Casa Nueva ,Vida Nueva

Matrimonio por contrato

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contra la puerta de la limosina. Su tocado se había caído, y Taeyeon se volteó para ver a su novia durmiendo. Su cabeza descansaba en respaldar de el asiento su

 

encaje blanco desarreglado yacía en el suelo a sus pies. Sus rizos estaban revueltos en todas las direcciones y escondían sus hombros desnudos de la vista. La copa de champaña en el portavasos permaneció intacta, las burbujas se habían desvanecido. Un brillante diamante de dos quilates estaba en su dedo y disparaba los brillos de luz de los últimos rayos del sol que moría. Labios voluptuosos y de color rubí estaban entreabiertos para dejar que saliera y entrara el aire. Un delicado ronquido estable se alzaba en el aire durante cada exhalación. 

 

Stephanie  Hwang ahora era su esposa. 

Tae se movió para tomar su propio vaso de champaña y silenciosamente le brindó al éxito. Ahora poseía por completo Dreamscape Enterprise. Estaba a punto de ir tras una oportunidad única en la vida y no necesitaba el permiso de nadie. El día había pasado sin una complicación. 

Tomó un largo trago y se preguntó por qué se sentía como una mierda. Su mente regresó al momento en que el sacerdote los convirtió en esposas. Los ojos castaño oscuros llenos con puro miedo y pánico mientras se inclinaba para darle el beso necesario. Pálida y abatida, sus labios temblaron bajos los suyos. Supo que no se debía a la pasión. Al menos no esta vez. 

Se recordó que Tiffany sólo la quería por el dinero. Su habilidad para pretender que era inocente era peligrosa. 

Se burló de sus propios pensamientos al alzar su copa nuevamente y beberse el último trago de champaña. 

El conductor de la limosina bajó el vidrio tintado un centímetro. 

—Señora, hemos llegado a nuestro destino. 

—Gracias. Puede detenerse al frente. 

Mientras la limosina subía el largo y estrecho camino, Tae gentilmente sacudió a su novia para despertarla. La  peliroja se movió, roncó y colapsó de nuevo en el sueño. Taeyeon reprimió una sonrisa y comenzó a susurrar. Luego se detuvo. Se deslizó de nuevo en su viejo papel de atormentadora con una confortable facilidad, se inclinó y gritó su nombre. 

Ella se enderezó de golpe. Sus ojos abiertos con miedo, alejó su pesada melena de sus orejas y miró a todo el encaje blanco como si ella fuera Alicia en el País de las Maravillas bajando por el hoyo del conejo. 

—Oh, Dios mío, lo hicimos. 

La rubia  le entregó sus zapatos y tocado. 

—Todavía no, pero es nuestra luna de miel. Estaría feliz de obligarte si estás de ánimo. 

 

Tiffany la miró fijamente. 

 

—No hiciste nada más en esta boda que hacerte notar. Trata de organizar cada último detalle en sólo siete días y me sentaré y te veré colapsar. 

—Te dije que te consiguieras un Juez de Paz. 

Tiffany bufó. 

—Típico de  una mujer floja. No levantaste un dedo para ayudar y chillas inocente cuando eres desafiada. 

—Roncas. 

Su boca se abrió. 

—¡No ronco!

—Lo haces. 

—No lo hago. Alguien me lo hubiera dicho. 

—Estoy seguro de que tus amantes no querían ser echados de la cama. Eres malhumorada.

—No lo soy. 

 

Lo eres. 

La puerta se abrió y el chofer ofreció su brazo para ayudarla. Tiffany sacó su lengua y dejó la limosina con la arrogancia de la Reina Elizabeth. Taeyeon  ahogó otra risa y la siguió. Tiffany se detuvo en el bordillo de la acerca. La observó asimilar las líneas arquitectónicas de la mansión, la cual se asemejaba a una villa Toscana. La arenisca terracota creaba una imagen de elegancia casual, y sus altos muros y largos ventanales reflejaban un aura de historia. Un enorme césped verde abrazaba la entrada y llevaba a la casa, luego se extendía por acres en un alegre abandono. Coloridos geranios se derramaban de cada ventana para imitar la de una vieja casa. La parte superior de la casa se abría a un balcón de hierro forjado el cual contenía sillas, mesas y un jacuzzi entre los árboles frondosos. 

Ella abrió su boca como si fuera a comentar, luego la cerró de golpe. 

—¿Qué piensas? —preguntó. 

Ella inclinó su cabeza. 

 

—Es despampanante —dijo—. La casa más hermosa que he visto. 

 

El placer se disparó por la rubia ante el evidente placer de ella. 

—Gracias. La diseñé yo misma.

—Parece vieja. 

—Esa fue mi intención. Prometo que tengo toda la plomería necesaria dentro. 

Ella negó con su cabeza y la siguió dentro. Pisos de mármol brillaban debido al pulimiento y los techos de catedral creaban una ilusión de espacio y elegancia. Grandes y aireadas habitaciones salían desde la escalera en espiral del centro. Tae  le dio una propina al conductor y cerró la puerta detrás de ella. 

—Vamos, te mostraré los alrededores. A menos que quieras desvestirte primero. 

Ella agarró un puñado del material de gasa y levantó su cola. Sus pies con medias se asomaban desde debajo. 

—Guía. 

la llevó a un tour completo. La cocina completamente equipada presumía un brillante centro de acero inoxidable y cromo, pero Tae se había asegurado de que la habitación mantuviera el calor del que una abuela coreana se sintiera orgullosa. Una isla de pesada madera cortada sostenía canastas llenas de frutas frescas y dientes de ajo, hierbas hundidas en botellas llenas de aceite de oliva, pastas secas y tomates rojos y maduros. La mesa era de cedro grueso con sillas cómodas y macizas. Una selección de vinos se asomaba en un estante de acero. Las puertas de vidrio llevaban de la cocina a la terraza interior, completa con muebles de mimbre, estantes y vasijas de margaritas derramándose por la habitación. En vez de coloridas pinturas, fotografías en blanco y negro ocupaban el espacio de la pared, y mostraban un despliegue de arquitectura de todo el mundo. Tae disfrutó la expresión de ella mientras admiraba cada centímetro de su espacio. ella la llevó por las escaleras hacia las habitaciones.

 

—Mi habitación está en el fondo del pasillo. Tengo una oficina privada pero hay un computador libre en la biblioteca que puedes usar. Puedo ordenar cualquier otra cosa que necesites. —Abrió una de las puertas—. Te he dado una habitación con baño privado. No estaba seguro de tu gusto así que siéntete libre de re decorar. 

 

La miró admirar los tonos pálidos y neutrales de la cama de postes tamaño King y los muebles a juego. 

—Esto estará bien. Muchas gracias —dijo. 

La miró fijamente por un momento mientras la formalidad latía entre ellas. 

—Sabes que estarás atrapada aquí por al menos dos días, ¿cierto? Usamos el trabajo como una excusa para no ir a una luna de miel, pero no puedo aparecer en la oficina hasta el lunes. Las personas van a chismosear. 

Ella asintió. 

—Puedo utilizar la computadora para mantenerme al día. Y Jessica dijo que ayudaría. 

Tae se dio la vuelta. 

—Ponte cómoda y encuéntrame abajo en la cocina. Cocinaré algo para la cena. 

—¿Cocinas?

No me gusta que personas extrañas estén en mi cocina, tuve suficiente de eso al crecer. Así que, aprendí. 

—¿Eres buena?

Ella bufó. 

—Soy  la  mejor. 

Luego él cerró la puerta tras ella. 

Mujer arrogante. 

Tiffany se dio la vuelta y estudió su nueva habitación. Sabía que Tae estaba viviendo cómodamente con una gran fortuna, pero el tour la había hecho sentir como el personaje de Audrey Hepburn en Mi bella dama: completamente común junto a la sofisticación de su tutor aun en este caso era tutora. 

 

Al diablo con eso. Necesitaba mantener su vida tan normal como fuera posible, matrimonio o no. Taeyeon no era su esposa real, y ella no pensaba quedarse atrapada en cualquier artimaña doméstica y encontrarse perdida a fin de año. Probablemente ni siquiera la vería a menudo. Asumió que ella también trabajaba hasta tarde y además de las fiestas ocasionales a las que tendrían que asistir, llevarían vidas separadas. 

 

Su discurso motivacional mental ayudó, así que se quitó el vestido y pasó la siguiente hora en un baño de burbujas en la lujosa tina de spa adjunta a su habitación. Miró una sola vez al fino camisón negro que las gemelas habían lanzado en su bolsa de noche, luego la lanzó a la parte trasera del armario. Se puso unas calzas y una sudadera de felpa, se recogió el cabello y bajó a la cocina. 

Tiffany siguió los sonidos de chisporroteo y se deslizó en una de las pesadas sillas talladas de la cocina. Llevó sus pies descalzos al borde de su asiento, envolvió sus brazos alrededor de las rodillas y observó a su nueva esposa. 

No se había quitado el corsé. Se había quitado la chaqueta y también la falda blanca del vestido. Las flores que adornaban su peinado ahora están sobre la mesa dejando su cabello suelto de una forma muy y. Sus  pechos cubiertos por una tela que se expandía para que encajaran a la perfección. Sus piernas ahora cubiertas por un short negro que la cubrían como un amante y enfatizaban las largas piernas delgadas y sus caderas. Tiffany pasó un infierno ignorando la dura curva de su trasero. La mujer tenía un trasero sensacional. Demasiado mal que nunca la vería desnuda. No creía que verla con su bañador levantado cuando era adolescente contara. Además, ella había estado demasiado ocupada mirando su frente. 

— ¿Quieres ayudar?

Se clavó sus uñas en la palma para darse una dosis de realidad. 

—Claro. ¿Qué tenemos?

—Fetuccini Alfredo con camarones, pan de ajo y ensalada. 

Un gemido afligido escapó de sus labios. 

—Oh Dios, eres malvada. 

—¿No te gusta el menú?

—Me gusta demasiado. Sólo comeré la ensalada. 

Taeyeon  le lanzó una mirada de disgusto por encima del hombro. 

 

—Estoy cansado de mujeres que ordenan ensalada, luego parecen como si se merecieran unas medallas. Una buena comida es un regalo. 

 

La pelirroja  apretó sus dedos más fuertemente. 

—Bueno, muchas gracias por ese punto de vista petulante de la población femenina. Para tu información, aprecio la buena comida más que tú. ¿Viste los aperitivos que ordené para nuestra boda? ¿No viste cuánto comí? Demonios, es igual que cuando un mujer  le pone en frente a otra mujer una comida que engorda y es deliciosa y se ofende cuando ella no come. ¡Luego pareces impactado en la habitación cuando estás mirando sus caderas y preguntándote cómo engordó cinco kilos!

—No tiene nada de malo que una mujer tenga curvas. 

Tiffany  saltó de su asiento y agarró los ingredientes para la ensalada. 

—He escuchado esa antes. Hagamos esta prueba, ¿sí? ¿Cuánto pesa Nana?

La rubia no respondió. 

Fany  lanzó un pimiento rojo en la tabla junto a la lechuga  y resopló. 

Oh, ¿ahora tenemos la lengua atada? ¿Ella pesa 45 kg o eso es considerado gordura por estos días?

Cuando Tae habló, su tono fue menos arrogante. 

—Es una modelo. Tiene que mantener un peso más bajo. 

— ¿Y ella ordena ensaladas cuando sale a cenar?

Más silencio. 

Un pepino rodó por el mesón y se detuvo en el borde. 

—Ah, supongo que eso significa que sí. Pero estoy segura que apruebas su disciplina cuando le quitas la ropa. 

Se removió incómoda y mantuvo su atención en la olla caliente con camarones.  

—ella  es un mal ejemplo. —Definitivamente sonó incómoda. 

 

—Tengo otro rompecabezas. Jessica  dijo que sólo tendías a salir con modelos. Parece que te gustan las mujeres delgadas y aceptas que coman ensalada. —Lavó los vegetales, agarró un cuchillo, y comenzó a picar—. Pero si es alguien con quien no estás pensando dormir, supongo que no te importa cuán gorda se vuelva siempre y cuando te haga compañía en las comidas.

 

—Sucede que detesto salir a cenar con la mayoría de mis citas. Entiendo que están en el negocio, pero disfruto de una mujer que le gusta la buena comida y no está asustada de comer. No eres gorda. Nunca fuiste gorda así que no sé de dónde viene esta obsesión. 

—Una vez me llamaste gorda. 

—No lo hice. 

—Sí, lo hiciste. Cuando tenía catorce, dijiste que me estaba rellenando en los lugares equivocados.

—Infierno, mujer, quería decir tus pechos. Era una adolescente mocosa que sólo quería torturarte. Siempre fuiste hermosa. 

El silencio descendió. 

Alzó la mirada de su tarea y su boca cayó abierta. En todos los años que había conocido a Kim Taeyeon, élla la había torturado, provocado e insultado. 

Nunca la había llamado hermosa. 

Taeyeon estaba ocupada batiendo crema y mantuvo su tono casual. 

—Sabes lo que quiero decir. Hermosa en el sentido de hermandad. Las observé a ti y a Jessi pasar por la pubertad, y volverse mujeres. Ninguna de las dos es fea. O gorda. Creo que estás siendo dura contigo. 

Tiffany entendió lo que quería decir. Tae no pensaba en ella como una mujer hermosa, más como una molesta hermana menor que creció siendo atractiva. 

La diferencia era monumental, y ella ignoró el agudo escozor del dolor.

—Bueno, voy a comer esta ensalada y no quiero escuchar más comentarios sobre las mujeres. 

 

—Bien. ¿Abrirías una botella de vino? Hay una enfriándose en el refrigerador. 

 

Tiffany descorchó un caro vino y la observó sorberlo. Las esencias cítricas de madera y frutas se alzaron hasta sus fosas nasales. Luchó un minuto, luego se rindió. Una copa. Después de todo, se lo merecía. 

Se sirvió un vaso y tomó un sorbo. El líquido bajó por la parte posterior de su garganta, el sabor seco y hormigante. Pronunció un bajo gemido de placer. Su lengua lamió las esquinas de sus labios y sus ojos se cerraron mientras el sabor pulsaba a través de su cuerpo. 

Tae comenzó a decir algo pero se detuvo. La visión de verla bebiendo y disfrutando su vino puso tenso cada músculo de su cuerpo. La sangre latió en sus venas y su cuerpo se volvió completamente alerta. Su lengua lamió sus labios con unos movimientos tan delicados, que ella deseó que probara algo más que vino. 

Se preguntó si ella hacía esos sonidos guturales cuando unos dedos estuvieran enterrado profundamente en su calor húmedo y pegajoso. Se preguntó si sería tan apretada y caliente como su boca, cerrándose alrededor de sus dedos  como un puño sedoso, ordeñando hasta la última gota de su reserva e incluso demandando más. Esos pantalones revelaban cada curva de su cuerpo, desde su dulce trasero hasta la seductora longitud de sus piernas.

Su sudadera se había subido y mostraba un trozo de piel desnuda. Y obviamente se había quitado su sostén, sin pensar en ella como una mujer que la deseara, si no más como un molesta hermana sin urgencias Femeninas. 

Maldita Tiffany por empezar a complicar las cosas. Tae dejo caer el tazón de pasta en la mesa y rápidamente arregló los lugares para sentarse. 

—Deja de beber el vino de esa manera. No estás en una película de o. 

Ella jadeó.

 —Hey, no te molestes conmigo sólo porque eres gruñóna. No puedo evitarlo si los negocios son más importantes que un matrimonio real para ti.

—Sí, pero tan pronto como te di un precio saltaste. Te compré igual a como me compraste tú. 

Tiffany agarró el tazón de pasta y llenó su plato. 

—¿Quién eres tú para juzgarme? Lo has tenido todo en tu vida. Te dieron un Mitsubishi Eclipse en tu cumpleaños número dieciséis. Yo obtuve un Chevette. 

 

La rubia  se puso tensa con el recuerdo.

 —Tú obtuviste una familia. Yo no obtuve nada. 

La pelirroja hizo una pausa, luego agarró un trozo de pan de ajo caliente goteando con mozzarella. 

—Tú obtuviste a Jessica. 

—Lo sé. 

— ¿Qué les pasó? Solían ser tan unidas. 

Se encogió de hombros. 

—Jessica cambió en la secundaria. De repente, ya no me hablaba. Dejó de invitarme a entrar en su habitación para nuestras charlas, luego me alejó completamente. Así que, la dejé ir y me concentré en tener una vida propia. Por un tiempo perdiste tu contacto con ella más o menos en ese entonces, ¿verdad?

—Sí. Siempre pensé que algo había sucedido, pero ella nunca habla sobre eso. De todas formas, mi propia familia estuvo jodida por un rato, así que no estabas sola. 

—Pero ahora es como los Park.

Ella se rió y zambulló un montón de pasta en su boca. 

—Mi padre tuvo mucho qué hacer por Jessica, pero creo que nos la hemos arreglado para sanar el ciclo. 

—¿Ciclo?

—El ciclo kármico, cuando alguien arruina las cosas bastante y te hiere. Nuestro primer instinto es herir de vuelta, o rehusarse a perdonar. 

—Suena razonable.

—Ah, pero ahora el ciclo de abuso y dolor continúa. Cuando él regresó, decidí que sólo tenía un padre, y acepté lo que pudiera dar. Con el tiempo, él renunció al alcohol y trató de remediar el pasado. 

 

Tae  hizo un sonido rudo. 

 

—Él se fue cuando eras joven y dejó a su familia detrás por la botella. Abandonó tus hermanas gemelas. ¿Luego aparece y pide perdón? ¿Por qué siquiera lo querrías en tu vida?

Ella cogió con un tenedor otro camarón y lo dejó cernirse encima de su boca.

—Tomé una decisión —dijo—. Nunca olvidaré, pero si mi propia madre pudo aprender a perdonarlo, ¿cómo podía rehusarme? Las familias se quedan juntas sin importar que pase. 

La simplicidad de su habilidad para perdonar lo impactó hasta la médula. Sirvió más vino. 

—Mejor irse con tu cabeza en alta y tu orgullo intacto. Dejarlos que sufran por todo el dolor que causaron.

Tiffany  pareció pensar sus palabras. 

—Casi lo hice. Pero me di cuenta que además de ser mi padre, es sólo un ser humano que lo arruinó. Tendría mi orgullo pero no a mi padre. Cuando tomé mi decisión de romper el ciclo. Terminó poniéndose sobrio y reconstruyó nuestra relación. ¿Alguna vez has pensando en contactar a tu padre?

Sus emociones golpearon en hiper-velocidad. Tae peleó contra la vieja amargura y se las arregló para encogerse de hombros. 

—Min Ho Kim no existe en mis ojos. Esa fue mi decisión.  

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 hola  que tal su dia su dia lamento no haber actualizado antes  me quede dormida ayer frente al computador XD  asi que les tengo una propuesta si desean subo otro capitulo mañana o pasado si lo desean me dejan sus comentarios solo depende de ustedes .

ahhhhhhhh antes que me olvide   feliz año nuevo chino  para todos y quiero agradecerles por suscribirse a la historia  ,por sus comentarios y gracias a las personas que le han dado like a la pagina de facebook.

https://www.facebook.com/pages/KM-y-MM/208295729355256?ref=hl

besos 

bye

M&M

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Comments

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yoonalim__ #1
me parece interesante esta historia
Thiabel2128
#2
Chapter 36: falta el epilogo:c
skincrisday #3
Chapter 36: El epilogo, me encanto. Una critica constructiva al adaptar un fanfics cuiden el cambiar tanto el genero en la lectura.
taeny39
#4
Chapter 36: Esto necesito un epilogo.
LectoraLemon #5
Chapter 36: Me encanto .. wuauuu tu si que sabes ehhh xd xd ... grandioso fic .. saludos y gracias <3
Takamina04 #6
Chapter 36: La mejor historia llena de amor y miedo pero lograste que sea la mejor ☺️
HilNyeonBG
#7
Por lejos... El mejor fic TaeNy que le leído.
De verdad, un aplauso.
Me sorprende lo bien que está cuidada la historia, cosa en la que a menudo fallan todos los fanfics que he leído.
shizuma123 #8
Chapter 35: excelente muy buena esta historia
_MAX_KWON_JUNG_
#9
Chapter 36: Bueno termine de leerme su historia realmente me gusto y creo q toca un tema importante y ea el miedo a amar por salir heridos... gracias por compartirla
_MAX_KWON_JUNG_
#10
Chapter 13: Llevo con.este 13 capítulos en.lado.que la verdad he diafrutado la.historia aunq me encantaría hacerte una obsrrvacion no se si a los demás les paso peor hay puntos donde hay q leer dos veces la sitia ion para.entender bn ya que le cambias el o a los personajes o porque no queda muy claro desde.el punto se vista de.quien. esta hablando ojala.pudieras re editar esos pequeños detalles en verdad es.una excelente historia