Decir Adiós

El Bello y La Bestia

A/N: penúltimo capítulo listo!!!... Gracias a todas las personas que siguen leyendo este fic y en especial a las que dejan sus comentarios en esta página y mi cuenta de FB; no saben cómo me animan a seguir escribiendo!.

 

El frío.

Que intenso podía hacerse el frío a esa hora de la mañana en un día otoñal.

El viento congelaba su frágil cuerpo, pero nada se sentía más frío que los pensamientos que lo abordaban en ese instante.

HyeSung observaba atentamente el vaivén de personas que paseaban desde la reja principal a entradas de la mansión hasta las puertas que daban con el interior de la casa, desapareciendo tras de ellas llevando los arreglos florales, mesas, vajilla y otros ornamentos para decorar el salón principal.

Nunca en su vida pensó que un cumpleaños podía sentirse así de desolado. La melancolía y el miedo estaban tomando posesión de sus emociones.

Solo una semana más y le diría adiós al apellido Mun.

O quizás no?

Desde aquel incidente en el yate, HyeSung y Eric se habían vuelto de cierto modo cercanos y distantes a la vez. Eric parecía estar más pendiente que nunca de su joven esposo, pero siempre había un silencio que llenaba sus espacios, llamándolos a pensar en las posibles consecuencias de su unión.

HyeSung tenía las ansiadas palabras estancadas en su garganta, temeroso de dejarlas salir y quizás arriesgar más de lo que se había imaginado.

Pese a sentir el amor latente en él, HyeSung no podía dejar de pensar en las palabras de Park Siyeon. No podía dejar de pensar en la posibilidad de ser señalado junto con su aún esposo Eric Mun.

HyeSung sabía que ese amor no era normal.

-por que no entras?... te vas a resfriar si sigues acá afuera – la voz profunda del hombre en la puerta del balcón, atrajo la atención de HyeSung

-cuántos más van a seguir llegando? – interrogó HyeSung con voz serena y pausada

-lo lamento… cuando me enteré mi madre ya había enviado las invitaciones – se disculpó Eric, tomando asiento en una de las esquinas del cómodo mueble ubicado en el balcón de la habitación de su joven esposo

-es como si fuera una fiesta de despedida… - mencionó HyeSung, bajando la mirada hasta la bota de yeso en su pierna izquierda Eric sintió algo dentro de él presionar con fuerza contra su pecho.

-es tu fiesta de cumpleaños… deberías estar contento… - las palabras de Eric eran breves y melancólicas.

Ambos esposos sabían que el tiempo se acortaba.

 

-te ayudo con eso? – Junjin tomó la bandeja de comida de manos de su novio, ayudándolo a colocarla sobre la mesa de la cocina

-hoy hay más trabajo de lo acostumbrado – habló Andy, pasando una mano por su cabello Junjin observó al menor, sonriendo tontamente mientras se aproximaba hacia él, hasta robar un beso de sus labios.

-gracias… - susurró Junjin, apartando su rostro del ama de llaves

-por qué? – respondió Andy con las mejillas adorablemente coloradas

-por aceptarme de regreso en tu vida – una vez más, Junjin cerró la distancia entre sus rostros.

*Flashback*

En medio de su discusión con Eric Mun, los ojos de Junjin se abrieron ampliamente al ver a su ex novio siendo lanzado de la proa del yate. Sin perder un segundo, Junjin corrió en auxilio de Andy, lanzándose al agua sin parpadear.

-Andy! Andy cielo voy por ti! – exclamó Junjin dentro de las frías aguas

-J-Jinnie! – exclamó Andy… luchando por mantenerse sobre la superficie

Junjin nadó unos metros, hasta alcanzar a su ex novio y llevarlo con seguridad hasta las escaleras que se habían desprendido para el rescate de los dos menores que cayeron al agua sin que nadie pudiera advertirlo.

-cielo, cielo reacciona! Cielo dime algo por favor! – sacudía Junjin gentilmente al pequeño muchacho en sus brazos.

