Pasaron unos segundos, cuando sus labios empezaron a moverse al compás de los míos. Un millón de sentimientos estaban pasando entonces por mi corazón, un millón de pensamientos por mi cabeza, demasiada información que absorber, me estaba mareando...

 

 

Qué dulce beso...sus labios son tan suaves...

 

Me acerqué un poco más a ella sin querer y apreté su mano, mis ojos estaban cerrados fuertemente. Estaba adentrándome demasiado en este beso. No tenía ni idea de cómo ella se encontraba, o qué cara tenía, o si también tenía los ojos cerrados, o si cuando me separase se iría para siempre. Pero es que...

 

 

 

“Mphh...”

 

 

Pero es que me está correspondiendo, ha sido ella quien ha empezado a mover sus suaves labios con los míos, nunca me habían besado así...

 

 

“¡MPHH!”

 

 

¿Qué es eso que oigo todo el rato? Abrí los ojos y me separé de ella, completamente sonrojada. Observé detenidamente su cara, estaba respirando agitada, su pecho subía y bajaba, subía y bajaba con dificultad...aun tenía los ojos cerrados, las mejillas rosas y la boca abierta, creo que la he dejado sin aire.

 

 

 

“Taetae...”

 

 

No sé cómo tuve el valor ni de pronunciar su nombre...”¿Tae...tae?” Mierda, Tiffany, ¿qué acabas de hacer...? ¿Has pensado en lo que acabas de hacer?.

 

 

 

“Taey---”

 

 

“No.”

 

 

“¿N...no?”

 

 

Después de oír ese “no” juro que se me escapó el alma y el corazón no me quería latir. ¿Qué significa ese “no? Por dios dime que significa...

 

 

 

“Ya se qué ibas a decirme...ehem...admitiré que me has tomado por sorpresa y...”

 

 

No podía escuchar lo que decía, mi mente estaba concentrada en su boca moviéndose, pero mis oídos habían bloqueado cualquier sonido proveniente de ella.

 

 

“...Y Jessica también me ha besado amistosamente, así que no te preocupes, de vez en cuando no me importa y...”

 

 

 

“¿Perdón?.” NO he oído el nombre de esa chica, ¿verdad?. Sí lo has oído Tiffany. NO.

 

 

 

“Que Jessica también me besó una vez, es algo normal entre amigas...”

 

 

 

“...Kim Taeyeon, vayámonos a casa.”

 

 

 

“Waeeee no quiero irme todavía.”

 

 

Me agarró del brazo metiéndome de nuevo en la cabina, suspiré cansada. ¿Quién habla de algo así después de que la besen?...Un momento...¿su mano está...temblando?.

 

 

“No quiero salir de aquí, espera.”

 

 

Pocas veces veía a la estúpida dork seria, así que obedecí y esta cosa volvió a subir y subir y subir hasta que las personas sólo parecían hormiguitas corriendo de un lugar a otro.

 

En cambio nosotras estábamos muy juntas, el aire denso, incómodo y extraño, más aun que nuestro primer día juntas. Ni siquiera había tenido tiempo de pensar en por qué había hecho eso, cuando me empezó a empujar contra el cristal de la cabina lentamente, entrelazando suavemente mis manos con las suyas y mirándome con las mejillas tan rosas que parecía que se había aplicado colorete en ellas.

 

 

“¿Taetae...?”

 

 

“¿P-p-por qué...lo has hecho?”

 

 

 

“Yo...” No lo sabes ni tú, Tiffany, ¿como piensas contestarle?.

 

 

“¿Tú...?”

 

 

 

Boom. Y luego otro Boom. Miramos detrás de nosotras, distrayéndonos de lo que estaba pasando aquí dentro. Un espectáculo de fuegos artificiales había comenzado en el enorme lago situado en el centro del parque de atracciones, la dork se pegó al cristal de la cabina con sus manos como ventosas, babeando por la bonita vista que estábamos compartiendo...

 

 

En mi cabeza en cambio sólo se repetía la escena de antes...

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

“AIGOOO estoy cansadísima.”

