“A-ahí! Es… ahí!” Taemin jadeo por aire, deteniéndose enfrente del familiar edificio blanco y azul. El mankae quería sentarse en el piso y detenerse para respirar… pero no… Jonghyun no se detuvo. Corrió incluso más rápido. Maldición. “E-espeeraa…!”

 

El vocalista principal no se sentía cansado, no se sentía como si necesitara respirar. Sabía que su cuerpo sudaba pero él no lo sentía. Lo único que sentía en ese momento era adrenalina. La necesidad de ver a Key de nuevo lo estaba volviendo loco, dándole la fuerza de seguir.

Parándose dentro del edificio, Jonghyun camino hacia una de las secretarias e hizo su mejor esfuerzo para que su Ingles sonara decente. “Buenos días, estoy buscando a Kim Kibum por favor.”

 

Minho y Taemin llegaron caminando lentamente después del vocalista principal, respirando profunda, cansadamente. El más alto se limpió la frente con el dorso de su mano y miro a Taemin en shock. “E-él… él nunca corre así… c-cuando corremos en las… en las mañanas…!”

 

Taemin asintió, demasiado exhausto para hablar.

 

“Que quiere decir conque no puede decirme?!” Jonghyun grito, haciendo a todo el mundo en la habitación mirarlo.

 

Minho levanto la cabeza, preocupado, y camino al lado de Jonghyun, poniendo una mano sobre su hombro, tratando de calmar a su amigo.” Cuál es el problema?”

 

Jonghyun se giró hacia el chico y le lanzo una mirada. “Dice que no puede darme ninguna información!”

 

Minho suspiro. Por supuesto que no podían darle ninguna información, el embarazo masculino no era algo que pudieran discutir en público así como así. Empujo al estresado chico a un lado y le dio su mejor sonrisa a la mujer enfrente de él. “Me disculpo por mi amigo, estamos muy nerviosos, tratare de explicarlo…”

 

Taemin suspiro pesadamente, echando su cabeza hacia atrás. No podían desperdiciar tiempo con esas personas…! Necesitaban apurarse! Espera… qué tal si…?

El mankae sonrió por su propia idea y pico el brazo de Jonghyun. “Hyung, hyung sígueme.”

 

Jonghyun le dio una mirada rara pero asintió, dando unas palmaditas en el hombro de Minho antes de seguir al más joven. La secretaria se levantó, alarmada. “A dónde van?! No pueden entrar ahí sin permiso!”

 

Minho miro a sus amigos justo cuando desaparecían dentro de dos grandes puertas metálicas y le dio a la mujer una sonrisa forzada. “Nosotros… vamos al baño.” Mintió.

 

La secretaria de mediana edad miro al último chico correr y tomo el teléfono, presionando unos números. “Seguridad… necesito ayuda con tres chicos asiáticos.”

 

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Key lloriqueo, mirando a la IV insertada es su vena. Odiaba las agujas… y esa era una grande… se sentía como si fuera a desmayarse solo de verla!

Estaba en el cuarto pre-procedimiento, esperando por alguien que fuera a dormirlo.

Nunca había temblado y sudado tanto en su vida. Solía ponerse nervioso antes de un concierto, pero ahora eso parecía bastante fácil de manejar comparado con esto.

Estaba tan asustado; no podía evitar hacerse bolita sobre la camilla, esperando despertar de esa pesadilla lo más pronto posible…

 

De repente, la puerta se abrió y su madre entro, vestida con sus ropas de enfermera. Por primera vez en su vida, estaba feliz de verla con ese atuendo.

La mujer le sonrió y acaricio su cabello. “Estas listo?” Hablo con un inusualmente cariñoso tono.

 

Key sacudió su cabeza casi instantáneamente, su corazón latiendo rápidamente dentro de su caja torácica. “No…”

 

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“Sam! Samantha!” Taemin llamo, entrando a una familiar oficina, sus amigos siguiéndolo de cerca. Ella tenía que ayudarlos…!