Unos segundos más y finalmente el ama de llaves abrió los ojos, encontrándose con la mirada concerniente de su ex novio.

Junjin.

Junjin estaba a su lado, había arriesgado su propia vida para salvarlo. Para salvarlo a él.

A Andy.

Del otro lado del yate, Andy podía observar a HyeSung yaciendo en brazos de Minwoo, rodeado de todo el tumulto de gente que corrían de un lado a otro, asustados por el estado del menor. Andy sabía que en quien menos se preocuparían sería él, después de todo HyeSung era el esposo de Eric Mun, presidente de una de las empresas más importantes del país mientras que él era solo un ama de llaves. Un ama de llaves sin importancia para nadie.

Excepto él.

Junjin.

Junjin estaba ahora a su lado, preocupándose solo por él. Lo había elegido a él antes que a cualquier otra persona.

-ahh!! – oyó el ama de llaves la exclamación de dolor de HyeSung que estaba siendo levantado en brazos por su esposo.

Por instinto Andy levantó la mirada a su ex novio, quien seguía abrazándolo de manera protectora.

-hasta que ese idiota se dio cuenta – susurró Junjin, dando una fugaz mirada a la pareja que desaparecía hacia el interior del yate.

-cielo tenemos que llevarte adentro, hay que cambiarte esas ropas húmedas – Junjin rápidamente cambió la dirección de su mirada, observando a su novio con evidente preocupación.

Andy solo podía mirar y adorar ese momento.

Finalmente su corazón le decía que diga adiós a sus inseguridades.

-cielo ocurre algo?... por qué estás sonriendo? – se dirigió Junjin al menor con mirada concerniente Andy ni siquiera había advertido de la enorme sonrisa que se había formando en su rostro.

-me elegiste a mí… finalmente me elegiste a mí – logró articular el menor, entre pequeñas lágrimas que escapaban por sus ojos

-claro que siempre te voy a elegir a ti!... cielo TU eres mi vida! – exclamó Junjin, abrazando con fuerza al ama de llaves.

Andy pudo sentir esa calidez que no había sentido en un año. Pudo sentir el amor nuevamente florecer dentro de él.

*Fin del Flashback*

 

El terrible e incómodo silencio que no quiere partir.

HyeSung y Eric continuaban sin decir nada, observando desde el balcón el ir y venir de los empleados. Había mucho por decir, pero poco valor para soltarlo.

-HyeSung… - se atrevió a hablar Eric primero

-sé que no es el momento para decirlo, ni el lugar… pero tengo que hacerlo antes que me arrepienta de por vida… - Eric estiró su mano lo suficiente para tomar la mano del menor con la suya.

El corazón de HyeSung se aceleró en anticipación.

-Hyes…

-aquí estás!!... te he estado buscando por toda la casa!! – la voz demasiada animada de Grace Mun sorprendió a la pareja, obligándolos a soltar sus manos.

-madre qué haces aquí – espetó Eric contra la madura mujer

-vine a traer el traje para el chico, es una noche especial y no debe vestir cualquier cosa – respondió Grace Mun

-se llama HyeSung madre, y es mi esposo – agregó Eric con mirada severa a su madre

Grace Mun regresó una mirada de sospecha a su hijo.

-bien, no perdamos tiempo, los invitados llegaran en cualquier momento, Eric querido ve a arreglarte a tu habitación – ordenó Grace Mun, obligando a Eric a dejar a su joven esposo en sus manos.

Hyesung sintió la urgencia de rogar y suplicar por que no lo dejaran solo con la intimidante mujer. Desde que conoció a los Mun, HyeSung solo había estado a solas con Grace Mun una vez, durante su visita en Boston. Y los recuerdos no eran agradables.

-bien niño, vamos a cambiarte esa ropa – sonrió Grace Mun de manera altanera, señalando a HyeSung el camino al interior de la habitación

Aún rogando silenciosamente por que lo dejaran solo en su habitación, HyeSung se dirigió hacia el interior, apoyado en un par de muletas, encontrando el elegante y finísimo traje negro sobre la cama.

