Frías Vacaciones Parte III

El Bello y La Bestia

A/N: disculpen por la demora!, regresé hace sólo un par de horas a casa y hasta ahora que tengo tiempo de coger mi Laptop!. Acá el final de este capítulo, lo revisé sólo dos veces por lo que no estoy muy segura de cómo quedó, pero como les prometí actu hoy, decidí portearlo de todos maneras. Comenten y díganme que tal me quedó.

Gracias!!!

 

 

 

 

-no hay nada más relajante que una taza de chocolate caliente frente a la chimenea y una buena compañía al lado – dijo Minwoo, robando una mirada en dirección del apuesto Dr. Kim

Dongwan devolvió la mirada al abogado, sonriendo en respuesta a sus palabras.

-no debería estar aquí, en el hospital me necesitan y Hyesung hasta ahora no ha tenido problemas – dijo Dongwan, tomando un sorbo de su taza de chocolate caliente

-tan mal compañero soy? – pronunció Minwoo fingido sentirse ofendido

Dongwan sonrió ante la respuesta  del abogado

-lo siento, es sólo que es mi responsabilidad como doctor

-no te lo tomes tan mal, tómalo como unas merecidas vacaciones antes de llegar al caos del hospital

Dongwan asintió con la cabeza, tomando luego otro sorbo de su bebida.

Los dos pequeños hombres gozaban de un momento a solas, mientras disfrutaban de su penúltimo día en el resort. Los días anteriores, HyeSung y Eric no habían tenido nuevos incidentes y hasta el Sr. Park parecía colaborar, permaneciendo silencioso y distante el resto del viaje.

Todo parecía perfecto para que Minwoo gozara de sus últimos días al lado del Dr. Kim.

-quieres ir a patinar? HyeSung ya debe bajar con Andy – habló Dongwan, colocando su taza en la pequeña mesita frente a ellos

-claro, será divertido con tu compañía – respondió Minwoo con una sonrisa

Los dos hombres esperaron casi veinte minutos hasta que HyeSung bajó con la compañía del ama de llaves, listos para pasar la mañana patinando y terminar el día haciendo snowboarding.

Minwoo se sentía un poco disconforme con la idea de tener que compartir la compañía del Dr. Kim con los dos menores, pero claro, no era algo que pudiera rechazar tampoco.

 

 

-no quieres tomar una taza de café? – ofreció Mi Yeong, deteniendo el paso de Eric, que estaba por abandonar el hotel en búsqueda de su joven esposo

-lo siento Mi Yeong, tengo planeado pasar los últimos días con HyeSung

-ese mocoso ni siquiera se interesa en ti! Te has puesto a pensar que tu idea de quedarte con el chiquillo es absurda? Él mocoso no te quiere, deberías dejarlo ir de una buena vez – exclamó Mi Yeong con tono amargo

Eric tomó a la mujer frente a él del brazo, presionando con fuerza.

-uno, no te vuelvas a referir a él de esa forma; dos, si me quiere o no, no es tu asunto; tres, abre bien tus oídos por que no lo pienso volver a repetir, nunca voy a dejarlo ir! – pronunció Eric cada palabra con seguridad, soltando bruscamente el brazo adolorido de Mi Yeong

-eres un estúpido Eric Mun! Ese mocoso no te valora! La única persona que te valora como se debe soy yo! SOLO YO!! – exclamó Mi Yeong herida por el rechazo de Eric.

Eric caminó de largo al lado de Mi Yeong, sin decir una sola palabra más.

Mi Yeong tomó la resolución de deshacerse de HyeSung en ese instante, dirigiéndose con rapidez en dirección de la pista de patinaje.

 

 

 

-wow Andy-ah! Cada vez lo haces mejor! – elogió Minwoo, observando al ama de llaves hacer unos giros sobre la pista de patinaje

Del otro lado se encontraban HyeSung y Dongwan, hablando tranquilamente. La mañana parecía ser tranquila para todos.

-hey que tal si hacemos una carrera en parejas! – sugirió Minwoo a los dos hombres que se encontraban sentados conversando.

HyeSung y Dongwan alzaron la cabeza, asintiendo sin pensarlo dos veces.

HyeSung y Andy decidieron formar un equipo mientras que Minwoo y Dongwan formarían otro.

-desde acá hasta el otro extremo y regresamos – explicó Minwoo a los tres hombres

-tengan cuidado con la zona cerrada – informó Dongwan, refiriéndose a la parte de la pista que estaba rodeada por una banda roja, indicando que era una zona no segura.

