Capítulo 3

Tú no eres el único © |ᴀᴅᴀᴘᴛᴀᴄɪᴏ́ɴ|
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El agua se desliza por mi cuerpo desnudo y mis manos dibujan su camino a través del mismo, sintiendo con la yema de los dedos las pequeñas marcas hechas por Nathaniel. Con cada roce de mis dedos en la cicatriz mis ojos se cierran involuntariamente y el nudo en mi garganta crece aún más.

El vapor sale junto conmigo cuando deslizo la puerta de cristal y me paralizo frente al espejo del lavamanos, mi rostro demacrado y cansado son la vista que recibo sin animo, al menos la hinchazón se ha ido, así como los moretones.

Lo que no se ha ido y no se irá nunca, serán las cicatrices internas.

Mi rostro esta inexpresivo y me es inevitable no recordarlo. Un estremecimiento me sacude y luego viene la calma.

Lejos de su escrutinio puedo ser libre, aunque aún viva con el miedo de que aparezca de la nada y me lleve con él. Las pesadillas siguen a mi asecho con imágenes terroríficas de él y mías, unas tantas donde yo estoy inconsciente, sin reaccionar y él está riendo como maniático por no ver algún movimiento de mi parte. He llorado al despertar de cada una de ellas y esta agonía no se va por sencillo que parezca.

¿Su recuerdo siempre me perseguirá? Porque si es así, no será vida.

Vivir con el miedo de que en cualquier momento lo vea nuevamente y no saldré ilesa de ese encuentro, es la sensación más terrorífica que se pueda tener.

Mi corazón duele al darme cuenta de que nunca me amó de la misma manera en que yo lo hice. Tarde me di cuenta de ello y peor aún, me doy cuenta ahora con más claridad que estoy lejos de Nathaniel. Él solo buscaba diversión con una pueblerina, quería enamorarla y hacerla caer a sus pies para después usarla como le viniera en gana.

Al final... fui esa pueblerina ingenua y estúpida quien cayó en sus garras infernales, pero lo absurdo dentro de todo este infierno es que aún lo amo.

¿Podré alguna vez encontrar a alguien que pueda amar como lo amo a él? Si lo encuentro dudo mucho ser capaz de darle todo mi amor, no podré cuando sé que estoy herida y temerosa a reiniciar una relación con alguien.

Inevitablemente no puedo dejar de pensar en lo que estará haciendo, si piensa en mí, si me extraña, si le hago falta, si se arrepentirá por todo el daño que me hizo. Pero estoy más que segura de que el único pensamiento que atraviesa su cabeza es encontrarme para matarme por haber huido de él, de mi dueño.

Tú no eres de nadie. Valórate.

Le dije a mi reflejo.

—Stephanie —unos toques suaves a la puerta llamaron mi atención—. ¿Todo bien? —Ni siquiera me había vestido aún.

Solo debería dejarlo ir.

«Pero no lo haces. Lo amas y te duele dejarlo ir».

Aprieto los parpados y la toalla entre mis manos.

No debo amarlo.

Abro mis ojos y quedo clavada en mi reflejo. ¿En eso me he convertido?

—Todo bien —respondí sin siquiera apartar los ojos del espejo—. Solo... —me perdí en los dulces recuerdos. Reprimí el impulso por querer nombrarlo y llorar—. Voy en un momento.

Susurré aún con los ojos fijos en el espejo, su sonrisa apareció y como si fuera magia poco a poco se iba materializando ante mis ojos, con su chaqueta favorita, la que siempre usaba cuando no tenía trabajo, esa sonrisa dulce que me ofrecía cuando quería algo y sus oscuros ojos.

—¿Segura que no necesitas ayuda?

Sacudí la cabeza, no respondiendo a la pregunta. Solo quería alejar de mi cabeza la imagen de Nathaniel.

«Esto se está volviendo obsesivo».

—Stephanie... —volvió a intentar.

Una tenue sonrisa se formó en mis labios. Taeyeon ha sido tan buena y dulce, ha ayudado mucho a no sentirme perdida, a sentirme protegida porque eso es lo que hacía, protegerme. Ha consolado cada una de mis pesadillas sin siquiera ser invitada a mi sufrimiento y se ha quedado hasta que yo vuelvo a dormirme.

—Solo un momento.

Hablé audiblemente para que me escuchara.

Quité la toalla de mi cuerpo y por primera vez me atreví a verlo, me sentí mejor de no ver las marcas en mi cuerpo. Me coloqué el sostén y las bragas y salí a la habitación, cubriéndome el cuerpo con un albornos, me dirigí a la cama y ahí descansaba un elegante vestido color rojo con destellos en el talle del pecho, a su lado unas zapatillas Louboutin color rojo brillante o al menos eso se leía en la caja, en el tocador se encontraban todos los accesorios que ella me había asignado.

