Capítuo 29
I've been there.Capítulo 29
El sonido entró lentamente a sus oídos, primero alterno; pequeñas voces que subieron de volumen hasta obtener contenido, pasos, personas, máquinas pitando, videos en celulares…
Al principio Junmyeon no supo dónde estaba, abrió los ojos y una capa de cansancio y lagañas le impidieron enfocar, sabía que todo era blanco y sin mucha gente, había una cortina frente a él y estaba vestido de negro.
Alguien estaba sentado a su lado, por el contorno supo que era Minseok, miraba su celular apáticamente, nada de interés en twitter….
-Minseok….- dijo, más claro de lo esperado.-
Su hermano levantó la vista y se acercó a él arrastrando la silla. Lo miraba con calma, esta no concordaba con lo que Junmyeon tenía en el pecho, algo no estaba bien, pero no podía señalar que era.- Al fin despiertas. ¿Cómo te sientes?-
Junmyeon sintió ajena su pregunta, frunció el ceño y Minseok se rio de él.- ¿Sigues desorientado?? Llamaré al doctor, espera…-
Encima de su cabeza había un botón rojo y Minseok lo presionó.- Estuviste inconsciente casi un día. Madre vendrá en unos minutos….-
Apenas terminó la oración y recorrieron la cortina, un alfa de mediana edad, cabello castaño como la cáscara de una nuez y la tez tersa, ligeramente apiñonada entró si dilaciones.- ¿Luhan?....-
El enfermero sacó una pluma del bolsillo de su bata y le dedicó una sonrisa apenada a Junmyeon.- Si, ese es mi nombre.- mostró la plaquita en su pecho, Luhan en hangul, Junmyeon no la había visto.- ¿Lleva mucho que despertó?.-
-Apenas unos minutos… Creo que tiene una contusión.-
-Sus tomografías no mostraron daño a largo o corto plazo, pero es posible que tenga una contusión muy pequeña, es cierto.- sacó una lámpara de su bolsillo y dirigió la luz a las pupilas de Junmyeon, estas se dilataron y contrajeron como debían. Acto seguido puso una lengüeta en su boca y abrió tanto como el aún aturdido Junmyeon le permitió para ver su garganta y encías.- Todo luce bien, traeré al doctor y podrá firmarles para que salgan.-
-Luhan…- Luhan, Luhan, Luhan….. Junmyeon tenía que hablar con el…. – Luhan ¿Qué pasa?...- el…. iba a decirle…. Podría darle….información….información de….-
El enfermero no mostró inquietud, estaba acostumbrado a que los pacientes le preguntaran todo tipo de cosas.- Tuviste un accidente en un estacionamiento, te encontraron hace unas horas, estabas inconsciente encima de tu tablero.-
¿Accidente?... ¿Restaurante? ¿De qué estaba hablando?
-¡No…. Yo estaba conduciendo….!- ¿A dónde conducía? ¿Qué estaba haciendo? Estaba más que desesperado. No podía recordar, todo parecía ser lo que no debía ser, algo estaba mal, algo no cuadraba…. Miró a Minseok y Luhan y quiso decir algo, pero su pensamiento se detuvo y comenzó a difuminarse, dejando a Junmyeon con un montón de aire en el pecho incapaz de salir.- Estaba conduciendo…-
-Está bien, Junmyeon…. – Minseok puso una mano en su pierna, Junmyeon sintió el toque de ánimos ajeno, pero Minseok siempre había sido parco, no entendía porque ahora le sorprendía.- te llevaré a casa para que descanses.-
Junmyeon asintió, no sabía que más hacer. Luhan aprovechó para salir, luego de dedicarle una sonrisa apenada a los omegas.
-Algo no está bien…- repitió el omega en voz baja, inconscientemente llevó una mano a su estómago y tocó la piel impoluta y los abdominales definidos…. Alejó la mano rápidamente….- No está bien.-
-¿Junmyeon?....- la cortina se abrió por segunda vez y una mujer elegante de cabello largo y negro entró al pequeño cubículo del omega. Aquella nueva figura olía fieramente a alfa y apenas miró a Junmyeon se quitó las gafas de sol, dos perfectos ojos avellana lo enfocaron junto con el juvenil rostro de su madre.- ¿Junmyeon, que paso? ¿Cómo ocurrió el accidente?...-
-Sigue confundido, madre. Dijo el enfermero que todo está bien, pero necesitan al doctor para que firme la salida.- dijo Minseok, para que Madre no se cansara intentando sacarle respuestas a Junmyeon.- Iré a pagar y ver si encuentro a un doctor. El único que nos atiende es el enfermero….- sonrió de lado a Madre y ella respondió la sonrisa, un poco de burla, un poco de alegría, Junmyeon seguía sin saber que estaba pasando y de dónde venía toda esa incomodidad.
Intentó tocarse la frente, algo le producía comezón, en lugar de piel encontró una gasa con una pequeña costra en el centro, con una diminuta aspirada supo que era sangre.
-¿Qué paso?....- ¿Por qué todos estaban tan tranquilos??....-
-¿No recuerdas?.- Madre se sentó junto a él, en la silla que Minseok desocupó.- No se los detalles, pero te encontraron en el estacionamiento del restaurante….- hizo una pequeña pausa para poner en orden la información que le dio el hospital y los paramédicos.- Dijeron que no habías dejado tu carro en neutral y al pisar el clutch entró directamente a tercera, avanzaste unos 2 metros a toda velocidad al frente, la pared estaba a 1 metro….-
Básicamente había despedazado su carro y casi se rompe el cuello por un error que era “imposible” de cometer. Junmyeon se sentó, aunque la cabeza comenzó a punzarle dolorosamente, necesitaba hacer memoria.
Recordaba estar en su carro y esas estúpidas fotos de prospectos que su madre le dio.
Después de eso….
Parpadeó varias veces esforzándose por recordar, aunque nada vino, solo una oscuridad sinceramente aterradora porque Junmyeon jamás había tenido un momento en su vida, por pequeño que fuera, donde olvidara lo sucedido, apenas fueron unas horas, pero Junmyeon sentía algo similar al miedo.
Madre puso una mano en su hombro, igual que Minseok, para proveerle confort. Junmyeon obtuvo todo lo contrario, frio y confusión llenaron su cuerpo, igualmente lo relajaron, algo más allá de lo extraño, pero Junmyeon…. el estaba acostumbrado.
Miró sus manos y luego a Madre a la cara, buscando en su piel libre de marcas algo capaz de explicarle porque se sentía así. Obviamente no encontró nada….
-¿Puedes levantarte??- preguntó Madre, solo necesitó una rápida revisada para reformular.- espera a que venga el doctor, el nos dirá si ya te puedes ir.-
Minseok regresó en ese momento, tenía un papel en la mano, Junmyeon supuso que se trataba de una receta.- Solo estaba el enfermero….- Metió el papel en el bolsillo de su pantalón y se pasó las manos por la tela, antes de tomar aire y exhalar ruidosamente.- uno no puede encontrar verdaderos especialistas en este lugar…-
Junmyeon frunció el ceño más de lo que debía.
Madre y Minseok lo ayudaron a levantarse y caminar un poco antes que el doctor llegara en compañía del enfermero, no lo tocó ni revisó, le dio unas vagas indicaciones de que se mantuviera en cama y no hiciera mucho esfuerzo. Luego se fue, recordándole de sus regalías y que preferentemente pagaran en su oficina para evitar impuestos adjuntos al pagar por medio del hospital.
Minseok se encargó de eso mientras Madre y Junmyeon fueron al estacionamiento, ella lo llevó a su auto, le compró una bebida fría y Junmyeon la puso en su cabeza para reducir las punzadas.
Lo llevaron a su casa. Junmyeon miró por la ventana mientras Madre y Minseok hablaban de su accidente, parte alivio, parte risas por lograr golpearse la cabeza en un metro de distancia. Junmyeon los escuchaba a medias como voces lejanas, su cuerpo estaba pesado y ajeno, el lobo estaba ahí, pero igual que Junmyeon no parecía “activo”, sino un peso muerto en medio de su pecho.
El sol se erigía en el tramo más alto, le pegó en la cara y quemó sus piernas….
Junmyeon no prestó atención, se quedó escuchando el sonido del motor.
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Se levantó temprano dos días después, sin saber que más hacer que seguir con su rutina, aun sentía como si viera una película en lugar de vivir su vida común y corriente, pero ya no tenía dolor de cabeza y Minseok había cambiado sus mensajes de “¿Cómo te sientes?” a “Hay un problema en las bodegas, ¿Cuándo crees pasar a revisarlo?”, eso decía que se estaba pasando del tiempo para estar en cama.
Comenzó su día normalmente, pero se miró en el espejo más tiempo del acostumbrado, con el cabello en la cara y agua resbalando por su espalda, el lobo estaba en silencio y por primera vez Junmyeon no sintió el dolor inicial de la depresión de un lobo sin manada.
Pudo alegrarse, pero sus temores de que algo no estaba bien aumentaron.
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-Jefe, ¡Buenos días!.-
Lo primero que vio cuando abrió la puerta fue a Baekhyun, con una taza y la cafetera en las manos y una sonrisa de oreja a oreja, cuadrada y bonita, como Junmyeon la recordaba. Solo verlo le trajo una corta sensación de paz.