Los cuatro hombres asintieron y empezaron su pequeña carrera. HyeSung y Andy se tomaron de las manos, liderando la carrera desde un principio mientras que Minwoo y Dongwan iban a paso lento, compartiendo sonrisas.

A pocos metros de llegar a la meta para dar el giro de retorno, una extraña figura pasó rápidamente en medio de Andy y HyeSung, provocando que ambos se soltaran y empujando ligeramente al menor contra la zona restringida.

Todos los ojos quedaron fijos en el muchacho que yacía sobre el hielo, tratando de incorporarse. Pero el hielo en esa zona era tan débil que apenas HyeSung hizo el primer movimiento, se partió por debajo de él abriéndose por completo.

-HYESUUUUNG!!! – llamaron los mayores al ver al muchacho desaparecer dentro de la cavidad en medio del hielo

Andy, Minwoo y Dongwan corrieron en auxilio del muchacho que hacia sus intentos por soportar el acuchillante contacto contra el agua congelada.

HyeSung era un excelente nadador pero el agua era demasiado helada para su resistencia y pronto se vio perdiendo movilidad en sus músculos entumecidos, dejándose arrastrar por la ligera corriente.

-HyeSung!! HyeSung!!  - llamaban los tres hombres, siguiendo la figura del menor que flotaba atrapado entre el hielo y el agua congelada.

-rompan el hielo! Hay que romper el hielo!! – oyeron la voz de Junjin que se arrastraba por encima de la pista

Los cuatro hombres empezaron a golpear con todas sus fuerzas la capa de hielo pero esta parecía no estar dispuesta a ceder fácilmente, pues HyeSung se encontraba flotando ya en la zona donde el hielo era más sólido.

La gente alrededor empezó a reunirse y buscar ayuda para rescatar al muchacho atrapado debajo de la pista.

Los cuatro hombres se desesperaban y perdían fuerzas, al notar que sus intentos por romper el hielo eran en vano.

-HyeSung!! HyeSung!!! – oyeron una voz profunda y grave a pocos metros de distancia.

Lo siguiente que vieron fue a Eric golpear con fiereza sobre el hielo una y otra vez hasta lograr abrir una pequeña cavidad, por donde introdujo ambos brazos, logrando capturar a su esposo exitosamente, jalando con pesadez su cuerpo, sacándolo de las frías aguas.

HyeSung estaba inconsciente, sus labios azules y su rostro más pálido que de costumbre. Inmediatamente Eric empezó a darle RCP para regular su respiración que era casi escasa. 

-respira! Respira!... no me hagas esto! No me puedes dejar!  - rogaba Eric, mientras trataba de conseguir que su esposo volviera a respirar.

A los segundos HyeSung se agitó, botando el agua que estaba estancada en sus pulmones. El muchacho abrió los ojos, empezando a temblar descontroladamente.

Los cuatro hombres corrieron en ayuda de Eric, haciendo espacio para que Dongwan pudiera hacer su trabajo.

-tenemos que llevarlo rápidamente a un hospital! Está totalmente congelado!– exclamó Dongwan revisando los signos vitales de HyeSung.

Eric se acercó al Dr. Kim y en un solo movimiento lo despojó de su casaca, retornando luego donde su esposo, prácticamente rasgando sus ropas hasta remover todas las prendas húmedas, envolviéndolo con la prenda seca que había tomado del Dr. Kim, como si fuera un bebé.

Los demás que observaban la escena, se despojaron también de sus prendas, colocándolas sobre el muchacho que llevaba Eric en brazos, ahora.

-déjeme llevarlo, usted está muy débil – exclamó Junjin al observar los pasos torpes de Eric

-no! Yo lo llevaré, él es mi esposo, es mi responsabilidad que esté sano y salvo – respondió Eric con vehemencia.

Sus brazos dolían terriblemente por los golpes aplicados sobre el hielo, además del contacto con las congeladas aguas, pero nada lo iba a detener por salvar la vida de su joven esposo.

 

 

 

Eric y los demás esperaron casi una hora mientras HyeSung era atendido en la enfermería del hotel. Dongwan se hizo cargo de atenderlo con la ayuda de Andy y el doctor de turno. Los signos vitales de HyeSung eran débiles pero la peor parte había pasado.

