Psicópata

Day & Night

Moonbyul: Voy a recordártelo la próxima vez que te haga enfadar.

Con una mirada llena de resquemor, Solar pretendía advertir a Byul que so se atreviera a intentarlo. Cuando la mayor intentó levantarse de la cama Byul-yi volvió a arrastrarle hacia adentro al entrecruzar sus brazos por alrededor de la delgada cintura de Yongsun.

Moonbyul: No, no te vayas… ‒Rogó antes de dejar un beso en el costado del vientre de la mayor. ‒

Solar: Solo voy hasta el baño, tengo que ir, regreso en un momento.

Refunfuñando la rubia le liberó y avergonzada se cubrió los ojos con el lago exterior de sus manos. De pie a un lado de la cama, Yongsun miraba a su novia mostrándole una amplia sonrisa.

Solar: Aigoo… ¿Qué voy a hacer contigo? ‒Preguntó negando con la cabeza. ‒

Sin pudor alguno respecto a su semi desnudez, la mayor abandonó las sabanas y dio pasos delicados quejándose de lo frio que se sentía la superficie del suelo al contacto con la planta de sus pies.

Al verse en el espejo del baño la chica se apenó de ver su propia imagen, tenía el rostro inflamado y sus ojeras parecían gritar lo poco que había dormido en los últimos días. Por primera vez se avergonzaba por el verse mal ante Byul, le hacía sonreír nuevamente el pensar lo ridícula de esa idea. Luego de enjuagar su cara y peinar su cabello usando un viejo cepillo de madera que descansaba a un lado del lavamanos volvió a la habitación, descubrió que Byul se había puesto una larga camiseta blanca y unos shorts negros; a pesar de que ya no llovía el aire se sentía húmedo aun, no era extraño el que le hubiera dado frío. Imitando a la menor buscó la camiseta negra que traía puesta la noche anterior, por un par de minutos le fue difícil recordar en qué lugar se la había quitado, ya que ni siquiera se había tomado la molestia de ver el entorno en el que se encontraba cuando hizo entrada en el lugar, y la mitad del recorrido hasta la habitación lo había hecho a ojos cerrados guiándose por los movimientos de Byul.

Luego de haber cubierto su torso con la camiseta, fue de nuevo hasta el dormitorio y después de tomar su móvil desde sus jeans que reposaban en el piso a un costado de la cama se subió de nuevo a ella aplastando el cuerpo de la rubia. Mientras piraba su teléfono cubría la mitad del rostro de la menor con su brazo.

Con dificultad intentando apartar el antebrazo de Yongsun de su boca se dispuso a hablarle.

Moonbyul: ¿Que vas a querer para desayunar?

Solar: Realmente tengo mucha hambre, pero resistiré hasta que vengan a buscarnos.

Moonbyul: ¿Quién viene a buscarnos? ‒Dijo sorprendida. ‒

Solar: Estoy mensajeando a Wheein, ella está con Hye jin en un loft por aquí cerca.

Moonbyul: ¿No crees que podrías haberme preguntado si quería salir antes?

Solar: Las chicas te extrañan mucho, además tenemos algo muy importante que discutir contigo, que no se te olvide el que soy tu líder.

Moonbyul: Y que no se te olvide a ti que yo soy una persona, no un accesorio al que llevas a donde se te antoje. ‒Señaló con severidad. ‒

Solar: ¿En serio vas a ponerte a discutir conmigo otra vez?

Moonbyul: No, para que discutir… sé que tengo la razón, sería un desperdicio de energía. ‒Concluyó sonriendo. ‒

Solar de un manotazo en el brazo, le aplicó un correctivo a la menor y sonrió viendo como esta se quejaba del dolor para luego callar sus quejidos con un beso robado. Ayudándole a levantarse la mayor tiró de la mano de Byul, entre las dos ordenaron la ropa que había traído otra vez en su bolso para esperar a las menores.

En menos de 20 minutos el auto prestado de la empresa estaba fuera de la casa de vacación de la familia Moon, la menor presionaba la bocina del auto haciendo todo un escándalo en el vecindario para que las mayores se apresuraran en salir de la casa.

Cuando vieron a Moonbyul saliendo de la casa con una sonrisa en el rostro y caminando campante en dirección al auto, ambas comenzaron a celebrarlo gritando como si no hubiesen visto a su amiga desde hace una década.

