La pista es solo mía. Soy una entre la moto, la pista y yo. Ella se mueve yo me muevo.

Paso uno, dos, tres corredores que tienen dificultad con la tierra que está muy mojada y eso hace que haya mucho barro y las ruedas se traben.

Ya pasé unos cuantos más que han caído al salir de las curvas que es donde más barro hay. Otros caen por el amontonamiento de una moto al lado de la otra cuando la pista se hace más estrecha, y otros mal jugadores que intentan derribar a sus oponentes metiendo pie sin que los vean. Yo si los veo y me alejo.

Montículo, no muy grande, salto normal, sin truco, decido primero tomar ventaja en velocidad y posición.

No veo a Gary, el salió no muy lejos de mi. Espero que esté bien. Practicamos una vez con tierra mojada pero esto es diferente. Esto, es la carrera, con más pilotos al lado haciendo presión. Es algo que siempre interfiere no importa cuantas veces se haya practicado. La ansiedad y nervios de correr una carrera.

Curva, paso otra moto, recto, salto pasando dos montículos pegadas una al lado de la otra. Curva cerrada, más motos cayendo. Avanzo. Tranquila, sin desesperarme, es la primera manga, tengo que tener una buena posición. Luego me encargaré de los trucos. Esto recién empieza.

Mi sangre parece agua hirviendo en mi cuerpo. Sentir como mi cuerpo reacciona espontáneamente a cada obstáculo que voy enfrentando, no piensa, reacciona, se mueve solo. Somos una sola.

A pesar que la tierra está mojada por la lluvia de anoche hay nubes espesas de polvo saliendo de las ruedas y roces con los pies junto con mucha piedra y barro. Mi moto y mi traje ya están embarrados como si me hubiera metido en un pozo. Por suerte aún la visión no me molesta, puedo ver bien, enfocar mi objetivo.

Curva cerrada a la derecha, otra a la izquierda, otra a la derecha, recto, curva abierta, salto, curva. Esta pista tiene muchas curvas! Es más entretenido.

A pocos metros de mi veo una moto saltando, debe ser un montículo alto por que veo como la moto y el piloto se inclinan a la derecha y desaparece al bajar con la moto recta. Acabo de ver un whip.

Es un corredor de la competencia del taller. Es uno de los corredores a quien tengo que alcanzar y pasar. Solo a nosotros nos cuentan los trucos por ende somos solo nosotros los que hacemos trucos. Sea quien sea el organizador de esta competencia debe tener el poder en todo por que es la más extrañas reglas que haya visto nunca. Sin contar las ilegales claro, bueno, ahí no hay reglas, es vivir o morir.

Me acerco más, una curva, recto y ahí lo veo, el gran montículo. Bien, creo que un truco no hará nada mal. Llego, me levanto un poco del asiento, salto bien alto, giro la moto de lado en el aire, pongo las ruedas lo más arriba posible, parece que voy a dar una vuelta pero hago como una s y vuelvo a enderezar la moto, aterrizo sin problemas y avanzo.

Oh si!!!!! Como extrañaba esto!!!!

Veo que indican que comienza la segunda vuelta.

Acelero un poco, me arriesgo más en las curvas, estoy cerca de mi competidor principal. Lo alcanzo, estamos muy cerca, salta él y a los segundos salto yo. Me lleva una ventaja muy corta. Trato de pasarlo pero me corta el paso. Intento de nuevo y otra vez corta el paso. En una curva veo como arrastra el pie demasiado fuerte contra la tierra, no solo levanta barro sino piedras, piedras que caen en mi moto, una cae en mi pierna que a pesar de tener el protector siento el golpe. Eso, eso me enciende.

-jugador sucio eh! ya veremos!

Me emociono con solo pensar en derribarlo y que el se trague todas las piedras de mi rueda trasera, ja!

Amago con pasarlo como antes, veo como está por hacer una de las suyas, lo engaño y voy del otro lado, freno de golpe un poco y luego acelero para el otro lado y esta vez si logro pasarlo.

Recto, curvas, montículos, saltos, mas curvas. Lo siento cerca, ahora soy yo la que impide que pase. Llego al montículo grande.

Salto, hago lo mismo que antes solo que esta vez me levanto del asiento saliendo de la moto, me agarró bien fuerte del manubrio y pongo mi cuerpo vertical, es como si estuviera parada en el aire en una sola pierna. Empiezo a descender me subo de nuevo sin problemas y aterrizo como si no hubiera estado en el aire.

