HyeSun la había reconocido, sin lugar a dudas. Se inclinó sobre el banco hundiendo el rostro entre sus brazos.

Sintió como alguien la movía de los hombros y le llamaba.

—Nim… Despierta tienes que desayunar algo. —era la voz de Salieri. —Nim, vamos despierta. —Sintió como su amiga la movía un poco más brusco esta vez.

Abrió los ojos de golpe, dándose cuenta que estaba en su habitación, no estaba en el pre universitario y HyeSun no era su maestra de inglés.

—¿A qué día estamos? —Salieri la miró preocupada.

—Es domingo. Creo que te ha hecho daño dormir tanto, anda levántate ya pasa de medio día y no has comido nada.

¿En serio había dormido tanto? Se levantó y llegó hasta la cocina; tomó un plato y se sirvió cereal con leche, tomó dos panes tostados y se sentó a desayunar en pleno medio día. Aún se sentía triste por lo de ChanYeol, no podía negarlo aunque el día de ayer KyungSoo había hecho que olvidara su tristeza por un momento.

Terminó de desayunar y fue a la sala, Salieri estaba viendo televisión en el sofá.

—Voy a ir a comprar cosas ¿quieres venir?

—Tengo tarea qué hacer, ve tú.

Y no era mentira, realmente tenía tarea qué hacer. Entró en su cuarto, sacó los libros y cuadernos de la mochila y se tiró sobre su cama. Había tantas cosas qué hacer, capítulos que leer, capítulos que traducir, corregir textos… Sería un largo domingo. Y entonces de entre sus libros y cuadernos reconoció dos que no eran de ella, eran de ChanYeol los que había llevado para las clases. ¿Qué debería hacer? ¿Llamarle y que viniera por ellos? Se sentó en la cama viéndolos y pensando.

Salieri asomó la cabeza por la puerta para decirle que se iba a comprar la despensa, le dijo que tuviera cuidado. Decidió ignorar las cosas del chico y empezar su tarea hasta que su celular sonó, lo tomó sin ver el número y contestó.

—¿Qué se te olvidó Salieri?

—Antes de decir el nombre deberías ver quién llama. —esa voz grave inconfundible. Se quedó en silencio, ¿qué podía decirle? —Dejé en tu apartamento un libro y un cuaderno, los necesito voy para allá ya mismo a recogerlos.

Y colgó. ¿De verdad iba ya mismo hacia el apartamento? ¿Qué debía hacer? Salieri no estaba y lo más seguro era que se tardara al menos dos horas haciendo las compras, no quería ver a ChanYeol y lo más probable era que HyeSun viniera con él, no quería verlos juntos.

El timbre de la puerta sonó. Caminó lentamente hasta estar enfrente y la abrió. ChanYeol estaba frente de ella ahora, por primera vez desde que lo conoció pudo apreciar lo alto que era, se sentía pequeña a su lado.

—¿Puedo pasar?

—¿Por qué? Solo tengo que entregarte las cosas. —le dijo de forma defensiva.

—Quiero hablar contigo un poco. —Y sin pedir permiso entró en el apartamento sentándose en el sofá.

—Que sea rápido, si Salieri regresa y te ve aquí te va a golpear más fuerte que ayer. —le entregó el libro y el cuaderno.

—No tienes que recordarme eso. —Tomó las cosas y se puso de pie, acercándose a la ventana de la sala que tenía una vista hacia la calle. —Solo quería decirte que… Espero que me entiendas, y deseo que seas feliz con KyungSoo.

¿Qué lo entendiera? ¿Qué fuera feliz? ¿Quién se creía?

—Lárgate ChanYeol. —le dijo en un tono frío que nunca antes había usado, provocando que él la viera sorprendido ante su actitud. —¡Lárgate! ¡No quiero verte de nuevo! ¡Vete!

Él simplemente asintió y caminó hacia la puerta, escuchó como se detenía y después que la puerta se cerraba. Se fue a su cuarto decidida a terminar la tarea y no pensar en él más.

