capitulo 10

A mi profesora con amor

“Espero que sea una ingenua, eso es lo mejor que una chica puede ser en este mundo, una hermosa pequeña ingenua”.

F. Scott Fitzgerald, El Gran Gatsby

 

 

Taeyeon

 

 

Seguía regresando conmigo. Sabía que no debía, pero me gustaba cada pequeña visita. Me permití soñar que ella quería estar cerca de mí porque me encontraba irresistible y emocionante. Y con cada cerveza que bebía, ese sueño se filtraba en mi sistema hasta que me mareaba con ella. Me deseaba.

 

A pesar de que atendía a una chica que parecía tener una identificación falsa, y también pechos falsos, su mirada se dirigió a la mía al final de la barra. Aceptó su pago, apenas mirándola, a pesar de que era bastante obvio que se interesaba en ella. Entonces regresó… a mí. Observarla caminar más cerca era un ajetreo.

 

Este era el por qué permanecí aquí. Ansiaba cada vez que se alejaba de mí, solo así podía observarla volver.

— ¿Necesita otra?

Sacudí la cabeza. —No. —Pero, tan pronto como las palabras salieron de mi boca, solté abruptamente—: Sí.

 

Tiffany sonrió, y otra botella de cerveza apareció en su mano. Cuando quitó la tapa, y la dejó frente a mí, levanté la cabeza lo suficiente para hacer que mi cabello cayera sobre mi hombro.

 

— ¿Cómo supiste que estaba aquí para una cita?

 

Apoyó sus codos en la barra para inclinarse hacia mí.

 

—Tal vez porque no necesito un doctorado para leer mentes como usted lo hace, profesora.

 

Un fundido, caliente y exquisito torbellino pasó por mi cuerpo cuando recordé la conversación que tuvimos en el campus hace una semana. Amaba cuando alguien recordaba algo que les dije anteriormente, y lo decía semanas después. Significaba que puso atención y había penetrado lo suficiente para llevarse una parte de mí con ella.

 

Resistiéndome a la urgencia de temblar, y balancearme hacia ella, sonreí.

 

—Eso, o tienes un increíble razonamiento deductivo.

 

Se rio. —O eso. —Enderezándose de la barra para tirar el trapo blanco sobre el hombro, tomó mi botella vacía, y la tiró a la basura. Le siguió el sonido del vidrio quebrándose, lo que me hizo estremecer—. Lleva más maquillaje del que usa en clases —dijo al final—. Su cabello está arreglado, bonito y tentador. Su vestido es coqueto y seductor. Huele lo suficientemente bien para devorar.

 

—Una vez más, se inclinó sobre la barra, de manera que pudo ver el otro lado de esta, y echarle un vistazo a mis pies. Después de mirarlos fijamente, alzó la vista otra vez, y nuestros ojos permanecían a unos centímetros de distancia—. Y está usando el más tentador par de tacones “fóllame” que creo nunca haber visto. Agrega eso, y deletrea cita.

 

Retrocedí aterrorizada, pero más aterrada por la manera en que mis pezones se tensaron ante sus palabras. — ¿Tacones fóllame? —Ya escuché ese término una o dos veces. Pero nadie nunca me acusó de usar un par. Me hacía sentir viva. Cálida. Peligrosa.

Lasciva.

 

Cuando se deslizó hacia su lado de la barra, le di toda mi atención a la fuente de esos sentimientos desenfrenados y dije—: Y yo todo lo que quería provocar era un bésame y desordena un poco mi cabello.

 

Tiffany sacudió la cabeza. —Créame. Desde de mi punto de vista, gritan un definitivo fóllame. Tal vez en el asiento trasero porque esperar hasta que vaya adentro para encontrar una cama tomaría mucho… tiempo.

 

La imagen que plantó debería aterrorizarme. En el asiento trasero con una cita era donde comenzaron mis más grandes pesadillas. Pero escuchar la descripción de Tiffany, con su ardiente voz y cautivantes ojos azules puestos en mí, solo crecía más mi lujuria.

 

Guau. Pero en serio, guau. Eso es lo que mis tacones significaban ahora. Para ella.

¿Qué? No. Eso no es lo que significaban para Tiffany Hwang. Para nada. Pero, guau, era algo así.

Dios, me tenía confundida.

¿Cuánto bebí?

 

Arreglándomelas para actuar menos despistada de lo que me sentía, alcé la barbilla y murmuré—: Hmm. Gracias por el aviso. Supongo que es algo bueno que él no haya venido. No creo haber querido ir tan rápido en la primera cita. —Luego, sin poder evitarlo, agregué—: Con él. —Y la manera que la miré dejaba claro que puede que no haya sido tan perspicaz en una primera cita con alguien en concreto.

 

—Maldición. —Sus labios se abrieron, y las mejillas comenzaron a enrojecer. Su pesada mirada me trazó, y me provocó ansias porque casi parecía… tentada.

 

Dios, permanecía en un profundo hoyo. Desafortunadamente, amaba la sensación de ahogarme en su presencia. No quería que se terminara este momento.

“Solo aquellos que intentan resistir a la tentación, Saben lo difícil que es”.

C.S Lewis

 

Tiffany

 

Mi autocontrol se iba de las manos. Juro que intenté recordarme ser una dama, pero cosas inapropiadas seguían deslizándose de mi boca, y luego ella respondió con algo tan…

 

Maldición. Me sentí casi aliviada cuando me llamaron y me alejé, porque cualquier cosa que le dijera a la Dra. Taeyeon Kim sería una proposición malintencionada y absolutamente inapropiada. Demonios, probablemente me hubiera arrodillado y rogado por un pedazo de ella.

 

Por suerte, el tiempo lejos mantuvo mi cordura. Pero seguía volviendo a ella tan pronto como me era posible.

 

Era casi la una y media, y cuánto más se acercaba el cierre, más inquieta me ponía. Una vez que el bar cerraba, tendría que irse, y nuestra noche estaría acabada. Temía eso.

 

—Creí que ustedes no ganaron el campeonato nacional este año —dijo un instante antes que sus ligeros dedos rozaran mi antebrazo.

 

Sentí un escalofrío cuando su caricia exploraba cada poro de mi ser. Apenas me tocó; apenas debí haberlo sentido. Pero lo sentí. Más que la vez que fui sacado de las eliminatorias y terminé en el hospital con una conmoción cerebral. Sus dedos dejaron salir una viva corriente eléctrica a través de cada nervio en mi interior, hasta que me encontré tan húmeda, mi coño palpitaba en sincronización con mi latido.

 

Me di cuenta que nunca antes tuvimos contacto piel con piel. Y tenía que decirlo, la primera impresión de mi piel desnuda contra la suya era, mierda… intensa.

Esta mujer, justo aquí, era peligrosa.

 

Levantó la mirada mientras esperaba mi respuesta, recordándome qué había captado su atención: el estúpido tatuaje en mi antebrazo.

—Ese es el resultado de una celebración previa… al estilo ebrio —le dije, asintiendo al marcador.

 

Su mano y todas las preciosas uñas pintadas con un y rosado subieron por mi piel, justo sobre el tatuaje. Sacudiendo la cabeza, siguió acariciándolo.

 

—No entiendo.

Suspiré profundamente… por dos razones. Una: Bueno, mierda, me acariciaba. Se sentía tan bien concentrarse en nada más. Pero dos: odiaba confesar mi estupidez, y ese maldito tatuaje era una de las más grandes estupideces que he hecho.

 

—La noche antes del juego —dije, incapaz de quitar la mirada de los dedos que parecían encariñados a mi brazo—, algunas chicas con otros chicos del equipo nos emborrachamos bastante y todos tuvimos estos para celebrar nuestro triunfo.

Me miró un segundo antes de finalizar—: Y… al día siguiente, perdieron.

—Cuando rodé los ojos y asentí, echó hacia atrás la cabeza y rio.

Si no fuera por el hecho que se reía de mí, hubiera estado totalmente cautivada por ese honesto y abierto sonido de diversión. Oh, a la mierda. Observé, quiero poner mi boca en esa expuesta garganta.

Me tomó un segundo antes de poder chasquear mi lengua, y sacudir la cabeza.

—Adelante. —Le hice un gesto con la mano como si estuviera enojada, a pesar de que comencé a reírme con ella—. Ríete. Pero el próximo año, cuando ganemos el título, planeo cambiar el último dígito del año, y este bebé será un recordatorio de nuestro logro… no nuestros fracasos.

Se inclinó, los ojos oscuros brillaban resplandeciendo. — ¿Y si pierden de nuevo?

Quería besarla tanto. Sus labios perfectos prácticamente me rogaban que los dominara. Pero respiré, y me concentré. Decidí contestar dulcemente en lugar de ser seria. Así que con una sonrisa, flexioné mi músculo bíceps que ella aún sostenía.

 

— ¿Qué? ¿Con este brazo lanzador de oro? Eso no es posible.

 

No rio como esperé que lo hiciera. No, la deliciosa y tentadora mujer contuvo el aliento, y su toque se volvió atrevido cuando deslizó su mano por el musculo tenso.

 

—Oh, Dios —suspiró—. Apuesto que las mujeres aman agarrar estas armas cuando te introduces en ellas.

 

Santa…

Mi mente quedó en blanco.

 

O más exactamente, no se blanqueó por completo. Simplemente perdió todo pensamiento razonable cuando imágenes de cada manera en que podría agarrar mis músculos bíceps cuando me introdujera en ella llenaron cada espacio en las sinapsis. Demonios, en una de las imágenes, ni siquiera tenía que tocar mis brazos. Solo tenía que gritar mientras la hacía venirse.

Después de follarla mentalmente de cada manera conocida por la humanidad, sacudí la cabeza y me aclaré la garganta. Tuve que alejar la mirada antes de intentar actuar impulsivamente. No es que ayudara mucho. Aún sabía que permanecía ahí. Aún sabía que quería agarrar mis brazos mientras yo… demonios, no debería ir ahí. Pero lo hice una y otra vez.

Así que mirar hacia otra parte no ayudaba a que mi coño se relajara, pero sí ayudó a darme cuenta… giré hacia ella.

 

—Mierda. Estás totalmente ebria, ¿no es así?

Sabía que bebió botella tras botella, pero no actuaba como una ebria risueña como la mayoría de las estudiantes que acostumbraba a ver. Lo que dijo, de algún modo, fue como nada que pudiera imaginar que me dijera la Dra. Kim…nunca. Ni siquiera ebria. Sin embargo, ya que lo hizo, tenía que estar completamente fuera de combate.

 

Y ahora que buscaba señales, sus ojos eran brillantes y vidriosos. Y su postura se mantenía un poco débil.

 

—Nunca he estado ebria en mi vida. —Intentó enderezar la columna en su estilo puritano de profesora, pero simplemente terminó volcándose a un lado. Dándose cuenta de lo que hacía, soltó mi brazo para apoyar una mano en la cima de la barra y recuperarse. Cuando las cejas se fruncieron con irritación, la alcancé y la ayudé a situarse bien. Ya extrañaba la falta de sus manos en mí. El cálido fantasma de ellas aun quemaba mi piel.

 

— ¿Echaste algo fuerte en mi trago? —Acusó, frunciéndome el ceño—. Porque de repente me siento un poco… mareada.

 

Resoplé. — ¿Mareada? Cariño, pasaste de mareada a ebria al instante en que me preguntaste detalles de mi vida ual.

 

Su espalda volvió a enderezarse con toda la superioridad moral. — ¿Disculpa?

 

Estoy completamente segura que no… oh, mierda. —Su rostro se inundó de color cuando abrió la boca—. Acabo de preguntarte sobre tu vida ual.

 

Observar sus labios diciendo mierda fue mi perdición.

 

Retrocedí, deseándola tanto que mis músculos vibraban por la tensión que usaban al retenerme.

 

—No te preocupes. —Sacudí una mano para excusar su comportamiento, para hacer como si no fuera tan caliente y y como era realmente—. Sé todas las metidas de patas que provoca el alcohol, ¿recuerdas? —Le enseñé mi antebrazo, y me alejé de inmediato, en una retirada petrificada.

 

No quería irme, pero necesitaba espacio antes de que hiciera algo imperdonable.

Le di un empujón a Minho en su dirección, quitando el trago de fresa de la mano. —Tienes que mantenerme lejos de ella —jadeé, tentada a tomarme el trago, en lugar de llevárselo a su propietario—. Si va a la parte trasera por cualquier razón, no me dejes seguirla. ¿Entiendes? Si trata de darme su número, no me dejes conservarlo. Y si ella… ¡Jesús! —La observé justo a tiempo para ver que un chico le golpeteaba el hombro, llamando su atención—. Y mantén a ese marica lejos de ella, ¿de acuerdo?

Minho parpadeó. —Eh…

 

—Gracias. —Me giré, dejándolo con su nuevo deber.

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Comments

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LlamaAmerica #1
Chapter 33: Bueno después de tanto pude terminar esta hermosa historia! Esta demás decir que siempre es un gusto leer tus adaptaciones más porque son de mi hermos TaeNy <3
JKS_lilhy #2
Chapter 33: Gracias por la historia, yo trabajo, estudio y soy mamá así ke leer este tipo de fic me encantan de verdad y más si son de mi pareja favorita taeny is real....
Skyth06
#3
Chapter 33: Fue hermoso gracias por compartirlo!!
2597611 #4
Chapter 33: Voy a llorar :'( .. no quería que acabe la historia pero buehhh .... Es una de mis favoritas !!
roguecr #5
Chapter 33: Hermosa historia gracias x compartirla y tienes razon los fics siempre son mejor con nuestro amado. Taeny
Skyth06
#6
Chapter 32: Porrr finnnn siiiiii
sakuratsukino #7
Chapter 32: es todo, yo esperaba un poco más en el final, pero no me mal entiendan la historia es muy buena, gracias autor por compartirla, extrañare leer las actualizaciones, espero exista un epilogo
roguecr #8
Chapter 32: Que bueno q tae regreso , al fin juntas. :)
2597611 #9
Chapter 32: Enserio es el final ??????
apsunbyung #10
Chapter 32: Bastante buena la idea del fic. Me gusto. Gracias por compartirlo (y adaptarlo claro)^^