Capitulo 6: La luz que viaja

Muy lejos de ahí, a juzgar para los humanos, pero tan cerca como un viaje a 1 hora a la ciudad, el viaje del dragón  se hizo presente, para los humanos fue un hecho inusual, que cruzo parte de la galaxia sin ninguna explicación aparente, así como lo es la creación y muerte de las estrellas.

Ahora el dragón iba cruzando ese reinado, que era tan distinto a todos los demás, entre las montañas se encontraban talladas las estructuras, las casas y los lugares de juego, nada se podría distinguir si el visitante no sabía que quería buscar, entre esas montañas, una de las más altas, se distinguían luces, pequeñas que podrían pasar por reflejos… uno de los más luminosos era en realidad un balcón donde dos jóvenes se encontraban, uno de ellos realmente guapo, con un perfil esculpido casi a mano, miraba a través de un telescopio, observando las estrellas que ahora cubrían, mientras que el otro joven, guapo a su manera, sonreía coquetamente mientras miraba un tablero de ajedrez, su cabello negro caía por su rostro dándole un aire misterioso.

-Jin-ah, mira- dijo el joven poniéndose en pie, y acercándose al balcón.

-Dongwan, ¿qué sucede?-dijo su hermano mientras volteaba su rostro a buscarlo, y al encontrarlo, se acerco a él.

Ambos miraban alucinados esa luz blanca danzante que se acercaba a ellos, cuando se detuvo a un metro de ellos, brillando con más intensidad, se acerco a ellos lentamente y comenzó a titilar hasta casi desaparecer. Dongwan miraba a Jinnie de manera misteriosa. Señalando el brazalete que colgaba de cada una de sus manos, que comenzó a brillar en un tono dorado. 

El dragón recupero su forma original y al ser tocado por ambos hermanos, lanzo una proyección, de Eric y de Haneul:

-El momento llego, nos veremos donde siempre.-

Y volvió a ser una luz que viajo cruzando el cielo nocturno nuevamente.

-No es posible, significa eso que entonces, ¿el príncipe ha regresado?- pregunto Dongwan llevándose el brazalete a su pecho.

-Es probable, pero es imposible que Eric o Haneul nos manden algo como esto si no tuvieran un indicio certero… -dijo Jin mirando a Dongwan mientras sonreía.- Tendremos que viajar-

-¿Y quién lo diría? Justo hace unas horas hablábamos de reunirnos todos, esto no es simple coincidencia… -dijo Dongwan pensativo mientras jugaba con el brazalete, repasando sus contornos.

-Bien,  tendremos que avisar que saldremos de cacería-dijo Jin guiñándole un ojo a su hermano. ¿Avísale a tu esposa?

-¿Y para qué? Ella esta entretenida con la cuñada, ni creo que se percaten de eso.-Dijo Dongwan mientras miraba a Jin.

-Aish contigo de veras, y ¿si regresa antes de tiempo, o la mía me llama a casa? –dijo Jin molesto casi a punto de darle un golpe en la cabeza.

En eso un ruido interrumpió su conversación. El golpeteo sobre la puerta de roble que daba a ese estudio.

-Adelante- dijo Dongwan

-Su alteza vengo a informarle que la cena esta lista- dijo un hombre de unos 35 años mientras hacía una leve reverencia.- Y el vocero esta aquí, quiere preguntarle algo de las últimas noticias.

-Bien, hazlo pasar, Min Sung, gracias.-Dijo Dongwan mientras tomaba asiento en un pequeño sofá. Espero a su vocero y cuando este finalmente entro, le hizo una seña con la mano para que se sentara.

-Mingsun mañana mi hermano y yo saldremos a los alrededores a explorar, hemos escuchado que hay una nueva especie rondando por aquí cerca…  Y quizás de ahí alcancemos a mi esposa en el reino de Antares* por unos dos días, queremos que todo sea discreto.

-De acuerdo, majestad-dijo el Min Sung.

-Es todo, todo queda igual, puedes retirarte.- Dijo Dongwan.

Cuando la puerta estuvo cerrada por completo. Dongwan miro divertido a Jin:

-Bien podremos irnos ahora.-dijo mientras le lanzaba una capa y movía uno de los libreros hacía el pasadizo que los guío muchas veces en sus aventuras juveniles, cuando no querían estar en un evento, o simplemente para esconderse de las tareas que les encomendaban.

Jin miro con cierta nostalgia aquel pasadizo,  y sonrío cómplice, aquí estaban de nuevo como dos niños pequeños, iniciando una aventura más, como en los viejos tiempos. Las escaleras que ya eran conocidas por sus pies, los guiaban a pesar de la poca luz que llegaba y tras unos minutos se encontraron fuera del palacio.

Caminaron por fuera de los senderos y se dirigieron a un lugar aún más escondido, entre los árboles y rocas, Dongwan comenzó a agitar una de sus manos, moviendo sus dedos, de manera circular mientras murmuraba parte de un hechizo, mientras que Jinnie se concentraba en esparcir detrás de ellos una mezcla de hierbas que haría del lugar, un lugar del cuál ningún sonido, ni una luz ni ellos mismo fueran visibles a quien quiera que pasará cerca de ahí.

Cuando acabaron se tomaron de las manos, haciendo que ambos brazaletes se tocaran y comenzaron  con su siguiente hechizo. Una luz azul comenzó a brillar alrededor de ellos, una figura de fénix se levanto y extendió sus alas, y los envolvió a ambos, y tras unos segundos desaparecieron del reino de Pyxis.*

….

Y a unos kilómetros de ese lugar, aquella luz danzante ahora blanca y azul comenzaba a llegar a su destino, al último Al reino de Deneb Algiedi.  

El joven príncipe se encontraba durmiendo cuando una luz intensa lo despertó, no queriendo abrir los ojos, se incorporo y bostezando levanto su mano para protegerse de la luz.

Esta brillo con aún más intensidad y eso causo que el joven príncipe mirara iracundo a la luz gritando.

-¿Qué demonios es esto?

A lo que la luz respondió apagándose y dejándose caer en su mano, el dije del dragón no venia solo, lo protegía un fénix que abría sus alas en todo su interior, y mostro una proyección final:

El rostro de Eric apareció:

“Hola  Hyesung”

Aish… ¿y no podías haber venido a decírmelo, o hacerlo hace una hora?- pensó molesto Hyesung.

“Es tarde eso lo sé, pero esto es importante” y a continuación apareció Haneul. “De eso no tengas ninguna duda, Hyesung”

Hyesung respiró profundamente mientras se incorporaba por completo.

“El tiempo ha llegado, nos tenemos que reunir donde siempre, por favor ten cuidado, nadie es de confiar en este momento.”

Los rostros de Jin y Dongwan aparecieron

“Es mejor, si nadie sabe en realidad que nos veremos, bajo perfil es todo lo que tenemos.”

Y el dije volvió a su forma, Hyesung suspiró profundamente y camino alrededor de su alcoba, se acerco a un viejo ropero y comenzó a urgar en el aún bostezando, sus dedos tocaron una elevación en el fondo y él sonrió, comenzó a presionar levemente los bordes alternadamente y se abrió una pequeña puerta, se inclino dentro del mueble, y estiro sus dedos para alcanzar el objeto.

Entre sus manos se deslizo un anillo de plata con una piedra negra, que era enmarcada por unas alas doradas, que coloco rápidamente en su mano izquierda. Se cambio rápidamente y pidió a Min Jong que saldría a dar un paseo, que si alguien preguntaba el no quería ser despertado. Min Jong se había criado con él y en todos los momentos siempre lo apoyo y cubrió, su confianza estaba con él y sabía que nunca lo delataría.

Salió por la puerta principal y se interno en la montaña buscando el portal que lo llevaría a Scutum…

Nota:

• Antares: Reino de Jun Jin, el nombre es de la estrella más brillante de la constelación de Escorpión.
• Pyxis: Nombre de la constelación “Brújula”, reino de Dongwan.
• Deneb Algiedi: Reino de Hyesung. Hyesung tiene por horóscopo chino: “Cabra”, así que el nombre de la estrella más brillante de Capricornio es este.