 

*

 

El lunes la rutina volvía a comenzar. Mientras se dirigía hacia el salón de clases escuchó a algunos chicos mencionar su nombre y exclamar cosas como: “Qué envidia”, “Quién fuera ella” no entendía a que se referían así que continúo caminando. Al detenerse frente a la puerta del salón comprendió a que se referían.

Al entrar, sobre el escritorio encontró un enorme peluche de oso panda con una tarjeta en él. Sonrió al ver de quién era; LuHan había sido el encargado de eso. WonYi entró al salón haciendo escándalo sobre el oso y el rubio.

—Todas se están muriendo de envidia. Ahora deberás tener más cuidado. Te odian en serio—le dijo en tono preocupado.

—No me interesa, que hagan lo que quieran. Tengo a alguien que ellas no pudieron tener nunca. —dijo sonriendo mientras agarraba al enorme peluche y lo llevaba hasta su asiento.

Le tomó una foto y se la envío a Nim. Durante el receso WonYi la acompañó hasta la cafetería, los chicos deberían estar ahí y no se equivocó al entrar los vio a los doce sentados en la mesa de costumbre. La mayoría de ellos hizo un escándalo al verlas entrar y las llamaron para que se sentaran con ellos.

Y entonces vio a JongDae sentado junto a LuHan, riendo y hablando como si nada hubiera pasado, se giró a verla y la saludó sonriendo. O estaba siendo muy fuerte o realmente todo estaba bien. Y entonces se topó con ChanYeol que estaba algo apartado de los demás.

LuHan se puso de pie y se sentó a su lado sonriendo.

—¿Te gustó el regalo?

—Creo que exageraste un poco, pero sí me gustó mucho.

Él sonrió satisfecho. Estuvieron comiendo el almuerzo entre risas y bromas, no podía evitar de vez en cuando lanzar una mirada asesina contra ChanYeol, la cual aumentó cuando HyeSun se acercó a la mesa. La cara de todos cambió, incluyendo a LuHan y Tao quienes apenas habían conocido a los chicos en la universidad pero aun así era notorio que no toleraban a la ahora novia de ChanYeol.

—¿Puedo sentarme con ustedes? —dijo en un tono dulce que denotaba era falso.

—Claro siéntate. —dijo ChanYeol haciéndose a un lado para que pudiera sentarse.

—En realidad no HyeSun ya no hay espacio. —dijo BaekHyun en tono grosero consiguiendo que ChanYeol lo viera molesto.

—¿Ya vas a empezar Baek? —el aludido no dijo nada. —Bien, entonces nos vamos.

Se puso de pie y se fue junto con ella. Tenía demasiada rabia, quería golpearlo de nuevo. No solo le había roto el corazón a Nim, sino que además se molestaba con sus amigos por ella.

Le dijo a LuHan al oído que quería hablar con JongDae a solas. Le dijo que estaba bien, se levantó y le hizo señas al chico para que la acompañara.

JongDae se veía nervioso.

—Quería hablar contigo sobre…

—Ya sé, no te preocupes ya lo hablé con LuHan Hyung aunque creo que es justo que tú lo sepas.

—¿Qué cosa?

—Yo… Me gustabas pero lo confundí creí que… Que estaba enamorado de ti pero no era así y entonces me di cuenta que LuHan Hyung si lo estaba y no era justo para él, ni para ti. —le dijo sonriendo.

—Gracias JongDae.

Ambos regresaron al interior de la cafetería, JongDae sonreía incluso más que antes parecía liberado, y ella entendía ese sentimiento porque se sentía igual.

El momento incómodo llegó cuando les dijo a los chicos que no ensayaría más en el salón con ellos. Y se molestaron al saber que era por ChanYeol, decían que no era justo y querían reclamarle al chico pero ella les dijo que estaba bien. Él solo tenía que darse cuenta de su error.

Antes de que el descanso terminara ChanYeol volvió con ellos. Sentía piedras formarse en sus riñones cada vez que lo veía. Se iría sin ensayar, solo quería estar en casa temprano. LuHan la acompañó hasta el salón por sus cosas y luego al estacionamiento, al llegar a donde estaba su auto no podía creer lo que veía.

