Los rayos del sol atraviesan las ventanas, indicando la llegada de la nueva mañana. Las blancas sábanas parecen resplandecer más mientras la habitación se va aclarando y los dos cuerpos yacientes sobre la cama, empiezan a hacer movimientos incómodos, queriendo ignorar la molesta luz que les avisa que ya es hora de despertar y empezar un nuevo día.

Dos hombres yaciendo uno al lado del otro, sus cuerpos envueltos entre las blancas sábanas. Ninguno dispuesto a ceder y abandonar su tierra de sueños.

“Hey Come On Everybody

Swimming in the sea….”

El molesto sonido de un teléfono celular vibrando en algún lado de la habitación obliga a uno de los hombres a dejar su tierra de los sueños y buscar perezosamente sobre la mesita al lado de la cama, hasta finalmente encontrar el origen de la molesta interrupción de su sueño de belleza.

-Minwoo tienes que ayudarme…. – se oye la voz grave y desesperada de un hombre al otro lado de la línea

-aló?... – responde una voz somnolienta y rasposa

-cometí una estupidez con HyeSung anoche….

El hombre que luchaba aún por despertar, abrió los ojos completamente y una señal de alerta se encendió en su cabeza.

-Eric?... – preguntó el 100% despierto hombre, ahora

-Dongwan??.... – respondió Eric del otro lado línea, reconociendo la voz del Dr. Kim

La expresión de Dongwan cambió a una de sorpresa o más como shock, al observar que el teléfono celular que sostenía, no era el suyo. Ni mucho menos era suya, la cama donde estaba recostado o la habitación dónde se encontraba. Lo único que logró reconocer como suyo, fueron las prendas que se encontraban esparcidas en el piso.

-Dongwan?... qué haces con el teléfono de Minwoo? – insistió Eric del otro lado de la línea.

-n-número equivocado! – Dongwan cortó la llamada sin pensarlo dos veces, apagando el teléfono celular inmediatamente.

Al dar una vista perimetral por la amplia y moderna habitación, sus ojos terminaron cayendo en la persona que dormía a su lado, cubierta sólo por un pedazo de la blanca sábana, dejando ver parte de su fisonomía desnuda. Dongwan sintió que su rostro se encendía con sólo ver al hombre que estaba recostado a su lado, sin dudarlo, tiró de las sábanas cubriendo por completo el cuerpo de Minwoo.

-aish! Este enano!... cuando más lo necesito y anda en amoríos con el Dr. Kim – susurró Eric de mal humor, lanzando su teléfono sobre el sofá.

Eric se dirigió luego a su habitación a terminar de arreglarse para salir a trabajar y continuar pensando en qué hacer con HyeSung, quien se encontraba aún durmiendo plácidamente en la cama.

Para alguien que se rehusó en un principio a dormir en la misma cama que su esposo, Hyesung se encontraba ahora durmiendo tranquilamente, como si se tratara de un tierno e inocente bebé.

Eric se acercó unos centímetros a la cama, observando el rostro durmiente de su joven esposo, acarició una de sus mejillas con una mano, mientras que con la otra acomodaba los mechones de cabello que cubrían su rostro.

HyeSung dio unos ahogados quejidos adorables al sentir las manos extrañas que molestaban su placentero sueño. Giró un par de veces sobre su misma posición y finalmente abrió los ojos para encontrarse con el rostro sonriente y bien afeitado de su esposo. El aroma de la colonia de Eric, lo hacía sentir como si aún estuviera soñando.

-buenos días – habló Eric ampliando su sonrisa

HyeSung abrió más los ojos, despertando por completo. Se sentó sobre la cama de un salto, observando el aún calmado y sonriente rostro de su esposo.