Wheein: ¡Moon Byul Yi! ¡Moon Byul Yi! ¡Nuestra amada Moon Byul Yi!

Asomándose por la ventana del conductor la rubia miró a ambas.

Moonbyul: ¿Están alentando a algún equipo de futbol?

Hwasa: ¡Unnie! ¿Cómo puedes desaparecer así? ¿Venir hasta la costa y no traernos contigo? ‒Reclamó. ‒

Moonbyul: Baja del auto, yo conduciré. ‒Pidió sonriendo. ‒

Wheein bajó por su lado y corrió para abrazar a la mayor, abrazo al que la menor al dejar el puesto de piloto se sumó.

Moonbyul: Creo que debería desaparecer más seguido, así recibo más abrazos como este. ‒Insinuó entrecerrando los ojos. ‒

La líder del grupo le dirigió una mirada de desaprobación desde el otro lado del vehículo y carraspeó la garganta.

Moonbyul: Okay, vámonos. ‒Acató subiendo al auto en menos de un segundo. ‒

La rubia ató su cinturón de seguridad frente al volante mientras que Wheein subía a su lado, y al mirar por el espejo retrovisor vio como Hye jin le daba una pequeña palmada en la cola a Solar para que se apresurara en subir al auto.

Moonbyul: Hye jin-i, no toques eso. Es mío.

La mayor se sonrojaba en tanto le cuestionaba gritando a su novia el porque tenía que haber salido con tan indecorosa declaración frente a las menores, y en su lugar las menores reían y se burlaban.

La reintegrada al grupo condujo hasta un restaurante cercano para que todas pudieran comer algo. En el lugar además de llenar sus hambrientos estómagos, hablaron de lo sucedido los últimos días, Moonbyul se disculpó por no haber sido honesta desde el principio, pero no necesitó el presentar muchas escusas ya que sus compañeras le entendían y sinceramente le deseaban que de ahora en adelante ella pudiera encontrarse en paz consigo misma, aclarándole que ella tenía el apoyo incondicional por parte del grupo no solo por ser compañeras de trabajo, si no porque además eran una familia, amigas y confidentes, que siempre estarían ahí para escucharla, apoyarla jugar con ella e incluso fastidiarla.

La líder del grupo le aclaró que por más que ella quisiera que se le diera un descanso, y que pudiera tomar su tiempo y espacio para mejorarse, las demandas de la empresa hacia ella eran distintas, y que si ella no volvía lo antes posible a Seúl para reunirse con el presidente de la empresa, la carrera de Mamamoo podía verse altamente perjudicada.

Con completa comprensión de la situación Moonbyul intentó tranquilizar a sus compañeras, les aclaró que las acompañaría hasta la empresa y haría caso de cuál sea el dictamen del CEO sin ninguna protesta, Yongsun se sintió aliviada y su corazón se volvió más cálido al recibir la mano de Byul-yi sosteniendo la de ella bajo la mesa.

Las cuatro luego de comer tomaron camino de vuelta por la carretera hacia Seúl, Yongsun llamó a su representante para informarle que el grupo se dirigía completo hasta la empresa y que Moonbyul se encontraba lista para reunirse con el presidente, el hombre le respondió que no iba a poder respirar con calma hasta que las viera a las cuatro salir de la oficina del jefe con mejores noticias, debido a que el horario del presidente en los últimos días había estado lleno de reuniones y llamadas importantes.

Como condenadas a la horca las cuatro miembros llegaron con ánimos afligidos hasta el edificio de la empresa de entretenimiento para la que trabajaban esperando lo peor, su agente las recibió contento de verlas a las cuatro unidas nuevamente y las guió alentándolas para que recobraran su natural buena energía, sin embargo les asustaba lo que su jefe les pudiera declarar.

Moonbyul fue la primera en entrar a la opulenta sala de juntas de la empresa, seguida de sus tres compañeras, donde el poderoso hombre les esperaba, al ver a lara del grupo entrar se levantó de la cabecera de la mesa para darle la bienvenida mientras recibía sus humildes reverencias.

CEO: Moon Byul Yi, tanto tiempo de no vernos… ¿Te vez algo delgada? ¿Has comido bien? ‒Preguntó condescendiente. ‒

Moonbyul: Si. ‒Asintió con timidez. ‒

CEO: Espero que en estas cortas vacaciones hayan descansado. Su manager me comentó que fue costoso encontrarte sabandija. ‒Dijo palmeando el hombro de la rubia. ‒ Más te vale no volver a huir así, aquí nadie está jugando…

Moonbyul: Lo sé presidente, lo lamento… no volverá a ocurrir.