Una hora pasó para que HyeSung esté completamente listo para atender su fiesta de cumpleaños N° 21, organizada secretamente por Grace Mun, madre de Eric, y de la cual ninguno de los esposos había tenido conocimiento hasta hace exactamente 24 horas, cuando la Sra. Mun ingresó a las oficinas de su hijo, entregando la invitación que ya había sido repartida a todos sus amigos de sociedad.

-perfecto!... – aplaudió Grace Mun brevemente, dando una mirada al muchacho de pies a cabeza.

HyeSung bajó la mirada, intimidado por la intensa mirada de a Sra. Mun.

-la fiesta de hoy tiene que salir muy bien, he invitado a muchos de nuestros amigos que vendrán con sus hijas… espero que no desperdicies la oportunidad, sería una lástima dejar de verte cuando anulen ese matrimonio – habló Grace Mun, acercándose a Hyesung para terminar de acomodar su corbata

-a-anular? – articuló HyeSung con dificultad, sorprendiéndose por la noticia.

En algún punto de los últimos días, HyeSung creyó que el matrimonio seguiría su curso.

Ahora sabía que estaba equivocado.

 

-has pensado qué vas hacer el resto de la noche? – la voz firme y gruesa de Park Junjin, levantó a un sorprendido Eric Mun de la silla donde se encontraba sentado en el interior de su despacho.

-qué haces acá? – espetó Eric con molestia

-Andy es mi novio lo olvidaste?... y además hoy vence nuestro plazo… - respondió Junjin, congelando las reacciones del Presidente de Systematic Company

Eric nunca pensó que la presencia de Junjin le fuera tan molesta en una noche.

-aún me quedan unas horas – se defendió Eric con voz baja

-de las cuales no has aprovechado nada… dónde está HyeSung?... no deberías estar con él haciendo tu último esfuerzo? – habló Junjin con voz severa

-está con mi madre… aún faltan 6 horas para que venza el plazo… no me daré por vencido – estableció Eric con firmeza. Había algo en Junjin que empujaba a Eric a ir más allá de sus propios límites.

-tengo los papeles en el auto… si hasta que el reloj marque las doce HyeSung no te ha dicho que te ama… mañana mismo saldrá en el primer vuelo a Boston… - las palabras de Junjin cayeron como un rayo dentro de Eric.

 

-no pensarás que de verdad podrán continuar con ese matrimonio cierto?... todo esto no fue más que una estrategia para conseguir la herencia… - habló Grace Mun en tono serio

HyeSung podía sentir sus piernas debilitarse.

Los últimos días parecían haber vuelto a la normalidad, Siyeon dejó de ir a la mansión, Eric se preocupaba por él como de costumbre pero con un cierto aire de melancolía en cada palabra que le dirigía. HyeSung no estaba seguro qué pensar de su actual relación con Eric Mun, pero lo que si sabía es que no quería regresar a casa.

Su casa ahora era esa mansión que lo albergaba.

-Eric ssi me dijo que cont…

-no oigas lo que te dice mi hijo… estoy muy agradecida por lo que has hecho por él, hiciste que retomara ese lado humano que había perdido y que la gente dejara de verlo como una especie de bestia, pero tu trabajo ya acabó… puedes elegir tranquilamente entre cualquiera de las muchachas que vendrán hoy a la fiesta… al igual que Eric… él debe continuar con su vida – habló Grace Mun una vez más con tono suave y hechizante.

HyeSung se sintió perderse por un segundo en esas palabras.

-nosotros no queremos…

-es lo mejor para los dos… la gente de esta sociedad es muy cerrada e hipócrita… lo mejor es que se separen y cada uno haga su vida aparte… - continuaba Grace Mun, golpeando cada partícula del frágil corazón del bello HyeSung…

-esa es una decisión que debemos tomar ambos… - respondió HyeSung con firmeza

-y como el joven sensato y correcto que eres… sé que tomarás la decisión correcta – estableció Grace Mun con tono firme y decidido, saliendo de la habitación, dejando a un Hyesung desfalleciente.

Era cierto acaso?.