 

Una enorme mujer de piel obscura salió de detrás del escritorio, levantando sus cejas sorprendida mientras sostenía unos documentos en sus manos. “Hey chico bonito, que estás haciendo aquí? Quien te dejo entrar?”

 

Taemin inclino su cabeza ligeramente como pidiendo perdón. “Lo siento. Por favor, puedes decirnos donde esta Key? Es realmente importante.” Dijo en inglés.

 

Samantha enarco una ceja, confundida. “’Llave’? Para que necesitas una llave?” *NT: Key=llave XD*

 

Taemin quería golpearse a sí mismo. Seguía olvidando que ellos no sabían del nombre artístico de Key…! “Kibum! Kim Kibum! Por favor, necesitamos saber… tienes que ayudarnos…! Ya está en cirugía?” pregunto, sintiendo a Jonghyun tensarse a su lado.

 

La mujer miro su reloj y sacudió su cabeza. “El doctor Jung salió hace quince minutos, así que Kibum debe de estar esperando en el segundo piso. Creo que empezaran ahora.” Murmuro y luego le dio a Taemin una mirada rara. “Pensé que estabas con él.”

 

“Muchas gracias!” El chico menor se inclinó de nuevo, ignorándola al tiempo que sus amigos abrían la puerta de la oficina, ya corriendo al elevador.

 

La enfermera jadeó. “Esperen! No pueden simplemente entrar ahí!”

 

Los chicos la ignoraron y entraron al elevador, Jonghyun golpeando el botón de subir. “Vamos… vamos…!”

 

La puerta se cerró y una anciana les dio una mirada rara, caminando a la orilla contraria, mirándolos con sospecha.

Minho suspiro y recargo su espalda contra la pared del elevador, Taemin lo miro, mordiéndose el labio. “Que si llegamos demasiado tarde…?” le susurro al más alto.

 

Minho le dio unas palmaditas al hombro de Taemin, sus ojos en la espalda de Jonghyun. Se inclinó hacia el mankae y susurro. “Solo apoyémoslo de la mejor forma que podamos, ok?”

 

Jonghyun golpeo su pie contra el suelo, impaciente. El  elevador hizo un fuerte sonido chirriante y las puertas se abrieron, los tres apresurándose a salir.

Ahí había tres corredores…! Tres largos corredores… eso no iba a ayudarlos para nada!

Minho maldijo quedamente, dando un pisotón. “A dónde ahora?”

 

Al no recibir respuesta, elro miro a su alrededor para no encontrar a ninguno de sus amigos con él. Miro a su derecha para ver a Taemin correr por un corredor, abriendo y cerrando puertas para ver dentro.

Se giró al otro lado solo para ver a Jonghyun haciendo lo mismo. Maldición, se iban a meter en problemas de esa forma…!

 

Aw al diablo. Pensó, corriendo al último corredor.

 

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Demasiadas puertas, demasiadas enfermeras, demasiados pacientes…!

No abría las puertas completamente, solo necesitaba asomarse dentro, sabía que no tenía ningún derecho de molestar a la gente, especialmente cuando el piso estaba lleno de mujeres embarazadas, algunas de ellas ya con sus hijos en sus brazos, descansando en silencio.

Oh dios… también él iba a tener bebes justo como esos pronto!

Se sentía como en un sueño, Un realmente bizarro sueño.

Esto era demasiado cansado, demasiado confuso para ser real. Pero seguía corriendo, solo escuchando su furioso latido e inestable respiración.

Nunca escucho los gritos de dos hombres enojados corriendo detrás de él.

Nunca vio a las enfermeras mirándolo raro mientras él corría a lo largo del corredor. Solo podía ver esas rojas, grandes letras sobre dos grandes puertas de metal… ‘Sección-C’.

Sus piernas se sentían como gelatina, tenía problemas para seguir corriendo, sentía como si su cuerpo por fin estuviera rindiéndose.

 

Entonces lo vio.

 

Saliendo del corredor enfrente de la puerta, vestida con un uniforme de hospital, estaba la madre de Key.