CEO: Me gusta escuchar eso. ‒Aprobó para volver a tomar su silla. ‒ Pueden sentarse, hay algo que quiero comentarles que ayudará mucho al futuro de Mamamoo.

Solar: ¿De qué se trata?

CEO: Esto del caso de Kim So Bin ha sido un enorme dolor de cabeza para mí, y hay que cortarlo de raíz. Acabado el juicio de mañana en la mañana ustedes comenzaran una gira a Japón, estarán ahí durante un mes; aparecerán en un par de programas, saldrán en unas cuantas revistas y presentaran su música en escenarios que ya puse en agenda para ustedes. Este mes fuera del país va a servir para a la prensa amarillista se le olvide todo este caso y ustedes puedan estar tranquilas para hacer lo que mejor saben hacer que por su puesto es la música, tendrán incluso algo de tiempo libre entre eventos para hacer algo de turismo.

Hwasa: ¿Es en serio? ¿No está bromeando verdad? ‒Consultó boquiabierta. ‒

CEO: ¿Por qué? ¿Pensaban que iba a castigarlas?

El presidente al ver la cara de compungidas que mostraban las cuatro chicas se ahogó en risa.

CEO: ¿Qué tan intransigente creen que soy? Les he visto llorar, les he visto preocupadas y angustiadas, sé que ustedes no la han pasado nada de bien en el último tiempo, y es mi responsabilidad el cuidar de ustedes y de su carrera en esta industria. No dejaré que esos buitres de la prensa les hagan daño, y seré el primero en apoyarles cuando necesiten ayuda, mi deber no basta de solo regañarlas todo el tiempo, aunque no significa que no lo vaya a hacer cuando lo considere necesario.

Byul-yi al escuchar las palabras del hombre se sintió agradecida y altamente conmovida, sentía que el ultimo tiempo solo había significado una gran molestia para todos los que le rodeaban y el ver cuánto apoyo y amor tenía a su alrededor le llenaba de una enorme alegría que se expresaba en un genuino llanto de felicidad que brotaba de sus ojos.

Al ver el desconsolado llanto de la chica el presidente corrió hasta una gaveta para alcanzar pañuelos de papel que daría a la joven.

 

La noche en la que Yongsun se reencontraría con Byul-yi, el desdichado Taemin saldría a modo de fuga del hospital, aun no conseguía el alta que le diera la autorización médica para abandonar su dormitorio en el hospital, pero el ya no soportaba seguir ahí y no se sentía lo suficientemente débil físicamente para estar dependiendo de la ayuda de enfermeras y de practicantes de la escuela de medicina. Sin embargo en lo emocional estaba destruido, el volver a casa le trajo aquellos bellos recuerdos de noches largas bebiendo y riendo con Byul, sabiendo que lo más probable es que la perdiera esa noche en las manos de Yongsun.

Ahogado por sus pensamientos salió a caminar sin un destino fijo, pero sin importar lo lejos que fuera, sabía que no podía huir de lo que sentía o de sus recurrentes pensamientos, que le recordaban que no tuvo siquiera la mínima oportunidad de confesar lo que sentía antes de que su amor se convirtiera en desamor y quién sabe, quizás desde un inicio aquello era un desamor, pero por más que se empeñaba en pensar que esta freno sería para mejor, no podía deshacerse de la presión que tenía en su pecho o del nudo que se acomodaba en su garganta.

Pensando en los consejos de la sabia Song Hee, decidió que lo mejor era volver a casa intentar dormir y ver que haría con su vida en los próximos días, sin pensar a largo plazo y en post de empezar a marcar una sana distancia con su mejor amiga, pensó en que quizás sería bueno el no tener demasiado contacto con ella por lo menos por unos días.

La mañana siguiente en el periódico Taemin encontró un aviso publicitario que le pareció interesante, junto a los sorbos del café del desayudo leyó en el contenido que se impartirían cursos de Marketing en la facultad de negocios de la Universidad de Seúl, el ya tenía un titulo que correspondía a de administración de empresas, acreditar un nuevo nivel de estudios no le vendría nada mal y le convenía mucho el mantener su tiempo y cabeza ocupados en algo más, por lo que fue ese mismo día el que salió de casa para inscribirse en el curso que duraría al menos un par de años.