-cómo está?! Está bien?! …. Por qué no hablas!! – sacudía Eric a Dongwan sin parar, sin darle tiempo para responder a sus preguntas.

-Eric deja que hable! – intervino Minwoo en ayuda del Dr. Kim

-aún está muy débil pero se está recuperando, lo mejor es que pase la noche aquí en observación, mañana podrás llevarlo de regreso a su habitación – respondió Dongwan con voz calmada, haciendo uso de su amplia experiencia como doctor.

Eric y los demás reunidos dieron un suspiro de alivio al oír las buenas noticias.

-puedo entrar a verlo? – habló Eric con ojos suplicantes

-está dormido ahora, pero creo que está bien si sólo entras por unos minutos – asintió Dongwan

Eric no lo pensó dos veces para ingresar a la habitación donde se encontraba su joven esposo durmiendo. Con cuidado de no despertarlo, Eric se aproximó a la cama, observando el rostro pacífico de su esposo. Sus labios habían retomado ese color rosado natural, su rostro se veía aún pálido pero con más vitalidad.

Eric dejó salir un profundo suspiro, sosteniendo una de las manos de su esposo. Bajó la cabeza hasta reposar su frente en la mano de su esposo que aún sostenía. Por un momento la idea que algo peor pudiera haber ocurrido, lo aterró a morir

-u-usted… q-que hace a-aquí… - oyó Eric la casi inaudible voz de su esposo

-sshhh… no hables, aún estás muy débil – Eric colocó un dedo sobre los labios de HyeSung como señal que guardara silencio

-hace frío… tengo frío… - volvió a hablar HyeSung, empezando a temblar ligeramente.

Eric observó alrededor de la habitación hasta que sus ojos dieron con un pequeño armario, del cual sacó un par de mantas y las colocó sobre su esposo.

-esto te hará sentir mejor – dijo Eric con una sonrisa, terminando de cubrir a su esposo con las cálidas mantas.

HyeSung observó a Eric por un minuto sin saber qué decir.

-supongo que ahora estamos a mano, no?, tú me salvaste la vida en aquella ocasión y ahora fue mi turno – habló Eric con voz apacible

-no espere algo a cambio… - respondió HyeSung aún con voz débil

-claro que no, lo hice por que te amo… por que mi vida sería miserable si te pierdo – habló Eric una vez más, acariciando amorosamente la mejilla de su esposo

HyeSung estaba tan débil que no opuso resistencia al toque de su esposo. Tampoco era cómo si las caricias le disgustaran.

-usted es extraño, muy extraño – pronunció HyeSung débilmente, mientras sus ojos se volvían a cerrar.

Lo último que sintió antes de caer dormido nuevamente, fue el toque suave y cálido sobre su frente.

 

 

 

Eric salió de la habitación, encontrándose con los rostros concernientes de las personas que esperaban en la pequeña salita. Sin pensarlo mucho, llamó al ama de llaves, interrogándolo sobre lo sucedido en la pista de patinaje. Andy contó cómo se dieron las cosas y ahora algo perturbaba o más bien enfurecía a Eric.

Los ejecutivos que habían estado en la pista de hielo, se encontraban también en la salita, preocupados por el estado de salud del joven muchacho.

-quién fue – dijo Eric con tono grave y atemorizante

Los presentes se miraron unos a otros de manera interrogativa.

-quién fue el que empujó a HyeSung – volvió a preguntar Eric de manera más explícita

Nadie se atrevía a hablar, asustados por la posible reacción de Eric.

-lo siento mucho Sr. Mun! Me dijeron que sólo sería una broma! No pensé que el chico caería a ese lado de la pista! – se oyó una voz desde el fondo de la habitación.

Todos los presentes abrieron camino para dejar a Eric una vista clara de la persona que se encontraba de rodillas con la cabeza baja, suplicando perdón.

-quien! Quien te dijo que hicieras eso!! – Eric tomó al muchacho por el cuello de su casaca, sujetándolo de manera amenazante

El muchacho empezó a temblar, perdiendo el habla al encontrarse con los ojos furiosos de Eric.

-M-M-Mi Y-Y-Ye-ong… la-la-la S-S-se-señora Mi-Mi Ye-ong – respondió finalmente el muchacho

Todos los rostros se fijaron inmediatamente en la mujer que se encontraba atrincherada en una esquina, tratando de que su existencia pasara desapercibida.