Dejo de correr; se detuvo para mirar lo que venía después, sintiendo al tiempo detenerse a su alrededor, solo moviéndose en cámara lenta.

 

Junto con otro doctor, la mujer que lo había dejado quedarse en su casa algunas veces en el pasado… estaba jalando una camilla blanca.

Alguien estaba tendido en ella…

Alguien con cabello rubio.

Alguien con labios en forma de corazón…

 

“K-K-…” balbuceo, ahogándose con el aire, sintiendo una gota de sudor caer por su barbilla.

 

El chico rubio que no había visto en tanto tiempo, que había desaparecido sin despedirse… la persona que amaba más… estaba ahí. Lo había encontrado…

 

“KEY!”

 

Grito el nombre, haciendo a todos girar su cabeza hacia él. Todo el mundo mirándolo, pero no quien él más quería. Key tenía sus ojos cerrados.

No… no podía estar dormido ya!!! Necesitaba decirle que estaba ahí!!! Que iba a estar a su lado…!

 

Estaba a punto de correr de nuevo cuando sintió unas manos fuertes en sus brazos, levantándolo.

Perplejo, los ojos de Jonghyun se abrieron y el tiempo pareció regresar a la normalidad, cada sonido siendo obvio para él ahora. La gente susurrando, señalándolo, la curiosidad en sus ojos.

 

Alzo la vista, horrorizado de ver a dos enormes hombres tomándolo de los brazos, vestidos en uniformes negros. Seguridad…?!

La madre de Key llego corriendo, seguida de otro doctor. “Jonghyun?!”

 

“Señora Kim…!” Balbuceo, repentinamente sintiéndose débil. Sus enojados, afilados ojos cayendo sobre él, haciéndolo bajar los ojos, evitando su mirada.

 

“Conoce a esta persona Señora?” El hombre a su derecha pregunto, apretando su brazo casi dolorosamente.

 

Los ojos obscuros de la mujer de pelo ondulado lo miraron molestos. “Si, lo conozco.” Dijo en un tono áspero, su mirada nunca dejándolo. Su inglés era casi fluido de no ser por el ligero acento Coreano. “No se preocupe; yo me encargo de él desde ahora. Me disculpo si ha estado causando molestias.”

 

Los dos guardias se miraron el uno al otro y liberaron al cantante.

“Nos dijeron que tres chicos entraron al área sin permiso. Los otros dos están con usted también?” El mismo guardia de seguridad pregunto cruzando los brazos.

 

“Tres?” La mamá de Key pregunto, sobando sus sienes, estresada.

 

Jonghyun agacho la mirada avergonzado. Ese era un mal momento para meterse en problemas… “Lee Taemin y Choi Minho…” Susurro.

 

Ella suspiro pesadamente. “Ya veo. Realmente lo lamento; son los amigos de mi hijo.”

 

“Aun así no tienen permitido correr.” El otro guardia le dio una mirada de desaprobación.

 

Jonghyun se sentía como un niño en ese momento, siendo regañado por los adultos. Estaba escuchando, pero sus ojos ya no estaban poniendo atención. Él seguía mirando a Key, tendido inconsciente en la camilla, un gran bulto donde se suponía que estaba su vientre plano.

Un realmente… realmente gran bulto…

Su corazón estaba golpeando su pecho como loco.

Sus hijos… sus bebes estaban ahí, atrapados dentro del vientre de Key…

Sus ojos estaban ardiendo pero no podía parpadear, no quería desperdiciar ningún momento de esa visión. Su Key… estaba tan cerca…

 

“Busquen a los otros chicos y llévenlos a la sala de espera. Tenemos que irnos ahora.” Dijo el otro doctor al lado de la Señora Kim, caminando de vuelta a la camilla, empujándola por la puerta de la Sección-C.

Jonghyun observo como Key desaparecía dentro de las grandes, aterradoras puertas. Necesitaba ir con él…

 

“Ve con ellos Jonghyun, sabrán cuando terminemos.” La voz de la madre de Key lo despertó a la realidad.

