Jonghyun sonrío, sus ojos brillando con adoración mientras miraba al chico durmiente a su lado, su mano acariciando el flequillo del rubio suavemente, con cuidado para no despertarlo.

El cantante había despertado unos minutos antes y para su sorpresa Key se había movido durante la noche, terminando con su cabeza en su pecho y un brazo sobre su estómago, abrazándolo como una almohada.

Jonghyun no podía evitar sonreír como un idiota, feliz de tener alro tan cerca de él de nuevo. Dios… Key era tan hermoso…!

Su cabello estaba bastante desordenado por moverse tanto en la cama, dándole una apariencia adorable; sus rosados labios de corazón estaban semi abiertos, dejando salir suaves respiros; su mejilla izquierda que estaba aprisionada contra el pecho de Jonghyun estaba más roja que la otra, probablemente por la presión y…

Jonghyun rio para sí mismo. Habían tantas cosas que hacían lucir hermoso a Key… incluso ese pequeño rastro de saliva que estaba empezando a humedecer su playera lo hacía ver adorable.

 

Dejo a sus dedos acariciar la mejilla del rubio suavemente, sintiendo la suave, aterciopelada piel que estaba rogando ser besada, pero se detuvo cuando sintió a Key moverse un poco. No quería despertarlo, no aún… sabía que el chico estaba cansado y quería que descansara. La noche anterior los gemelos no tuvieron piedad con ellos y decidieron llorar por dos horas seguidas, haciéndolos permanecer despiertos hasta tarde, tratando de arrullarlos para que volvieran a dormir.

Habían entrado en pánico; Key incluso llamo a su madre, preocupado de que tal vez sus bebes estuvieran enfermos. Ellos simplemente no dejaban de llorar y Jonghyun se sentía con ganas de llorar también. Tenían pañales limpios, no tenían hambre y no tenían ninguno de los síntomas de los que la mamá de Key pregunto.

Así que solo se quedaron ahí… sentados en el pequeño sillón que decidieron comprar y poner frente a las cunas. Qué bueno que Key recordara comprarlo… algo les decía que probablemente pasarían muchas noches sentados en ese sillón.

Al final Jonghyun se descubrió a sí mismo despertando a las tres de la mañana con una durmiente Mikum en sus brazos. Key durmiendo a su lado, sosteniendo al bebe.

Tuvo que poner a los gemelos de vuelta en sus cunas y despertar a un muy cansado Kibum, quien ignoro sus llamadas y término teniendo que cargarlo a la cama.

 

Ser padre… no era fácil. Para nada.

A veces se despertaba, pensando que había escuchado llorar a los bebes en el cuarto de al lado cuando era solo su imaginación. Pero no podía enojarse por estar tan cansado, los amaba hasta el cansancio y podría permanecer despierto cada noche si era necesario, solo para estar seguro de que estuvieran bien.

 

Taemin termino quedándose en su cuarto de visitas esa noche y Key tuvo que ir a revisarlo, preocupado de que hubiera muerto o algo, porque simplemente no era posible que no se despertara con los gritos de los bebes. Lo reviso dos veces… y el pequeño bastardo seguía durmiendo pacíficamente como si no hubiera oído nada…

Esa noche había sido una excepción, Jonghyun sabía que no podía dejar al mankae dormir en esa habitación muchas veces o terminaría teniendo a Taemin con su maleta en la puerta.

 

De repente, un fuerte ruido lo hizo saltar de un susto, haciendo a Key jadear del susto también, despertándose enseguida.

Maldiciendo en voz alta, Jonghyun tomo su celular que sonaba, tratando de ignorar la mirada de shock que Key le estaba dando al notar en qué posición había estado durmiendo.

 

“Hola?” Jonghyun dijo en un tono molesto, sin siquiera molestarse en mirar el ID de la llamada.

 

“Enciende la TV en el Canal 5!”

 

El cantante enarco una ceja ante la voz de Onew. Eso tenía que ser una broma; le estaba llamando por un programa de TV?! “Qué? Jinki, de qué demonios estas-“

 

“Es enserio! Hazlo ahora!”

 

El chico musculoso hizo una mueca de confusión ante la demanda del líder. Que podía ser tan serio para que Onew los llamara tan temprano en la mañana?

 

Key, quien estaba terriblemente avergonzado por haberse descubierto a si mismo babeando en la playera del cantante y tratando de entender cómo demonios había terminado sobre el pecho de Jonghyun para empezar, se puso curioso por la expresión del rostro del cantante y se acercó a él. “Quién es?”

 

Encogiéndose de hombros, Jonghyun decidió obedecer al líder. “Jinki. Enciende la TV, canal 5 dice.”

 

“Eh? Por qué?” Key bostezo, haciendo una mueca, tratando de encontrar el control de la pequeña pantalla que tenían, suspendida en la pared enfrente de la cama.

 

“Por el amor de dios! Solo hazlo!” Onew grito del otro lado de la línea.

 

Key finalmente alcanzo el pequeño control que se había caído a la alfombra la noche pasada y encendió la TV, cambiando al canal 5 como su amigo había pedido.

Una reportera estaba hablando en lo que parecía el puente Seoul’s Han River de fondo, reportando un accidente. El camarógrafo estaba filmando en ese momento como un auto rojo había chocado con un camión, y antes del camión, una gran, pesada maquina estaba sacando otro auto del agua, completamente destruido.

 

“-esta mañana. Tengo aquí a alguien que vio el accidente anoche, buenos días señor. Entiendo que usted ha estado aquí por bastantes horas, puede describirnos lo que vio?” La reportera se acercó a un taxi, donde un hombre de mediana edad estaba recargado.

 

“Lo que paso es que casi soy asesinado aquí anoche!” El hombre, probablemente el conductor del taxi, grito, sorprendiendo a la reportera. El hombre señalo en dirección del camión. “Había un auto estacionado ahí, sin luces o alguna advertencia a los otros conductores de su presencia. El camión no lo vio y choco con él, mandando al auto al rio. Apuesto a que la chica murió inmediatamente, no hay forma de que siquiera tuviera tiempo de pensar en lo que le paso.” El hombre gesticulaba con sus manos antes de asentir para sí mismo y rascarse la barba.

 

La reportera asintió y paso a la siguiente pregunta. “Vio todo lo que paso? Como se detuvo a tiempo?”

 

“El auto enfrente de mí no tuvo tiempo y choco contra el camión, yo solo tuve el tiempo de frenar porque no iba apurado y me gusta mantener mi distancia de los otros autos, y gracias a dios lo hice!” El taxista señalo al cielo, siendo obviamente religioso.

 

“Muchas gracias por su tiempo señor.” La reportera comenzó a alejarse, mirando directamente a la cámara. “El vehículo de la actriz ha sido recuperado después de pasar la noche en el rio, como todos ustedes pueden ver; la principal razón para que se detuviera sigue siendo desconocida. El accidente resulto en dos muertes y una persona herida; el conductor del camión ya ha sido enviado al hospital más cercano y los cuerpos ya fueron retirados, siendo uno el de la víctima, la joven actriz Shin Sekyung.” La reportera termino con una expresión seria.

 

Jonghyun no pudo evitar dejar a su mandíbula colgar abierta, horrorizado con la noticia.

No era posible…

No era jodidamente posible…

Sekyung,,, murió? Esa noche?!

 

“Hola? Lo vieron?” La  voz de Onew vino de la bocina del teléfono de Jonghyun.

 

El cantante que había estado sosteniendo el teléfono en su mano, lo llevo a su oído de nuevo, sus ojos nunca dejando la pantalla enfrente de él, demasiado impactado para parpadear. “Sekyung… está muerta?” Murmuro lentamente.

 

Hubo un asentimiento del otro lado. “Aparentemente. Al principio dijeron que su cuerpo fue encontrado en el rio… y que no lucia bien. Dijeron que tuvo una muerte inmediata; el camión fue directo a ella. Difícil de creer huh…?”

 

El cantante gimió y escondió su rostro en su mano libre. Mierda, mierda, mierda.

Él hizo esto, no? Él la hizo hacer eso…

Él fue el que la puso mal esa noche…!

 

“Fue lanzada al rio creo yo. El impacto fue… bastante duro. ”Onew le dijo en voz baja y Jonghyun podría decir que probablemente se estaba mordiendo el labio.

 

El chico musculoso miro a Key a su lado, el menor no mostraba ni un poco de pena, solo sorpresa. “Hable con ella anoche…”

 

“Qué?” Preguntó Onew, pensando que Jonghyun estaba hablando con él.

 

“Fui a hablar con ella anoche; le dije que dejara de molestarnos, que se rindiera.” El vocalista principal murmuro, probando el amargo sabor de la culpa. “Y si-“

 

“No.” Key dijo abruptamente, su voy llena de confianza. “Nada de esto es tu culpa.”

 

Jonghyun sacudió la cabeza, aún sin creer lo que había visto en la TV. Ella estaba muerta… y él fue el que lo provoco! Que más la haría detenerse en medio de un puente?! “Cómo puedes saberlo?”

 

“Fue un accidente.” Key dijo simplemente, encogiéndose de hombros.

 

Jonghyun sabía que Key odiaba a la chica desde el primer día, si…, y ella le hizo muchas cosas malas a él, a ellos, pero… la muerte era la muerte! Era el fin! Ella… se merecía morir?

Era joven… aún podía aprender cómo hacer las cosas bien… no era necesario ese cruel destino.

 

“Ella se detuvo ahí por una razón! Y si ella iba… a suicidarse?” El solo pensamiento de tener a alguien cometiendo suicidio por él le helaba la sangre. Había sido demasiado duro con ella anoche? No, hizo lo que cualquiera  haría por su familia, cierto?

Pero… y si ella realmente necesitaba ayuda mental? La gente así no podía ser tratada normalmente; salían heridos fácilmente, cierto?

 

“Ya sea queriéndolo o no, igual murió.” Key se encogió de hombros una vez más, su voz tan fría como el hielo, sus ojos mirando a las sabanas. “Y para ser honesto… No lo lamento por ella.”

 

“Está muerta Kibum…!” El más bajo susurro, sus ojos muy abiertos ante las palabras delro. Quería que la chica los dejara en paz, pero no quería que muriera…!

 

“Era una maniática Jonghyun. Era peligrosa.” Key le espeto, lanzándole una  mirada al mayor. “Que si ella me hacía algo? O a los niños?”

 

El cantante sacudió la cabeza. “No lo hizo…”

 

Key jadeo, levantándose. “Ella ya lo hizo! Quería que tú nunca supieras de ellos! Ellos iban a crecer sin su padre! Si alguien es capaz de hacer eso, creo que es capaz de hacer algo mucho peor!”

 

Jonghyun permaneció en la cama, mirando a Key lanzarle una mirada que lo congelo. “No voy a pretender sentir lastima por alguien que no fue capaz de sentirlo por dos inocentes bebes…” Elro le espeto antes de salir del cuarto, estampando la puerta detrás de él.

 

Jonghyun se encogió ante el fuerte ruido y sintió a su culpa duplicarse.

Lo había hecho. Ahora lo había hecho.

La última cosa que quería ahora era hacer enojar a Key. Pero joder…! Como se suponía que debía reaccionar? Sabía que tenía razón, Sekyung era una persona peligrosa pero aun así sentía pena por ella, él era así, no podía evitarlo.

 

“Kibum… tiene razón.” La voz de Onew salió de la bocina. Jonghyun salto, se había olvidado completamente del líder.

 

“Lo sé.” Dijo, presionando el teléfono contra su oído. “Es que solo no le deseo la muerte a nadie… tal vez si hubiera tenido algún tipo de terapia…”

 

Onew suspiro. “No sé si fuera su caso… pero algunas personas simplemente no cambian, créelo o no, y odio decir esto, pero estoy aliviado ahora que ella se fue. Minjee ha estado visitando a Taemin y ella habla de Sekyung a veces; por lo que yo he oído, ella había sido así desde que era una niña. Se obsesionaba con cosas y hacía lo que fuera para conseguirlas. También he escuchado algunas historias perturbadoras.”

 

Jonghyun hizo una mueca. “Quieres decir que yo era la cosa esta vez?”

 

Hubo un asentimiento. “Me temo que sí. Es por eso pienso que tal vez… es lo mejor para todos. Incluso para ella.”

 

El cantante hizo otra mueca. Cómo la muerte podía ser buena para alguien? “A que te refieres?”

 

“Piénsalo, ella está en paz ahora. Por lo que yo sé, ella nunca fue realmente feliz. Lo que sea que la haya vuelto así… se ha ido ahora. Ella es libre de ser así.” El líder hablo con voz cálida.

 

“Eres raro…” Jonghyun sonrío para sí mismo, mentalmente concordando con las palabras de su amigo.

 

“Me lo dicen bastante.” El otro rio antes de volver a su tono preocupado. “Solo no pienses más en ello, ok? Kibum grito tan fuerte que lo escuche desde aquí. Te sugiero que vayas tras él. No necesito recordarte que él es… bueno, una madre ahora. Si es protector con Taemin que no está relacionado con él en ninguna manera, no puedo ni imaginar lo protector que es con sus propios hijos. Sentirlo por alguien que lastimo a sus bebes es un pecado mortal para él.”

 

Jonghyun suspiro, descansando su espalda contra las almohadas, mirando a la puerta cerrada de la habitación. “Lo sé…”

 

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Key estaba molesto sí. Cómo podía defenderla después de lo que ella les había hecho? A veces odiaba el amable corazón de Jonghyun! Era demasiado amable para su propio bien!

Entendía lo que el cantante quiso decir pero no pudo evitar enojarse de todas maneras. Sabía que estaba siendo un poco egoísta y cruel por estar agradecido por la muerte de alguien peor… ella había tratado de arruinar las vidas de sus bebes! Así que al demonio! Ella podía pudrirse en su ataúd porque a él no podía importarle menos!

 

“Buenos días hyung.”

 

“Eh? Buenos días Minnie.” Key se volteó, sorprendido de ver a Taemin tan temprano en la mañana, el menor aun abotonándose la camisa.

Elro dejo la estufa y fue a ayudarlo con su desordenada camisa azul, notando como algunos de los botones estaban en el lugar incorrecto. “Aish, déjame hacer eso.”

 

“No me importa eso, ya se me hace tarde.” El rubio chillo, teniendo alro agarrándolo de la camisa y acercándolo a él, abotonándolo apropiadamente.

 

“Tarde para qué?” Vio a Key enarcar una ceja.

 

Taemin se mordió el labio. “Ya viste las noticias?”

 

Key asintió, acomodando el último botón. “Si… ya estabas despierto? Eso es raro.”

 

“Minho me llamo.” Le dijo el mankae. “Estaba realmente impactado…!”

 

“Ah. Onew nos llamó también.” Dijo Key, limpiando partículas de polvo invisibles de los hombros del mankae. “Listo. Entonces, a donde se supone que vas?” Le pregunto, volteándose de nuevo a la barra para terminar el desayuno que había estado preparando.

 

El cantante hizo una cara seria, agachándose para atar sus botas. “Tengo que ir a ver como esta Minjee, ya no era su amiga, pero seguía preocupándose por Sekyung…”

 

Key se congelo, alzando una ceja. “Vas a ir al departamento de una chica tan temprano en la mañana?”

 

Taemin asintió.” Debe de estar devastada hyung. Era su amiga de la infancia.”

 

“Bueno, no iras a ningún lado antes de que comas algo.” Key se encogió de hombros.

 

Taemin rodo los ojos, suspirando. “No lo necesito, re- …humph!”

 

“Cállate.” Key frunció los labios, molesto, después de meter un pan tostado en la boca del mankae. “Te estas poniendo demasiado delgado y aún estas en crecimiento. Comete eso.”

 

Taemin tomo el pan y sintió ganas de llorar y de estampar su pie contra el suelo impacientemente. Su peor pesadilla se había vuelto realidad; Key se había convertido en una madre, de verdad. “Pero umma! Es tarde!”

 

Key lo ignoro y lo empujó hacia la mesa, obligándolo a sentarse. “Sekyung no se va a levantar de entre los muertos y a huir. Creo que tienes tiempo suficiente para comerte tu pan.” Le dijo, también poniendo la leche en la mesa.

 

“Me dan escalofríos cuando hablas así.” Taemin miro asustado alro antes de tomar la leche, sabiendo que sería inútil ir contra las órdenes de Key.

 

“Solo come.” Key suspiro, caminando al refrigerador y sacando unas mamilas ya preparadas, poniéndolas a calentar; viendo de reojo como Jonghyun entraba a la cocina con sus brazos llenos con los bebes.

 

Jonghyun bostezo, sentándose al lado del mankae, poniendo a los bebes en su regazo, cada uno en una pierna, con cuidado de no tirarlos. “Ya estas despierto? Llévate tus cosas antes de que te acostumbres a dormir aquí.” El cantante le dio al menor una sonrisa juguetona.

 

Taemin puso el resto del pan tostado en su boca y se levantó, riendo. “Las recogeré después.”

 

“No, no, no, no!” Exclamo Jonghyun mientras el mankae se despedía con la mano. “Llévatelas ahora mismo!”

 

“Es tarde. Bye!” El bailarín principal grito, saliendo de la cocina con largos, rápidos pasos.

 

“Ten cuidado!” Grito Key, preparando las mamilas en la barra.

 

“Si umma!” La voz de Taemin se escuchó desde el corredor antes de cerrar la puerta del frente.

 

Jonghyun suspiro, reacomodando a los inquietos bebes en su regazo, Jaesun tratando de agarrar el borde del mantel. “Lo estas malcriando! No se ira nunca si sigues haciendo eso!”

 

Key tomo una de las mamilas y cargo a Mikum del regazo del cantante, sentándola en su propia silla. “Corre tras las chicas como un gato en celo, dudo que pase mucho tiempo encerrado aquí.” Elro soltó una risita, divertido por como la bebe reconocía la mamila enseguida, abriendo su boca para recibirla, sus pequeñas manitas agarrando los dedos de Key.

 

Jonghyun miro como Key alimentaba a su hija, una cálida sonrisa flotando en sus labios, sus ojos brillando de adoración mientras la bebe tomaba otro trago de la mamila.

 

“Ne… Key.” El cantante lo llamo, tomando una mamila también, poniendo el chupón en los labios del bebe. “Estás enojado conmigo?”

 

Key miro al mayor por unos segundos y sacudió su cabeza negativamente. “No… solo no me gusta hablar de ella…”

 

Jonghyun miro alro, viéndolo enfocarse de nuevo en la bebe, sus dedos limpiando la barbilla de la bebe donde unas gotas de leche habían caído. Onew tenía razón, no debía preocuparse, tenía una familia que cuidar a hora, y Sekyung era la última cosa en que necesitaba pensar. “Entonces no lo hagamos, ya no importa.”

 

Key miro a Jonghyun, sorprendido, agachando la mirada con timidez mientras el otro le daba una cálida sonrisa.

 

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Se sentían como horas desde que Taemin había llegada a la casa de Minjee, teniendo a la chica de apariencia dura luciendo más frágil de lo que había esperado. Ella le dijo que probablemente fuera la última persona que había hablado con la actriz; que la hora del accidente fue exactamente después de terminará la llamada.

Se sentía como si tuviera que proteger a esa chica de cualquier dolor, negándose a dejarla auto-culparse, abrazándola, dejándola llorar en su ahora empapada camisa.

S corazón dolía cuando otra lagrima bajaba por las pálidas mejillas de la chica de pelo negro. Su corazón dolía cuando su labio temblaba, dejando salir débiles, dolorosos sollozos. Su corazón dolía aún más cuando ella sonreía, sus ojos aun húmedos, diciéndole que no se preocupara por ella.

 

Ella parecía no creerlo cuando él le dijo que le importaba, siendo que Sekyung era la principal razón de los problemas de sus amigos. Ella le agradeció su apoyo, sonriendo tristemente, admitiendo que aún ninguna otra persona se había acordado de ella.

El obediente Taemin no obedeció esta vez, cuando ella le dijo que quizás era mejor para él irse, que se metería en problemas si algún paparazzi lo atrapaba visitando a una chica cualquiera, ordinaria.

 

Fama. La fama siempre hacia eso.

Podía hacer a la gente querer ser tu amiga o podía hacer lo contrario, ahuyentándolos.

Pero Minjee… él no quería que hiciera lo mismo. Ella había hecho cosas malas, pero las había arreglado, siempre fue de mucha ayuda, era divertida, amable, generosa, inteligente, ella también tenía… una sonrisa adorable.

Ella movía su nariz tiernamente cuando probaba algo nuevo, temerosa de que sepa mal, tenía peleas con el aire cuando veía películas de acción, tenía la más hermosa risa… le gustaba.

Él siempre había sido al que protegían, todos lo llamaban tierno, adorable, bonito… él siempre había sido el mankae de mankaes, el que todos querían abrazar y apretar como si fuera una especie de peluche gigante. Él nunca se opuso, le gustaba la atención y nunca le molesto… pero ahora… se sentía como si fuera el que tenía que proteger a alguien, protegerla a ella, consentirla, abrazarla.

 

Podía ser un chico lindo pero no era estúpido, en absoluto.

Sabía lo que le estaba pasando, solo que no estaba seguro de si estaba preparado para eso o no. Pero… si no se movía… las cosas nunca cambiarían. No era el momento para ser débil y sentirse como si fuera el Taemin de la época de Replay. No, había crecido; ya no era solo un niño.

 

Así que, sin estar seguro de que fuera la mejor ocasión o no, solo lo hizo.

Le tomo todo su coraje hacerlo, pero… lo hizo.

Fue inundado por una nueva emoción, un nuevo sentimiento que nunca había sentido antes. Se sentía como dolor, adrenalina y… una gran cantidad de escalofríos.

La cosa era… que el dolor no dolía, la adrenalina no era como la que sentía cuando estaba sobre el escenario y los escalofríos no eran por que tuviera frio.

 

Un beso.

 

Un simple beso lo hizo todo. Se sentía como la magia y los sueños. Era una sensación extraña para la que no estaba listo pero… cuando estamos listos para algo realmente?

Fue corto, simple e inocente.

Pero aun así lo hizo.

 

Minjee lo miro con los ojos muy abiertos detrás de sus enormes gafas anticuadas. Solo podía parpadear, sus labios ligeramente abiertos por el shock.

 

Antes de pudiera hacerse bolita en una esquina por la vergüenza, recordó las palabras de Minho: “Cuando te avergüences, no te quedes callado. Estar muy callado solo ahuyenta a la gente, los haces pensar que no quieres hablar con ellos o que te están aburriendo. Habla normalmente.”

 

Eso no iba dirigido a las chicas, había sido un consejo para ser educado como un idol pero…

Taemin dejo salir una pequeña sonrisa, esperando que mágicamente escondiera el sonrojo de sus mejillas o que disminuyera el fuerte latido de su corazón. “Me alegra… que dejaras de llorar.”

 

Minjee parpadeo dos veces, sus sollozos completamente desaparecidos, espantados por el shock. “Omo…” Susurro, de repente poniéndose realmente roja.

 

Taemin no pudo evitar poner su mano frente a su boca, tratando de ocultar su enorme sonrisa feliz.

 

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Por el resto del día, Key paso su tiempo cuidando a sus bebes, recibiendo una llamada sorpresa de New York, una muy enojada Sally gritándole por haber olvidado darle su nuevo número telefónico. Se sentía bien volver a hablar con ella, era oficialmente su nueva abuela y él no podía evitar amar a la anciana mujer. La extrañaba mucho; ella había estado ahí para él cuando nadie más estuvo, tenía que invitarla un día.

Taemin regreso a la casa horas después, con la sonrisa más brillante en la que Key hubiera puestos los ojos jamás. Para su sorpresa, el mankae realmente fue a recoger su maleta y regresar al departamento, realmente confiado, gritándole a todo el mundo que SHINee se levantaría de nuevo.

De donde había sacado esa inyección de energía… Key realmente no quería saber.

Otra persona que estaba realmente enfocada en el trabajo era Jonghyun. El cantante seguía sentado en la mesa de la cocina, la laptop y docenas de cuadernos abiertos, golpeando su lápiz contra la madera, tratando de formar nuevos ritmos mientras susurraba letras completamente nuevas.

 

Key decidió no interferir, caminando en silencio por la cocina preparando la cena, a veces mirando al cantante, viéndolo morderse los labios con los ojos cerrados, tarareando algo casi inaudible. Si estaba haciendo una nueva canción, sabía que no le gustaba revelarla hasta que estuviera casi terminada así que aún no iba a pedir oírla.

 

SHINee… una banda de cinco miembros, cinco amigos, una verdadera familia amorosa.

En que se convertirían ahora?

Dentro de él, había algo que simplemente quería saltar y correr de nuevo al escenario, gritando al mundo entero que estaba de vuelta, que SHINee volvería a ser lo que alguna vez fue pero…

Las cosas no eran tan fáciles.

SHINee tenía un nuevo miembro y él tenía dos bebes que cuidar. La rutina de un idol sencillamente no permitía tener familia… esa era la cruel verdad.

Pero su familia era mucho más importante ahora.

Renunciaría a todo, a absolutamente todo… solo por ser capaz de ver a esos niños crecer, verlos tener sus propios sueños, de amarlos y que lo amaran.

Ese era su mayor deseo y meta por ahora. Había dejado de ser egoísta hacía mucho tiempo, tal vez eso era por lo que siempre había admirado a las ancianas: la mayoría de ellas siempre le decían, orgullosas, como habían criado a sus hijos, haciendo grandes sacrificios por ellos, peleando hasta el final.

 

Después de cenar, Jonghyun le dijo que él alimentaria a los bebes y los pondría a dormir, dándole a Key tiempo para limpiar la cocina y bañarse sin la preocupación de que los niños lo necesitaran.

El agua se sentía tan bien contra su piel, era tan relajante…

Ser padre era más difícil de lo que él pensaba. Cuidar a Yoogeun había sido realmente fácil; ellos solo tenían que cuidarlo por unas horas al día, había sido solo diversión, no era su trabajo educarlo realmente, solo lo consentían. Y había 5 para cuidar a un solo bebe, esta vez solo eran él y Jonghyun para cuidar a dos recién nacidos.

Era agotador, su cuerpo ardía, su cuerpo dolía por todo el llanto pero… al final del día… se sentía como si hubiera ganado un premio. Era tan gratificante ver a sus bebes acostaditos, durmiendo ruidosamente, soñando con algo que Key nunca podría averiguar.

 

Otra cosa que le daba una gran felicidad era la visión que estaba teniendo en ese momento.

Key acababa de salir del baño, ya estaba vestido con su pijama e iba a darles el beso de buenas noches a sus bebes cuando lo vio.

 

Jonghyun estaba sentado en el sillón, sus dos brazos llenos, Jaesun en su brazo derecho y Mikum descansando en el otro.

Ambos bebes ya estaba dormidos, los sollozos de Mikum muriendo progresivamente, pero él lo seguía haciendo, seguía cantando.

Key había oído cantar a Jonghyun un millón de veces antes pero… esta era muy diferente. Siempre le ponía emoción a sus canciones pero esta no tenía solo un poco emoción, estaba llena de ella.

Los ojos del cantante estaban brillando con amor, las comisuras de sus labios sonriendo mientras cantaba suavemente, arrullando a los pequeños bebes para dormir. Su voz… sonaba angelical, casi lo hacía querer llorar.

 

Jonghyun… simplemente lo hacía enamorarse de él más cada día que pasaba. Era una locura.

Pensaba que ya lo amaba desde antes… pero se sentía como si Jonghyun pudiera sorprenderlo cada día, haciéndolo amarlo aún más.

El muro helado que había levantado para proteger su herido corazón cuando estaba embarazado sencillamente término derritiéndose por su cálido despliegue de amor.

Sentía… como si ya no hubiera nada de qué preocuparse. Se sentía verdaderamente feliz, se sentía en paz…

 

Jonghyun capto la silueta de Key en la puerta y sonrío, haciéndole al otro una seña para que entrara a la habitación.

Key se acercó a él con una pequeña sonrisa y miro a los dos ángeles durmientes en los brazos musculosos. “Dejémoslos dormir…” Susurro, cuidadosamente tomando al bebe en sus propios brazos, caminando a la cuna azul.

 

Por unos segundos Key solo se quedó ahí, mirando a su bebe dormir, su pequeño pecho subiendo y bajando pacíficamente. Sonriendo presionó un suave beso en su pequeña frente y se movió a la otra cuna para hacer lo mismo.

 

Jonghyun miro alro abrir su corazón justo ahí enfrente de él. Realmente eran dos orgullosos idiotas, pensó. Amaban a esos niños tanto que era casi ridículo.

Y… Key… se veía tan feliz… lucia hermoso…

La idea de tener hijos con él hacía sentir a Jonghyun como si fuera el rey del mundo. Sonaba estúpido, sí, pero así era exactamente como se sentía, un estúpido enamorado.

 

Había querido retar a Kibum, hacerlo colgarse de las paredes de desesperación, rogarle que lo besara pero… simplemente no podía soportarlo. Retar alro era retarse a sí mismo y ya estaba en su límite.

Necesitaba tanto a ese chico… que lo estaba volviendo loco!

Kibum era… ni siquiera podía describir lo que sentía por él; era simplemente tan precioso, tan puro y poderoso que necesitaría crear una nueva palabra para poder explicar lo mucho que sentía por él.

 

Tomando un poco de coraje, Jonghyun dejo a su mano alcanzar la de Key, dejando a sus dedos acariciar los del otro y entrelazarse con ellos, jalándolo gentilmente.

 

Key salto sorprendido cuando sintió a su mano ser tomada, pero no dijo nada. Los ojos de Jonghyun… estaban brillando con una luz familiar que no había visto en mucho tiempo…

Él quería esto? Estaba finalmente a punto de rendirse?

Dios, se sentía tan débil ante esos ojos… no podía huir, no esta vez…

 

Con su palpitante corazón latiendo intensamente dentro de su pecho, Key dejo a su mano ser jalada, mirando abajo avergonzado en silencio. Ya no se sentía tan poderoso, no se sentía con ganas de defenderse, él… quería ser dominado. Necesitaba ese sentimiento, necesitaba sentirse protegido, necesitaba sentirse deseado y que realmente le pertenecía a alguien más… a él.

 

No dijo nada mientras el mayor lo jalaba hacia su habitación, cerrando la puerta tras de él; no había necesidad de palabras. Jonghyun solo lo miro como pidiéndole permiso de seguir adelante, de hacer lo que quería…

Key ni siquiera asintió, en el momento en que sus ojos se encontraron, Jonghyun supo que tenía permitido hacer todo lo que deseara, ambos estaban ardiendo por esto.

No protesto cuando las manos de Jonghyun cayeron en sus caderas, haciendo a su espalda chocar con el pecho del cantante. Dejo al otro plantar suaves besos en su largo cuello, haciéndolo estremecerse, haciéndolo querer ser tomado.

Manos posesivas viajando suavemente de sus caderas hacia su pecho, deslizándose bajo la playera del menor, su piel haciendo contacto, haciendo alro saltar. Las manos de Jonghyun era tan cálidas…! La manera en acariciaban su estómago y subían lentamente, las yemas de sus dedos acariciando sus pezones estaba volviendo loco a Key. El cantante seguía besando su cuello, llegando a su clavícula, a la que le dio una pequeña mordía, marcándolo como suyo, y entonces capturo el oído del menor en su boca, dejando que su aliento le golpeara, sintiendo a Key estremecerse bajo sus manos mientras pellizcaba esos aterciopelados pezones.

 

“J-Jong…”

 

Joder.

 

Key se alejó y se giró, sus ojos un poco húmedos en las orillas. Sus labios estaban parcialmente abiertos y sus ojos…

Esos ojos que Jonghyun estaba acostumbrado a ver con una afilada, confiada, fiera mirada… lo estaban mirando en una silenciosa suplica, esperando, deseando más… necesitando más.

 

Se perdió.

 

Jonghyun capturo los labios de Key con fuerza, sintiendo los brazos delro enredarse en su cuello, jalándolo más cerca. Tomo las piernas de Key, haciéndolas enredarse en su cintura, ambos miembros, excitados bajo la ropa, chocar el uno con el otro.

 

Key. Key. Key…!

Simplemente no podía tener suficiente de ese chico…!

 

Dejo a la espalda de Key golpear la cama y subió sobre él, alzando la playera del menor, atacando los rosados montecitos en su pecho, haciendo a Key jadear.

Extrañaba eso; lo extrañaba tanto…! El sabor de la piel de Key, su calor, su olor, sus ruidos…

 

Key cerro los ojos, su mano cubriendo su boca mientras Jonghyun lamia sus pequeños pezones, sintiéndolos endurecerse dentro de la boca del otro. Estaba tan perdido en la lujuria, tan ansioso por el tacto del cantante que lo hacía querer gemir como puta barata. Odiaba como Jonghyun lo hacía perder el control de esa manera…!

 

Salto en el momento en que la mano de Jonghyun cubrió su erección, tocándola sin acariciarla. Estaba ardiendo, sus ojos lucían tan nublados por la necesidad y el solo quería más, mucho más.

 

En un movimiento inesperado, Jonghyun volteo a Key sobre su estómago y tomo el elástico de su pants y de sus bóxers, jalándolos violentamente.

La diva se hubiera quejado si eso hubiera ocurrido en el pasado pero no podía evitar disfrutar la adrenalina que corría por su cuerpo mientras sentía las manos de Jonghyun sobre él, ya sin tratarlo como si se fuera a romper si lo apretaba demasiado fuerte.

 

Key se sentía como si estuviera soñando, no podía pensar correctamente, su visión estaba borrosa y su cuerpo se sentía por sí solo, guiado por sus más primitivos deseos.

Elro se sostuvo de las sabanas al sentir a sus nalgas ser separadas, ahora completamente expuesto ante el cantante. El tacto de Jonghyun le era tan familiar que no estaba avergonzado, ni siquiera se sentía tímido, se sentía natural para él, tan natural como respirar. Él era suyo. Key era su amante, su mascota. Quería ser amado como antes…!

 

“Ahh!”

 

Key no pudo evitar el fuerte gemido que se escapó de entre sus labios cuando una lengua se deslizo dentro de su pequeño agujero, una mano tomando su ardiente miembro que había descansando contra las sabanas.

Jadeó, sonrojándose furiosamente por no ser capaz de controlar su voz. Se sentía como un gato en celo; había pasado demasiado tiempo sin ningún tipo de caricia, necesitaba eso tanto que su pecho estaba casi incendiándose de alegría.

 

Sus dedos se volvieron blancos mientras se sostenía fuertemente de las sabanas, la lengua de Jonghyun violando su entrada mientras agregaba un dedo, dilatándola.

Estaba perdiendo el control. Ni podía esperar por el verdadero placer que sabía recibiría después. Quería gritarle a Jonghyun para que se apurara pero no lo hizo, sabía que dolería, aún más ahora que su trasero no había recibido ninguna clase se atención desde su separación, meses atrás.

 

Dejo a su cuerpo ser volteado de nuevo, Jonghyun colocándose sobre él con ojos llenos de lujuria, lamiéndose los labios mientras se acercaba a él para besarlo otra vez.

Key se sostuvo de su playera, jalándola, tratando de remover la molesta ropa del camino. El cantante lo entendió, y se la quitó el mismo, dándole a Key la visión que quería. Al demonio él y esos deliciosos abs! Jonghyun era suyo… solo suyo…!

 

El mayor distrajo a Key besándolo mientras introducía otro dedo, haciéndolo jadear. No podía esperar mucho más, estaba ardiendo dentro de sus pantalones y Key lucia más apetitoso que nunca. Descendiendo, Jonghyun beso la cicatriz en el vientre bajo de Key, mostrándole que no tenia de que preocuparse, que seguía siendo hermoso. Sabía que Key era muy delicado sobre las heridas o cicatrices, siempre escondía la pequeña cicatriz en su mejilla, la odiaba. Pero a Jonghyun… no podía importarle menos, nada podía hacer ver mal a Key, y esa cicatriz… sus hijos nacieron de ahí, como podría desagradarle? No, la amaba, la admiraba.

 

Key jadeo fuertemente mientras el tercer dedo era añadido, dilatando un poco su piel .

Sin embargo, Jonghyun seguía manteniendo a su mente ocupada, dándole olas de placer al besar su piel, su mano libre sosteniendo su miembro, bombeándolo lentamente.

 

“Key…”

 

El cuerpo de Jonghyun dejo el suyo y Key se contrajo por el frio, abriendo sus ojos al tiempo de ver al cantante quitarse sus pantalones y bóxers, su miembro levantándose orgulloso enfrente de él.

Key se sonrojo, humedeciendo sus secos labios con su lengua.

Sin embargo, el cantante no fue a abrir sus piernas como él pensaba que haría. Jonghyun fue al cajón y lo abrió, sacando dos cosas.

Key quiso golpearse a sí mismo por su estupidez. Como pudo olvidarse de esas dos importantes cosas? Lubricante y un condón.

 

Normalmente, ellos nunca usaban condón, no lo necesitaban… o eso pensaban.

 

“No es que no me gusten los niños… pero creo que dos son suficientes por ahora.” Jonghyun sonrío mientras comenzaba a abrir el condón.

 

Los ojos de Key se abrieron. ‘Por ahora’?!

No, no, no, no, no! No iba a estar embarazado nunca más! Claro que no! Una cicatriz era suficiente!

 

Jonghyun miro mientras Key entraba en pánico mentalmente por comprensión de sus palabras y dejo salir una fuerte risa, poniendo una considerable cantidad de lubricante en sus dedos, introduciéndolos en la rosada entrada de nuevo. Estaba listo.

 

“AAAH!”

 

Key estampo su mano contra su boca al sentir algo mucho más duro que unos dedos ser empujado dentro de él.

Miro abajo, viendo como Jonghyun sostenía sus piernas mientras se introducía lentamente, viendo a su miembro ser envuelto dentro de su ardiente cavidad.

 

Se sentía bien sentirlo de nuevo, sentir esa familiar dureza dentro de él, dificultándole respirar normalmente. Sus pezones se endurecieron más, siendo golpeados por el aire frio, ahora cubiertos con saliva seca, excitándolo aún más.

 

Jonghyun se empujó dentro, mirando a Key para ver su expresión, cuidadoso de no dañarlo de ninguna forma. No quería que fuera en absoluto doloroso, quería complacer a Key lo mejor que pudiera, hacerlo suyo de nuevo.

 

“M-muévete…” Susurro Key, sus ojos brillando de deseo, sus manos alcanzando los brazos del chico musculoso, tratando de hacerlo recostarse completamente sobre él. Quería sentir su cuerpo moviéndose contra el suyo, sentir su sudor mezclándose, sus respiraciones golpeando en los labios del otro.

 

Jonghyun hizo como le pidió, empujándose más profundo dentro del menor, dejando a su cuerpo caer sobre el de él, estirándose para besarlo.

Key enredo sus piernas alrededor de la cintura del mayor y le correspondió el beso, moviendo su lengua contra la del otro, gimiendo fuertemente.

 

Amar a Key de nuevo, teniéndolo en sus brazos de nuevo… era mágico.

Jonghyun no podía pensar en otra cosa en ese momento, solo… solo en Key.

 

Moviéndose para sentarse, Jonghyun jalo a Key consigo, dejando a la diva cabalgarlo como deseara.

Sus extremidades entrelazadas a su alrededor como si fueran uno solo, Key se irguió un poco para sentir al miembro del cantante entrar completamente en él nuevamente, golpeando ese punto.

El mayor seguía besando la clavícula del rubio y su esbelto cuello blanco, su miembro siendo presionado dentro de esos ardientes, aterciopeladas, estrechas paredes.

 

Key gimió fuertemente, moviendo sus caderas para alcanzar su próstata de nuevo, empujando el miembro de Jonghyun en ella una y otra vez, sintiendo a su propio miembro ser apretado entre sus estómagos.

Nublados ojos felinos se abrieron para ver al chico enfrente de él. El cantante le dio una pequeña sonrisa y tomo los labios de Key con los suyos, su mano en su cuello para controlar mejor el beso mientras sus cuerpos se movían rápidamente uno contra otro.

 

“J-Jong…!!”

 

Joder… él también estaba casi en su límite…

 

Después de un segundo, sin advertencia, Key apretó fuertemente su miembro dentro de él, sus uñas enterrándose en su espalda mientras el sentía algo húmedo golpear su estómago.

Vio al rubio cerrar sus ojos, sus labios abiertos en un grito silencioso mientras cabalgaba su o. Se veía tan jodidamente hermoso…! Su desordenado cabello húmedo estaba pegado a su frente, su piel resplandecía bajo la luz de la luna que entraba por la ventana abierta.

Esa visión lo hizo. Jonghyun dejo a sus propios gemidos escaparse de su lengua al alcanzar el o, la boca de Key cubriendo la suya.

 

Permanecieron así por un minuto, simplemente sosteniéndose  mutuamente, jadeando, ahora completamente exhaustos.

 

Jonghyun fue el primero en moverse, cuidadoso de que su miembro no fuera a deslizarse fuera de Key aún; sabía que Key odiaba cuando salía rápido. Lentamente, acomodo a los dos para descansar contra las sabanas, sus respiraciones gradualmente regresando a su velocidad normal.

 

“Key?” Jonghyun lo llamo después de un rato.

 

“Hum?”

 

Hubo otro momento de silencio, Jonghyun mordiéndose el labio. “Estamos…?”

 

“Estamos qué?” Pregunto Key, cerrando los ojos, sintiendo a su cuerpo al fin descansando un poco. Estaba tan cansado…

 

“Estamos… tu sabes…”

 

Key peleo contra la urgencia de reír ante el repentino nerviosismo de Jonghyun. Acaban de hacer el amor y ahora se ponía tímido? “Sudorosos y cubiertos de ? Si lo sé. Nos bañaremos en la mañana…”

 

El cantante rio a su lado y finalmente salió del rubio para que se pudiera recostar cómodamente sobre la cama. “no. Me refiero… estamos juntos ahora, cierto?” Pregunto, enredando sus brazos alrededor de la cintura de Key.

 

“Babo…” Susurro Key, una pequeña sonrisa escapándose de sus labios. “Crees que haría esto si no estuviéramos juntos?”

 

Jonghyun negó con la cabeza. “No, por supuesto que no…! Solo… te extrañe.” Dijo, quitando los mechones rubios de los ojos de Key antes de inclinarse para robar un último beso, acurrucándose más cerca antes de cerrar los ojos, dejando que el sueño lo tomara. “Eres mío Kibum. Mío…”

 

“Eres tan cursi…”