Esa tarde Moonbyul se había recostado a jugar video juegos ya que podía estar con la consciencia tranquila al haber solucionado todo sobre su trabajo, acabado uno de los niveles que le frustraba hiso una pausa y llamó a su amigo para saber cómo iba su recuperación, no podía estar demasiado tiempo molesta con él y sentía que lo mejor para reparar las cosas era hablar ahora que se encontraba más calmada, pero esta vez fue el chico el que no contestó a su llamado, no bastó con que él le ignorará para que ella empezara a preocuparse, aun más si pensaba en que mañana era el juicio de So Bin y Taemin no le había asegurado el que no presentaría cargos contra So Bin como víctima.

Decidida a levantarse de la cama para ir a visitar al chico sólo después de terminar una etapa más, Moonbyul vio como todos sus planes se estropeaban cuando Yongsun se metía debajo del cobertor para acurrucarse en ella evitando que continuara su avance en el juego como acabando con su voluntad para salir de la cama.

La mañana del juicio Min Ji llevó a la pequeña Minah a jugar a un parque antes de asistir al juzgado, lo menos que quería era que para ella toda esta situación resultara en algo traumático. De pronto Minah dejó el balancín donde se columpiaba y corrió hasta donde su madre se encontraba sentada vigilándola.

Min Ji: ¿Qué sucede mi amor? ¿Pasa algo malo? ¿Te sientes mal?

Minah: No, mamá ¿Te puedo preguntar algo?

Min Ji: Lo que quieras amor. ‒Respondió mientras acariciaba el cabello de la niña. ‒

Minah: ¿Papá es un hombre malo?

Min Ji: No hija, eso no es así, ¿Por qué me preguntas eso?

Minah: Cuando Solar ssi vino a casa, tu dijiste que papá había estado en la cárcel, y mi maestra dice que las personas malas son las que van a la cárcel.

Min Ji: Te he dicho que escuchar tras las puertas es algo que está muy mal ¿No es así?

Minah: Lo siento mami. ‒Se disculpó bajando la mirada. ‒

Min Ji: Está bien, solo no vuelvas a hacerlo. Y papá no es un hombre malo, pero ha cometido errores, cosas que no deben hacerse. Todos cometemos errores como cuando tú escuchaste tras la puerta, aunque mamá te ha dicho que no debes hacerlo. Lo importante es que le demos mucho amor a papá para que no vuelva a equivocarse. ¿Le darás amor a papá?

Minah: Si, mucho, mucho, mucho. ‒Contestó con una sonrisa. ‒

Min Ji: Muy bien, ven aquí. Vamos a visitar a papá. ‒Señaló tomando la mano de la pequeña. ‒

 

Es mañana Taemin se despertó con toda tranquilidad, estirándose sobre el colchón de su cama apenas abriendo sus ojos, hasta que se fijo en el reloj sobre su velador que le avisaba tardíamente lo atrasado que estaba para llegar al juicio, tenia al menos diez llamadas perdidas de Moonbyul en su celular y el tiempo corría en su contra para llegar al tribunal. A saltos se subió los pantalones, no terminó de abrochar su camisa blanca y sobre ella se cubrió con su chaqueta de vestir, sin tampoco tomarse el tiempo de abrochar bien los hilos de sus zapatos. Con un golpe de suerte un taxi pasaba fuera de su casa y logró tomarlo para llegar a tiempo. En el camino pudo arreglar los botones de su camisa y amarrar las cintas de sus zapatos, además de peinarse con los dedos de su mano el alborotado cabello en su cabeza intentando borrar las marcas de la almohada de el.

Llegaba justo a tiempo y en la recepción le avisaron que el comienzo del juicio se había retrasado un poco, alejándose del mesón de informaciones sintió el quejido de su estomago en ayuno gruñendo por algo de comida. Al final del lobby diviso una máquina expendedora de dulces y con las pocas monedas que le quedaron guardadas en el bolsillo del traje después de haber pagado la costosa tarifa del taxi, consiguió comprar una barra de chocolate.

A un segundo de abrirla se detuvo al ver como una esfera amarilla de goma llegaba rodando a chocar con su zapato, Taemin la recogió y la inspeccionó entre sus dedos; desde fuera de la sala del juzgado una niña corría en búsqueda de su juguete.