-¿Estamos de buen humor? ¿Cómo se siente?? Dijo nuestro CEO que había sido un golpe feo….. y gracioso.-
Junmyeon puso su maletín en el escritorio sin dejar de sonreír, Baekhyun tenía esa manera de hablar temas serios con la menor seriedad.- Si, bueno, no conocía mi carro tan bien como creía…- lo miró de arriba a bajo.- ¿No te dije que la corbata es obligatoria?....-
Baekhyun hizo un puchero y dejó el café de Junmyeon en su escritorio.- Soy anti regulaciones, jefe…-
-Toma.- sacó una corbata de su escritorio, la primera que tocó, y la lanzó a Baekhyun.
El alfa la miró como si fuera un pedazo de carne echada a perder ¿De verdad?? ¿corbata roja con su increíble camisa rosa???.... Debía ser un chiste.
- ¡Póntela!.-
Baekhyun la apretó en su puño, solo para demostrarle su odio, pero tuvo que ponérsela. Cuando la amarró se encaminó a la salida, antes de cerrar la puerta miró atrás.
-Jefe, ¿Hoy…podría irme un poco antes?.- preguntó Baekhyun, Junmyeon lo miró un instante y asintió.- ¿De verdad?? ¿No hay problema?
Junmyeon negó.- no….- ¿Por qué habría algún problema?- Termina el trabajo de hoy y podrás irte.-
Baekhyun le mantuvo la cara confusa hasta que cerró la puerta (muy lentamente) con un silencioso click.
Junmyeon no le tomó más importancia, sacó una pluma y se sentó en su escritorio, movió la taza con café y empezó a revisar los documentos que tenía para el día.
Cinco minutos después entendió que no tenía la capacidad para prestarle atención a los papeles, o a su alrededor, o a nada en específico, giró su silla para encarar el hermoso paisaje de edificios y automóviles alrededor de la ciudad, y por largas horas miró afuera.
Sintiendo una profunda e innegable tristeza, la de alguien que se enfrenta al cambio indeseado y violento. Había perdido algo, era importante para cambiar su enfoque, pero tan nimio que no podía recordarlo. Junmyeon pasó de la meditación a la ira consigo mismo. Si era tan importante ¿Por qué no podía verlo??....
Se quitó el saco y la corbata, ahora apretaban, hacía calor y la idea de estar ahí otro instante era torturante. Tomó las llaves de su auto, la cartera y el celular y salió del edificio, sin decirle nada a Baekhyun, el alfa lo miró irse (con la boca llena de su almuerzo) sin mirar atrás y sin dejar ninguna explicación.
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Junmyeon comenzó a vagar por las calles para hacer tiempo y no llegar a las bodegas, quería y no quería ver a su hermano. Normalmente no le acarreaba ninguna emoción positiva (tampoco negativa), lo veía básicamente todos los días y no intercambiaban muchas palabras, a veces comían juntos, era casi en total silencio además de las preguntas aquí y allá de si verían a Madre o si Junmyeon estaba listo para dar el siguiente paso con algún alfa que Madre escogería…
Después de dos horas se le terminaron las calles y tuvo que ir a la primera bodega. Minseok estaba en la entrada, ya con su casco y chaleco de seguridad puesto, hablaba con el encargado de refrigeradores y por su gesto; todo estaba en su lugar. Junmyeon iba para llenar algunas formalidades legales, pero ya lo sabía; siempre era así.
Estacionó y se bajó del auto, sin pensar en su vestimenta hasta que Minseok lo miró y levantó las cejas, se quitó las gafas para leer y las guardó en su bolsillo.
-Junmyeon…. ¿Seguro que quieres entrar así?....- Hacía mucho frio…. Era un refrigerador….-
Junmyeon tomó la tabla con documentos para firmar e hizo un gesto con la mano para quitarle importancia al asunto.- ¿Importa si entro? Solo vine a firmar…-
Minseok no hizo ningún gesto, aceptó la tabla de regresó y la puso bajo su brazo, el encargado regresó a la bodega y los hermanos se quedaron a solas.
-¿Qué vas a hacer ahora?.-
Junmyeon levantó los hombros.- Ir a casa.-
Y así, se quedaron sin temas de conversación. Minseok leyó la tabla y Junmyeon se ahogó en miles de repentinas preguntas que quería hacerle, pero sin la capacidad para decirlas. Abrió la boca… tal vez podía ¿Preguntar cómo estaba Kris?.... terminó sin decir una palabra y eventualmente se dio la vuelta para meterse a su carro e irse, sin haberse despedido de su hermano.
Minseok lo vio hasta que se perdió de vista en la siguiente calle.
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No se si alguien escucha las canciones que pongo pero esta vez se las recomiendo mucho, salió al principio de la pelicula Valerian, esa en la que participó Kris. Es de mis escenas favoritas de toda la película (excluyendo las partes de Kris XD )
Gracias por leer y por sus comentarios, se que esta historia es bastante larga y también se que hay muchas partes que no tienen sentido o que simplemente no alcanzan las expectativas, sin embargo les agradezco que estén aquí aún despues de tantos meses. Poco a poco nos acercamos al final. <3
Y como siempre, temed a la carita sonriente.
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