Cuando taeyeon entró en el salón donde se realizaba la fiesta, lo primero que vio fue a Tiffany.

 

Se quedó paralizada, embelesada mirando lo guapa y y que lucía ese vestido.

 

La americana siempre se veía guapa vestida con sus trajes que usaba en el trabajo, pero verla vestida de gala le quitaba el aliento.

 

Sus miradas se encontraron y ella vio que sus ojos le decían tantas cosas.

 

Una mirada llena de tristeza y rabia, ella estaba segura de que a Tiffany no le había gustado verla entrar del brazo de jessica, pero la verdad era que no quería enfrentarla ese día así es que, invitó a la mujer para que la apoyara con el compromiso de no dejarla sola y así impedir que Tiffany se le acercara.

 

 

Jessica  tuvo que tomar el control de la incómoda situación y tiró de la mano de taeyeon  para que ésta comenzara a moverse por el salón y ella así lo hizo.

 

Llevada por jessica, saludó a cuanta persona se les acercaba.

 

Tiffany  seguía con la mirada cada movimiento de la pareja.

 

Sentía que se estaba quemando por dentro al ver a taeyeon  acompañada de otra persona.

 

Quería hablar con ella, pero cada vez que daba un paso para ir y enfrentarla, en su mente resonaba la voz de Yuri  con la advertencia de que no quería un escándalo en la gala.

 

 

 

―Tranquila, taeyeon. Todo estará bien―dijo jessica al oído.

 

―No puedo estar tranquila cuando Tiffany no ha dejado de mirarnos.

 

―Creo que deberías hablar con ella. No es bueno para ninguna de las dos que sigan con esta situación.

 

―No quiero. De seguro me dice un montón de mentiras y yo no quiero escuchar nada que salga de su boca.

 

―taeyeon, deja de actuar como una niña berrinchuda. Creo que debes hablar con ella, dejar que te explique todo y aclarar esto de una buena vez. Pienso que todo esto es un terrible mal entendido.

 

―Ningún mal entendido. Sé lo que vi, además esa mujer era una de las tantas con las que Tiffany  salía, ¿qué quieres que piense?

 

―Bueno, yo solo digo que deberías darle el beneficio de la duda. Se nota que la mujer está desesperada por venir hasta aquí para hablar contigo.

 

―Espero que no se le ocurra.

 

Jessica  negó con la cabeza, no entendía por qué a taeyeon  le costaba tanto dar su brazo a torcer.

 

Por qué seguía sufriendo suponiendo algo que, tal vez, no fuera cierto y todo sería tan fácil de terminar solo preguntando a las personas involucradas.

 

Pero no, taeyeon   era tan testaruda que pensaba que, la única verdad, era la de ella.

 

Si bien a jessica no le simpatizaba mucho Tiffany, pensaba que todo podría tratarse de un error, de que taeyeon  estaba juzgando demasiado duramente a la abogada y solo esperaba que ellas hablaran pronto para terminar con toda esa insoportable situación, al menos para ella que, si bien estaba encantada de ser la pareja de taeyeon esa noche, podía sentir a distancia que la americana quería matarla lentamente.

 

Taeyeon  siguió conversando con cuánta gente se acercaba a ella a saludarla, con todos menos con Tiffany.

 

Bebió champagne junto a jessica  y de pronto la música se dejó escuchar en aquel salón.

 

El ritmo de la bossa nova inundó el ambiente y las parejas comenzaron a caminar hacia la pista.

 

Jessica  estiró su mano invitando a taeyeon  a bailar y la más baja  aceptó encantada y se sorprendió de lo buena bailarina que era su compañera.

 

Tiffany  estaba enfurecida viendo cómo taeyeon sonreía al bailar con jessica.

 

Recordó que, hace un año atrás, era ella quien ocupaba ese lugar.

 

Era ella quien estrechaba a taeyeon entre sus brazos y la guiaba por la pista, provocando la admiración de todos.

 

 

Taeyeon levantó la mirada y se encontró con los oscuros ojos de Tiffany  que la miraban fijamente, como si fuera un halcón esperando el momento preciso de atacar a su presa.

 

Taeyeon  se estremeció por completo y perdió el paso lo que provocó que jessica  le diera un pisotón.

 

―Lo siento, taeyeon, ¿estás bien?

 

―Sí, estoy bien. Ha sido mi culpa… Necesito ir al baño―dijo queriendo salir de la pista y escapar de la atenta mirada de Tiffany.

 

Taeyeon  se alejó de jessica y comenzó a caminar en dirección del baño de damas.

 

Tiffany vio que la coreana salía de la pista y la siguió con la mirada, luego volvió la vista hasta jessica y ésta se la mantuvo como desafiándola a que la siguiera, pensó.

 

Pero lo que Tiffany  no sabía era que, jessica le estaba dando ventaja para que llegara primero donde taeyeon.

 

Tiffany  se movió y salió del salón para dirigirse a los baños, jessica  miró su reloj, le daría unos minutos antes de interferir. Había prometido a taeyeon  que la ayudaría para que la abogada no se acercara a ella, pero quería que todo ese lio se acabara esa noche.

 

Le daría un tiempo antes de buscar a taeyeon, solo esperaba que, la abogada aprovechara bien el tiempo concedido.

 

 

 

Taeyeon estaba encerrada en el baño del hotel.

 

Se miraba al espejo y trataba de respirar hondo, pero le resultaba difícil hacerlo ya que, un nudo le oprimía el pecho.

 

Sonrió con desgano a las mujeres que entraban y salían del servicio, mientras que ella no sabía si salir o no.

 

Haber visto a Tiffany removió en ella anhelos y deseos que luchaban en su interior, ella amaba a esa mujer, pero a la vez la desconfianza y los celos ocupaban un lugar importante dentro de ella.

 

Se preguntó si ya debía hablar con Tiffany, pero la imagen de Wendy  y de ella medio desnuda la volvían a traicionar y la rabia se a apoderaba de ella otra vez.

 

Se miró una última vez al espejo y tomando una honda respiración, salió del baño para volver a la fiesta.

 

Cuando llegó al pasillo vio que Tiffany  estaba ahí, de seguro esperándola, pensó. Apuró el paso para pasar por su lado con la cabeza en alto, sin desviar la mirada del camino, pero no tuvo suerte, ya que la americana  la tomó por un brazo y comenzó a tirar de ella por el pasillo para sacarla al vestíbulo del hotel.

 

― ¿Qué crees que haces? Suéltame, Tiffany.

 

―No. Te vas a quedar aquí. Necesito hablar contigo, necesito que me escuches.

 

―Pero es que tú no entiendes que no quiero escuchar nada de lo que tengas que decirme, suéltame.

 

―tae, quiero hablar contigo calmadamente, no me hagas esto, solo escúchame.

 

Tiffany  bufó de rabia, si la rubia no entraba en razón tendría que gritar en el vestíbulo del elegante hotel, para hacerse escuchar por ella.

 

―Solo quiero decirte que todo es un error, que Wendy  y yo no tuvimos nada, que yo no podría engañarte…

 

―Cállate, no te sigas riendo de mí y suéltame―gritó tratando de zafarse del agarrare de Tiffany.

 

― ¡No! ¡Tae escúchame por favor!―dijo zamarreándola para hacerla entrar en razón.

 

―Suéltala, Tiffany―jessica que, estaba observando todo oculta en algún lugar, intervino cuando vio que todo podría salirse de control.

 

―No te metas en esto, Jung.

 

―Le estás haciendo daño, suéltala.

 

Jessica  llegó hasta la pareja y empujó a Tiffany  quien se desestabilizó, pero que, al volver a su postura, le propinó un fuerte puñetazo a la ojiverde que osaba inmiscuirse en su conversación.

 

Jessica  cayó al suelo producto del golpe y taeyeon  fue con toda rapidez a ayudar a su amiga.

 

― ¿Qué hiciste? ¿Por qué golpeas a jessica?

 

―tae… por favor…

 

―No, no voy a hablar contigo, vete, vete de aquí.

 

Tiffany  miró cómo le sangraba la nariz a jessica  y vio la preocupación en la cara de taeyeon.

 

Deseó sacarla a rastras desde ese hotel como un cavernario, pero ya habían dado un gran espectáculo. Y con la rabia y el dolor hirviendo en sus venas le dijo a taeyeon  antes de marcharse:

 

―Solo quería hablar contigo. Quiero que sepas que no te he mentido, que todo se puede comprobar y aclarar de inmediato si solo tú quisieras, pero veo que no quieres, no te interesa arreglar nada. No seguiré insistiendo contigo, no te molestaré más. Lamento haber arruinado tu noche. Adiós, taeyeon.

 

La coreana la miró fijo y Tiffany  le mantuvo la mirada por un instante, para luego alejarse a toda prisa de la presencia de taeyeon.

 

Taeyeon la vio salir del hotel a la calle y en su corazón sintió que tal vez esa fuera la última vez que la vería, ese pensamiento hizo que su cuerpo se estremeciera de pies a cabeza.

 

 

Jessica  se aprisionaba la nariz ya que el golpe recibido por parte de Tiffany  le había provocado una hemorragia.

 

Taeyeon, con rapidez, sacó el pañuelo desde la cartera de Jesica  y se lo pasó para que ésta tratara de detener la sangre.

 

―Nunca había visto a una persona tan cabeza dura como tú, ¿sabes?―dijo jessica  sentándose en un sofá de la entrada del vestíbulo y tirando su cabeza hacia atrás tratando de así de cortar la hemorragia.

 

―Qué dices… yo no soy…

 

―taeyeon, ¿te das cuenta que puedes haber perdido para siempre al amor de tu vida por tu testarudez?

 

―jessica…

 

―Sí, taeyeon. Esa mujer te ama, aunque no te lo haya dicho. Te pidió solo que la escucharas, que la dejaras explicarte el mal entendido y le dijiste que no, es obvio que se diera por vencida ante tu negativa.

 

Taeyeon tragó en seco pensando en todo lo que le decía jessica.

 

¿Sería verdad que Tiffany  se había marchado y que ya no la vería más, todo por culpa de su negativa?

 

El corazón le latió acelerado pensando que jessica  tenía razón y que tal vez ya había perdido a la persona que amaba.

 

― ¿Por qué no vas y hablas con ella, y taeyeon? Te darás cuenta que todo tiene una explicación.

 

―No lo creo…

 

― ¡Por Dios! No puedo creer que quieras vivir sufriendo por amor. Taeyeon, ve y búscala antes de que sea demasiado tarde, ve y búscalo.

 

La más baja se quedó en silencio sentada frente a jessica  que le tomaba una de las manos mientras que con la otra seguía presionando su nariz.

 

―No hablemos más de Tiffany, ¿quieres por favor? Mira cómo te dejó ¿Te habrá roto la nariz? Tal vez deberíamos ir al hospital para que te revisen.

 

―Calma, estoy bien―dijo.

 

Taeyeon  alargó su mano hasta la cara de la americana  para acariciarle la mejilla a modo de agradecimiento mientras le sonreía con cariño.

 

Jessica se había convertido en una verdadera y fiel amiga.

 

― ¿jessica?―una voz femenina sorprendió a la pareja.

 

Taeyeon  giró su cara de golpe para encontrarse con una mujer que iba vestida de jeans y camiseta y que los miraba al borde del llanto.

 

― ¡SeoHyun!―dijo jessica levantándose con rapidez del sofá.

 

― ¿SeoHyun?―dijo taeyeon.

 

―seo, amor, estás aquí―jessica  se comenzó a acercar a SeoHyun, pero la mujer giró sobre sus talones y se echó a caminar hasta la salida―seo, ¿qué haces? ¿Dónde vas?

 

Jessica  caminó tras la morena y taeyeon tras la rubia más baja.

 

Seohyun caminaba a paso firme y rápido, se notaba que estaba enojada, de seguro mal interpretando la escena entre jessica y taeyeon.

 

Jessica  la llamaba, pero SeoHyun no se giró a contestar.

 

Seohyun llegó a su auto cuando jessica le dio alcance

 

-seo, ¿qué es lo que pasa? Háblame.

 

―Interrumpí tu velada romántica, lo siento será mejor que me vaya―dijo sonriendo irónica y tristemente.

 

― ¿Qué? No, nada de eso…

 

―Está bien jessica, es normal que estés con otra mujer. Es mi culpa, yo te dejé ir―dijo con la voz llorosa.

 

―Es que no es así. Taeyeon es mi amiga…

 

―Claro… como no.

 

―Es verdad, SeoHyun―dijo taeyeon que llegaba hasta la pareja―jessica es una buena amiga.

 

―Sí amor, no mal interpretes las cosas. Yo te amo, SeoHyun.

 

―SeoHyun, me consta lo mucho que te ama―taeyeon  pensó en lo que decía jessica.

 

Que SeoHyun había mal interpretado la escena que vio de ellas en el hotel.

 

Todo era un mal entendido, la boca la castigaba a ella que no creía en las casualidades, y pensó en que se podía mal interpretar las situaciones, y de inmediato Tiffany  vino a su mente.

 

― ¿Qué le pasó a tu nariz?―preguntó Seohyun, recién percatándose de que jessica  estaba herida.

 

―Estoy bien. Seo, necesito que hablemos.

 

―A eso vine. Yo también necesito hablar contigo, Jessi. No soporto estar lejos de ti, ya no aguanto más.

 

―Bien―dijo taeyeon sintiendo que sobraba en ese instante―, Las dejo. Ustedes tienen mucho de qué hablar. Seohyun, encantada de conocerte, jessica, gracias por esta noche.

 

―taeyeon―dijo Seohyun antes de que taeyeon comenzara a caminar para marcharse―, También estoy encantada de conocerte, siento que haya sido en estas circunstancias.

 

Taeyeon  sonrió y se despidió de la pareja deseando que pudieran arreglar sus diferencias.

 

Jessica  era una buena persona y se merecía lo mejor.

 

Caminó de vuelta al hotel entrando en el vestíbulo y luego al salón de la gala mirando de un lado a otro buscando a su hermana.

 

Agradecía al cielo que Yuri  no hubiera sido espectadora de todo el lío entre ella y Tiffany.

 

Vio que Yuri estaba bailando con su esposa, feliz, enamorada como una quinceañera.

 

Sintió un poco de envidia por aquella felicidad.

 

De pronto pensó en Tiffany  y en todo lo ocurrido con ella.

 

En su testarudez y en lo que le había dicho jessica sobre que podría a ver perdido a la persona y mujer de su vida.

 

Pensó en Seohyun y en el mal entendido en que se había visto envuelta y se dio cuenta que había cometido un gran y tonto error. Supuso lo peor de Tiffany, sin siquiera darle el beneficio de la duda.

 

Su corazón se aceleró en los latidos y una inmensa desesperación por verla se apoderó de ella.

 

Tenía que salir de esa fiesta y buscarla, dejarla que hablara, que explicara todo lo que quisiera explicar.

 

Caminó nuevamente hasta el vestíbulo para luego salir del hotel y tomar un taxi.

 

Solo esperaba que Tiffany  la recibiera.

 

Esperaba no haberla perdido para siempre.

 

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Tiffany  llegó a su departamento envuelto en una ira atroz.

 

Tiró al suelo la cartera. Llegó hasta el bar para servirse un vaso con licor que pudiera aplacarle la rabia que bullía desde su interior.

 

Recordó a taeyeon  junto a jessica, recordó la negativa de la coreana no queriendo escuchar su explicación y eso no mejoró su estado de ánimo.

 

Recordarla en los brazos de otra persona mientras bailaba no hizo más que aumentar sus sentimientos de furia y fue así como lanzó el vaso contra la pared para que éste se destruyera.

 

No podía seguir así, necesitaba alejarse de la rubia.

 

Necesitaba pensar con claridad todo sobre aquella relación y sus pasos a seguir.

 

A toda prisa fue a su habitación, tomó un bolso y puso algo de ropa en él. Sacó sus documentos desde un cajón, una chaqueta y salió de su hogar. No sabía muy bien dónde iría, pero conduciría su auto hasta el aeropuerto y una vez ahí, se subiría al primer avión donde pudiera embarcar y no importaba donde fuera que éste lo llevara.

 

Taeyeon  llegó hasta el edificio de Tiffany  y, apenas la vio el conserje, le dijo que la señorita Hwang se había ido de viaje.

 

No lo podía creer.

 

Ella le preguntó si sabía a qué parte había viajado, pero el conserje le dijo que no tenía idea ya que, la señorita Hwang, no había compartido es información con él.

 

Taeyeon  sintió que el alma se le caía a los pies y un escalofrío la recorrió por completo.

 

Tiffany  se había alejado y ella era la culpable de que eso sucediera.

 

Se preguntaba, ¿en qué parte estaría?

 

Trató de pensar, ¿cuál sería el primer lugar donde la morena viajaría?

 

Pero nada venía a su mente.

 

A la final, derrotada y con su corazón destrozado, volvió a su casa.

Los días pasaron y taeyeon no había tenido noticias de Tiffany.

 

Por su hermana se enteró que se había tomado unos días de vacaciones, pero dónde estaba, nadie sabía y eso la tenía apesadumbrada.

 

Taeyeon  ya se estaba preguntando si la volvería a ver otra vez, con toda sus alma deseaba que sí.

 

De la otra que apenas se había enterado era de jessica.

 

Solo supo de la americana  cuando la llamó y ésta le dijo que se encontraba muy bien, que estaba recuperando el tiempo perdido con seohyun y que pronto sabría de ellas.

 

De eso hacía más de una semana.

 

Pero no la podía culpar por desaparecer del mundo, estaba con la mujer que amaba, ya reconciliadas y eso la tenía a ella muy feliz.

 

Taeyeon  no era ni la sombra de la que había sido hace unos meses, estaba hasta más delgada, ya se lo habían hecho notar Bora y Yuri quien la regañaba todos los días por estar en ese estado.

 

Pero ella no la escuchaba, solo deseaba saber pronto algo sobre Tiffany.

 

El intercomunicador sonó dejando que la voz de Bora llenara el silencio en la oficina de taeyeon.

 

―Señorita taeyeon.

 

―Sí, Bora.

 

―La señorita jessica Jung en la línea uno.

 

Taeyeon  tomó la llamaba esperando que su amiga tuviera buenas noticias para que le alegrara el día.

 

―Hola, jessica ¿Cómo estás? ¿Todo bien con Seohyun?

 

―Sí, todo excelente. Taeyeon necesito de tu ayuda―pidió con entusiasmo.

 

―Claro, dime ¿Qué necesitas?

 

― ¿Crees que puedas ausentarte de tu trabajo unos días?

 

― ¿De cuántos días estamos hablando?―preguntó intrigada.

 

―No sé… unos cuatro o cinco…

 

―Bueno, creo que podría hacer algo, pero, ¿de qué va todo?

 

―taeyeon, solo te diré que, te necesito y que prepares tu maleta.

 

Taeyeon  se quedó sorprendida por lo misteriosa de la invitación de su amiga.

 

Pero jessica  prometió enviarle un correo con todos los detalles para que ella estuviera enterada de todo.

 

Y así lo hizo.

 

Estaba sorprendida y feliz por lo que leía.

 

No podía creer la locura de la que sería participe, pero estaba muy entusiasmada.

 

Después de hablar con su hermana sobre los días que se ausentaría del trabajo y dejando bien informada a Bora  sobre dónde y qué estaría haciendo, partió a su casa donde hizo su maleta feliz para el viaje que emprendería

 

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