Los neumáticos estaban todos pinchados y habían arrojado huevos a todo el auto, además de haberle dejado una nota:

“Ten cuidado a partir de ahora, nos robaste algo que era nuestro. No te dejaremos en paz.”

Notó como LuHan se tensaba a su lado y su rostro era de molestia absoluta. Llamó una grúa para que llevaran el auto al apartamento, estaba por ir a buscar a Nim cuando su teléfono sonó y al colgar lo dejó caer por inercia.

 

*

 

Vio como salía de su salón de clases para dirigirse hacia la cafetería del pre universitario. Ya se había asegurado de conocer su horario y después de eso no tenía ninguna clase. Menos mal ella tampoco.

Se dirigió hacia uno de los edificios del pre universitario que estaban ya vacíos, esperando que las chicas a las que les había pedido el favor llegaran rápido con ella. Solo tuvo que esperar unos minutos, cuando las vio llegar.

—Hola Nim, ¿ese es tu nombre verdad? —le preguntó sonriendo.

—HyeSun…¿Qué es lo que quieres?

—Darte un pequeño regalito… No tienes idea de cuánto me molesta que ChanYeol no pueda estar totalmente conmigo por tu culpa.

—¿Mi culpa? Se supone que eres su novia ¿no?

—Tú lo has dicho, se supone y como aun insistes en rondarlo eres un estorbo. Y me encargaré de que dejes de serlo.

—¿Qué es lo que quieres?

—Ya lo verás. Sosténganla bien.

 

*

 

Lo primero que sintió fue un golpe en su rostro, no podía moverse ni defenderse las otras chicas la detenían mientras HyeSun la golpeaba como quería. Dolía mucho, no estaba segura de cuánto podría soportar. Sintió un fuerte dolor en su estómago, provocado por un golpe en seco que HyeSun le daba, escuchaba su risa y la de las otras chicas.

Ya no podía soportar más dolor. Su vista se nublaba a causa de las lágrimas y el dolor, se desplomó en el suelo pues la habían dejado caer.

—Espero que con esto te alejes de ChanYeol o a ti y a tu amiga les irá peor la próxima vez.

Pudo escuchar la risa de HyeSun alejándose poco a poco y después todo se hizo oscuridad.

Cuando abrió los ojos todo era blanco a su alrededor y sintió dolor por todo su cuerpo. Se dio cuenta que estaba en un hospital o eso parecía. Intentó moverse pero el dolor se lo impedía, sentía la garganta seca. La puerta se abrió entrando una enfermera.

—Les avisaré que has despertado. — le dijo sonriendo y saliendo del cuarto.

Momentos después Salieri entró como un huracán a la habitación. Se veía que había estado llorando un poco y estaba preocupada.

—¿Cómo te sientes? —dijo sentándose a su lado.

—Viva… Creo. Todo me duele.

—Dime ¿quién fue Nim? — su cuerpo se tensó no podía decirle a Salieri quien había sido. —Nim, por favor dime.

—No vi nada, solo sé que eran varias personas. —mintió.

—Me encargaré de que los encuentren. Esto no se va quedar así.

—Salieri no, déjalo así por favor. — intentaba que el miedo no se reflejara en su voz.

—Los chicos están aquí…Todos. — ¿Todos? ¿ChanYeol también? —ChanYeol quiere verte.

—¡No! ¡No quiero verlo! ¡Dile que se vaya! —la puerta se abrió y ChanYeol entró. —¡No! Salieri dile que se vaya.

—Nim… Por favor…— se veía preocupado, se había preocupado por ella.

—¡No! ¡Vete vete! ¡No quiero verte ChanYeol! —sintió las lágrimas correr por sus mejillas y después la enfermera entró en la habitación para inyectarle un calmante.

—Por favor, los dos salgan ella no debe alterarse.

Sus ojos se sentían pesados, el calmante estaba haciendo efecto y cayó en un profundo sueño.

Revivió cada uno de los momentos en los que HyeSun la había golpeado y amenazado. No podía decir nada, no quería arriesgar a Salieri pero sentía tanta impotencia, ChanYeol estaba con un monstruo al cual no conocía realmente y era capaz de llegar hasta esos extremos por tener lo que quería.

