Ustedes dos deben salir.

Ella me ama tan bien.

Capítulo; 13

Ustedes dos deben salir.

Me encuentro caminando en el pasillo, para mi siguiente clase. Esté mismo pasillo que ayer mismo en la noche fue testigo en como Sakura me tomaba de la mano, y mis sentimientos, junto a los nervios que azotaban todas las extremidades de mi cuerpo se apoderaba en cámara lenta, completamente a dejarme en un estado similar a shock, e incomodidad.

Pero bien que te gustaba que Sakura tomase tu mano. Doy un paso lento hacía adelante, el piso oscuro, de madera, de la universidad, recibe como las suelas de mis zapatillas se impacta contra él. El suelo en que me encuentro es de madera oscura fina, muy elegante en sí, en algunos pasillos de la universidad la madera pegada al suelo es clara, muy suave, eso es en otros pabellones, como el departamento de Artes Liberales, en esa el suelo es completamente claro, seguido del pasillo que desciende al lugar en donde tomarás tu siguiente parada. Sin embargo, ahora mismo me encuentro casi por delante del departamento de Ciencias, es muy amplio, ¿qué puedo decir?.

Respiro un poco lento, mis fosas nasales hacen un poco más el trabajo, mientras a lo lejos veo una silueta que se me hace muy fácil de asimilar de quien es su dueño, ¿y cómo no? Si la única persona que ve mis ojos la reconoce al instante, y con la ayuda de mi cerebro, no hay que quitarle protagonismo, ¿eh?.

Su silueta se aproxima hacía mí, y es nada menos que la presencia de Sakura que mis ojos captan al instante. Sakura se aproxima hacía mí, en pasos comparados a los míos, que son lentos, mezclados con la pereza que se alberga adentro de mi cuerpo, sus pasos en llegar hacía mí, que aproximadamente en cinco segundos, ella se logra colocar enfrente de mi cuerpo. Enfrente de mí, no se encuentra a mi lado. Sus pasos eran rápidos, a diferencia de los míos.

La mirada de Sakura busca la mía, que se encuentra en términos de “Perdida de interés”; en querer empezar una conversación con ella, al menos mi corazón, junto a las extremidades de mi cuerpo se encuentra en un perfecto estado de calma. Mi cuerpo no se encuentra temblando, y por un lado a eso, me gusta la idea de que no ha empezado a temblar por la considerable presencia de Sakura que está enfrente de mis ojos.

Mi cuerpo no está temblando, y es un maravilloso logro para mí. Sakura es la única persona que logra hacerme estar a flor de nervios, y no se lo agradezco.

Miro hacía su pequeño rostro, mi vista cambia de lugar en sus perfectos ojos castaños, y luego mi vista se detiene en sus labios. Noto que tiene una pintura de labios suave para la ocasión, con brillo, y su maquillaje natural perfecto, comparado al mío, creo que logre colocar la base en mi rostro, o eso creo, no recuerdo.

Puedo sentir la pesada mirada de Sakura penetrando lentamente mi alma, mis ojos. Su mirada está en mis ojos. Decido hablar, para evacuar un poco la tensión que siento en el ambiente.

—Estuviste genial, Kkura-chan—doy una media sonrisa a ella.—Tu discurso fue tan puro, y autentico.

Sakura está frente de mí, la chica que hace que mi cuerpo pierda el control de sí mismo, y hace que sienta cosas nunca antes experimentadas, como un terremoto muy creciente adentro de mi cuerpo, causado por ella misma.

Decido dar un paso hacia adelante, acercándome un poco más a Sakura, no esa cercanía…como la otra vez, de la pequeña discusión para que Sakura aceptase el pony, no, solo me acerqué hacía ella, y el dueño de esa acción fue por voluntad propia, no fue por mi cuerpo que toma decisiones por mí.

La mayoría de los estudiantes pasan de nosotras, unos que otros, puedo sentirlo, fijan su ertida mirada en Sakura, y en mí, como esperando algo más “caliente”, de parte de nosotras.

—¡Bésense ya! ¡Vayánse a un hotel! ¡Hagan hijos, y no pierdan el tiempo mirándose una a la otra! —alguien grita detrás de mí, lo suficientemente alto para que las dos lo oyéramos, seguido de otros estudiantes que pasaban por el pasillo, para detenerse al instante, y voltearse hacía nosotras dos. Con las miradas de los chicos en mí, no podría describir que intenciones tenía en sus rostros, pero aseguraba que era una mirada de lujuria, y lasciva.—¡Quiero que me den sobrinos ya, Dios!.

Sakura parpadea rápidamente, sacando sus ojos de mí, para dirigirlos, como yo, en busca donde venía esa voz clara, y entendible, me volteo hacía dónde provenía ese grito, y pude percibir a una chica baja, creo que de una altura casi parecida a la de Nako, pero con más centímetros, y con su color de cabello castaño rojizo, si no fuera castaño, diría que la chica es pelirroja clara, pero no, su color es castaño rojizo, parecía una autentica muñeca.

Esa chica tiene por nombre Chaewon, y es mi amiga.

Ya la comencé a tutear, y ella no le da tanta importancia como para ofenderse, a pesar de que llevamos pocos días de conocernos, la chica es genial, callada, reservada para si misma, y con un aura de parecer una autentica muñeca de porcelana, ah.

Chaewon tiene el representativo uniforme universitario que exige a veces la universidad, para eventos sumamente importantes, como la reunión que estuve hace dos horas atrás, —espero que no me gane una sanción por no usar el uniforme universitario, no estaba cerca de mi secuaz anti-sanciones, así que es probable que obtenga una—su uniforme consiste en una camisa manga larga, ésta blanca, una corbata gris, con trazadas líneas verticales, y horizontales, emanando así, no solo un color, también otro, como el azul cielo, y con un chaleco formal gris se encontraba cubriendo por dentro la corbata, seguido de la parte superior de su cuerpo, su torso, y lo complementaba con una falda negra, bastante oscura, y sus zapatos, que tenían medias largas hasta sus rodillas, también negras. Es un poco extraño que no haya traído el saco negro que complementa el uniforme, junto a la insignia de la universidad.

Ahora la mayoría de las miradas que se encuentran en el pasillo, se posiciona entre nosotras dos, Sakura, y yo, fue por acción de Chaewon, una buena amiga mía, a pesar de ser un poco menor que yo, por un año, nos fuimos acercando poco a poco, hasta que nuestras preferencias hiciesen “click”, y convertirnos en buenas amigas. Tenemos muchas cosas en común, o eso pienso yo.

Más chicos se acercan hacía nosotras, bueno, un poco alejados de Sakura, y yo, ven desde lejos, con una mirada llena de lujuria, deseo, e incluso, la excitación se logra ver en sus rostros. El deseo perdura en las expresiones faciales de un chico que está muy lejos de nosotras, y es el mismo que estaba inhalando lo que fuese aquella sustancia desagradable al lado de mí, el mismo chico, que coincidencia, lo logro percibir al instante, luego de que mi mirada pasase de Chaewon, hacía él.

Bueno, ahora tenemos a casi media universidad con la mirada pegada en Sakura, o en mí, tal vez quieren ver algo “emocionante”, lástima que están perdiendo su tiempo en nosotras.

—¿Qué estás diciendo? —articulo, frunciendo el ceño aún más. Chaewon se acerca hacía nosotras, y puedo sentir más miradas de lo normal sobre nosotras, junto a la mirada de Sakura recargada en mi espalda, por detrás, mirando detenidamente la escena.

Si antes me sentía tímida, e incómoda respecto a todo esto, ahora más, no me imagino el rostro de Sakura en leves colores carmesís adornar cada espacio de su perfecto rostro. Sakura debe estar sonrojada, no sé, pero mis mejillas se sienten calientes dentro de mi cavidad bucal, de pronto siento calor, está haciendo calor, ¿no? ¿o sólo soy yo?. Siento mi rostro caliente de la vergüenza, a tal grado de bajar la cabeza al suelo, ¿por qué tendría yo que bajar con vergüenza mi cabeza, en vez de ser Chaewon? Es ella quien debería sentir la presión de las miradas puestas en mí.

Chaewon no parece tener ni una pizca de vergüenza, arrepentimiento, o timidez en su rostro, solamente sonríe, mostrando sus dientes, y agrega,—¿Qué? Ustedes dos deben salir.

Y ahí es donde mi mente se entorna a un torbellino de confusión, y vergüenza, aún con mi cabeza cabizbaja puedo sentir como todo mi rostro se caliente, y puedo asegurar, que un color rojo carmesí no faltaría desapercibido en mi rostro en esté preciso momento. Estoy desconcertada.

¿Qué está pasando aquí?.

Oh, vamos.

¿Por qué me estoy sonrojando?

Like this story? Give it an Upvote!
Thank you!
Kkura-Chaeng
Amiga, date cuenta, plox. (Refiriéndome a Chae, kkk).

Comments

You must be logged in to comment
ailyn2111 #1
Chapter 24: Con esa confesion hasta yo me caso xD
Asi que tendremos mas celos por parte de kkura? 7w7
ilovetaekeyonly #2
Chapter 24: Aw que linda la confesión de kkura, espero chaeyeon deje de pelear con sus sentimientos y acepte que esa diosa japonesa es de ella
ailyn2111 #3
Chapter 22: A esperar un siglo entonces :'c
gracias por el cyber cruasan :3
ailyn2111 #4
Chapter 22: A esperar un siglo entonces :'c
gracias por el cyber cruasan :3
Jane23_Tiff
#5
Chapter 22: Ay... :'c ya me puse sad ;-;

Yo AMO esta historia. Y muchas gracias por haberla escrito :)

Las escenas de los besos siempre me tienen con la mente en otro unvierso XD son wow, son G E N I A L E S. En serio, amo esta historia.

Y bueno... nos tocará esperar a que actualices :'c pero muchas gracias por tu trabajo hasta ahora <3
Jane23_Tiff
#6
Chapter 21: Sakura literalmente va MUY en serio con eso de que Chaeyeon la coma o.o

Dios mío, ayúdame si eso sucede XD
ailyn2111 #7
Chapter 20: wow, chaeyeon deberia responderle mas seguido asi a sakura 7w7
Jane23_Tiff
#8
Chapter 20: Ayy... padre santo. La tensión ual que emanan estas dos es demasiado palpable :')

Ese beso 7u7 espero con ansias el siguiente capítulo!!
Jane23_Tiff
#9
Chapter 18: Ayy weee!!!! Por qué lo dejas ahí!!! ㅠㅠ
CutePrincessMaknae
#10
EL PRIMER FIC DE IZONE ES ESPAÑOL, VOY A LLORAR TIO, JODER T-T