Minah: Lo siento mucho, puede devolverme la pelota.

Taemin: ¿Me dejarías jugar también? ‒Pidió con una dulce sonrisa. ‒

La madre de la niña llegaba corriendo tras la niña, agitada por haberla perdido de alcance.

Min Ji: Lo siento.

Taemin: Esta bien, no diseñan estos edificios pensando en los niños, debe estar muy aburrida.

La adorable Minah observó con ojos brillantes la golosina que Taemin tenía en su mano.

Minah: Mamá tengo hambre.

Min Ji: Espera a que lleguemos a casa y mamá preparará un delicioso almuerzo para ti.

Minah: Si… ‒Asintió desanimada. ‒

El chico miro los ojos tristes de la niña y no pudo evitar conmoverse.

Taemin: Puedes tener mi chocolate. Yo ya estoy un poco grande para comer dulces.

Con una gran sonrisa Minah le agradeció el gesto y Taemin acompañó a ambas a donde estaban sentadas, ignorando quienes eran estas personas. Cuando Minah se sentó a continuar con su juego de hacer rebotar la pelota contra la pared Taemin encandilado con la ternura de la menor se sentó a su lado para acompañarla a jugar, sin embargo no pudo predecir el gruñido que se escaparía de su estomago, Minah que aun no comía el chocolate que había recibido de forma desinteresada de parte de Taemin la tomó de su bolsillo para abrirla y dividirla por la mitad entregando una de las porciones al hambriento chico.

Unos minutos después un asesor de la corte los hiso pasar a la sala del tribunal con premura, ya que un gran cúmulo de periodistas se atochaba por la otra entrada de la sala donde se llevaría a cabo la sesión y tanto Min Ji como Taemin aun ignorando su rol en aquel lugar se sorprendieron de la coincidencia que les era el asistir al mismo juicio.

Para Moonbyul este día era de gran importancia, antes del juicio había pedido a fiscalía el hablar con So Bin, si el juzgado así lo requería incluso la conversación podía ser en presencia de su abogado, para ella esto no tenía ni la más mínima importancia, ya que lo que pretendía era dejar en buenos términos todo el conflicto y rencores que podían existir.

Sentados separados tras un muro transparente antibalas en una cabina, se enfrentaron So Bin y Byul-yi comunicándose por medio de una especie de citófono.

So Bin: Moon Byul Yi…

Moonbyul: Pensé que te opondrías a hablar conmigo.

So Bin: Eso no tendría ningún sentido.

Moonbyul: Que bueno que lo creas.

So Bin: ¿Viniste a ver cómo me hago cada vez más miserable encerrado aquí?

Moonbyul: Mi intensión no es verte sufrir So Bin, jamás he tenido conscientemente algo contra ti. Al contrario de ti… desde un principio nunca pude entender porque me odiabas tanto.

So Bin: Por una parte, te envidiaba mucho… yo era pobre, todo el mundo me despreciaba, mi padre me golpeaba y mi madre me miraba con misericordia y lástima porque sabía que no tenía mucho para entregarme a mi o a mi hermano. Pero tú, todo el mundo te quería, sacabas buenos promedios, siempre te miraban con una sonrisa, tus padres eran personas comprometidas con la sociedad… tenias todo lo que yo no, y aun así eras tan patética como yo al asustarte.

Moonbyul: Todo eso que envidiabas de mí, no eran más que fantasías, castillos hechos de humo que se desvanecieron cuando todo fue mal. Las cosas reales quedan, incluso en los peores momentos y cuando supieron que tenía una enfermedad psiquiátrica todas esas relaciones que tu tanto envidiabas se destruyeron me dieron la espalda y puede darme cuenta que nada era real, eran solo ilusiones que en algún momento sentí como si realmente fueran algo verdadero, pero todos era falso… hasta mi familia me ocultó y dejó de verme de la misma forma, por estar enferma me veían con pena, miedo o asco… ¿Y tu envidiabas algo así? …Aun así, tu no sabias nada de esto, ¿Por qué dices que yo era patética?