Ni Eric ni HyeSung habían medido las consecuencias de su posible unión?.

 

7 P.M.

Eric y HyeSung saludaban amablemente a los invitados que empezaban a llegar a la lujosa mansión. Casi la mitad de los invitados eran caras que ninguno de los esposos habían visto en sus vidas. Algunas jovencitas se acercaban a saludar muy coquetamente al joven agasajado, bajo la mirada mortal de su esposo al lado, que no veía el momento para estar a solas con su joven esposo. Otras muchachas dirigían la mirada a Eric Mun, como si estuvieran desnudándolo con los ojos, en algún momento HyeSung encontró este comportamiento extremadamente desagradable.

Finalmente luego de casi una hora, los invitados dejaron de llegar, dando inicio de manera oficial a la fiesta de cumpleaños.

-hey mi niño!! – corrió Minwoo a abrazar a HyeSung, quien no demoró en devolver el abrazo con la misma efusividad.

-ehm! – se quejó el apuesto Dr. Kim, a espaldas de la pareja

-Dongwan! – saludó HyeSung, aprisionando al pequeño Dr. Kim entre sus brazos.

Desde el incidente en el yate, HyeSung no había vuelto a ver a la pareja, ya que Eric insistió en ser él quien cuide exclusivamente de HyeSung mientras lleve esa bota de yeso en la pierna izquierda.

-creí que serían unos cuantos invitados pero tu madre invitó a medio mundo! – exclamó Minwoo, dando una mirada periférica a todo el salón atiborrado de gente

-no lo pedí que lo hiciera… no sé por qué insistió – se defendió Eric, tomando la mano de su esposo entre las suyas

-esto más parece una fiesta para buscar novia… has visto la cantidad de chiquillas que hay? – observó Dongwan, señalando discretamente con la mirada al grupo de jovencitas que dirigían sonrisas coquetas y miradas tímidas en dirección de los dos esposos.

HyeSung entendió entonces el verdadero propósito de la inesperada fiesta.

Grace Mun quería asegurarse que ambos esposos hicieran sus vidas lejos el uno del otro.

Sería esto posible?

 

8:30 P.M.

En un rincón del salón, observando de reojo a las miles de personas que iban y venían, bebiendo copas del finísimo champagne y probando los deliciosos manjares del exquisito y variado buffet; dos hombres se escondían entre las cortinas, las labios entrelazados contra los del otro y las manos tentando juguetonamente cada parte de sus cuerpos.

-de veras vas a hacerlo? – rompió Andy la armonía de sus labios contra los de su novio

-un trato es un trato cielo – respondió Junjin, fallando en volver a tomar los labios del menor

-ellos se aman… y HyeSung ya es lo suficientemente mayor para tomar sus propias decisiones – argumentó Andy contra el mayor

-HyeSung es aún un niño que no sabe lo que quiere… está descubriendo muchas cosas a las que aún le tiene miedo…

-le tiene miedo a enamorarse?... pero si ustedes…

-eso fue solo una simple atracción, algo de simpatía que confundimos con amor… ahora creo que lo que siente es más fuerte, pero no es capaz de afrontarlo

-lo sabes?... sabes que HyeSung está enamorado de Eric Mun?... – la expresión de sorpresa en los ojos de Andy era invaluable.

-lo supe desde aquel viaje al centro de esquí… - confesó Junjin, bajando la mirada

Andy dirigió una mirada interrogativa a su novio, no sabiendo qué pensar sobre aquella confesión.

-entonces por qué insististe con el divorcio?... por qué los quieres separar?... – interrogó el ama de llaves, sin poder evitarlo Junjin alzó la mirada, encontrando a la pareja a pocos metros de distancia de él y su novio.

-por que quiero saber que tanto está dispuesto a arriesgarse Eric Mun…

-qué quieres decir?

-sólo quería asegurarme que Eric Mun estaba siendo sincero…

-y ahora?...

-ahora creo que lo mejor es que se separen y se den un tiempo para analizar mejor las cosas…

 

9:00 P.M.