 

Miro a la mujer, horrorizado. Hablaba en serio?!

Irse? Esperar en otro cuarto?!

 

“No, por favor! Tengo que ver a Key!” Jonghyun rogo; sus ojos muy abiertos. Él era el padre!!! Tenía que permanecer con Key! Tenía que permanecer a su lado y estar ahí para él, quería ver a sus hijos venir al mundo…! Tenía ese derecho!

 

“No sé cómo te enteraste de la condición de Kibum, pero este no es el momento para platicar con él, esta anestesiado, no despertara en las siguientes horas. Va a tener una cirugía ahora, por favor vete.” Su voz cortaba el aire como una espada afilada.

 

Jonghyun sacudió violentamente la cabeza. “NO, no me iré! No puedo! Me necesita!”

 

La mujer lucia furiosa ahora. Dio un par de pasos en su dirección y lo señalo con el dedo. “Kim Jonghyun! Tú podrás ser mejor amigo de mi hijo pero no vas a ignorar mis órdenes cuando mi hijo está a punto de ser operado!” Medio grito, aun tratando de mantener baja su voz.

 

Jonghyun le dio a la mujer una mirada rara. Mejor amigo…?

Eso significaba que… Key nunca le dijo…

 

La enfermera miro a los ojos del chico caer al suelo, luciendo perdido, luciendo… como si él…

Los ojos de la mujer se abrieron. No… él no podía ser…

Él era el mejor amigo de su hijo… pero la mirada que mantenía en sus ojos… no era solo amistad.

Era este chico… la persona de la que Key no quería hablar? Con quien dijo había peleado? Su… novio…?

 

“Tú…” Ella susurro en una pequeña, temblorosa voz. “Eres tú…? Eres tú el… de Kibum…?”

 

Jonghyun la miro de vuelta, sus ojos brillando con lágrimas contenidas. “Si…”

 

La enfermera llevo su mano a su boca, impactada.

Esa era la razón por la que su hijo nunca le dijo quién era el padre de sus hijos. Sabía que ella iría directo con él si le decía.

 

Jonghyun sollozo, su labio temblando. Quería ser fuerte, pero no podía soportarlo más! “No puedo irme… ellos son… son mis hijos… por favor déjeme ir…!”

 

“Tú…” La enfermera retrocedió y sacudió su cabeza. “No tengo tiempo para esto. Empezaran sin mí. Esperaras en la sala de espera.” Dijo, dándose la vuelta.

 

El corazón de Jonghyun dio un vuelco y tomo el brazo de la mujer. “NO! Necesito estar con Kibum! No lo entiende…!”

 

Lo que vino después… nunca lo hubiera esperado.

La mujer de mediana edad se giró hacia él con ojos llorosos, su mirada ardiendo de rabia. Le pico el pecho con su dedo lo suficientemente fuerte para lastimarlo. “Tú no lo entiendes! La vida de mi hijo está en peligro! Y no voy a perderlo a él o a mis nietos por tu testarudez! Padre o no, tú esperaras con tus amigos ahí! No estoy bromeando Jonghyun!” Escupió, sus manos temblando.

 

Jonghyun sintió algo caer dentro de él, dejándolo entumido. “Peligro…?” Susurro en shock.

 

La mujer se dio la vuelta de nuevo, caminando con pasos largos a las puertas por las que Key había desaparecido. “Llévenlo a la sala de espera y manténgalo ahí.” Dijo en Ingles de nuevo.

 

El guardia de seguridad, que había estado viéndolos, sin entender una palabra, asintió y lo tomo del brazo.

 

“No, esperen…!”

 

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Los tres chicos estaban sentados en una pequeña sala de espera, Jonghyun sentado lejos de los otros, no quería que nadie lo molestara justo ahora, estaba demasiado devastado para hablar.

El lugar se sentía frio, se sentía sin vida. Había una televisión en la pared pero ningún sonido venia de ella, había una pequeña mesa en una esquina llena con revistas, una cafetera y una pequeña planta junto a la mesa.

El cuarto se sentía vacío, se sentía exactamente como Jonghyun se sentía dentro. Vacío, perdido, sin emociones.

Seguía mirando al piso, las palabras de la mujer resonando en su mente.

La vida de Key estaba en riesgo. Y Taemin lo sabía, le había estado explicando por los pasados quince minutos.

 

“Lo siento hyung… no quería preocuparte…” El mankae se disculpó por quinta vez. “Ya estabas muy nervioso…”

 

Jonghyun no podía soportarlo más. Se levantó pero no miro al menor; siguió vagando alrededor del cuarto, el pánico llenando sus sentidos. “Debiste decir algo!!! Esa no es excusa!”

 

“Lo siento…” El mankae susurro, bajando su cabeza. Minho le dio al rubio una mirada comprensiva y apretó su brazo.

 

Las manos de Jonghyun nunca dejaron su rostro. Estaba cansado de llorar, había estado llorando por tanto tiempo… y ahora esto. “Key puede morir… sabía que podía morir y aun así los conservo…”

 

Minho miro al suelo, mordiéndose el labio. “Sin duda es valiente… recorriendo todo el camino, sabiendo que esto podía pasar…”

 

“No estas ayudando Minho!” Taemin susurro enojado. Jonghyun estaba lentamente rompiéndose en pedazos frente a sus ojos; no necesitaba más motivación para romper en llanto otra vez. Dolía ver a su hyung así.

 

“Lo siento… es que estoy impactado…” Elro contesto en un susurro.

 

Taemin apretó sus labios en una fina línea, mirando a su mejor amigo desaprobatoriamente. “Mantén tus pensamientos dentro de tu cabeza! Él ya está muy nervioso!”

 

Jonghyun se giró hacia sus amigos y miro a Taemin con los ojos inyectados de sangre. “Y como están tan calmados? Key está ahí, siendo operado… y él puede-mierda…” Maldijo, lagrimas liberándose ellas mismas de sus ojos de nuevo. Ni siquiera podía pensarlo… Key no podía dejarlo…! No ahora! No nunca!

 

Minho se levantó y camino hacia el mayor, sobando su espalda. “Hyung, por favor… cálmate…”

 

Taemin bajo la vista, frunciendo el ceño. “Sé que no morirá. Hable con él antes. Dijo que iba a ser fuerte, dijo que iba a pelear.” Miro directamente a Jonghyun, enfrentándolo sin miedo. “Y yo confió en él. Sé que no fallara.”

 

Jonghyun dejo salir una risa sarcástica antes de ponerse serio de nuevo. “Solo es un humano Taemin! Esta inconsciente! No puede ‘pelear’ como tú lo llamas. Esa porquería solo es real en las películas.” Escupió, alejándose de Minho, sentándose de nuevo en el lado opuesto del cuarto. “Su vida en las manos de esos doctores!”

 

Permanecieron en silencio por un rato, la cara de Jonghyun hundida en sus manos de nuevo, sollozando quedamente. Minho  se quedó parado en silencio en medio del cuarto, sin saber qué hacer y Taemin..

 

“Él es Almigthy Key.” Dijo Taemin, rompiendo el silencio. “Él  nunca falla.”

 

Los dos chicos miraron al mankae, reflejando sus palabras. El chico estaba loco. Key seguía siendo un chico normal. No tenía súper poderes pero… ciertamente él es… El Almigthy Key. La persona que se veía frágil pero era el más fuerte de todos, el pilar de ellos cinco. El que se mantenía cuerdo en los tiempos más locos. Key… era fuerte.

 

“Tienes razón…” Minho sonrió.

 

Jonghyun sacudió su cabeza, “No, no lo está.”

 

Taemin frunció el ceño, molesto. “Porque eres tan negativo? No puedes confiar en Key por una vez?” Se sentía con ganas de sacudir al mayor por los hombros. Porque no podía ser un poco positivo al respecto?! Porque arruinar el ánimo?!

 

“Y-yo confió en él… Yo solo-“ Balbuceo Jonghyun, su cabeza sintiéndose demasiado pesada para las palabras.

 

Taemin le dio al cantante una mirada desesperada y lanzo sus brazos al aire. “Entonces piensa positivo! Piensa que en unas cuantas horas estarás a su lado, discutiendo quien cambiara el primer pañal!”

 

Elro le dio a Taemin una mirada rara, sonriendo mientras alzaba una ceja. “En serio…las cosas que recuerdas…”

 

Ring ding dong

Ring ding dong

Ring diggi ding diggi

 

Taemin les dio una mirada de disculpa y saco su teléfono de su chamarra. “Es Onew…”

 

Jonghyun inhalo profundo, ignorándolo.

Seguía mirando el reloj. Veinte minutos habían pasado ya…

Estaba a punto de decirle algo a Minho cuando la puerta se abrió. Sus ojos abriéndose, esperando a la mamá de Key pero…

 

Una familia entera entro a la sala, acomodándose en las otras sillas.

Suspirando, se levantó y dejo a un anciano sentarse en su asiento, caminando al lado de Minho. Taemin sequia hablando por teléfono y miro a un hombre muy nervioso quien decidió permanecer de pie, negándose a sentarse. Probablemente él era el padre.

La familia se veía radiante, feliz de recibir al nuevo miembro de la familia.

También había dos niños corriendo alrededor, jugando a las atrapadas alrededor de la pequeña mesa. Tendrían como cuatro y cinco años y su madre continuaba gritándoles para que se quedaran callados y tranquilos.

 

Jonghyun les sonrió a los niños que corrían. No se sentía en absoluto listo para ser padre pero… demonios… el puro pensamiento de tener bebes… dos bebes en sus brazos… derretía su corazón más rápido que un cubo de hielo en un horno.

Taemin tenía razón… estaba siendo negativo.

Esa familia lucia realmente feliz de estar ahí, de ver que él bebe estaba a punto de venir, y el también debería.

 

Key era fuerte; él no iba a dejar a sus hijos tan rápido. No, él iba a alimentarlos, a jugar con ellos, a regañarlos dos veces peor que como lo hacía con Taemin.

Sentía lágrimas en sus ojos de nuevo pero rápidamente las limpio. La madre de Key estaba ahí con él, ella nunca lo dejaría morir, cierto?

 

“Onew hyung tomara un vuelo pronto. Está en pánico porque le mintió al manager por primera vez.” Escucho decir a Taemin.

 

El mankae tenía razón… todo iba a estar bien…

 

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Una hora, veinticuatro minutos y catorce segundos.

Era… era eso normal?

La otra familia solo había tenido que esperar treinta minutos…! Ya se habían ido…!

Jonghyun había tratado de hablar con las enfermeras dos veces ya, preguntándoles si podían decirle que estaba pasando, si sabían algo, lo que sea! No sabían.

Su cuerpo estaba cansado, no había dormido mucho y seguía bebiendo café para mantenerse despierto. Tampoco había comido mucho así que su estómago también le estaba doliendo.

Donde estaban sus niños? Como estaba Key? Los bebes estaban bien? Estaban sanos? Porque se estaban tardando tanto?! Había pasado algo?

Estaba temblando; no podía evitarlo…

 

El sonido de la puerta abriéndose asusto a los tres chicos, quienes alzaron sus cabezas, esperando a una enfermera. No había ninguna enfermera, ahí había un hombre, un hombre muy familiar. Jonghyun se levantó automáticamente, haciendo una reverencia. “Señor Kim…”

 

El padre de Key era un hombre alto; usaba lentes y estaba vestido con un traje caro. Por alguna razón, Jonghyun siempre le había temido a ese hombre. No se veía para nada amistoso y su expresión seria no ayudaba. Key decía que era una persona agradable pero eso parecía algo difícil de creer…

 

“Donde está mi hijo?” El hombre pregunto enseguida, sin siquiera molestarse en saludarlos. Eso era algo que Key había heredado de él, siempre iba directo al punto.