-hey no te asustes, cumplí mi palabra y no te hice nada anoche – habló Eric jugando con el cabello de su esposo

-v-voy a cambiarme… - HyeSung trató de ponerse de pie, pero Eric lo retuvo sujetándolo por la cintura

-puedes dormir más si quieres, tuviste una noche difícil, le pediré a Andy que te traiga el desayuno y puedes descansar el resto del día – dijo Eric con voz amorosa

-estoy bien… - el sonido del celular de Eric interrumpió las palabras de HyeSung

De mala gana Eric se puso de pie para contestar la llamada entrante que reconoció era de su mejor y único amigo. Brevemente Eric pidió a Minwoo ayuda y éste no dudó en colgar el teléfono y prometer estar en el departamento de Eric en 30 minutos.

-le diré a Andy que traiga el desayuno – Eric dio un beso en la frente de su joven esposo, dejándolo solo en la habitación, envuelto mil y un pensamientos.

Después de llevarse el shock de su vida al ser despertado por los gritos y reclamos del apuesto Dr. Kim, el abogado Lee Minwoo se encontraba camino al departamento de su mejor amigo, en compañía de la persona que había amanecido a su lado. Dongwan sentía la responsabilidad de explicar a Eric el por qué fue él quien contestó la llamada al teléfono de Minwoo más temprano.

Tal como lo prometió el abogado, pasaron 30 minutos y el timbre del departamento de Eric sonó, anunciando su llegada.

-oh Dios esto es vergonzoso – se decía Dongwan esperando por que Andy abriera la puerta

-ya deja quejarte… yo no te obligue a nada… y si te preocupa lo que piensen los demás, tranquilo que asumiré la responsabilidad, cuidaré de ti – aseguró Minwoo robando un beso en la mejilla del Dr. Kim

-yah! Cuál responsabilidad! – Dongwan alzó la mano, listo para dar un golpe en la cabeza del abogado, cuando la puerta se abrió revelando el rostro sonriente de Andy.

-llegaste! – se oyó la voz de Eric detrás de Andy

-Eric, sobre lo de hace unas horas…. – empezó Dongwan pero fue detenido instantáneamente

-no tengo tiempo para analizar sus amoríos, necesito que hables con HyeSung  - interrumpió Eric, tomando a Minwoo por un brazo, arrastrándolo por todo el departamento hasta su habitación.

-entra y habla con él – dijo, prácticamente empujando al abogado dentro de su habitación.

-pero qué…. – Minwoo quiso hacer más preguntas pero sólo se encontró con la fría puerta de madera a sus espaldas.

HyeSung se encontraba sentado sobre la cama, abrazando sus rodillas, mirando en dirección del confundido abogado.

Minwoo no sabía que estaba pasando, sabía que Eric necesitaba su ayuda pero no sabía cual era la fuente de la crisis. Con cuidado se acercó al muchacho sobre la cama y empezó una conversación casual hasta llegar a todos los últimos eventos que estaban causando más de una tormenta dentro de la ya atormentada cabeza del inocente HyeSung.

-antes de que vuelvas a intentar decir algo, no me interesa en que andan tú y ese enano, mientras no me afecté a mí o a HyeSung, pueden hacer lo que quieran – dijo Eric, notando la intensa mirada del Dr. Kim

Dongwan dio una mirada nerviosa, cambiando su enfoque visual en cualquier cosa dentro del departamento, tratando de ocultar sus mejillas coloradas.

Andy interrumpió el incómodo y tenso momento entre los dos hombres, sirviendo unas bebidas mientras ambos esperaban por que Minwoo terminara de hablar con HyeSung.

Eric esperaba que Minwoo lograra convencer a HyeSung de sus buenas intenciones y calmara el nuevo temor que estaba creciendo dentro de él.

Minwoo estuvo casi una hora, tratando de hacer entrar en razón a HyeSung y casi rogándole por que aceptara los sentimientos y el repentino cambio de Eric. HyeSung parecía aún muy reacio a ceder pero cierta parte de él le decía que al menos debería intentarlo.

-cómo puedo confiar en ese hombre después de lo que me hizo… no puedo… - seguía repitiendo HyeSung sin parar

-Sungie, escúchame…

-dijiste que tenías avanzados los papeles, no puedes hacer nada?.... ya no puedo estar en esta casa…

Minwoo tuvo que pensarlo detenidamente antes de dar una respuesta.

-Sungie… el proceso será muy largo… probablemente para cuando termine el plazo del testamento ya todo será resuelto – mintió Minwoo, sintiendo lástima al ver el rostro de decepción de HyeSung

-me estás diciendo que acepté a ese hombre…. – habló HyeSung con voz temblorosa

-no que lo aceptes por que sé que te costará, pero al menos trata de hacer tu convivencia más placentera, tus clases en la universidad empezaran en tres semanas, disfruta de ese tiempo

-sé que ha cambiado mucho últimamente… pero y si luego vuelve a ser la misma persona que me obligó a casarme y…

-Eric no te va hacer más daño… si quieres la verdad, tú has traído al viejo Eric de regreso

HyeSung se quedó mudo por un momento. A qué se refería Minwoo con esas palabras?

-el Eric que conociste en Boston, era sólo la persona en la que se convirtió luego de….

-de qué? – insistió HyeSung por que Minwoo continuara sus palabras

-no soy yo quien deba contarte esa historia… pero te aseguro que el Eric que vive ahora contigo, es el verdadero… dale una oportunidad, dale una oportunidad de mostrarte quien es realmente Eric Mun…

HyeSung quedó en silencio nuevamente, las palabras de Minwoo de alguna manera habían calado dentro de él y ahora se encontraba más dubitativo sobre sus propios sentimientos hacia su esposo.

Valdría la pena darle una oportunidad a Eric Mun?

Tres semanas después….

El maravilloso sol que resplandece por la ventana, iluminando la habitación que permanece silenciosa.

Un hombre observando detenidamente cada facción del hermoso ángel que duerme aún envuelto entre las sábanas. Si tan sólo no tuviera que ir a trabajar o el hermoso ángel no tuviera que ir dentro de una hora a iniciar sus clases en la universidad. Todo sería tan perfecto si sólo pudiera permanecer sentado en ese lado de la cama, observando a la bella criatura dormir placenteramente.

Eric colocó una mano detrás del oído de su joven esposo, acomodando su cabello. HyeSung hizo un adorable quejido y abrió los ojos en molestia.

-buenos días precioso, tienes que levantarte, hoy tienes clases – sonrió Eric besando la frente de su adorable esposo

Hyesung hizo una mueca de desagrado y se levantó de la cama, sin molestarse a darle una mirada a su esposo que continuaba sonriente, observando cada uno de sus movimientos.

Tal como le había aconsejado Minwoo, HyeSung dejó de tenerle miedo a Eric y empezó una convivencia más tolerable con éste, pero tampoco era como si hubiera aceptado sus sentimientos o confiara completamente en él.

HyeSung parecía más bien ignorar la existencia de Eric a veces.

A Eric no le importaba mucho este comportamiento ya que al menos HyeSung no se oponía a sus demostraciones de afecto y esto le daba una oportunidad más de demostrarle su amor.

Eric había aprendido a ser paciente y muy cuidadoso como para no cometer otro error con su adorable esposo. Lo único por lo que rogaba Eric, era por que HyeSung se diera cuenta que sus sentimientos eran sinceros y finalmente ambos pudieran llevar un matrimonio como se debía.

-bien, iré a vestirme – Eric regresó a su habitación, componiendo una sonrisa en su decepcionado rostro.

-buen día! – saludó Andy alegremente al muchacho que entraba en la cocina, ya arreglado y listo para salir

HyeSung se sentó en la mesa, tomando un plato de los omelettes preparados por el ama de llaves y un vaso de jugo de naranja.

-no vas a desayunar en el comedor? – interrogó Andy sorprendido

-no me quieres acá? – HyeSung hizo un adorable puchero en reclamo a las palabras del ama de llaves

-al Sr. Eric le gusta comer contigo, sé buen niño y vé al comedor – Andy pasó su mano por el cabello del muchacho, instándolo a ponerse de pie y salir de la cocina

HyeSung dio un resoplido y obedeció al ama de llaves casi a regaña dientes.

Eric se encontraba ya sentado en la mesa, cuando vio a HyeSung y Andy salir de la cocina. Los ojos le brillaron al ver a su joven esposo vestido y arreglado para ir a la universidad.

HyeSung había puesto mucho esfuerzo en vestirse para su primer día de clases en la universidad.

-te ves muy bien – elogió Eric sin quitar la vista de su esposo

-gracias…. – respondió HyeSung secamente, regalando una breve mirada a su esposo.

-a que hora terminan tus clases? – inició Eric la conversación

-4PM según mi horario – respondió HyeSung, tomando un sorbo de su jugo de naranja

-está bien, le pediré a Bogeun que limpie mi agenda a esa hora – habló Eric,  sorbiendo su taza de café

HyeSung hizo un gran esfuerzo por no escupir el jugo que aún no terminaba por pasar por su garganta, al oír las palabras de su esposo.

-que Andy no me va recoger? – interrogó inmediatamente casi en shock

-no, lo haré yo… y también te llevaré a la universidad, así que apresúrate si quieres llegar a tiempo – respondió Eric, tomando el último sorbo de su café y levantándose de la mesa

-u-usted?.... pensé que…

-claro que no, te llevaré y recogeré todos los días de la universidad… - cortó Eric las palabras de su esposo, retirándose a su habitación por las llaves de su auto.

HyeSung quedó completamente en shock. Había esperado por librarse al menos unas horas de su esposo y pasar un tiempo solo disfrutando de la soledad del camino hacia la universidad. Con Eric llevándolo y trayéndolo todos los días, definitivamente iba a ser otro momento sofocante, encerrado en el mismo auto que su esposo.

-listo, ve a buscar tus cosas – regresó Eric al comedor, preparado ya para salir.

Con pasos pesados, HyeSung se dirigió a su habitación, tomó su mochila y siguió a su esposo hasta el estacionamiento.

-nervioso? – sonrió Eric al notar el rostro serio del muchacho sentado en el asiento del copiloto.

HyeSung dio una mirada vaga en respuesta a su esposo, asintiendo débilmente con la cabeza. Más que nervioso, se sentía incómodo yendo a la universidad, acompañado de su esposo.

Eric encendió el auto y la pareja salió del edificio.

El joven abogado Lee Minwoo, dio una agradable sonrisa cuando el ascensor se detuvo en el séptimo piso y caminó rumbo a la puerta del departamento que se había convertido como la entrada en el paraíso para él.

-ah eres tú, pasa… tengo que terminar de arreglarme – saludó Dongwan, dejando la puerta abierta para el ingreso del abogado

-yo también estoy feliz de verte – habló Minwoo con sarcasmo

-lo siento es que tengo un retraso… - dijo Dongwan, haciendo su camino al baño

-oh por Dios! Tienes un retraso?!... tranquilo Wannie, me haré responsable – exclamó el abogado de manera dramática, reteniendo al apuesto Dr. Kim por la muñeca

Dongwan observó a Minwoo con ojos curiosos por unos segundos hasta que su rostro empezó a tornarse en un rojo intenso.

-YAH!!! Cuál responsable! Estoy retrasado para una junta en el hospital!!

Minwoo soltó la muñeca del Dr. Kim y cayó en el piso, sujetando su estómago que empezaba a doler por las carcajadas. La expresión de horror, disgusto y confusión del Dr. Kim, era invaluable.

El Dr. Kim pateó un par de veces al abogado, antes de regresar al baño y terminar de arreglarse para salir.

-ya deja de reírte! Vámonos antes que se me siga haciendo tarde! – regañó Dongwan a Minwoo, quien seguía limpiándose las lágrimas por haber reído tanto

Minwoo siguió al Dr. Kim hasta el estacionamiento y ambos subieron en el auto del abogado.

-quieres parar ya! No es divertido! – volvió a regañar Dongwan abrochando su cinturón de seguridad

-lo siento…. Es que… tenías que haber visto tu cara!... – rió Minwoo un par de veces más para finalmente encender el auto y salir rumbo al hospital donde trabajaba el Dr. Kim

-tonto… - murmuró Dongwan después de unos minutos de silencio

-ya te dije que lo sentía… hey y ni siquiera me diste un vaso con agua! Se supone que desayunaríamos juntos! – se quejó el abogado

-culpa de quien y sus estúpidos chistes – respondió Dongwan con molestia

-está bien, está bien…. De veras estás retrasado?, podemos parar en una cafetería aquí cerca… - propuso el abogado

-tengo una reunión en 20 minutos, lo siento – se disculpó Dongwan con tristeza en el rostro

-está bien…. Te parece si te busco para almorzar? – propuso nuevamente el abogado

-ok, me recoges?, no quiero comer en la cafetería del hospital….es…. extraño – dijo Dongwan sus últimas palabras con voz débil

-aún no le has dicho a nadie eh?.... está bien, entiendo… - sonrío el abogado, tomando la mano del Dr. Kim

Dongwan sonrío al ver su mano y la de Minwoo entrelazadas. Minwoo aprovechó la luz roja del semáforo para inclinarse unos centímetros y besar los labios de su apuesto novio, el Dr. Kim.

-listo?... – habló Eric con voz suave al muchacho sentado a su lado dentro del auto.

Llevaban casi diez minutos estacionados frente a la puerta principal de la universidad.

HyeSung estaba muy nervioso, se sentía extraño asistiendo a una universidad dónde no conocía a nadie y peor aún siendo un completo extranjero, pues pasó toda su vida viviendo en Londres y Boston.

-quieres que te acompañe dentro? – sugirió Eric al notar el rostro dubitativo de su esposo

-no, puedo ir solo…. Adiós – HyeSung se dio valor finalmente y bajó del auto, sujetando su mochila con excesiva fuerza

-te recogeré a las 4pm – habló Eric mientras su joven esposo hacia su camino dentro de la enorme e imponente universidad.

Eric observaba como su esposo caminaba con paso firme y dubitativo a la vez. Definitivamente HyeSung estaba nervioso, pero decidido a empezar una nueva vida.

Eric observó la delgada figura de su esposo pasar entre algunos estudiantes y notó el cambio en su expresión. HyeSung se veía ahora emocionado, como si estuviera regresando a casa. Eric entonces tuvo la seguridad que este nuevo inicio, sería de gran ayuda para otro avance en su relación.

Pero su expresión pronto cayó, al notar las miradas de los estudiantes, fijas en su joven, adorable y excesivamente hermoso esposo.

-tranquilo, Eric, tranquilo…. Es sólo tu imaginación – se repetía mientras encendía su auto camino a sus oficinas.

HyeSung paseaba por los corredores, completamente perdido. El campus era enorme y las direcciones lo tenían confundido. Estaba en un lugar completamente nuevo para él y parecía que por un momento iba a perder la paciencia al no poder encontrar su salón de clases.

HyeSung caminó unos pasos más, sólo para encontrarse con otro corredor que daba hacia el mismo camino por el que ya había pasado más de tres veces.

-aish!! No entiendo esto!!  - exclamó en frustración con un adorable gesto en el rostro

A lo lejos, unos ojos que no habían dejado de seguir sus pasos desde que entró a la universidad, se aproximaba a paso lento.

-hola, estás perdido? – saludó la persona dueña de ese par de ojos

HyeSung observó al muchacho frente a él con mirada dudosa

-eres nuevo cierto?... puedo ayudarte si gustas, mi nombre es Jihoon – se presentó el muchacho, extendiendo su mano

HyeSung correspondió el saludo de manos y mostró la hoja con su horario de clases al muchacho.

-que coincidencia! Tenemos la misma clase, ven te llevaré al salón – dijo Jihoon, haciendo un gesto con su mano para que Hyesung lo siguiera

HyeSung dudó por unos segundos y luego empezó a caminar al lado del muchacho que lo esperaba con una sonrisa en los labios.

Luego de un par de horas y más relajado ya, HyeSung se sentía agradecido por la presencia de Jihoon, quién no sólo le había ayudado a encontrar sus respectivas clases y darle un rápido recorrido por todo el campus, sino que además le había presentado nuevos amigos con los que HyeSung ahora se sentía como si estuviera recuperando ese lado de su vida que había quedado atrás.

Por un momento, Hyesung se olvidó de todos los problemas que lo rodeaban, se olvidó de Eric, de su vida de encierro dentro del departamento, olvidó lo mucho que extrañaba su casa en Boston y hasta olvidó que fue llevado a Seúl contra su voluntad. Todo era nuevo y lleno de risas, las risas que por mucho tiempo no había sentido formarse en su hermoso rostro.

Y pendiente de esas risas y todas las expresiones que se dibujaban en su hermoso rostro, estaba Jihoon, completamente asombrado que una persona tan parecida a un ángel se haya aparecido en su vida.

-quieres dejar de mirar el reloj a cada minuto! – Minwoo perdió la paciencia al notar la regularidad e impaciencia con la que su amigo observaba el reloj de su oficina

-estoy nervioso!.... dejé a HyeSung solo en ese lugar… y sí se perdió dentro del campus?, si está vagando ahora por los corredores sin saber qué hacer….

-Eric, HyeSung no es ningún niñito y tiene una cosita llamada teléfono celular, si necesita algo lo más probable es que llame a Andy por ayuda – habló Minwoo tratando de tranquilizar a su amigo

Pero le expresión de Eric seguía estando intranquila. Minwoo podía intuir que había algo más que estaba molestando a su amigo.

-estás preocupado por que dejaste a tu esposito en un lugar lleno de jóvenes, inocentes y hermosas jovencitas con las hormonas alborotadas? – preguntó Minwoo divertido

Eric observó a su amigo con rostro no muy amable, antes de terminar por develar su frustración

-si hubieras estado ahí y visto como lo observaban esas niñas! – exclamó Eric finalmente

-vamos Eric!... esas niñas podrán mirarlo todo lo que quieran pero se desilusionarán cuando vean su anillo de matrimonio – tranquilizó Minwoo

La expresión de Eric cambió totalmente después de oír las palabras del abogado.

Era cierto, HyeSung estaba casado. Nadie se atrevería a acercársele sabiendo que estaba casado.

Una expresión de alivio se formó en el rostro del presidente de Systematic Company.

Lo que Eric ni el abogado se habían imaginado, era que HyeSung había dejado su anillo de matrimonio en casa, sobre la mesa de su tocador.

Hyesung no se sentía nada cómodo con la idea de tener que explicar a sus compañeros que a su corta edad, ya estaba casado y viviendo un semi-infierno al lado de su maduro esposo. 

No. Eso era algo que quería evitar. Su vida en la universidad debía ser lo más placentera posible, sin rastros de la terrible realidad que le tocaba vivir una vez fuera del campus.

-hey HyeSung, iremos a comer unas hamburguesas, quieres venir con nosotros? – ofreció Jihoon, al lado del grupo de muchachos que esperaban por una respuesta afirmativa por parte del delgado muchacho

-ehh… - el sonido de un claxón sorprendió a Hyesung, girando inmediatamente para reconocer el auto de su esposo a lo lejos.

-… lo siento tengo que irme, los veré mañana… adiós! – se despidió HyeSung mientras corría hacia el auto que esperaba por él

Los demás muchachos observaban mientras HyeSung desaparecía entre la multitud.

-quién es ese? – preguntó una de las chicas del grupo que había acompañado a HyeSung todo el día.

Todos los demás chicos, observaron al hombre que estaba de pie al lado del auto dónde HyeSung ingresaba del lado del copiloto.

-debe ser su hermano… - respondió Jihoon con tono de decepción.

Jihoon esperaba que HyeSung aceptara su oferta y seguir pasando el resto de la tarde en su compañía.