Capitulo 8: Una noche mágica

[Narra Haneul]

Lo recordaba tan bien, perfectamente bien, mejor que los detalles de lo que hice el día de ayer, era cuando sólo era una joven, una aprendiz de magia, cuando mis poderes aún no estaban completamente desarrollados, cuando mis intuiciones eran confundidas torpemente con mis impresiones personales, fue ahí donde la conocí.

En una de las acumulaciones más grandes de polvo de estrella, en Achernar la estrella de la magia, un lugar con el clima más raro de lo que puedo recordar, podía llover ese mismo día, a los 20 minutos podía nevar, y en pocas horas el calor era insoportable, indudablemente una ciudad mágica, la gente que habita ahí son magos y brujas que enseñan el arte de la hechicería a las personas que potencialmente tienen un don. La vida era tranquila se convivía en perfecta armonía con todos los seres vivos del lugar desde aves del tamaño de un pulgar hasta flores del tamaño de una persona.

Ese día el primer día que la conocí, tuve la impresión de que ella sería alguien de grandes poderes sin embargo mi intuición me decía que no debía de confiar. En esa época no conocía la magnitud de mis presentimientos y tome aquel pensamiento sólo como uno más. Quizás tenía miedo, en 2 años mi maestra no había aceptado a nadie más…

Una mañana de otoño mientras caminaba por el jardín de pasto verde alto, y distintos arbustos y plantas silvestres, escuche la voz de mi maestra llamarme, así que me apresuré a regresar por aquel jardín hasta las proximidades de la pequeña vivienda en la que ahora habitarías 3 personas, una vivienda de madera pequeña con sólo lo necesario para estar cómodas, 3 habitaciones una para cada una. Me apresuré pero al llegar al pequeño lago que había desacelere el paso, por fin la conocía a unos 15 metros de mí la vi.

Ella era joven y hermosa realmente, su piel contrastaba perfectamente con su cabello rojo y rizado y tenía una mirada perspicaz, penetrante y dura que nunca alcancé a descifrar.

-Hola bienvenida- dije mientras sonreía mientras cruzaba un pequeño puente formado por las gruesas ramas de un árbol, el lago debajo mío de un color verde no dejaba de agitar ligeramente su superficie.

-Hola, gracias…-dijo con una sonrisa que me hizo olvidar de mis preocupaciones- ¿Eres Haneul? ¿La otra aprendiz?- pregunto mirándome curiosa.

-Así es y tu eres la nueva aprendiz, no es así?- pregunte mientras terminaba de cruzar el puente a menos de un metro de ella.

-Sí, me llamo Irídea.-dijo con una sonrisa. Mientras nos saludábamos con las manos.

Y así comenzó lo que había sido una de las amistades más importantes para mí. Así pasaron los años, unos dos más y yo tenía 19 años, en esa época, mi nombre ya comenzaba a ser conocido, mis poderes habían aumentado ampliamente y mi control sobre ellos era muy bueno, e Irídea comenzaba su camino, ella tenía talento pero no sabía cómo controlarlo.

Daira, era una bruja poderosa, muy sabía que tenía amplios conocimientos tanto de lo que la ente denomina herbolaría, magia blanca y magia negra, conocía de las 3 y las enseñaba de manera neutral, a reconocer cada una, y saber como es que se realizaban, Una bruja cuya piel morena tostada, y pelo rizado negro adornaban su hermosa sonrisa, su mirada de ojos cafés chocolate era profunda, pacífica y misteriosa que apenas había cumplido los 70 años, era tan reconocida por la juventud que acompañaba tal belleza y sabiduría. Reconocimiento que ninguna bruja o mago sabio podía tener a tan corta edad y que los más sabios de unos 500 años podían ostentar. Las edades en Achenar eran diferentes de las de mi mundo, de nuestro mundo.

Un atardecer de plata, las 3 lunas que se encontraban sobre nosotros brillaban por primera vez en muchos años alineadas. Estábamos en el jardín aprendiendo a cómo manejar la ilusión, crear en la vista de otra persona lo que quisiéramos sin cambiar nuestra forma.

-Bien este es el último ejercicio, usen el agua para crear una ilusión, sobre ustedes mismas- dijo Daira mientras nos mostraba en ella como hacerlo. Levanto una burbuja de agua y la llevo a su cabeza cerró los ojos y murmuro unas palabras y para cuando la burbuja se rompió en pequeños cristales,  a nuestros ojos era la viva imagen de Irídea.

Irídea comenzó primero y tomo mi forma que realmente fue asombroso verme de aquella manera. Y finalmente fue mi turno para convertirme en Daira. Las ilusiones son algo importantes, algo completamente mágico, dependen de la credibilidad que logre tener tu ilusión en la persona para seguir. Cuando comenzamos a jugar, muchos gestos propios de cada una comenzaron a dar por terminada la ilusión.

Nos sentamos esa noche a observar las estrellas y poco antes de que la primera luna se ocultara, Daira se levanto y nos miro.

-Es todo por esta noche. Que las estrellan cuiden de ustedes.-Dijo mientras comenzaba a caminar.

-De la misma manera, Daira- contestamos ambas mientras comenzábamos a sacar algunas piedras de río.

-Haneul ¿puedes acompañarme  un momento, por favor?- dijo sin mirar atrás.

-En seguida-dije mientras me ponía en pie y le hacía señas a Irídea de que volvería pronto.

La seguí en silencio por todo el jardín hasta que cruzamos el pequeño puente, ella se volteo a mirarme:

-Espera un momento-dijo moviendo los labios solamente, mientras tomaba mis manos.

Sentí una fuerza distinta envolverme y a los pocos segundos estábamos en un lugar que yo no conocía. Mire a mi alrededor y descubrí una cascada enorme rodeada de arboles que en mi vida había visto, grandes gruesos de amplias ramas y hojas de distintos colores, mire más cerca de la cascada y descubrí una lago que servía de enlace con un río… Me mire asustada a verle.

-¿Qué hacemos aquí?- pregunte completamente sorprendida….-En…en…¿Dónde estamos?

-Haneul este es Scutum, es uno de los santuarios del Universo de los cuales pocas personas conocen su ubicación.- dijo mientras se acercaba al lago.

-Y…. Pero ¿Por qué me ha traído aquí?- pregunte solemnemente mientras la empezaba a seguir

-Cómo bien sabes, todos los mundos están regidos por este universo, pero este a su vez esta resguardado por los 5 amuletos del universo. Estos amuletos son cuidados por personas con magia o con algún tipo de conexión espiritual con el universo. Yo, Daira de Anchenar soy uno de los 5 guardianes. -Dijo mientras me miraba seria.

No supe que decir, sabía que era una bruja poderosa, completamente conocida pero jamás pensé que fuera alguien que resguardará algo de tal magnitud. Ni si quiera imaginaba que algo tan grande como todo el universo se rigiera o estuviera protegido por 5 personas, por cinco seres de diversos mundos.

-Sé que es mucha información de momento pero necesito que lo comprendas, sino por lo menos de momento lo aceptes.

-Está… está bien… es sólo que no imaginaba algo así….-respondí mientras miraba anonada la caída del agua….

-Haneul, como deber de cada uno de los 5 guardianes es nuestro deber preparar a nuestro sucesor desde el momento en que estemos seguros de que es la persona adecuada. Y yo te he escogido a ti.- dijo mientras me mostraba su hermosa sonrisa.

-¿Yo…? ….-murmure…-Pero… ¿Cómo….?... ¿Por qué?....-tartamudee.

-Ya habrá tiempo para explicaciones, de momento tienes que conocer a los otros 4 guardianes. Vamos- dijo mientras me tomaba de la mano y me acercaba a un lado del lago, donde alcance a vislumbrar una pequeña cabaña de madera. Nos frenamos repentinamente cuando una persona salió a nuestro encuentro:

-¡¡Daira!!¡Qué gusto volver a verte!- dijo una voz de un hombre de unos 36 años de edad, al menos la edad de mi mundo.

-No exageres, nos vimos hace una semana.-dijo Daira mientras le abrazaba

-Ya lo sé, ¿Tienes que ser tan precisa para todo?-dijo el hombre mientras la soltaba y me miraba- ¿Y quién es la joven? ¿Haneul?- pregunto mientras me miraba.

-Así es, Haneul, te presento a Minkabh.- Dijo Daira mientras comenzaba a adentrarse en la casa.

-Un gusto…-respondí aún dudosa… mientras ambos entrabamos a la casa. La casa era perfecta, muy acogedora pero sencilla a la derecha de la puerta había varios estantes, como una biblioteca, repletos de libros de diversos tamaños, de diversos tipos de pasta, con temas por lo que alcance a vislumbrar de historia, de portales, de hierbas, de energía, de alquimia. Frente a estos unas pequeñas sillas se encontraban por medio de una mesa larga. Al fondo una pequeña chimenea rodeada por 3 muebles de piedra con una mesa en el centro llena de plantas, a la izquierda había una pequeña cocina con algunas sillas más y con una ventana grande que daba directo al lago  y  al fondo unas escaleras que conducían a algún lado.

-Te vez demasiado joven….- dijo el hombre mientras se apresuraba a alcanzar a Daira

-¿Y tu discípulo….?-pregunto Daira ansiosa.

-Está en la parte de arriba, aunque en realidad son dos. Hermanos…. –dijo Minkabh mientras se acercaba a la escalera y los llamaba.

-¿Y no sabes que sucedió con Najja y Moswen?- pregunto Daira.

-Moswen llego hace rato pero esta con su discípulo explorando el lugar… y Najja ya sabes que siempre llega tarde esa mujer. –dijo mientras se sentaba frente a la pequeña chimenea. Mientras me metí a la cocina y busque un vaso y agua cuando una presencia me sorprendió. Me volteé asustada para descubrir a un hombre alto, de piel blanca, con un toque exótico, cabello negro, corto, lacio,  y con una mirada impresionantemente cautivadora, sonrió  y me miro como apenado.

-Disculpa, no quería asustarte.-dijo mientras se acercaba a mí.

-No pasa nada, también no era como para espantarme sabiendo que en el lugar hay más gente- dije mientras sonreía.

-Me llamo Eric-dijo mientras me tendía una de sus manos

-Mi nombre es Haneul….-dije mientras intentaba averiguar cómo lo saludaba con sólo una mano…

-Eric ¿por qué demonios te tardas tanto…? No vez que tengo hambre….-dijo una voz entrando de repente a la cocina…

-Oh! Lo siento,- dijo como si hubiera interrumpido algo…

-No hay porque- dije sonriendo

-Este es mi hermano menor Minwoo… -dijo Eric mientras me soltaba la mano…

-Mucho gusto, soy Haneul…-dije sin saber si dar una o ambas manos….

-Mucho gusto, soy Minwoo…. Puedes saludar como estas acostumbrada, podemos aprender los saludos después…- dijo Minwoo mientras salía de la cocina después de haber tomado una fruta grande  de color fucsia como una bellota… Seguí mirando la fruta

-Y eres sabía, bruja, espiritista,….-dijo Eric intento hacerme reír. 

-Jajajaja pues ya saber se es algo de todo-dije mientras reía. Realmente era alguien muy agradable

-Haneul, Eric dense prisa ya llego Najja y Moswen….- Grito Minwoo desde fuera…

-Vamos- respondimos al unisonó apuradamente… mientras nos miramos y reímos por lo cómico de la situación, aunque fue por la torpeza de ambos en realidad.

Cuando salimos de la sala encontramos a otra mujer y otro hombre, y detrás de él estaban sentados tres hombres impresionantemente atractivos.

La mujer de piel obscura cuyo pelo negro grueso estaba atado en una coleta nos miro cómplice mientras sonreía, traía un vestido verde limón, que a pesar de los contrastes le favorecía mucho, ella era alta, más alta que todos los presentes a su lado un hombre ya más grande que todos nos miro seriamente, su mirada nos inspeccionaba a fondo, su piel blanca y pelo cano daban un semblante serio a sus ojos que ahora estaban cubiertos por unos lentos negros. Traía una camisa blanca con un saco de rayas delgadas azules y blancas con un pantalón de mezclilla azul claro y un par de tenis negros…

-Haneul, Eric ellos son Najja y Moswen-dijo mientras señalaba primero al hombre y luego a la mujer.

-Mucho gusto-dijimos al unisonó nuevamente y nos volvimos a sonreír.

-Un gusto conocerlos, así que tu eres el hermano de Minwoo….-dijo Najja a Eric

-Sí, así es.- dijo Eric mientras sonreía a ver a su hermano

-Y que no piensan presentarse…. – dijo Moswen a los tres hombres sentados tras ellos…

Los tres se quejaron levemente, se escucharon murmullos

<< Y ¿yo por qué?>> << Yo quiero hacerlo primero>> <<¡¡Que no!! ¡¡Compórtate!!>>

Tras algunas toses, comenzaron la presentación el primero en hablar era un hombre de piel clara, de pelo negro de ojos negros con una sagacidad impresionante, su nariz tenía un perfil perfecto, sus rasgos varoniles lo hacían lucir realmente atractivo. Vestía un pantalón blanco casual con una camisa negra y unos zapatos negros:

-Hola, yo soy Jun Jin, soy príncipe del reino de Antares- dijo mientras hacía una reverencia- y este es mi hermano Dongwan-dijo señalando al hombre que estaba a su izquierda, un hombre de tez morena clara, de pelo negro, con una mirada amable, gentil, unas leves arrugas aparecieron en su rostro cuando mostro su sonrisa, una de las más cálidas que he visto.

-Hola, mi nombre es Dongwan, y también soy príncipe del reino de Antares, me encantaría conocer cuál es tu nombre…-dijo mientras se acercaba a mi y tomaba mi mano derecha para darle un beso en el dorso…

-Mi nombre es Haneul –respondí sorprendida por la acción y parte de mi percibió a Eric mostrarse incomodo, Minwoo sólo reía a lo lejos y Jun Jin murmuró… <> el otro hombre sólo hizo un ruido de desagrado, de hastió.

-Un placer señorita-dijo aún sin soltar mi mano… comencé a sentirme nerviosa… cuando el tercer hombre en la escena interrumpió.

-Ya! Es una presentación, no es un baile ni nada por el estilo ¿por qué haces cosas ridículas?- dijo molesto mientras quitaba a Dongwan de en medio

-Ya Hyesung, no pasa nada, sólo jugaba- dijo Dongwan mientras todos los observábamos

-No pensé que se conocieran-dijo Jun Jin

-Nos conocimos el verano pasado en un viaje a otra dimensión… -dijo Hyesung queriendo que nadie tomará mucho en cuenta ese detalle… - Bueno mi nombre es Hyesung y soy príncipe de Algiedi.

-Un placer-dije mientras le sonreía a pesar de ser serio, se veía como una buena persona. Y vaya que si tenía el porte de un príncipe.

-Bien mi discípulo se ha presentado-dijo Moswen – Faltan ustedes.

Eric y yo nos miramos, me invito a iniciar la presentación:

-Mi nombre es Haneul, soy habitante del reino de Kaus, soy aprendiz de hechicería de Daira- dije mientras hacia una leve inclinación con la cabeza- Es un gusto conocerles.

Un ligero silencio se hizo y Minwoo comenzó la presentación:

-Mi nombre es Minwoo, soy príncipe del reino de Sadalsuud, es un placer- dijo sonriendo amigablemente de manera que sus ojos se hicieron más pequeños.- Eric vas..

-Ah sí… mi nombre es Eric soy príncipe del reino de Sadalsuud, soy hermano mayor de Minwoo, es un placer conocerles-dijo mientras recorría todos los rostros con las miradas.

-Entonces ¿ella no es nada de la realeza?, Daira….-pregunto Najja

Todos se callaron y esperaron la respuesta:

-Efectivamente ella no es nada de la realeza, sin embargo sus poderes son impresionantes no por nada ustedes han escuchado hablar de ella-dijo Daira orgullosa.

Moswen noto la confusión en el ambiente y hablo:

-¿Alguien sabe que ha sucedido con Annelise?-

-No, no aviso nada-dijo Najja serio mientras se sentaba

-A mi me dijo que su discípulo estaba listo, pero es peligroso darle ese amuleto del universo, ya que es la clave para descifrar a los demás…Así que se lo dará cuándo esté listo.

-Mmm, al menos lo debió de haber traído para que lo conozcamos-dijo Moswen pensativa

-Alguien está aquí-dije mientras intentaba descifrar esa energía

-Es verdad- dijo Minwoo más serio poniéndose en pie

Todos nos quedamos en la misma posición. A excepción de nuestros guías. La puerta se abrió y mostro a una mujer de pelo castaño claro de piel aceitunada con ojos color azul, vestía un pantalón corto color kaki y una sudadera gris.

-¡Milagro que llegas! Pensamos que ni te aparecerías-dijo Najja en un tono de reproche…

-¡Ay!- suspiro pesadamente- Ya extrañaba tus quejas….-dijo mirándolo con cansancio- Moswen, Daira-grito mientras corría a abrazarlas- Las extrañe demasiado.

-Nostras también- dijo Daira mientras la abrazaba de vuelta.

-Pero y tu discípulo….-comenzaba a preguntar Minkabh quien solamente había observado la escena en silencio.

-Aish, ¿es que no puedes saludarme primero, Minkabh? Tienes meses de no verme… ay- dijo Annelise molesta mientras suspiraba– Esta bien, está bien… Sun Ho, pasa por favor…

-¿Sun Ho?- preguntamos Minwoo, Eric, Jun Jin, Dongwan y yo…. Nos miramos de nuevo con una gran interrogante….probablemente la misma. 

NOTAS:

Anchernar: Estrella más grande de la constelación de Eridania.

Kaus: Nombre completo es Kaus Austrailis, estrella más grande de la constelación de Sagitario.  

Daira: Nombre griego. Nombre de la maestra de Haneul, significa Sabiduría.

Irídea: Viene de la familia de flores Irídea que da lugar a los lirios, planta cuyas hojas son toxicas si se comen, a pesar de la belleza de la flor.

Minkabh: Nombre egipcio que significa justicia.

Najja: Nombre egipcio.

Moswen: Nombre egipcio para hombre o mujer que significa <> que para los egipcios representa sencillez, pureza y santidad así como limpieza.