De pie a un lado de la mesa del exquisito buffet, HyeSung observaba con ojos tristes como su esposo iniciaba un nuevo baile con una de las hijas de sus más importantes clientes. La mujer que acompañaba a Eric, era una mujer muy hermosa a la que HyeSung podía considerar como la pareja perfecta para estar al lado de su esposo.

Oh sí, HyeSung lo había notado. Había notado como los invitados también observaban a la pareja en la pista de baile, con ojos de admiración. Sin duda alguna todos coordinarían en pensar que aquella mujer, sería la esposa perfecta para Eric Mun.

Los pensamientos de hace unos días durante su enfrentamiento con Siyeon, revoloteaban por la cabeza de HyeSung, luego de observar fijamente a su esposo. Sí. Quizás después de todo Siyeon y Grace Mun tenían razón. Esta sociedad no estaba lista para aceptar su matrimonio con Eric Mun.

Muy a su pesar, tenía que aceptar que su batalla estaba perdida antes de iniciarla.

-pero Sr. Mun! Como puede ser tan desconsiderado y dejar a su esposo ahí de pie! – la voz madura y sonriente de uno de los invitados, llamó la atención del resto, que fijó la mirada inmediatamente, en el bello muchacho al lado de la mesa del buffet

Eric detuvo sus pasos intempestivamente, clavando sus ojos en su sonrojado joven esposo.

-Sr. Mun, cómo es posible que no baile con su esposo en el día de su cumpleaños!... vamos! Vaya por él! – animó una de las amigas de Grace Mun, interrumpiendo su charla de chismes con la mencionada.

Eric se sintió por un momento confundido, mientras las miles de miradas y sonrisas empezaban a encorajinarlo por ir al lado de su joven y avergonzado esposo.

Y Eric lo hizo.

Tomando ligeramente la mano del menor, Eric llevó a Hyesung hasta el centro de la pista de baile, colocando una mano en su cintura suavemente, mientras sus pies empezaban a moverse tímidamente al compás de la romántica melodía.

[Inserte canción http://www.youtube.com/watch?v=KWlGREqtiYA ]

HyeSung quería pensar que estaba soñando. Eric lo tomaba por la cintura, conectando su mirada con la suya, en un aire romántico y lleno de admiración. Admiración de parte de todos los pares de ojos que los observaban sublimemente.

“hacen una linda pareja”, “se le s ve muy bien juntos”, “wow! Son una pareja perfecta!”, “son una pareja de ensueño”

Eran solo algunas de las frases que la pareja logró captar en medio de su danza que se había tornado más íntima para ese entonces. A un lado de la pista de baile, Grace Mun tenía que admitir y concordar con los pensamientos de los demás invitados.

Eric Mun y Shin HyeSung estaban destinados a estar juntos.

 

10P.M.

-ya van a traer el pastel, no deberías estar acá… - la voz de Eric sorprendió al muchacho sentado en una de las bancas del extenso jardín.

-no estoy muy acostumbrado a los tumultos… es demasiado para mí… - respondió Hyesung, concentrando su visión en la rosa que tenía en manos, arrancada de una de las piezas del jardín

Eric observó a su esposo brevemente, para luego tomar asiento a su lado.

El momento había llegado.

-la fiesta terminará pronto… no te preocupes – rompió Eric el breve silencio HyeSung alzó la mirada, notando a su esposo sentado al lado suyo, la expresión suave y los ojos estallando por decir algo.

Ambos hombres volvieron a sentir que el mundo dejaba de girar a su alrededor.

Para Hyesung era arriesgarse y entregarse a un sentimiento nuevo pero que valdría la pena; para Eric era jugar su última carta y ganar el corazón que tanto anhelaba.

-HyeSung…

-Eric ssi…

Hablaron ambos hombres a la vez, soltando luego una risita incómoda.

-HyeSung… - se apresuró Eric a tomar la palabra, tomando la mano de su esposo.

HyeSung cerró los ojos, rogando por que no fueran las palabras que no quería oír. Los latidos de Eric se aceleraron, creando un nudo en su garganta imposible de resolver.