 

 

Cerré la puerta suspirando, como todo el camino, suspirando sin parar. ¿En serio la ha besado...Jessica?...No,no,no. No tiene que importarte Tiffany, sólo sois amigas. Ya sé que tienes razón estúpida mente, pero es que yo...MI DIARIO.

 

 

“Taeyeonie, voy a darme una ducha, prepara ramen instantáneo o algo así, ahora vuelvo.”

 

 

 

 

 

 

 

 

 

3 de Agosto de 2014.

 

 

DIARIO. Oh my gosh, tengo tanto tanto que contarte, pero no es el momento, necesito sacar algo de dentro de mi.

 

He besado...a Taeyeon.

 

...El problema es...que...que...que...

 

Me ha gustado.

 

 

 

 

“Oh my god no acabo de escribir eso...”

 

 

“¡PHANY-AH LA CENA!”

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Bajé al salón con el pijama rosa puesto, y encontré a la dork paralizada con la boca abierta y el móvil en la oreja, sin articular palabra. ¿Qué habrá pasado...?.

 

 

 

“A-arasso omma...estaré allí...sí, estoy comiendo bien...cuídate, adiós...”

 

 

“¿Taetae?” Me acerqué a ella un tanto curiosa por su conversación.

 

 

“Phany...cámbiate de ropa, nos vamos de fiesta”

 

 

“¿Huh? ¿de fiesta? ¿ahora? No entiendo...pensé que íbamos a quedarnos a comer palomitas y ver películas de miedo”

 

 

“Sí pero...eso puede esperar, venga, vamos a cambiarnos.~”

 

La dork me empujó hasta mi habitación y al darme la vuelta ya la tenía sin camiseta delante de mis santos ojos. Me dí la vuelta completamente colorada en menos de un segundo y comencé a jugar con el borde de mi camiseta rosa de pijama. Tiffany~ahora estará sin pantalones, ¿no quieres mirar? YAH ¿por qué querría mirar algo así?. Porque es tu amiga no pasa nada si miras.~

 

Y así lo hice, me giré y ahora llevaba una camisa color vainilla con los botones superiores abiertos y debajo...unas braguitas moradas y NADA más. Hola, no te quedes mirando Tiffany, vístete tu también o va a pensar que eres una ertida.

 

 

 

“Phany-ah, ¿me dejas tu maquillaje?”

 

 

Oh my gosh...casi me pilla ”Claro, claro, está ahí...” señalé en mi escritorio una cajita rosa.

 

 

Me decidí por un vestido blanco un tanto simple, tampoco sabía a qué tipo de fiesta quería ir la dork, así que este es el adecuado. Me deshice de mi camiseta y mis pantalones a la velocidad de la luz y bajé la cremallera a mi vestido, colocándomelo lo más rápido posible.

 

 

“Mierda...la cremallera”

 

 

“Déjame ayudarte con eso Phany-ah~”

 

 

Se me puso detrás colocando una de sus manos en la parte baja de mi cintura, llevándola hasta mi pelo mientras subía mi cremallera con su otra mano para que no se quedase atrapado en ella.

¿Por qué me provocas escalofríos...?.

 

 

“Gracias Taetae...”

 

 

“Se te han puesto los pelos de punta, deberías coger una chaqueta~”

 

 

Si tu supieras que no es precisamente por el frío...

 

Nos metimos en mi coche, la dork quiso conducir así que la dejé. Aproveché este paseo para mirarla sin parar, hacía tiempo que no podía observarla detenidamente, tiene un perfil un poco masculino, pero a la vez cute y me parece muy llamativo.

 

El coche paró de un frenazo en un semáforo en rojo y ella se giró hacia mi, yo lo veía todo como a cámara lenta, la luz roja del semáforo se mezcló con las luces blancas de las farolas cercanas, iluminando su oscura sombra de ojos y esos ojitos ardientes y penetrantes.

