Tiffany se sentó y enfrentó a su padre. Sus manos temblaban de alegría y alivio mientras empujaba el cheque

sobre la maltratada mesa de la cocina, que estaba cubierta de alegres soles amarillos de plástico.

—Tae y yo queremos que tengan esto para pagar la hipoteca    — anunció—. No habrá ningún argumento o protestas. Hemos hablado de esto por mucho tiempo, y tenemos suerte de tener mucho dinero. Queremos compartirlo. Significa mucho para nosotras; así que, por favor, acepten esto como nuestro regalo.

Sus expresiones aturdidas, hizo que lágrimas pincharan un poco sus ojos. ¿Cuántas noches dando vueltas, sintiéndose culpable de ser incapaz de conseguir que su padre saliera de su desastre financiero? Cómo si fuera la hermana mayor, odiaba la impotencia que la asfixiaba.

Decidió que hacer frente a Tae  y a sus propias emociones, valía la pena. 

La seguridad de su familia le daba un dolor profundo, con el que había luchado desde que su padre tuvo el ataque al corazón.

—Pero, ¿Cómo puedes hacer esto? —Su tia apretó sus temblorosas manos en sus labios mientras su papa ponía su brazo alrededor de ella—. Taeyeon no debería sentirnos como si fuéramos una carga. Son un matrimonio joven con sueños. Para tu librería. Para una familia con muchos hijos. No deberías estar preocupándote por nosotros, Tiffany. Soy el padre.

Su tía asintió con la cabeza.

—Ya he decidido tomar un trabajo extra. No necesitamos el dinero.

Ella suspiró ante la innata obstinación de su padre.

—Escúchenme. Tae y yo tenemos dinero en abundancia, y esto es importante para nosotras. Papá, un segundo empleo no es una opción en tu condición, a menos que quieras morir. Ya oíste al doctor. —Tiffany se inclinó hacia el frente—. Esto dejará la casa libre, para que puedan concentrarse en el pago de otras facturas. Ahorren para la educación de Yuri y Yoona. Ayuden a Soo a terminar su último año en la facultad de medicina. Nosotras no les vamos a dar suficiente como para jubilarse, sólo lo suficiente para hacer las cosas un poco más fácil.

Ellos intercambiaron una mirada. Descontrolada esperanza brillaba en los ojos de su Tia cuando tomó el cheque. 

—Taeyeon no pudo venir conmigo hoy. Pero hay una condición con este dinero... Ella  no quiere oír sobre el de nuevo.

Mi tia se quedó boquiabierta.

—Tengo que darle las gracias.Ella tiene que saber lo mucho que apreciamos esto, y como ha cambiado nuestras vidas.

Tragó saliva, alrededor de la opresión en su garganta.

—A Tae no le gusta mucho mostrar emociones. Cuando hablamos de esto, insistió en que no quería que volviéramos a mencionar el dinero de nuevo.

Leeteuk  frunció el ceño.

— ¿No aceptará un simple gracias? Después de todo, si no fuera por mí no estaríamos en este lío.

—Pero me fui.—Cualquier persona puede enfermarse, papá —susurró.

El dolor del pasado devastó su cara.

—Y volviste. —Mi tía apretó su mano y sonrío—. Volviste con ellas  y lo hiciste bien. No debes hablar más así.

Su tía se enderezó en la silla, sus ojos brillando por la emoción.

—Aceptaremos el cheque, Tiffany. Y nunca se lo mencionaremos a Tae. Mientras prometas ir a casa y decirle que ella es nuestro ángel.       — Su voz se quebró—. Estoy tan orgullosa de que seas mi pequeña niña .

Tiffany la abrazó. Después de un poco más de conversación, besó a su padre y salió de la casa.

Noche de Poesía se estaba llevando a cabo en BookCrazy y no podía llegar tarde. Subió a su Volkswagen y se dirigió a su tienda, mientras sus pensamientos le daban vueltas en la cabeza.

El truco del dinero fue desafortunado, pero necesario. Nunca le admitiría a Tae lo mala que estaba la situación financiera de su familia. La imagen de la rubia  lanzándole un fajo de dinero suficiente para poder resolver cualquier problema que tuviera, la hizo estremecerse.

