아름다워  그래서  두려워,  깊은  함정  나를  보는  너,  나는  이미  두  발이  묶인  채로   You’re Beautiful that’s why I'm afraid, a deep trap, you’re looking at me, I'm already tied up

 

 

XIUMIN – CHILL(EXO)

 

- Minseok -

Miré a Joy mientras esperábamos, Jongdae y Baekhyun se habían montado en un cisne juntos y no pude evitar reírme ante la situación.
 

- ¿Qué pasa? – me preguntó Joy.
 

- Me hace gracia – comenté mientras miraba a los dos marcharse, mirando cada uno para cada lado, para mi sorpresa Joy solo sonrió. Había sido extraño ese día en el parque, al principio no me evitaba pero si mantenía algo de distancia pero poco a poco se fue relajando y empezó a hablar conmigo tranquilamente. Llegó nuestra barca.
 

- Al final de la atracción os podéis hacer una fotografía, es para las parejas – nos comentó la chica que supervisaba de una manera educada, vi que Joy iba a decir algo, como siempre, aclarar cosas innecesarias.
 

- Muchas gracias – contesté yo antes de que pudiese llevarle la contraria y la barca salió, paseando por el agua relajadamente, era cómo un bosque encantado, pasaron unos segundos hasta que escuché a Joy murmurar algo.
 

- No entiendo porque nos confunden siempre con una pareja – se quejó Joy, estiré el brazo apoyándolo detrás de su respaldo mientras el otro lo apoyaba en la parte delantera.
 

- Por algo será – murmuré mirándola, ella se giró a mirarme – hoy con las orejas y la ropa es normal.
 

- ¿La ropa? – me preguntó mirando su camiseta blanca y sus vaqueros, entonces me miró y vio que yo también llevaba camiseta blanca y vaqueros – por eso Aria me ha dicho que tenía que ponerme esto – me miró sorprendida dándose cuenta del engaño y me reí.
 

- A mi me ha engañado Jongdae – me reí al recordar cómo me había dejado caer que lo mejor era ir simple pero que no fuese de negro, y no solía variar mucho en colores mi armario.
 

- ¿Pero por qué hacen todo esto? – me preguntó, no parecía molesta.
 

- Quieren que nos llevemos bien – dije simplemente encogiéndome de hombros – o buscan excusas para hablar entre ellos.
 

- Pues podrían hablar y ya está.

- A mi no me molesta – le dije con una pequeña sonrisa. - ¿El qué?
 

- Que intenten que nos acerquemos, ya no solo en plan trabajo, sino amigos – me miró unos segundos suspirando.
 

- Supongo que está bien – murmuró.

- ¿Perdona? – le pregunté divertido – ¿qué acabas de decir? - Nada.

- Te he oído.

- Pues para que quieres que lo repita entonces.

- Porque quiero escucharlo bien.

- No he dicho nada – repitió, cruzándose de brazos.

- Así que está bien que seamos amigos – razone sonriente.
 

- ¿Sí no? ¿No lo somos ya? – no pude evitar sonreír más ampliamente, no sabía en que momento habíamos pasado a ser “amigos”, era un escalón mas, asentí.
 

- Claro – le contesté simplemente – hay que concederles que has pasado de que te moleste mi presencia a ser mi amiga.
 

- Nunca me ha molestado tu presencia – me dijo seria, la miré irónicamente.
 

- Te molestaba cada palabra que decía – le rebatí.
 

- Una cosa es que me moleste lo que digas y otra que me moleste tu presencia.
 

- Ah, entonces qué era, ¿te irritaba? ¿me odiabas? ¿me detestabas? – le pregunté divertido acercándome un poco – porque te enfadabas cada vez que te decía algo, hasta hace muy muy poco. Ni siquiera tenía que decir nada para que te molestaras conmigo.
 

- A ver, no me hacía gracia que entrases al mismo puesto que yo – me confesó y yo la miré sorprendido, lo sabía, pero que saliera de su boca era algo nuevo – pero tenías razón el otro día – incliné la cabeza sin entender – no es culpa tuya, y los dos vamos a seguir trabajando en el mismo sitio, así que mejor llevarnos bien – me sentí algo decepcionado por sus palabras, el hecho de que achacara su acercamiento solo al trabajo me frustraba, pero le disimule con una pequeña sonrisa.
 

- Me alegra que lo hayas entendido.
 

- No estás tan mal después de todo – la miré arqueando una ceja pícaramente, tardó unos segundos en entender mi mirada – no, no en ese aspecto, no físicamente, quiero decir, que eres majo y eso, no estás mal como amigo, eso – asentí mirando fuera de la atracción por unos segundos, me estaba molestando lo que decía, no se si me estaba gustando la idea de amigos que estaba exponiendo todo el rato – ¿Qué pasa?
 

- Nada – contesté simplemente mirándola de nuevo – estaba disfrutando de nuestra nueva amistad – le comenté divertido intentando olvidar la sensación que acababa de tener de decepción, ella asintió, llegamos al final del recorrido dónde nuestros amigos nos esperaban para salir del sitio.
 

- Perdonad – nos llamó una chica – ¿queréis una foto? – preguntó, miré que había un pequeño mirador con la atracción de fondo.
 

- ¿Hay foto? – preguntó Aria mirando a la chica.
 

- Es solo para parejas – contestó la chica un poco avergonzada.
 

- Ah, claro, entonces solo podéis hacerla vosotros – dijo Jongdae riéndose.
 

- No gracias – dijo Joy simplemente, yo bufé.
 

- Ellos son pareja ¿no puede? – preguntó Aria señalando a Baekhyun y Jongdae, la chica dudo unos segundos – o nosotras – la chica dudó.
 

- Nosotros no somos pareja – aclaró Baekhyun.
 

- ¿Las tres parejas en una foto? – ofreció Jongdae regateando a la muchacha.
 

- Si salís todos no hay problemas – nos contestó con una sonrisa, en nos segundos todos estuvimos listos y la chica nos hizo una foto polaroid, que nos dio en el momento.
 

- Que discriminación, podríamos ser pareja nosotras – comentó Yuri mientras salíamos.
 

- Ya, me ofende que no nos hayan dicho nada – apoyó Aria.
 

- Bueno en la siguiente si pasa lo mismo nos hacemos la foto – dijo Baekhyun tranquilo.
 

- Claro – añadió Yuri asintiendo, mirando a Aria, está le dedicó una mirada que solo ellas entendían.
 

- Bueno a ver ¿dónde vamos ahora? – pregunto Joy, no queriendo prolongar el momento pareja.
 

- Yo quiero ir a alguna de agua – declaró Jongdae.
 

- Me gusta la idea – apoyó Yuri.
 

- Pues vamos por allí y la primera que encontremos – dijo simplemente Aria empezando a andar. Escuché como entre ella y Yuri le echaban una bronca no muy silenciosa a Joy y me reí. La primera atracción que encontramos eran unas barcas en forma de troncos y entramos, no tuvimos que esperar mucho, ya empezaba a ser tarde y la gente prefería mantenerse seca, aunque en esta no te mojases mucho.
 

- Las barcas son de cuatro – declaró Baekhyun.

- ¿Vamos juntas? – preguntó Aria a Yuri.

- Hemos dicho que cambio de pareja – dijo Jongdae.

- Es verdad – se dio cuenta de Aria, no sabía de que estaban hablando. - ¿Y yo? – preguntó Joy, sonreí, la respuesta era obvia.
 

- Con Minseok, vosotros dos solos – declaró Yuri – nosotros cuatro en otra – Joy bufó molesta, no había podido subir con sus amigas en casi ninguna atracción quitando cuando subíamos solo Jongdae, Yuri, ella y yo.
 

- Yo no quiero ir delante del todo – dijo Aria, estábamos a punto de montar.
 

- Yo me siento delante, tu puedes ir detrás – le dijo Baekhyun con una pequeña sonrisa.
 

- Nosotros detrás de ellos entonces – le dijo Yuri a Jongdae y este asintió.
 

Ellos se subieron primero en la atracción y después nosotros, Joy delante y yo detrás de ella. Subimos la primera cuesta y vi como se agarraba a la parte delantera para no dejarse caer.
 

- Puedes apoyarte si quieres – le dije divertido.
 

- ¿Qué? – preguntó girándose, me di dos toquecitos en el pecho – no gracias – volvió a girarse y en ese momento llegamos a la parte más alta, la bajada fue muy suave.
 

- Lo digo en serio, somos amigos ¿no? – le dije algo irónico. - ¿Por eso solo ya debo apoyarme?
 

- Por comodidad, no hace falta que te agarres cómo si te fuese la vida en ello.
 

- No, da igual.

- Sale el lado arisca hoy por fin – murmuré con intención de provocarla.
 

- Ya estamos – se quejó girándose a mirarme – ¿qué pasa que tengo que hacer lo que tú quieras?
 

- Pero si lo digo por ti – le recriminé sonriente, me miró y se rió.
 

- Venga vale – me contestó, la miré sorprendido – para que luego me sigas llamando arisca.
 

- Solo a veces – le dije mientras empezaba la siguiente cuesta – venga ven – le comente y ella se dejo caer un poco, aunque podía ver que seguía sin poner todo su peso en mi, haciendo fuerza con las manos.
 

- ¿Contento? – me preguntó sin girarse. No del todo. Pero con ella sabía que no podía tirar mucho de la cuerda.
 

- Lo he dicho por ti – comenté, estábamos a mitad de cuesta y me di cuenta que se escurría porque cada vez notaba más su peso sobre mi – suéltate, que no me molestas – le repetí, entonces noté todo su peso de manera brusca.