 

“Sigue ahí dentro señor.” Jonghyun respondió enseguida, sus manos sudando.

 

El hombre sintió, su rostro volviéndose aún más serio. “Y mi esposa?”

 

“Estoy aquí.” Una voz femenina vino de la puerta.

 

Taemin y Minho se levantaron inmediatamente, corriendo al lado de Jonghyun.

El vocalista principal sintió a su corazón latir rápidamente contra su pecho, el pánico tomando lo mejor de él. “Como esta Key?” Jonghyun pregunto, sus ojos abiertos de preocupación. “Y los bebes…?”

 

La mujer lucia cansada. Sus ojos estaban rojos como si hubiera estado llorando y su cabello estaba un poco desordenado.

Jonghyun se sintió entumecido por un momento, sintiendo a su calor corporal descender, un horrible pensamiento cruzando por su mente. Sin embargo, ella sonrió débilmente. “Los bebes están sanos, son perfectos.” Dijo con una pequeña voz, su sonrisa creciendo lentamente. “Son hermosos…”

 

El corazón de Jonghyun regreso a la vida y él no pudo evitar sonreír de felicidad, Minho le daba palmaditas en la espalda mientras Taemin susurraba ‘Felicidades hyung’ en su oído.

Su hijo e hija estaban ya en este mundo…! El cantante quería reír, sintiendo su cabeza mucho más ligera que antes. Era papá…! Era un jodido papá!

 

“Y Kibum?” El hombre adulto pregunto, sin cambiar la expresión. Como podía ser tan frio? Su esposa acaba de decirles que sus nietos eran perfectos!

 

La enfermera se lamio los labios e inhalo profundo. “Él esta… inconsciente.”

 

La sonrisa de Jonghyun desapareció. Que…?

El hombre frunció el ceño, cruzando sus brazos contra su pecho. “Inconsciente?”

 

La mujer de pelo ondulado, le dio a su esposo una pequeña sonrisa. “Está a salvo… no fue fácil… pero lo logramos.”

 

“Que paso?” Ambos, Taemin y Jonghyun, preguntaron al mismo tiempo.

 

La mujer ahogo un sollozo, sus ojos brillando peligrosamente cerca de las lágrimas. “Hubo complicaciones. Empezó a perder sangre, por minutos pensamos que no éramos lo suficientemente rápidos… pero sus signos vitales comenzaron a normalizarse gradualmente.” Explico, agachando la mirada.

 

El cuerpo de Jonghyun se congelo por las palabras.

El labio de la mujer comenzó a temblar y finalmente dejo a sus lágrimas escapar, abrazando a su marido. “Estaba tan asustada…!” Lloro.

 

Por primera vez, Jonghyun vio al hombre de apariencia fría sonreír, acariciando el cabello de su esposa. “Lo hiciste bien Ji-yeon. Estoy orgulloso.”

 

“Él está… está bien entonces…?” Jonghyun se sintió estúpido de preguntarlo. Sabía que Key estaba a salvo ahora pero… necesitaba estar seguro. Estaba asustado, no podía siquiera pensar en vivir su vida sin ese regañón, arrogante chico a su lado…

 

La mujer no se movió del abrazo protector de su esposo, solo sonrió, asintiendo. “Él está descansando. Necesita dormir y mejor que duerma mucho. Kibum tiene poca tolerancia al dolor y esa cortada no le dará nada más que dolor hasta que cicatrice.”

 

Kibum estaba bien. Él estaba bien, sus bebes estaban bien también.

Taemin había estado en lo correcto todo el tiempo. Key era un luchador. No murió y le dio perfectos, saludables hijos… “Mis bebes… dónde están? Puedo verlos?” Balbuceo, sintiendo una tormenta de emociones desatarse dentro de él.

 

El padre de Key frunció el ceño y se giró hacia Jonghyun, mirándolo sospechosamente. “Tus bebes?” Pregunto, su voz saliendo en un frio, peligroso tono.

 

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Este es el papá de Key: