Dara llevaba despierta alrededor de 20 minutos, pero seguía haciéndose la dormida. Durante algún momento de la noche su camiseta se había subido levemente, probablemente al cambiar de postura. Pero eso le daba igual. Lo importante era que desde que se había despertado podía sentir la mano de CL contra la piel de su espalda, acariciándola suavemente.

 

La sensación era demasiado agradable y sabía que CL quitaría la mano en cuanto se levantase, así que decidió seguir fingiendo un poco más. Le gustó saber que aunque Chaerin llevase un buen rato levantada, estaba dispuesta a dejar que ella durmiese más.

 

CL empezó a tararear una canción por lo bajo. A Dara no le sonaba, pero parecía bonita. A ese ritmo era bastante posible que volviese a dormirse de verdad. Quedarse en la cama todo el día sin hacer nada era muy tentador, sobre todo teniendo esa compañía.

 

Ya había tenido una experiencia parecida con Minzy y Bom. No habían pasado mucho tiempo juntas pero se había creado una relación profunda entre ellas, como si estuviesen destinadas a conocerse. En apenas unos días habían desarrollado una confianza que Dara no había llegado a tener con gente que conocía desde hacía años.

 

Con CL sentía lo mismo. Hace varios días pensaba que no podría odiar más a alguien, y ahora mismo no sabía si quería estar apartada de ella. Se había formado un lazo entre las dos, y a cada hora que pasaban juntas se estrechaba aún más. Dara se sentía un poco tonta por pensar tanto en alguien que había aparecido en su vida hacía una semana, pero parte de ella quería pensar que era recíproco. Con CL era difícil saberlo, era una persona cerrada que decía mucho y a la vez nada.

 

En definitiva, había algo especial en CL que hacía que Dara no pudiese apartar la vista de ella. Sabía que no era la única, solo hacía falta ver como los Blackjacks se comportaban a su alrededor. Tenía un carisma adictivo que atraía a cualquiera que estuviese en su presencia y seguramente ni se había dado cuenta de ello.

 

Todos querían un poco de atención por parte de CL y Dara no se quedaba atrás. El problema era que no se decidía sobre qué tipo. Para unos era su líder, para otros su amiga, su hermana. ¿Y para Dara? ¿Qué era CL para Dara? Y lo más importante, ¿qué era Dara para CL?

 

Demasiado confundida y sin querer pensar más en ello, decidió que era hora de “despertarse”. Por muy a gusto que estuviese en esos momentos, tenían que ponerse en marcha pronto.

 

Tal y como suponía, en cuanto hizo amago de despertarse, la mano de CL sobre su espalda se quedó quieta y lentamente la apartó de ahí. Abrió los ojos y se encontró con el rostro de la chica rubia mirándola con una pequeña sonrisa.

 

“Buenos días dormilona. Llevo un rato esperándote.” Dijo en broma CL.

 

“No es mi culpa que seas tan cómoda.” Dara se estiró pero no cambió su postura sobre el hombro de CL. “¿Qué hora es?”

 

“Es temprano aún, pero deberíamos darnos prisa. Unas cuantas horas y llegaremos a la base al fin.”

 

“¿Crees que estarán preocupados?” Preguntó Dara. Llevaban fuera más tiempo del que habían previsto Bom y los demás.

 

“Seguramente, sobre todo porque no he podido contactar con ellos por radio. Pero les di órdenes estrictas de no venir a buscarme, así que seguirán allí.”

 

Se levantaron y se dieron otra ducha. Esta vez Dara dejó que CL fuera primero. Con su ropa normal ya volvía a imponer bastante respeto, pero le seguía haciendo gracia verla sin maquillaje.

 

“Con las prisas no guardé nada con lo que maquillarme. Supongo que a los infectados no les importará mucho si voy guapa o no.”

 

Aunque lo dijo de forma despreocupada, a Dara le dio la impresión de que CL se sentía insegura. Se sintió mal por haberse reído de ella la noche anterior, aunque no fuese con mala intención ni mucho menos.

 

“A mí me parece que estás guapa así al natural.” Dijo Dara encogiéndose de hombros. “El maquillaje te queda muy bien, pero me gustas de las dos formas. Tu aspecto digo…” Apartó la mirada avergonzada, quizás había hablado demasiado. Por suerte CL no hizo ningún comentario.

 

Desayunaron algo tras recoger todo y salieron del hotel en cuanto terminaron. CL comentó que a buen ritmo llegarían un par de horas antes de que el sol se pusiese, así que se tenían que esforzar. Dara estuvo de acuerdo pero se prometió vigilar a CL para que no se fuese a hacer daño. Ya estaba mucho mejor, pero aún le quedaba bastante tiempo para estar curada del todo.

 

Pasaron la primera hora en silencio, cada una metida en sus pensamientos, pero a partir de la segunda se animaron un poco más hartas del silencio. Hacia la tercera, CL ya había conseguido convencer a Dara de que volviese a practicar con la pistola. A primeras se negó y puso la excusa de gastar balas, pero CL le contrarrestó el argumento diciendo que si aprendía no se podían considerar malgastadas.

 

Pasada la quinta, estaban más que aburridas y cansadas, pero no quisieron parar. O más bien, CL se opuso. Estaba muy motivada con llegar a su casa y ver cómo había estado el grupo esos días sin ella. No era que no se fiase de ellos, todo lo contrario, pero se preocupaba mucho. No quería que les pasase nada y en gran parte se sentía responsable de ellos.

 

“Oye Dara” Dijo CL llamando la atención de la chica. “Cómo… ¿Cómo es Sanghyun?” Titubeó un poco a la hora de hacer la pregunta, pero tenía mucha curiosidad tras haber escuchado tanto y tan poco a la vez sobre él.

 

Dara se sorprendió con la pregunta, no se esperaba que fuese a salir el tema. Aunque bien pensado, era normal que CL quisiera saber más sobre la persona por la que se iba a arriesgar.

 

“Sanghyun es… Bueno, es un chico increíble. Y no te lo digo simplemente por ser su hermana, ¿eh? Lo piensan todos en la Comunidad. Pone a los demás por delante de él y siempre está dispuesto a ayudar. Por eso se apuntó al grupo de rescate…” Comentó Dara con admiración haciendo que CL sonriese al escucharle hablar. Se notaba lo mucho que lo quería. “Es un poco más pequeño que tú, pero aparenta más por lo alto que es. Y es muy guapo, deberías ver todas las chicas que van detrás de él, pero Sanghyun no se da cuenta.” Dara rió al recordar un par de anécdotas relacionadas con eso último. “Es muy tímido, pero muy valiente también. Mucho más que yo.”

 

“No sé, creo que lo que estás haciendo es algo muy valiente.” Añadió CL al escuchar eso. “No cualquiera se atrevería a salir solo en busca de alguien teniendo en cuenta que estamos en medio de un apocalipsis zombie.”

 

“Supongo que visto así…”

 

“Créeme Dara, eres muy valiente.”

 

Ambas compartieron una sonrisa. Dara agradeció mucho el apoyo de CL y sus palabras. De alguna forma le daban fuerzas para seguir adelante.

 

“Me gustaría conocerle cuando lo encuentres.” Dijo CL. “Por todo lo que has dicho tiene que ser un gran tipo.”

 

“Estoy segura de que él también querrá conocerte después de todo.”

 

“No sé yo si le hará mucha gracia que te dijese que no al principio…” Bromeó CL, aunque en el fondo sí que lo temía. Dara rio al escucharla.

 

“Bueno, quizás deberíamos obviar esa parte. Ir directamente a cuando me salvaste de los infectados.”

 

“Sí, creo que eso sería mejor.”

 

Las dos rieron. Era agradable poder tener una conversación así después de tantas discusiones. No habían tardado mucho en descubrir que se llevaban bien, pero se habían causado más de un dolor de cabeza la una a la otra.