El tiempo parecía haberse parado en todas partes, menos en nosotras...soltó el volante y se inclinó hacia mi, yo aun lo veía todo a cámara lenta...sólo una respiración más, cayendo en mis labios, su respiración...mis ojos comenzaron a cerrarse por si solos... y entonces volvería a pasar...sólo...un poco...más...

 

 

 

“¡TE VAS A MOVER O QUÉ JODIDA INUTIL!, ¡MUEVE ESE MALDITO CACHARRO DE LA CARRETERA!”

 

 

Despertamos de nuestra pequeña burbuja al oír el tráfico tras mi coche, nos separamos en cuánto oímos el primer pitido con mucho nerviosismo. Taeyeon arrancó de nuevo y yo me removí nerviosa en mi asiento, dirigiendo mi mirada a la ventanilla. Qué calor hace de pronto...

 

Unos minutos después Taeyeon pareció encontrar un lugar adecuado. Aparcó el coche no muy lejos de la entrada a la discoteca y pasó uno de sus brazos por mi cintura cuando entramos, creo que quiere protegerme o algo así, pero...no es necesario que lo haga.

 

 

 

“Vamos a por bebidas Taeyeonie~”

 

 

“Andwae” Dijo agarrándome del brazo.

 

 

“¿Wae?”

 

 

“Yo no puedo beber, en cuanto bebo algo con alcohol me quedo dormida”

 

 

“Awww, entonces iré yo a por algo.” Dije estirazando sus mejillas.

 

 

 

Me metí entre el mogollón de gente restregándose como perros en celo, intentando esquivar el mayor número posible de ertidos que te meten mano y luego se disculpan, como si no se hubiesen dado cuenta. Llegué cubierta en sudor a la barra y me pedí un vodka rojo porque es lo único que me gusta. La barman se movía frenéticamente por todo lo largo y ancho de la barra sirviendo copas tan rápido que se me cansaba la vista sólo al mirarla, su piel era muy morena, era alta y bastante guapa, tenía que admitirlo, parecía una chica muy activa y vivaz. Pero esto no me incumbe por supuesto, me dí la vuelta y las luces chocaron en mi vista.

 

Cuando iba a volver a mi lugar, cierta dork enana me apretujó contra la barra de la discoteca, completamente sonrojada, dejándome sorprendida.

 

 

 

“P-p-perdón, es que hay tanta gente y soy tan bajita que me han empujado y...”

 

 

¿Bajita? Esta noche no me parecía bajita, se había puesto las botas con el tacón más alto que había visto en mi vida, así que me llegaba a los ojos, es raro para mi.

 

 

“No importa Taetae, vamos a bailar.~”

 

 

La dork intentó resistirse, pero al final encontramos un pequeño hueco entre la gente saltando, bailando y frotándose y empezamos a movernos al ritmo de la música.

Yo siempre he sido malísima bailando, pero la dork...no me esperaba esto en absoluto. Su cintura parecía tener vida propia, se movía un tanto avergonzada frente a mi, pero en ningún momento dejó de bailar. Decidí abrazarme a ella para que bailásemos juntas y eso hizo que se avergonzase más, en todo el tiempo que estuvimos bailando no apartó las manos de mi cintura, pero no me miró a los ojos ni una sola vez.

Su tacto era casi invisible, me tenía sujeta tan suavemente como si fuese el objeto más delicado e importante del mundo. Mis ojos no se apartaron en ningún momento de ella, para mi y mis ojos ella es lo único que se encontraba cerca, su perfume con olor a vainilla lo único que podía oler, y sus suaves manos lo único que estaba tocándome.

 

Creo que yo no soy la única que estaba dando vueltas y vueltas a lo que estuvo a punto de pasar en el coche.

 

 

 

“¡Voy a por otra copa Taeyeonie!” Dije gritando un poco. Ella me miró una milésima de segundo como para afirmar que me había oído.

 

Me fui a la barra de nuevo sin intentar tocar cuerpos sudorosos y me quedé un momento allí, pensando el por qué de venir a bailar tan de pronto...Miles de cosas se me estaban pasando por la cabeza y sólo una era buena, aunque realmente no sabía si debería ser buena...

 

 

 

“Aigo...”

 

 

“¿Estás sola? Qué chica tan atractiva y solitaria, ¿no?.”

 

 

Giré mi cabeza hacia esa voz profunda que resonaba en mi oído izquierdo. Era uno de los chicos de mi clase, tenía toda la frente roja y se tambaleaba un poco. Esto me da mala espina...

 

 

“¿Te comió la lengua el gato? Tú eres Tiphany Hwang, ¿verdad? ¿por qué no te vienes conmigo?”

 

 

Intenté escapar lo más rápido posible, pero ese gorila borracho me atrapó llevándome por la salida de atrás del local. Empecé a temblar por los recuerdos que venían a mi mente de la noche en el baile de fin de curso, la noche en la que casi...

 

 

“Por favor...no me hagas daño...” Patético Tiffany...

 

 

“No voy a hacerte daño precisamente, preciosa...” Se acercó a mi cuello y le dio un brusco mordisco haciéndome gritar. Antes de que pudiese llamar la atención de nadie, puso su enorme mano de gorila en mi boca y empezó a frotar su asquerosa entrepierna con la mía, sólo el contemplar su patética cara de placer me daba nauseas. Cerré los ojos esperándome lo peor...

 

Pero nada, no pasó nada. La mano que estaba en mi boca se fue lentamente, yo me tiré al suelo y me hice una bolita esperando su próximo movimiento, no era capaz de abrir los ojos. No puedo...

Pero no pasaba nada. Me atreví a abrir un ojo, no había nadie. Abrí el otro y escaneé el lugar, estaba sola en el callejón. Unos segundos después escuché unas voces algo lejanas, reconocí una de ellas.

 

“Taeyeonie.”

 

 

Corrí hasta donde se oían las voces, justo cuando giré la segunda esquina del local encontré a la dork sentada en el suelo con la nariz sangrando. Solté una maldición y me arrodillé frente a ella, examinando cada parte de su carita de bebé...adoro su carita de bebé...

 

 

“Tippany...Tippany, tranquila, estoy bien, sólo me ha dado un puñetazo...”

 

 

“Taeyeonie...tu carita de bebé...¿estás bien? ¿te duele? Vamos a casa...y-y-yo conduzco yo...”

 

 

“Shhh, no vamos a ninguna parte hasta que te calmes, no quiero tener un accidente o algo así.¿Mi carita de bebé? ¿eso es lo que piensas de mi?.” Me dijo sonriendo de lado con cara traviesa.

 

 

No me puedo creer que aun en esta situación no esté llorando traumatizada, ¿no puedes ver lo que me causas? Creo que estoy empezando a darme cuenta...cuenta de que...

 

 

”V-vale...ven, sentémonos allí.” Debo interrumpir estos pensamientos...

 

 

“¿Cómo lo haces para meterte siempre en problemas?”

 

 

Ahora estábamos sentadas en un banco apartado del parque frente al local. Saqué un pañuelo rosa y comencé a limpiar su nariz, de vez en cuando resoplaba frustrada porque no dejaba de sangrar. Una vez harta, cogió mi mano suavemente y arrojó el pañuelo al suelo, mirándome otra vez con esa mirada que me quema la piel.

 

 

“¿W-wae?”

 

 

“Tippany...” Deugun Deugun

 

 

“¿Sí?” Deugun Deugun

 

 

“Mi omma...quiere que vuelva a casa, tengo que volver a casa en dos días...”

 

 

No...

 

 

“Tippany...v-v-ven conmigo”

 

 

Taeyeon...

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Hola mis queridos pink monsters <3 como soy una buena autora, que os quiere mucho mucho mucho *insertar corazoncitos rosas aquí* he actualizado antes del miercoles, y además es una actu muuuuuuuucho más larga y llena de momentos ñoños para que vomitéis arcoiris <3 así que comentadme mucho, dadme lof y nos veremos prontito. El próximo capítulo será muy importante, así que cuanto más me comenteis más pronto actualizaré o/ 

Nos vemos~ MjPinkGangsta