Jessica PDV

No me equivoque al pensar que el interior de aquella casa seria frívolo. Me sentía demasiado sola allí dentro, rodeada de hombres armados… Y esa sensación no hizo más que intensificarse en cuanto escuche el sonido de unos tacones. La silueta de una mujer se dibujó presuntuosa tras un muro de ladrillos de cristal opaco.

—Hola, Jessica. —Reconocí aquella voz y temblé notando como las pupilas se me dilataban. Todo mi cuerpo se tensó en cuanto me encontré con su mirada.

Hyuna había cambiado. Ya no era la chica alegre que sonreía amable y se moví coqueta. No quedaba rastro de la amiga que en su día compartió la vida conmigo, y me dolió descubrir lo cómoda que se sentía en aquella versión de sí misma. La persona que se deslizaba por el salón como la modelo más experimentada era la auténtica Hyuna. Conmigo solo había fingido.

—¿Qué es esto? —pregunte tan concentrada en su sonrisa arrogante que no puse objeciones cuando sentí los labios de Donghae jugueteando con el lóbulo de mi oreja.

—¡Sorpresa! —susurro Donghae.

—He pensado que merecías una explicación y te vendría bien que te la diera un acara amiga —intervino Hyuna, cambiando de postura.

—¿Qué explicación? —exigí saber sin apenas pestañear—. ¿Qué haces aquí, Hyuna? —Di un salto al notar los dedos de Donghae acariciando ersamente la parte baja (muy baja) de mi espalda—. ¡¡¡Quiero que me expliquéis que está pasando!!! —grite.

—¡Oh, cariño es sencillo —repuso Hyuna.

—Ahora tiene vía libre —canturreo Donghae.

Me lleve las manos a la sien, presione con fuerza y negué con la cabeza incapaz de entender aquello.

—¿Vía libre para qué?

—Para Jadyn —gruño Hyuna—. Esa estúpida azafata, Sooyoung, no ha sabido interpretar bien su papel. Bueno, no del todo porque la pobre ha terminado con un tiro entre ceja y ceja. —Se burló poniendo los ojos en blanco y yo termine aún más confundida.

—¿Cómo sabes eso?

—Cariño, yo lo sé todo. —Se balanceo de un lado a otro, exhibiéndose—. Nunca fui a Turquía. Ni siquiera he salido del país. Todo este tiempo eh estado con Lee Jongsuk-señalo a Donghae con la barbilla-, su primo, en Jeonju. Un gran lugar, por cierto.

—Sabía que te gustaría, Hyuna —sonrió Donghae.

Dios, aquella complicidad me tenía tan desconcertada que hasta me costaba mantener el equilibrio. Nunca imagine que las cosas pudieran llegar a ese límite.

—Yo fui quien pago a Sooyoung para que actuara en mi lugar —admitió Hyuna, como quien explica las reglas de un juego de mesa.

—¿Cómo sabias que Jadyn y yo estábamos en el aeródromo?

—Tengo mis contactos —repuso Hyuna.

Una ola de calor subió por mi vientre. Empezaron a temblarme las manos y las cerré en un puño tensando los brazos. Donghae me acaricio el brazo mientras se acercaba de nuevo a mi oreja.

—¿Sabías que tu Jadyn se acostó con la azafata cuando viajo a Londres? —musito excitado.

Le mire furiosa.

—Si pretendes hacerme daño con ese comentario, te advierto que no lo has conseguido —masculle haciendo malabarismos para no rozar su boca con la mía—. Ella podía hacer lo que le diera gana. Ni siquiera nos llevábamos bien.

Y era cierto.

—No te desvíes, Donghae —gruño Hyuna, con dominio—. Y haz el favor de callarte.

—Os conocéis —murmure negando con la cabeza—. Dios mío, Hyuna… tanto tiempo siendo amigas y…

—¡No! —bramo. — tanto tiempo fingiendo ser tu amiga. Tú nunca me has interesado. Siempre con tu cara perfecta y tu bonito cuerpo, siendo el centro de atención y consiguiendo que todos estuvieran a tus pies con solo pestañear. —Empezó a caminar siniestra—. Siempre con buenas notas y una conducta ejemplar, hasta los profesores babeaban por ti. Mientras que yo no ha sido más que un cero a la izquierda. La amiga de Jessica, la que nadie ve porque están más pendientes de tu forma de mover el culo.

No supe si sería capaz de hablar.

—Pero, ¿porque…? —balbuci.

—¡No sabes cuánto te aborrezco! —Exclamo alzando los brazos—. Cuando mi madre murió, me fui del internado San Patrick utilizando la excusa para perderte de vista. Entonces, la conocí y supe que era mi oportunidad. No todos los días se logra a una Park —sonri