Mis dedos se deslizaron por la tela del fino vestido, su textura tan suave y tersa se sentía como una caricia entre mis dedos. Un vestido muy caro que no encaja para nada conmigo, yo no soy esta mujer que aparento ser, la que se pone cosas exageradamente caras para sentirse bien o solo por capricho, pero Taeyeon insistió.

¿Cómo decirle que no a la única persona que ha cuidado de ti tanto tiempo? Simplemente no se le puede negar un capricho.

El motivo de su insistencia solo es para acompañarla a un evento, un reencuentro escolar por lo que me ha mencionado.

Por obvias razones me negué rotundamente en asistir con ella, no quiero ser objetivo de miradas por llegar a su lado y mucho menos quiero estar incomoda con personas que no conozco. A duras penas puedo lograr mirarla a los ojos y poder expresarle mi gratitud, o hablar con la señora de la limpieza que viene todos los días, me sorprende lo bien que maneja todo y sobre todo me sorprendió que Taeyeon siendo una persona tan noble y bondadosa, sea de buena posición económica.

No me atrevo a preguntarle a que se debe su economía o de dónde saca su fortuna, eso es ser entrometida, pero ella no se molesta ni siquiera en ocultar su fascinación por ayudarme.

Después de haberme cuidado por dos días —días en los que estuve inconsciente—, tuve que regresar al motel donde me quedaba para encontrar que todas mis cosas habían sido tiradas a la basura, estaba sin absolutamente nada.

Sin dinero, sin ropa, sin un techo que me protegiera, y ahí, en medio de mi desgracia ella se alzó como una diosa o un ángel, dándome su protección, eso es lo que soy ahora.

Su protegida.

—Stephanie —su voz resonó dentro de la habitación.

Retuve el grito en mi garganta por el susto, con una mano en el pecho me giré para mirarla. Es impresionante como alguien luce con ropa carísima, aunque siendo sincera, ella se ve realmente impresionante con todo lo que usa, el vestido entallado a su cuerpo no es la excepción.

—¿Qué es lo que te está llevando tanto tiempo?

Su pie tamborileaba en el piso brillante de cerámica pulido, se veía impaciente y no la culpaba, me he demorado demasiado con mis divagaciones.

—Solo...

En realidad, no sabía que excusa poner.

—¿Te preocupa que todo sea incomodo? —Preguntó con voz suave. Me sentí como una niña a punto de llorar, estaba en duda—. Estás conmigo, no dejaré que nada malo suceda y si estás incomoda... regresaremos a casa.

Una punzada de culpa me atenazó las entrañas. No quería ser la causa de que ella abandonará sus actividades, pero en las últimas dos semanas eso es lo que ha hecho, ha corrido a mí a la primera llamada de auxilio que he dado.

Mis ojos por primera vez conectaron con los suyos desde que ingresó a mi habitación, sus ojos no mostraban pisca alguna de cambiar de parecer, al contrario, esa mirada era tan suave y tierna que te inflaba el pecho de afecto.

Me siento como una hermana menor a la cual cuida a capa y espada, pero muy en el fondo de mi cabeza una voz tercamente grita que no, que ella no me ve como a una hermana menor, si no como mujer a la que puede amar.

—M-me... c-cambiaré —susurré, dándome la vuelta para darle la espalda.

Me siento incomoda con su presencia cuando desato el nudo de la bata de baño, ella no se ha movido ni un poco de su posición y sus ojos parecen atravesarme. Aprieto los parpados y muerdo mi labio solo unos segundos para soltarlo con un gran suspiro temeroso, dejo caer la bata a mis pies, dejándola ver mi cuerpo con tan solo lencería.

Un estremecimiento recorre mi cuerpo con la sensación de sus ojos en mí, los latidos de mi corazón aumentan con la adrenalina que recorre mi cuerpo y la sensación es tan confusa que no sé exactamente como describirla, es una mezcla de miedo y reconocimiento ante esta mujer.

Cuando termino de colocarme el vestido me giro para verla, pero sus ojos parecen haber perdido el brillo con el que había entrado a la habitación.

«Ella vio tus cicatrices».

Dice la voz en mi cabeza.

—Déjame ayudarte —su voz apenas era un susurro audible.

Apreté mis labios en una línea recta y me giré nuevamente para darle la espalda, mis manos se cerraron a mis costados en puños débiles con la sensación de su presente calor detrás de mí. Sus dedos tocaron mi piel y mi cuerpo tembló, retuve el impulso por girarme y aventarla y en su lugar cerré mis ojos con fuerza.

No quería que me tocara, no me gustaba, me aterraba el sonido del zipper porque fue lo único que se escuchó por unos segundos que parecieron eternos. Contuve el aliento cuando se detuvo y apreté nuevamente mis parpados, sus dedos se habían detenido en un punto en mi espalda y la punta de ellos se deslizó por el relieve como una delicada pluma.

Sí, Taeyeon. Eso es una cicatriz.

Dije en mi fuero interno.

—¿Quién te hizo esto? —Preguntó.

Negué con la cabeza varias veces y me aparté.

—No importa —mi voz salió tan apagada como mi alma.

La escuché suspirar y de la nada sus brazos me rodearon, mi cuerpo se paralizó nuevamente. Su contacto me hacía recordar a Nathaniel pero ella no es él, es Taeyeon, la dulce mujer que me protege sin pedir nada a cambio.

—Estás a salvo conmigo, Stephanie —susurró en mi oído.

Quise llorar porque me hubiera gustado encontrar a alguien que me dijera eso antes de conocerlo o cuando mi padre comenzó a beber.

Un nudo subió hasta mi garganta, casi ahogándome, pero si comenzaba a llorar ella insistiría en saber quién me daño y yo no estaba dispuesta a revelar mi gran secreto.

Me aparto por los hombros y mis ojos se clavaron en los suyos, me sonrió y yo solo me quedé como una tonta observándola. Ahí está de nuevo, ¿qué es eso? El estómago parecía estar en conflictos y mi cerebro parecía estar colapsando, mi pulso cardiaco aumentó aún más cuando una de sus manos se dirigió a mi mejilla y limpió una lágrima que no había notado.

—Una mujer tan hermosa como tú, no debe llorar —sonrió nuevamente, esta vez dejándome ver su hoyuelo.

El camino hasta el lugar de la citación fue bastante silencioso, me sentía tan incómoda en este coche lujoso y sobre todo con un hombre desconocido conduciendo, Taeyeon se veía relajada y pensativa a la vez, yo en cambio me devanaba los sesos pensando en cada una de las reacciones que he tenido cuando ella está cer

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DorkyKawaii
¡Actualización para mis lectores nocturnos!

Comments

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forever17 #1
Autoraaaa dónde puedo leer la segunda parte? Tu página de wattpad ya no tiene ninguna historia :(
Hanna23 #2
Habrá segunda parte????? .. quedé muy enganchada
sone009_ #3
Chapter 27: Que pupu todo, no me acuerdo de esto pero odio a su hermano enormemente carajo. Amo a Tae!!!!! Necesito leer yaa
-taesandara-
#4
Chapter 27: :c esta en coma!!! O.O!!! Siento que Tiff se quedará con su "hermano" lo cual sería horrible... u.u espero la segunda parte, aunque casi.no me guste leer en wattpad, pero no importa esta historia vale la pena.
Te lo dije hace un tiempo, pero te lo repito otra vez, yo te admiro mucho y me encantan tus historias, las sensaciones de los últimos caps. Fueron tan reales, sigue así. Esperaré
soulholic
#5
Chapter 23: Me e mantenido al margen de esta historia, y te juro que quisiera matar a Tiffany aquí justo ahora por ser tan tonta y no es por nada pero espero que sufra mucho, perdiendo a Tae.

Y tambien espero que el tal Nathaniel o como se escriba no sea el padre de mi Tae porque enserio me matarias.

Autora consiguele pareja a Tae para que Tiffany se muera de celos y se de cuenta de lo que esta a punto de elegir no le traerá nada bueno. Y no solo eso, espero que Tae no la vuelva a perdonar.

Enserio que esa Tiffany me tiene muy disgustada.
Luisadelgado00
#6
Chapter 20: se vino lo bueno ufff doble actualización mil gracias!!!!
Luisadelgado00
#7
Chapter 19: ESe bobo de kyung Il siento que esta celoso y no acepta que fanny quiere a alguien mas y que eso fue solo de niños!! perdon si me indigne jajaja pero el al ser mayor deberia entender las cosas como son
-taesandara-
#8
Chapter 19: Porque siento que el fic terminara triste :c
sone009_ #9
Chapter 16: Ay no, se me había olvidado el estúpido hermano de Fany ¡LO ODIO! -_-. Esperando el siguiente capítulo. Gracias <3
Luisadelgado00
#10
Chapter 16: me encanta!!! Tae es divinaaaa