-tú maldita desgraciada! – se acercó Eric a la mujer, con los ojos escupiendo fuego

-…y qué si lo hice! Ese mocoso nunca te va a querer!! Lo mejor para ti es librarte de él y quedarte con las dos empresas! – exclamó la mujer sin ningún titubeo

El nivel de tolerancia de Eric llegó a su límite, no importándole la presencia de los accionistas y demás ejecutivos reunidos en la pequeña salita. Tampoco le importo mucho el que Mi Yeong sea una fina dama, cuando de un movimiento, alzó su mano en alto, golpeando con todas sus fuerzas contra la mejilla de la mujer que cayó al suelo de manera humillante.

-NUNCA!, nunca más vuelvas a intentar algo contra él o te juro que me olvidaré que eres mujer y te daré lo que te mereces!  - habló Eric con tono amenazante a la mujer que yacía en el piso

-yo te …

-LARGO! LARGO DE AQUÍ! NO QUIERO VOLVER A VERTE NUNCA MAS EN VIDA!! – vociferó Eric por toda la salita, casi haciendo resonar las ventanas con el eco de su voz.

Mi Yeong lloraba desconsoladamente ante las duras palabras de Eric. Las personas alrededor no sabían si sentir lástima por ella o repulsión por la gravedad de sus actos.

-Eric cálmate!, HyeSung está descansando adentro, baja el tono de tu voz – intervino Minwoo, sujetando a su amigo por la cintura, antes que terminara por perder el control y volviera a arremeter contra Mi Yeong

-saquen de aquí a esta mujer… sáquenla de aquí antes que termine por matarla con mis propias manos! – exclamó Eric al final, antes que Mi Yeong sea ayudada por dos hombres y retirada de la enfermería.

 

 

 

Dongwan salió una vez más de la habitación luego de haber revisado la evolución del estado de HyeSung. Soltó un sonoro suspiro  al notar los cuerpos durmientes de los cuatro hombres restantes en la salita.

-hey Minwoo… - sacudió Dongwan ligeramente el hombro del abogado

-Dr. Guapo… - susurró Minwoo entreabriendo los ojos ligeramente

-eh?! … - exclamó Dongwan en sorpresa

Minwoo abrió los ojos por completo, al darse cuenta de lo que acababa de decir

-D-Dongwan… lo siento, estoy aún muy adormecido – habló Minwoo nerviosamente, sobándose los ojos para ocultar el rubor en sus mejillas

-está bien, entiendo… ya deberían irse a dormir a sus habitaciones, yo haré guardia esta noche – habló Dongwan, cambiando el tema de conversación para comodidad del abogado

-HyeSungie ya está mejor? – preguntó Minwoo en voz baja, con cuidado de no despertar a los otros tres hombres

-sí, ya está más estable, ayúdame a despertar a estos tres y vayan a descansar – señaló Dongwan a las figuras durmientes

-déjalos, crees que alguno se moverá aún si les dices que HyeSung ya está completamente bien?, ni siquiera yo quiero irme – habló Minwoo acomodándose nuevamente en el sofá

-café? – ofreció el Dr. Kim repentinamente, derrotado por la respuesta de Minwoo

El abogado dio una sonrisa, asintiendo al ofrecimiento. Ambos hombres abandonaron la salita, en dirección a la pequeña cocina ubicada en la enfermería.

-que susto nos llevamos eh? – inició Minwoo la conversación, tomando asiento en una de las sillas ubicadas a un extremo de la pequeña cocina

-no puedo creer que haya gente que sea capaz de hacer algo así, es realmente deprimente – contestó Dongwan, tomando asiento al lado del abogado

-conozco a Mi Yeong desde hace un par de años, siempre pensé que le faltaba un tornillo en la cabeza, pero de ahí a querer lastimar a HyeSung… - Minwoo agitó la cabeza de manera negativa

-estudié medicina por que quería salvar vidas y cada vez que veo gente lastimando a otras personas deliberadamente, realmente siento repulsión – habló Dongwan con tono amargo

-tienes un buen corazón Dr. Kim, es la segunda vez que salvas a HyeSung – miró Minwoo a Dongwan con ojos destellantes

-yo no hice nada, fue Eric – respondió Dongwan, sorbiendo su taza de café

-Eric está cada día más enamorado de HyeSung… a veces me preocupa pero a la vez me alegra que al fin haya dejado atrás lo que ocurrió en el pasado

-qué fue lo que pasó con Eric?... nunca me has contado esa historia

-y probablemente nunca lo haga, eso es parte de la vida privada de Eric, sólo a él le corresponde decidir si contarla o no – respondió Minwoo sonriendo al Dr. Kim

Ambos hombres continuaron tomando sus tazas de café, disfrutando del mágico silencio del momento. Minwoo podía sentir que con cada minuto que pasaba, su corazón daba un latido extra al ver la imagen apacible del doctor sentado a su lado.

 

 

 

A la mañana siguiente y con la aprobación del médico de turno y el apuesto Dr. Kim, HyeSung fue trasladado de regreso a su habitación dentro del hotel. El muchacho aún estaba débil y con algunos remanentes de la hipotermia causada por el contacto con el agua congelada, por lo que Eric mandó prácticamente a sellar toda la habitación e incluso subir el generador de la calefacción. Por órdenes de los doctores, HyeSung tenía que permanecer en cama por al menos dos días, hasta que haya recuperado completamente todas sus fuerzas. Esto generó un retraso en el regreso de Eric y sus amigos a la ciudad de Seúl.

-estás seguro que quieres hacer esto? – interrogó Minwoo a su amigo

-no voy a exponerlo a viajar estando aún débil, nos quedaremos hasta que se haya recuperado – respondió Eric firmemente

-bien, no me dejas más opción que quedarme con ustedes – se rindió Minwoo, sonriendo a su amigo

Al otro lado de la habitación, se encontraba Andy, acomodando las mantas sobre el cuerpo del muchacho recostado en la cama.

-tienes fiebre… - dijo Andy, colocando una mano sobre la frente de HyeSung

-tengo sed… - habló HyeSung con voz débil

-te traeré agua y algo para bajarte esa fiebre – respondió Andy dirigiéndose al frigobar por una botella de agua

La puerta de la habitación se abrió, revelando a Dongwan con una presencia no muy bienvenida por detrás de él.

-que hace usted acá? – se dirigió Eric a Junjin

-lo siento, me siguió desde los ascensores – habló Dongwan, haciendo su camino hasta la cama donde se encontraba HyeSung

-quiero saber cómo está HyeSung

-está mejor, ahora váyase – respondió Eric a Junjin, asesinándolo con la mirada

-quieren parar con eso, HyeSung aún está débil y no van a hacer otra escenita aquí dentro! – regañó Minwoo a los dos hombres, en voz baja y enérgica

Muy a su pesar, Eric tuvo que permitir que Junjin se quedara en la habitación, esperando unos minutos mientras el Dr. Kim con ayuda de Andy, terminaba de revisar a HyeSung.

 

 

 

-te sientes mejor – habló Junjin al muchacho recostado en la cama, una vez que el Dr. Kim terminó con su tarea

-sí, gracias… - respondió HyeSung brevemente

-te prometo que haré lo posible para sac….

-Junjin basta, no es necesario que hagas todo esto, confío en que pronto se terminara toda esta tortura – interrumpió HyeSung las palabras de su ex novio

Los demás hombres en la habitación, dirigieron la mirada a las dos personas en el fondo de la habitación. Sobre todo Andy que no creía lo que estaba oyendo.

-HyeSung, lamento tanto haberte dejado….

-eso ya está en el pasado, ahora lo que debe importarte es tu novio, todavía siguen juntos?

La pregunta dejó a todos en la habitación con la boca abierta. Nadie se esperaba que el Sr. Park Junjin tuviera novio. Andy sobre todo estaba aún más sorprendido, jamás se imaginó que HyeSung supiera sobre su existencia.

-estamos un poco distanciados ahora… - respondió Junjin, dando una mirada de reojo a su novio que permanecía de pie a unos pasos de la cama.

-mejor que vayas y te reconcilies, me dijiste que esa persona te hacia muy feliz, no debes perder a alguien así tan fácilmente – continuaba hablando HyeSung con voz débil y rasposa

Andy se acercó unos pasos para dar de beber un vaso con agua al muchacho, robando una mirada al rostro de su novio.

-me prometes que estarás bien? – habló Junjin con voz suave

HyeSung sólo asintió con la cabeza, mostrando una sonrisa serena.

-aún podemos ser amigos, no? – habló HyeSung nuevamente

-claro que sí, no creas que dejaré de visitarte y espero que tú hagas lo mismo – sonrió Junjin, pasando su mano sobre el cabello del muchacho

Minutos después, Junjin abandonó la habitación en silencio.

 

 

 

Minwoo y Dongwan, permanecieron en la habitación hasta que la noche cayó, luego se retiraron, dejando a la pareja a solas. Andy regresó a su habitación por órdenes de Eric, quien no quería dejar solo a HyeSung ni un segundo.

-quieres algo de comer? – se acercó Eric lentamente a la cama donde yacía su esposo

-no tengo hambre… Andy no vendrá a dormir? – habló HyeSung tímidamente, al notar la ausencia del ama de llaves

-le pedí que regresara a su habitación, yo te cuidaré esta noche – respondió Eric, sentándose del otro lado de la cama

HyeSung se sintió temblar por un segundo por la cercanía de su esposo y por la idea de pasar la noche en la misma habitación que él.

-no te asustes que no haré nada… HyeSung deja de tenerme miedo – habló Eric en voz baja y serena, centrando su mirada en sus manos que estaban cruzadas sobre su estómago

-no puedo…. Usted ya trató antes de…. – HyeSung perdió el habla ante los malos recuerdos que venían a su mente

-fui un grandísimo idiota por lastimarte, lo sé, pero te aseguro que eso no volverá a pasar…. Todo lo que quiero ahora es verte feliz…. Dime que tengo que hacer para que seas feliz – habló Eric esta vez mirando el rostro del muchacho

HyeSung agachó la cabeza, tratando de controlar la sensación de temor que le daba la presencia de su esposo.

-quiero mi vida de regreso…. – respondió HyeSung casi en un susurro

-quiero ir a casa… - continuó hablando, casi quebrándose con sus propias palabras

Eric permaneció en silencio unos segundos, antes de tomar la mano de su esposo y darse valor para hablar.

-te puedo dar todo lo que quieras, créeme…. Todo lo que quieras…. Pero no te puedo dejar ir a casa – pronunció Eric con voz suave

HyeSung cerró los ojos, dejando escapar una lágrima. Eric le había dado la respuesta que esperaba. No sería libre hasta que se cumpliera el plazo impuesto por el testamento de sus abuelos.

-te puedo dar la vida que tenías, mientras estés conmigo… haré todo lo posible para regresarte tu vida, aquí a mi lado – habló Eric una vez más, sujetando con más fuerza la mano de su esposo.

 

 

 

A la mañana siguiente, Eric buscó a su joven asistente, encargándole unas tareas poco convenientes a juzgar por el lugar donde estaban. Bogeun como siempre se mostró reacio y poco optimista a poder realizar las tareas encargadas, pero al fin y al cabo tenía que hacer como su jefe deseaba si quería seguir conservando su trabajo.

Bogeun pasó todo un día encerrado en su habitación,  realizando llamadas por doquier, enviando correos electrónicos, buscando información en Internet, hablando en línea con cuánta persona pudiera contactar, pidiendo favores por aquí y por allá, rogando y hasta casi sobornando para conseguir los resultados que su jefe esperaba. Y todo su esfuerzo fue bien pagado cuando al día siguiente por la noche, su jefe mostraba una sonrisa complacida, sosteniendo los documentos que el muchacho le había entregado.

Eric se retiró de su habitación luego, en búsqueda de su esposo. HyeSung ya estaba casi recuperado y pasó el resto del día caminando por los alrededores del hotel en compañía de Andy.

Después de una intensa caminata, Andy había dejado al muchacho descansando frente a la chimenea ubicada en una de las salitas privadas del hotel.

Eric se aproximó silenciosamente a su esposo, que se encontraba sentado sobre la alfombra, atizando el fuego de la chimenea.

-te puedes lastimar si sigues haciendo eso – las palabras de Eric sorprendieron a HyeSung

-q-que hace…

-estaba buscándote – respondió Eric, tomando asiento al lado de su esposo

-recuerdas que te prometí devolverte la vida que tenías?... aquí tienes un adelanto… - dijo Eric, alcanzando los papeles que minutos antes le había entregado su asistente

HyeSung dudó unos segundos antes de tomar el sobre de manos de su esposo y abrirlo con lentitud.

Eric observaba ansiosamente mientras su esposo abría el sobre y revisaba los documentos una y otra vez, como si quisiera convencerse que no estaba soñando.

-es en serio? – interrogó HyeSung finalmente a su esposo

-te dije que tendrías todo lo que tenías en Boston… - respondió Eric con una sonrisa, pasando su mano por el cabello de su esposo hasta llegar a su mejilla

-pero cómo….

-no hay nada que Bogeun no pueda hacer y con tus buenas calificaciones más unos cuántos favores, logramos que te aceptarán en la universidad de Seúl – explicó Eric orgulloso de su trabajo al ver la sonrisa que empezaba a formarse en el hermoso rostro de su esposo

HyeSung quedó sin palabras. Deseaba tanto regresar a la universidad y terminar sus estudios, en un principio creyó que ese sólo sería un sueño que no se cumpliría jamás mientras siga al lado de Eric, pero ahora, tenía en sus manos los documentos que lo acreditaban como alumno transferido en el siguiente semestre de una de las universidades más exclusivas de Seúl.

HyeSung no pudo contenerse más ante toda la alegría que le provocaba la noticia. Y sorprendiendo a su esposo y hasta él mismo, rodeó con sus brazos el cuello de Eric, sujetándolo con fuerza

-gracias… - susurró quedamente, avergonzado al darse cuenta de lo que acababa de hacer

Antes que HyeSung pudiera soltarse, Eric lo sujetó por la cintura acercándolo más a él, disfrutando por primera vez de la sensación de ser sostenido por su joven esposo.

HyeSung bajo la mirada, enterrando la cabeza en el hombro de Eric.

-haría lo que sea por verte feliz…. Lo que sea…. No me tengas miedo HyeSung, dame una oportunidad de demostrarte que he cambiado y que puedo ser digno de tu amor… - habló Eric con voz suave, acariciando el cabello de su esposo amorosamente

-no sé si pueda confiar en usted… - respondió HyeSung, liberándose unos centímetros para colocarse frente a frente con Eric

-déjame demostrarte que puedes confiar en mí, voy a cuidar de ti con toda mi vida y haré que nunca te quieras separar de mí… te lo prometo – habló Eric, continuando con las caricias sobre el cabello del muchacho

De alguna manera las palabras de Eric hacían dudar al muchacho.

Y en medio de esa confusión, Eric aprovechó su momento para inclinarse unos centímetros y juntar sus labios sobre los de su esposo en un cálido, suave y breve beso que duró sólo un par de segundos, pero que estuvo lleno de todo el amor que llevaba Eric por dentro.

Eric se sintió confundido, al notar el rostro sin expresión de su esposo, cuando sus labios se separaron. HyeSung estaba sorprendido por el repentino acto de su esposo, pero de alguna manera sabía que no habían malas intenciones en ese beso.

Finalmente, HyeSung no dijo nada y sólo dejó que Eric lo volviera a envolver en sus brazos y lo recostara de espaldas sobre su pecho, mientras observaban el fuego que ardía dentro de la chimenea.

 

Quizás aún habían esperanzas para Eric?..... ambos hombres llenaban sus pensamientos con la misma pregunta.

 

 

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Thank you!
Shinbella
Después de algunos años de haber escrito este fic, llegué a la realización que esta historia es muy especial para mis lectoras, por lo que quiero que permanezca única.

Comments

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YT___NONAME
#1
Chapter 46: My heart was filled!
Thank you for leaving us with such a beautiful piece of work!
Yessi10q1 #2
Chapter 46: No me canso de leer este fic, es el de mis favoritos, gracias por contar tan bella historia
Emibebe #3
Chapter 46: Disculpa, me gustó esta historia y quería saber si me podrías dar el permiso para adaptar está historia, porfis:3
lovely_nigth #4
hola
me encanto esta historia no se si me podrías dar permiso para adaptarla en otra plataforma claro dándote todos los créditos y autoria de que solo es una adaptación
me podrías dejase adaptarla por favor
HobiSquirrel #5
Hola, me dejaría adaptar su obra por favor?
Angelly8a #6
Chapter 41: Khaaaa!!!! Y ahora que viene esa perra ????
Angelly8a #7
Chapter 17: No pues si con esos trajes si da un aire a líder de la mafia jajajajajajaja, aiñññ disculpa que no te deje comentario en algunos, es que me quedo con saber que más paso que le doy siguiente y siguiente xD
Angelly8a #8
Chapter 12: Ya me preguntaba por Andy xD baia baia vais ya empieza el karma aquí? Deja voy por las palomitas jajaajajaajnajajaa por cierto, yo debería estar durmiendo, te go trabajo mañana jajajajaja
Angelly8a #9
Chapter 10: CHAAAAN CHAAAN CHAAAAAAAAN cielos Eric debe controlar su ira D: