Al tomar distancia, Yongsun sonrió limpiando el borde de la boca de la menor que se había embarrado de su labial.

Solar: ¿Qué estoy haciendo? –Cuestionaba sonriendo mientras su mirada subía. –

Moonbyul: ¿Me quieres?

Solar: Si, quizás, no lo sé… estoy demasiado ebria como para responder a eso…

Moonbyul: ¿Te arrepentirás de esto?

Solar: Probablemente.

Moonbyul: No me importa…

La chica rubia empujó a la mayor contra los barrotes de la escalera sujetándola por sus antebrazos generando que Yongsun soltara un pequeño quejido, al ver ese gesto de dolor en el rostro de su compañera, se tocó los labios con el borde de su dedo índice indicándole hacer silencio.

Con mirada acechante como la de un depredador a su presa acompañada de una sugerente sonrisa, Moonbyul comenzó a acortar la distancia entre ella y Yongsun, metiendo su nariz entre el suave cabello castaño presionó sus labios contra el cuello de su compañera, al ascender otra vez encontró en su mirada una ausencia completa de oposición, en sus ojos veía una invitación ansiosa para que siguiera adelante, haciendo caso a sus impulsos y sin soltar sus brazos, le robó el aire con un beso.

Yongsun nunca había sentido algo así, lo que sentía en ese momento era tan apasionado como lo que veía en aquellas películas de romance que tanto disfrutaba ver ¿Cómo es que esto era real? Ambas estaban tan perdidas dentro de este momento que apenas notaron cuando un golpe de luz entro por detrás de ellas. Moonbyul guiada por sus reflejos soltó de inmediato los brazos de Solar; al voltear vieron a Wheein de pie bajo el marco de la puerta que daba acceso a las escaleras.

Wheein: Yo no he visto nada, ustedes continúen con lo que sea que estuvieran haciendo, me enviaron a buscarlas, pero puedo decir que Solar unnie estaba vomitando o algo así…

Solar: No. –Dijo levantándose. – Si tú no viste nada, es porque no está pasando nada.

Incrédula, Moonbyul levantó sus cejas sorprendida por la inesperada respuesta de Yongsun ante la situación, preguntándose que había sido de la intensa mirada que le había dedicado la mayor hace solo unos segundos atrás. Solar subió las escaleras y al llegar a la puerta vio a los ojos de Wheein buscando complicidad, para así seguir su camino a reunirse con el resto del equipo.

Wheein: Ok, está bien, supongo… –Refirió al ver a Solar pasar. –

Moonbyul que aún se encontraba pasmada mientras miraba entrar a Yongsun, no se había movido ni un centímetro de su lugar.

Wheein: Unnie, vamos, manager nim quería dar un discurso con todo el equipo presente, se siente algo emotiva, ya sabes cómo es cuando bebe de más…

Asintiendo algo confundida, subió los peldaños para acompañar a la menor adentro del establecimiento. Concluida la cena de celebración, el conductor designado del equipo las llevó hasta su casa, al llegar ahí Byul dio las buenas noches a sus compañeras menores y entró a su habitación buscando su ropa de dormir para ir a tomar una ducha, sabía que sería complicado evitar a Solar compartiendo el mismo dormitorio.

Cuando Byul salió de la ducha frotando su cabello con una toalla blanca, su compañera de dormitorio estaba ansiosa esperando a su aparición después de esperar mucho tiempo a que saliera del baño.

Solar: ¿Quieres que te seque el cabello?

La rubia se colgó la toalla alrededor de los hombros y buscó su celular para fijar la alarma, mañana se levantaría temprano para salir a correr antes de prepararse para la entrevista que tenían en la radio.

Moonbyul: No. –Respondía a la mayor sin dejar de mirar la pantalla de su teléfono. –

Solar: Pero siempre lo hago. –Acotó con un tono afligido. –

Moonbyul: Bueno, hoy no. ¿Puedes apagar la luz? –Pidió con apatía. –

Solar: …Si.

Byul se metió a la cama y luego de dejar el teléfono en su velador, se volteó dando la espalda al lado de la habitación que correspondía a la mayor. Algo desanimada Solar abrió las sabanas de su cama en la oscuridad y se recostó, inquieta miraba la espalda de la rubia.

Solar: Moonbyul…

Moonbyul: …

Solar: Byulyi-ah~

Moonbyul: …

Solar: ¿Vas a ignorarme para siempre?

Moonbyul: Yongsun, es tarde, ha sido un largo día, quiero descansar… también deberías hacerlo.

Solar: ¿No podemos hablar de lo que pasó?

Moonbyul: No estoy de ánimo para hablar de eso ahora. Duerme, lo hablaremos mañana.

Solar: …Buenas noches.

Sin volver a responder la menor se tragó toda la frustración que tenía dentro y se forzó a dormir.

En la habitación de al lado Hye jin veía desde su cama como Wheein llegaba corriendo con un vaso de vidrio desde la cocina y se situaba con su oreja pegada a la parte posterior del vaso mientras lo pegaba hacia la pared.

Hwasa: ¿Qué se supone que haces? –Consultó sonriendo. –

Wheein: ¡Ssshhh! Quiero escuchar. –Silenció a la menor mientras fruncía el ceño. –

Hwasa: ¿Qué es tan interesante?

Wheein: Es que hoy, vi algo que me dejó muy impresionada… o sea, no es como si no hubiese esperado que eso finalmente pasara, pero aun así quede como “Oh my god” –Relató haciendo mueca de sorpresa. –

Hwasa: ¿Que viste?

Wheein: Espera, te lo enseñaré. –Indicó quitando el vaso de la pared. –

Wheein fue hasta Hye jin que reposaba sentada en su cama y aprovechó a que la cama de la menor estaba pegada al muro para usarla de ejemplo.

Wheein: Cuando fui a buscar a Byul unnie y Yongsun unnie a las escaleras de evacuación en la cena antes del discurso de nuestro manager, Byul tenía a Yongsun sujeta de los brazos así. –Señaló tomando ambos brazos de la menor. – Justo contra los barrotes de la escalera. Y… se estaban besando. –Confesó llena de emoción–

Hwasa: ¿Besándose cómo? ¿Así? –Cuestionó robándole un pequeño y corto beso a la mayor. – ¿O algo más como esto?

La chica del hoyuelo sonreía mientras intuía las osadas intenciones de Hye jin acercándose para posar sus labios suave y cálidamente en los de ella en un beso mucho más duradero y apasionado que el anterior.

La alarma al amanecer dio estruendosos sonidos que despertaron a Yongsun de su sueño.

Solar: Byul-ah~ ¿Porqué pusiste el despertador a esta hora? Ni siquiera son las 8:00 y la entrevista es a las 10:00.

La mayor se deshacía en quejas mientras con los ojos entre cerrados miraba el reloj de pared colgado de uno de los muros de la habitación.

Solar: Apágalo ya. –Exigía presionando sus oídos con su almohada. –

SeungYul: Aaah. ¿Qué es ese ruido? –Se quejaba con voz grave. –

Solar: Apaga tu teléfono ya Moonbyul.

Reaccionando la chica rubia dio un salto en su cama.

SeungYul: ¿¡Qué haces tú aquí!?

Solar: ¿Cómo que “qué hago aquí”? Jamás me dijiste que me saliera de la habitación… –Refería aun algo dormida. – Vamos a seguir compartiendo el dormitorio.

SeungYul: Si comparto el dormitorio contigo, si estoy aquí, debo ser Moonbyul.

Solar: No, eres Sailor Moon ¿Podrías decir algo con sentido? Es muy temprano para tus juegos. –Gruñía quejándose mientras tapaba su rostro con las sabanas. –

Con el celular de Moonbyul en sus manos SeungYul apagó la alarma silenciando el irritante sonido.

SeungYul: Wow… esto es nuevo para mí.

Solar: Tenemos que salir como a las 9:30. ¿Por qué pusiste la alarma cuatro horas antes?

SeungYul: ¿A donde vamos a las 9:30?

Solar: Tenemos entrevista ¿No lo recuerdas?

SeungYul: Ah… claro, si, la entrevista…

Solar: Siempre eres ordenada con los horarios, casi obsesiva ¿Qué te sucede?

SeungYul: Es… una broma.

Solar: Parece que te despertaste de mejor ánimo hoy, ayer pensé que no ibas a hablarme más.

SeungYul: Lo siento, tengo que irme ahora.

Solar: ¿Lo sientes? ¿A dónde irás?

SeungYul: Necesito ir a ver a un amigo ahora.

Solar: ¿Vas donde Taemin?

SeungYul: ¿Cómo sabes de Taemin?

Solar: ¿Cómo lo sé? Desayunamos juntos hace unas semanas atrás. Deja de jugar… ¿Es esta tu extraña manera de castigarme?

SeungYul: ¿Por qué tendría que castigarte? Tengo que vestirme ahora…

Con rapidez SeungYul dejó el colchón y abrió todos los armarios y cajones cercanos a la cama de Moonbyul buscando algo que ponerse, sacó una camisa azul con lunares, una chaqueta blanca, un pantalón y un corbatín blanco.

SeungYul: Voy a entrar al baño a cambiarme.

Solar: Moonbyul, ¿Estás bien? –Preguntó al sentarse sobre sus sabanas. – ¿Tu voz suena algo ronca? Espero que no hayas pescado un resfrió la noche de ayer y ¿Vas a ponerte eso?

SeungYul: Estoy bien. ¿Qué tiene de malo este atuendo?

Solar: Nada, es solo que sueles usar ropa más sobria.

SeungYul: Es cierto… me siento un poco diferente hoy. Bueno tengo que salir rápido, así que si me lo permites preciosa voy a entrar al baño.

SeungYul sin decir una palabra más se apuró a entrar y cambiarse de ropa.

Solar: ¿Preciosa? y ¿Por qué se fue a cambiar adentro?¿A qué está jugando ahora?

No fueron más de 10 minutos los que tardó el chico en vestirse con la ropa de Moonbyul, tomar su bolso e intentar salir de la habitación. Pasos frente a la puerta del dormitorio Yongsun sujeto a SeungYul por el brazo antes de que este dejara la habitación.

Solar: Quiero pedirte disculpas por lo que sucedió ayer, no estaba en mis cinco sentidos, no sé por qué hice lo que hice.

SeungYul: Esta bien, no hay problema.

Solar: ¿Está bien?

SeungYul: Si, claro. Tengo que irme antes que se me haga más tarde. ¿Me sueltas?

Solar:…Si.

Confundida la mayor le soltó del brazo dejándole ir, no entendía la desenvuelta actitud de la menor, cuando la noche anterior se veía realmente afectada, ¿Qué estaba tratando de fingir? y ¿Por qué sus ojos se veían tan diferentes?

SeungYul intrigado sobre lo que estaba viviendo corrió con desesperación hasta su bar, sabía que Taemin desayunaba en el café cercano al bar y después iba a su trabajo matutino, ya que el chico trabajaba tardes y noches en su bar, pero durante el día se dedicaba a la fotografía.

Al llegar al Café lo encontró precisamente cuando éste iba de Salida. De pie frente a él hizo una pausa con las manos sobre sus rodillas para recuperar el aire después de tanto correr.

SeungYul: Hermano… Necesito ayuda. ­–Rogó mientras respiraba con dificultad. –

Taemin: Hermano… no bromees Byul ya sé que eres tú.

SeungYul: ¿No me crees? Soy Yul, no sé cómo o por qué, pero es de día y estoy aquí. Me costó mucho llegar aquí, wow las cosas son tan diferentes a la luz del día.

Taemin: ¿SeungYul? No puedo creerlo… ¿Qué pasó con Moonbyul? ¿Cómo es que apareciste a esta hora?

SeungYul: No lo sé pero algo muy intenso le debe haber pasado para que yo esté aquí.

Taemin: ¿Había pasado antes?

SeungYul: Si, una vez que falló una audición para la que había practicado mucho, se durmió llorando y aparecí a la mañana siguiente, no lo supe hasta que hablé con la doctora Lee. ¡Eso es! Ella puede ayudarnos. Vamos, acompáñame.

Taemin: ¿A dónde crees que vas? ¿No recuerdas el pacto que tienes con Byul? Tú no interfieres en su vida y ella no interfiere con la tuya.

SeungYul: ¿Y qué pretendes que haga?

Taemin: Moonbyul tiene que trabajar durante el día, tienes que cumplir con sus compromisos.

SeungYul: ¿Y qué hago?¿Quieres que me haga pasar por ella?

Taemin: ¿Tienes una mejor idea?

SeungYul: ¿Estás loco?¿Y si me descubren?

Taemin: SeungYul, eres inteligente… sabrás que hacer. Yo no te puedo acompañar, tienes que hacerlo tú solo. Debo irme a trabajar ahora, pero te llamaré para saber que ocurrió, apenas estés libre búscame y te acompaño a la consulta de la doctora Lee.

SeungYul se llevó las manos a la cabeza lleno de frustración y pensó en lo que iba hacer, tenía que ingeniar algún plan. Al recordar la libreta por la cual se comunicaba con Moonbyul y en la que ella tenía sus tareas de evaluación con la terapeuta, se sentó en una banquilla a revisar el bolso de Moonbyul, cuando encontró la libreta y la revisó, se dio cuenta de que la última hoja no estaba ahí, pues había sido arrancada. Sin más pistas, buscó desesperado alguna información que le pudiese servir de utilidad, dentro del celular de la chica halló su horario de actividades finamente detallado y ordenado, como era de esperarse de Moonbyul, quien siempre calculaba todos sus actos.

A las 10:00 tenían una entrevista en la radio de la cadena KBS, a la cual sin duda no podía faltar, había leído y memorizado todos los diarios de Moonbyul, así que la conocía por el revés y por el derecho, no había algo que no supiera de ella, o así lo creía. Su problema surgía después, ya que a las tres de la tarde tenían una pequeña presentación patrocinada por una gran empresa y él no tenía los dones del talento de Moonbyul, no podía cantar o bailar, asique estaba en un gran aprieto. Ya a las seis de la tarde tenía fijada una consulta con su terapeuta pero antes de eso, solo podía esperar un milagro.

Sacando su celular se grabó para dejarle un mensaje a su querida hermana.

SeungYul: Aaaw… Byul-ah~ Qué te puede haber pasado para que yo esté aquí viendo la hermosa luz del día ¿eh? …Bueno, aunque no tengo ni la menor idea de lo que fue, tienes que ser fuerte, ¡¡Byul-ah Fighting!! Daré lo mejor de mí para que no tengas problemas el día de hoy, cree en mi, soy un excelente actor, te imitaré bien Moonbyul, ya verás, te sentirás orgullosa de tu Oppa Yul –Alardeó mientras ponía su manó en diagonal bajo su barbilla. – ¡Honraré tu nombre Moonbyul-ah~!

Deteniendo la grabación suspiró mirando al cielo, al bajar la mirada y ver su reloj se dio cuenta de que iban a ser las nueve de la mañana y que debía volver a correr.

Llegó a casa justo a tiempo, la camioneta estaba esperándolas afuera de su casa para pasar por la empresa y luego al estudio de radio para grabar.

SeungYul se bajó rápidamente del puesto de copiloto para abrirle la puerta a sus compañeras que iban atrás, actuando con el carisma del más cortés de los caballeros. En el lobby el chico se sentó en una esquita y comenzó a tomar fotos de sí mismo. Solar extrañada por su actuar se acercó con curiosidad.

Solar: ¿Qué haces?

SeungYul: Me veo muy bien hoy, tenía que inmortalizarlo.

Solar: Pensé que creías que hacer eso era banal y narcisista.

SeungYul: Pero estas cosas se hacen para los fans ¿no?

Solar: Nunca te has preocupado demasiado por eso.

SeungYul: Moonbyul ama a sus fans, que no lo diga todo el tiempo no significa que no lo sienta.

Solar: ¿Y por qué estás hablando en tercera persona?

SeungYul: Eeeh… ¿No tenemos que irnos ya? Creo que ya nos llaman, vamos… –Insistió tomando la mano de la mayor. –

Solar mientras más tiempo pasaba, más absurdo pensaba que era la conducta de su menor, era como si fuese otra persona. Antes de ir al estudio la asistente de vestuario las acompañó a un vestidor de la empresa para que las chicas se cambiaran de atuendo. Cuando las chicas empezaron a despojarse de la ropa que llevaban, SeungYul puso una mueca de sorpresa muy difícil de disimular, parecía que sus ojos saldrían de sus órbitas.

Wheein: Unnie, ¿estás bien?

SeungYul: Si, sí, claro… creo que nunca había estado mejor.

Solar: Ha estado actuando extraño toda la mañana, no le hagan caso.

Hye jin al quitarse los pantalones notó como la mirada de la que creía su compañera se clavaba con ansias en el final de su espalda.

Hwasa: ¿Te gusta lo que ves?

SeungYul: Las piezas de arte son para admirarlas ¿no?

Al ver la risa coqueta de la menor Wheein no pudo evitar intervenir.

Wheein: Unnie, y tú no te cambiarás eso… no te lo había comentado, pero pareces el hijo consentido de una familia rica.

Hwasa: Es cierto. –Coincidió riendo. – Pareces salida de una caricatura.

Solar: Al menos cambia tu camisa.

La líder sacó de un gancho de ropa en un colgador una camisa con líneas blancas que formaban cuadros en un fondo negro, algo que sin duda Moonbyul usaría.

SeungYul: No me agrada mucho, pero la usaré. Gracias… unnie.

El chico se metió detrás de un biombo que se encontraba en uno de los rincones de la habitación, nunca nadie lo usaba pero estaba ahí por si acaso había necesidad de usarlo en algún momento.

Hwasa: Bueno eso ya no es tan extraño, aquí está de nuevo la conservadora Moonbyul. Que estas escondiendo ahí detrás ¿eh?

Wheein: ¿No te habrás tatuado verdad?

SeungYul: ¿Es qué quieren venir aquí conmigo y averiguarlo?

“Extraño, extraño, muy extraño...” Pensaba la líder del grupo mientras continuaba observando a Moonbyul, no dejaba de cuestionarse acerca de si sería todo esto consecuencia de lo que había pasado ayer. Su agente les llamó pidiéndoles que se apresurarán, no podían llegar tarde. SeungYul se había deshecho de la camisa el corbatín y la chaqueta y ahora solo vestía la blusa que Yongsun le había dado sobre sus ajustados pantalones blancos y zapatillas de lona.

En la entrevista supo llevar las pocas preguntas que se le hicieron de manera correcta, pero respuesta a la última pregunta no estaba explicitada en sus libretas y tuvo que improvisar.

“Moonbyul, si fueses un chico y tuvieses que elegir a una de tus compañeras como novia. ¿A cuál elegirías?”

SeungYul: Bueno, esa es una pregunta un poco complicada, porque veras, Wheein, es una chica que puede hacerme reír incluso en los momentos en que me siento más triste y me encantaría despertarme y juguetear con ella todas las mañanas; Hwasa, ya sabes, tiene esa aura de Femme fatale con la cual me gustaría ir a dormir todas las noches; pero Solar… Solar, es una chica con la cual alguien querría ir a dormir a su lado y despertar a su lado todos los días de su vida.

Todos en el estudio quedaron conmocionados por la brillante respuesta de “Moonbyul”, y Solar empezó a golpear a la rubia mientras la increpaba, preguntándole por qué había dicho eso.

El programa terminó y el grupo salió campante del estudio agradeciendo al equipo de producción la oportunidad de estar ahí. A las afueras del estudio había una pequeña sala donde en grupo esperaba a su agente, la sala tenía unas amplias ventanas que dejaban entrar una gran cantidad de luz. SeungYul se sentó frente a Solar y sin ninguna prudencia comenzó a mirarla intensamente a los ojos aprovechando que las dos menores convenientemente habían dejado la sala para ir al baño.

Solar: ¿Estas actuando así por lo que sucedió ayer?

SeungYul: ¿Tan grave fue lo que sucedió ayer?

Solar: No sé si diría que fue grave, pero fue importante ¿no?.

SeungYul: Estoy segura que debe haber sido así.

SeungYul estaba usando todas las estrategias que se le ocurrían para sacar información a la mejor amiga de Moonbyul, pero le era algo difícil ya que la chica en cuestión tenía algo que le atraía irrefrenablemente.

Solar: Ya te dije que lo sentía.

SeungYul: ¿¡Qué es exactamente lo que sientes!?

De pronto un gran sentimiento de ira se empezaba apoderar de él, no entendía el por qué se sentía así, él jamás, nunca había experimentado ira, a excepción de cuando veía casos de evidente injusticia, ¿Qué era lo que le enojaba al ver el rostro de Yongsun? Su respiración comenzaba a acelerarse y en su pecho surgía un intenso dolor, sus ojos empezaban a sentirse cansados y su vista perdía claridad, ya casi no podía ver a la chica en frente de él y lo último que sintió fue como caía al suelo.

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Final para el capitulo 10, me reí y disfruté mucho de escribir este capitulo, espero que ustedes lo hayan disfrutado al igual que yo, el siguiente capitulo se titula "Caso inconcluso". Para darles un pequeño adelanto, aparecerá una nueva sesión de terapia que resolverá la duda de por qué solo Moonbyul maneja los días y las oportunidades en las que aparece Yul son siempre de noche. Vuelve un personaje de los primeros capítulos a hacer de esta una historia aun más llena de suspenso.