So Bin: Porque me recordaban a mi cuando era niño. Mi padre era un alcohólico, tenía graves problemas con el alcohol y cuando se embriagaba se comportaba con violencia y por más que me golpeara, por más furioso que estuviera en mi interior, jamás mostraba ni una sola respuesta de odio contra él… veía a mi madre o mi hermano después de ser maltratados y solo sentía rabia conmigo mismo por no poder protegerlos, era un inútil que no sabía hacer nada, que era incapaz de cambiar las cosas. Cuando fastidiaba a los chicos en la escuela todos respondían, al menos con una mirada, todos lo hacían aunque fuese por instinto, excepto tú… Fui un imbécil… ‒Concluyó bajando la mirada. ‒

Lo peor de todo esto, es que mi familia que es lo único hermoso que he construido en toda mi maldita vida y lo único que vale la pena para mí en el mundo, ahora pensará que soy un psicópata, terminaran odiándome, y creo que tienen razón…

Moonbyul: No lo harán, llevo muchos años visitando terapias psicológicas y una que otra ida al psiquiatra y he aprendido algunas cosas, la palabra psicópata viene de “psyche” que es alma y “pathos” que significa sufrimiento, no puedes vivir el resto de tu vida como una persona de alma sufriente, no puedes permitir que tu hija te vea de esa forma. No presentaré cargos en el juicio So Bin.

So Bin: ¿Por qué? Lo único que he hecho es complicar tu vida, ¿Por qué salvarme ahora?

Moonbyul: ¿Y qué gano de que pases el resto de tu vida aquí? Tu hija necesita un padre y tu esposa de un compañero. Nada del pasado va a cambiar, no quiero seguir cargando con todo esto y la única forma de soltarlo es realmente seguir adelante… deberías considerar hacer lo mismo.

So Bin: No tengo el derecho de pedirte perdón, y de pedirlo quizás creerías que es solo a causa de esto; pero de todas formas quiero que sepas que estoy arrepentido de todo lo que te he hecho, entiendo los errores que cometí y por mi familia te doy las gracias por hacer lo que estás haciendo.

Moonbyul: No cantes victoria aun, puedo responder por mi querella pero no por la de Taemin, no puedo detenerlo de acusarte y no sé si va a deponer los cargos en tu contra.

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Ok, esta vez si, mañana se publica el último capitulo de Day and Night, se titula Día y Noche <3 y no viene solo... viene acompañado del estreno de un nuevo fic Wheesa-Wheebyul Empiecen a juntar ganas para leer una nueva historia, con más emociones y escenas para enmarcar :3 

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Comments

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Pennywise-MB #1
Chapter 31: Este cap, después del tribunal lo leí escuchando "Ending Scene" de IU, se puso de causalidad pero le añadió sabor al dolor jajajaja
Mi fic favorito en español, seguiré leyendo tus trabajos y me tendrás aquí comentando :)
Por cierto, buen video ;)
nagatoharry #2
Chapter 29: aaaaaaaaw!!! Lo ame !!!
Me encanta como escribis esta historia, es hermoso lo q llegas a trasmitir, gracias de verdad.
SICADEVIN #3
Chapter 1: Authornimmm.... can you make it with english version please
nagatoharry #4
Chapter 27: muero lentamente en esta espera por el cap TT ...
ailyn2111 #5
Chapter 27: byul se va..... :v que loka
wheesa 7w7r
sigueeee
ailyn2111 #6
Chapter 26: ....puto taemin,sigo pensando que matarlo a estas alturas de la historia,no estaria mal >:v
ailyn2111 #7
Chapter 25: uy 7w7r
pobre taemin :v
aunque solar no gano la ultima palabra con taemin,yo creo que gasto mucha saliva e.e
sigueeeeee
ailyn2111 #8
Chapter 24: de seguro moonbyul va a molestarse con taemin por decirle su secreto a solar
solar se fue a ver a taemin y taemin justamente esta amargado,una cosa llevara a otra :v
de seguro taemin le dira a solar,cosas como,"luchare por moonbyul" :vvv o,"haré que moonbyul vea mis sentimientos" :v
creo que debiste haber matado a taemin antes,creo que ahora sera una piedra en el zapato xD
sigueeeeeeee
Pennywise-MB #9
Chapter 24: es el momento de hablar...
Oh por dios!!!
Tan tan taaaan
nagatoharry #10
Chapter 23: ese moonsun tan tierno <3!.
Taemin me agrada mucho la verdad es un gran hermano para Moon, mas ahora que tiene los sentimiento/"recuerdos" de Yul que era un hermano para Tae. Esperando con ansias el próximo cap :D.