"Dispara"

*Kim Taeyeon* ©
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Dejé el helado dentro del congelador y apoyé mis manos en la mesada de la cocina. Di tres respiraciones profundas intentando prepararme para lo que vendría a continuación.

Sabía que ya no había vuelta atrás, y sabía que no podía mentirle porque ella ya estaba enterada de todo. O al menos de todo, menos de mi versión de los hechos.

Respiré una vez más y caminé lentamente a la sala en donde Taeyeon me esperaba muy relajadamente sentada en el sofá en donde me encontraba yo segundos antes. Me senté en el sillón individual porque claramente no iba a sentarme junto a ella, demasiado tenía con su mirada que no dejaba de inspeccionar cada movimiento que daba.

No tenía idea de cómo empezar todo, era muy largo y enredado como para tener un punto de comienzo. Tal vez desde mi nacimiento, pero el problema era que no tenía ni idea de todo eso. No sabía quiénes eran mis padres, ni como me llamaba, ni quien era responsable de mí en estos momentos.

- Cuando quieras. - Ella hizo un ademán con su mano y yo subí mis piernas al sillón envolviéndome en la manta otra vez.

- No sé cómo empezar. - Admití.

- Desde el principio es una buena idea.

- Ese es el problema, no sé cómo empezó todo esto. - Respiré una vez más profundamente. Ya empezaba a sentir el dolor de cabeza latiendo en mi cráneo, como si estuvieran agarrando mi cabeza entre dos pinzas aplastándola hasta que no quede nada de jugo dentro.

- ¿Sabes qué? - la miré - Tengo toda una eternidad- Sonrio.

Supuse que era un chiste de vampiros, y sí, me hizo sonreír un poco.

- Supongo que todo comenzó cuando era una bebé y mis padres me abandonaron en el orfanato. Y no sé por qué afirmo padres, porque realmente no sé si fue mi madre o mi padre o quien sea. La cuestión, es que me abandonaron.

- ¿Sabes cómo se llaman tus padres? - Sabía que ella no estaba segura de hacer esa pregunta, pero no me importaba.

- No. Nunca los conocí, ni me visitaron, ni vinieron a buscarme otra vez. La verdad es que no me importa demasiado, sólo me cuestiono a veces que habrá pasado para que me abandonaran. - Taeyeon asintió con la cabeza. -Llegue al orfanato de bebe, supongo, y ahí me 'adoptaron', si así se lo podría llamar. Me pusieron un nombre falso para que nadie pudiera reclamar por mí, si es que alguna vez vendrían y así nació 'Tiffany Hwang'. - Sonreí tristemente.

 - Entonces tu nombre no es...

 - No, mi nombre no es Tiffany pero mi apellido si es Hwang, y no, no sé cuál es mi nombre verdadero. - Me adelanté a la pregunta. - La vida era una mierda ahí adentro. Y hablo de una mierda en serio. No recuerdo nada de cómo fue todo ahí hasta los siete, tal vez ocho años. Seríamos unos ciento cincuenta niños allí adentro más o menos, así que todos nos conocíamos. Todos eran unos malditos abusivos que vivían molestando a los demás por el simple hecho de que sus padres los habían abandonado. La comida era una mierda, tal vez podías comer un poco de pan y agua si los grandes estaban de tu lado y te lo compartían por ser pequeña o si te lo ganabas.

- ¿Ganabas? ¿Cómo se lo ganaban? – Ella frunció sus cejas. Me revolví incomoda en mi asiento.

Odiaba traer estos recuerdos de vuelta. Ya era vida pasada. Pero tenía que hacerlo si quería averiguar qué sucedía. Además de que sentía unas extrañas ganas de compartir esto con Taeyeon.

Y como lo que acabas de decir es completamente estúpido te mereces una bofetada.

- Es que... Nosotras... Es muy complicado. - Ella se acomodó en el sillón y movió su mano como diciéndome 'continúa como puedas'. - Nos hacían hacer... Cosas. - definitivamente esa no había sido la palabra correcta.

- ¿Cosas? ¿Qué clase de cosas Tiffany? Explícate. - No me gustaba ese tono de voz para nada.

- Cosas malas Taeyeon. Cualquier tipo de cosas malas. Principalmente robar en la calle a la personas. - Revoleé los ojos intentando que las lágrimas se fueran para cualquier otro lado. - Robar, carterear, como quieras llamarle. Era asqueroso. - Me hice más chiquita en el sillón y evité la mirada de Taeyeon viendo hacia el suelo.

- No lo entiendo. - Subí mi mirada hacia ella. - No entiendo cómo les hacían hacer eso. ¿Es que acaso no había mayores o adultos que pudieran defenderlas?

- ¿Para quién te creías que robábamos? El señor Park, el hermosísimo encargado del maldito orfanato era el que nos hacía robar. La mitad de la plata la usaba para dársela a los encargados que venían de la municipalidad y así el gobierno no se enterara de lo que sucedía allí adentro, porque era muy sospechoso que en tantos años nunca nadie haya sacado a ningún niño de allí.

- ¿Y la otra mitad? - su tono de voz me decía que sabía lo que pasaba con esa plata, pero ella sólo quería confirmarlo.

- Se la quedaba él, por supuesto. Nada de eso iba al orfanato. Bueno, a veces si le pagaba a los niños para que les haga favores personales, pero sinceramente no quería imaginarme que era lo que les pedía, así que nunca pregunté. Y en uno de los robos que estaba encargada a hacer conocí a Sooyoung. - No pude evitar sonreír al recordar la cabellera castaña de Soo y esos ojos miel que no sabían qué hacer, su cara sucia porque teníamos que parecer niños de la calle, estaba tan asustada que me había hecho reír. - En realidad ya la conocía de antes, es decir, las dos íbamos al orfanato pero nunca jamás habíamos hablado ni nada parecido. En fin, teníamos que pasar por la calle pareciendo pobres, aunque lo éramos, y mientras alguna estaba hablando con la persona que pasaba la otra tenía que sacar la billetera de su bolso. Soo estaba tan nerviosa. - Una risa melancólica salió de mis labios - Me acuerdo que le dije que como era principiante yo iba a hacerlo mientras ella hablaba con la señora que estaba pasando, y justo cuando iba a tomarla de su bolso ella se puso a llorar gritándome que no lo hiciera. La mujer se dio cuenta de lo que estaba pasando y tuve que arrastrar a Soo mientras lloraba rogando perdón. Ella odiaba robarle a la gente, pero en serio. Es decir, yo también lo hacía, pero no me importaba tanto. Soo se sentía tan culpable la primera vez que robamos . Lloró por tres días seguidos, entonces tuve que quedarme en su habitación con ella, así nos quedamos juntas y comenzó nuestra amistad. - Probablemente esto no le importaba a Taeyeon, pero ella me había pedido que le contara todo y así era. - Me cansé de ver a Soo triste y sin poder dormir por las noches, así que yo comencé a robar por ambas. Ella también odiaba eso, pero no me importaba, destetaba verla llorar. Entonces ella iba a pasear por la ciudad y ver computadoras porque era un asqueroso cerebrito, una nerd. - Me encogí de hombros. - Luego volvíamos al orfanato y hacíamos como si nada hubiese pasado. Todo fue perfecto por unos años. Cada vez robábamos menos, los grandes tenían más responsabilidades, habían puesto la escuela básica para que las autoridades sospecharan menos, no me iba mal, Soo me ayudaba, se instalaba en una biblioteca o se iba a algún lugar con alguna computadora para ver qué más podía aprender. No podía creer que estuviera tan entusiasmada con la escuela . Pero como todo, las cosas tienen que terminar.

- ¿Qué sucedió? - Prácticamente me había olvidado que ella estaba allí. Mi mirada perdida se dirigió directamente a Taeyeon y revoleé los ojos.

- Lo de siempre, chicos. Amor. Algo asqueroso para mí pero no para ella. - Vi la sonrisa que salió de sus labios. - Soo se "enamoro" - hice comillas con mis dedos - de un chico más grande que estaba dentro del orfanato. Era un idiota. Pero un idiota en serio. Aunque tenía sus beneficios. Comíamos más, robábamos menos y le traía regalos a Sooyoung que por supuesto, terminaban siendo de las dos. Ella le contaba todo y él nunca la escuchaba. Wooyoung, se llamaba. No recuerdo su apellido, de todas maneras no era verdadero. Ella estaba tan ilusionada, vivía hablando de él, me contaba toda la confianza que ambos tenían, su primer beso, todo. Ya no la aguantaba más. Un día, después de las clases, estaba yendo hacia mi habitación, y apareció uno de los amigos de Wooyoung, Jackson. Me dijo que no confiara en Wooyoung y que cuidara a Sooyoung de lo que él decía, porque lo único que le importaba era salir de allí, así que le conseguía información a Park para que lo dejara salir. Obviamente le dije que estaba loco y me fui. Jackson siguió insistiendo por semanas con eso, hasta que un día estaba en mi habitación con Soo y entro Park completamente desquiciado. - Entrecerré los ojos intentando recordar mejor. – Recuerdo que le dijo a Soo que no soportaba su actitud y que tenía que hacer lo que él le mandaba porque era su dueño, Soo le gritó que ella no era propiedad de nadie y justo en el momento en que él le levanto la mano para golpearla, yo me puse en el medio... - Negué con la cabeza como si hubiese sentido el golpe otra vez en el rostro.

- Por favor no me digas que te golpeó. - Mis ojos volvieron a ella e hice una mueca con mi boca. Estaba tan furiosa que se le notaba en el rostro, había apretado sus manos tan fuerte que sus nudillos estaban blancos, y me daba miedo, porque podía romperse un dedo con la fuerza que estaba haciendo.

- Me encantaría decirte que no, pero te prometí la verdad. Terminé tirada en el suelo mientras mi nariz y mi labio sangraban, no fue nada y era la primera vez que me golpeaba, así que no dije nada y él se fue hecho una bola de furia. Soo se puso a llorar mientras intentaba limpiar la sangre, ¿y sabes qué? Recuerdo que no lloré, porque pensaba que cuando saliera de allí, lloraría por cosas que de verdad importaban y no un golpe de un idiota. Luego de un par de horas apareció Jackson en la puerta de nuestra habitación diciendo que Yunho le había contado lo que sucedía con Sooyoung. Ella lloraba más fuerte mientras yo la consolaba y le gritaba que yo le había dicho que no confiara en ese idiota y Jackson me reprochaba a mí que no le había hecho caso y yo le gritaba a él que se calle, que hacia llorar más fuerte a Soo. - No pude evitar reírme. - Era una locura. Tendríamos, no lo sé, dieciséis años tal vez, casi diecisiete, menos Jackson, él tenía dieciocho. A partir de ese día Soo se alejó completamente de Yunho, y bueno, Park empezó a controlarla más de cerca, subió su tasa de robos y cada vez nos daba de comer menos. Jackson siempre nos salvaba apareciendo con un paquete de dulces por la puerta de nuestra habitación, no sabíamos de donde los sacaba, pero siempre sospeché que su hermanita menor lo ayudaba a conseguirlos. Hyomin. - Sonreí. - Era una niña maravillosa, y muy ágil con las manos. - Admití, lo más probable es que ella pensara en otra cosa específicamente, pero no me importaba en este momento, estaba sumergida en los recuerdos. - Siempre andaba con una sonrisa y si no lo estaba, Jackson hacia que así sea. Me encantaba Jackson. - Sentí su mirada quemar mi piel y cuando me gire a verla tenía sus cejas fruncidas. Se veía tan adorable. - Quise decir, que me hubiese encantado tener un hermano mayor como él. Me hubiese encantado tener a alguien, así como Hyomin tenía a Jackson. Siempre fuimos nosotros tres, y su hermanita. Siempre. - Miré mis pies. - Pero todo cambio cuando vimos a Donghae ese día en la puerta de la oficina de Park.

- ¿Quién es Donghae? - Moví la cabeza recordando que Taeyeon jamás había estado ahí.

-Sí, lo siento, lo olvidé. Donghae era un proxeneta que tenía un negocio con Park. Cada tantos meses se llevaba a una chica del orfanato para meterla en su prostíbulo, por supuesto, la policía nunca se enteró de esto. Siempre se llevaba a las chicas de diecisiete o dieciocho años porque eran las que más duraban en el negocio. Sooyoung y yo teníamos dieciocho, como ahora...

-Tiffany, te juro que si te llegaron a hacer... - la interrumpí.

- No llegaron a hacerlo. Nos escapamos. Todo estaba perfectamente planeado. Donghae vendría por la chica en una semana y Park ya nos tenía un ojo encima a Soo y a mí, así que era obvio que sería alguna de nosotras dos, o incluso ambas. Preparamos nuestras pocas cosas y salimos dos días antes de que Donghae viniera. Jackson estaba destrozado. No podía venir con nosotras porque no quería dejar a Hyomin sola y era mucho más complicado sacar a una niña del orfanato que a un par de adolescentes que podían camuflarse en cualquier lado. Así qué Jackson se quedó en el orfanato y nos dio la orden de nunca volver allí para rescatarlo jamás. Creo que nunca había llorado tanto como en el momento en que me dijo que tenía que jurárselo por Soo y a Soo por mí. Lo hicimos y nos fuimos.

- ¿Cómo escaparon? - No me había dado cuenta que unas cuantas lágrimas se escapaban de mis ojos hasta que sentí el gusto salado en mi boca. Era muy doloroso recordar. La cara de Taeyeon era indescifrable y ya me estaba acostumbrando a no saber qué era lo que ella pensaba. Limpié mis mejillas y seguí con mi relato.

- Nos metimos en el camión de la limpieza. Venían a buscar las sábanas y las llevaban a lavar y no te creas que era un servicio contratado, porque Park no pagaría ni un centavo por nosotros, era obligación del gobierno. Así qué nos metimos en uno de los carros llenos de sábanas mientras una de las encargadas sacaba la otras de la cama y salimos como si nada. El camión estacionó, conseguimos un lugar anónimo en el que alquilaban las computadoras por unas horas, pagamos con la poca plata que lograba sacarle a Park de lo que robaba, Soo hizo su magia con las computadoras y los ricos nunca se dieron cuenta de lo que hacíamos. Los habíamos elegido muy bien. Cada uno de ellos tenía tres familias secretas de las que las otras no sabían, así que nunca sospecharon nada raro. Depositamos la plata en una caja de ahorro de un banco que había creado Soo por internet, no sé cómo, si tú quieres saberlo, tienes que preguntarle a ella, y luego la sacamos sin tener que dar nuestros nombres porque nos hicimos pasar por las hijas de las personas a las que les robamos. Buscamos un lugar que no fuera tan visitado, y créeme, fue muy d

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Comments

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dannygryffindor26 #1
Chapter 35: Hola Cuando Hay Segunda Temporada ?
O Capitulo 36 ?
SoneTaeny9 #2
I really like it! thanks
liketaeyeon #3
Chapter 35: Joder!!! Actualiza, sé que se viene algo bueno
lola_lola #4
Chapter 35: Mira que demorarte tanto tiempo sirvio de algo, el capitulo esta genial
taeyeon_es_mi_macho #5
Chapter 35: Dios, mi regalo de cumpleaños....Gracias por actualizar :)
AleOtiz #6
Chapter 35: gracais por actualizar, ya puedo seguir leyendo
LlamaAmerica #7
Chapter 35: Por fin Ahhh ya extrañaba esta historia jajajaja
Está re genial el fic ^^ Por fa regresa pronto♥
kimtaeyeon159 #8
Chapter 35: Por fin!!!! Extrañaba tanto esta historia, me ha sacado un montón de sonrisas, actualiza pronto
Skyth06
#9
Chapter 35: joder ya era hora!!!! gracias gracias
saramarmota #10
Chapter 35: GLORIA A DIOS¡¡¡ esto es felicidad *llora mas que magdalena* casi me da un ataque cardíaco .... gracias