“Y esta fotografía de aquí, es simplemente increíble” el hombre pelirojo estaba diciendo. “Los movimientos, el sentimiento, es simplemente magnífico, ¿no le parece, Miss Hwang?”

“Si, por supuesto que lo es”, respondió ella.

¡Que alguien me mate ahora! Rogo mentalmente.

Ella había estado escuchando a este hombre divagar sobre el arte y las fotografías casi por una hora. Y además del hecho que era completamente aburrido, también estaba el hecho de que él no sabía nada sobre arte...

Y Tiffany  se encontró a si misma respirando profundamente y contando del uno al cien, con el fin de calmarse y no empezar a gritar.

“Es una pena que no pueda ser capaz de unirme a usted y a su familia este fin de semana”, dijo él “Pero tengo que ir a Hong Kong para una reunión de negocios. Espero  me perdone”

“Por supuesto, yo entiendo” ¡Gracias a Dios! Uno menos y sententa y cuarto restan…

“Yo sabía que lo harías”, él dijo, sonriéndole “Eres una señorita tan madura y encantadora”

Ok, piensa en algo vergonzoso para que puedas sonrojarte y lucir como una linda e inocente chica. ¡Piensa, piensa Tiffany…! Qué hay acerca cuando Gyul te arrastro a esa tienda de shop y quería que consiguieras esa cosa parecida a un pene para ella, y tu  le gritaste a ella, y a toda la tienda, ¿Por qué  quieres conseguir eso?

Y, ella se sonrojó.

“Gracias, señor”, le dijo muy apenada y él sonrió gustoso.

“Yo estoy seguro que nosotros  podemos reponer  este fin de semana en otro momento, ¿Le gustaría?” – le preguntó, pero antes que ella pudiera responder, él siguió hablando  “Yo tengo un magnifico yate, estoy seguro que te va a encantar. Nosotros podríamos ir y pasar un día en el mar, ¿Qué dices? ¡Ojala el próximo sábado puedas estar disponible!

Ella lo miró sorprendida. O al menos esperaba que ella luciera sorprendida. En realidad  ella tenía  pánico, y apretaba los sesos tratando de encontrar una excusa decente.

Sintió una mano en su hombro, y luego una voz que decía “¿Te importaría si la llevo lejos por un momento?”

 Tiffany le dio al molesto hombre pelirojo una sonrisa de disculpa, y luego  dio la vuelta para encontrarse cara a cara – o, más bien con el cuello – con su hermano.

Ella le regalo una eye smile, y una vez que los dos estaban fuera del alcance del oído del hombre pelirojo, ella empezó a hablar.

“¡Te amo!” – exclamó, colgándose de su brazo.

Él se rió entre dientes “Parecía que necesitabas ayuda ahí” dijo.

“¡La necesitaba! ¡OMO,  que hombre tan desagradable e insoportable!” dijo entre dientes.

“¿Es realmente tan malo?” – preguntó, haciendo una mueca.

“¡Sí!” ella respondió, tratando de no gritar. Pero entonces se dio cuenta de que estaban solos “¿Dónde está tu novia?” ella preguntó.