Su orgullo era importante, y también el de su padre. El resolvía sus propios problemas.

Tenía la intuición de que Kim Taeyeon creía que el dinero ocupaba el lugar de las emociones, lección que sus padres le inculcaron diariamente, durante mucho tiempo. Se estremeció ante la idea.

No, ella lograría hacer esto por su cuenta.

Se acomodó y manejó al trabajo.

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Tiffany miró alrededor de BookCrazy con satisfacción. Noche de Poesía atrajo una gran multitud y todos eran compradores de libros. Cada viernes por la noche, transformaba la parte trasera de su tienda en un centro de entretenimiento. Música de fondo flotando por los pasillos poco iluminados. Sillones color verde manzana y mesas maltratadas de color café, fueron sacados de la bodega y puestos en un círculo informal.

La multitud era una agradable mezcla de intelectuales, algunos bastante serios y otros que sólo buscaban una noche de entretenimiento.

Arrastró el micrófono a la pequeña plataforma levantada y miró su reloj de nuevo. Cinco minutos para empezar. ¿Dónde estaba Jessica?

Observó a las personas acomodarse en las sillas y murmurar sobre café mientras discutían estrofas, imaginería, y sinfín de emociones. En ese momento, la puerta se abrió para dejar pasar una ráfaga de aire fresco, y Jessie  entró.

—¿Alguien quiere café?

Tiffany corrió y agarró dos humeantes cafés de moca.

—Gracias a Dios. Si no les sirven cafeína, se hubieran marchado al Starbucks que está bajando la calle.

Jessica dejó la bandeja de cartón sobre el suelo y alineó las cajas.

Su cabello color rubio oscuro pasó por su mandíbula cuando ella sacudió la cabeza.

—Cho, estás loca. ¿Sabes cuánto gastas en café, sólo para que estos artistas puedan leer poesía frente a frente? Deja que hagan y traigan su propio café.

—Necesito el negocio. Hasta que encuentre una manera de conseguir un préstamo para ampliar la tienda; tengo que mantenerlos llenos de cafeína.

—Puedes preguntarle a Taengo. Ella es, técnicamente, tu esposa.

Ella le lanzó a su amiga una mirada de advertencia.

—No, no quiero involucrarloa. Prometiste que no dirías nada.

Jessica alzó las manos.

—¿Cuál es el gran problema? Tae sabe que le pagarías el préstamo.

—Quiero hacer esto por mi cuenta. Tomé el pago inicial y ese era el trato. Nada más. No es que esto sea un verdadero matrimonio.

—¿Le diste el dinero a tu padre?

Tiffany sonrió.

—Casi hizo que la compañía de tu hermana valiera la pena.

Sí la pequeña creía que ella era una fría cazadora de dinero, podría dejarla sola.—Aún no lo entiendo. ¿Por qué no le dices a Taengo la verdad sobre el dinero? Es un dolor en la parte trasera , pero tiene un buen corazón. ¿Por qué estás jugando a novia?

Se dio la vuelta, asustada de enfrentar a su amiga. Siempre había sido una terrible mentirosa. ¿Cómo podría decirle a Jessica que deseaba a su hermana y que necesitaba todas las barreras imaginables para mantener su distancia?

Jessica  estudió su rostro durante mucho tiempo. Sus ojos castaños estaban llenos de sorpresa, cuando la bombilla de luz brilló de repente.

—¿Hay algo más entre ustedes? ¿Ella te atrae, cierto?

Tiffany forzó una risa. 

—Odio a tu hermana.

—Estás mintiendo. Siempre sé cuándo mientes. Quieres dormir con ella, ¿No? ¡Qué asco!

Tiffany le arrebató la última taza de café.

—Esta conversación ha terminado. No me atrae tu hermana, y no le atraigo a ella.

Jessica la siguió.

—Está bien, ahora que pasé la vulgaridad inicial de la idea, vamos a hablar de eso. Es tu esposa, ¿Cierto? Puedes estar recibiendo o por un año con alguien. —Tiffany caminó a la plataforma. Todos los ojos estaban sobre ella ahora. La palabra ‘o’ definitivamente llama la atención de la gente, pensó.

Ignoró a su amiga e hizo las presentaciones iniciales para la Noche de Poesía.

Mientras el primer poeta caminaba al escenario, ella se apartó y se acomodó en su silla. Tomó el cuaderno en caso de que necesitara escribir cualquier destello de inspiración, y aclaró su mente para la lectura.

Jessica se arrodilló y susurró:

—Creo que deberías dormir con ella.

Tiffany dejó escapar un suspiro largo de sufrimiento.

—Déjame sola.

Sus hormonas la sacudieron con avidez ante la imagen.—Lo digo en serio. He tenido unos minutos para pensar. Es perfecto. Ambas tienen que ser fieles de todos modos, así que sabes que no va a estar durmiendo con alguien más. De esa manera obtienes el o que necesitas; y en un año, sólo dices adiós. Sin resentimientos. Sin complicaciones.

Ella se retorció. No porque estaba avergonzada por la sugerencia de Jessica . No, era todo lo contrario. La posibilidad la intrigaba. Se quedaba despierta en la noche, imaginando en la habitación. Su cuerpo desnudo, su y cuerpo, tendida en la cama, esperando por ella.

Demonios, a este ritmo iba a terminar en el hospital psiquiátrico a finales de año.

Causa: Celibato.

Jeessica chasqueó los dedos delante de su rostro y sacó a Tiffany de su ensoñación.

—Te fuiste de nuevo. ¿Tae vendrá esta noche?

—Oh, sí, tu hermana amaría este tipo de noches. Ella probablemente preferiría una endodoncia y un examen de mamas.

—¿Cómo se están llevando ustedes dos? Aparte de la atracción física.

—Bien.

Jessica  puso los ojos en blanco.

—Mientes, de nuevo. No vas a decirme, ¿Cierto?

Tiffany se dio cuenta de que siempre le había confesado todo a Jessica, excepto en una ocasión. La primera vez que Tae la besó. Ella creía que la amaría también, entonces. La amistad se convirtió en rivalidad y luego, en un enamoramiento juvenil. Que las emociones tan puras del primer beso, le hicieron creer que era amor. Su corazón latía por la rubia , lleno de alegría ante la posibilidad de estar juntas; así que ella pronunció las palabras, su voz resonando entre los árboles.

“Te amo”.

Luego esperó que la volviera a besar. En cambio, Tae dio un paso hacia atrás y se echó a reír. La llamó niña tonta y se alejó.

En aquel momento ella aprendió su primera lección en desengaños amorosos.

A los catorce años. En el bosque, con Kim Taeyeon.

No estaba dispuesta a repetir la lección.

Apartó su recuerdo y decidió mantener su segundo secreto de Jessica.

—No está pasando nada —repitió Tiffany—. ¿Puedo escuchar el siguiente poema en paz, por favor?

—No creo que la paz esté en las cartas de esta noche, nena.

—¿Qué quieres decir?

—Taeyeon está aquí. Tu esposa. La mujer que te atrae y te quita el sueño. 

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hola como estan espero que bien no hay cansada nunca pense que trabajra fuera tan agotador pero bueno asi es la vida les queria informar dos cosas chiquillos y chiquillas  el tema es que por tiempo no hubiese podido actualiza pero  hable con mi unnie entonces hemos quedado que ambas vamos  actualizar las 3 historias las dos de facebook y esta  ya que  vamos a tener que trabajar en  equipo para poder  mantener los dias de actualizaciones asi que si ven un dia K&M  es mi hermana.

Disculpen se que debimos actualizar las otras dos historias hoy pero mas tarde lo hago  esque debo irme a domir  mama sacandome  de internet

POR CIERTO SI QUIEREN CONOCER LAS HISTORIAS QUE ESTAN EN FACEBOOK HAY LES DEJO EL LINK

https://www.facebook.com/pages/KM-y-MM/208295729355256?ref=hl

besos  cuenten que tal les parecio el capitulo me gusto saber como le parecio  su opinion de el capitulo anterior.

bueno mis pìlas se agotan porque a los niños les gusta tanto  las cajita feliz ? y no se me ocurrio otro titulo XD

bye chiquillos