-Sr. Mun los invitados esperan – irrumpió repentinamente la voz de uno de los mayordomos, quebrando el ambiente entre los dos hombres.

HyeSung sin saber por qué, dio un salto de alivio, acelerando el paso hasta el interior de la casa.

El miedo de Eric se iba apoderando de él. Así como una nueva determinación.

 

11:00 P.M.

-espero que sepas lo que haces… - se dirigió Grace Mun a su hijo, quien sostenía la puerta del auto que la llevaría de regreso a casa

-lo sé madre… esta vez no me voy a equivocar – estableció Eric, inclinándose lo suficiente como para dejar un tierno beso en la mejilla de su madre.

Beso que Grace Mun no había recibido en años.

-Sr. Mun… - la voz gruesa de Park Junjin - se dejó oír por debajo del marco de la puerta

Eric giró, enfrentando al hombre que sostenía en manos una carpeta de color azul que Eric reconoció como su sentencia final.

-no tiene caso que lo siga alargando – habló Junjin con tono firme

Y Eric asintió.

Encerrados por más de 10min en el pequeño despacho, Eric no podía creer que finalmente la hora había llegado.

La hora de decir adiós.

Por que Eric sabía que una vez que firmara esos papeles, HyeSung regresaría a su hogar; a ese hogar que tanto extrañaba.

-aún hay tiempo… no tienes que firmarlos ahora – habló el joven abogado Lee Minwoo a su amigo

-que le dé unos minutos más solo alimentará su agonía – respondió Junjin, con la mirada firme en Eric

-no tienes que hacerlo… aún falta una semana para que venza el plazo del testamento – trataba de persuadir el apuesto Dr. Kim a su amigo

-precisamente por eso lo hago… para demostrarles que HyeSung me importa más que esa maldita herencia!... – Eric alzó la mirada con los ojos ardiendo en llamas

-no me importa lo que hagas Junjin; si pones a HyeSung en un avión de regreso a Boston mañana, créeme que yo saldré en el siguiente vuelo detrás de él… voy a seguirlo a dónde sea… no me pienso rendir a pesar que ya no estemos casados… que firme estos papeles no significa que voy a renunciar a él!

Sin decir más, Eric Mun firmó los papeles.

 

11:25 P.M.

-por qué me hiciste bajar? – se dirigió HyeSung a su amigo y ama de llaves, que había insistido en sacarlo de su habitación y traerlo a la sala, donde ahora se encontraban sentados, esperando por los mayores.

-Jinnie me dijo que quería darte tu regalo – respondió Andy

-a esta hora?... quiero dormir – HyeSung se dejó contra el respaldar del sofá, tratando de calmar sus pensamientos sobre los sucesos de la noche.

No pasaron más de dos minutos, para que Junjin ingresara a la sala en compañía de Minwoo y el Dr. Kim.

-y Eric ssi? – interrogó HyeSung, notando la ausencia de su esposo

-está afuera en los jardines – respondió Minwoo con la mirada caída y labios temblorosos.

La partida de HyeSung no solo afectaba a Eric Mun.

El Dr. Kim se acercó a su novio, pasando un brazo alrededor de su cintura como soporte.

-feliz cumpleaños – expresó Junjin, alcanzando la carpeta azulada al menor HyeSung observó por unos segundos el documento, dirigiendo una mirada interrogativa a su amigo.

-ábrelo, es lo que has estado deseando desde hace tiempo – aseguró Junjin con cálida sonrisa

Andy desde su asiento podía intuir que nada bueno vendría a partir de ahora.

HyeSung tomó la carpeta de manos de su amigo, leyendo su contenido con los ojos abiertos y expresión de sorpresa.

Y un fuerte golpe atacó su corazón, al encontrar la firma de su esposo al pie del documento.

-eres libre HyeSung… solo firma esos papeles y serás completamente libre – agregó Junjin, sosteniendo un lapicero frente al rostro del menor que aún lucía impactado por la noticia.

 

11:45 P.M.