 

“¿Has pensado qué vais a hacer una vez lo encuentres?” Preguntó Chaerin intentando parecer casual.

 

Dara se encogió de hombros. “La verdad es que no. Estoy más centrada en buscarle primero. Pero supongo que volveremos a la Comunidad. Es nuestro hogar al fin y al cabo. Ahí tenemos nuestra casa, nuestras pertenencias, etc.”

 

“Sí, tiene sentido.” Respondió CL intentando esconder su decepción.

 

“¿Por?”

 

“Tan solo curiosidad.” Siguieron caminando un rato más en silencio antes de que volviese a hablar. “Espero que sepas que si quieres tienes un hueco con nosotros. Sanghyun también.” Evitó mirar a Dara para no ver su reacción.

 

Dara se quedó mirando a CL unos segundos sin saber qué decir. Finalmente se decidió por agarrar su brazo para pararla y antes de que pudiese moverse o reaccionar, presionó sus labios contra su mejilla.

 

“Muchas gracias Chaerin. Eso significa mucho para mí.”

 

Sonrojada, CL hizo un gesto vago con la mano. Dando a entender que no tenía por qué darlas.

 

 

El último trazo se hizo más corto que el resto. CL había acelerado el paso al reconocer lo cerca que estaban ya de llegar. Estaba ansiosa por reencontrarse con su familia. Dara estaba cansada pero hizo un esfuerzo por seguir el ritmo de CL, consciente de lo importante que era llegar cuanto antes para ella.

 

Estaban a un par de manzanas de la base cuando empezaron a escuchar los disparos. Al principio eran aislados y con distancia entre uno y otro, pero pronto se escucharon repetidamente. Dara y CL se miraron preocupadas. No era una buena señal.

 

Sin perder más tiempo y sin darle tiempo a Dara a impedírselo, CL rompió a correr a toda velocidad hacia el origen de los disparos. Sin poder hacer otra cosa, Dara corrió detrás de ella intentando alcanzarla.

 

La siguió por las manzanas hasta pararse detrás de un coche abandonado. Ambas estaban jadeando y CL se agarraba el costado. Los ojos le brillaban con lágrimas por el dolor. Pero lo importante era que los disparos y gritos que se seguían escuchando. Cubriéndose con el coche, se asomaron para investigar la escena.

 

La calle estaba llena de coches grandes repletos de personas y muchos otros de pie junto a ellos. Todos estaban armados y se turnaban en disparar hacia la base de los Blackjacks mientras estos se cubrían con barricadas y se defendían. De vez en cuando se escuchaban disparos desde arriba donde los francotiradores se escondían, pero era abajo donde estaba la mayoría de la acción.

 

Dara miró asustada como cada pocos segundos gente de ambos bandos parecían caer, pero aún estaban demasiado lejos para ver si luego se levantaban o no. Miró a CL y la descubrió pálida y con los ojos muy abiertos al encontrarse con todo eso.

 

“Renegados…”

 

Dara estiró la mano para apoyarla en su brazo. “Chaerin…” Pero antes de poder hacerlo CL la apartó mientras sacudía la cabeza.

 

“Tengo que ir para allá, no puedo dejarles solos. Tengo que luchar con ellos.” Miró a Dara con el rostro serio. “Quédate aquí. Escóndete donde sea pero no te acerques más. No puedes dejar que te vean.” Se quitó su mochila del hombro y rebuscó en ella varios cargadores de balas. Se los entregó a Dara. “Ten, quédatelos por si acaso. Ten siempre la pistola cargada y lista, y no dudes en disparar si hace falta.” Apretó la mandíbula con fuerza. “Ten mucho cuidado.”

 

Sin darle tiempo a responder, miró a su alrededor y tras asegurarse de que no había nadie, salió de detrás del coche, ayudándose del resto de vehículos abandonados para rodear la zona y acercarse.

 

Dara quiso gritar su nombre y pedirle que volviese, pero se tragó las palabras sabiendo de sobra que eso solo conseguiría que las descubriesen a