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“Taeyeon...estoy enamorandome de ti...” Esperé que contestara, pero no lo hacía. ¿La habré asustado...?. “Taetae...dime algo”

“Aigooo, qué culo tan gordo Phany-ah, kekeke, ¿has visto como se mueve cuando caminaaaaas?~”

“...¡KIM TAEYEON!” Golpeé su cabezón de ardilla y se levantó de golpe, chocando con mi frente. “¡Auch! ¡Eres una bruta!” Grité masajeando mi frente.

“¿Huh? ¿Dónde estamos Phany-ah?” Dijo frotándose los ojos con los labios hacia afuera.

“¿Estabas...hablando dormida?”

“Dae, omma dice que lo hago a menudo. ¿Pasaba algo?...OMO, mira que bonito Phany~”

Señaló hacia el mar, donde el sol estaba alzándose poco a poco, descubriéndose con timidez, el mar estaba teñido de naranja oscuro, era tan precioso que por un momento se me olvidó lo que estaba pasando aquí.

“Taetae...yo...”

“Se me acaba de ocurrir algo.~”

La miré con ojos cansados, otra vez mis esfuerzos se habían ido a la mierda. “¿Qué idea?” Seguí observándola, últimamente no puedo evitarlo, me hipnotizan sus ojos.

Abrí los ojos lo más que pude al ver lo que hacía. Se estaba desbotonando la camisa de pijama con una mirada traviesa. Una vez acabó, me la lanzó a la cara y a mi se me descolgó la mandíbula. ¿Pero qué planea esa loca?. “Taetae...¿qu-qué haces...?”

En lugar de responderme, se bajó los pantalones del pijama y después de lanzarmelos también a la cara, la vi correr hacia el agua y tirarse en bomba.

Tiffany aun no había asimilado lo que acababa de pasar, esa dork loca se había desnudado delante de sus santos ojos y después se había lanzado al agua como si fuese lo más natural del mundo, todo eso añadido a que la pobre chica acababa de declarar su amor por ella y ella había vuelto a fastidiarlo con sus niñerías.

Taeyeon empezó a mover los brazos desde cierta distancia dentro del agua, gritando el nombre de la contraria. Tiffany, que pensaba que se estaba ahogando o algo peor, se desnudó lo más rápido posible y se lanzó al agua, nadando hacia su pequeño cuerpo.

“¡Taetae! ¿¡e-estás bien!?”

“Dae~ solo quería que vinieses”

Tiffany cayó una vez más en el embrujo de sus ojos, tenerla así de cerca le hacía difícil respirar o pensar en cualquier cosa que no fuese ella. “Me habías asustado...yo...¡Achus!” Se abrazó su propio cuerpo comenzando a temblar.

“¡Yah! No tienes permitido resfriarte. Vamos a tu casa, aun es temprano para estas cosas.” Pero Tiffany no la dejó nadar hasta la orilla. Sujetó su brazo con firmeza y la miró a los ojos sonrojada.

“¿Phany-ah?”

“N-no quiero salir”

“¿Wae?” Dijo con una ceja alzada y media sonrisa en la boca.

“Porque...porque...me da vergüenza, estoy sin ropa”

“Aigooo, somos dos mujeres Phany, si quieres sal tu primero, no miraré.~”

“Vale, pero no mires que te conozco, byuntaeyeon.”

“DAEEE~”

Salí del agua poco a poco, tropezándome un par de veces por la fuerza de las olas en la orilla. Comprobé que la dork no estaba mirando y me vestí rápidamente. Me sentía rara con el cuerpo mojado y vestida, no es como en la ducha, es desagradable.

La dork salió del agua sin importarle que mi mirada estuviese atravesando su cuerpo con rayos X en los ojos y tranquilamente se acomodó la ropa. Después me echó su chaqueta por encima. Achus, Achus. Ugh...

“Vamos Phany, creo que te vas a resfriar si sigues aquí fuera mojada.”

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Entramos a casa agotadas. A mi siempre me ha cansado muchísimo nadar, es como tener que esforzarte diez veces más por dar un pasito.

Me tiré al sillón de boca y suspiré. Todo siempre me sale mal, estoy gafada o me han echado un mal de ojo o algo por el estilo.

“Yah, levanta de ahí, culo de mushroom. Tienes que ducharte y después baja a comer, ¿arasso?”

Giré la cabeza con desgana hacia ella. “¿Es obligatorio llamarme así? Podrías llamarme algo más bonito, dork.”

“Hum...” Puso los dedos bajo su barbilla con pose de estar pensando. “Pink baby~”

¿Me sonrojé?. No, me puse tan roja como un tomate maduro. “P-pero ta-tae, ese mote...”

“¡Yah! Vamos, vamos, a la ducha.~” Dijo dándome empujones hasta el baño de la planta de abajo.

Entré y apoyé todo mi peso contra la puerta. Como mi corazón no se relaje me va a dar un ataque cardíaco o algo así.

Coloqué la ropa limpia sobre la tapa del váter y tiré mi pijama con olor a agua marina al cesto de la ropa sucia. Una vez desvestida me eché un vistazo en el espejo.

“No soy fea, creo. No estoy gorda y tampoco demasiado delgada...tengo los ojos grandes y las pestañas también, tengo un buen trasero, aunque...no demasiado pecho, ¿tengo algo malo para que esa dork no se fije en mi...? Y si es así, ¿por qué antes me ha...”

Me puse colorada sólo al pensarlo. Esos besos desesperados y a la vez dulces en la playa y como se dejó caer sobre la arena, como me acariciaba el pelo entre los dedos, y como sus otros dedos acariciaban mi cintura. Sólo de pensarlo se me eriza toda toda la piel.

“¿Phany-ah? ¿estás bien? No escucho el agua caer y me estás preocupando”

“Dae, estoy bien, es que no sabía qué ponerme~”

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Tiffany salió de la ducha vestida con unos shorts blancos, camiseta blanca y una chaqueta rosa, y la toalla enrollada en el pelo. Caminó hasta el salón buscando a la dork. Los animalitos que ahora viven en su tripa la advertían contínuamente de que la echa de menos.

“Taetae~ ¿dónde estás?”

“Cocina Phany”

Correteé hasta la cocina con pasos ligeros y ahí estaba, ese zoológico en mi tripa queriendo salir como una manada de elefantes. “¿Qué haces de comer?~”

“Algo ligero, tenemos que ir a un lugar en cuanto terminemos de comer. Espero que te guste la ensalada de pasta.~”

“¿Dónde vamos?~¿Dónde, dónde, dónde~?”

“Vamos a la peluquería.~” Dijo sonriendo con todos los dientes, mostrando su pequeño hoyuelo de la barbilla.

“Uh...¿peluquería?, ¿qué se te ha ocurrido esta vez?” Tragué la comida, y de paso también el nudo en mi garganta. Tiffany no debes mirar sus labios en momentos así.

“Quiero que recordemos estas vacaciones, asi que, ¿por qué no nos hacemos un cambio radical? Será divertido Tippany~ podrías ponerte el pelo rosa, ya que te gusta tanto kekeke”

“Ro...sa...¿estás loca? No pienso ir por ahí con todo el pelo rosa, culo de pato. Además podríamos recordar estas vacaciones de otra manera--” Me tapé la boca en cuanto terminé de soltarlo. Tiffany, ahora te preguntará, ¿lo sabes, no?.

“¡Yah! No tienes por qué llamarme culo de pato.~” Se dio la vuelta y se lo acaricio, consolándole como si lo hubiese insultado. Y yo, que soy inteligente me quedé mirándoselo sin querer.

Por suerte a esa dork no se le ocurrió preguntar...

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Una hora después, ambas muchachas estaban de camino a la peluquería habitual de Tiffany.

Taeyeon, después de hacer un berrinche enorme, saltando aquí y allá alrededor de la contraria, poniendo ojos de cachorro, sacando los morritos e incluso intentando hacer aegyo, consiguió convencerla.

A Tiffany nada de eso le había afectado, hasta que empezó a hacer un adorable aegyo fallido, que incluso resultaba más mono porque había fallado en ser cute, como ella lo llama.

Y aquí están finalmente, en la puerta de la peluquería.

Taeyeon pasó primero y saludó a todas las trabajadoras alegremente. La morena rió en silencio viéndola tan feliz, como una niña pequeña a punto de hacer una travesura, y realmente esto parecía una travesura, ¿qué iba a decirle su padre cuando viese el “cambio radical” en su pelo?. Tragó saliva pensándolo.

“¡Tiffany! Cuánto tiempo, ¿cómo estás?, ¿cómo está tu padre?” Una señorita bajita, un poco rechoncha de cara la saludó con una gran sonrisa en la boca. Esta señorita era la peluquera de siempre de Tiffany, y Tiffany siempre salía contenta del lugar gracias a su habilidad con las tijeras.

“¡Sunye! Estamos muy bien, gracias por preguntar.~ Ah, ésta es mi...amiga, Kim Taeyeon, está en mi casa de vacaciones unos días, es un poco infantil así que no tomes en cuenta su actitud~” Dijo sacándole la lengua a la contraria para fastidiarla.

“¡Yah!, yo no soy infan--”

La bajita fue interrumpida por la peluquera de Tiffany. Se la llevó hasta una esquinita para lavarle el pelo soltando risitas por la cara sorprendida de la contraria.

Tiffany fue detrás de ellas riendo también. Si algo le gustaba de su peluquera, era su lema, “menos hablar y más trabajar” y por eso tenían tanta clientela siempre.

“Taetae~no te preocupes, a Sunye no le gusta nada tener esperando a sus clientes y por eso te ha secuestrado. Ah, pero no te relajes demasiado, puede que te ahogue ahí si te portas mal” Dijo con una mirada sombría.

“¿Ji-jinjja?” Dijo con cara de pánico la dork.

“¡Tiffany! No asustes a mi nueva clienta favorita.~”

La dork miró a la peluquera con esperanza en sus ojos, se había tragado el cuento de que moriría ahogada en el lavabo si no se portaba bien, así que oír “su nueva clienta favorita” fue un alivio para ella.

Tiffany la miró con desaprobación, sus celos estaban en ebullición. Estaba a punto de explotar y echar fuego por la boca y las orejas, llevarse a Taeyeon a otra peluquería, besarla en cuanto entrasen por la puerta para marcar su territorio y después gritar que es suya.

Pero no es suya.

La peluquera observó detenidamente las miradas de ambas, dirigiendo los ojos a una y después a otra. Sonrió de lado planeando toda clase de travesuras.

“A ver, Taeyeon, ¿qué quieres que te haga?” Dijo guiñando un ojo la peluquera, sonrojando a la dork enormemente.

Tiffany lo vio todo. Apretó los puños hasta que sus dedos se pusieron blancos. Por la nariz le salía vapor ardiente y estaba apretando los dientes entre sí, intentando no explotar.

“Taeyeonie quiere teñirse el pelo rubio, Sunye unnie.”

“Aigo, ¿qué quieres, ser aun más guapa, Taeyeon?~ te quedará perfecto, tu piel es muy blanca y suave. Estoy segurísima de que estarás preciosa.”

A Tiffany se le desencajó la mandíbula. ¿Era su imaginación o Sunye estaba flirteando con Taeyeon?. Pensarlo no le gustó en absoluto, así que se sentó al lado de la dork y cogió su mano con posesión.

La peluquera sonrió en su interior victoriosa, eso es exactamente lo que pretendía.

“Veamos Taeyeon, estos son los tonos de rubio que tengo, escoge el que más te guste” Dijo mostrándole un cuaderno lleno de pruebas de colores diferentes.

La dork escogió un rubio bastante claro, prácticamente blanco y se acomodó en el asiento.

Pronto su pelo estaba todo recogido y envuelto en papel de plata, haciendo parecer que estaba calva. La morena estalló en carcajadas dando palmas con las manos frenéticamente al verla así.

Sunye empezó a trabajar en el pelo de Tiffany. Se había decidido por teñirse el pelo rojo, llevarlo rosa le parecía demasiado y el rojo al menos era un color más natural para llevar como una persona normal.

“...Y Tiffany llegó de California con todas las puntas quemadas, desde entonces le digo que no use la plancha a máxima potencia si quiere tener el pelo sano, tu en cambio lo tienes muy bien Taeyeon~”

“Omo~ ¿de verdad? Yo creí que mi pelo era un desastre.” Dijo Taeyeon sonriendo con todos los dientes y su particular hoyuelo en la barbilla.

Tiffany estaba a punto de tirar una silla a la cabeza de la peluquera. ¿Por qué tenía que flirtear precisamente con Taeyeon?.¿Es que no hay más chicas? De echo ni si quiera sabía que Sunye fuese de la otra acera.

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“Kekekeke~ Tippany es muy escandalosa y siempre se enfada cuando hago bromas. Tu las aceptas bien, unnie.”

Ya llevaban 3 horas en la dichosa peluquería, y Tiffany no tenía idea alguna de cómo estaba soportando ver flirtear a Sunye con la chica de la que había descubierto recientemente estar enamorada.

Se miró al espejo cada momento, con la boca tan abierta como fuese posible. No se iba a mentir a sí misma, el pelirrojo le quedaba de muerte, de muerte lenta y dolorosa.

La dork apareció detrás de ella, había acabado de enjuagarse el pelo y se iba a sentar a su lado, cuando vio a Tiffany, parando en seco en el lugar.

Abrió tanto los ojos que se iban a escapar de sus órbitas. Tiffany estaba incluso más guapa que antes, añadiendo un toque “y” y más pálido a su rostro. Empezó a babear literalmente y Sunye se ocupó de secar su boca con la toalla, empujándola para que se sentase y poder acabar su trabajo.

“Ti-tippa--”

“Shhh, luego os dais la opinión de mi estupendo trabajo, ahora déjame acabar para que os podais ir y seguir disfrutando de vuestra cita” Dijo la peluquera guiñando un ojo a Tiffany.

Entonces Tiffany lo entendió, Sunye estaba intentando ponerla celosa para que explotase y dijese lo que había en su mente en voz alta. Por desgracia Tiffany es lenta y no se había dado cuenta hasta ahora de su maligno plan.

“Y...un último retoque...¡Ya está! Estais preciosas, ¿puedo haceros una foto para la publicidad de la peluquería? Sois mis clientas más guapas.”

“Aigo...no exageres Sunye unnie~ ¿Taeyeon qué opinas de una foto?”

“Dae~ hagamos una.”

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Estabamos en mi coche de nuevo. Cuando salimos de la peluquería, la gente se nos quedó mirando; algunos soltaban suspiros, otros soltaban piropos y otros, más bien otras, tenían cara de envidiarnos.

Quizá no fue tan mala idea.

Miré hacia mi choffer, creí que nunca podría enamorarme de alguien, pero supongo que me equivoqué, Taeyeon con el pelo rubio, ligeramente ondulado, la frente al descubierto...madre mía, si esto no es belleza yo no se qué puede serlo.

Nos encontramos con un semáforo en rojo, y yo deseé en mi mente que se girase hacia mi y aprovechar este momento en besarla hasta que comenzasen a pitarnos.

Por desgracia no fue así...

“Aigo...”

“¿Pasa algo Tippany?”

Levanté la mirada de mi plato de pasta carbonara, llevándola hasta sus ojos y bajando enseguida hasta el plato de nuevo. Ugh, es tan difícil mirarla ahora...

“¿Tippany?” Susurró cogiendo mi mano libre.

Tragué saliva y después de suspirar la miré a los ojos. “No...no pasa nada” Sólo que todo sería más fácil si no fueses tan guapa, preciosa, amable, graciosa, simpática y perfecta...

“¿Estás segura? No te ha molestado hacer esta locura conmigo, ¿no? Estás preciosa Tippany”

Me sonrojé tanto que me dolían las orejas por exceso de calor en la cabeza. “T-tú...también lo estás”

“¿Jinjja? Creí que no podría quedarme bien un color tan claro, tu peluquera es muy buena~”

...¿Cuánto más tendré que soportar que diga cosas bonitas de otra gente?. La miré a los ojos, decisiva, ahora debía ser la definitiva.

Aparté ambos platos hacia un lado de la mesa y sus ojos se tornaron confusos. Yo pasé de su confusión. Eché medio cuerpo encima de la mesa, quedando a escasos centímetros de sus labios; miré su garganta, vi cómo tragaba el nudo que se le había formado, subí y subí la mirada, hasta llegar a sus ojos.

“Taeyeon”

Me miró.

El tiempo se detuvo.

Escapó de mis labios como la frase más dulce del mundo.

“Estoy enamorada de ti...”

Y esta vez, lo escuchó, perfectamente.

*Hace una aparición. Le cae una montaña encima* Hola (?) lo siento muchisimo muchisimo por no actualizar en casi un mes >.< he estado fuera de mi casa y no podia escribir~ espero que leais mi actualizacion porque es bonita y nose 3 

Actualizaré varias veces esta semana, lo máximo que pueda.~ (Si me dejais muchos comentarios claro :D ) 

Nos vemos chicos.~ Espero que os haya gustado la actualizacion, como podeis ver, la dork patosa volvio a estropear un momento romantico con tiffany, pero al final tiffany volvio a tener lo que hay que tener y se lo dijo con la voz alta y clara ^^ 

¿Cual sera su reaccion?~ 

Lo veremos en el proximo episodio *insertar musica dramatica aqui*

MjPinkGangsta