Capítulo Treinta y uno...  

Taeyeon miró la hora en su teléfono mientras se apresuraba a salir del edificio Barney. La clase había terminado anticipadamente, por el cambio. El profesor tenía una especie de obsesión con un cierto programa de televisión la noche del martes, lo que significaba que la clase se llevaba a cabo en velocidad turbo.

"Oye, bonita," le dijo una voz al oído, y Taeyeon se volvió para ver de pie a Junsu allí.

Sonrió. "Oye extraño," dijo, al colocarse al lado suyo. "Tanto tiempo sin verte."

"Tenía la intención de llamar y decir hola, pero estaban estas cosas de las fiestas en familia, ¿sabes? ¿Cómo son tus clases este semestre? "

Se había cortado el pelo, Taeyeon lo noto. Lo afeitó a los lados y la punta en la parte superior. Pensó que sus ojos se veían más verdes de alguna manera. "Arte y Cultura Contemporánea va a patearme el trasero. Estoy seguro de ello. El resto está bien. ¿Y tú? "

"Muchas asignaturas optativas. Soy amante de Teoría de los medios de comunicación, sin embargo. Yo he optado por Arte Digital".

"Paso audaz para un escultor." Sonrió. "¿Te diriges a la clase?"

"Tengo Psicología en un par de horas", dijo. "¿y tú?"

"Ya he terminado, gracias a Dios. He quedado con Sooyoung en  el Central Park. ¿Te dijo? Ella está filmando una película allí. "

"¿En serio?" Miró impresionado. "Eso es impresionante. Yo no había hablado con ella en un tiempo".

"Sí, creo que hoy es el último día, sin embargo. Me encuentro con Sooyoung para los últimos detalles de la fiesta."

"Sooyoung tiene buen gusto." Él sonrió de una manera que hizo que su mirada se viera dulce, de alguna manera, y Taeyeon desvió la mirada, se sintió tímida, de repente.

Ellos caminaron a una parada en la tercera avenida. "Me dirijo a Lafayette", le dijo Taeyeon.

"Voy a comer algo antes de la clase. Todos deben unirse en algún momento ", dijo, mirando esperanzado.

"Eso estaría bien. Deberías llamarme"

"Cuenta con ello."

Se dirigieron en direcciones opuestas, y Taeyeon metió sus manos en los bolsillos de su chaqueta para evitar que se congelara. A pesar de que amaba el invierno, ella estaba esperando a la primavera. El montón de barro de la nieve y los árboles sin hojas se empezaba a bajar. Y era sólo la primera semana de febrero.

Su teléfono comenzó a sonar en alguna parte dentro de su bolsa de mensajero, con una melodía asignada a un número desconocido. Hundió el objeto desde el fondo de su bolsa, y se quedó mirando el número desconocido en la pantalla.

"¿Hola?"

"Hola, ¿eres Taeyeon Kim?" Preguntó una voz femenina.

"Se trata de mí, bueno, ella". Taeyeon puso los ojos en blanco. "¿Qué puedo hacer por ti?"

"Soy Sunny Lee, asistente de Tiffany Hwang. ¿Tienes un momento?"

Taeyeon detuvo sus pasos, y casi fue atropellada por un coche. Salió del camino, y se apresuró a decir: "Ah, ¡sí! Claro que sí. Quiero decir, yo."

"La Srta. Hwang se preguntaba ¿si seguías interesada en contribuir con tu arte a su nuevo apartamento?"

"Claro, sí. Me encantaría." Taeyeon puso los ojos en blanco