HyeSung aún sostenía el documento en manos, luego que Junjin terminó de contar los detalles del acuerdo al que había llegado con Eric Mun hace más de tres meses.

HyeSung no podía creer que Eric haya accedido a llegar a ese acuerdo con su amigo. Menos aún podía creer que haya arriesgado la tenencia de su empresa, faltando solo una semana para que el plazo del testamento venza.

Definitivamente Eric Mun acababa de hacer algo estúpido. Y más estúpido aún al firmar un documento que implicaba no solo la separación de los esposos, sino el asesinato de las últimas esperanzas de HyeSung.

Por qué Eric había firmado ese documento?. Por qué se había rendido y dejado a un lado todas las promesas que le hizo a su esposo?. Es que acaso HyeSung estaba siendo engañado?. El debate interno dentro de HyeSung, volvió a darse lugar, en medio de una tormenta de dudas y emociones imparables.

Eric había firmado los papeles del divorcio. Eric quería separarse de él. Lo estaba dejando ir a pesar de las múltiples confesiones de amor. Su historia y sus promesas acababan de ser olvidadas.

HyeSung sentía el dolor en su pecho, empezar a asfixiarlo.

Decir adiós era inevitable.

Decir adiós al primer amor que HyeSung albergó en su corazón.

Amor.

Sí, HyeSung estaba enamorado y ahora podía verlo con claridad. Podía ver que a pesar de sus luchas por no ceder ante los encantos y palabras de Eric Mun, HyeSung había caído terriblemente enamorado.

Amor.

Una palabra tan pura, tan pequeña y extensa a la vez. Una palabra que albergaba los sentimientos más hermosos y las alegrías más sinceras. Una palabra que quedaría marcada en su corazón por el resto de su vida. Junto con otra palabra que acababa de re-descubrir.

Alzando la mirada con firmeza y decisión, HyeSung tomó el lapicero de manos de Junjin.

 

11:50P.M

Los cuatro hombres en la sala, observaban atónitos como el menor empezaba a dibujar trazos sobre el papel, justo al lado de la firma de Eric Mun.

Minwoo dejaba caer una lágrima por sus mejillas, Dongwan lo abrazaba, controlando él mismo sus emociones. Andy bajaba la mirada, ocultando su expresión de tristeza. Junjin sonreía serenamente sabiendo que había hecho lo correcto.

Y finalmente HyeSung cerró el documento.

Era hora de decir adiós.

 

 

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Thank you!
Shinbella
Después de algunos años de haber escrito este fic, llegué a la realización que esta historia es muy especial para mis lectoras, por lo que quiero que permanezca única.

Comments

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YT___NONAME
#1
Chapter 46: My heart was filled!
Thank you for leaving us with such a beautiful piece of work!
Yessi10q1 #2
Chapter 46: No me canso de leer este fic, es el de mis favoritos, gracias por contar tan bella historia
Emibebe #3
Chapter 46: Disculpa, me gustó esta historia y quería saber si me podrías dar el permiso para adaptar está historia, porfis:3
lovely_nigth #4
hola
me encanto esta historia no se si me podrías dar permiso para adaptarla en otra plataforma claro dándote todos los créditos y autoria de que solo es una adaptación
me podrías dejase adaptarla por favor
HobiSquirrel #5
Hola, me dejaría adaptar su obra por favor?
Angelly8a #6
Chapter 41: Khaaaa!!!! Y ahora que viene esa perra ????
Angelly8a #7
Chapter 17: No pues si con esos trajes si da un aire a líder de la mafia jajajajajajaja, aiñññ disculpa que no te deje comentario en algunos, es que me quedo con saber que más paso que le doy siguiente y siguiente xD
Angelly8a #8
Chapter 12: Ya me preguntaba por Andy xD baia baia vais ya empieza el karma aquí? Deja voy por las palomitas jajaajajaajnajajaa por cierto, yo debería estar durmiendo, te go trabajo mañana jajajajaja
Angelly8a #9
Chapter 10: CHAAAAN CHAAAN CHAAAAAAAAN cielos Eric debe controlar su ira D: