El sonido perturbante del despertador sobre la mesa de noche, lo obligó a salir de la cama con los ojos aún adormecidos y el cuerpo suplicando más horas en la cama. Dio una mirada a su teléfono celular para constatar la hora de la mañana, soltando una sonrisa amplia, luego de darse cuenta que día era.

El día por el que había estado esperando por semanas. Pronto sería un mes, y aún no podía creer que sus mejores sueños se hayan vuelto realidad.

Sonrió más ampliamente, recordando aquel momento vivido en el jardín. Todo parecía tan lejano ahora, aunque realmente era poco el tiempo que había pasado.

-Eric?... te están esperando en la mesa! – llamó su madre desde fuera de su habitación, dando ligeros toques contra la puerta.

Su expresión cambió completamente, dándose cuenta que estaba retrasado para el desayuno de todos los días con la familia Lee-Kim.

Rápidamente corrió a la ducha, aseándose en un parpadear y bajando luego las escaleras, siendo bienvenido por los rostros sonrientes de los esposos Lee-Kim y el hijo de éstos.

Una sonrisa que daba una calidez indescriptible a su corazón.

Eric sonrió tontamente en dirección de HyeSung, tomando asiento en la silla frente a éste. –qué harán hoy?... – interrumpió Minwoo el momento de los dos muchachos.

La navidad se acercaba y la escuela a la que asistían, les había otorgado unas pequeñas vacaciones de invierno a los dos muchachos. Vacaciones que pensaban aprovechar al máximo.

-a-aún no lo sabemos – respondió Eric nerviosamente.

Los dos muchachos habían planeado todo tipo de actividades para el día. Sería su primera cita desde el día que decidieron ser novios. Pero temiendo por la reacción de los mayores y no estando listos aún para dar la feliz noticia, HyeSung y Eric, habían decidido ocultar su noviazgo a sus padres.

Ambos muchachos sabían que no importara cómo, la noticia sería muy explosiva para los padres de HyeSung. Lo mejor era esperar un poco y preparar a los dos adultos con calma.

-cómo sea, asegúrense de estar acá para las 8pm, tu abuela quiere discutir los detalles para la cena de noche buena – se dirigió Dongwan a su hijo.

HyeSung asintió con una sonrisa nerviosa y una mirada apenada hacia Eric.

Sus planes para la noche tendrían que posponerse.

-estás seguro que quieres que mi madre organice la cena de noche buena? – interrogó Minwoo a su esposo, luego que ambos abandonaran la residencia en el auto del primero, dirigiéndose a las oficinas de la compañía de los Lee.

-creo que es hora de dejar de preocuparme por ciertas cosas, quiero concentrarme más en los asuntos de la compañía – respondió Dongwan, tomando la mano libre de su esposo.

Minwoo sonrió complacido. Era lo que esperaba de su esposo.

Los esposos Lee-Kim, llegaron a sus oficinas, encontrándose con una presencia no muy agradable, sentada en el pequeño sofá de la sala de espera.

-Minwoo… tanto tiempo – sonrió la mujer, dirigiéndose al pequeño hombre que lucía en evidente estado de sorpresa.

Lo que menos se esperaba Minwoo, era encontrar a su ex novia en su oficina, luego de tantos años de ausencia.

El rostro de Dongwan denotaba sorpresa e incomodidad. El joven padre pensó que no volvería a saber de la ex prometida de su esposo, luego de aquella vez en la fiesta de cumpleaños de su hijo, hace siete años. A pesar de conocer perfectamente la historia de su esposo, Dongwan no podía evitar sentirse inseguro.

-qué haces acá?... creí que continuabas viviendo en Sidney… - habló Minwoo con tono serio

-regresé hace poco… me divorcié… otra vez… - sonrió ácidamente la mujer, sorprendiendo aún más a los dos esposos.

-vine a verte por que mi esposo me entregó alguna de sus acciones como parte del acuerdo de divorcio… así que a partir de ahora… nos veremos más seguido – continuó hablando Amy, mostrado una sonrisa extraña.

Dongwan sabía que la sonrisa en el rostro de la mujer, significaba problemas para él. Quizás había tomado la decisión correcta al dejar de lado los deberes de la casa, para dedicarle más tiempo a su esposo y los negocios de la familia.

-bueno, si ese es el caso, no es conmigo con quien debes tratar… Dongwan se encarga a parir de ahora de los tratos con los clientes – respondió Minwoo, tomando orgullosamente la mano de su esposo.

La sonrisa en el rostro de Amy se desvaneció, notando el brillo en los ojos de Minwoo, al robar una mirada a su esposo.

-ah claro! Había olvidado que seguías casado… con este hombre – habló Amy con arrogancia, dirigiendo una mirada despectiva en dirección de Dongwan.

-casado y muy feliz… y no olvides a nuestro hijo – respondió Minwoo, sujetando con más fuerza la mano de su esposo.

La expresión en el rostro de la mujer se volvió incómoda. Ya era muy humillante para Amy, haber perdido contra un hombre, como para agregarle que además, este hombre le había dado a Minwoo, un hijo al que ambos adoraban.

-ya debe estar grande el niño… - habló Amy con acidez en su tono de voz.

-HyeSung… se llama HyeSung y acaba de cumplir 15 años hace poco – respondió Dongwan con tono firme.

-felicidades Minwoo… debes estar orgulloso de tu familia – pronunció finalmente la mujer, retirándose de la pequeña salita.

-muy feliz… no te imaginas cómo – alcanzó a responder Minwoo, antes que la mujer abandonara por completo la oficina.

Recostados sobre la enorme cama en la habitación y revisando por segunda vez los periódicos, HyeSung y Eric buscaban alguna película interesante para lo que sería su primera cita desde el día que decidieron dar un paso más en su amistad, y convertirse en novios.

-qué tal ésta? – señaló HyeSung, el título de una película de terror.

-en serio quieres ver zombies y sangre por todas partes, en nuestra primera cita? – respondió Eric con sarcasmo.

-aish! Entonces qué!... ya llevamos horas en esto! Así nunca vamos a salir! – renegó el bello muchacho, lanzando el periódico contra el piso.

Eric suspiró profundo, tratando de hallar la manera de tranquilizar a su obstinado novio.

-que tal si vamos al cine y elegimos ahí?... de todos modos tenemos que ir… está en la lista! – señaló Eric el pedazo de papel en sus manos.

Una lista que los muchachos habían elaborado días antes, con todas las actividades que querían realizar para su primera cita. La idea había sido de Eric, no queriendo perder ningún detalle importante que pudiera entristecer a su adorable y bello novio.

Eric quería que este día fuera inolvidable para HyeSung.

-hecho! – respondió HyeSung con una sonrisa, dirigiéndose a su closet en busca de un abrigo.

-pero cómo iremos?... no podemos pedirle al chofer que nos lleve o sospecharán – habló HyeSung, colocándose el abrigo con ayuda de Eric.

-tomaremos el autobús, lo tengo todo pensado! – respondió Eric, dando un beso en la mejilla de su novio.

HyeSung sonrió tímidamente, tratando de ocultar el rubor en sus mejillas.  Pero fue demasiado tarde cuando Eric permaneció de pie, adorando el hermoso y adorable rostro de su novio.

-qué? – preguntó HyeSung apenado.

-nada… me gustas mucho – respondió Eric con una sonrisa, inclinándose luego hasta posar brevemente sus labios, sobre los pequeños labios del bello muchacho.

-aish! Ya vámonos tonto! – rompió HyeSung el beso, con el rostro encendido y la mirada nerviosa.

Eric volvió a sonreír, siguiendo a su novio que había abandonado rápidamente la habitación.

-estás molesto? – alzó Minwoo la mirada, notando la expresión seria y poco comunicativa de su esposo.

Dongwan permaneció en silencio, concentrándose en los papeles que sostenía en manos. La presencia de Amy en las oficinas de la compañía, habían dejado un sabor amargo en el interior del joven padre.

-no tienes de qué preocuparte… Amy no dará problemas… si quieres, podemos trasladarla a otra área y no tendrás que tratar con ella – continuó hablando Minwoo, esperando obtener alguna respuesta de su esposo.

-olvídalo,  no tengo de qué temerle a esa mujer – respondió Dongwan, dejando los documentos sobre le escritorio de su esposo.

Minwoo siguió a Dongwan, antes que dejara la oficina con una expresión no muy complaciente.

-no te pongas así… - abrazó Minwoo la cintura de su esposo

-qué te parece si nos tomamos el resto de la tarde?... hagamos algo divertido – propuso Minwoo, girando el cuerpo de su esposo para tenerlo frente a frente.

Dongwan no demoró en asentir, rendido ante la infalible sonrisa de ojos de su esposo.

Minutos después, la pareja abandonó la oficina, decididos a pasar el resto del día, divirtiéndose como no lo habían hecho en años.

Y quizás, probar algunas actividades propias de una pareja normal.

La primera actividad de la pareja, fue almorzar en el restaurante italiano que tanto amaba Dongwan. Luego, los esposos debatieron por decidir su siguiente actividad.

-vamos al museo, hay una exposición de fotografía que quiero ver – propuso Dongwan, revisando el periódico del día.

-hagamos algo más divertido… qué tal el cine?, hace años que no vamos desde que llevamos a HyeSung a ver su primera su película – habló Minwoo, sonriendo al recordar las viejas memorias de la infancia de su hijo.

Dongwan lo pensó por breves minutos, para asentir finalmente y salir del restaurante de la mano de su esposo.

HyeSung y Eric demoraron más de lo que esperaban para llegar al cine, ya que ninguno de los dos tenía experiencia tomando el autobús. Todos los años de sus vidas, el chofer de la familia Lee los había llevado a donde quiera que desearan.

-creí que lo tenías todo planeado – renegaba HyeSung, caminando al lado de su novio con un puchero en los labios.

-no pensé que tomar el autobús sería tan complicado, lo siento – se disculpó Eric, tomando la mano de su novio.

Los dos muchachos finalmente se detuvieron, cuando lograron ver la puerta de entrada del cine, sonriendo automáticamente al pensar que al fin su cita iba a tomar el rumbo correcto.

-aish! La película que quería ver ya empezó hace 30 minutos! – exclamó HyeSung frente a la taquilla.

-probemos con esta, está por empezar… - señaló Eric, tratando de calmar a su novio.

HyeSung no tuvo más remedio que ceder, y dejar que Eric comprara los boletos para la película de comedia romántica que quería ver.

Con los boletos en mano, los muchachos se dirigieron a comprar algunos dulces y luego ingresar a la sala donde se proyectaba la película.

-por qué elegiste asientos tan alejados? – se quejó HyeSung, acomodándose en su silla.

-más privacidad? – respondió Eric inocentemente.

-crees que sentándonos a kilómetros de las demás personas, nadie va sospechar algo? – señaló HyeSung con ironía.

Eric se sonrojó, viéndose descubierto.

-de todos modos ya estamos aquí, disfruta de la película! – respondió Eric, sentándose al lado de su novio.

La pareja se acurrucó uno al lado del otro. HyeSung reposó su cabeza en el pecho de Eric, mientras éste lo rodeaba con sus brazos, robando esporádicas miradas a su hermoso rostro que se veía expectante, mientras las luces se apagaban y la película daba inicio.

Minwoo y Dongwan hicieron su arribo en el auto del mayor, dirigiéndose directamente a la taquilla, eligiendo la primera película que estaba disponible a esa hora. Lo que menos le importaba a la pareja, era el contenido de la película, lo único que querían, era pasar un tiempo juntos, divirtiéndose.

-comedia romántica?... no pensé que fueras tan cursi – rió Dongwan, mientras ingresaba a la sala de proyección en compañía de su esposo.

-era lo único que había… además, sabes que no miraremos toda la película – respondió Minwoo, colocando una mano en la cintura de su esposo.

Dongwan sonrió, ubicando rápidamente sus asientos.

La sala estaba oscura y con poco público.  El escenario perfecto para divertirse y aprovechar de la oscuridad.

Minwoo no demoró en asaltar a su esposo, besándolo apasionadamente mientras la película proyectaba imágenes tenues que ocultaban sus movimientos.

Dongwan disfrutaba de la atención de su esposo, llegando a relajarse cómodamente, hasta que un pequeño ruido llamó su atención.

Lleno de curiosidad y sintiendo algo familiar en las risitas que provenían de los asientos de atrás, Dongwan giró el rostro sutilmente.

-espiando? – susurró Minwoo a oídos de su esposo, haciéndolo dar un pequeño salto de su asiento.

-aish! No hagas eso!... y no, no estoy espiando, es sólo que me pareció oír algo familiar… - respondió Dongwan, acomodándose correctamente en su asiento.

-ver a esa parejita me recuerda a nosotros… - habló Minwoo, dando también una mirada a la joven pareja que observaba la película, abrazados cómodamente en sus asientos.

-no son muy chicos para estar haciendo esas cosas? – observó Dongwan, girando el rostro una vez más en dirección de la joven pareja.

-te aseguro que tú y yo hicimos cosas peores a esa edad, deja que los niños crezcan y disfruten los placeres de la vida – respondió Minwoo, dando también otra mirada a la joven pareja.

Dongwan dio una mira reprobatoria a su esposo, cuando la sala quedó en completa oscuridad, para luego iluminarse con las luces de la pantalla y hacer que ambos hombres sufran un paro cardíaco instantáneo.

Frente a sus ojos, la joven pareja compartía acalorados besos, mientras se sostenían en los brazos del otro. Pero no fue esto lo que dejó en shock a los dos hombres.

Ambos hombres, reconocieron perfectamente los rostros de la joven pareja.

-YAH! QUE LE ESTAS HACIENDO A MI HIJO! – saltó Dongwan de su asiento.

Veinte minutos después y luego que la joven pareja se vio forzada  a separarse, y prácticamente ser arrastrados fuera de la sala de cine por los dos mayores, los cuatro hombres se encontraban sentados en una cafetería, en el rincón más apartado, huyendo de los ojos curiosos de los demás comensales.

HyeSung y Eric se veían nerviosos, mientras Minwoo y Dongwan aún no procesaban el shock de ver a su niñito, besándose nada más y nada menos, con quien creían era su mejor amigo y hasta cierto punto un hijo más en la familia.

Los mayores sencillamente no lo podían entender.

-no van a decir nada? – valientemente y tomando un profundo respiro, Minwoo fue el primero el romper el silencio.

HyeSung y Eric se miraron tímidamente, no sabiendo ninguno de los dos, cómo explicarle a los mayores su situación.

-desde cuándo… - intervino Dongwan con voz severa.

Los dos menores sintieron la tensión en el ambiente.

-estoy seguro que esta no es la primera vez… desde cuando están viéndose a escondidas? – volvió a hablar Dongwan, perforando a los menores con la mirada.

Minwoo observó expectante a los dos muchachos, esperando por alguna justificación a sus actos.

-fue en mi fiesta de cumpleaños… Eric y yo somos novios desde entonces… - respondió HyeSung con timidez

El shock fue aún más grande para los dos adultos.

-n-n-novios!?... desde tu cumpleaños!! – reaccionó Dongwan, colocándose de pie de manera amenazante.

HyeSung dio un salto en su silla, refugiándose en los brazos protectores de su novio, lo que atizó aún más la furia de su padre.

-quieren separarse! Mi hijo aún es un niño! – reclamó Dongwan, jalando suavemente del brazo de su hijo, hasta colocarlo a su lado.

-quieres dejar de exagerar?... la gente nos está mirando! – se colocó de pie Minwoo, regresando a HyeSung a su silla.

Los dos menores estaban asustados. Era la primera vez que HyeSung veía a su Wannie appa así de furioso.

Dongwan regresó a la mesa, respirando agitadamente mientras trataba de conservar la calma; para el joven padre, era difícil aceptar que su hijo ahora tuviera “novio”.

-por qué no nos dijeron nada?... – intentó esta vez Minwoo, tomando la mano de su esposo, dándole el consuelo que necesitaba para seguir enfrentando a los menores.

-teníamos miedo de cómo reaccionarían… no lo hicimos a propósito… se los íbamos a decir… es sólo que no encontrábamos el momento… - respondió Eric, tomando la mano de HyeSung por debajo de la mesa.

-tienen idea de lo que están haciendo?... ustedes dos crecieron juntos!... los criamos como si fueran hermanos! – se volvió a exaltar Dongwan, lanzando una mirada acusadora contra los dos muchachos.

-n-n-no… no estoy jugando… quiero mucho a Sungie… - habló Eric con temor, temblando repentinamente cuando sintió la mirada aniquiladora de Dongwan.

-ustedes dos son aún unos mocosos!!! – volvió a levantarse Dongwan de su silla.

Una vez más, Minwoo tuvo que controlar a su esposo, regresándolo a su silla, evadiendo las miradas de los curiosos que lanzaban miradas extrañas en dirección de los cuatro hombres en la mesa.

-deja de hacer tanto drama! Ya no son unos niños! – decidió intervenir Minwoo, susurrando entre dientes contra el oído de su esposo.

-para mí siempre serán unos niños!... jugaban juntos en el jardín… los llevamos de campamento… una cosa es que hayan compartido la cama a los 10 años, a que compartan saliva a los 15!! – volvió a arremeter Dongwan contra los muchachos.

La joven pareja se intimidó más con el abrupto exalto del mayor. Definitivamente ese no era el Kim Dongwan, dulce, paciente y amable que conocían. Era como si un espíritu extraño lo estuviera poseyendo.

Sin embargo aún tenían a Minwoo, que parecía mantener la calma hasta el momento. Al menos eso era un alivio para los dos menores.

-no lo sé… de pronto empecé a ver a HyeSung de otra manera… dudé al principio… pero luego de hablar con Minwoo hyung… todo fue más claro… - respondió Eric con voz entrecortada y temblorosa.

Los ojos asesinos de Dongwan cambiaron de dirección, fijándose en el rostro confundido de su esposo.

-yo?... espera… me estabas hablando de HyeSung!!! – esta vez el que se exaltó fue Minwoo.

-tú le diste la idea para que se declarara!! – acusó Dongwan con furia.

-no tenía idea que se refería a HyeSung! Pensé que se trataba de alguna chica de la escuela! – se justificó Minwoo, alterado.

Los menores se mostraron aún más asustados.

-HyeSung aún está muy chico para andar de novio! Te lo dije! – continuó regañando Dongwan a su esposo.

-p-pero appa… tú me dijiste que oyera a mi corazón y lo dejara fluir… - decidió intervenir HyeSung, en defensa de su Minu appa.

La expresión de Minwoo cambió completamente.

-tú le dijiste que lo aceptara! – acusó Minwoo esta vez a su esposo.

-te estabas refiriendo a Eric!? – interrogó Dongwan alterado a su hijo.

HyeSung y Eric asintieron a la misma vez, intimidados de volver a decir una palabra que empeorara su situación y exaltara el temperamento de los mayores.

-alentaste a nuestro hijo para que se pusiera de novio con Eric! – exclamó Minwoo con furia.

-tú empujaste a Eric a declarársele a nuestro hijo! – contraatacó Dongwan con más furia.

Ambos hombres se observaron con miradas retadoras y aniquilantes. Los menores no podían hacer nada más que observar, y esperar porque la situación no llegara a mayores.

-está bien calmémonos – habló Minwoo luego de un prolongado y tenso silencio.

Dongwan dio un profundo respiro, fijando la mirada en la joven pareja que lucía como si estuviera a punto de romper en llanto.

HyeSung y Eric estaban asustados a morir, luego de ver las reacciones de los mayores sobre su noviazgo. En cierto punto, HyeSung se sentía culpable por provocar la breve pelea entre sus padres.

-oh hijo lo siento, te asustamos? – exclamó Dongwan, notando el rostro pálido y tenso de su hijo.

A pesar de sentirse aún enfadado y angustiado por el noviazgo de su hijo, Dongwan sentía un dolor en su corazón, al ver la expresión desoladora en el rostro de HyeSung. El joven padre sabía que tenía que controlarse por el bien de su hijo.

-no es nuestra intención asustarlos o regañarlos por esto… es sólo que… no nos esperábamos esto… - agregó Minwoo, suavizando también su expresión.

-lo siento mucho appas… no era mi intención que se enojaran… - habló HyeSung con voz temblorosa, bajando la mirada cuando unas lágrimas empezaron a correr por su rostro.

Las tres personas en la mesa entraron en pánico.

-HyeSungie no llores! – rápidamente Eric abrazó a su novio contra su pecho, buscando reconfortarlo.

Minwoo y Dongwan observaron a los dos muchachos, notando la sinceridad y pureza en sus actos.

-hijo no llores… appa lo siente… no debí reaccionar así – habló Dongwan, estirando una mano por encima de la mesa, limpiando las lágrimas que continuaban cayendo por el rostro de su hijo.

-Sungie, si reaccionamos así, no es porque estemos enfadados con ustedes… es porque estamos preocupados – intervino Minwoo, alcanzando una mano de su hijo.

-ustedes dos aún están en pleno despertar… oh Dios! – exclamó Dongwan con dramatismo, luego de pensar en todas las cosas que podían provocar las alborotadas hormonas de los jóvenes adolescentes.

Minwoo colocó una mano en el hombro de su esposo, tratando de calmarlo y asegurarle que todo estaba bien.

-si el problema soy yo… me iré de la mansión… pero no me pidan que termine con Sungie… - decidió hablar Eric para sorpresa de las tres personas en la mesa.

HyeSung se separó abruptamente del lado de su novio, suplicando por ayuda a sus padres. La idea que Eric abandonara su lado, lo llevó al límite de sus temores.

-aish, no seas tonto muchacho, jamás te pediríamos eso – respondió Minwoo, palmeando la cabeza del menor.

-tan en serio van? – interrogó Dongwan a los menores.

-siempre supe que sentía algo especial por Sungie… y no voy a dejarlo ir tan fácilmente… pelearé como todo un hombre! – respondió Eric con firmeza y decisión en los ojos.

Minwoo y Dongwan se miraron seriamente, ambos hombres sabían que no habría manera de separar a los dos muchachos.

Minutos después y luego que HyeSung finalmente había dejado de llorar, los cuatro hombres conversaban más calmados. Minwoo y Dongwan lucían unos semblantes más relajados, mientras que HyeSung y Eric habían dejado de temblar, temerosos por las reacciones de los mayores.

-tu madre ya lo sabe? – se dirigió Minwoo al novio de su hijo

Eric negó con la cabeza.

-pensábamos decírselos cuando estén todos juntos – respondió HyeSung tímidamente.

-solo espero que no nos culpe por ser un mal ejemplo para su hijo – habló Dongwan, tomando un sorbo de la taza de café que acababa de dejar la mesera de la cafetería en la mesa.

Minwoo golpeó ligeramente el lado de su esposo con su codo, luego de notar la expresión de desconcierto en el rostro de los muchachos. Dongwan entendió el mensaje, sellando sus labios y mostrando una sonrisa aliviante a los dos menores.

Unos minutos más, y los cuatro hombres disfrutaban ahora de los postres ordenados por Minwoo.

Los dos padres, observaron cuidadosamente, mientras Eric tomaba un pedazo del postre en su plato, llevándolo a labios de su hijo, quien lo recibió con una sonrisa genuina de felicidad. Una sonrisa que Minwoo y Dongwan nunca antes habían visto en el rostro de su hijo. Definitivamente HyeSung estaba enamorado. Su pequeño niñito ya no era más un bebé, y esto asustaba y preocupaba de distintas formas a los dos hombres.

-Eric, quieres venir conmigo un rato? – habló Minwoo con voz profunda y seria.

Tímidamente y confundido, Eric se puso de pie, siguiendo al mayor fuera de la cafetería, cerca del estacionamiento, mientras Dongwan y HyeSung permanecían en la mesa, preguntándose por qué Minwoo se había llevado al menor.

-primero que nada, quiero que sepas que no estoy enojado contigo – inició Minwoo la conversación.

Eric asintió con la cabeza, volviendo a sentir los nervios, apoderarse de su cuerpo. Minwoo guardó un prolongado silencio, para luego soltar un profundo suspiro y empezar nuevamente la conversación.

-HyeSung y tú se criaron juntos como si fueran hermanos, te conozco desde que tenías 8 años, te he visto crecer hasta convertirte en un apuesto adolescente… - continuó hablando Minwoo, abrazando al menor por los hombros.

Eric se dejó hacer, asustado en cierto punto por las palabras del mayor. Aunque en el fondo, pensaba que no tenía de qué temer, al fin y al cabo los mayores prácticamente ya habían dado su consentimiento para su noviazgo con HyeSung.

-… pero… ahora no voy  a hablarte como el hyung que has conocido desde que tenías 8 años, ahora voy a hablarte como Lee Minwoo… el padre de HyeSung… tu novio – concluyó Minwoo, haciendo que de pronto las piernas de Eric empezaran a temblar.

-HyeSung es un muchacho muy frágil y sensible… eso lo heredó de Dongwan… es muy fácil de lastimar y sabes que a ningún padre le gusta que lastimen a sus hijos – continuó Minwoo, presionando ligeramente su abrazo en los hombros del menor.

Eric sintió un nudo en la garganta y en un escalofrío recorrer su cuerpo.

-nosotros te conocemos muy bien Eric… te hemos criado... pero!... si por alguna causa del destino, por más mínima que sea… mi hijo, HyeSung, llega a casa llorando o termina lastimado, cosa que no queremos en realidad, recuerda que sé en donde vives – concluyó Minwoo, sonriendo libremente al menor cuyo rostro lucía aterrado.

Mientras tanto, dentro de la cafetería, esperando por que los otros dos hombres regresaran; Dongwan y HyeSung guardaban un silencio incómodo, robando esporádicas miradas en dirección de la puerta de la cafetería.

-por qué Minu appa se llevó a Eric? – pronunció HyeSung con preocupación.

Dongwan dio una mirada a su hijo, haciéndose internamente la misma pregunta.

-no te preocupes, no creo que tu Minu appa le haga algo – decidió responder el joven padre.

HyeSung se mostró un poco ansioso pero calmado. El silencio regresó a la mesa.

-Eric y tú… en un mes… cuánto… cuánto… - empezó a hablar Dongwan con nerviosismo, tropezando con sus palabras.

De pronto, la preocupación y curiosidad sobre la relación de su hijo, empezó a calar en los interiores del joven padre. Aunque no era fácil hacer la pregunta a su hijo.

-esta era nuestra primera cita… hasta ahora al único lugar al que hemos ido, ha sido la cafetería de la escuela… - cortó HyeSung las palabras de su padre, con decepción en su tono de voz.

Una sonrisa se mostró en el rostro de Dongwan. Una sonrisa de alivio. Su niñito seguía siendo inocente.

-les quedan varios días para la primera cita… - habló Dongwan, tomando un bocado del postre en la mesa.

-si es que no lo vuelven a arruinar – masculló HyeSung en voz baja y con enfado.

-hey! Oí eso! no teníamos idea que estaban en ese cine! – se defendió Dongwan automáticamente.

-pero no tenían por qué reaccionar de esa manera! – gimió HyeSung como un niño pequeño.

-y qué querías? Que los aplaudiéramos? – replicó Dongwan con molestia.

-no estábamos haciendo nada malo! Arruinaron mi primera cita! – respondió HyeSung con un puchero, cruzando los brazos por delante de su pecho.

HyeSung soltó un suspiro frustrado. Ahora Dongwan lamentaba haber engreído por demás a su hijo.

-escucha… solo queremos que vayan con calma… y no anden dando espectáculos por ahí… - agregó Dongwan en voz baja

-Minu appa y tú han hecho cosas peores… no crean que no los oigo – contraatacó HyeSung.

El rostro de Dongwan se tiñó de un rojo encendido.

-yah! soy tu padre! – reaccionó Dongwan, levantándose abruptamente de la mesa en posición amenazadora.

-qué ocurre? – intervino Minwoo para alivio de su hijo, haciendo su arribo en compañía de Eric.

Dongwan regresó a su silla pesadamente, masajeando sus sienes en busca de calma.

Eric volvió a sentarse al lado de HyeSung, entrelazando sus manos apenas alcanzó su silla.

-bien, ya tuve una charla con Eric, espero que también hayas hablado con HyeSung – habló Minwoo a su esposo, colocando una mano confortadora sobre su espalda.

HyeSung giró el rostro en dirección de su novio con expresión alarmante. El muchacho sabía que nada bueno pudo haber pasado en esa conversación.

Eric solo se mantuvo en silencio, agachando la cabeza intimidado aún por las palabras del mayor.

-qué conversación?... appa! – se quejó HyeSung, fulminando con la mirada a su Minu appa.

-tranquilo hijo, solo aclaramos algunos puntos en su relación – contestó Minwoo con calma.

HyeSung hizo una mueca de descontento, envolviendo las manos de su novio entre las suyas.

El rostro de Eric aún lucía aterrado, pero poco a poco el color volvía a teñir de un tono natural su semblante.

Minutos después las dos parejas abandonaron la cafetería, regresando todos a casa en el auto de Minwoo. La noche había caído y la situación era más calmada.

HyeSung y Eric abordaron los asientos traseros del auto, mientras Minwoo y Dongwan iban adelante, ajustando los espejos retrovisores para no perder ningún movimiento de los menores en el asiento de atrás.

-quieren dejar de hacer eso?... en serio están exagerando más de la cuenta – se quejó HyeSung, luego que Dongwan movió por cuarta vez el espejo retrovisor del auto.

-si nos hubieran contado antes de su relación, no estaríamos tan alarmados – se defendió Dongwan desde el asiento del copiloto.

Treinta minutos después, las dos parejas hicieron su arribo a su residencia. Minwoo y Dongwan tuvieron que enfrentar a la furiosa Sra. Lee, debido a su retraso para la reunión familiar que definiría los detalles para la cena de noche buena.

HyeSung fue excusado por sus padres, dirigiéndose raudamente a su habitación, antes que su abuela lo abordara con preguntas.

Secretamente a escondidas, Eric siguió a su novio hasta su habitación.

-me siento mal por mis appas, la abuela estaba muy enfadada – mencionó HyeSung, terminando de colocarse sus pijamas en el baño de su habitación.

-estarán bien, ellos saben cómo tratar con tu abuela – consoló Eric, recibiendo al bello muchacho en sus brazos, cuando éste se recostó en la cama a su lado.

-lo siento por lo de hoy… mis appas exageraron y arruinaron todo -  habló HyeSung, recordando los incidentes del día, sintiéndose culpable por que su primera cita, no salió como lo habían planeado.

-siempre podemos intentar otro día, lo importante es que ahora tus appas saben de nosotros y están de nuestro lado – respondió Eric, dejando un tierno beso en el cabello de su novio.

HyeSung sonrió en los brazos de Eric. A pesar del susto que se llevaron en el cine, los dos muchachos ahora estaban más tranquilos y seguros que su relación iba por buen camino.

Con la aprobación de sus padres, HyeSung sabía que las cosas con Eric irían mejorando día a día.

-qué están haciendo? – se oyó una voz profunda desde la puerta de la habitación.

Los dos muchachos se levantaron de la cama, asustados por la presencia de los dos adultos que los observaban con ojos reprobatorios.

-no hacíamos nada! Se los juro! – exclamó Eric en pánico

-Eric ya es tarde, ve a dormir – habló Dongwan, acercándose a los dos muchachos.

Eric asintió inmediatamente, despidiéndose de HyeSung con una mirada triste.

-tú también, a la cama – ordenó Dongwan, recostando a su hijo

HyeSung obedeció sin protestar, aunque por dentro tenía ganas de reclamar y argumentar contra el comportamiento sobre-protector de sus padres. Después de todo, ya no era un niño.

-Wannie appa… gracias –habló HyeSung luego que Dongwan terminara de recostarlo en la cama

Dongwan observó a su hijo confundido.

-lo que me dijiste esa vez… tenías razón… lo que siento por Eric es muy especial, se siente bien aquí adentro – continuó hablando HyeSung, colocando una mano a la altura de su corazón.

-solo asegúrate de no salir lastimado – respondió Dongwan a su hijo, besando su frente antes de retirarse de la habitación.

-quieres dejar el drama – habló una voz a sus espaldas, colocando su barbilla sobre su hombro.

-aún me cuesta asimilarlo… - respondió Dongwan, dando una mirada dulce en dirección del muchacho que dormía plácidamente sobre su cama.

-nuestro hijo ya no es un niño… tenemos que aceptar que ha crecido y es momento de que empiece a vivir nuevas experiencias – continuó hablando Minwoo, de pie detrás de su esposo, bajo el marco de la puerta de la habitación de su hijo.

Era las 3AM y los dos padres se encontraban observando a su hijo dormir, como solían hacerlo cuando éste tenía 5 años y las pesadillas de la madrugaba lo despertaban.

-no puedo aceptar que esté creciendo… tengo miedo… - susurró Dongwan, sin quitar la mirada del rostro durmiente de su hijo.

-estoy seguro que Eric no lo lastimara, HyeSung eligió bien – aseguró Minwoo, abrazando a su esposo por la espalda.

-sabes que eso no es lo que me preocupa… - respondió Dongwan, colocando sus manos sobre las manos que rodeaban su cintura.

Minwoo apretó ligeramente con fuerza, su agarre en el cuerpo de su esposo.

-se acerca el día de decirle la verdad… y no sé cómo hacerlo… - agregó Dongwan con voz quebrada.

-estoy aquí contigo… estamos juntos en esto – aseguró Minwoo, dejando un beso firme en el hombro de su esposo.

-era tan fácil cuando era solo un niño… ahora ya creció y hasta anda de novio… - Dongwan dejó caer pequeñas lágrimas por sus mejillas.

HyeSung crecía y era maravilloso ver a su hijo convertirse en todo un hombre, pero a la vez, era doloroso saber que se acercaba el día en que quizás la verdad sobre su pasado, haría que odie al hombre que lo mantuvo con vida todos estos años.

-lo que más me preocupa ahora… es quien le dará las noticias a mi madre… - cambió Minwoo el tema, logrando ganar la atención de su esposo.

El rostro de Dongwan se mostró alarmado.

-es tu madre, habla tú con ella – respondió Dongwan

-HyeSung es tu hijo, hazlo tú – habló Minwoo, soltando la cintura de su esposo.

-yah! también es tu hijo! … y además, fuiste tú quien le dio la dio la idea a Eric para que se declarara!! – siguió Dongwan a su esposo, de regreso a su habitación.