice, "Comprame ya, o te arrepentirás", en serio está tan tierno, que provoca comprale uno a Sakura, aunque lo rechace.

Hmm, esto es díficil, en serio, Sakura no es amante de los regalos, no le gusta cuando reciben regalos de personas con otra intención que esa, más que acercársele, y confesar sus repectivos sentimientos hacía ella, y que el chico, vaya a un camino de rechazo.

Recuerdo, que una vez, un estudiante que cursaba en otro año, en nuestra respectiva universidad, le había dado como regalo, un celular de último modelo por la compañia, Sakura de inmediato lo rechazó, y le pidió al chico, cordialmente, que no lo haga más, ni a ella, ni a otra chica, porque para ella conquistarla es más importante, con el "corazón"; y no con regalos costosos, y material.

Hmm, Sakura es tan ella.

En fin, no he sido  amante del dinero, ni mi abuelo, ni yo, el dinero es algo más sostificado para el banco de mi abuelo.

Ah, mi abuelo tiene un banco en Corea del Sur, y está pensando abrir otros bancos más, en otras provincias coreanas, tengo entendido, que su próxima parada, para impulsar más su empresa financiera, será en Daegu, y Gangnam-gu.

Tal vez, solo un tal vez, mi abuelo empiece a contratar a personas para que se encargue de la contabilidad de sus ganancias en el banco.

Mi mirada sube ligeramente, hacía aquel vidrio que llamó mi atención, en realidad, lo que está adentro de ese cristral tan tentador.

Está el pony que me gustó. 

Por cierto, ese cristal está tentador romperlo. Está tan limpio, y brillante.

Por suerte, me encuentro en esté centro comercial sola, nadie del circulo de amistad de Sakura se encuentra "vigilando" mi paso. Antes de venir acá, me asegure que Sakura no se despierte, y que la puerta se cerrase correctamente.

Creo que le hubiera mejor puesto un candado a la cerradura de la puerta, para que nadie moleste a Sakura, o tal vez no.— ¿Lo vas a comprar, o vas a romper el cristal para robarlo? Uh-h.

Escucho la voz de alguién detrás de mí, me volteo, rápidamente, y mi vista no encuentra a nadie, más que a los lejos una multitud de personas se pegan entre ellas, llega a mi mente un pensamiento de descuento, en ropa, o lo que sea, pero lo descarto rapidamente, ya que en la entrada del centro comercial, había un cartel que decía que hoy no habría descuento.

Creo que en un segundo, me había ilusionando bien horrible.

¡Los descuentos en los centros comerciales son tan sagrados!. Dios.

Me muevo un poco, buscando esa voz que escuché hace un minutos atrás de mi, mientras me perdía en mis pensamientos sobre los descuentos...falsos.

— Para ser una ladrona, debes al menos saber en donde vienen las voces que te hablan.

Vuelvo a escucharlo, y era una voz de un joven adulto, en étapa de ser un adulto, woah.

— No quiero ser ladrona, y menos aún, escuchar su voz. —Le digo a él, fríamente, colocanco mi mirada sobre mi hombro.

Al lado de mí, provenía esa voz masculina, no logro entender porque no lo noté en el reflejo del cristal.

Él era un chico alto, con facciones coreanas en su rostro, realmente era un asiatico, como yo.

Él parpadea suavemente, ni siquiera noté su movimiento de mano, que paso desde los lados de su cuerpo, a tocar la superficie del cristal. Colocando la palma de su mano, abierta, en la superficie brillante del cristal.

— ¿Crees que mi futuro sea brillante, como el del cristal?— Pregunta él.

Su mirada pasó de mi rostro, hacía el vidrio de la tienda, en donde muestra aquél pony que me parece tan tierno, y tentable de gastar tu dinero en comprarlo.

Parece que el cristal, en vez del pony, es más interesante que mantener una batalla de mirada conmigo.

¡Yo quiero ganar en quien pasa más tiempo mirando  al pony!...o lo que sea del cristal.

— ¿Crees que ese pony de pelpa, podrá salir de ahí, como Tiro al Blanco, y Jessie?.— Vuelve preguntar él, vaya, dos preguntas que responder, Chaeyeon.

¿Quién es "Tiro al Blanco", y "Jessie"? Woah. Sus nombres no se me hace conocidos.

Mi rostro se transformó a una cara de confusión. Tanta "claridad", al tema, me ha hecho sin entenderlo. Nótese mi mal, y raro "sarcasmo".

Fruncí el ceño, ligeramente, él sigue con su vista, realmente, unida hacía el cristal brillante, con algún pegamento inreversible, sí, que sí.

Mis labios iban a pronunciar unas cuantas palabras que saldría, pero fueron interrumpidas otra vez por ese chico asiatico, que tal vez sea coreano, japonés, o chino.

Sin embargo, apuesto más a la casilla coreano, no me equivoqué cuando adiviné la nacionalidad de Sakura unnie, Hitomi-Chan, y Nako-Chan, creo que sus facciones de caras son un poco delatadoras, sí que sí.

 — Realmente, eres un ser inculto, respecto a la serie de animación de los juguetes, Toy Story.

Ah, ya mi cerebro tomó su lugar de adorno de siempre.

Él a mencionar la pelicula, reconocí al instante a que se trataba, ¿es qué había más "Tiros al Blanco", y dobles "Jessies", en la industria del entretenimiento?.

¿Tan fuerte me alejé del entretenimiento en la llegada al universidad?. Ah, esté chico asiatico capaz, y sea del mundo de las peliculas.

Es que la universidad no da tanto tiempo, sin embargo, yo aquí estoy en un centro comercial, gastando mi tiempo en cosas tontas, y lindas, já.

Me lo imagino a él, como un príncipe asiatico azul.

Hmm, sí, que sí.

Su rostro es un poco atractivo, oh, por Dios, Chae, ¿por qué piensas que ese chico es atractivo?. Nadie te parecía atractivo hasta ahora, jú.

Sólo alguien en especifíco.