Trying to forget my past

Heartless
Please Subscribe to read the full chapter

Pero yo no entendía entonces. Que podría lastimar a alguien tan mal que nunca se recuperaría. Que una persona puede, sólo por vivir, dañar a otro ser humano más allá de la reparación.

 

Taeyeon POV

El fuerte impacto que produjo la puerta al cerrarse, hizo que parpadease inconscientemente. Todo había quedado en silencio, no se podía oír nada, excepto el sonido de mi corazón latir con temor.

Tenía miedo porque sabía que llevaba razón. Lo sabía pero a pesar de eso, no se lo diría nunca. Mi orgullo era mayor a cualquier otra cosa y darle la razón a Tiffany Hwang no era una opción.

Convertirme en una persona así no fue fácil, básicamente porque antes de que pasase todo yo era diferente. La mayoría de las veces me arrepentía de lo que decía, o de cómo actuaba, pero era la única alternativa que veía disponible para evitar que me volviesen a herir.

Todos intentamos no repetir nuestros errores, evitar tropezarte con esa piedra que en un pasado causó mucho más que un leve rasguño. A nadie le gusta sufrir, ni pasarlo mal, sólo queremos ser felices.

Ojalá las cosas fuesen tan sencillas, que con un chasquido de dedos tuviésemos en nuestras manos todo eso que nos hace sentir afortunados.

Pero todo era más complicado de lo que parecía a primera vista.

Un amor no correspondido.

Un engaño.

Una discusión.

Una tragedia.

Nadie sabe lo que puede terminar pasando. Quizás eso que creías que duraría toda una vida, se desvanece en meros segundos y lo único que puedes hacer es ver como tu mundo, tu pequeño y maravilloso mundo, se cae a trozos.

Y estás solo, completamente vacío. Nadie se para a tu lado y te ayuda a reconstruirlo, porque aunque lo hagan, nunca será lo mismo.

Así que por eso es mejor evitarlo todo, aunque cueste más de lo que pensabas, solo debes agarrarte a la seguridad que te ofrece y esforzarte para cumplirlo.

Aprender a olvidar.

Aprender a sobrevivir.

Aprender a no sentir.

 

Sentir ira es como veneno. Te come por dentro. Creemos que odiando a alguien le hacemos daño, pero el odio es una hoja curvada y el daño que le hacemos a los demás, también nos lo hacemos a nosotros mismos.

 

Habían pasado ya tres semanas desde que Tiffany empezó a trabajar para mí. Eso superaba el récord de las anteriores por una semana y la verdad es que me sorprende.

Lo único que he hecho este tiempo ha sido sacar lo peor de mí, y comportarme como una completa idiota con ella. Y a pesar de eso, a pesar de todas las veces que mis comentarios la han derrumbado, se ha vuelto a levantar por su propio pie.

Su fuerza de voluntad era admirable, incluso envidiable. Me gustaría poder tener esa virtud, poder superar todo lo que intenta derrumbarme.

“Tráeme un café.” Simple, claro y directo. “Y no tardes mucho.” Sus cejas se arrugaron, fracasando en esconder la irritación que probablemente la estaba comiendo por dentro.

“Sí, ahora mismo.” Dijo, claramente molesta. Quizás era porque el único café que era de mi agrado se vendía únicamente al otro lado de la ciudad. Donde nos encontramos por primera vez.

Sonreí, pero solo por un etéreo instante. No debía hacerlo, por muy divertido que fuese hacerla enfadar. Oculta y no sientas.

Volví a centrar mi mirada en los papeles que cubrían mi mesa. Presupuestos, planos, permisos de construcción, todo lo que era necesario para empezar el levantamiento del hotel.

A pesar del numerito que montó Tiffany en la reunión, muchos de los asistentes vinieron a verme para formar parte del proyecto. Un golpe de suerte.

Suspiré, masajeándome la sien. Nunca me había gustado el papeleo, se hacía demasiado pesado. Levanté la cabeza al sentir los sutiles golpes en la puerta.

“Adelante.” ¿Hweng? “Oh, hola Soonkyu.” Intenté no sonreír al verla hacer un puchero, pero era demasiado gracioso como para no hacerlo.

“Tantos años diciéndote que no me gusta y aún sigues llamándome así.” Se dejó caer encima del sofá, cruzándose inmediatamente de brazos.

“¿Qué, es tu nombre no?” Le saqué la lengua.

“Psh, lo que tu digas.” Se levantó, aún protestando y se dirigió hacia la mini nevera.

“¡Yah!” Voceé, levantándome de la silla para ir a su lado. “¿Tu solo vienes aquí para comer o qué?” La golpeé en la cabeza, quitándole la comida que ya empezaba a cargar en sus brazos.

“¡Ow!” Exclamó, posando las manos encima de la parte lastimada de su cabeza. Me miró y bufó, hinchando sus mejillas de forma adorable.

“No, ni te molestes. Ya aprendí como resistir a ese hábil truco.” Cogí una de las bolsas de aperitivos, y se la di. “Esto es lo máximo que te voy a dar, sino no vas a pasar por la puerta.”

“Graci—¡Yah, ¿es esa una manera sutil de decir que estoy engordando?!”

“No, creo que lo he dicho de una forma bastante directa...” Rompí a reír, viendo como enrojecía del enfado.

“Vas a ver cuando te pille, pequeña—“ El sonido del teléfono la interrumpió, y yo suspiré aliviadamente. Me ha salvado de una muerte segura.

Cogí el aparato, acercándomelo al oído. “¿Si?”

“Taeyeon.” Mi cuerpo se estremeció al escuchar su firme voz. Siempre había sido así, tenía un impacto sobre mí que nadie más poseía.

“Padre.” Sunny cogió mi mano, apretándomela para demostrar que estaba ahí y que contaba con su apoyo.

“¿Cómo va el proyecto?” El negocio siempre va primero, que patético.

“Bien, solo falta terminar de arreglar el papeleo.”

“Perfecto.” Sonó terriblemente seco, pero ya me había acostumbrado. Eran demasiados años de pocas palabras, escasas emociones y un afecto ficticio.

“¿Querías preguntar algo más?”

“Por supuesto, llamaba para decirte que hoy tenemos una cena importante a la que debes asistir sin falta.” Estoy cansada de que siga intentándolo.

“Si es con quien creo que es no hace falta que te molestes, no voy a aceptar.”

“Vendrás y punto. Ahora que ya no estás con esa furcia no tienes excusa.” Algo dentro de mí se encendió ante su comentario ofensivo. Por mucho daño que me hiciese no tiene derecho a llamarla de esa forma. “¿O es que has encontrado a alguien que la sustituya?” Apreté los puños hasta el punto de volverlos blancos.

“Pues si.” Mierda, ¿por qué leches he dicho eso?

“No me mientas, Taeyeon. Tanto tu como yo sabemos que no serías capaz.” No voy a dejar que me pise. Esta vez no.

“No miento, es la verdad.” Se quedó en silencio un buen rato, hasta que volvió a hablar.

“Entonces tráela contigo esta noche.”

“Eso voy a hacer.” Y me colgó, así sin más. Respiré hondo, intentando apaciguar la desmesurada oleada de furia que trataba de controlarme.

Pero aparte de rabia, tenía miedo.

“¿Taeng?” Me giré, dándome cuenta de que Sunny tenía la misma expresión que yo en su rostro. Pánico.

“Lo sé Sun, soy idiota.” Me senté en el sofá, tapándome la cara con las manos.

“No voy a llevarte la contraria en eso.”

Please Subscribe to read the full chapter
Like this story? Give it an Upvote!
Thank you!

Comments

You must be logged in to comment
Enmary #1
Chapter 19: Super feliz de leerme esta historia, quede con un sabor agridulce por Ji-eun :c ¿Tambien le fue bonito? :c
sone009_ #2
Chapter 19: No me canso de leer esta hermosa historia, me encanta <3
Francesa_Hanami
#3
Chapter 18: Es precioso,lo ame totalmente <3 sigue así!
WonderTae13
#4
Leída en un noche, obsesión. Los feels omg que bonito^^ gracias por escribir <3
lisbethmd #5
Chapter 18: me encantaron mucho tus fics sigue asi..
TaeNyisAmor #6
Chapter 17: Me encanto, es una historia demasiado hermosa!! <3

MUCHAS GRACIAS
LectoraLemon #7
Chapter 19: Me gusto mucho la historia gracias por compartirla <3
TaeNy_1
#8
Chapter 2: Me gusto buen comienzo :D
(Y)
hotsootuff15
#9
Chapter 17: Me encantó la historia, enserio, escribes muuy bien. Cada vez que leía un capítulo lo disfrutaba muchísimo, es que escribes también que me imagino perfectamente la escena y los sentimientos que sienten.
Eres una gran escritora. Gracias por compartir esta gran historia ♥
jumbo4 #10
Chapter 15: amo tu historia enserio mas las frases y eso *.*