Mi sangre explota! Junto con mi corazón. Me siento yo, me siento yo realmente. Esa CL adolescente con su gran sueño de ser corredora profesional participando en los grandes torneos mundiales en esos estadios monumentales llenos de hermosos obstáculos hechos exclusivamente para esos campeonatos.

La bandera blanca y negra a cuadros se agita, finalizó la primera manga.

Voy directo a mi bóxer donde me espera mi equipo.

Me bajo de la moto y Chull ya se pone a trabajar en ella. Le indico ciertas partes que quiero que me revise que las sentí medio extraño a medida que avanzaba. A los pocos minutos aparece Gary y su técnico se pone a trabajar en la moto.

Adentro, sin que nadie nos vea, nos sacamos el casco. Con Gary sonreímos y chocamos los cinco. Yo salí primera y el tercero. Por ahora todo marcha bien.

La novia de Gary se acerca y empieza a limpiarle la tierra en la cara y a preguntarle si está herido en alguna parte mientras le da besos por todo el rostro en los lugares que limpia. Es una escena divertida sobre todo con un Gary vergonzoso que me pide con la mirada que no diga nada.

-cuando dijiste que sería sucia no imaginaba que tanto –Bom viene caminando hacia mi con un pañuelo y empieza a limpiarme la cara, ahora la que siente un poquito de vergüenza soy yo, Gary me saca la lengua burlándose- como podías ver con ese casco lleno de tierra? mira hasta en la boca tienes.

Me pasa el pañuelo por la boca, con razón cuando me lamía sabía a tierra.

-y eso que no has visto como está abajo.

Señalo mi pantalón y botas, es puro barro. Al levantar la vista me encuentro con la mirada de Bom que va de abajo a arriba, directo a mis ojos. Le sonrío con mis sonrisa de medio lado y ella se queda mirándome con el pañuelo a mitad de mi rostro congelado en el aire. Me causa gracia. Veo como sus mejillas se van poniendo rosas. Desvía la mirada y no puedo evitar reír por esa reacción. ¿Y ahora que le sucede?

-ya! Límpiate tu! no soy tu sirvienta. ertida..

Eso último lo dice gruñendo bajito pero igual lo escucho.

Me tira el pañuelo en las manos y se va. Vuelvo a reír por esas actitudes ciclotímicas de Bom y comienzo a limpiarme el sudor. ¿ertida? ¿qué habrá pensado que dije? Ella es la ertida por pensar cosas que ni se cuales son.

Me acerco a Gary que ya su novia lo dejó lo más limpio y seco que pudo.

Nos miramos y ambos nos damos el gesto y señal que nadie se burla de nadie.

-has tenido algún problema?

Le pregunto volviendo al asunto de la carrera.

-las curvas, parecen pantano. Por suerte los otros caían y me era más fácil frenar y avanzar. Es raro, en un momento sentí que estaba surfeando. Fue así de a poquito que llegué a mi tercer puesto.

-genial. Sigue así. Lo estás haciendo muy bien.

Le doy unas palmadita en el hombro.

-gracias. Nuestros rivales están cerca pero podremos con ellos.

-esa es la actitud!

Chocamos los 5 de nuevo.

Volvemos a prepararnos para salir. Ya camuflados salimos del box. Vamos a nuestras motos y esperamos la señal para volver a las grillas.

Los demás vuelven a sus sitios y de nuevo quedamos solos. Veo de lejos a Bom que me levanta los pulgares y me da animo con unos grititos, obviamente sin decir mi nombre. Levanto mi mano para hacerle ver que la escucho y como agradecimiento. Es bueno tener a alguien con esa energía de apoyo. En estos momentos doy gracias por haber hecho las paces con ella, hace que la tensión se sienta menos.

Indican que ya podemos ir a las grillas. Avanzo con mi moto, doy un vistazo a mi alrededor. Todos embarrados, parecemos que fuimos a esos entrenamientos militares cuerpo a tierra.

Freno y me ubico en mi grilla. Tomo aire y me concentro. Escucho un motor que ruge muy fuerte. Tanto que me molesta. Abro los ojos, miro para ver quien está molestando y por que no lo sancionan. A unos pocos metros de mi veo una moto verde con un traje verde con blanco, es el que está causando ese rugido molesto. Me está mirando. No puedo ver su cara pero su cabeza está en mi dirección.

De golpe me sorprendo al ver que levanta la mano y me señala con el dedo. Desafío. Me está desafiando. Observo más detenidamente, me extraña que me haga esa seña. Veo su número, 990, en blanco con líneas negras gruesas.

-990…

Susurro.

990… 90… mi corazón se detiene por segundos, mi vista se nubla poniéndose en negro y luego aparece Hyun en su moto