诚实一点, 第一次 体会感受 甜蜜的 harmony   Be honest, the first time experiencing feelings of such sweet harmony

 

 

 

CHEN – MY LADY(EXO M)

 

 

 

- Yuri -

Revisé por última vez que todo estuviera en orden, era el primero MV que estaba dirigiendo en la nueva productora que habíamos montado y estaba muerta de los nervios, por lo que no podía parar de revisar todo una y otra vez, aún faltaba un poco para que pasarán a buscarme, miré el reloj nerviosa y decidí obligarme a tomar un café y comer algo porque iba a ser un día muy largo.

Me estaba tomando el café cuando escuche que la puerta se abría, miré el reloj mientras veía a Aria quitarse los zapatos.

 

- ¿De dónde vienes? – levantó la mirada asustada, vi en sus brazos un enorme peluche y negué con la cabeza – no hace falta que respondas, una buena noche ¿no? – le pregunté sonriente.

 

- Nada, que me han liado – dijo mientras se acercaba a la mesa tratando de ocultar una sonrisa.

 

- Si, claro, suele pasar – comenté provocándola – veo que habéis hecho las paces.

 

- Un poco – comentó – ¿tu a dónde vas a estas horas?

 

- A trabajar – le di un bocado a la tostada – ¿y tú? ¿A descansar? – le miré elevando una ceja y no podía evitar sonreírle, la verdad era divertido ver a mi amiga volver a casa a esas horas, imaginándome claramente lo que había pasado.

 

- A cambiarme y a trabajar – dijo simplemente – ¿Joy?

 

- Pues sí no se ha escapado a ver a nadie como tú, estará en su cuarto.

 

- Yo no me he escapado a ver a nadie.

 

- Tú directamente no has vuelto – me reí – al final Bulbi vuelve a casa – dije señalando con la cabeza el peluche, ella sonrió.

 

- Claro, cómo tiene que ser – asentí.

 

- Tienes café si quieres – le dije, ella lo rechazó con un gesto de la mano, mi teléfono sonó indicando que ya me estaban esperando abajo – me voy ya, está noche hablamos y me cuentas.

 

- Suerte – cogí mis cosas y me dirigí a la entrada para ponerme las deportivas – una cosa – la miré mientras me incorporaba, esperando a que hablara – deberías perdonar a Jongdae – no quise escuchar nada mas, bufé mientras me giraba para salir a casa – que si que le gustas.

 

- Que te den – fue lo único que le dije mientras salía de casa y la escuchaba quejarse de mi respuesta.

¿Perdonar a Jongdae? ¿Qué tenía que perdonar? Había sido un completo imbécil en la cena, pero cuanto más lo pensaba, en todo lo que había pasado ese día, sentía que no tenía razón para enfadarme, pero aún así me molestaba ese cambio de actitud en él. Podía llegar a entender que se hubiera enfadado porque le había tirado el café por encima a la chica, pero tampoco tenía porque decírmelo así. Tal vez lo que me molestaba era que me había ilusionado después de que fuésemos a cenar juntos, porque por fin me había atrevido a reconocerme a mi misma que me gustaba y justo el promete venir a verme y no lo hace, y cuando se presenta en mi cafetería lo hace con otra chica, para después recriminarme no sabía el que en la cena. Nada tenía sentido. Había llegado un punto dónde no sabía si podía, debía, quería o podía estar enfadada con el. Y menos después de saber que Baekhyun y Aria se habían reconciliado a lo grande, porque tal vez no fuesen tan mala gente, pero ahí seguía Minseok, que si me lo parecía si lo que contaba Joy era verdad. Debería dejar de pensar pero no lo hice hasta que llegué a la localización y me centré por completo en el trabajo, a excepción de los momentos en los cortos descansos amenizados por Joohyuk.

El día pasó en otras dos localizaciones e incluso pudimos improvisar una escena de más . Había sido un día agotador, pero estaba increíblemente feliz por lo bien que había ido todo, aún quedaban algunos detalles, pero para esos no necesitábamos tanto equipo y los podíamos rodar tranquilamente al día siguiente, dando por finalizado, casi el MV.

Notaba las manos de Joohyuk masajeándome los hombros mientras andábamos por las calles de Seúl.

 

- ¿Mejor? – me preguntó mientras seguía masajeándome los hombros y yo andaba con los ojos cerrados – no te quejaras de amigo, modelo, barista y masajista, lo tengo todo.

 

- Si, menos humildad, lo tienes todo – noté como apretaba más fuerte en los hombros haciendo encogerme ligeramente mientras abría los ojos.

 

- Ya hemos llegado – comentó, señalando la parada de autobús – Sungkyung tiene que llegar pronto.

 

- Gracias por todo – le dije dándole un golpe juguetón en el brazo – de verdad – él me sonrió ampliamente.

 

- De nada – me cogió del moflete, una costumbre que tenía, pero esta vez no con la intención de hacerme daño como solía hacer para molestarme – pero recuerda que tu primera película tengo que ser yo el protagonista.

 

- No eres tan buen actor – le dije rápidamente negando con la cabeza, mantuvo su sonrisa, y sí antes no quería hacerme daño ahora si, apretó un poco más hasta que me quejé y le aparté la mano – ni tampoco eres un buen amigo.

 

- ¿Cómo te puedes quejar de mí? Sin mi estarías perdida – dijo ofendido.

 

- Y contigo también lo estoy – exclamé – yo me perdí hace tiempo en la vida.

 

- Vale, eso es verdad, pero aún así, deberías estar agradecida de que yo sea tu amigo – se quejó apartando la mirada, bufé mientras amenazaba con pegarle, vi que miraba alguien – oh, tú – seguí su mirada y me sorprendí – hola – Joohyuk le dedicó una pequeña reverencia y vi como Jongdae nos miraba sorprendido. ¿¡Por qué me lo tenia que encontrar!? Demasiado bien había ido todo. Jongdae le dedicó un ligero movimiento de cabeza a modo de saludo, entonces me miró a mi y yo le aguante la mirada intentando adivinar si estaba en un día del Jongdae simpático o sí seguía siendo el idiota de la cena mientras se producía un silencio incómodo – bueno ¿dando un paseo? – seguía mirando a Jongdae que pareció confundido por la pregunta de Joohyuk, quién tenía un grave problema aguantado los silencios.

 

- ¿Eh? No, no, tengo una cita – comentó volviéndome a mirar a mi, intenté aparentar que no me había molestado la respuesta, dudo que lo consiguiera.

 

- ¡Aquí estáis! – escuché una voz familiar y me giré para encontrarme con la novia de Joohyuk – he tenido que aparcar un poco más lejos – se disculpó.

 

- No pasa nada – Joohyuk la abrazó y le dio un corto beso en los labios, sonreí al verlos, siempre me parecía que hacían muy buena pareja.

 

- ¿Un día duro? – me preguntó con una sonrisa, sin soltarse del agarre de su novio.

 

- Cómo siempre – comenté encogiéndome de hombros devolviéndole la sonrisa.

 

- Más te vale que no sea por tu culpa – miró a su novio, ella sabía cómo éramos los dos, algo en nuestro ADN nos hacía pelear todo el rato, en ese aspecto Sungkyun era como mi jefa, le encantaba vernos pelear.

 

- ¿Por qué siempre te pones de su lado? – se quejó su novio.

 

- Porque siempre tengo razón – le contesté yo, Joohyuk chascó la lengua negando con la cabeza mientras su novia se reía – la verdad es que hoy, y solo hoy, le debo mucho, sin el no habría MV – dije con una sonrisa – gracias idiota – Joohyuk me sonrió.

 

- Por cierto tengo que hablar contigo cuando tengas tiempo – me dijo Sunghyuk de repente, seguía en lo brazos de Joohyuk.

 

- ¿Por?

 

- Trabajo – me dijo con una sonrisa – ¿puedes la semana que viene?

 

- Sin problema.

 

- Se nos hace tarde – dijo Joohyuk mirando su reloj y su novia hizo lo mismo asustándose por la hora – ¿te llevamos a casa?

 

- No hace falta, me apetece ir andando y disfrutar el ambiente lejos de ti un rato.

 

- Como quieras, si necesitas cualquier cosa me avisas – asentí mientras me despedía con la mano.

 

- Hablamos – Sungkyun se despidió de mi también mientras se agarraba al brazo de su novio y se giraban para volver por donde ella había venido. Suspiré sonriendo mientras les veía alejarse. Me giré dispuesta a emprender de nuevo el camino, estaba agotada pero aún así me apetecía caminar, pero pare en seco al darme cuenta de que Jongdae seguía en el mismo sitio, aunque su expresión había cambiado, parecía algo confundido, le miré sin saber muy bien que decir.

 

- Te deben de estar esperando – fue lo único que se me ocurrió, él asintió ligeramente, le dediqué una pequeña inclinación de cabeza a modo de despedida y comencé a andar pasando por su lado.

 

- En realidad no – me dijo de pronto y me giré a mirarle confundida – no he quedado con nadie – le miré confundida, otra vez sin saber que decir, vi como me dedicaba una pequeña sonrisa, que no me esperaba, haciendo que esa sensación extraña que sentía cada vez que le veía apareciese de nuevo, esa sensación que había negado desde hacía bastante tiempo.

 

- Ah, vale – fue lo único que le dije confundida.

 

- Si quieres podemos ir a cenar algo – comentó de repente aún con una pequeña sonrisa – juntos.

 

- ¿Eh? – le miré confundida ¿qué le pasaba? – no...no, no hace falta, no tengo hambre – añadí queriendo salir de ahí, porque no entendía en absoluto su invitación ¿era bipolar? ¿lo era yo también por querer aceptarla pero a la vez salir corriendo sin responder?

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