Estuvo dos días en el hospital, y después regresó al apartamento tenía que estar en reposo al menos una semana.

 

*

 

Salieri se encargó de que el pre universitario averiguara que era lo que había sucedido con Nim ese día del ataque. La habían llevado hacia un edificio que ya estaba vacío, menos mal la Universidad HanGuk tenía cámaras de seguridad por todo el campus, incluyendo el pre universitario por lo que a través de ello sabrían quien la había atacado.

El video fue encontrado y desde diferentes perspectivas. Cuando lo vio sintió una ira dentro de sí misma. Tomó la copia que le dieron y se dirigió hacia el salón de ensayos de EXO.

Abrió la puerta de forma violenta, y la encontró ahí sentada en el regazo de ChanYeol riendo alegremente, mientras su mejor amiga tenía que estar en una cama reposando a causa de los golpes que había sufrido.

—¡Yah! ¡Woo HyeSun! — dijo caminando hacia ella. Los chicos estaban ensayando y pararon la música al ver a Salieri entrar de esa forma. —¿Quién te crees? ¡Responde! —quería golpearla, golpearla de la misma forma en que ella había hecho con su amiga.

—¿Qué te pasa Salieri por qué le hablas así? —ChanYeol no entendía que ocurría.

—¿Por qué? Porque tu novia es una maldita perra abusiva ¡Por eso!

—¡Oye! Ten cuidado en cómo le hablas.

—Parece que al único al que realmente ha engañado con su cara de mustia es a ti ChanYeol. Los chicos siempre te dijeron que no era buena para ti, que no era de fiar y nunca les creíste ¿No?

—ChanYeol no la escuches. — HyeSun empezaba a ponerse nerviosa.

—Pues yo tengo algo que hará que te des cuenta de la verdad. —dijo sacando el dvd que contenía la copia del video donde se veía a HyeSun atacando a Nim. —Mira ese video, a ver si sigues diciendo que tu novia es tan linda e inocente.

—¡ChanYeol no! Por favor…—lo tomó del brazo y lo miraba de forma suplicante.

—¿Por qué no quieres que lo vea HyeSun?

—¿No confías en mí? ¡Ella miente! Quiere separarnos porque quiere que estés con su amiga.

BaekHyun se acercó y le quitó el disco a ChanYeol, lo colocó en la computadora portátil y el video empezó a reproducirse. Todos se acercaron a ver, además tenía un sonido bastante claro.

ChanYeol se soltó del agarre de HyeSun y se acercó a ver el video.

Era Nim, estaba siendo llevada por unas chicas y frente a ella estaba HyeSun quien le empezó a insultar y decir que se alejara de ChanYeol, luego les pidió a las chicas que la sostuvieran bien y empezó a golpearla, una y otra vez hasta que se cansó y pidió que la dejaran caer en el suelo. La amenazó por última vez y se marchó riéndose.

ChanYeol se giró a ver a HyeSun; sorpresa, decepción, ira era lo que se veía en su rostro.

—Te crees muy valiente golpeando chicas que no se defienden ¿verdad? — Salieri se plantó a ella. —¡Vamos a ver si puedes conmigo! —hizo ademán de querer irse contra ella pero LuHan la detuvo. —¿Qué tal si yo te parto la cara? Así quedamos a mano HyeSun.

—Salieri cálmate…—LuHan intentaba calmarla.

—HyeSun…—ChanYeol se acercó a ella. —¿Por qué hiciste eso? Yo… nunca quise creerles a ellos cuando decían que no eras buena… Y tenían razón.

—¡Tú no me querías a mí! ¡La querías a ella! —le gritó con rabia. —¡Siempre pensabas en ella! ¡Decías su nombre dormido! ¡Me llamaste por su nombre cuando estuvimos juntos ChanYeol! —HyeSun empezó a llorar. —Solo quería recuperarte, fuera como fuera.

La puerta del salón se abrió dando paso al rector del pre universitario y al de la universidad junto con la policía. Se llevaron a HyeSun detenida.